SI ME AMAS, NO ME AMES Psicoterapia con enfoque sistémico por
Mony Elkaim
A la memoria de mi padre
INDICE
SI ME AMAS, NO ME AMES ! Mony Elkaim...........................................................................1 Agradecimientos.....................................................................5 Presentación..........................................................................6 2.a a!torre"erencia...............................................................# $.%n n!e&o modelo.................................................................# '.(esonancias y ensam)la*es................................................1+ I
12
as do)les coerciones rec-rocas...........................................12 era-ia sist/mica, a0ar y cam)io...........................................$$ 1.El a0ar...............................................................................'2 2.El "eed )ack e&ol!ti&o........................................................'2 (e"erencias )i)liogr"icas.....................................................6$ A!torre"erencia y -sicotera-ia "amiliar. el ma-a al ma-a.... .6$ 1.O)*eti&idad y -arado*a a!tonre"erencial.............................6$ 2.el est!dio de la &isión coloreada al cierre del sistema ner&ioso...........................................................................63 $.M!ndo e4terior y estr!ct!ra del sistema ner&ioso...............+ '.Alg!nas de"iniciones..........................................................$ 5.om!nicación y leng!a*e....................................................
.Parado*as y a!tonoma.......................................................3 3.7Act8ese siem-re de manera de m!lti-licar el n8mero de las elecciones -osi)les9.........................................................#
"
#
%$#.Etica y o)*eti&idad.............................................................31 1+.A!torre"erencia y tera-ia "amiliar.....................................3' (e"erencias )i)liogr"icas.....................................................3 Sim!lación de !na -rimera sesión de tera-ia "amiliar. (eglas intrnsecas y sing!laridades..............................................#+ era-e!tas y -are*as. os s!-er&isiones..............................11+ .3 11 el sistema tera-/!tico al aco-lamiento..............................1$' 7Pensar con los -ies9: la inter&ención en -sicotera-ia "amiliar ......................................................................................1'6 %na ;istoria de <;a..............................................................165
A&radecimientos 'uiero ante todo a&radecer a (ean)*uc +irione, que dio ori&en a este liro y que, cap-tulo tras cap-tulo, me ofreci. &enerosamente su ayuda y sus conse/os Mi reconocimiento se diri&e tamién a los que me ayudaron a preparar el manuscrito de esta ora0 Danielle 1ucker, Marie 2au3ille, 2rancesca 4o5a, C6ristian Cler y sore todo Marie C6ristine *inard 'uiero del mismo modo e7presar mi &ratitud a aquellos cuyos traa/os influenciaron este escrito, y particularmente 4oert Castel, 2éli7 +uattari, Immanuel *e3inas, 8umerto Maturana, 8ya Pri&o&ine, 2rancisco 9arela y 8ein: 3on 2oerster
Al&unos de entre ellos, como 2éli7 +uattari, 2rancisco 9are) la y 8ein: 3on 2oerster, tu3ieron a ien leer partes del manuscrito y ayudarme con sus su&erencias *es estoy particularmente reconocido, as- como a&rade:co a ;3onne
ndome el deseo y la posiilidad de crear m- propio camino0 Claude
Presentaci.n *as terapias familiares aparecieron en los a5os !%@, en los Estados Bnidos Adquirieron r>pidamente una e7pansi.n consi) derale y lue&o se implantaron en Europa Su é7ito parece m>s li&ado a la rique:a pr>ctica de las inter3enciones efectuadas que a la importancia de los conceptos te.ricos que in3ocan No ostante, al re6usarse a 3er al indi3iduo a la 3e: como la fuente y el lu&ar de su mal, al interro&arse sore los conte7tos donde sur&e el s-ntoma, cuestionando la relaci.n de causa a efecto tanto como el sometimiento del indi3iduo a su 6istoria, el campo de las terapias familiares rei3indica, con respecto al enfoque lineal tradicional en salud mental, un corpus epistemol.&ico que no es desde5ale, Pero parece que 6uiera sido necesario esperar estos ltimos a5os para que se multiplicaran las interro&antes sore el marco te.rico en el cual se inspira el enfoque sistémico de la terapia fa)
miliar Me dediqué, en esta ora, a 6acer resaltar dos prolemas te.ricos importantes con los cuales tropie:an los practicantes de este campo
1. Estailidad y cam)io *a teor-a en la cual se asan las terapias familiares slstémi) cas se interesa m>s en la estailidad que en el camio? estas terapias se apoyan sore la teor-a &eneral de los sistemas de *ud=i& 3on
los pslcolerapeutas familiares que se inspiraron en este en) lo nc uscaan re&las 3>lidas para todas las familias? no ten-an rn cumia, al menos en teor-a, sino el aqu- y a6ora, o, a lo sumo, un srclor limitado del pasado? se comportaan, frente a las familias, corno se lo 6ar-a en una partida de a/edre:0 no e7ist-a nin&una necesidad de conocer la 6istoria de la partida para comprender una situaci.n en un momento dado SI la practica de la terapia familiar se inscri-a en un proceso dr camio y se diri&-a a seres nicos y sin&ulares, su teor-a, en camio, se aplicaa esencialmente a la estailidad y daa cuenta sore todo de leyes &enerales 3>lidas para todos los sistemas aiertos Esta teor-a &eneral de los sistemas rindi. &randes ser3icios al mo3imiento de las terapias familiares Pensar, por e/emplo, que , un s-ntoma pod-a tener por funci.n mantener un sistema 6umano en un cierto estado de equilirio, Fse re3el. e7traordinariamente fecundo en el plano cl-nico Pero los practicantes de este campo se sent-an cada 3e: m>s inc.modos en el interior de este corsé que sus pr>cticas desordaan por todas partes Mis in3esti&aciones se concentraron en parte sore este punto en particular A partir de los traa/os de Ilya Pri&o&ine y de su equipo sore los sistemas aiertos le/os del equilirio, es decir en camio, surayé la importancia, en el dominio de las terapias fa) miliares de las re&las Intr-nsecas, de los elementos sin&ulares espec-ficos, del a:ar y de la 6istoria *a 6istoria, tal como la concio, no es siempre ni lineal ni causal *a 3ida de una persona no est>, para m- sometida a una repetici.n mec>nica que tiene por ori&en un traumatismo pasa) doG*os elementos 6ist.ricos son necesarios pero no suficientes para e7plicar la aparici.n de prolemas en lo cotidiano0 a mi modo de 3er, la funci.n de esos elementos en el sistema terapéutico del que formamos parte decidir> sore el mantenimiento de los s-ntomas, su amplificaci.n, su atenuaci.n o su desaparici.n? A&re&aré a esto que me parece que el destino de un sistema puede ser totalmente modificado si a un elemento aparentemente anodino se le de/a una posiilidad de amplificaci.n Hales son las 6erramientas te.ricas que intenté ofrecer a los terapeutas sistémicos preocupados por respetar las sin&ularidades de sus pacientes y deseosos de mantener aierto el de3enir de las familias que recien
2. *a autorreferencia El se&undo prolema con el cual se enfrentan los terapeutas sistémlcos es el de la autorreferencia *o que descrie el psicote) rapeuta sur&e en una intersecci.n entre su entorno y él mismo0 no puede separar sus propiedades personales de la situaci.n que descrie A6ora ien, el enfoque cient-fico tradicional insiste sore el 6ec6o de que las propiedades del oser3ador no deen entrar en la descripci.n de sus oser3aciones Durante a5os, el mo3imiento de las terapias familiares se es) for:. en e3itar esta parado/a autorreferencial prote&iéndose detr>s de la teor-a de los tipos l.&icos de 6ite6ead y 4ussell? esta teor-a, en efecto, puede interpretarse como al&o que impide las proposiciones autorreferenciales pues con3ierte a la parado/a en un simple sofisma En esta ora, 3oy a proponer un cierto nmero de 6erramientas que permitir>n a los terapeutas sistémlcos traa/ar a partir del ncleo mismo de la autorreferencia En mi enfoque, lo que siente el terapeuta remite no solamente a su 6istoria personal, sino tamién al sistema en que este sentimiento emer&e0 el sentido y la funci.n de esta e7periencia 3i3ida se 3uel3en 6erramientas de an>lisis y de inter3enci.n al ser3icio mismo del sistema terapéutico
$. Bn nue3o modelo +racias a los adelantos te.ricos que me permitieron las in) 3esti&aciones que acao de descriir, quisiera proponer un nue3o modelo para las terapias conyu&ales y familiares Este mode lo, como se 3er>, Inte&ra de una manera diferente el tiempo, per) manece aierto a las sin&ularidades de los sistemas en /ue&o, y ayuda al terapeuta a 3er en sus sentimientos elementos capitales para el an>lisis y el de3enir del sistema terapéutico *o descriiré, especialmente, en el marco de las terapias de pare/a, a las cuales este liro concede un amplio espacio Cuando se aplica a este tipo de terapia, mi modelo se5ala ciclos constituidos por doles coerciones rec-procas0 una persona pide a otra al&una cosa que ella an6ela pero no lo&ra creer posile El titulo de esta ora —Si me amas, no me ames= -ro&iene de !no de estos ciclos: a>!, el miem)ro de !na -are*a -ide: 7Amame9, -ero como teme >!e el amor sea siem-re seg!ido de a)andono, tiene al mismo tiem-o miedo de ser amado? a
#
ni&el &er)al, -ide, ser amado, y, sin tener conciencia, -ide a ni&el no &er)al, no serlo, -or ms >!e la res-!esta de cada miem)ro de la -are*a, c!al>!iera >!e sea, no -odr ser sino ins!"iciente, -!esto >!e no res-onder ms >!e a !n solo ni&el de la do)le coerción. Para que tal comportamiento se manten&a y amplifique, ser> necesario, sin emar&o que ten&a una funci.n no solamente con respecto al pasado de uno de los prota&onistas, sino tamién con respecto al Sistema de la pare/a en su con/unto *os elementos pasados no entra5an autom>ticamente la repetici.n o la amplifi) caci.n de un comportamiento? esta repetici.n o esta amplificaci.n no aparecen sino cuando, m>s all> de su funci.n en una econom-a personal, estos elementos 6ist.ricos fortalecen las construcciones del mundo del compa5ero y desempe5an un papel en un conte7to sistémico m>s amplio En las pare/as, este mo3imiento se opera en amos sentidos, y las doles coerciones son rec-procas El modelo que propon&o para las terapias de pare/a se e7tiende, en un se&undo tiempo, a la construcci.n del sistema terapéutico Ofrece 6erramientas de inter3enci.n que inte&ran el aspecto autorreferencial propio de toda terapia y permiten responder, al mismo tiempo, a los dos ni3eles de la dole coerci.n
'. 4esonancias y ensamla/es A partir de la refle7i.n que 6ice sore los prolemas de la emer&encia del oser3ador y del camio, presento adem>s dos nue3os conceptos susceptiles de ensanc6ar las fronteras de la terapia familiar? la resonancia y el ensamla/e *a resonancia se manifiesta en una situaci.n donde la misma re&la se aplica, a la 3e:, a la familia del paciente, a la familia de ori&en del terapeuta, a la instituci.n en que el paciente es reciido al &rupo de super3isi.n, etc El concepto de resonancia no es sino un caso particular de lo que denomino ensamla/e0 las resonancias est>n constituidas por elementos seme/antes, comunes a diferentes sistemas en in) tersecci.n, mientras que los ensamla/es est>n compuestos de elementos diferentes, que pueden estar li&ados a datos indi3iduales familiares, sociales u otros Para m-, la amplificaci.n de estos ensamla/es formados tanto de re&las intrisecas como de sin&ularidades del sistema tera) péutlco es lo que pro3oca el camio o el loqueo de un sistema 8ace ya tres a5os que (ean)*uc +ir-one me in3it. a escriir esta 1+
ora para la editorial du Seuil de Par-s Durante estos tres a5os &racias, en &ran parte a la redacci.n de este liro, mi pensamiento 6a e3olucionado Poco a poco comencé a entre3er en qué la autorreferencia puede re3elarse como un triunfo para el terapeuta, m>s que como un handicap. Mis tra)a*os so)re las tera-ias cony!gales y "amiliares se enri>!ecieron desde entonces con !na n!e&a dimensión, >!e ;oy me -a@ rece "!ndamental. Este liro es la 6istoria de esta e3oluci.n personal In3ito al lector a una especie de 3ia/e0 'uiero que pueda 3er c.mo pasé de una 3isi.n del mundo, donde el terapeuta es JasoridoK por una familia, a otra, donde lo que sore3i3e se desarrolla en la inter) secci.n de las construcciones de lo real de los di3ersos participantes del sistema terapéutico El lector 3er> i&ualmente c.mo pasé del an>lisis de una situaci.n en términos de interrelaciones entre Jmapas del mundoK a un an>lisis en términos de interrelaciones entre Jconstrucciones del mundoK Le3oluci.n que me condu/o a aandonar las nociones de mapa y de territorio y a considerar imposile su diferenciaci.nL por lo menos en psicoterapia Espero que esta elecci.n de de/ar que la co6erencia de esta ora emer/a pro&resi3amente permitir> al lector, a tra3és de nuestra trayectoria comn, ele&ir sus propias pistas y qui:> tomar su propio camino Mony Elkalm (ulio de !%
11
I *as doles coerciones rec-procas = Para quién son estas flores = Pero para tiQ = Desde cu>ndo me traes flores 'ué quieres 6acerte per) donar = 9amos, querida, tu3e &anas de 6acerloQ = No me con3encer>s con tus palaras dul:onas 'ué es) conde esto = Pero, no puedo ni siquiera 6acerte re&alos, a6oraQ = Si fueras sincero, en lu&ar de ordenar media docena de ro sas en el primer florista que te sale al paso, 6uieras recordado que lo que prefiero son las lilas A menos que simplemente le 6ayas dic6o a tu secretaria que fuera a uscar al&unas flores para tu mu/er = No fue a uscarlas mi secretaria *as ele&- yo mismo = Por qué no compraste lilas = Me ol3idé de que te &ustaan = ;a lo 3esQ ; pretendes causarme placerQ No quiero tus flores El marido arro/a entonces el ramo en un rinc.n de la sala y sale &olpeando la puerta, mientras /ura en 3o: alta A lo que su esposa replica &ritando0 J;a 3es que ten-a ra:.n, cu>ndo de/ar>s de torturarmeK *a primera idea que se nos ocurre es que por ra:ones li&adas tanto a su pasado como a su presente, esta mu/er no puede aceptar que su esposo le 6a&a re&alos, mientras que este ltimo no ser-a sino la 3-ctima impotente de una situaci.n que lo e7cede Pero este no es sino un primer ni3el de lectura? se puede pre) 12
&untar tamién, después de refle7ionar, si este 6omre 11+ parti) cipa en la creaci.n del acontecimiento del cual se siente 3ictima El comportamiento de los dos miemros de esta pare/a, en qué puede oedecer a una co6erencia particular que 3a m>s all> de las simples l.&icas indi3iduales Antes de proponer, ilustr>ndolo con un e/emplo, un modelo de dole coerci.n rec-proca que podr-a aplicarse a las pare/as, quisierp recordar lo que es la dole coerci.n (double bind): J ! El indi3iduo est> implicado en una relaci.n intensa, en la cual es, para él, de una importancia 3ital determinar con precisi.n el tipo de mensa/e que le es comunicado, a fin de responder a él de una manera apropiada R Est> preso en una situaci.n donde el otro emite dos tipos de mensa/es de los cuales uno contradice al otro RT Es incapa: de comentar los mensa/es que le son transmi) tidos a fin de reconocer de qué tipo es aquel al que dee responder0 dic6o de otro modo, no puede enunciar una proposici.n me) tacomunicati3aR U!F (ay 8aley descrii. ien lo que es una dole coerci.n rec-proca0 JSuponed, escrie, que una madre le pide a su 6i/o0 J9en a sentarte en mis rodillasK Suponed i&ualmente que 6aya 6ec6o este pedido en un tono que de/e entender que prefiere que su 6i/o se manten&a apartado El ni5o quedar-a enfrentado al mensa/e0 JAcércate a m-QR, incon&ruentemente asociado al mandato0 JAlé/ate de m-R No podr> responder de una manera apropiada a pedidos tan contradictorios0 si se acercase a su madre, esta se sentir-a molesta, en la medida en que el tono de su 3o: 6uiera indicado que de-a mantenerse a distancia0 y la madre estar-a i&ualmente inc.moda si su 6i/o se quedara en un rinc.n, puesto que, en un sentido, lo 6ar-a in3itado al mismo tiempo a acerc>rsele El nico modo en que el ni5o podr-a satisfacer a estas demandas contradictorias ser-a dar una respuesta incon&ruente0 deer-a acercarse a su madre calificando al mismo tiempo su comportamiento con un comentario que ne&ara que se acerc. a ella Podr-a, por e/emplo, ir a sentarse sore sus rodillas diciendo al mismo tiempo0 JO6, que 6ermoso ot.n tienes en el 3estidoQR? as-, estar-a sentado en sus rodillas pero calificar-a este comportamiento con un comentario que precisara que no se acerc. sino para oser3ar el ot.n del 3estido *a capacidad, propia de la especie 6umana, de comunicar dos ni3eles de mensa/e a la 3e:, permite al ni5o apro7imarse a su madre mientras nie&a simult>) neamente este mo3imiento afirmando al mismo tiempo que s.lo se apro7im. al ot.nR UV 1$
M>s all> de la descripci.n de situaciones de doles coerciones ele&idas en diferentes conte7tos que podr-a presentar, trataré de mostrar en las p>&inas si&uientes en qué este tipo de comunicaci.n no es for:osamente Incon&ruente, sino que corresponde a una co6erencia interna del sistema en el cual sur&e0 3eremos que solamente a este precio puede mantenerse una estailidad, a pesar de la presencia de re&las aparentemente contradictorias *as inter3enciones del terapeuta frente a al&unas de estas situaciones ser>n descritas en los cap-tulos 9 y 9IIF Estos modelos de doles coerciones, as- como los que descriiré a lo lar&o de esta ora, no son, para m-, sino racionali:aciones Estas racionali:aciones me permitieron ser m>s lire, y en consecuencia m>s creati3o, frente a pare/as y a familias que traté en psicoterapia, pero no son m>s que trampolines0 si pueden seros tiles, tanto me/or, si no, construid 3osotros mismos las 3uestras Anna y s? como si se creyera oli&ada a desempe5ar a la 3e: el rol de la prisionera y el de la carcelera Esta mu/er estaa, pues, pre
1'
sa en una dole coerci.n0 deseaa que su marido, por su com) portamiento, cesara de empu/arla a rec6a:arlo, y, al mismo tiempo, no pudiera aceptar que se acercara a ella En otro momento de la psicoterapia, ndole una serie de precedentes que le permit-an no creer en la autenticidad de su &esto s tierna, pero no pod-a aceptar la pro7imidad que esta ternura implicaa C.mo comprender lo que pasaa entre !e lo >!e adelant/ corres-onde a !na realidad c!al>!iera: mis teori0aciones no son sino o-eratorias... y este seBalamiento &ale nat!ralmente -ara el modelo de do)les coerciones rec-rocas >!e me -areció caracteri0ar el caso de Anna y Cenedetto. Precisado esto, &eremos a;ora >!/ as-ectos de s! &ida -!dieron ay!darme a constr!ir ;i-ótesis so)re la nat!rale0a de la do)le demanda >!e cada !no emita. Ana 6a-a recordado los 3-nculos e7tremadamente estrec6os que tenia con su padre, que la consideraa su 6i/a predilecta 8a-a llorado lar&amente 6alando de una noc6e, poco antes de Na3idad, en que lo 6a-a esperado en 3ano0 ten-a entonces cuatro a5os, su padre 6a-a sido arrestado por la polic-a y su madre se lo 6a-a ocultado Anna 6a-a declarado, en este sentido0 JSent- un aandono terrile Hen&o la con3icci.n de que pasar> siempre as-,
que no 6ay duraci.n en la amistad ni en el amorR ; s m>sR s adelante, un psiquiatra le 6a-a dic6o que sufr-a de un Jcomple/o de persecuci.nK, pero toda su 3ida le con) firmaa que ten-a ra:.n en desconfiar de la &ente ; la frase citada un poco m>s arria LKHen&o miedo a la defecci.n Hen&o miedo de ape&armeRL le 6a-a 3enido a los laios /ustamente cuando 6alaa del des&arramiento que 6a-a sentido cada 3e: que lo separaron de sus alle&ados Propon&o llamar programa oficial a la demanda e4-lcita de cada miem)ro de esta -are*a? Anna >!era >!e s! marido est!&iese ms -ró4imo a ella. Cenedetto an;ela)a >!e s! m!*er lo reconociera. A;ora )ien, -ara cada !no de ellos, el -rograma o"icial se oponía a D8na creencia >!e ellos ;a)an ela)orado en el -asa@ do:en el caso de Anna, s! con&icción de >!e el a)andono era ine&ita)le? en el de Cenedetto, s! certid!m)re de ser rec;a0ado, ;iciera lo >!e ;iciese. Dlamo a esta creencia el mapa del mundo. on estos ma-as constr!idos a -artir de e4-eriencias anteriores los miem)ros de !na -are*a -erci)en s! -resente* Poco im-orta >!e el territorio en >!e se e&ol!ciona no Sea el mismo >!e a>!el en el c!al el ma-a "!e diseBado.DEl sistema al c!al se -ertenece -!ede, en ciertas circ!nstancias, con"ig!rarse -ara e&itar >!e s!i*a !na dis-aridad m!y grande entre el ma-a y el territorio* F, seg8n >!e los ma-as de s!s miem)ros se ;ayan "ormado e im)ricado m!t!amente de tal o c!al manera, !n sistema dado ser ms o menos esta)le Dme re"iero a>! a los tra)a*os de Al"red Gor0y)ski H$1 >!e insista so)re el ;ec;o de >!e el ma-a no es el territorio y s!)raya)a >!e !n ma-a ideal no -!ede e4istir sin remitir constantemente a /l mismo.
