EL TRABAJO DOCENTE EN EL MEDIO RURAL Ruth Mercado
Organizar la escuela Rural EL GRUPO MULTIGRADO Todos los niños mayores de seis años tienen derecho a asistir a la escuela y terminar su primaria. Para respetar este derecho en el medio rural, es necesario organizar escuelas multigrado que ofrezcan la primaria completa. En las comunidades más pequeñas del país, sobre todo las que tienen menos de 30 niños, existen cursos comunitarios y escuelas unitarias que ofrecen la primaria completa. Cuando se inscriben más niños en una localidad, generalmente se asignan a dos o más maestros. Hay diferentes formas de distribuir los grados en las escuelas bidocentes o tridocentes. Cada quien atiende a uno o dos de los primeros grados junto con el grado superior, en otros casos se juntan los primeros tres grados con un maestro y los últimos tres con otro. Algunas maestras y maestro encuentran ventajas en continuar con el mismo ciclo por varios años. Durante el primer año, se establece la forma de trabajar; en los siguientes los alumnos que pasan de segundo grado del ciclo ayudan a quienes inician con el ciclo a adaptarse a tal forma de trabajo. No es fácil organizar a todos los alumnos y asegurar que cada grado se aproveche bien el tiempo. Por eso algunos maestros separan al grupo en dos turnos, sobre todo cuando tienen muchos alumnos. El doble turno también tiene desventajas para el maestro, pues le queda poco tiempo para preparar sus clases y realizar otras actividades, Los niños pequeños se van enterando poco a apoco de los que aprenden lo mayores, y al siguiente año ya tienen nociones de lo que van a estudiar. Los niños que saben más afirman sus conocimientos al ayudar a sus compañeros de los primeros grados. Los maestros con experiencia en escuelas multigrado valoran la relación que se da entre sus alumnos de diferentes grados. PROGRAMAS Y LIBROS DE TEXTO En nuestro país las escuelas de medio rural siguen el mismo programa que las del medio urbano. A través de esos contenidos, los niños pueden acceder a conocimientos que no están a su alcance en el medio que habitan. Sin embrago para enseñar también es importante
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considerar el contexto en el que viven los niños y los contenidos que han adquirido fuera de la escuela, pues esto permitirá enriquecer el programa. Cada año escolar, los maestros solicitan libros de texto publicados y repartidos gratuitamente por la SEP. Por lo general los maestros se organizan con los padres de familia y las autoridades municipales para traerlos a la escuela. Cuando estos no llegan a tiempo, es necesario usar los de años anteriores; para ello se borran o se copian hojas resueltas. Muchos maestros de escuelas multigrado reorganizan los contenidos de los programas y libros. Para enseñar estos temas, se organiza una actividad y se da una explicación sencilla dirigirá a todo el grupo. Los niños que saben algo más agregan lo que pueden. Luego los alumnos efectúan otras actividades o lecturas sobre el mismo tema, adecuadas para cada grado. Los niños mayores pueden profundizar en los contenidos que apenas empiezan a conocer los menores. EL AULA Y LOS MATRIALES DE TRABAJO Cada escuela tiene condiciones distintas. Lo más importante es lograr que los niños estén protegidos del sol, el frio y la lluvia. Además, para facilitar la actividad escolar, el aula debe tener buena ventilación y suficiente luz. Aunque no se cuenten con todas las comodidades la limpieza y el orden convierten cualquier local en un lugar agradable para todos los niños y el maestro. Cada maestro busca la forma de ubicar a los grupos que tiene a su cargo. Si es posible a cada grado debe tener sus propios muebles y pizarrón; pero conviene que todos estén en un mismo salón, para que el maestro pueda atenderlos. También es importante especialmente en las escuelas multigrado, que los alumnos puedan reunirse por parejas o pequeños equipos para realizar actividades conjuntamente, sin depender directamente del maestro. Finalmente una parte del trabajo podrá hacerse fuera del aula. De hecho toda la comunidad se puede considerar la escuela. En las escuelas rurales es particularmente importante a provechar el medio natural y la proximidad de los procesos de producción, con objeto de enriquecer la enseñanza. EL APROVECHAMIENTO DEL TIEMPO En las escuelas rurales se toman en cuenta las necesidades de los habitantes de la comunidad. A veces los alumnos se ausentan para participar en las actividades locales o, durante las temporadas de siembra y cosecha para colaborar en el campo. Algunos maestros establecen acuerdos con los habitantes para reponer posteriormente las clases que se suspenden. Otros aprovechan estos días para organizar actividades en que los niños puedan utilizar sus conocimientos escolares.
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Para mejorar la calidad de la educación, es importante dedicar una parte del tiempo al estudio colectivo y al intercambio de experiencias de maestros.
