UNIVERSIDAD DE EL SALVADOR FACULTAD MULTIDISCIPLINARIA DE OCCIDENTE ESCUELA DE POSGRADO MAESTRÍA EN CULTURA CENTROAMERICANA OPCIÓN LITERATURA
TEMA: MIGRACION Y CULTURA EN CENTROAMERICA DURNATE EL 2018
ASIGNATURA ESTUDIOS CULTURALES I ESTUDIANTES CRUZ PERAZA ERICA IRINIA GUERRA EVELIN PATRICIA MENDOZA ZAVALETA EDUARDO JAVIER OSORIO MARTINEZ MERLENE SERMEÑO DE VELASQUEZ JENNIFFER
DOCENTE: ÁNGELA JEANNETTE AURORA ANAYA PH.D SANTA ANA, 10 DE DICIEMBRE DE 2018
Introducción En el presente trabajo se trata de abordar el fenómeno de la migración que se tanto en El Salvador como en el resto de Centroamérica desde una óptica de los estudios culturales. En ese sentido, se trata de plasmar al situación actual de la migración en la región ya se desde el análisis empíricos hasta las estadísticas actuales de algunos organismo que registran dicho fenómeno.
Lo importante de dicho estudio radica en las implicaciones que tienen en la cultura de nuestro país; además de los cambios a nivel psíquico de las personas que migran como las que se quedan. Por lo tanto, buscar las implicaciones se vuelve una necesidad para comprender su desarrollo en la sociedad.
Para ello, el presente trabajo cuenta con los objetivos que se buscan así como también una parte que del estado de arte.
Objetivos de la Investigación
Objetivo general: Establecer la relación existente entre cultura y migración centroamericana durante el año 2018 Objetivos específicos: 1. Identificar los aspectos culturales que inciden en olas de personas para migrar conllevan a la migración en Centroamérica. 2. Identificar las consecuencias económicas
Justificación La migración es un fenómeno social que ha existido en Centroamérica desde la construcción de sus Estados-naciones; ya que desde entonces olas de personas han buscado otras naciones en las cuales establecerse buscando mejorar en cuanto a su economía o condición social. Sin embargo, el año 2018 ha sido de suma importancia en cuanto a dicho tema debido a los acontecimientos ocurridos entre los meses de octubre a noviembre conocidos como “las caravanas migrantes” de Honduras y El Salvador.
Dicho fenómeno ha puesto a Centroamérica bajo la lupa, ya que durante estos meses estas caravanas han atravesado el territorio desde sus países natales con la idea de llegar hasta los Estados Unidos con la idea de buscar mejores condiciones económicas para ellos y sus familias, puesto que manifiestan que en sus países ya no se puede habitar debido a los índices de pobreza, a la delincuencia y a las injusticias sociales por lo que crean una idea que en Estados Unidos una alternativa para solventar sus necesidades básicas, sean estas de tipo económico,
Estado del Arte o de la Cuestión. Reflexiones sobre la caravana migrante La población centroamericana ha sido desde siempre migrante. Sin embargo, en este año se ha hecho más visible este fenómeno debido a las llamadas caravanas que han salido desde Honduras y El Salvador directo a Estados Unidos. No obstante este es un hecho que según Martínez Hernández (2018) se ha venido registrando desde hace diez años. Es por ello que ella explica que este flujo migratorio no es un fenómeno nuevo y tiene dos vertientes: “Existen
diversos tipos de movilizaciones que involucran participación de los propios migrantes o familiares de migrantes, las que han recibido mayor atención son los vía crucis y las caravanas” (p. 232). A su vez es posible tipificarlos debido a las
características que comparten: por su tamaño en la composición, nivel de organización, visibilidad, objetivos, alcance territorial, quiénes la convocan, entre otras. De tal manera que es posible identificar ciertos aspectos que las unifica. Pero llama la atención la modalidad llamada “vía crucis” debido a su relación con
la tradición católica de semana santa. Esta tradición representa el camino que Cristo siguió hacia su crucifixión. Para Martínez Hernández (2018) los vía crucis migrante se realizan para hacer un símil de las dificultades del camino de Cristo con el de los migrantes “probablemente, el que mayor atención ha generado fue el
que se realizó en 2014 en Tenosique, ya que quienes participaban decidieron continuar el trayecto hacia la frontera norte” (p. 233). Es así como es posible
identificar que la religión, siendo un elemento de la cultura y las tradiciones de una nación, ha sido relacionada con el fenómeno de la migración, debido a la similitud de penuria entre la población migrante y el evento religioso recreado en semana santa. En cuanto al tema de migración, la UNESCO hace un informe en el año 2016 en el cual evidencia las principales razones por las cuales la población se ve en la necesidad de migrar en el presente siglo. Entre dichas razones propone: los índices de violencia, la falta de empleo y la necesidad de superación económica de la mayoría de países subdesarrollados. Para ello, propone que existe un convenio pactado entre 193 Estados que buscan generar acciones positivas que comprometan a la comunidad en general a proveer urgentemente de una vida digna a todos sus refugiados. En ella los Estados se comprometen a tener una responsabilidad compartida para gestionar grandes movimientos de refugiados y migrantes de forma humana, sensible, compasiva y centrada en la gente. Asimismo, el informe hace mención sobre la importancia de la intervención temprana de las instituciones nacionales e internacionales en el tema de migración
y proponen un enfoque holístico para responder a problemas y necesidades de manera articulada tanto el país de destino como el país de origen. Ahora bien, es necesario analizar desde las ciencias sociales cuáles pueden ser las estrategias adecuadas para garantizar la protección de los derechos de los migrantes y si realmente esos derechos está siendo cumplidos o siguen siendo vulnerados de igual manera o peor que en el país de origen de estas grandes masas movilizadas. Deportaciones y Afectaciones Psicosociales La psicología en el análisis del sujeto migrante se plantea la necesidad de sustituir
el análisis clínico por un análisis psicológico, en el cual se tomen en consideraciones los factores sociales que están implicados en cada uno de los procesos psicológicos que se ven implicados cuando un sujeto decide abandonar el país, su tierra y su familia. Migrar en situaciones extremas revela cómo el hecho de migrar se ha vuelto una
carga o nivel de estrés muy pesado en la actualidad. Dada el profundo sufrimiento interno de la persona que se ve obligada a abandonar su sitio, su lugar de origen y de pertenencia.