As-, cada uno de estos c.nyu&es estaa des&arrado por la contradicci.n entre sus dos ni3eles de espera ifig. 1). Anna -eda a Cenedetto: 7J!iero >!e est/s cerca de m9? si Cenedetto res-onda a esta demanda, o)edeca al -rograma o"icial de Anna, -ero no a s! ma-a del m!ndo, y ella no -oda sino re;!sar esta -ro4imidad? si, -or el contrario, Cenedetto trata)a de ale*arse de s! es-osa, o)edeca al ma-a del m!ndo de Anna, -ero no a s! -rograma o"icial, y ella no -oda sino s!"rirlo y re>!erirle >!e le mani"estara ms atenciones. Por s! -arte, Cenedetto -eda a Anna: 7J!iero ser reconocidoK? si Anna de*a)a de e4cl!ir a Cenedetto, o)edeca al -rograma o"icial de este 8ltimo, -ero no a s! ma-a del m!ndo, y /l no -oda sino re;!sar esta relación? si ella recrea)a coaliciones dirigidas contra /l, o)edeca al ma-a del m!ndo de s! es-oso, -ero no a s! -rograma o"icial, y /l no -oda sino s!"rirlo y re>!erirle >!e lo reconociera. El conflicto de esta pare/a de-a, pues, ser comprendido como un medio de poner a distancia una contradicci.n interna que 3i3e como impuesta del e7terior, 3e: a 3e:, uno u otro término de la dole coerci.n Hal lectura 6uiese sido se&uramente demasiado reductora 'ué m>s se 3e-a pasar Cuando se coali&aa con su 6i/o y sus ami&os contra su marido, Anna fortalec-a a ndolo aun m>s firmemente en su con3icci.n de que no pod-a sino Jser rec6a:adoK Cuando s all> del simple cuadro de dos personas que no lo&ran desprenderse de una dole coerci.n rec-proca Anna y ndose mutuamente de ser el ori&en del mo3imiento que los 6ac-a &irar L6a-a aparecido otra cosa0 un sistema que ellos 6a-an contriuido a crear y que, re&ido por sus propias leyes, los manten-a su/etos a re&las r-&idas y ciclos aparentemente insosteniles M>s all> de las moti3aciones personales en/ue&o, la funci.n del comportamiento de cada uno de-a uscarse en el conte7to del sistema de la pare/a *os tormentos que parec-an infli&irse mutuamente pod-an descriirse como un medio de fortalecer al otro en sus creencias y de ayudarlo a e3itar enfrentarse con la ruptura que 6uiese implicado el camio
Hales sistemas se presentar>n ampliados al terapeuta dcsdr que éste aparece Se encontrar> acti3ado por re&las aparentemente nue3as que 6ar> contriuido a crear pero que &eneralmente tendr>n sore todo el efecto de mantener el sistema terapéutico en el estado del menor camio Bn d-a, por e/emplo, Anna y ndolo as- en la con3icci.n de que él no puede ser sino rec6a:ado A la in3ersa, al ne&arse a reciir a la paciente sola se correr-a el ries&o de darle a entender que el terapeuta la aandona y, as- co mo su c.nyu&e, 6ace lo necesario para 6acerse rec6a:ar Mediante este proceso, estos pacientes Lcomo yo lo sar-a m>s tarde ndole las re&las de su pare/a Se puede deducir de este e/emplo que la din>mica de una pare/a no puede comprenderse sino en términos de diada No lo pienso, en tanto que las racionali:aciones que elaoré con respecto a esta pare/a fueron conceidas en el conte7to del sistema terapéutico, que pon-a en presencia no dos, sin tres personas Por otra parte, éramos realmente tres Por ra:ones de comodidad no insist- sore la Importancia de las familias de ori&en de estos dos pacientes A6ora ien, asta estudiar el comportamiento de una pare/a en el conte7to de las familias de ori&en para 3erificar que los elementos que suscitan y mantienen el conflicto tienen por funci.n, entre otras, mantener las re&las de un sistema que Incluye i&ualmente a estas familias0 la pare/a no es m>s que la parte 3isile de un sistema m>s amplio ; a&re&ar-a que este conte7to se e7tiende a los elementos socioculturales y pol-ticos, como lo mostrar> el caso si&uiente 9iene a 3erme una (o3en pare/a El 6omre es un e7 militante de la e7trema i:quierda Se que/a de que su compa5era no 6ace nunca aquello que tiene &anas, sino m>s ien aquello que supone que él espera de ella? él lle&a a declarar, ante m-0 J'uiero que seas lireK Esta pare/a se propone de/ar el pa-s al&unos d-as m>s tarde, y deen tomar una decisi.n0 partir>n /untos En el transcurso de la
entre3ista, el (o3en pre&unta a la/o3en s- piensa partir con él Ella duda Después de un momento de silencio durante el cual se a&ita cada 3e: m>s, él e7clama0 ;a 3eo, est> todo decididoQ *e pido entonces que de/e a la (o3en formular su respuesta Nue3o silencio, nue3a a&itaci.n, lue&o nue3a inter3enci.n de su parte0 J'uieres que sal&a un instante 'uieres que sal&aR *a muc6ac6a se toma entonces la cae:a entre las manos y dice0 JNo podemos detenemos un instante Estoy en plena confusi.nR Bna lectura en un primer ni3el pondr-a en e3idencia el mandato parad./ico0 !WV J'uiero que seas lireR, los mensa/es contradictorios a ni3el 3eral y no 3eral, y la dole coerci.n0 JSé l-re, pero no soportaré que tomes una decisi.n contraria a la m-aR Estam.s 3erdaderamente se&uros de que este mandato pa) rad./ico no dee ser comprendido sino en el conte7to de la pare/a o de las familias amplificadas No es posile encararlo a la lu: del proceso que caracteri:a a la sociedad que rodea e impre&na a esta pare/a En teor-a, cada uno es l-re de tomar sus deci siones como lo entiende En la pr>ctica, la elecci.n est> limitada y las estructuras que coercionan y restrin&en la liertad de los miemros de nuestras sociedades son, sea dene&adas, sea, &eneralmente, disimuladas a/o un arni: de falsa ene3olencia No tenemos solamente aquuna pare/a que reproduce un proceso perteneciente a una sociedad que, por otra parte, se precia de comatir? esta pare/a est> qui:>s i&ualmente perse&uida, sin saerlo por las re&las de un sistema sociocultural y pol-tico que se ima&ina comatir, pero cuya estailidad no 6ace sino mantener En este caso espec-fico, no es, por otra parte, imposile, que sea /ustamente la luc6a comn contra el sistema pol-tico lo que 6aya permitido a estas dos personas sal3ar su pare/a, a despec6o de todas sus dificultades Otro e/emplo mostrar> me el sistema terapéutico puede 3ol) 3erse tamién un lu&ar de elecci.n para la aparici.n de doles coerciones rec-procas? se trata de una familia de cuatro personas compuesta por un padre, ur madre y dos 6i/as El padre sufr-a una enfermedad cr.nica y la madre, enfermera de oficio, estaa su/eta, desde un accidente sore3enido quince a5os antes se 6a-a ca-do sore las rodillasF, a infecciones re) petidas que 6a-an requerido toda una serie de inter3enciones quirr&icas Esta familia 6a-a sido en3iada a un terapeuta en ra:.n ciclas dificultades escolares de una de las 6i/as, pero los prolemas de salud ocupaan el primer plano de la escena0 la madre re3el., por
otra parte, en el curso de una entre3ista, 6aer reencontrado a su c.nyu&e en el conte7to de cuidados médicos Hodos los miemros de esta familia insist-an sore la impor) tancia de la ayuda0 sin ayuda, para la madre, no 6a-a m>s que soledad0 para el padre, nin&una comunicaci.n posile? para las 6i/as, nin&una relaci.n social Sin emar&o, cada 3e: que el terapeuta intentaa ayudar a una u otra de estas cuatro personas, la familia se rea&rupaa para descalificar esta ayuda Después de 6aerlos interro&ado sore este tema, la terapeuta oy. al padre declarar que s.lo al&uien muy limitado pod-a pedir ayuda0 la madre afirm. por su lado que era necesario estar reducido al ltimo e7tremo para resol3erse a ello, y las 6i/as aundaron en el mismo sentido A pedido de la terapeuta Lera una de mis alumnasL yo 6a-a se&uido esta entre3ista sore una pantalla de tele3isi.n li&ada a una c>mara de circuito cerrado No 6a-a de/ado de ad3ertir que la madre y las dos 6i/as 6a-an entrado apoyadas sore muletas? una de las 6i/as ten-a una rodilla inflamada, la otra presentaa un es&uince transformado en tendinitis Apro3ec6é, pues, la interrupci.n de la sesi.n para elaorar con la terapeuta la 6ip.tesis si&uiente0 6e aqu- una familia, pensé, que parece considerar la ayuda como una re&la importante, pero donde, paralelamente, no deer-a pensarse en pedirla Cada miemro de este sistema estaa, pues, confronta !o a dos normas0 ayudar, era participar en lo que un-a a esta familia, pero nadie pod-a aceptar la asistencia que el otro le propon-a sin romper ur a se&unda re&la comn En esta perspecti3a, los s-ntomas f-sicos de cada miemro de esta familia pod-an ser interpretados como una tentati3a cX G escapar a esta contradicci.n0 un prolema f-sico u or&>nico in3itaa al otro a acudir en socorro del enfermo sin que este ltimo 6uiese pedido nada *a familia se transformaa as- en un lu&ar donde cada uno se ofrec-a al otro, en tanto que nadie a ayudar *a cuadratura del c-rculo se 6ac-a posile0 JaydameR y Jno te pido nadaK pod-an marc6ar a la par Cuando tal sistema encuentra un terapeuta, el pedido e7presado ante éste es el mismo que se diri&en los miemros de la familia, cuando est>n entre ellos? pedido que podr-a formularse as-0 Jsi estamos aqu- es, por cierto, porque necesitamos ayuda
pero no podemos pedir ser ayudadosR Por poco que el terapeuta, por ra:ones concernientes a la 3e: a su 6istoria personal y a las re&las del sistema terapéutico, participe en lo que se 3uel3e una dole coerci.n entre la familia y el terapeuta, la inter3enci.n te) rapéutica se toma e7tremadamente dif-cil Si intenta ofrecer su ayuda, 6ace como si la familia pudiese aceptar pedirle ayuda, lo que no es el caso? y si confiesa su impotencia, o si la psicoterapia no pro&resa, la familia puede recordarle que espera un resultado Por otra parte, si, por a:ar, esas re&las relati3as a la ayuda refirman al terapeuta en al&unos de sus mapas del mundo aun si ellos no son idénticos a los de la familiaF corre el ries&o entonces de crearse una dole coerci.n rec-proca al ni3el del sistema terapéutico *os dos susistemas JfamiliaR y JterapeutaR se confi&urar>n mutuamente de modo de no lo&rar ayudarse, 6aciendo al mismo tiempo como si se tratase de una relaci.n de ayuda *a familia descrita antes es un caso particular, ya que el tema de la ayuda contriu-a e7pl-citamente a constituir al&unas de las re&las del sistema Se podr-a, sin emar&o, adelantar que, de una manera muc6o m>s amplia, el pedido de ayuda est> fre) cuentemente cominado con otro pedido impl-cito que limita fuertemente la capacidad de inter3enci.n del terapeuta Se trate de una instituci.n, de una familia, de una pare/a o de un indi3iduo lo que se espera es que el s-ntoma desapare:ca sin que las re&las suyacentes a su aparici.n sean por eso camiadas El terapeuta o quien sea que inter3en&a se enfrentan as- a dos demandas aparentemente contradictorias ; esto puede, por otra parte, e7plicar el é7ito de ciertos terapeutas sistémlcos que insisten sore el Jno camioK0 emiten al ni3el del contenido @V el mensa/e Jno camienR, mensa/e que la relaci.n me&a puesto que la familia los consulta /ustamente para que el s-ntoma camie E3itan con eso no responder sino a uno solo de los dos pedidos0 la relaci.n psicoterapéutica responde a un ni3el? el contenido aparente a otro Puede tamién suceder que una imricaci.n de los mapas del mundo de los prota&onistas de un sistema terapéutico permita a un estado de estailidad transitorio y precario0 2aienne era una (o3en estudiante que empe:aa su formaci.n en terapia familiar Cada 3e: que comen:aa a 6alar de una (o3en de la que se ocupaa a pedido de un ser3icio de consulta, el super3isor no sa-as m>s de quién 6alaa, si se trataa de su
pafciente o de ella misma C6antal 6a-a de/ado el dornl) cilio familiar para unirse con su ami&o en pro3incia y, desde entonces L seis meses, m>s o menosL tenian lu&ar cada semana entre 2alenne y C6antal con3ersaciones telef.nicas, en d-a y 6ora fi/os 2alenne inform. en estos términos una con3ersaci.n telef.nica reciente con C6antal0 Me di/o, declar. a su super3isor, Jque ya no pod-a Ima&inarme m>s que como una 3o: sin cuerpo de la que ten-a necesidad, que esperaa todos los lunes, que la 6ac-a refle7ionar, y que era un poco como su conciencia, sal3o que no le daa las respuestas que ella misma se 6uiera dadoK ; a&re&.0 JEsta declaraci.n, a la 3e: 6ala&adora y conmo3edora, me inquiet. muc6o Hu3e de repente muc6o miedo de 6aer creado una relaci.n de completa dependencia que me parec-a muy ne&ati3a para la paciente Me sent-a Incapa: de ayudarla a salir de ellaK El super3isor qued. muy sorprendido por la intensidad de esta relaci.n Len die: meses no 6uo m>s que dos citas fallidasQ Descuri. que la madre de C6antal se 6a-a 3uelto a casar seis a5os después del nacimiento de su 6i/a0 la paciente s.lo 6a-a conocido a su padre a la edad de diecioc6o a5os, y lo 6a-a descrito como un alco6.lico a quien no quer-a 3ol3er a 3er Por otra parte, 6a-an sur&ido prolemas &ra3es en el seno de la familia especialmente entre C6antal y su padrastro Ella se 6a-a sentido totalmente rec6a:ada por su madre, y en este conte7to se 6a-a diri&ido al ser3icio de consulta, deseando ser ayudada por al&uien con quien pudiera contar, por m>s que estu3iese con3encida de no poder fiarse de nadie *os padres de 2alenne tamién se 6a-an separado después de su se7to ani3ersario Su padre, estalecido en el e7tran/ero, 6a-a soportado mal el di3orcio, y no 6a-a aceptado reciir a sus 6i/as sino acompa5adas por su madre A la edad de dieciséis a5os, tamién 2alenne, pues, 6a-a decidido no 3er m>s a su padre porque sus relaciones se 6a-an 3uelto muy dif-ciles? y él no 6a-a retomado contacto con ella sino cuatro a5os m>s tarde, cuando ella 3i3-a con un ami&o Para esta terapeuta no3el, la autonom-a no pod-a sino ser do) lorosa, y resultaa indudalemente de una dependencia que ter) min. en un rec6a:o 2alenne deseaa que C6antal accediera a una autonom-a no dolorosa, pero ella no lo&raa creer en eso0 i&ual que C6antal cre-a que no se pod-a contar con nadie, pues nadie es astante JconfialeK para merecer la confian:a de otro F C6antal an6elaa que 2alenne fuese JconfialeK pero no lo
2$
2'
25
cre-a, con3encida como estaa de que no pod-a contar sino con ella misma Si 2alenne respond-a a la demanda e7pl-cita de C6antal, contradec-a la demanda e7presada en otro ni3el A partir de estas informaciones, el super3isor pudo construir el ciclo descrito en la Jlg. 2 DLes necesario -recisar de n!e&o >!e no se trata sino de !na -!ra constr!cción o-eratoria. +racias a estas comunicaciones telef.nicas, la terapeuta no era m>s que una 3o: sin cuerpo, que C6antal no diferenciaa de smisma Ella era 2aienne, y no lo era C6antal e3itaa as- en) frentarse con el temor de contar con una persona que pudiera re) 3elarse como Jno confialeR, puesto que, después de todo, esta persona y ella misma no eran m>s que una 2aienne deseaa ayudar a C6antal a acceder a una autonom-a no dolorosa, pero no cre-a en ella, pues consideraa que la dependencia conduce ineluctalemente al rec6a:o Si C6antal e3olucionaa en el sentido e7pl-citamente deseado por la terapeuta, contradec-a el otro ni3el de e7pectati3a de esta ltima *o que permit-a a C6antal responder a estos dos ni3eles a la 3e:, era el teléfono El ale/amiento &eo&r>fico daa a la terapeuta la fala: impresi.n de una cierta autonom-a, y le permit-a i&ualmente conser3ar la ilusi.n de que no e7ist-a dependencia real que pudiera desemocar en un rec6a:o y una autonom-a dolorosa Este equilirio pend-a de un 6ilo, en todos los sentidos del término 2aienne corr-a el ries&o de quedar espantada por esta relaci.n que descri-a a su super3isor como Jsimi.ticaR C6antal afrontaa el peli&ro de de/ar a 2aienne ocupar un lu&ar que podr-a conducirla a poner en cuestionamiento su con3icci.n de no poder contar sino consi&o misma Hoda interrupci.n de su relaci.n refor:ar-a a C6antal en su creencia de que no se puede confiar en nadie, y conducir-a a 2aienne a redescurir que la dependencia no puede lle3ar m>s que al rec6a:o y a una autonom-a impuesta y dolorosa El ciclo mantenido y sostenido por las dos doles coerciones no e7istir-a m>s, pero 2aienne y C6antal se 6ar-an ayudado mutuamente a no modificar sus construcciones de lo real 'uisiera presentar an al lector una situaci.n que me fue re) latada por mi ami&o (acques Pluymaekers, UYV que se ocupa 6a) itualmente de prolemas institucionales Pluymaekers super3isaa a una educadora que traa/aa en una instituci.n para ni5os internados0 esta estudiante deseaa comprender me/or ciertas dificultades que encontraa con una
26
interna In3itado a una comida, se Intri&. muc6o por el mane/o que oser3. entre la educadora y el ni5o *a primera Intentaa 6acer comer a la se&unda y Id ni5a se esfor:aa en re6usar Apa) reci. entonces una sorprendente conni3encia entre las dos pro) ta&onistas0 la ni5a, en efecto, se ne&aa a alimentarse cuando la educadora se lo ped-a, pero, 6acia el fin de la comida, 6a-a casi 3aciado su plato? com-a esencialmente cuando la educadora no le prestaa atenci.n C.mo comprender esta especie de colusi.n impl-cita *a educadora 6ac-a como si esta ni5a que com-a no comiera y la ni5a 6ac-a como si no comiera, cuando en realidad com-a Se pod-a elaorar la 6ip.tesis si&uiente0 si una instituci.n lo&ra ocuparse de los ni5os que le son confiados me/or que sus padres, se constituye en ri3al y crea culpa a las familias? si, a la In3ersa, una instituci.n no lo&ra ocuparse con3enientemente de los ni5os, da la ra:.n a los padres pero se e7pone a ser criticada, puesto que no cumple con una de sus funciones m>s importantes *a educadora como la ni5a estaan co&idas en esta dole de) manda de los padres0 JHened é7itoR, pero Jno lo ten&>isR *a Ins) tituci.n deseaa naturalmente tener é7ito0 pero c.mo lle&ar a eso sin arries&arse a descalificar a los padres Dado que la soluci.n Institucional deer-a LidealmenteL ser considerada como una simple soluci.n de complemento Si los padres no lo&raan ayudar a sus 6i/os a su retomo de la Instituci.n, la l.&ica de las internaciones repetidas puede 3ol3erse ineluctale *a instituci.n entonces 6ar> fracasado en otra de sus tareas m>s fundamentales0 a saer, permitir la reinserci.n de los ni5os en sus familias Al lle3ar a cao estos comportamientos, la educadora y la ni5a respond-an a estos dos ni3eles a la 3e:0 la aparente ne&ati3a a comer de esta interna y las que/as de su educadora atesti&uaan el fracaso de la instituci.n Pero la ni5a de todos modos se alimentaa, a pesar de la presencia de la educadora0 el 6onor de la instituci.n quedaa, pues, a sal3o Este e/emplo ilustra una situaci.n de dole coerci.n reciproca0 la instituci.n pide a los padres tener é7ito a fin de alcan:ar uno de sus o/eti3os, pero si las familias tienen é7ito en su tarea, la instituci.n no puede sino tener la culpa o desaparecer *os padres, por su parte, piden a la instituci.n que ten&a é7ito a fin de que sus ni5os marc6en me/or? pero si ésta tiene é7ito en su tarea, ellos se e7ponen al ries&o de 3i3irse como descalificados por una Instituci.n con3ertida en ri3al y triunfante
2
Asediados por este JnudoR U$V de re&las contradictorias, la educadora y la ni5a crean un comportamiento nue3o, 3erdadero e/ercicio de topolo&-a que les permit-a estar en un lu&ar al mismo tiempo que no estar [fig. $. No es cierto que las situaciones de dole coerci.n se den s.lo en un nmero reducido de sistemas 6umanos Da3id Cooper 6ace notar en su ora titulada si!uia"ría y an"ipsi!uia"ría H31 >!e la condición del es>!i0o"r/nico Dgeneralmente ligada al ;ec;o de ser colocado en !na serie de do)les coerciones es el des @ tino de todos nosotros desde >!e c;ocamos con !na sociedad >!e no -!ede reconocer la a!tonoma de s!s miem)ros al mismo tiem-o n!e -roclama en otro ni&el >!e la -rom!e&e. Por otra parte, en conte7tos espec-ficos, la dole coerci.n puede ser fuente de creati3idad y no de patolo&-a En un art-culo de !%Y% enriquecida por dones "ranscon"e#"uales y a>!ellos >!e estn aminorados -or confusiones "ranscon"e#"uales tienen !n -!nto en com8n: ado-tan siem-re Do -or lo menos a men!do !na 7do)le -ers-ecti&aK. H# En a-oyo de esta declaración, descri)e sesiones de adiestramiento en las >!e el adiestrador de marso-las introd!ce deli)eradamente sit!aciones de con"!sión. !rante la -rimera e4-eriencia, el animal mani"iesta !n com-ortamiento D-or e*em-lo, le&antar la ca)e0a -or encima del ag!a? oye !n sil)ido, des-!/s reci)e el alimento. res sec!encias s!cesi&as m!estran >!e la marso-la ;a ca-tado la relación entre s!s mo&imientos y s! recom-ensa. A;ora )ien, d!rante las e4-eriencias !lteriores, la marso-la no ser recom-ensada -or este mismo com-ortamiento: el adiestrador es-erar >!e ella cree un nue$o compor"amien"o =como dar !n gol-e de cola. Imaginemos a;ora !na tercera demostración d!rante la c!al este n!e&o com-ortamiento= el 7gol-e de cola9 no ser ms recom-ensado: la marso-la terminar -or 7com-render9 lo >!e regory Cateson denomina el 7conte4to de los conte4tosK, y o"recer !na sec!encia de com-ortamientos di"erente o nue$o cada &e0 >!e entre en escena. Por otra -arte, el est!dio del registro de estas sec!encias dio l!gar a otra o)ser&ación: oc!rrió >!e el adiestrador de)ió rom-er &arias &eces las reglas de la e4-eriencia Dmo&ido -or la
t!r)ación de la marso-la, dio re"!er0os a los >!e el animal no tena derec;o ;a)it!almente. Esta con"!sión introd!cida en las reglas >!e regan la do)le relación e4istente entre el adiestrador y la marso-la
6a-a conducido, pues, finalmente al adiestrador a modificar su comportamiento? 6a-a creado nue3as situaciones a fin de preser3ar su relaci.n con el animal ; la marsopla 6a-a In3entado nue3as secuencias de comportamientos, testimoniando la creati3idad que esta e7periencia 6a-a permitido En esta ora, quisiera, por mi parte, insistir no solamente en r l as-ecto creati&o de los sntomas con los c!ales se en"rentan los tera-e!tas y los inter&inientes, sino tam)i/n so)re la creati&idad -ersonal de la c!al de)e dar -r!e)a a>!el >!e, miem)ro DM mismo de !n sistema, as-ira a am-liar el cam-o de lo -osi)le.