Conocer a los alumnos LAS NIÑAS Y LOS NIÑOS DEL MEDIO RURAL Muchas experiencias significativas de los maestros se deben a la relación cercana con los niños de las comunidades rurales. En la convivencia con los niños, los maestros conocen como son, cuáles son sus inquietudes, necesidades y ritmos de aprendizaje. Generalmente los niños como las niñas les gusta el trabajo escolar y no es difícil entusiasmarlos si se conocen sus inquietudes. Se interesan en todos lo que desconocen y preguntar sobre lo que les llama la atención. Pero también pierden rápidamente el interés si no le encuentran sentido a lo que estudian en la escuela. La experiencia en el trabajo familiar les permite adquirir habilidades y conocimientos valiosos que les ayudan a estudiar en la escuela. Al aprender cada trabajo, muestran curiosidad y observan a sus mayores; escuchan y siguen instrucciones; imitan los trabajos al jugar, practican las actividades hasta dominarlas e inventan distintas formas de hacer las cosas. Las niñas tienen la misma capacidad y necesidad de aprender que los niños, aunque a veces no se les da la misma oportunidad. En algunas localidades puede haber niños con necesidades especiales que no tienen acceso a servicios especializados. Por lo general es posible admitir a estos niños. Los niños y niñas de cada comunidad tienen sus propias características culturales. Sus creencias y conocimientos, juegos y obligaciones, formas de relacionarse con los adultos, pueden ser diferentes en cada lugar. Cuando los maestros respetan las formas de pensar de cada localidad, logran ganarse la confianza de los niños y ellos aprenden más en la escuela. Muchos niños del medio rural pertenecen a estos grupos que conservan las lenguas y costumbre indígenas. EL PROCESO DE APRENDER Mientras mejor comprenda el maestro la forma en que aprenden los niños más fácil le será ayudarlos a avanzar en sus estudios Los niños tienen una curiosidad natural que los impulsa a aprender. Observan lo que ocurre en su medio; reflexiona sobre lo que ellos mismos hacen, ven y escuchan; descubren y comprenden cosas nuevas cada día. Continuamente se hacen preguntas; buscan sus propias respuestas o bien averiguan con los demás lo que necesitan saber,. El dialogo con sus familiares, amigos y maestros les ayuda a prender.
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En algunas comunidades rurales es poco frecuente el uso de la escritura, a diferencia de la ciudad donde hay muchos letreros, anuncios, periódicos y libros. En estos lugares, muchos niños y niñas nunca han escuchado leer en voz alta ni han observado cómo y cuándo se tiene que escribir. Por eso es tan importante que en la escuela tengan la oportunidad de encontrarles sentido y utilidad a la lectura y escritura desde el momento que empiezan a aprender. Cuando llegan a la escuela, los niños ya tienen algunas ideas acerca de cálculo. En su vida diaria se enfrentan a situaciones en las que se resuelven problemas prácticos como comparar cantidades o repartir algo en partes iguales. Para lograrlo, razonan en ocasiones de maneras distintas a las que les enseña la escuela y aun así llegan a conclusiones correctas. El conocimiento del mundo natural y social también empieza fuera de la escuela. Los niños se preguntan porque llueve o por que se enferma; experimentan con el fuego y con el agua; aprenden a orientarse y a cuidarse; identifican los oficios de diferentes personas; escuchan los relatos de sus familiares acerca de la vida de otros tiempos y se imaginan como era. Sin embrago aunque los niños conozcan su medio, no siempre habrán tenido oportunidad de expresar sus ideas o dudas, en la escuela, pueden llegar a comprender mejor su propio medio si las actividades escolares les ayudan a analizar colectiva y ordenadamente lo que han observado, escuchado y experimentado fuera de ahí. Las actividades de las ciencias sociales y naturales también pueden ayudar a los niños a descubrir e imaginar lo que no conoce. Para encontrar respuestas a sus preguntas, necesitan tener la oportunidad de experimentar, investigar y comprender diferentes cosas; cuando procuran expresar y ampliar lo que piensan argumentan sus ideas y escenificar o escribir con sus propias palabras lo que imaginan, comprenden mejor lo que estudian en la escuela. Los niños irán comprendiendo poco apoco los temas más difíciles si tienen oportunidad de estudiarlos cada año. Aprenden mejor estos tópicos si se les permite expresar como los imagina a partir de lo que leen observan y hacen. El aprendizaje de los niños será más firme y significativo si tienen oportunidad de realizar or si mismos muchas actividades variadas y divertidas. Los niños aprenden mejor los contenidos de la primaria cuando están entusiasmados y animados con las actividades y los juegos que les organizan los maestros.
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