Se considera que migrar, en esta época, es completamente
distinto a migrar hace unas décadas por factores como los secuestros, las enfermedades, los trastornos, discriminaciones entre otros llevan a que las implicaciones a nivel de la seguridad personal se vea vulnerada, además de las consecuencias a nivel psicológico como son: estrés, ansiedad, duelos de larga duración y resolución. Naturalizar las reacciones psicológicas de los migrantes plantea un concepto
novedoso llamado “Duelo migratorio” que es el que sucede al momento de
emprender el viaje. Sin duda, cuando el sujeto se ve en la obligación de abandonar su tierra se produce el desarraigo y por tanto, una separación de aquello a lo que más ama. Sin embargo, en Reacciones psicológicas de migrantes deportado demuestra como el sujeto que presenta el duelo migratorio se convierte
en un sujeto doliente que sufre y a su vez, en un sujeto esperanzado en llegar a su
lugar de origen. Dispuesto a soportar trabajo extremo y diferentes vejaciones a lo largo del trayecto pero que todo el deportado considera que el peor momento o el más duro ha sido el acto mismo de la deportación. El camino por andar en la atención psicosocial de los deportados, habla
sobre el acompañamiento que algunas instituciones dan a quienes han retornado al país debido a una deportación. En ese sentido, la psicología como tal debe dar una respuesta científica a las afectaciones que la población sufre, además las formas de abordaje de dichos problemas requieren de saber integrador de las otras disciplinas que aportan para dicha solución. Las demarcaciones sobre los efectos psicológicos dejados por la migración y, en definitiva, la deportación, son elementos importantes para comprender el fenómeno social y las secuelas acaecidas por el mismo. El autor realiza un análisis muy provechoso para comprender la problemática y nos muestra a un ser humano no inmune ante la nueva realidad que se enfrenta; sino que nos presenta las huellas dejadas por la necesidad de migrar y el sentimiento humano pisoteado por la situación. La transformación del individuo social y psicológicamente nos enseña a un sujeto dinámico y adaptable, aunque en algunos casos sucumba ante la realidad y lo destruya emocionalmente. No obstante, se cuestiona la falta de compromiso por parte de los autores ante la observación que realizan; puesto que nos muestra a un ser humano afectado por la migración pero no ayudado por el colectivo, en especial por el Estado; y no solo en el sistema migratorio, sino también en la asistencia y productividad social de los países centroamericanos que, por medio de sus gobiernos, crean cero o casi nulas políticas de atención al migrante y no crean las condiciones necesarias para que sus ciudadanos no migren. El compromiso social es carente y se queda el estudio del capítulo IV en la mera observación del sujeto como un elemento de un fenómeno social aislado, olvidado y abandonado; dejando de lado la crítica política por la decadencia de la gobernabilidad, asimismo las posibles vías de solución, a excepción del primer artículo de este capítulo que da una serie de recomendaciones para “rehabilitar” al migrante afectado.
Reporte de flujo migratorio en Centroamérica y el caribe (enero-marzo 2018) El dos mil dieciocho no fue la excepción en el flujo de las migraciones en Centroamérica, en el año en curso entre los meses de enero a marzo se dio un incremento en las deportaciones ya que Guatemala y Honduras son los países que reflejan las tasas más altas, mientras que El Salvador presenta una disminución de retornos, sin embargo, México expone que Costa Rica, Guatemala y Honduras registran un aumento en las migraciones según el gobierno mexicano, observando una disminución de Salvadoreños y Nicaragüenses. Sin embargo, México muestra un crecimiento de migrantes en menores de edad con nacionalidad hondureña y guatemalteca, en la que El Salvador presenta también una disminución migratoria infantil. En marzo del 2018 según estudios de acuerdos con BBC Mundo, en Honduras da inicio a una caravana de migrantes con formada por unas 2000 personas esta caravana se denominaba caravana de refugiados 2018, Cruzó la frontera entre Guatemala
y
México.
A
finales
de
abril
entre
300
y
400
personas
aproximadamente llegaron a Tijuana la frontera de México con E.E.U.U. Centroamérica será siempre un istmo donde el flujo migratorio se ha convertido en un punto de atención para otras naciones ya que las personas que migran lo hacen por diferentes circunstancias, pero en particular en busca de mejores condiciones de vida para su grupo familiar.