4eferencias ilio&r>ficas Z i . Cateson, . . ndola, es decir, meta) comunicando en este temaK H5 I-d H6 (acques Pluymaekers, comunicaci.n personaV se pulicar> en una ora dedicada al enfoque sistémico y a las instituciones, en ediciones ES2F H4onald D *ain&0 *ceuds, Pars, Stock, 1#1. H3 Da3id Cooper0 sychia"riee"+n"ipsychía"iie, Pars, Se!ll, ollec@ tlon 7PointsK, 1#3, -g. 2. Hay &ersión castellana: si!uia"ría y an"i psi!uia"ria, C!enos Aires, Paidós. U% +
Herapia sistémica, a:ar y camio Bna de las ases te.ricas sore las cuales la mayor-a de los terapeutas familiares parecen estar de acuerdo es la teor-a &eneral de los sistemas U!F *os miemros del &rupo de Palo Alto son los que presentaron de la manera m>s estructurada la articulaci.n posile entre esta teor-a y los sistemas familiares !F *ud=i& 3on lidos para diferentes sistemas, sean iol.&icos, psicoqu-micos u otros Conscientes de las reticencias que encontrar-a la tentati3a de aplicar a los sistemas 6umanos principios 3>lidos para otros do) minios, los miemros del &rupo de Palo Alto recordaron Lreto) mando un te7to de 3on lidas para di3ersos sistemas aiertos 8e aqu- las m>s importantes0 1. La totalidad: as como !na modi"icación de !n elemento de !n sistema im-lica !n cam)io del sistema en s! con*!nto, el com-ortamiento de !n miem)ro de !na "amilia no es disocia)le del com-ortamiento de los otros miem)ros, y lo >!e le s!cede modi"ica a la "amilia en s! con*!nto. 2. La no sumativídad: as como !n sistema no es la s!ma de s!s elementos, no se -!ede red!cir !na "amilia a la s!ma de cada !no de s!s miem)ros. $. La equiflnalidact en !na "amilia como en todo sistema >!e es la "!ente de s!s -ro-ias modi"icaciones, los elementos seme*antes -!eden estar ligados a elementos iniciales di"erentes. Si !n -aciente -resenta !n edema maleolar, el m/dico ;ar !n cier@ lo numero de e7>menes para intentar aislar la KcausaK de este [lntomn Lque remitir> por e/emplo, a un prolema card-aco En un 8lMtema 6umano, en camio, sistema aierto por e7celencia, no rn posile comprender la etiolo&-a de una Janore7iaK o de una Kr8qul:ofreniaK remont>ndose a un elemento inicial o aun a una
repetici.n de elementos considerados como causales Esto no 8l[iildlca que los primeros a5os de la 3ida no desempe5en un rol primordial para el de3enir de un indi3iduo? pero las e7periencias reali:adas no pueden ser reducidas de una manera simplista a causas directas del comportamiento ulterior0 es necesario, cada 3eG, estudiar en su con/unto el sistema 6umano en el que sur&i. rl s-ntoma '. La homeostasis: &on Certalan""y ;a)a -resentado, limi@ tando la e4tensión, el conce-to de reg!lación -or retroacción, >!e annon ;a)a "orm!lado ya -ara la )iologa con el nom)re de ;omeostasis. Estima)a >!e la 7retroacción y el control ;o@ meostticos no "orman sino !na clase es-ecial, a!n si ella lo es en !na gran -arte, de los sistemas a!torreg!lados y de los "enómenos de ada-tación9. H'< Sin em)aigo, este elemento ligado a la teora general de los sistemas, res!ltó ser el ms !tili0ado en -sicotera-ia sist/mica. esde 1#5, on . !e t!&iera -or "!nción lle&ar al e>!ili)rio a !n sistema "amiliar en -eligro de cam)io. Se trata)a de !na o)ser&ación ca-ital, a la c!al los tera-e!tas sist/micos atri)!iran la ms grande im-ortancia, -!es, desde entonces, considerar !n sntoma consista en interrogarse so)re la "!nción de ese sntoma no solamente al ni&el de !na economa -ersonal, sino tam)i/n al del sistema ms am-lio donde este sntoma ;a)a a-arecido y se ;a)a mantenido. Adem>s de la teor-a &eneral de los sistemas, los terapeutas sistémicos se apoyaron muc6o sore la teor-a de los tipos l.&icos de tica de la Jclase de todas las clases que no son miemros de ellas mismasK Paul at:ifi)
=ick, (anet 8elmick !e tienen !na cierta -ro-iedad9, se -!eden di&idir todos los o)*etos del !ni&erso en dos clases, -or e*em-lo la clase de los 7gatos9 y la clase de los 7no gatos9. Si se -asa l!ego a lo >!e los a!tores denominan !n 7ni&el lógico s!-erior9, se -!ede n!e&amente di&idir el !ni&erso en dos clases: las clases miem)ros de s mismas y las >!e no lo son? as, la clase de los conce-tos ser miem)ro de ella misma -!esto >!e es !n conce-to, mientras >!e la clase de los gatos no ser miem)ro de s misma -!esto >!e ella no es !n gato. F se -!ede toda&a, re-itiendo la misma o-eración, di&idir las clases en dos clases di"erentes: se tendr -or lo tanto la clase de las clases miem)ros de s mismas, y la clase de las clases no@ miem)ros de s mismas. A>! a-arece la -arado*a de (!ssell: si la clase de las clases no@miem)ros de s misma es miem)ro de s misma, entonces ella no es miem)ro de s misma -!esto >!e es la clase de las clases >!e no son miem)ros de s mismas? -ero, si ella no es miem)ro de ella misma, entonces es miem)ro de ella misma -!esto >!e el ;ec;o de no -ertenecer a s misma es la -ro-iedad de las clases >!e la com-onen. at:la=ick, 8elmick fundada en una deducci.n l.&ica de las m>s ri&urosas Ellos se escudan sin emar&o detr>s de la soluci.n que 4ussell propone en su teor-a de los tipos l.&icos, teor-a que intenta transformar a esta parado/a en un simple sofisma0 se&n 4ussell, lo que comprende todos los elementos de un con/unto no dee ser un elemento del con/unto *a parado/a de 4ussell no ser-a pues sino una confusi.n de los tipos l.&icos entre una clase y sus elementos, mientras que una clase es de un tipo o de un ni3el superior a sus elementos *os miemros del &rupo de Palo Alto se sir3ieron de esta teor-a de los tipos l.&icos para Intentar comprender las parado/as patol.&icas que des&arran al esqui:ofrénico *o descriieron como al&uien preso en un campo de comunicaci.n donde es incapa: de
diferenciar los ni3eles l.&icos, un campo en el que no 6ay posiilidad de elecci.n Descriieron inclusi3e las tres formas de esqui:ofrenia paranoide, 6eefrénica y catat.nicaF como una reacci.n posile frente a la confusi.n de los ni3eles l.&icos Parece, sin emar&o, que el uso de esta teor-a 6a tenido con) secuencias muc6o m>s amplias de lo que pre3e-an aquellos que
Intentaron aplicarla a las psicoterapias slstémlcas 6lte6ead y 4ussell escrien, en efecto, en sus rincipia a"hema"ica 1 >!e ciertas -arado*as, como las del "ilóso"o cretense E-im/mides Dodos los cretenses son mentirososK, o la de (!ssell Dla -arado*a de la 7clase de todas las clases >!e no son miem)ros de ellas mismasK -resentan !na caracterstica com8n >!e se -odra llamar la au"orre/erencia. (es!lta de eso >!e la teora de los ti-os lógicos -!ede ser inter-retada como !na teora >!e im-ide las -ro-osiciones a!torre"erenciales, si )ien se &e all di)!*arse !n -eligro m!y im-ortante: el de intentar di"erenciar lo >!e se dice del >!e lo dice. En s! nota)le introd!cción al te4to de rancisco Qarela tit!lada 7A calc!l!s "or sel"@re"erenceK, (ic;ard er)ert oTe y ein0 &on oerster D31 mostraron ;asta >!/ -!nto est im-lcita en la teora de los ti-os lógicos esta a"irmación: 7las -ro-iedades del o)ser&ador no de)eran entrar en la descri-ción de s!s o)ser&acionesK. H# A6ora ien, c.mo puede un psicoterapeuta descriir una realidad como si le fuese e7tra5a 'ué 3alor puede tener un discurso que se plantea sore una realidad que se crea en el pro) ceso mismo de su carto&raf-a Pero, por otra parte, puede acep) tarse la parado/a autorreferencial sin ser por eso for:ada a la confusi.n y a la impotencia 'uisiera a6ora e7poner las cr-ticas que formulé contra la aplicaci.n de las teor-as de *ud=i& 3on s apropiadas para el estudio de los sistemas 6umanos en camio, con los cuales se enfrentaan los psicoterapeutas sistémicos y otros terapeutas familiares, como Dell y +oolis6ian !!V o tamién
[au-fmann y 2i3a: Z!V compartieron estas preocupaciones En la época en que intenté aplicar las teor-as de Pri&o&ine al campo de las teor-as familiares, tenia conciencia de que mi cues) tionamiento se refer-a menos al sistema familiar en tanto que tal, que al sistema terapéutico cons"i"uido por la familia y yo mismo: -!es no -oda ;a)lar del -rimero sino a -artir de lo >!e me era mostrado en el conte4to tera-/!tico. No ;a)a encarado, sin em)argo, todas las consec!encias de este en"o>!e, y act!a)a im-lcitamente como si !n ma-a -!diera rendir c!enta del territorio en el >!e inter&ena.
*a situaci.n parad./ica que constituye para un terapeuta el 6ec6o de mantener un discurso sore un mundo que él crea en el acto mismo de su descripci.n ser> discutida en el cap-tulo si&uiente Indicaré c.mo, sin aandonar la rique:a de un mundo pluralista en el que las inestailidades pueden arir aruptamente nue3as posiilidades, de- confrontarme a la parado/a au) torreferencial *a teor-a &eneral de los sistemas desarrollada por *ud=i& 3on mica y de la iolo&-a, me permitir>n presentar los conceptos de estructura disipati3a, de 3alor cr-tico, de distancia del equilirio y de ifurcaci.n Me referiré primeramente a la JInestailidad de <énardR, tal como la descrie + Nicolis en un articulo titulado KHermodin>mica de la e3oluci.nK U!TF Calentemos por la ase una capa de fluido limitada por dos placas 6ori:ontales paralelas0 en tanto que la diferencia de temperatura entre las dos
placas quedar> m>s aqu- de un cierto umral, el calor, transportado por conducci.n, se transferir> de aa/o 6acia arria y ser> disipado 6acia el e7terior por intermedio de la placa superior El estado del sistema quedar> estale y la temperatura 3ariar> linealmente desde las re&iones calientes de aa/oF 6acia las re&iones fr-as de arriaF Continuemos calentando la placa inferior y alejándonos así del equilibrio: para un valor crítico del gradiente de tem-erat!ra, se &er a-arecer !n mo&imiento de con&ección, !n )r!sco a!mento de la cantidad de
cnlor trans-ortado y !na estr!ct!ración del l>!ido en !na serle de -e>!eBas 7c/l!lasK denominadas 7c/l!las de C/nardK (fig. 0). H ]H
se&n + Nicolls U!WVF
Estas células, de forma m>s o menos 6e7a&onal, estar>n constituidas por los mo3imientos del fluido que se ele3a, costea la placa superior, redesclende costea la placa inferior, se ele3a de nue3o, etc Ellas se se&uir>n en el e/e 6ori:ontal, teniendo una rotaci.n alternati3amente de7tr.&ira y le3.&ira [flg. 5.
Por m>s que el umral de inestailidad del sistema esté de) terminado por las coerciones que el medio le impone, y por m>s que sepamos en qué momento estas JcélulasK aparecer>n, el sentido de rotaci.n de una célula, y por lo tanto de todas las dem>s, es impre$isible. a estr!ct!ra a-arecida es llamada dislpa"i$a, -!es disi-a la energa a-licada al cam-o. No -!ede a-arecer sino 7a distancia del e>!ili)rio9, y necesita !n a-orte contin!o de energa. En ese caso, a -artir de este &alor crtico, las "l!ct!acio@
$#
nes no tender>n m>s a lle3ar el sistema al estado anterior, sino m>s ien a amplificarse y permitir as- que se instale otro estado del sistema Mi se&undo e/emplo concernir> a la a&re&aci.n peri.dica de las acrasiales ic"yos"ellum discoideum. D16 *as acrasiales son ameas que 3i3en en es"ado unicelular, y se m!lti-lican ;asta >!e s! medio ya no sea ca-a0 de -ro&eerles alimento. esan entonces de re-rod!cirse y, des-!/s de !n -erodo de inter"ase, se agregan en olas s!cesi&as alrededor de alg!nas de ellas, >!e se &!el&en -or lo tanto los centros de agregación. Estos agregados darn en !n seg!ndo tiem-o !na estr!ct!ra m!lticel!lar constit!ida -or !na ca)e0a >!e contiene es-oras y -or encima de !n tallo, D"ig. 6
2i&ura Y Esquema de M. S!ssmann H1, re-rod!cido -or . Nicolis H13
Esta cae:a estallar> y, si las esporas se éncuentran en uenas condiciones, podr>n aparecer otras ameas Si disponen de una cantidad suficiente de alimento, las ameas se reproducir>n por di3isi.n y el con/unto podr> ser considerado como un sistema 6omo&éneo que comprende, por e/emplo, un nmero medio de ameas por cent-metro cuadrado All-, adem>s, una coerci.n e7terior si ocurre la disminuci.n de aporte nutriti3oF modificar> totalmente el comportamiento de las ameas a partir de un umral
cr-tico Bn estudio detallado del fen.meno re3elar> que los centros de -&re&aci.n atraen 6acia ellos a las ameas emitiendo se5ales qu-micas constituidas por adenosina monofosfato c-clico cAMPF e7tracelular, la cual actuar> por retroacci.n positi3a sore el ndenllato ciclase que transforma al ni3el intracelular la adeno) slna trifosfato AHPF en adenosina monofosfato c-clica cAMPF
fin) 2)
2i&ura $ Esquema de s-ntesis de la se5al quimiot>ctlca en el Dictyostelium discoideum. *os par>metros v, s, kty k desi&nan, respecti3amen) te la entrada constante de sustrato AHP, la acti3idad m>7ima del adenilato ciclasa C, el transporte de AMP c-clico cAMPF a tra3és de la memrana y la constante de 3elocidad para la de&radaci.n del cAMP por la rosfodiesterasa El si&no ^ _ndica la retroacci.n positi3a e/ercida por el cAMP e7tracelular sore su propia producci.n cuando se produce su uni.n al receptor 4 U !%
E7iste, puede 3erificarse, un 3alor cr-tico de los par>metros del sistema correspondiente aun punto de bifurcaci&n (figura 3) a -artir del c!al, gracias a !n -roceso de retroacción -ositi&a, las "l!ct!aciones se am-li"icarn y las ame)as se ac!m!larn alrededor del centro de agregación >!e emite -eriódicamente la adenosina mono"os"ato cclica. 2i&ura Esquema de un dia&rama de ifurcaci.n *a rama de estados estacionarios de ` se 3uel) 3e inestale tra:o interrumpidoF por el 3alor cr-tico [ c del par>metro [ Cuando la distancia al equilirio aumenta, la nue3a rama puede por s- misma 3ol3er inestale en un se&undo punto esta ifurcaci.n El 3alor se refiere al estado de equilirio ` UV
'uisiera a6ora a&re&ar a los conceptos ya presentados otras dos nociones0 la de a:ar y la de feed. bac4 e&ol!ti&o.
1. El a:ar Para un mismo par>metro, es Imposile saer cu>l de las mltiples fluctuaciones ser> amplificada0 en el caso de la inesta) ilidad de <énard, s.lo el a:ar decidir> si una célula es le3.&ira o de7tr.&ira, aun si la aparici.n de estas células est> sometida, por otra parte, a un cierto determinismo0 otro e/emplo de este fe) n.meno podr-an ser las oser3aciones de +rassé sore la cons) trucci.n de un termitero, tal como las r efiere llya Pri&o&ine !F Para construir un termitero, los insectos comien:an por edificar pilares con la ayuda de di3ersos materiales, lue&o li&an estos pilares entre s- para formar arcos y terminan por colmatar los espacios entre los arcos En el ori&en, las peque5as pilas de ma) teriales utili:ados est>n dispuestas al a:ar, y es el olor de que 6ar>n sido impre&nados lo que atraer> los termites 6acia los puntos de m>s alta densidad que formar>n los dep.sitos ya constituidos? as- cuando un dep.sito lle&ue a un cierto 3olumen, atraer> m>s insectos que 3endr>n a depositar all- m>s materiales? este mecanismo de retroacci.n positi3a permitir> al pilar ele3arse Se podr-a 3er all- la amplificaci.n de una fluctuaci.n a partir de un cierto umral critico? m>s ac> de un cierto umral, no era e3idente que el peque5o dep.sito se 3ol3er-a un pilar, el pilar se constituir> a partir del momento en el cual, por ra:ones aleatorias, se alcance un cierto umral Al descriir en 'a na"ure e" la pens%e las circ!nstancias en las c!ales !n &idrio gol-eado -or !na -iedra -!ede ra*arse en estrella, regory Cateson escri)e >!e 7en el interior de las condiciones >!e determinan la ra*ad!ra en estrella, es im-osi)le -re&er o controlar la dirección y la -osición de los rayos de la estrellaK. H22U Este l!gar de*ado al a0ar me -arece m!y im-ortante. Nos cond!ce a inter&enir en los sistemas ;!manos >!e intentamos -oner 7"!era de e>!ili)rio9 sin -or eso decidir las &as a seg!ir: son las -ro-iedades es-ec"icas y la am-li"icación al a0ar de ciertas 7sing!laridades9 lo >!e lle&arn a la "amilia ;acia !na eta-a !lterior.
2. El feed bac4 e&ol!ti&o Cuando una estrucura disipati3a 6ace aparecer, por e/emplo
nue3as sustancias qu-micas, aparece una nue3a funci.n li&ada a esta estructura Este nue3o estado aparece a Jun m>s alto ni3el de interacci.n del sistema con el entorno Este comportamiento fue llamado feed bac4 e&ol!ti&o. En e"ecto, al a!mentar s! disi-ación, la clase de "l!ct!ación cond!cente a inesta)ili@ dades se ensanc;aK. H2$ 7Este a!mento de -rod!cción de entro-a ;ace a s! &e0 -osi)le la a-arición de n!e&as inesta)ilidadesK. H2' *as interacciones no lineales deidas > los fen.menos de re) &ulaci.n que sore3ienen en los sistemas aiertos a distancia del equilirio termodin>mico permiten, pues, sore todo, por las re) troacciones positi3as, 6acer pasar el sistema de un estado a otro a tra3és de una ifurcaci.n, una transici.n discontinua As-, &racias al aumento de la disipaci.n, una estructura disipati3a permite esperar un nue3o umral de inestailidad que lle3a él mismo a una nue3a estructura disipati3a, y as- sucesi3amente Deseando e7tender al campo de las psicoterapias familiares los conceptos presentados m>s arria, los miemros de nuestro instituto el Instituto de Estudios de la 2amilia y de los Sistemas 8umanos de tico elaorado a partir de una transacci.n familiar repetiti3a Estas in3esti&aciones 6icieron aparecer que, en tanto un tal modelo pueda ser empleado, era posile en ciertos casos espec-ficos se5alar puntos de ifurcaci.n que separaran tipos de comportamientos distintos @F 8e aqu-, pues, las diferencias que pudimos poner en e3idencia, concernientes a los funcionamientos de los sistemas en equilirio y fuera del equilirio0 1. En los estados en equilirio o pr.7imos al equilirio 3on n en equilirio Pri&o&ine y su equipoF, la e3o) luci.n de un sistema est> li&ada no a una ley &eneral, sino a las propiedades intr-nsecas de este sistema, tal como la naturale:a de las Interacciones entre sus elementos Estas interacciones pueden pro3ocar un estado inestale y una ifurcaci.n espec-fica separando aruptamente diferentes modos de comportamiento 2. Bn sistema en equilirio o pr.7imo al equilirio 3uel3e a su estado inicial, cualquiera que sea la perturaci.n a la cual est> sometido *a 6istoria de las fluctuaciones del sistema se sita en el interior de las normas de aquél 2uera de estas normas, el prolema
del tiempo o de la 6istoria no se plantea Bn sistema aierto que no est> en equilirio es capa:, en condiciones apropiadas, de e3olucionar 6acia diferentes modos de funcionamiento, pero la Jelecci.nK de tal o cual modo de funcionamiento depende de la 6istoria del sistema Para m-, este punto es crucial El concepto de equifinalidad condu/o a minimi:ar la importancia de la 6istoria de los sistemas0 lo que se 3ol3-a primordial, era estudiar la estructura presente de los sistemas en cuesti.n El deate que se instaur. entre los terapeutas familiares sore el lu&ar que se de-a reser3ar a la 6istoria en los sistemas 6umanos me parece en parte li&ado a los l-mites que Impon-a el enfoque de *ud=i& s ien de de3ol3er a los sistemas una e3oluci.n en el tiempo no re) ducile a términos causales Este punto es importante 9ol3eré en detalle en los cap-tulos cuatro y siete por el momento precisar que la 6istoria de un sistema puede ser una 6istoria donde los elementos pasados no impon&an autom>ticamente los elementos por 3enir, y esto, entre otros, &racias a la amplificaci.n aleatoria de una fluctuaci.n
E(EMP*OS C*INICOS
1. *etras y leyes 1 Se trataa de una familia de cinco personas0 el padre y la ma) dre, de unos cincuenta a5os de edad, que e/erc-an cada uno una
!Es e3idente que los nomres, as- como otros elementos, fueron modificados a fin de prote&er el anonimato de las familias descritas
profesi.n lieral? los tres 6i/os, llamados trica donde estaa 6ospitali:ado !e le -reg!nt/ de entrada s! nom)re? en el momento mismo en >!e /ste, des-!/s de m8lti-les es"!er0os. logró artic!lar 7Certrand9. la madre me ;i0o sa)er >!e s! ;i*o se nega)a a ;a)lar desde ;aca m!c;os meses. Pro-!se -or lo tanto a Certrand no rom-er s! silencio en tanto yo no ;!)iera ca-tado lo >!e da)a a entender? y le a&is/ -or otra -arte las di"ic!ltades >!e se me -resenta)an al de*ar ;a)lar a otros en s! l!gar: /l resol&ió este -ro)lema com!nicndose conmigo -or mensa*es escritos. El padre descrii. el esp-ritu de la familia como JcristianoK, es decir implicando Jla oediencia a la familia, el respeto a los mandamientos, la fidelidad al autismo y a los 3otos de las primera comuni.nK? él 3e-a en los prolemas de su 6i/o n a&ente de Sat>nK, sin lo&rar por lo mismo diri&ir a él la atenci.n de su familia *a ma5ana de la tercera entre3ista, la esposa me telefone. para decirme que la familia no podr-a concurrir a la cita y que el padre me escriir-a una carta Es la si&uiente0 !T!!%$% Doctor Muy tarde, lamentalemente le pido que me e7cuse? lamento informarle que no concurriremos a su consulta del !W de diciemre Henemos en efecto necesidad de un per-odo de refle7i.n y de ase&u) ramos de que tanto usted mismo como el médico que trata a neos, del cual usted forma parte qui:>, cada uno tiene su 3erdad, y la 3erdad de cada uno remite a sus propios fantasmas0 no 6ay m>s 9erdad ! En terapia familiar, el Xpaciente desi&nadoK es el miemro de la familia que su sistema presenta como portador del s-ntoma
Hodo cat.lico 3erdadero, anclado en la 2e, no puede sino recusar esta filosof-a y, si es padre de familia, esfor:arse por prote&er contra ella a los suyos y, si 6ay necesidad, marcar su desaproaci.n 6acia comportamientos que 3iolan &ra3emente lo que el Creador re3el. como las re&las fundamentales de 3ida para el 6omre Por supuesto un tal padre de familia cat.lico est> siempre dispuesto a perdonar Pero en nuestro uni3erso aélico, no se soporta m>s que un padre desempe5e su rol de (efe de familia, al mismo tiempo que no 6ay m>s lu&ar para el perd.n, pues lo que se re6sa es el concepto de falta en el sentido o/eti3o del término Es decir, la antinomia completa de las Ideas &eneralmente dominantes 6oy y del catolicismo
En este plano, pienso, se plantean el caso de f>cilmente por qué recuso por anticipado toda Inter3enci.n psiqui>trica o psicol.&ica que no sea conducida por al&uien que afirme e7presamente su ape&o y su fidelidad a la 2e cat.lica, fiel a s- misma, en los 3einte si&los de 6istoria de la i&lesia Manifestarse partidario de una 3a&a tradici.n cristiana o de un cristianismo moderno en ruptura con la tradici.n es para m- Inaceptale, pues conduce muy proalemente a aceptar el uni3erso aélico mencionado, y a aportar soluciones que no pueden ser terapéuticamente satisfactorias si est>n falseadas con respecto a la 9erdad re3elada 4ec-a usted Doctor, mis saludos m>s distin&uidos
Para mi esta carta era dolemente importante El padre de) fend-a no solamente los 3alores de su familia y las re&las que per) mit-an su equilirio, sino tamién una 3isi.n del mundo frente a la epistemolo&-a del terapeuta, que e7perimentaa como su3ersi3a en relaci.n a la suya 4espetando en un todo los 3alores del padre, decid- retomar ciertos elementos de su carta para reencuadrar 1 -ositi&amente s! negati&a a &enir a la sesión y comentar -aradó*icamente s! decisión. A tra&/s de este reenc!adre -ositi&o y este comentario -aradó*ico, yo >!era sim-lemente ay!dar a este sistema "ami@liar a no estar ms o)ligado a "!ncionar como lo ;aca, li)erando otras &as y ampliando el campo de sus !en una situaci.n parad./ica0 de KprotectorK, el s-ntoma se 3ol3er> al contrario de) nunciador y desi&nar> lo que era considerado 6asta all- como Indecile Lsi per) siste, no podr> sino re3elar lo que se supon-a enmascarada0 si desaparece se ari) r>n otras 3-as y el te)apeuta deer> Implicarse de nue3o en el sistema terapéutico para ampliar el campo de lo posile 2rente a una parado/a familiar tal como una dole coerci.n, el terapeuta po) dr> utili:ar una Kcontraparado/aG que lierar> l a situaci.n loqueada U$V
posibilidades. esea)a ay!dar a este sistema a intentar otras transacciones, e ignora)a lo >!e sera la eta-a !lterior Den este caso yo de)era im-licarme de n!e&o en el sistema tera-/!tico -ara a!mentar la "le4i)ilidad de s!s reglas, y -or lo tanto las del sistema "amiliar. Para 6alar como los especialistas de la termodin>mica de no equilirio, se podr-a decir que este reencuadre positi3o acompa5ado de un comentario parad./ico intentaa poner este sistema fuera de equilirio impidiéndole retomar sus anti&uos la:os retroacti3os Esperaa as- amplificar las fluctuaciones, de tal suerte que el sistema pudiera e3olucionar 6acia un nue3o modo de funcionamiento, el cual e3olucionar-a a su 3e: a tra3és de un proceso de feed bac4 e$olu"i$o.
