Acto Día Del Maestro 11 de septiembre Alumnos encargados: Joaquín Zabala y Luciana Heredia alumnos: (Joaquín) 1) Sr. Directora, profesores, directivos y alumnos: Damo Damos s inic inicio io al acto acto del del día día del del maes maestr tro o en hono honorr a todo todos s los los docentes argentinos y especialmente a los de nuestra escuela que demuestran día a día el amor y entrega a este trabajo tan sacrificado, pero pero tamb tambié ién n tan tan grat gratif ific ican ante te cuan cuando do ven ven en las las mira mirada das s de sus sus alumnos tanto amor, alegría y ganas de aprender. El día del maestro es un día muy especial para todos los docentes, porq porqu ue en él reco record rdam amo os a Domi Domin ngo Faust austin ino o Sarmi armien entto, un argentino que se preocupó seriamente por la educación y de esta mane manera ra come comenz nzó ó el cami camino no que que hoy hoy esta estamo mos s reco recorri rrien endo do todo todos s nosotros. Mientras haya un docente, los niños y la escuela serán una promesa válida de un futuro mejor. En este día queremos renovar en cada uno de nosotros ese compromiso de enseñar y formar. 2) Bandera de Ceremonia: (Luciana)
La cont contem empl plam amos os en todo todos s los los acto actos s impo import rtan ante tes. s. Llev Lleva a en sus sus plie pliegu gues es refl reflej ejos os de bata batall llas as,, test testim imon onio ios s de valo valor, r, repr repres esen enta ta a nuestra Patria. Se presenta presenta la Bandera Bandera de Ceremon Ceremonias ias portada portada por el abande abanderado rado Leonardo Pirchio y sus escoltas Lourdes Pirchio y Nadia Ríos. Todos de pié. 3) Himno (Luciana) El quehacer de todo un pueblo está reflejado en tu letra que habla de la historia historia de de un pueblo pueblo joven joven que que ve en la educació educación n del soberan soberano o la grandeza de sí mismo. A continuación entonamos las estrofas del Himno Nacional argentino. 4) Himno a Sarmiento (Joaquín) Toda Toda la obra del gran maestro de los argentinos argentinos es reconocida reconocida hasta nuestros días por todos los argentinos que ven en la educación el arma poderosa en la lucha por la libertad de ideas, la solidaridad y los valores incuestionables de la democracia. Entonemos con profundo respeto las estrofas del Himno a Sarmiento. HIMNO A SARMIENTO
Fue la lucha tu vida y tu elemento; la fatiga, tu descanso y calma; la niñez, tu ilusión y tu contento, la que al darle el saber le diste el alma.
Con la luz de tu ingenio iluminaste la razón, en la noche de ignorancia. Por ver grande a la Patria tú luchaste con la espada, con la pluma y la palabra. En su pecho, la niñez, de amor un templo te ha levantado, y en él sigues viviendo. Y al latir su corazón va repitiendo: ¡Honor y gratitud al gran Sarmiento! ¡Honor y gratitud, y gratitud! ¡Gloria y loor! ¡Honra sin par para el grande entre los grandes Padre del aula, Sarmiento inmortal! ¡Gloria y loor! ¡Honra sin par! 5) Minuto de silencio (Joaquín) Tu desaparición dejó una huella imborrable en el corazón de todo argentino, por eso tu memoria merece un momento de reflexión sobre la grandeza de tu espíritu. Solicitamos un minuto de silencio. 6) A continuación y ya cerrando este acto de conmemoración a nuestro día escucharemos unas palabras alusiva a cargo de la profesora Silvana Bruno: (Luciana) Domingo Faustino Sarmiento nació en un humilde hogar de un pueblito escondido entre las montañas sanjuaninas en 1811, y desde ese lejano lugar y a pesar de su precaria situación económica llegó a ocupar la presidencia de la nación y sobre todo a luchar contra la más terrible enfermedad que puede tener un estado, una deficiente educación para sus habitantes, donde solo recibía educación un reducido grupo de la clase privilegiada. Hoy lo recordamos a aquel hombre, el gran maestro argentino, que justamente, sin descanso dedicó toda su vida a la extraordinaria obra de hacer progresar material y espiritualmente a su querido país, nuestro país, el que heredamos del esfuerzo y dedicación de grandes hombres como Domingo Faustino Sarmiento. Fue minero, comerciante, periodista, pedagogo, ensayista, gobernador de provincia, hasta presidente de la Nación. Sarmiento: polémico, contradictorio, apasionado, sonó con construir un Estado capaz de timonear el país hacia el futuro. Pero lo más importante para él fue ser maestro. Vio en la educación la clave de cualquier esperanza, y sembró la Patria de escuelas. Sin duda, Sarmiento es una de las figuras controvertidas de nuestra historia, pero hay que decir que su propuesta educativa generó el acceso masivo a la escolaridad para los niños en edad de asistir a las aulas. Entendía a la educación como el gran igualador de las condiciones del ser humano. Por eso hoy, recordamos como todos los años, a este hombre polifacético, a este pedagogo cuya máxima preocupación se
centró en crear y desarrollar instituciones capaces de generar y de mantener la educación. ¿Por qué es tan importante lo que nos dejó? Garantizó a todos los habitantes de la Argentina la educación, y con eso nos garantizó a todos la libertad de pensamiento, de elegir, de decidir. Saber leer y escribir nos permite informarnos, expresarnos y comunicarnos. Los docentes de hoy, toman su mensaje haciéndolo crecer y multiplicándolo a lo ancho y a lo largo de este bendito país. Quien piensa en el futuro sino ellos. Quien apuesta a un mañana mejor, reflejado en la mirada y en la sonrisa de sus alumnos. Enseñan y enseñamos porque es nuestra elección y porque los hijos de esta Patria, hoy más que nunca nos necesitan. Tan importante fue la herencia que nos dejó que, gracias a su iniciativa, nos garantizó a todos el poder tener una educación de libertad de pensamiento y nos permita elegir y decidir, expresarnos, informarnos y comunicarnos. ¡Cuántas cosas importantes! Por suerte su vocación de ser maestro no termina con la muerte de Domingo Faustino Sarmiento, sino que sigue creciendo en todos los maestros argentinos que como él, aman la educación y dedican muchas horas de su vida a sus alumnos. Para ellos un ¡Muy Feliz Día del Maestro! 7) Con esto damos por finalizado éste acto, nos ponemos de pié, se retira la bandera de ceremonia (Luciana)