8e aqu- la respuesta que diri&- al padre0 s all> de la necesidad de perd.n para sus 6i/os y m>s particularmente para su 6i/o
Comprendo que pura usted la situaci.n actual sea preferile a resultados terapéuticos que no pueden sino ser Insatisfactoriob ni ese conte7to 'uisiera comunicarle mi respeto por su elecci.n tan dolorosa *e quedar-a reconocido si tiene a ien leer a los diferentes miemros de su familia, su carta, asi como la m-a 4ecia, Se5or, la e7presi.n de m- profunda comprensi.n
Con esta carta, yo 6a-a intentado modificar las re&las del sistema reencuadrando la enfermedad como preferile al resultado
terapéutico0 la enfermedad del 6i/o prote&-a Lentre otras cosasL al padre, permitiéndole continuar dispensando su perd&n, como /l -ensa)a >!e de)a )!enamente ;acerlo !n -adre cristiano. Es-era)a as am-liar el cam-o de lo -osi)le -ara esta "amilia, ignorando enteramente cómo i)a a modi"icarse el sistema "amiliar. Al&unos d-as m>s tarde, el padre me 6i:o lle&ar el mensa/e si) &uiente0 !!%$% Doctor *e a&rade:co su carta del !Y de diciemre Des&raciadamente, no responde a la cuesti.n presentada en mi carta del !T 4esumida re3emente, 6e aqu- de nue3o esta cuesti.n0 puede usted conducir esta terapia respetando, tanto en sus fines como en los medios empleados, la 4e3elaci.n, y, a contrario, pro6iiéndose todo aquello que no la respetar-a 'uede perfectamente claro, por otra parte, que no prefiero Jpro) te&er la fe de los m-os m>s ien que resoclali:ar a s distin&uida P D0 Es e3idente que este intercamio de correspondencia es y ser> mostrado a mi familia y comunicado al médico que atiende a
Esta carta atesti&ua que el sistema terapéutico 6a-a &anado en fle7iilidad El padre ya no e7i&-a que el terapeuta fuera 7e4
presamente de confesi.n cat.licaK, sino simplemente que respetara la J4e3elaci.nR El prolema que se planteaa era el si&uiente0 yo no pod-a aceptar el pedido del padre sin 3ol3erme yo mismo la referencia a la *ey Esto, sin 6alar del peli&ro de arreatar el lu&ar del padre, no 6uiera podido conducir sino a un conflicto de tipo simétrico Ele&- en consecuencia aliarme al sistema familiar pidiendo al padre que continuara representado la referencia a la *ey, e incluirme e7pl-citamente en su aplicaci.n As-, la re&las impl-citas de la familia podr-an manifestarse e7pl-citamente cada 3e: que mis inter3enciones las pusieran en peli&ro0 pues no me propon-a otra cosa que tomar un lu&ar 3ecino al del paciente desi&nado Mi posici.n era sin emar&o diferente El padre, en efecto, ten-a a/o su autoridad nomrar ciertas re&las del sistema familiar, mientras que yo 6a-a adquirido la posiilidad de comentar las situaciones que no de/ar-an de aparecer? pod-a a6ora encarar un sistema terapéutico donde mi presencia permitir-a modificar el conte7to li&ado a los s-ntomas de
Bn mes m>s tarde, el padre me diri&i. una respuesta acompa5ada de una fotocopia de mi propia carta 8a-a surayado con marcador amarillo las f.rmulas Jser aquel que, en su familia, es la referencia a la *eyR y Ja inter3enir cada 3e:R, puntuali:ando la primera con dos puntos de interro&aci.n y la se&unda con un punto de e7clamaci.n Estos elementos confirmaan que yo ocupaa en adelante en el sistema terapéutico, en parte, el lu&ar del paciente desi&nado al cual el padre Intentaa e7tender su *ey 8e aqu- su carta0
@!% Doctor0 *e a&rade:co su amale respuesta del Y de enero, a la cual tendr> a ien e7cusar mi respuesta tard-a Confieso no 6aer entendido perfectamente el tenor de su carta Adem>s de una diferencia natural de funci.n entre nosotros, 6ay, me parece, una di3er&encia filos.fica Como la prosecuci.n de esta psicoterapia corre el ries&o de efectuarse entonces en una ami&edad per/udicial, creo preferile no turar por este ries&o suplementario la e3oluci.n e7tremadamente positi3a iniciada por s dis tin&uida No ostante, una precisi.n m>s0 su interpretaci.n e7presada en la carta precedente, se&n la cual yo tendr-a necesidad del concepto de falta para e/ercer una funci.n de perd.n necesaria al rol de (efe de familia tal como yo lo conceir-a Lde donde mi rec6a:o a una psicoterapia que eliminara el concepto de faltaL, esta interpretaci.n es ine7acta, y me e7presé mal si pude 6acérselo pensar as- Como usted sae, la utilidad de la *ey es, por una parte, ser3ir de &u-a y por otra permitir a todo 6omre /u:&arse a s- mismo en 3erdad, y por este 6ec6o escapar dentro de lo 6umanamente posileF a la maldici.n del /uicio de otro /de los otrosQF En cuanto me concierne, no ten&o de nin&una manera necesidad de perdonar a mi 6i/o, y me nie&o a /u:&arlo, pues el (uicio es la prerro&ati3a de Dios Pero recuso todo discurso psiqui>trico o filos.fico que i&nore o nie&ue la *ey, y tras ella la 4e3elaci.n del Creador, que 3ino en Cristo su 6i/o a cumplir la *ey y darle su plena eficacia por la +racia? esto 3ale para todo 6omre Lenfermos, sanos y psiquiatrasL y por todos los tiempos, como indispensale referencia al desarrollo indi3idual y social
Esta carta me pareci. importante en 3arios sentidos0 1. El padre parec-a aceptar la diferencia natural de funci.n entre el terapeuta y él mismo, lo que si&nificaa que me reconoc-a un espacio espec-fico
r i
2. Me 6ac-a saer que, desde el intercamio de cartas Les decir desde 6ac-a dos mesesL, el estado de s frutos0 tem-a que el padre se endureciera, loqueando la e3oluci.n de la familia Por eso acepté su pedido de interrumpir este intercamio de cartas, puesto que este intercamio 6a-a permitido al sistema terapéutico comunicarse a tra3és del modo de comuni) caci.n pri3ile&iada de s fle7iles que las que &oernaan el sistema familiar El reencuadre positi3o del comportamiento del padre y el comentarlo parad./ico sore la importancia de la enfermedad del 6i/o continuaan 6aciendo su efecto Escri-, pues, esta ltima carta0
*o que pas. entre ese padre y yo es e3identemente muc6o m>s comple/o que el esquema racionali:ado que 6e propuesto 8uieran podido ser e7plorados numerosos otros ni3eles0 una f.rmula tal como J*a 4e3elaci.n del Creador, que 3ino en su 6i/o Cristo a cumplir la *ey y a darle su plena eficacia por la +raciaK podr-a arir todo un campo de comentarios sore la relaci.n entre este padre y este 6i/o En este caso particular, es claro que al &una cosa del orden de una intersecci.n de cartasLyo mismo estu3e nutrido de lecturas -licas durante mi infancia y estudié durante a5os los comentarios de la *eyL permiti. crear una disposici.n terapéutica particularmente feli: Otros elementos m>s podr-an ser aclarados El caso si&uiente 5' ser>
consa&rado (ustamente al estudio de la interacci.n entre diferentes ni3eles
2. Sin&ularidades, acoplamientos y cam)ios Cuando comencé a inspirarme en los traa/os de Ilya Pri&o&ine para mis inter3enciones en terapia familiar, me parec-a que era imposile JreconocerK la fluctuaci.n susceptile de ser amplificada a fin de camiar el funcionamiento del sistema Hales fluctuaciones, que parec-an no poder amplificarse m>s que al a:ar, me parec-an e7tra5as a mis cuadros e7plicati3os En el caso descrito m>s arria cre- identificar un elemento sin&ular que pertenec-a a la familia en cuesti.n, y se distin&u-a de los elementos que utili:amos en &eneral en terapia familiar *lamé singula ridades a estos elementos -artic!lares, ;eterog/neos con res-ecto a n!estros códigos ;a)it!ales. as inter&enciones descritas ms a)a*o tendan a am-liar la sing!laridad agua como si se tratase de !na "l!ct!ación c!ya am-liación era de nat!rale0a tal >!e cam)ia)a el "!ncionamiento del sistema. De 6ec6o, esta sin&ularidad pertenec-a tanto al sistema terapéutico como al sistema familiar ; se re3elaron por otra parte dos elementos tamién importantes0 con"ar y agua. Por m8lti-les ra0ones la sing!laridad agua esta)a ms -ró4ima al sistema tera-/!tico >!e la sing!laridad con"ar. Por otra parte, al mismo tiempo que fui conducido a apreciar me/or la importancia relati3a de la ampliaci.n de una sin&ularidad, descur- la importancia capital de un ni3el al cual 6asta entonces 6a-a prestado poca atenci.n Insistir nicamente en la in3esti&aci.n de una sin&ularidad y de su amplificaci.n 6uiera arries&ado, en efecto, conducimos a una concepci.n de la interpretaci.n se&n la cual el traa/o del psicoterapeuta ser-a sore todo el de re3elar y ampliar un elemento particularmente si&nificati3o El estudio de este caso y de al&unas otras inter3enciones me 6i:o comprender la Importancia de un ni3el al que denominé ni3el de los Jensamla/es de sin&ularidadesR0 inclu- all- el comportamiento no 9eral de los miemros del sistema terapéutico, el tono de 3o:, las referencias culturales, etc Este ni3el es distinto de los cuadros e7plicati3os &eneralmente empleados en terapia familiar Este ni3el de ensamla/es e7iste siempre Insista el terapeuta sore el sentido del s-ntoma o sore sus funciones Est>, por otra parte, pr.7imo a lo que 2éli7 +uattari UV denomina el Jni3el semi.ticoK , por oposici.n al de las Jre&las intr-nsecasK 'o !ue me apareci& es !ue la fluc"uaci&n !ue se amplifica no es"5 cons"i"uida por un elemen"o singular, sino por ensambla/es de $arías singularidades per"enecien"es "an"o al "erapeu"a como a la familia. En mi opini.n, son las amplificaciones de estos ensamla/es las que permiten comprender el loqueo o el camio de una situaci.n Cualquiera que sea el cuadro e7plicati3o empleado por el terapeuta, lo que permite o no que una situaci.n camie, me parece, es la amplificaci.n o55la no
amplificaci.n de los ensamla/es creados por las sin&ularidades del sistema terapéutico Este punto, que podr-a parecer un poco oscuro, lo ilustraré con un e/emplo preciso En el caso descrito m>s aa/o, yo 6a-a traa/ado tanto al ni3el de las re&las intr-nsecas que re&-an ese sistema, a fin de camiar sus leyes de e3oluci.n, cuanto al ni3el de esas sin&ularidades Se trataa de una familia /ud-a de Africa del Norte cuyo padre 6a-a fallecido 6ac-a muc6os a5os No 3i a esta familia m>s que dos 3eces en tanto que consultante, a pedido de dos de mis estudiantes que se&u-an a las tres 6i/as por perturaciones psic.ti) cas *a sesi.n, de la que presentaré e7tractos, fue la primera en la que participé0 estaan presentes la madre, el 6i/o mayor Al) ert, que ten-a unos treinta a5osF y dos 6i/as 4ac6elle y Su:an) ne, de 3eintiséis y 3eintisiete a5os, respecti3amenteF Den respues"a a una pregun"a !ue le formul% sobre sí misma) 6o soy como el mar, &a, &iene... Me arro*a a !n costado y me &!el&e a arro*ar al otro, me )alancea de !n lado y me &!el&e a )alancear del otro. Despu%s !ue le $ol$í a pedir !ue hablara de ella.) Fo... ellos, ellos ;a)lan de ellos. Es me*or >!e yo. Fo no soy nada. A6ora, en3e/ec- No cuento m>s No espere m>s que el a&ua callente MON; E*[AlM0 'ué es el a&ua callente *A MAD4E0 entonces, después de 6aerle pre&untado lo que 6ar> si sus 6i/as y su 6i/o de casan0 JNo sé lo que 6aré, cuidar ni5os traa/ar en un a5o, en un a5o turco me &usta el a&ua, me &usta el a&ua, me &usta muc6o el a&ua *A MAD4E0
Estas declaraciones me permitieron emitir 6ip.tesis sore la funci.n de los s-ntomas de las tres 6i/as, cuyos prolemas ps-quicos 6a-an aparecido a partir del momento en que 6a-an decidido de/ar el 6o&ar familiar, sus s-ntomas pod-an ser comprendidos como un medio de preser3ar un equilirio 56
familiar puesto en peli&ro por su edad0 si no estaan enfermas, deer-an de/ar una después de la otra a su familia, lo que 6uiera arries&ado crear una situaci.n nue3a y dram>tica Lcomo lo mostraa la oser3aci.n de la madre sore la espera del Ja&ua callenteK empleada en Africa del Norte para la3ar a los muertos 2uera de esta lectura sistémica cl>sica, yo 6a-a confrontado a esta Jsin&ularidad familiar que parec-a constituir el a&ua, dado que los or-&enes -licos de los nomres de 4ac6elle y del 6i/o mayor remit-an tamién al tema del a&ua Decid- por lo tanto amplificar la sin&ularidad agua e&itando ac;atarla )a*o !na inter-retación c!al>!iera. Su:anne 6ala del a&ua como de su elemento, como de una caricia, después que e3oca sus relaciones con su padre y sus conflictos con la madre ; 4ac6elle, a quien interro&ué a su 3e: sore el a&ua, me respondi.0 Jcomo si fuera necesito 6alar del a&ua como si fuera cada uno traa/a con su materiaK M E0 Su materia, qué es 4AC8E**E0 (ustamente, me e3aporé y no encontré materia M E0 Entonces 6>leme de este estado de e3aporaci.n 4ac6elle prorrumpe entonces en l>&rimas, lo mismo que Su) :anne El 6ermano transpira &ruesas &otas Me siento en una silla m>s a/a, al lado de 4ac6elle, y yo tamién transpiro *a madre llora y pasa pa5uelos de papel a todo el mundo, lue&o se diri&e a 4ac6elle0 JNo llores 7*4oun 4para8, todo esto se arreglar.9 Después de tres minutos de silencio durante los cuales la madre y las dos 6i/as lloran y lps terapeutas y el 6i/o mayor transpiran, 4ac6elle me dice0 JEstoy me/orK, y me le3anto para retomar mi lu&ar precedente *os términos/udeo)>raes empleados por la madre si&nificaan0 J'ue yo sea tu kaparaR la kapara es un animal, &eneralmente un a3e de corral, que los (ud-os de Africa del Norte sacrifican la 3-spera del d-a del perd.n, como ofrenda e7piatoriaF Bna 3e: sentado, declaro0 JEst> ienR? lue&o a&re&o, después de 6aer lan:ado un suspiro0 JDeo decir una cosa0 es que cerca de ustedes alcancé una pa: e7traordinaria 8ace tiempo que no estaa as-, tan sereno /Es e7tra5oQ Es como si 3uestras l>&rimas permitieran a los que est>n alrededor de 3osotros sentirse m>s en s- mismos, m>s tranquilos Es 3erdaderamente muy e7tra5oQ Normalmente, cuando se est> cerca de personas que lloran, uno no se siente ien, siente un malestar, se est> y cerca de 3osotros, me senté a6-, y es como si 3osotros me 6uierais dado la posiilidad, as- de de/ar pasar el tiempo No contaa m>sR esta inter3enci.n que connotaa positi3amente el s-ntoma de 4ac6elle, mientras surayaa que pod-a ser3ir para con&elar el tiempo de la familia en una fase espec-fica del ciclo de 3idaF ; prose&u- a&re&ando0 JEn 3uestra familia, cuando al&uno est> en un momento dif-cil, no tenéis la Impresi.n de sentiros m>s tranquilosK 5
*A MAD4E0 S-, S_ M E0 C.mo pasa eso E7pl-queme c.mo pasa, se5oraQ *A MAD4E0 As- como se re&a5a, y todo eso, pero se est> se est> tranquilo 8ay al&o que nos que nos une 8ice entonces notar a 4ac6elle que ella conser3a su ari&o aunque pare:ca tener calor, responde que quit>rselo es como descurirse? lue&o Alert 6ala él tamién del a&ua M E0 Alert, y para usted, qué es el a&ua A*
53
3i3ido al orde del mar es un elemento natural como el fue&o M E0 'ué es el fue&o 4AC8E**E0 respondiendo al mismo tiempo que AlertF No es un elemento natural A* el sol, eso callenta, pero callenta una &ran superficie Se tiene necesidad de una peque5a llama M E0 *es 6ar-a &ustado una llamita 4AC8E**E0 Bna llamita, s- M E0 No una llama &rande 4AC8E**E0 en 'ibera"ion, eso, K)!sca !na llamitaK. 4AC8E**E0 No, no, no es en 'ibera"ion. M E0 *as llamas &randes, efecti3amente, se corre el ries&o de e3aporar, las llamitas, eso respeta 4AC8E**E0 Eso esQ *lamitas All- mismo Alert recomien:a a 6alar del a&ua, y el terapeuta y él mismo descuren el la:o que e7iste entre su nomre 6ereo y ese l-quido, Su:anne sonr-e y dice0 JEs elloK M E0 Hen&o &anas de reposar, es como si fuese un a5o Bn a5o donde uno se siente ien, pero tamién un poco fati&ado Entonces, 3oy a ir a descansar un poco, a 6alar con mi cole&a, y 3uel3o A mi retomo, al&unos instantes m>s tarde, me aperci- de que la madre se 6a-a 3uelto a poner el ari&o y de que 4ac6elle se 6a-a sacado el suyo Después de 6aer comentado re3emente el acontecimiento, declaro0 JOs diré, 6emos refle7ionado con nuestros cole&as al lado Al principio, lo que me sorprendi. era 6asta qué punto estaan todos emocionados 8emos sentido todos aqu- este e7traordinario calor que emana de 3osotros, y 6asta qué punto est>is pr.7imos los unos de los otros0 4ac6elle llora, Su:anne llora, Alert transpira, yo mismo transpiro y 3osotros llor>is y sac>is pa5uelos Nos di/imos0 es interesante, 6e aqu- una familia que el destino no la trat. ien ; es como si 3osotros estu3ieseis rea&rupados as-, todos *A MAD4E0 S- M E0 Para apoyarse en al&una parte *A MAD4E0 ;o 6ac-a el ien porque as- s.lido mi C.mo se dice cuando se solidifica, se 6ace al&o s.lido, yo consolido la persona, y no sé si eso se 6a 3olado como uno que me 6a arrancado al&o, me 6a quitado esta rama de un >rol, 6a arrancado M E0 Consolid>is qué A quién *A MAD4E0 Mi familia 56
M E0 Se lo siente tamién Esta familia fue una persona De la &ran dificultad, por e/emplo *A MAD4E0 in"errumpi%ndome9 No se senta nada como mal. M E0 S- *A MAD4E0 Nin&n mal ;o dec-a siempre0 eso no es nada, 3a a pasar Hodo Pero no arrancar as- al&o M E0 8aéis dic6o una palara en un momento dado, 6aéis dic6o a 4ac6elle una palara en >rae 'ué era LA MAD!: Nko!n k-ara. M E0 Esto me sorprende, esta 6istoria de mam> que dice *4oun 4para, >!e yo sea t! ka-ara. En esta "amilia, tengo la im-resión de >!e cada !no se con&ierte en ka-ara -ara los otros. Es como si cada !no de entre &osotros se s!mergiera, -!esto >!e ;a)la de ag!a -ara ser el -rimero >!e toma so)re s el mal, -ara >!e s! "amilia -!eda res-irar. Entonces L>!/ tenemos enemos !na mam >!e dice: 7Para m, nada c!enta con tal de >!e sean "elices9, tenemos a S!0anne >!e =a!n si dice: 7>!iero -artir9= llora c!ando (ac;elle llora, tenemos a (ac;elle >!e es desde ;ace aBos !na ka-ara constante, y est Al)ert: tra)a*a, trae el dinero, ay!da a s!s ;ermanas, se arregla -ara >!e todo "!ncione, y es tam)i/n s! manera de sacri"icarse. *A MAD4E0 S- M E0 Cuando los 3eo as- me di/o0 6e aqu- una familia de personas que 6an sufrido muc6o y que, a su manera, cada uno por su parte, trata de sacrificarse para que los otros respiren *A MAD4E0 S- M E0 ; me di&o que, por el momento, es demasiado pronto para 6acer lo que sea, porque en primer lu&ar es necesario respetar c.mo, 3osotros, 3osotros os 6aéis arre&lado para mantener Lcomo dec-sL esta familia *A MAD4E0 S- consolidar M E0 S-, y por el momento, quisiera simplemente decir 3uestros sufrimientos, 4ac6elle, 3uestras dificultades, Su:anne lo que lle3>is Se5ora, como peso, y usted tamién, Alert 'uiero
5
deciros que, para nosotros, 6aéis ensayado a 3uestra manera ser cada uno el sal3ador de la familia ; c.mo se puede sal3ar a la propia familia No 6ay distancia con ella para poder 6acer el traa/o que 6acemos, por e/emplo, que es un traa/o en el cual podemos tratar de ayudar al mismo tiempo que &uardamos una cierta distancia para no partir nosotros mismos en este proceso *A MAD4E0 S-, es eso M E0 Creo que lo que os pesa muc6o, es estar de tal manera pr.7imos los unos de los otros A tal punto que, cuando una (Su;anne) se -one el dedo en la )oca, s! ;ermana comien0a a roerse las !Bas al mismo tiem-o. omo si ;!)iera 7!na s!erte de !na -ersona9, como decs. *A MAD4E0 S-, s-, creo M E0 8aéis dic6o, Jque yo sea tu kaparaR a 3uestra 6i/a 4ac6elle, pero cada uno de 3osotros 6ace eso ; di&o c.mo ayudaros a continuar am>ndoos sin estar oli&ado a ser la kapara de los otros *a kapara se 6ace comer al fin del JkipurR, los c6iquillos lle3an a pasear la kapara a la sina&o&a comiéndose el ala o el muslo de pollo, puede terminarse as- Durante esa sesi.n, traa/é en dos ni3eles distintos En primer lu&ar, amplificando la sin&ularidad Ja&uaK, puse en mo3imiento toda una serle de elementos que se situaan al ni3el de los ensamla/es de sin&ularidades0 relaci.n del terapeuta y de la familia con una cultura comn, relaci.n con la !e da sentido, y, -or otra, tener adems !na &ida -ro-ia. En este e/emplo, es posile que los elementos descritos como la transpiraci.n del terapeuta, los llantos de los miemros de la familia, los mo3imientos no 3erales, la disposici.n de los lu&ares, etc, ten&an un sentido y una funci.n Pero pueden por otra parte ser sin&ularidades 6etero&éneas cuyos ensamla/es, amplific>ndose podr>n d mismo modo de loquear el sistema que le permita un camio cualitati3o En términos de termodin>mica de no)equllliio, mi Inter3enci.n no consisti. ni en interpretar ni en 6acer tomar conciencia0 intenté, m>s ien, insertarme en un sistema a fin de ale/arlo de su equilirio y de permitir a las fluctuaciones amplificarse, 6asta que camie el ré&imen de funcionamiento del sistema, a tra3és de una ifurcaci.n o no *as fluctuaciones que se amplificaron no estaan constituidas por un solo elemento, sino por 3arios elementos acoplados, que no se remit-an a aspectos puramente indi3iduales0 /unto a particularidades &enéticas, iol.&icas u otras, los elementos li&ados a nosotros, pero no reductiles a nosotros, tales como los elementos mass
medi5"icos, c!lt!rales o sociales, -!eden -artici-ar en estos ensam)la*es. En se&undo lu&ar, quise reencuadrar positi3amente los s-ntomas de las dos 6i/as presentes durante la sesi.n sin disociarlas de los otros miemros de la familia Esperaa crear una situaci.n que camiara las leyes de e3oluci.n del sistema, pues, desde entonces, el miemro del sistema familiar que 3e-a al otro comportarse de manera sintom>tica ya no pod-a reaccionar perciiendo al otro como enfermo0 lo perciir-a como al&uien que se sacrificaa por él, lo que de-a fa3orecer una reacci.n diferente de su parte F tamién intenté crear un marco terapéutico en el cual los terapeutas pudieran ocupar un lu&ar diferente, estando enteramente aliados a la familia Cinco semanas m>s tarde, la familia 3ol3i. para una se&unda y ltima consulta de la cual participé, de acuerdo con los terapeutas Bn se&undo 6i/o, toda3-a estudiante, se 6a-a marc6ado 4ac6elle estaa ien 3estida, maquillada, muy diferente0 ya no ten-a el aspecto perdido, como la 3e: anterior *a madre di/o0 J*a peque5a est> me/or, &racias a Dios, que eso continué as- solamente Puedo a&radecer al uen Dios que no llore m>s como antes, antes lan:aa &ritosK Antes de concluir este cap-tulo, quisiera insistir sore un punto particular al cual atriuyo una &ran importancia *o que me parece esencial son los ensamla/es de 6ec6o entre ciertos elementos li&ados al sistema terapéutico, pero no reduciles a él *o que decide el camio o el no)camio, es el de3enir de estos ensamla/es 'uedar>n aquietados, o ser>n amplificados Modificar>n las re&las de e3oluci.n del sistema *o determinante ya no es, por lo tanto, el indi3iduo o un sistema constituido por indi3iduos en interacci.n, sino los ensamla/es en e3oluci.n de elementos de toda naturale:a Estos elementos no son reduclles a los componentes aparentes del sistema en cuesti.n ni, tampoco, a indi3iduos iol.&icamente determinados Este punto se 3incula directamente con las posiciones de 2éli7 +uattari cuando afirma que Jla noci.n de unidad indi3idual ( parece ser una apariencia en&a5osa Pretender centrar a partir de ella un sistema de interacci.n entre comportamientos pro3enientes de 6ec6o de componentes 6etero&éneos, no locall) :ales de modo un-3oco en una persona UV parece ilusorioR U%V Por ciertos aspectos, esta posici.n se acerca i&ualmente a las oser3aciones de rol o el de un cie&o que e7plora el espacio con ayuda de su ast.n, e insiste sore la importancia del estudio de los circuitos totales UTF 9arela plantea un prolema similar cuando recuerda que Jel que conoce no es el indi3iduo iol.&icoR, y nota que Jla autonom-a del sistema iol.&ico
y social en el que estamos 3a m5s all5 de n!estro crneo9. H$1 Al pasar de una 3isi.n del mundo centrada sore el indi3iduo a una 3isi.n sistémica, 6emos dado un paso cualitati3amente importante Pero en qué medida no conser3amos al indi3iduo en el centro del sistema En qué medida no continuamos pen sando en los sistemas 6umanos como en sistemas de indi3iduos en interacci.n Mi prop.sito no es reempla:ar las unidades que ser-an los indi3iduos por otras unidades, sino m>s ien interesarme en las intercone7iones, en los Ja&enciamientosR como dir-a +uattari, de elementos de toda naturale:a que pueden 3ariar de un momento a otro UTF 'ui:> la noci.n de ensamla/e podr-a re3elarse particularmente til en este conte7to0 ensamla/es constituidos tanto por elementos &enéticos y iol.&icos como por identificaciones, fantasmas o elementos mass medi5"icos, c!lt!rales y sociales? estos ensam)la*es com-!estos -or los elementos ms di&ersos nos constit!irn sin ser -or eso red!cl)les a nosotros mismos? y seria gracias a las intersecciones de esos ensam)la*es >!e -odra "ormarse lo >!e denominamos 7sistemas ;!manos9 =sistemas >!e de-enderan ms de intersecciones entre di"erentes ensam)la*es >!e de indi&id!os en interacción. *a comple/idad del tipo de an>lisis que propon&o a partir de estos interro&antes no me parece constituir un ost>culo insuperale Me parece, inclusi3e, que este an>lisis permite prose&uir el estudio de los sistemas de los cuales participamos pens>ndolos en otros términos que aquellos, demasiado e7clusi3os, de sentido o de funci.n
4eferencias ilio&r>ficas H1 * 3on n". J. ?en. Sys"ems, &ol. 2, 1#5, -g. 1@$.
H#Aramo3it: H# Aramo3it: y otros0 KCyemetics of cyemeticsK, @. A. '. Bepor", nW $.$3, Ciological Ciological om-!ter a)oratory, a)oratory, %ni&ersity %ni&ersity o" Illinois, Illinois, %r)ana, 1#', -g. $': citado -or (. . oTe y . &on oerster. op. ci". H1+M H1+M Elkalm0 J9on der 8om.ostase :u offenen SystemenK, en ( Duss)3on erdt y 4 elter)Enderlin compsF, er CamDienmensch, S!ttgart, Glett@otta, 1#3+: 7Non@e 7Non@e>!i >!ili) li)re, re, ;asard ;asard et c;ange c;angemen mentt en t;/rat;/ra-le le "amili "amiliale aleK, K, en Aahiers cri" cri"i! i!ue ues s de "h%r "h%rap apie ie e" depr depra" a"i! i!ue ues s de r% r% seau seau# # DPars DPars,, Edltio Edltions ns %nl& %nl&er ersi sita taire ires s,, nW '@5, '@5, 1#32 1#32,, -g. -g. 55@5 55@5#? #? 7es 7es lois lois g/n/ g/n/ra rale les s a!4 a!4 sing!larit/ sing!larit/s9, s9, en Aahiers cri"i!ues de "h%rapie e" de pra"i!ues de r%seau#, DPars, Edltions %nl&ersitaires, nW , 1#3$, -g. 111)! H11 P Dell Dell y 8 +oolis +oolis6i 6ian an00 JOrd JOrder er t6rou& t6rou&6 6 fluctu fluctuat ation ion00 an e3olu e3oluti tio) o) nary paradi&m for 6uman systemsR, presentado en el Encuentro Cient-fico Anual del A [ 4ice Institute, 8ouston He7asF, !%$% U !V E 2i3a:, 4 2i3a:y * [aufmann0 JAccord, con-lit e sympt.me0 iin puradi&me é3olutionnls é3olutionnlsteK teK en Aahiers Aahiers cri"i!ues de "h%rapie "h%rapie famlllale $" de pra"i!ues pra"i!ues de E r%seau#, n r%seau#, n . op. ci"., -g. ci"., -g. #1@1+#. !T !T + Nicoll Nicolls0 s0 H6ermo H6ermodyn dynami amique que de lXé3ol lXé3olutl utlonK onK,, en 2ondaB 2ondaBon on *u) i lu De he *a"ional +cademy of Sciences, %SA, Sciences, %SA, ', 1#, -g. 15'$@15'. H2+ M Elkalm, A +oldeter y E +oldeter0 JAnalyse des transl) Bons de compor comportem tement ent dans un systéme systéme familla famillall en terme terme de ifurc ifurca) a) BonsK, BonsK, en Aahiers cri"i!ues de "h%rapie familiale e" de pra"i!ues de r%se au# DPars, au# DPars, amma, nW $, 1#3+. U! U! V ! Pri& Pri&o& o&in ine0 e0 J* J* ordr ordre e par par fluc fluctu tuat atio ions ns et le syst systém éme e soci social alK, K, en A. lc;eneroT lc;eneroTic0, ic0, . Perro!4 Perro!4 y . adore adore Dcom-s., Dcom-s., ' >d%e de r%gula r%gula tons dans les sciences, Pars, sciences, Pars, Maloine, 1#. H22 + nc '8>ncons onscie cien" n" mach"n mach"ni!u i!ue. e. Fssais Fssais de schi;o schi;o analyse, se, Par Pars, s, (ec; (ec;er erc; c;es es,, 1#6#: 1#6#: &/as &/ase e tam) tam)i/ i/n n Kes Kes /ner /nerg/ g/tl tl>! >!es es s/miotl>!es s/miotl>!esK, K, inter&ención inter&ención de . !attari en el colo>!io colo>!io de erisy so)re . rigogine, rigogine, ine)ra. Palatino,
1#33. H2# I Pri&o&ine, I Sten&ers, ()* Deneuour&, 2 +uattari y M Elkalm0 JOu3e JOu3ertu rtures resKK en Aahiers cri"i!ues de "h%rapie familiale e" de pra"i!ues de r%seau#, n@ r%seau#, n@ $, o-. ci"., -g. ci"., -g. @1. H$+ + !e..., o-. cit.
Autorreferencia y psicoterapia familiar Del mapa al mapa 1. O/eti3idad y parado/a autonreferencial Por re&la re&la &ener &eneral, al, el oser3 oser3ado adorr que desea desea estudi estudiar ar un sistema sistema se considera que comien:a por emitir 6ip.tesis sore el modo en que este sistema funciona, lue&o las 3erifica para construir el mapa m>s adecuado posile del territorio que est> por e7plorar Se estima tradicionalmente que el oser3ador dee situarse apartado del sistema que estudia a fin de preser3ar la Jo/eti3idadR de su oser3aci.n? de otra manera, sus propiedades perso) nales correr-an el ries&o de anular la descripci.n de sus oser3aciones Este enfoque insiste por lo tanto en la necesidad, para aquel que tra:a un mapa, de no incluirse en el mapa del territorio que diu/a a/o pena de naufra naufra&a &arr en una parad parado/a o/a autorr autorrefe eferen rencia cial l 9ol3a 9ol3amos mos a pensa pensarr en la declaraci.n J;o mientoR0 si di&o la 3erdad soy un mentiroso, pero si miento, di&o di&o la 3erd 3erdad ad Como Como ad3ie ad3iert rte e 8ein 8ein:: 3on 3on 2oer 2oerst ster er IIV IIV al crit critic icar ar esta esta conc concep epci ci.n .n de la o/e o/eti ti3i 3ida dad, d, una una cien cienci cia a que que tien tiene e nece necesi sida dad d de fundamentos s.lidos quiere tener que 3er con elementos que son falsos o 3erdaderos pero se acomoda muy mal a toda situaci.n parad./ica Por una suerte de acuerdo impl-cito, nos comportamos como si e7istiera en el e7te e7teri rior or de noso nosotr tros os mism mismos os un mund mundo o del del cual cual podr podr-a -amo moss tranquilamente pintar los contornos, un territorio del que podr-amos dise5ar el mapa sin inquietud 'uisiera presentar a6ora un e/emplo que mostrar> claramente que esta posici.n es insostenile tanto en la pr>ctica de la psicoterapia como en la super3isi.n? se trata de una super3isi.n
55)
efectuada en taller, en ocasi.n de un con&reso que yo 6a-a or&a) ni:ado sore las psicoterapias de pare/a Bna de las participantes, terapeuta ella misma, me descrii. un ciclo en el cual estaan comprendidos los miemros de una pare/a0 la esposa se que/aa de ser constantemente Jin3adidaK por su c.nyu&e, como lo era por sus padres0 el marido, por su parte, afirmaa que le costaa muc6o soportar su relaci.n Mientras escuc6aa a la terapeuta e7ponerme la situaci.n, descur- que su modo de e7presarse me conduc-a a inter3enir cada 3e: m>s a fin de conducirla a aclarar lo que estaa por descriir Me pareci. que, cada 3e: que la interrump-a, esta participante me alentaa por si&nos no 3erales Lesencialmente acerc>ndose a m- L a prose&uir mis interrupciones ;o amplifiqué entonces este proceso 6asta el momento en que me declar. que, en ese conte7to, era 6alar lo que contaa para ella Limportando poco lo que di/era Me pareci. entonces que se 6a-a instalado una suerte de proceso circular0 mis pre&untas imped-an a la terapeuta e7presarse m>s claramente, a pesar de que al e7presarse confusamente y al acercarse a mi durante mis interrupciones, me in3itaa a continuar Jin3adiéndolaR0 comen:aan, pues, a manifestarse intersecciones entre el funcionamiento de esta pare/a de pacientes y el del sistema super3isorterapeuta, especialmente a tra3és de esta Jin3asi.nK de la mu/er por el 6omre *ue&o la terapeuta me inform. que otro 6omre 6a-a re&alado a la esposa un frasco de perfume0 el marido, di/o, se dio cuenta y arro/. el presente Pre&unté si la paciente 6a-a ocultado este re&alo a su c.nyu&e, a lo que la terapeuta me contest. por la ne&ati3a Al&unos instantes m>s tarde, sin emar&o, se co) rrl&i., e7plic>ndome que ese frasco de perfume 6a-a sido efecti3amente disimulado por la esposa y que el marido no lo 6a-a descuierto sino meses después, re&istrando en la c.moda? y a&re&. que me 6a-a disimulado este acontecimiento porque yo la interrump-a constantemente De nue3o, los funcionamientos de las pare/as maridomu/ery terapeutasuper3isor de/aan 3er una intersecci.n0 la terapeuta escond-a cosas al super3isor como la esposa a su marido, mientras que el super3isor, por su lado, creaa un conte7to que fa3orec-a este comportamiento Es raro que una super3isi.n permita oser3ar una situaci.n tan e7trema, que atesti&ua tamién claramente que lo que descriimos no puede ser separado de lo que 3i3imos Pero, en &rados di3ersos, nuestra percepci.n de lo que pasa en los sistemas a los cuales pertenecemos es lndisociale de los di3ersos ensamla/es en los cuales estamos tomados0 nuestra propia construcci.n de lo real depende de la intersecci.n de esos ensamla/es
Este aspecto autorreferenclal me impuls. a interesarme en los traa/os de los i.lo&os c6ilenos 8umerto Maturana y 2rancisco 9arela, as- como en los del ciernético norteamericano de ori&en austr-aco 8ein: 3on 2oerster
2. Del estudio de la 3isi.n coloreadaIII al cierre del sistema ner3ioso Cuando, en !%@% U! y !%Y, UTV 8umerto Maturana firm. /unto a *et3in sus primeros art-culos sore la 3isi.n en la rana, estos dos autores no pon-an en duda la e7istencia de una realidad o/eti3a, independiente del animal0 y a partir de las mismas premisas Maturana empe:. a estudiar en !%Y! la 3isi.n en las palomas, en colaoraci.n con S 2renk *os prolemas li&ados a este enfoque no se plantearon sino a partir de !%YW, cuando a Maturana y 2renk se les uni. + Brie y los tres estudiaron la 3isi.n coloreada Maturana, Brie y 2renk no lle&aan a correlacionar la acti3idad de la retina con los est-mulos f-sicos e7teriores al or&anismo? no lo&raan, en ciertas condiciones, encontrar una correspondencia entre los flu/os de lu: de diferentes lon&itudes de onda y los colores asociados a los o/etos por el su/eto de la e7periencia Antes de descriir c.mo esos autores intentaron resol3er ese prolema y las consecuencias de esta tentati3a sore sus traa/os ulteriores, quisiera citar los e7tractos de una carta que me diri&i. 8ein: 3on 2oerster con el fin de e7ponerme la importancia de esta etapa para Maturana Es importante estalecer una distinci.n entre la fenomenolo&-a de la f-sica de la radiaci.n electroma&nética y nuestra e7periencia de los colores para comprender me/or las ideas de 8umerto Maturana *a naturale:a de la radiaci.n electroma&nética, que 3a desde los rayos ` a las ondas de radio pasando por el campo de la lu: 3isile, es ien conocida *as lon&itudes de onda en el espectro 3isile pueden ser medidas por interfer.metros y muc6os otros mediosF Ellas curen L para emplear una met>fora musicalL m>s all> de la \octa3a, un espectro que 3a desde el ,W al , de micr.n *a distinci.n entre lan lon&itudes de onda del espectro electro ma&nético y nuestra percepci.n de los diferentes maBces de color es déil en ciertas condiciones de e7periencias cl>sicas Homemos el e/emplo de la lu: lanca que, pasando a tra3és de un prisma, es di3idida en sus componentes espectrales Midamos las lon&itudes de onda en diferentes lu&ares que per cilmos como presentando diferentes Bntes del ro/o al naran/a, al amarillo, etc, al 3ioletaF *a conqlusi.n que sacamos es que los colores as- perciidos est>n
en correspondencia e7acta con las lon&itudes de onda de la ra diaci.n electroma&nética Cuando sore3ienen cominaciones de estas lon&itudes de onda, el 6ec6o de que los tres tipos de células receptoras de la retina llamadas conos sean sensiles a tres re&lones diferentes del espec tro, permite de nue3o, por una superposici.n de la acti3idad relatl 3a a estas células, III dar cuenta de la aparente correspondencia iunl) 3oca entre e7periencia y radiaci.n Sin emar&o, (o6ann olf&an& 3on +oet6e en su Carbenlehre. y m!c;os otros In&estigadores des-!/s de /l, ;a)lan ya demostrado >!e la e4-eriencia >!e se tiene del color en !n -!nto del cam-o &is!al il!minado -or !na distri)!ción es-ectral in&aria)le -!ede cam)iar radicalmente c!ando las condiciones es-ectrales reinantes son modi"icadas. En otros t/rminos, la e4-eriencia del color es !n "enómeno >!e no es local, sino glo)al. Darse cuenta de este 6ec6o crea un prolema Insuperale para los fisi.lo&os e7perimentales que desean estalecer Jo/eti3amenteK las relaciones entre los est-mulos y las sensaciones, pues no pueden medir con la ayuda de micropipetas la acti3idad &loal de la retina0 no pueden sino medir las respuestas a los est-mulos e7ternos de neuronas aisladas o de 6aces de Aras 3ecinas El nico que puede dar cuenta de una manera confiale de -o que 3e en un sitio dado, es, naturalmente, el su/eto de la e7perlen c-a Sin emar&o, no saremos nunca lo que el su/eto e7perimenta a menos que esta e7periencia se les descria a los otros &racias aQ l])r &ua/e, es decir Jo/eti3adaK Es all- que sur&e el concepto de Maturana sore la emer&encia de los colores en el dominio lin&istico
Al 6aer tenido la idea de poner en relaci.n la acti3idad de la retina con la e7periencia su/eti3a de los colores, Maturana y sus cole&as descurieron que era posile estalecer correlaciones no entre el 6ec6o de nomrar los colores y lon&itudes de onda, !WF sino entre esta nominaci.n y los estados de acti3idad neuronal, que no est>n determinados por las caracter-sticas del a&ente perturador, sino por la estructura indi3idual de cada persona
Este descurimiento los condu/o a conceir el sistema ner3ioso como un circuito cerrado0 la acti3idad del sistema ner3ioso estaa determinada por el sistema ner3ioso mismo, y el mundo e7terior no desempe5aa sino un rol desencadenante con respecto a la acti3idad de un sistema que oedec-a a sus propios par>metros internos *os resultados de esta in3esti&aci.n, que permiti. a sus autores mostrar c.mo se &enera el con/unto del espacio coloreado del oser3ador, fueron pulicados en !%Y en un art-culo que tu3o en ese momento relati3amente poco eco U@! Maturana y sus colaoradores surayaan que consideramos impl-citamente que todas la situaciones en las cuales 6acemos la misma e7periencia crom>tica tienen en comn un elemento in3ariale0 su&ieren que este elemento in3ariale podr-a no pertenecer a un mundo f-sico separado de nosotros, sino ser creado por la relaci.n entre el o/o y su entorno0 en tanto que como tal, este elemento no ser-a Jpor lo tanto independiente de la or&ani:aci.n anat.mica y funcional de la retinaR UY! Su aporte fundamental fue el de estalecer que era necesario conceir un cierre del sistema ner3ioso para comprender su fun) cionamiento Desde entonces, la percepci.n no era m>s el proceso de captar una realidad e7terior, sino m>s ien el de especificar alluna0 y la distinci.n entre percepci.n e ilusi.n se 3ol3-a imposile a partir del momento en que se consideraa el sistema ner3ioso como una red cerrada de neuronas en interrelaci.n 2ueron estos traa/os los que condu/eron ulteriormente a Maturana a interesarse en los prolemas del conocimiento a partir de una posici.n iol.&ica
$. Mundo e7terior y estructura del sistema ner3ioso 2rancisco 9arela se apoya i&ualmente en un e/emplo li&ado a la 3isi.n de los colores para criticar la afirmaci.n se&n la cual la e7periencia del color deer-a estar asociada a una propiedad local del o/eto coloreado U$! Propone la e7periencia si&uiente Ima&inemos dos proyectores dispuestos como en la Jig. E, !no e>!i-ado de !n "iltro ro*o y otro sin "iltro. Si -onemos la ma@ no adelante del -royector des-ro&isto de "iltro, a-arecer !na Imagen >!e es-er)amos: &eremos la som)ra ro*a de n!estra mano destacarse so)re !n "ondo rosa: -!es no ;acemos sino oc!ltar la l!0 )lanca del -royector sin "iltro. 4ecomencemos lue&o la e7periencia con el proyector pro3isto del filtro ro/o0 ocultaremos as- la lu: ro/a, y esperaremos esta 3e: 3er una somra de mano lanquecina recortarse sore un fondo rosa? a6ora ien, otendremos una somra a:ul)3erde muy neta Sin
emar&o, el espectrofot.metro indicar> que el flu/o luminoso de la re&i.n a:ul)3erde es lanco por su composici.n espectral 9erde
4o/o
Esta e7periencia efectuada por primera 3e: en !Y$ por Ot) to 3on +uerickeF pone de relie3e el papel de los ordes o de las discontinuidades al ni3el de la acti3idad de las neuronas de la re) tina as- como al ni3el de sus intercone7iones 9arela saca la conclusi.n de que la e7periencia de un color no puede ser com) prendida sin tener en cuenta el con/unto del campo 3isual? U%V el JcolorK, dic6o de otra manera, no e7istir-a en el e7terior del o) ser3ador, sino que se re3elar-a a tra3és de la co6erencia Interna de la acti3idad de su sistema ner3ioso Otro e/emplo me parece particularmente esclarecedor0 es citado por Maturana en su introducci.n a la 3ersi.n in&lesa de su ora 5!uinas y seres $i$os, corredactada con Qarela. D1+1 Ma@ t!rana, en e"ecto, destaca en esta introd!cción >!e antes >!e %ri)e, renk y /l mismo est!diaran la &isión coloreada, otros tra)a*os consagrados en los aBos 1#'+ a la rotación del o*o de la salamandra o de la rana de*a)an -resagiar s!
re-resentación del sistema ner&ioso como !na red cerrada de ne!ronas en interacción. De qué se trata 4etomemos esta e7periencia, tal como Ma) turana U!!V y 9arela U!V la descrien Homemos una rana a la cual se le dio 3uelta e7perimentalmente un o/o a !# c!ando era !n renac!a*o? si se m!estra !na -resa a la rana ad!lta ta-ando el o*o o-erado, el animal en"ilar s! leng!a so)re la -resa y se agitar. omemos a;ora otra -resa, y ta-emos el o*o normal? la rana en"ilar s! leng!a en otra dirección, y el ng!lo de des&iación de la leng!a con res-ecto a la -resa ser ig!al al ng!lo de rotación del o*o o-erado? la leng!a del animal, en este caso, se des&iar e4actamente 13+Y. Esta o-eración ;a)r creado, -!es, !na 7rotación9 del m!ndo de la rana: se com-r!e)a >!e, -ara el animal, no ;ay ni alto ni )a*o, ni delante ni atrs e4teriores a /l: lo >!e c!enta, es la correlación interna entre la -arte de la retina >!e reci)e la -ert!r)ación y el mo&i@ miento de la leng!a. El dominio de la percepci.n 3isual permiti. a Maturana y 9arela 3ol3er a poner en cuesti.n nuestra concepci.n de la percepci.n como una operaci.n que no 6ar-a sino remitir Ja lo lar&o de una l-nea telef.nicaR U!TV mensa/es al cerero 9arela not., por e/emplo, que por cada fira ner3iosa pro3eniente de una célula &an&lionar de la retina y que entra en la corte:a a tra3és del cuerpo articulado lateral del t>lamo, otras cien firas lle&an a esta misma :ona a partir de las :onas corticales y sucorticales U!WV Adem>s, ese cuerpo articulado lateral cl>sicamente descrito como un Jretransmisor 6acia la corte:aR recie, por cada fira salida de la retina, por lo menos otras cinco firas de or-&enes di3ersos Lsiendo una de las estructuras que afecta el cuerpo articulado lateral, por otra parte, la corte:a 3isual misma U!@V Se si&ue que el estado de cuerpo articulado lateral no depende solamente de la acti3idad de la retina, sino tamién de la relaci.n mutua entre las cone7iones que emanan de diferentes :onas del cerero Pero se plantea un prolema0 si aandonamos la Idea de que el sistema ner&ioso ca-tara In"ormaciones de n!estro medio -ara ela)orar re-resentaciones del m!ndo sin las c!ales no -odramos reaccionar, Lno na!"ragamos en la &isión soli-sista de !n !ni&erso donde no ;a)ra otra realidad >!e la de n!estra -ro-ia Interioridad Maturana y 9arela proponen na3e&ar entre Jel Escila de un mundo de la representaci.n y el Caridis del solipsismoR !!YF Nos In3itan a considerar el or&anismo a la 3e: como un sistema dotado de su propia l.&ica interna y como una unidad de interacciones mltiples ; 9arela cita a este respecto un e/emplo susceptile de
ofrecer una respuesta pra&m>tica a este dilema U!$V *a percepci.n 3isual, escrie, no puede e7istir sin interacci.n con la lu: la cual dee estar constituida por lon&itudes de onda que 3an del ro/o al 3ioleta Pero, en el interior de estos l-mites, los procesos que la lu: desencadena al perturar los receptores 3isuales pueden corresponder a toda suerte de posiilidades Para cada or&anismo, lo determinante ser> la estructura del sistema ner3ioso y en consecuencia la 6istoria del or&anismo *a discriminaci.n de los colores no e7iste sin interacci.n con la lu:, pero el color no reside por eso en las lon&itudes de onda de los flu/os luminosos En los procesos como aquellos que permiten la 3isi.n, lo que importa no son, por lo tanto, solamente las perturaciones que actan sore el sistema ner3ioso, sino la manera por la cual éste reacciona a esas perturaciones? su estructura se modificar> para compensar esos camios manteniendo su inte&ridad en su medio El sistema ner3ioso mantiene as- ciertas relaciones in3ariales entre sus componentes frente a las perturaciones que crean tanto su din>mica interna como sus interacciones con el medio
'. Al&unas definiciones Necesito a6ora presentar re3emente ciertos conceptos ela) orados por 8 Maturana y 2 9arela0 especialmente su concepto de o/eti3idad Jentre paréntesisK y su distinci.n entre la or&ani:aci.n y la estructura, as- como su definici.n de los sistemas au)
topoiéticos, de la autonom-a, del acoplamiento estructural, de la onto&enia y de la adaptaci.n En un articulo de !%T titulado K6at lt is to seeK, U!! 8um) erto Maturana pasa re3ista a las condiciones necesarias de una e7plicaci.n cient-fica Estas son0 a *a descripci.n del fen.meno a e7plicar Esto implica una especificaci.n de ese fen.meno por la enumeraci.n de las condi) ciones que el oser3ador dee satisfacer en su dominio de e7pe) riencia a fin de poder oser3arlo0 y esta descripci.n dee ser aceptale para el con/unto de oser3adores )*a proposici.n de una 6ip.tesis e7plicati3a Esta 6ip.tesis dee permitir la emer&encia de un sistema conceptual capa: de en&endrar el fen.meno a e7plicar en el dominio de e7periencia del oser3ador c A partir de la 6ip.tesis e7plicati3a, una deducci.n que per) mita la aparici.n de otro fen.meno y la descripci.n de las condi) ciones que permitir-an oser3arlo d *a oser3aci.n del fen.meno deducido por un oser3ador que satisfa&a las condiciones pedidas en su dominio de e7per iencia Maturana a&re&a que el e7amen de estos criterios de 3alide: muestra en funcionamiento un sistema co6erente que no tiene necesidad de o/eti3idad para funcionar *o necesario, no es un mundo de o/etos, sino una comunidad de oser3adores cuyas declaraciones respeten las condiciones e7puestas m>s arria0 el 6ec6o de que una e7plicaci.n cient-fica pueda recortar nuestra percepci.n del mundo no permite deducir la o/eti3idad de un uni3erso separado del oser3ador Esta es la ra:.n por la cual Maturana prefiere no 6alar sino de una o/eti3idad Jentre paréntesisK Para él el acto >sico que cumplimos en tanto que oser3adores es el acto de dis"inci&n: -or esta o-eración, es-eci"icamos >!e !na !nidad es distinta de s! conte4to y a"irmamos as s! se-ara)ilidad? esta)lecemos !n dominio de acciones coordenadas creando distinciones, y generamos as descri-ciones y descri-ciones de descri-ciones. o >!e e4iste, e4iste en las dis"inciones >!e ;acemos: >!ien es-eci"ica lo >!e se esta)lece a tra&/s de la o-eración de distinción >!e /l e"ect8a, es el o)ser&ador. F tanto el o)ser&ador, c!anto los o)*etos descritos s!rgen en el leng!a*e >!e esta)lece las distinciones: 7a materia, meta"óricamente, es creada -or el es-rit! Del modo de e4istencia del o)ser&ador en el dominio del disc!rso, y el es-rit! es la creación de la materia >!e /l creaK. H1#
En tanto que oser3adores, por otra parte, distin&uimos dos tipos de unidades0 las unidades simples y las compuestas0 las primeras son unidades en las cuales no distin&uimos componentes0 las se&undas, unidades sore las cuales podemos continuar efectuando otras operaciones de distinci.n ; las propiedades de una estructura compuesta dependen de su or&ani:aci.n y de su es"ruc"ura. Mat!rana escri)e, en e"ecto: J*a or&ani:aci.n de un sistema se define por las relaciones entre los componentes que le dan su identidad de clase silla, autom.3il, f>rica de refri&eradores, ser 3i3o, etcF KEl modo particular se&n el cual se reali:a la or&ani:aci.n de un sistema dado clase de componentes y relaciones concretas que se estalecen entre ellasF constituye su estructura *a or&ani:aci.n de un sistema es necesariamente in3ariale, mientras que su estructura puede camiar *a or&ani:aci.n que define un sistema como ser 3i3o es la or&ani:aci.n autopoiéticaR F Maturana precisa que el término Jor&ani:aci.nK 3iene de la palara &rie&an organon, >!e signi"ica instr!mento: este &oca)lo ;ace re"erencia a la -artici-ación instr!mental de los com-onentes constit!ti&os de la !nidad, remitiendo as a las relaciones entre los com-onentes >!e de"inen el sistema como !na !nidad. A -esar de >!e el t/rmino 7estr!ct!raK &iene del &er)o latino s"rue re, >!e tiene el sentido de constr!ir: se a-lica a los com-onentes concretos y a las relaciones e"ecti&as >!e esos com-onentes de)en mantener -ara constit!ir esta !nidad. Entendida as, la organi0ación de !n sistema com-!esto lo constit!ir en tanto >!e !nidad y determinar s!s -ro-iedades, es-eci"icando !n dominio en c!yo interior -odr interact!ar como !n todo. a estr!ct!ra, -or s! -arte, determinar el es-acio en el c!al e4istir y -odr ser -ert!r)ada, -ero no s!s -ro-iedades en tanto >!e !nidad: H21 seg8n Mat!rana y Qarela, H22 esta estr!ct!ra -odr tomar c!atro "ormas, corres-ondiendo a c!atro dominios -osi)les: = el dominio de los camios de estado0 la estructura camiar> sin que su or&ani:aci.n se modifique, y mantendr> su identidad de clase = el dominio de los camios destructi3os0 la unidad perder> su or&ani:aci.n y desaparecer> como unidad de una cierta clase = el dominio de las perturaciones0 es el dominio de las inte) racciones que incitan al camio de estado = el dominio de las interacciones destructi3as0 es el dominio de las perturaciones que conducen a un camio destructi3o A partir de las palaras &rie&as que si&nifican Js-K y JproducirK 55)
estos autores denominaron sis"emas au"opoi%"icos H2$ a los sistemas &i&os >!e consideran como sistemas a!to-rod!ctores >!e generan y es-eci"ican s!s -ro-ias "ronteras. %n sistema a!@ to-oi/tico, notan, tiene !na organi0ación a!to-oi/tica: es !n sistema dinmico cerrado en c!yo seno todos los "enómenos son s!)ordinados a s! a!to-oiesis. Por otra -arte, el cierre au"opoi% "ico es la condición necesaria de la au"onomía de los sistemas a!@ to-oi/ticos: en los sistemas &i&os este cierre ser reali0ado a tra&/s de !n cam)io estr!ct!ral contin!o e"ect!ado en condiciones de intercam)io de materia con el medio? y la a!tonoma, -ara esos mismos sistemas, consistir en mantener s! organi0ación in&aria)le en condiciones de cam)io estr!ct!ral contin!o. H2' Para Maturana, el sistema ner3ioso es una red cerrada de neuronas en interacci.n0 un camio en el estado de acti3idad re) lati3a de al&unos de sus componentes entra5ar> un camio en el estado de acti3idad relati3a de otros componentes? por otra parte, di&a lo que di/ere el oser3ador, que recordar> que e7isten su) perficies sensoriales, la or&ani:aci.n de la red neuronal no cuenta ni con superficies de entrada ni con superficies de salida entre sus elementos Maturana recuerda a este respecto la posici.n de un oser3ador ficticio que se encontrar-a en una sinapsis Este 3er-a el elemento presin>ptico como la superficie efectora y el elemento postsin>ptico como la superficie sensorial, mientras que las moléculas que la rodear-an en el espacio de la sinapsis constituir-an su entorno A6ora ien, el sistema ner3ioso no es sensile a lo que el oser3ador descriir-a como su entorno0 s.lo cuenta para este sistema el flu/o de las relaciones de acti3idad camiantes que lo constituyen @! ; Maturana ilustra este punto con un e/emplo0 ima&inemos, escrie, un a3iador oli&ado por el mal tiempo a pilotear sin 3isiilidad Este a3iador estar-a aislado del mundo e7terior y se contentar-a con manipular los comandos del a3i.n se&n las indicaciones de sus instrumentos de a ordo *o que pasara en el aparato estar-a determinado por la estructura del a3i.n y del piloto, mientras que las perturaciones del medio e7terior ser-an compensadas por los estados din>micos internos del a3i.n 9olar o aterri:ar no si&nificar-an nada para la din>mica interna del a3i.n, aun si el oser3ador e7tra5o tu3iera una Impresi.n enteramente distinta (Y( Bna unidad compuesta cuya estructura puede camiar mientras que su or&ani:aci.n no camia es una unidad pl5s"ica, y las interacciones estr!ct!rales >!e -ermiten >!e la organi0ación >!ede ln&ariada son per"urbaciones. a com-lementaridad estr!ct!ral necesaria entre !n sistema 55)
determinado -or s! estr!ct!ra y s! medio se llama acoplamien"o es"ruc"ural D2 a on"ogenia Dla ;istoria Indi&id!al de !n sistema &i&o es la ;istoria de s!s cam)ios estr!ct!rales y de la -ermanencia de s! organi0ación, en congr!encia con el medio. Por "in, la congr!encia estr!ct!ral entre el ser &i&o y el medio se llama ada-tación. !ando !n ser &i&o conser&a s! ada-tación, conser&a s! organi0ación. H23
5. Comunicaci.n y len&ua/e Se&n Maturana y 9arela, la comunicaci.n no es una trans) misi.n de Informaci.n *a comunicaci&n es !na coordinación de com-ortamientos en !n dominio constit!ido -or aco-lamientos estr!ct!rales. Z2# No ;ay, en e"ecto, in"ormación >!e est/ se-arada de la determinación estr!ct!ral de a>!el >!e ;a)la y de a>!el >!e esc!c;a? !na in"ormación no e4iste en tanto >!e tal? la in"ormación reci)ida se sit8a siem-re en la intersección de a>!el >!e esc!c;a y de lo >!e le es transmitido. *a anécdota si&uiente me parece a este respecto particular) mente re3eladora0 en un art-culo titulado J*a presse clandestlne et le &énocideR, TV Adam 4ayski y Stép6ane Courtois se pre&untaron c.mo era posile que personas por lo dem>s ien informadas 6ayan podido dudar de la realidad de la e7terminaci.n de los/ud-os en !%WT? en respuesta a su pre&unta, citaan estas pocas lineas de 4aymond Aron, entonces en *ondres0 K*as c>maras de &as, el asesinato industrial de seres 6umanos, no, lo confieso, no los ima&iné, y, porque no pod-a Ima&inarlos, no los supeK *os seres 6umanos, estiman Maturana y 9arela, no son se) parales de la trama de acoplamientos estructurales te/idos por el len&ua/e UT!V Para estos dos autores, el lengua/e no "!e In&entado -or !n s!*eto a "in de a-re;ender el m!ndo e4terior. Estamos en el leng!a*e: los seres ;!manos estn sit!ados en el interior de !n aco-lamiento ling[stico m!t!o, en el seno del c!al constr!yen y se reali0an.
6. *a emer&encia del oser3ador
Para 8umerto Maturana de"ermin"smo y pre$isi&n son dos "enómenos -or com-leto distintos. a -re&isi)ilidad de !n sistema no es !n elemento de este sistema? est ligada a la relación e4istente entre el o)ser&ador >!e -re&/ y el sistema. \$2 Asimismo, ein0 &on oerster s!)raya >!e las -ro-iedades >!e se s!-one residen en las cosas se 55)
&eri"ican, de ;ec;o, ms )ien ligadas al o)ser&ador. D$$1 As, la necesidad como el a0ar re"le*an n!estras ca-acidades y n!estras Inca-acidades, y no las de la nat!rale0a. 2rancisco 9arela TWV Insiste, por su parte, sore el rol del o) ser3ador que tra:a distinciones donde me/or le parece0 éstas, como oser3a (uiciosamente, re3elan m>s el lu&ar del oser3ador que la constituci.n intr-nseca del mundo descrito 4ecordando la recomendaci.n de 8ein: 3on 2oerster sore la importancia de incluir al oser3ador en la descripci.n, T@V propone distin&uir la forma imperati3a de refle7i3idad adelantada por 3on 2oerster de lo que llama él mismo la refle7i3idad en&endrada A su modo de 3er, el prolema fundamental no es tanto el de Jincluir al oser3adorR como el de indicar de qué manera este ltimo puede emer&er Al incluir al oser3ador se correr-a el ries&o, en efecto, de que se creyera que e7istir-a independientemente del sistema oser3ado una entidad denominada Joser3adorR? mientras que para 9arela, al contrario, emer&emos en el seno de pr>cticas 6umanas, de formas de Interacci.n 6umanas, a la 3e: lin&isticas y no lin&-sticas, situadas en el tiempo y en el espacio? escrie0 JA la emer&encia de estados co6erentes en la naturale:a Luna cé lula, un sistema ner3iosoL corresponde aqu- la emer&encia de pr>cticas 6umanas co6erentes donde se are un espacio para el nacimiento de un su/eto, que no e7ist-a pre3iamente, fuera de esas pr>cticasR TYV
. Parado/as y autonom-a 9arela es i&ualmente el autor de un art-culo titulado JA cal) culus for self)referenceR, T$V esencial para los terapeutas fami) liares 6aituados a respetar las limitaciones de la teor-a de los tipos l.&icos de 6ite6ead y 4ussell 3éase el cap-tulo IIF Presen ta all ;erramientas matemticas >!e -ermiten a"rontar las sit!aciones a!tonómas a!torre"erenclales, y -recisa:
JPodemos 3er las parado/as cl>sicas tales como las de 4ussellF a/o una nue3a lu:, como un dominio reconocile precisamente por su comportamiento antin.mico En lu&ar de encontrar medios ad 6oc para evitar su aparici.n como en la teor-a de los tipos de 4ussellF, las de/amos aparecer libremente considerando su anomal-a aparente como una de sus caracter-sticas, a saer la autonom-a *a encontramos en tantas de nuestras descripciones que nos parece ftil e3itarlo m>s ien que afrontarlo As-, Epiménldes es un mentiroso porque no es un mentiroso, es decir que la frase de Epiménldes es, en nuestroF c>lculo ensanc6ado, aut.nomo y no an.malo +autonomous not anoma lousr. \$3 55)
3. JActese siempre de manera de multiplicar el nmero de las elecciones posilesR 9on 2oerster empie:a uno de sus art-culos T%F proponiendo la e7periencia si&uiente0
"
]
'i)ura %- DSeg8n &on oerster H'+
Homad este liro en la mano derec6a, cerrad el o/o i:quierdo y fi/ad la estrella *ue&o mo3ed lentamente el liro 6asta que el redondel ne&ro desapare:ca el liro se encontrar> entonces cerca de $+ cm de &!estro o*o, y contin!ad mirando la estrella. A esta distancia, a!n si des-la0is el li)ro ;acia a)a*o, la derec;a o la I0>!ierda, el redondel negro >!edar in&isi)le. Esta ceg!era locali0ada est ligada a la a!sencia de "otorrece-tores Dconos o )astoncitos so)re la -arte de la retina donde se "orma el ner&io ó-tico: c!ando s! imagen se -royecta so)re esta 0ona es-ec"ica de la retina denominada 7-!nto ciegoK, el redondel negro no -!ede ser &isto. 8ein: 3on 2oerster suraya que no 3emos tampoco una manc6a oscura en nuestro campo 3isual0 3er una manc6a de esta naturale:a Implicar-a en efecto que 3emos? a6ora ien, esta ce&ue ra locali:ada no es perciida en asoluto El interés de esta e7periencia no es mostrar que no 3emos, si no que no 3emos que no 3emos, as- como le &usta repetirlo a 3on 2oerster? es l. que denomina un prolema de se&undo &rado Propone, por otra parte, en el dominio de la percepci.n 3isual, reempla:ar el pro3erio americano J3er es creerK por el refr>n de su cosec6a Jcreer es 3erK 9on 2oerster destaca i&ualmente un punto al cual Maturana y 9arela atriuyen una &ran importancia0 recuerda que nuestro sistema ner3ioso cuenta con un centenar de millones de receptores sensoriales y alrededor de die: mil millares de sinapsis lo que le permite concluir que Jsomos por lo tanto cien mil 3eces m>s sensiles a los camios de nuestro entorno interno que a los que pueden inter3enir en nuestro entorno e7ternoR UW!V Emplea el 3ero compu"ar -ara designar toda o-eración >!e trans"orma, 55)
modi"ica, reordena, etc., las entidades "sicas o)ser &adas D7o)*etosK o s!s re-resentaciones D7sm)olosK. D'2 Para /l la a!to-oiesis es la organi0ación >!e com-!ta s! -ro-ia organi0ación, y los sistemas a!to-oi/ticos son sistemas termodinmi@ camente a)iertos -ero organi0aclonalmente cerrados. D'$ Comparando las m>quinas tri3iales con las m>quinas no tri3iales, se constituy. en el defensor entusiasta de la des"ri$iali;a ci&n.
'i)ura %% DSeg8n &on oerster D''
Esta fi&ura fi& !!F es una representaci.n esquem>tica de una m>quina tri3ial? #, yyf designan, res-ecti&amente, la entrada. la salida y la "!nción de esta m>!ina. Imaginemos >!e # sea !n n8mero nat!ral D1, 2, $ ... y >!e esta m>!ina tenga -or "!nción lle&ar a # al c!adrado: -odremos siem-re -re&er lo >!e ser
y, pues las m>quinas tri3iales son pre$isibles e independien"es de la ;istoria. *a diferencia fundamental entre una m>quina tri3ial y una m>quina no tri3ial es que, para esta ltima, una respuesta o) ser3ada por un est-mulo espec-fico puede 3ol3erse diferente mientras que el est-mulo permanece idéntico
'i)ura % DSeg8n &on oerster H'5
*a m>quina no tri3ial fi& !F es sensile a la modificaci.n de 55)
sus propios estados internos, auti:ados : por 3on 2oerster Este estado interno :, que 3iene a a&re&arse a la entrada #, -ro&ee a la &e0 !na entrada a . m>!ina tri&ial >!e com-!ta la salida de la m>!ina no tri&ial, y a ^, otra m>!ina tri&ial >!e com-!ta el estado interno res!ltante 0_: las m>!inas no tri&iales son a la &e0 dependien"es del pasado y analticamente impre$isibles. E7iste una clase de m>quinas no tri3iales tal que es imposile, en principio, descurir las funciones de esas m>quinas a partir de un nmero finito de tests Esas m>quinas son incognoscibles. Para &on oerster, remiten a los teoremas limitati&os: teorema de la 7incomple"ud 9 de ódel, -rinci-io de incertid!m)re de eisen)erg, -rinci-io de indeterminación de il. El proceso de tri3iali:aci.n reduce el nmero de elecciones? mientras que la des"ri$iali;aci&n remite al 7Im-erati&o /tico9 de &on oerster: 7Act8a siem-re de manera de m!lti-licar el n8mero de elecciones -osi)les9.
#. Etica y o)*eti&idad
En su art-culo titulado J*a construction dXune réalltéK, UWYV 8ein: 3on 2oerster propone representar la or&ani:aci.n funcional de un or&anismo 3i3o con la forma de un toro fi& !TF *as computaciones efectuadas en el interior de ese toro est>n re&idas por coerciones no tri3iales
'i)ura %/ DSeg8n &on oerster H'
55)
'i)ura %0 DSeg8n &on oerster H'3
En la fi&ura !W, los cuadrados ne&ros marcados con una N representan &rupos de neuronas, y los espacios sin>pticos se re) presentan por el espacio entre los cuadrados ne&ros *a superficie sensorial del or&anismo SSF est> a la i:quierda, su superficie motri: SMF a la derec6a *a neuro6ip.fisis NPF corresponde a la :ona punteada situada a/o los cuadrados *os influ/os ner3iosos que 3ia/an 6ori:ontalmente de i:quierda a derec6aF actan
55)
=
sore la superficie motri: cuyos mo3imientos son perciidos por la superficie sensorial *os influ/os al 3ia/ar 3erticalmente de arria a aa/oF actan sore la neuro6ip.fisis cuya acti3idad liera esteroides en los espacios sin>ptlcos, modificando as- todo el funcionamiento del sistema? este dole cierre del sistema es representado por la forma del toro El autor postula que Jel sistema ner3ioso es or&ani:ado o se or&ani:a él mismoF de tal manera que computa una realidad es) tale? y esta autorre&ulaci.n de cada or&anismo 3i3o es para él sin.nimo de \autonom-a, de \re&ulaci.n de la re&ulaci.nK C.mo, en este conte7to, escapar al solipsismo 9on 2oerster propone una soluci.n muy ele&ante Ima&inemos, dice, que un indi3iduo afirma ser la nica realidad y pretende que todo el resto no es sino el fruto de su ima&inaci.n? no podr> sin emar&o ne&ar que su uni3erso ima&inario est> polado de apariciones que se le parecen? deer> en consecuencia conceder que esas apariciones pueden tamién ellas afirmar ser la nica realidad, no siendo todo el resto sino el puro producto de su ima&inaci.n A6ora ien, el principio de relati3idad rec6a:a una 6ip.tesis si ella no funciona para dos instancias a la 3e:? por e/emplo, los Herrestres y los 9enuslnos pueden cada uno sostener con una perfecta co6erencia que su planeta est> en el centro del uni3erso, pero esta afirmaci.n se 6undir> si se encuentran El solipsismo ya no es por lo tanto defendile desde el momento que inter3iene a mi lado otro or&anismo aut.nomo Como el principio df relati3idad no es una necesidad l.&ica y no puede ser proado, soy lire de adoptarlo o de rec6a:arlo? si lo rec6a:o, me encuentro efecti3amente en el centro del mundo? pero si lo adopto, ni yo ni el otro podremos m>s estar en el centro del mundo? ser> necesario que un tercero pon&a en relaci.n al otro y a m- mismo0 Jesta relaci.n es la íden"hdac<, y se ded!ce >!e realidad y com!ni@ dad &an a la -ar. En su introducci.n al art-culo de 2rancisco 9arela titulado JA calculus for self)referenceR, 3on 2oerster indica inclusi3e que al colocar la autonom-a del oser3ador en el centro de su filosof-a, Jla intenci.n de [ant no era efectuar un mo3imiento de la o/eti3idad 6acia la su/eti3idad sino m>s ien fundar una ética, pues 6a-a 3isto claramente que, sin autonom-a, no pod-a tener r esponsailidad ni, en consecuencia, éticaR UW%V Por otra parte, en este conte7to not. que 9arela, por primera 3e:, 6a-a aierto la posiilidad de un 3erdadero c5lculo de res-onsa)ilidad.
1+.
Autorreferencia y terapia familiar
Cu>l es el interés de esas teor-as para las terapias familiares Al principio de su mo3imiento, los terapeutas familiares dis) pon-an de una pr>ctica muy rica y racionali:aciones te.ricas di) ferentes y e7tremadamente pores *os traa/os del &rupo de Palo Alto sore el 3-nculo entre la teor-a &eneral de los sistemas y los sistemas familiares permitieron que una teor-a dominante se impusiera poco a poco Esta teor-a fundada sore los isomorfis) mos intent. e7tender a los sistemas familiares leyes &enerales 3alederas para diferentes sistemas aiertos *os traa/os que al&unos de nosotros efectuamos a partir de las in3esti&aciones de Ilya Pri&o&ine y de su equipo, se inscri-an tamién en este perspecti3a Intentamos crear m>s liertad en el mundo de las terapias sistémicas, sacando partido de la rique:a de conceptos desarrollados en el dominio de los sistemas no lineales le/os del equilirio Es as- como aclaramos, 3e: a 3e:, la Importancia de las re&las intr-nsecas, el efecto de las fluctuaciones aparentemente anodinas susceptiles de amplificarse, el papel, por fin, del a:ar y de la 6istoria, conceida de modo diferente que como una 6istoria lineal sometida a la ley de la causa y el efecto Esos procesos sore los que llamamos la atenci.n se desarrollaan no solamente en el seno de la familia, sino en el sistema terapéutico mismo A6ora ien, c.mo 6alar de un sistema terapéutico del cual formamos par"%í Lómo inter&enir all e a; las -reg!ntas >!e nos orientaron ;acia los tra)a*os de los in&estigadores >!e se ;a)an en"rentado con la a!torre"erencia. Mi interés por las teor-as de Maturana, de 9arela y de 3on 2oerster no radica en la cuesti.n de saer si la familia puede o no ser considerada como un sistema autopoiético Me sorprendi. simplemente la calidad de esas refle7iones aparecidas en un campo de cuestionamiento pr.7imo al nuestro, y 3i all- una fuente de inspiraci.n que pod-a estimular nuestra propia creati3idad Si deiera resumir todo lo que me aportaron esos autores, pondr-a en e7er&o los elementos si&uientes, que elaoré a partir de sus traa/os sore la autorreferencia LAparece el concepto de acoplamien"o es"ruc"ural o >!e s!cede se mani"iesta en la intersección de !n sistema determinado -or s! estr!ct!ra y de !n medio, y este aco-lamiento es circ!lar: e4tendido a n!estro dominio, este -!nto signi"ica >!e se &!el&e Im-osi)le de descri)ir !na sit!ación tera-/!tica c!al>!iera sin ace-tar >!e se est incl!ido en ella? lo >!e s!cede en esta sit!ación es siem-re circ!lar, y constr!yo lo >!e digo de !na "amilia mientras ella
misma me constr!ye, en el mismo -roceso. = No 6ay m5s adecuaci&n a )!scar entre !n ma-a -reesta)lecido y !n territorio >!e constit!ira !na -atologa a reconocer. o >!e Im-orta no es el territorio sino la intersección de los ma-as, ma-as del tera-e!ta as como de los -acientes? en esas intersecciones se desarrolla la -sicotera-ia. Por otra -arte, >!i0 de)iera yo a)andonar la noción de ma-as en la contin!ación de esta o)ra: ;a)lar de ma-as remite, en e"ecto, a !n territorio, s!)entiende >!e ;ay !na realidad 7o)*eti&aK de la c!al no ;ago sino tra0ar !n ma-a Inadec!ado: >!i0 la e4-resión 7constr!cción del m!ndo9 reem-la0ara &enta*osamente la de 7ma-a del m!ndoK. LEn el marco de la psicoterapia, no es la 3erdad o la realidad lo que importa, sino la cons"rucci&n mu"ua de lo real el 7m!l@ ti&ersoK de Mat!rana y de Qarela. Aco-lamientos di"erentes ;acen emerger m!ndos di"erentes, y sin em)argo com-ati)les. as sol!ciones ligadas a esas constr!cciones son siem-re o-eratorias. %na -sicotera-ia lograda no signi"ica >!e el tera-e!ta tenga ra0ón, sino >!e la constr!cción >!e edi"icó con los miem)ros del sistema tera-/!tico es o-eratoria. = No 6ay una sola soluci.n posile, sino ml"iples soluciones ligadas a la interrelación entre los miem)ros del sistema tera-/!tico. = *os elementos descritos en el cap-tulo II Singularidades, acoplamien"os y cambios) como s!sce-ti)les de ensam)larse, de am-li"icarse y de modi"icar el estado del sistema "amiliar son siem-re au"orreferenciales. Estos elementos -ertenecen tanto a la "amilia como al sistema tera-/!tico. = *o dicho es siempre dicho por alguien. Esta a"irmación de Mat!rana coincide con !na antig!a tradición talm8dica: c!al>!iera >!e sea la e&idencia de !na -ro-osición "orm!lada en el alm!d, esta -ro-osición es siem-re "orm!lada en nom)re de alg!ien. Asimismo, el cam)io de las reglas de !n sistema tera-/!tico -asa -or los miem)ros del sistema? lo >!e Im-orta es >!e los miem)ros de este sistema &i&en en el -roceso tera-/!tico. = No hay "ransferencia de >nformaciones. a com!nicación se e"ect8a en !n -roceso de aco-lamiento, de intersección de constr!cciones del m!ndo. = !l 1roblema 2tico, el l!gar de la res-onsa)ilidad en !n
mundo de personas actuantes en mltiples ni3eles, no es supri mido. El aco-lamiento estr!ct!ral mantiene la Im-ortancia de !n indi&id!o >!e s! medio no ;ace desa-arecer. = Me parece una cuesti.n fundamental la que plantea 9are) la a prop.sito de la emergencia del obser$ador. Qol&eremos a ello en el ca-it!lo QI, consagrado a los ensam)la*es. = En ltimo término, la parado/a. Est en el centro de la &i@ da cotidiana. No es ms !na atracción e4ótica a la sed!cción s!l"!rosa, de la >!e ;a)ra >!e descon"iar y >!e con&endra mantener a distancia. Con respecto a esto, no resisto al placer de citar un soerio comentario de 4ac6i, célere e7é&eta de la !e ;a)l/ del cielo con &osotros_ 9, (ac;i seBaló 7>!e otro te4to deca: VF el Eterno descendió so)re el monte Sina" [F#odo, 1#, 2+9. I&noro si 4ac6i era un fenomen.lo&o Ja3ant la lettreR, pero, para él, como para toda una tradici.n 6oy perpetuada con rillo por Emmanuel *e3inas, la relaci.n entre la trascendencia y la in) manencia era un prolema de importancia No es indiferente que la *ey 6aya sido re3elada, sea en un proceso de Intrusi.n de la trascendencia Lfuera de la posiilidad de alcan:ar la e7periencia y el pensamiento del 6omreL, sea in3ocando un respeto a la inmanencia, de lo que es Interno a la e7periencia 6umana 4ac6i propone dos soluciones a esta antinomia Escrie, en efecto0 K9endr> un tercer te7to y los acordar>0 \Desde lo alto del cielo El te 6i:o escuc6ar Su 9o: para darte la instrucci.n, y sore la tierra te 6a 6ec6o 3er Su &ran 2ue&o eu"eronomio, ', $6. S! loria en el cielo, y S! !ego y S! Poder so)re la tierraK. Es@ ta -rimera sol!ción e&oca desde m!c;os -!ntos de &ista la teora )atesoniana de los metani&eles: se esca-a a !na do)le coerción se-arando los dos t/rminos >!e la constit!yen y considerando !no de estos t/rminos como *err>!icamente s!-erior al otro. Pero (ac;i no se contenta con esta inter-retación, -!es declara tam)i/n: 7Otra e4-licación: inclinó los cielos y los cielos de los cielos y los des-legó so)re la montaBa. Es as como "!e dic;o: REl inclinó los cielos y descendió_ DSalmos, 13. 1+K. D5+ Zenos a>! en -lena )anda de Moe)i!s, en -lena )otella de Glein Z(ac;i nos o"rece !na sol!ción en "orma de -arado*a to-ológica: ios no 55)
descendi. a la tierra y Moisés no sui. al cielo, pero Dios desple) &. los cielos de tal manera que pod-a estar sore la tierra no es) t>ndoloQ Para 4ac6i la parado/a no es un sona/ero que se a&ita para distraer al papanatas, est> en el centro mismo del acontecimiento fundador de la tradici.n /ud-a, en el cora:.n de la condici.n 6umana
4eferencias ilio&r>ficas ! V 8 3on 2oerster0 JDisorderorder, disco3eiy or in3ention en Pais) ley*l3in&ston comp/, ísorder and Krder, roceed"ngsof"heS"anford >n"erna"ional Symposium, -g. 13. Stan"ord, Anna i)rl, 1#3'. H2 ( ; *ett3in, 8 4 Maturana, S Me Culloc6 y 8 Pitts0 J6at t6e fro&sXs eye tells t6e fro& rainK roceedings of "he >BF, n# 11, 1#5#, -g. 1#'+@1#5#. H$ ( ; *ett3in, 8 4 Maturana, S Me Culloc6 y 8 Pitts0 JAna) tomy and p6ysiolo&y of3ision ln t6e fro& (Bana pip"nesr, J. of ?en. hysio' '$, n# 6. -arte 2, 1#6+. -g. 12#@15. H' 8 4 Maturana y 2 ( 9arela0 +u"opoiesis and Aogn""ion, -gs. bQ@bQ, . (eidel P!)lis;ing om-any Dolanda. 1#3+. 9éase tamién0 8 4 Maturana y 2 ( 9arela0 Fl 5rbol de conocimien "o: las bases biol&gicas del en"endimien"o humano, OEA, Editorial %ni&ersitaria, Santiago D;ile, 1#35, -g. 1+? y . <. Qarela, 7l&ing Tays o" sen@ se@maklng: a middle -at; "or ne!roscience9, en Paisley in&ingston Dcom-., ísorder and Krder..., op. ci", -g. 2+#. U@! 8 4 Maturana, + Brie y S 2renk0 JA iolo&lcal t6eory of rela) ti3istlc colour codin& in t6e primate retinaK, +rch. blol. med. e#p., s!-@ -lem. n# 1. Santiago D;ile. 1#63. H6 "bld.. -g. 1. U$( 2 ( 9arela0 J*i3in& =ays of sense)makin&J, op. ci"., -g. 21+. H3 "bíd. -g. 211. 3*% I)d. H1+ 8 4 Maturana y 2 ( 9arela, +u"opoiesis and Aognl"íon, op. ci"., -g. bQ. U!!!8 4 Maturana0 J6at is it to seeK, +rch. blo' med. e#p., n# 16, Santiago D;ile, 1#3$, -g. 256. U!!8 4 Maturana y 2 ( 9arela0 Fl 5rbol de conocimien"o..., op. ci"., -g. 3'. "bíd., -g. 1+3. H1$ H1' 2 ( 9arela0 J*i3in& =ays of sense)makin&K, op. ci"., -g. 215? &/ase tam)i/n: . <. Qarela: 7Ra!to@organisation: de l_a--arence a! m/@ canismeK, en el colo>!io de erlsy: '+u"o organlsa"ion, elaphysi!ueau pol""i!ue, )a*o la dirección de P. !mo!c;el y <. @P. !-!y, Pars, e Se!ll, 1#3$, -g, 156. H15 8 4 Maturana y 2 ( 9arela0 Fl 5rbol de conocimien"o...,
3
op. ci", -g. 1+3? y . <. Qarela: 7[email protected], op. ci"., -g. 156. H16 8 4 Maturana y 2 ( 9arela0 Fl 5rbol de conocimien"o..., op. ci"., -g. 33?y . <. Qarela: 7i&ingTayso"[email protected], op.c""., -g. 21. H1 2 ( 9arela0 J*i3in&s =ays of sense)makin&K, op. ci"., -g. 213@ !% H13 8 4 Maturana0 J6at is it to seeK, op. ci"., -g. 25. Q/ase tam)i/n al res-ecto: . ( Mat!ranay . <. Qarela: Fl 5rbol de conocimien"o..., op. ci", -g. 1'. H1# 8 4 Maturanay2 ( 9arela0 +u"opoiesis and Aognl"íon, op. ci"., -g. bQIII. H2+ 8 4 Maturana0 Jn"ema"íonalJoumalofanachine S"udies Dondres, Academic Press Inc., &ol. , 1#5, -g. 15. H22 8 4 Maturana y 2 ( 9arela0 Fl 5rbol de conocimien"o..., op. ci", -g. 66. H2$ 8 4 Maturana y 2 ( 9arela0 e m5!uinas y seres $i$os. Editorial %ni&ersitaria, Santiago D;ile, 1#$. H2' 8 4 Maturana0 J& W! "bíd., -g. '2? &/ase tam)i/n: . (. Mat!rana y . <. H26 Qarela? Fl 5rbol de conocimien"o..., op. ci"., -g. #1@#2. H2 8 4 Maturana0 J6at is it to seeK, op ci", -g. 25#. H23 8 4 Maturana0 Jrol de conocimien"o..., op. ci", -g. 12#@1$+. H$+ A 4ayski y S Courtois0 J*a presse clandestine et le &énocideK, 'e onde, # de *!nio, 1#3. UT! V 8 4 Maturana y 2 ( 9arela0 Fl 5rbol de conocimien"o..., op. ci"., -g. 155. H$2 8 4 Maturana0 Jn". J. ?en. Sys"ems, 2, 1#5. -g. 22. H$5 2 ( 9arela0 K*es mltiples fi&ures déla circularltéK en Aahiers cri"i!ues de "h%rapie e" de pra"i!ues de r%seau# "o!lo!se, Pri&at, nW #, oct!)re, 1#33. H$6 Iic* H$ 2 ( 9arela0 JA calculus for self)referenceK, op. ci".. H$3 i-d, p>& ! H$# 8 3on 2oerster J*a construction dune réalitéK en P
33
at:la=ick compF0 'inuen"lon de la r%ali"%, Pars, Se!ll. 1#33,'. Day &ersión castellana: 'a realidad in$en"ada, C!enos Aires, edlsa, 1#33. "bíd., -g. '. H'+ H'1 i-d, p>& @% "bíd., -g. 52. H'2 H'$ 8 3on 2oerster JDisorderorder0 disco3eiy or ln3entionK, op. ci"., -g. 13. H'' 8 3on 2oerster0 JPrincipies of self)or&anl:atlon ln a mana&erial conte7tK, en 8 Blric6 y + ( < Prost compsF0 Self Krgani;a"ion anda nagemen"of Social Sys"ems, Cerln@eidel)erg@ N!e&a Fork@okio, S-rln@ ger@Qerlag, 1#3', -g. #. H'5 I-d, p>& !! H'6 8 3on 2oerster0 J*a construction dXune réalitéK, op. ci"., -g. 66. "bíd., -g. 66. H' H'3 "bíd., -g. 66. H'# 4 8 8o=e y 8 3on 2oerster JIntroductory comments to 2rancisco 9arelaXs calculus for self)referenceK, >n". J. ?en. Sys"ems, &ol. 2, 1#5. -g. $. !l 4entateuco con comentarlos de (ac;i D5 &ols., )a*o H5+ la dirección de Elle M!nk, -!)licado -or la "!ndación Sam!el y Odette e&y. 1#3+ D'V ed., t. II. Fl F#odo, -g. 15.
3#
Simulaci.n de una primera sesi.n de terapia familiar 4e&las intr-nsecas y sin&ularidades Entre las 6erramientas utili:adas para la formaci.n de los te) rapeutas familiares, una de las m>s empleadas es un e/ercicio llamado Jsimulaci.nK0 al&unos participantes JsimulanK ser los miemros de una familia que 3iene a consultar a un psicotera) peuta, el cual no conoce nada, por re&la &eneral, de la situaci.n que los miemros de la familia simulada presentar>n Adem>s del interés que ofrece para el estudiante puesto en el lu&ar del te) rapeuta esta entre3ista permite a aquellos que desempe5an los roles de los miemros de la familia, 3i3ir una amplia &ama de si) tuaciones que pueden lle&ar a ser determinantes para su propia e3oluci.n Bno de los aspectos importantes de las simulaciones es el mensa/e Impl-cito que transmiten0 6acemos Jcomo siK no se tratase de psicoterapia, mientras que esta pr>ctica tiene por o/eto la
#+
formaci.n en psicoterapia ; si toda psicoterapia no fuese sino simulaci.n No podr-amos considerar todo encuentro entre un paciente y un psicoterapeuta como el fruto de una aceptaci.n impl-cita de participar en un/ue&o codificado denominado psico) terapia L(ue&o en el cual el cuestionamiento mismo constituye ya una de las re&las *a simulaci.n se 3ol3er-a entonces, m>s all> de las racionali:aciones que suyacen en ella, la situaci.n metaf.rica por e7celencia de la psicoterapia0 un marco codificado donde lo importante se efecta no en la realidad, sino en las intersecciones de las construcciones de lo real de los di3ersos prota&onistas En las p>&inas que si&uen, deseo presentar una simulaci.n que efectué en 2rancia, en ocasi.n de un seminario animado con/untamente por el psicoterapeuta familiar norteamericano Cari 6ltaker y por m- mismo una Intérprete se encar&aa de la traducci.n consecuti3aF Al recorrer estas l-neas, el lector podr> reconocer la aplicaci.n de una serle de conceptos presentes en los cap-tulos precedentes Podr> 3er c.mo el animador se Implica en los dos sistemas a los cuales pertenece y que se influencian mutuamente0 el sistema de las personas que simulan la sesi.n de terapia familiar, as- como aquel, m>s amplio, de los participantes Muy pronto, aparecer> como fundamental en todo proceso terapéutico, la construcci.n mutua de lo real Sur&ir>n acopla) mientos de elementos sin&ulares entre los miemros de la familia y el terapeuta especialmente el efecto, sore el terapeuta, de las lente/uelas del suéter de la paciente desi&nadaF Estas inter) secciones se enriquecer>n con acoplamientos de re&l>s intr-nsecas propias del terapeuta y la familia por e/emplo, la importancia de Jno creer en elloKF ; se 3er> amplificarse pro&resi3amente estos ensamla/es autorreferenciales constituidos tanto por elementos aparentemente anodinos como por re&las que parecer>n m>s e3identes al practicante e7perimentado en el cainpo de las terapias familiares *a sesi.n se interrumpir> en el momento en que el proceso tratado pare:ca poder prose&uirse en ausencia del terapeuta
SIMB*ACION M567 !L8AlM 3a los -artici-antes >!e sim!lan ser los
miem)ros de la "amilia: @uenos días ...
Mony Elkalm Participante W
#1
Participante @
Intérprete
Participante Y
Disposici.n A
M E.: LJ!/ -!edo ;acer -or &osotros PA4HICIPANHE T0 *o saéis ien, (oélle no come M E0 Ua la sala: Os -edir/ >!e inter&engis -ara decirme lo >!e &eis. a)/is asistido a !n comien0o de algo, ;a)/is &isto entrar -ersonas, las ;a)/is &isto sentarse. LJ!/ -ensis de lo >!e ;a -asado PA4HICIPANHE0 8uo una especie de rea&rupamlento, las per) sonas entraron y se rea&ruparon en c-rculo M E,0 'ué 6aéis 3isto tamién PA4HICIPANHE0 8aéis pre&untado J'ué puedo 6acer por 3osotrosK No 6aéis de/ado al Intérprete traducir El 6omre comen:. a responder y lue&o lo 6aéis interrumpido M E0 *o que me se5al>is es muy Importante Bno de los sis) temas en/ue&o, es el sistema constituido por el terapeuta, la tra) ductora y la familia El lu&ar m>s c.modo para m- era aqu- Umas "rando su lugar en la disposici&n +L. Pero si me -ongo all con ! a "in de >!e -odis &erlos Dmos"rando un lugar !ue prolonga el semicírculo1, no estoy cómodo. Para tra)a*ar cómodo, tengo necesidad de estar a ig!al distancia de los di"erentes miem)ros de la "amilia. Al mismo tiem-o, me di c!enta de >!e ;a)a !n solo micró"ono, y no me &ea ;aciendo idas y &!eltas -ara >!e -odamos com-artir el micró"ono. Entonces, me det!&e. Para m, la -ersona ms Im-ortante en -sicotera-ia sois &os mismo. Si no estis cómodo, no comenc/is. F yo no esta)a cómodo. A;ora, deseara >!e -!dierais ay!darme a encontrar !na sol!ción -ara tra)a*ar con ellos. Si me -ongo "rente a ellos, "ormar/ !na )arrera entre ellos y &os. C!scar/ dónde -odra !)icarme -ara sentirme cómodo. Me dais !n min!to... DM. E. nstala s! silla en di"erentes l!gares. No..., no..., s. Entonces, L>!/ ;ar/ Estoy desolado. El 8nico l!gar donde estoy cómodo, es a>!. F a>!, estoy entre &osotros y ellos, L>!/ ;acer Ay!dadme !n -o>!ito, -or "a&or. PA4HICIPANHE0 Acuéstate U4isas en la sala M E0 Hrataré M E trata de acostarseV No, no estoy c.modo 'ué es lo que 6aré PA4HICIPANHE0 8>lales M E0 Pero si no 6a&o m>s que 6alarles
#2
PA4HICIPANHE0 Decidle que no est>is c.modo en la posici.n en que est>is, y uscad con ellos para 3er c.mo podr-ais colocaros para traa/ar de otro modo M E0 U a los miembros de la familia simulada: LJ!/ -ensis &osotros C!s>!emos !n l!gar
Intérprete Mony Elkalm
UDisposici.n @L M. !.: !stá mejor. Hirigi/ndose a la -artici-ante >!e aca)a de tornar la -ala)ra. uchas gracias. *a se5ora me di/o al&o muy importante? me di/o0 JPor qué 6aces como si ellos no e7istieran Por qué 6iciste como si no 6uiera m>s que nosotros y t El sistema actual, no es solamente nosotros y t, es nosotros, t y ellosK ; &racias a 3os empie:o a respirar me/or s PA4HICIPANHE0 Aun cuando camiaron de lu&ar, la persona de la i:quierda intent. recrear un c-rculo M E0 Si el se5or estu3iese en formaci.n en mi casa, yo estu) diar-a en qué la re&la que él 6ace aparecer es una re&la intr-nse ca al sistema terapéutico, y no solamente una re&la intr-nseca a la familia No le diré, a priori0 JDesconfiad, son 3uestros prolemas arries&>is proyectar 3uestras propias 6istorias sore estas personasK 9oy m>s ien a decirme0 J'ué proailidad tenemos de que al&o nico esté por construirse entre 3osotros y ellos alrededor de un rea&rupamientoK Pero para esto, es necesario primero que 3erifique qué es ese puente nico, ese la:o sin&ular entre 3osotros y ellos Mi traa/o en tanto que formador ser> entonces ayudaros a poder tomar esta puerta particular 4etomo a la simulaci.n M E0 a laam-l-a/0 'ué puedo 6acer por 3osotros PA4HICIPANHE l0 Creo que ya se os 6a dic6o que 3enimos aquporque tenemos una 6i/a que no come m>s M E0 S- PA4HICIPANHE W0 Eso me inquieta muc6o No podr-ais ayu) damos M E Ua la salaL: LJ!/ ;a)/is &isto PA4HICIPANHE0 Est>is por 6acer con ellos lo que 6aéis 6ec6o
#$
con nosotros M E0 'ué 6ice con 3osotros PA4HICIPANHE0 Nos 6aéis 6ec6o traa/ar M E0 C.mo es que trato de 6aceros traa/ar PA4HICIPANHE0 No diciendo &ran cosa M E0 Como si les 6alara nicamente a 3osotros, y no a ellos *es 6alo a mis espaldas PA4HICIPANHE0 *es permites pensar que puedes 6acer al&o por ellos porque dices0 Jqué puedo 6acer por 3osotrosK M E0 *o que oi&o es0 J'uerido Elkalm, ares la sesi.n diciendo0 \Estoy aqu- por 3osotros, por lo tanto t defines claramente el conte7to y pre&untas0 \Decidme lo que puedo 6acerR *a manera en la cual comen:amos una sesi.n es muy diferente se&n los terapeutas Si di&o0 J'ué puedo 6acer por 3osotrosK, no 6alo for:osamente de enfermedad o de salud, 6alo de m-, que trataré de emplearme, de implicarme para ellos 'ué m>s 6aéis 3isto pasar aqu- PA4HICIPANHE0 El padre y la madre est>n instalados en medio de personas de cada lado Es interesante, este aspecto casi simé) trico PA4HICIPANHE0 El padre presenta el prolema, toma la palara primero y lue&o, cuando de/as un espacio, es la madre la que inter3iene de una manera m>s emocional M E0 9éis ya que si se&u-s esta l-nea, 6ay casi una distriuci.n de roles entre el padre y la madre Si part-s del principio de que la madre es emocional, es posile que os estéis poniendo a crear con ella un sistema donde ella ser> efecti3amente emocional Es dif-cil escapar a este proceso en el cual participamos en crear lo que creemos 3er 'ué m>s 6aéis 3isto PA4HICIPANHE0 'ué es lo que os 6ace pensar que es la madre la que 6a 6alado M E0 El tiene toda la ra:.n No porque una mu/er tome la pa) lara después de un 6omre 6alando de una 6i/a, se trata por eso de su 6i/a Construimos siempre 'ué m>s 6aéis 3isto pasar aqu- PA4HICIPANHE0 Comen:>is muy r>pido, no tu3imos toda3-a el tiempo de 3er a estas personas comen:ar a 6alar y ya queréis que elaoremos 6ip.tesis 8uiera deseado que se espere m>s para que sea m>s claro M E0 Cuando super3iso a estudiantes que me traen una anda de 3-deo de su traa/o, encuentro siempre en los primeros minutos de la primera sesi.n &ran cantidad de Interacciones entre la familia y el terapeuta Estos elementos aparentemente anodinos decidir>n frecuentemente la continuaci.n de la sesi.n 8aéis estado sore todo atentos al aspecto 3eral? no descuidéis los mltiples &iros no 3erales que 6an tenido lu&ar 6asta el presente, y que frecuentemente determinan y anuncian lo que sore3endr> En
#'
cuanto al prolema de la claridad, cuanto m>s claras son las cosas, m>s se reduce 3uestro espacio Me e7presaré por lo tanto cada 3e: m>s claramente, de manera de sumer&iros cada 3e: m>s en confusi.n 4etomo a la simulaci.n PA4HICIPANHE W? (oélle no come y eso me inquieta muc6o No se sae lo que pasa, entonces mi marido decidi. 3enir a 3eros M E0 Se5ora, podéis presentarme a los que est>n all- PA4HICIPANHE W la madreL: reda, >!e tiene 21 aBos, tra)a*a. !e tiene 1 aBos y es la >!e no anda )ien. Moni>!e, tiene 1# aBos, est toda&a en casa. F Pa!la, >!e tiene 16 aBos. Paula Monique Madre
Padre (oélle 2reda Intérprete M E
M E [dirigi%ndose a la sa"a: LJ!/ -ensis de esto PA4HICIPANHE0 *a madre no present. a la paciente en primer lu&ar M E0 No carece de interés Es como si el marido no tu3iera sino que presentarse solo Se puede pensar tamién que el marido ya se present. y que ella me presenta a los miemros de la fa milia que no 6an dic6o nada toda3-a PA4HICIPANHE0Eso6acepensarque el padre est> muy solo, ya ME0 De nue3o, 3eis c.mo podemos tomar caminos particulares En cuanto a mi, no perci- al padre como al&uien solitario o aislado ;a se ofrecen rutas diferentes en funci.n de nuestra propia puerta espec-fica PA4HICIPANHE0 *o que me 6a sorprendido desde el principio es que el padre estaa arumado como si pusiera ya la situaci.n en 3uestras manos M E0 De nue3o, 6e aqu- una construcci.n de lo que 3eis que corresponde a una Intersecci.n entre 3os y la familia simulada Mis intersecciones son li&eramente diferentes PA4HICIPANHE0 En el punto de partida, la madre present. la cosa como 3iniendo del padre Al principio de la consulta, es por lo dem>s él quien 6al. primero PA4HICIPANHE0 En el seno de la familia, parece 6aer 6aido un intercamio entre la esposa y el marido, lue&o fue el marido quien present. el prolema al e7terior Otro punto0 la madre presenta
#5
primero a sus dos 6i/as que tienen las dos ! a5os en la sala: *oHL. Fo com-rend >!e las dos tienen 21 aBos. *A MAD4E0 No, !,!$, !% y !Y PA4HICIPANHE0 Hu3e la Impresi.n de que la madre 6a-a pre) sentado a sus 6i/as de manera caricaturesca, al no descriirlas sino por la edad y por el 6ec6o de que traa/aran o no PA4HICIPANHE0 Durante la secuencia, comproé que las piernas de la familia estaan todas cru:adas del mismo modo El padre y (oélle ten-an los ra:os en la misma posici.n En ese momento, pensé que el padre y (oélle estaan astante pr.7imos el uno del otro M E0 Descri-s un mo3imiento que es efecti3amente astante raro Es raro que los miemros de una familia ten&an las piernas cru:adas en el mismo sentido Por otro lado, dec-s0 J8ay dos que cru:an los ra:os de la misma forma, e infer-s que eso podr-a si&nificar que estas dos personas est>n pr.7imas De nue3o, 3eis ese proceso de construcci.n operar muy r>pidamente al principio de la sesi.n 4etomo a la simulaci.n M E Udirigi%ndose a la pacien"e designada: LQ!estro nom)re. seBorita (Og**E0 (oélle M E la Jo%lleL : en/is lindas cosas )rillantes encima H;aciendo al!sión a las lente*!elas de s! s!/ter. (Og**E0 ; entonces M E0 No sé, eso me 6a estorado 'ui:> porque 6ay una parte que rilla y otra que no rilla (Og**E0 No me 6a-an dic6o que me se me ia a anali:ar de pies a cae:a ;a no tu3e &anas de 3enir, ueno, es penoso M E0 No sé si lo que 6a&o es anali:aros de pies a cae:a Es m>s ien una pre&unta que me 6ice Me di/e0 KHoma, es &racioso, 6ay una parte que rilla y adem>s una parte que no rillaK ; como soy un &ran so5ador (Og**E0 *a cara escondida de la luna, es eso , y quiero, pero 6allo que M E0 Bn instante, se5or (oélle, puedo continuar Me autori:as a continuar (Og**E0 De todos modos, 6emos 3enido aqu-, entonces, an si no os autori:o, estamos oli&ados a escuc6aros M E0 No es e3idente (oélle, si queréis que me interrumpa a6ora, me interrumpo con &usto 'ueréis que contine (Og**E0 No sé, no sé 3erdaderamente qué es lo que se 6ace aqu-, alineados as-, como una fila de ceollas M E0 ; se&n 3os, qué se 6ace aqu- (Og**E0 No estoy sola aqu-, podéis 6alar a los otros M E0 *o que es e7tra5o, es que en &eneral, comien:o una se)
#6
si.n 6alando efecti3amente a los otros ; aqu-, no es culpa m-a, o m>s ien s-, es mi culpa Me declaro culpale Es 3erdad que esos p>/aros sore tu suéter y este aspecto rillante y no rillante, me 6an detenido (Og**E0 Aqu- comen:amos a di3ertimos M E0 ; qué es lo que os di3ierte (Og**E0 Se me di/o0 3amos a 3er a un doctor Bno m>s, porque ya 3imos muc6os Se le e7plicar> y adem>s, después Al principio, se 6acen trucos E* PAD4E0 Mam>, quieres decir al&o M E0 Bn se&undo Se5or, os irrita que 6ale con 3uestra 6i/a E* PAD4E0 *o que me irrita es sentir que la an&usti>is *A MAD4E0 Podr-ais qui:>s 6alar de otra cosa que de su suéter No sé encuentro esto n poco e7tra5o M E0 C.mo 6aré para no pensar en el suéter cuando pienso en el suéter U(oélle se da 3uelta 6acia sus padres y susurra en 3o: a/aV M E0 'ué 6ay (oélle *A MAD4E0 Se pre&unta si 3os sois 3erdaderamente médico Es e7tra5a la manera en que procedéis 2uimos a 3er otros, sois el primero en no sé, no quiero ofenderos M E0 En ciertos momentos, me pre&unto tamién yo si soy 3erdaderamente un médico *A MAD4E0 No sé, sois 3os el que sae lo que 6ace M E0 Me &ustar-a muc6o saer si lo que 6a&o es 3erdadero Pero no estoy con3encido *A MAD4E0 *a peque5a comien:a a ponerse un poco ner3iosa, no sé, no podr-ais decimos un poquito lo que deemos 6acer M E0 (odie, aparentemente 3uestros padres tienen necesidad de ser ase&urados Podéis decirme lo que deo 6acer para ase&urarlos (Og**E0 Hodo el tiempo es necesario deciros lo que tenéis que 6acer M E0 S- (Og**E0 ;o, no sé, pero en fin, yo, est> ien, en principio, y lue&o, ueno, mis padres est>n Inquietos, y adem>s est>n mis 6ermanas, y adem>s 6emos 3enido aqu-, y eso cu>nto tiempo durar> Es un 3erdadero circo E* PAD4E0 Sé por lo menos cortés con el se5or M E0 Si 3os no me ayud>is, es cierto que estoy un poco per dido, (oélle (Og**E0 Es necesario que os ayude a 6acer qué Porque, puede ser que si efecti3amente me aplico un poco se acelerar>n las cosas, porque es penoso Deo ayudaros a 6acer qué Me 6al>is de mi suéter y después ense&uida mis padres, no es se&uro que 6ayan 3enido para eso yo ueno, en el l-mite ;o no sé, en fin ;
#
adem>s me ponéis ner3iosa, as- y adem>s me 3ol3éis a&resi3a y adem>s No, a&rediros as-, puedo 6acerlo, puedo continuar tamién, pero qué se 6ace aqu- No es esto, no 6emos 3enido a 6alar de esto M E la los padres: o >!e me -lantea !n -ro)lema es >!e s/ )ien >!e ;a)/is &enido a ;a)lar del ;ec;o de >!e &!estra ;i*a tiene !n -ro)lema de alimentación. Sin em)argo, todo lo >!e -!edo &er es !n s!/ter con -artes )rillantes y -artes >!e no )rillan. y "ormas de -*aros >!e se -er"ilan en ese s!/ter. F c!ando se me ;acen re-roc;es -ara decirme: 7ra)a*a seriamente9, todo lo >!e &eo es la ;ermosa cinta )lanca de &!estros ca)ellos Hd5ndose $uel"a hacia Jo%lle Entonces, estoy m!y "astidiado. E* PAD4E0 No 3éis que ella mide !,$ m y pesa W kilos M E0 (oélle, qué pens>is de eso (Og**E0 ;o Use echa a rer. M E Ua la salaL: F &osotros, L>!/ -ensis de eso PA4HICIPANHE0 Al principio, la paciente mostraa que no estaa contenta de estar aqu- 4esoplaa, a&itaa el pie, miraa de arria a aa/o 4esoplaa, y después conse&uiste 6acerla re-r PA4HICIPANHE0 Dos cosas insi&nificantes 8aéis mostrado lo que 6ay de parad./ico entre lo que muestra la familia y la &ra3edad de aquello por lo cual 3ienen PA4HICIPANHE0 Partiendo del suéter, 6aéis permitido a la fa) milia 3ol3er a precisar el marco, no sois 3os quien precisa el marco de la entre3ista sino que es la familia quien 3uel3e a precisarlo PA4HICIPANHE0 *o que encontré de Interesante, es que no 6a) lando del s-ntoma for:>is un poquito a (oélle a Hrat>is de 6acerle presentar el prolema y lle&>is a 3er un poquito, creo, cu>l es la funci.n del s-ntoma PA4HICIPANHE0 Estoy muy sorprendido por el modo en que 3os, Mony Elkalm os implic>is 8al>is de 3uestras impresiones, de 3uestras emociones, de lo que sent-s ante el suéter PA4HICIPANHE0 Interpel>is muc6o a (oélle, que os remite a sus 6ermanas, a los otros, y continu>is interpel>ndola PA4HICIPANHE0 En lu&ar de decirle que es flacuc6a y palidu) c6a, le dec-s que tiene facetas rillantes y la 6acéis enro/ecer PA4HICIPANHE0 A m- me 6a parecido que cuando 6alaais del suéter comen:. a distenderse Os di/o0 JComen:amos a re-rnosK, perd-a su impaciencia En ese momento, la mam> os di/o0 JNo estamos aqu- para eso, para que le 6aléis de su suéterK Entonces (oélle recomen:. a ser a&resi3a, y la madre os 6a 6ec6o notar que ella estaa a&resi3a, que la 3ol3-ais a&resi3a PA4HICIPANHE0 ;o noté que a medida que (oélle se distend-a, el padre y la madre se a&itaan cada 3e: m>s, como si fuera a ellos a quienes pertenec-a realmente el prolema
#3
M E0 8aré un peque5o comentarlo Ante todo, es muy raro que yo traa/e as- con una familia con un miemro anoré7ico En &eneral, me intereso en la cronolo&-a0 cu>ndo comen:. el s-ntoma *ue&o estudio el conte7to en el cual el s-ntoma sur&i. y 3eri) fleo las 6ip.tesis sore su funci.n posile a ni3el del sistema familiar 4eencuadro entonces el s-ntoma como protector con un comentario parad./ico Aqu-, fui tra&ado por ese suéter Si usco en mi propia 6istoria, eso me remite al primer cuento que escri-0 se trataa de un estudiante que so5aa al mirar los puntos rillantes en la espalda de otro estudiante sentado delante de él en un anfiteatro, y que se encontraa en un momento dado asorido en la trama del suéter de este ltimo Era una 6istoria un poco loca, a la manera de Cort>:ar ; entre este cuento que 6a-a escrito y este suéter se produ/o una intersecci.n no me di cuenta sino despuésF (oélle, aparentemente, se di/o al principio0 J'ué es lo que usca 6acer aparecer de m-K Era como si un psic.lo&o tratara de decir cosas sore 3os a partir del modo en que mo3éis 3uestras manos o 3uestras piernas ;, a medida que aparec-a, yo, como el ori&inal, yo soy el paciente, yo quien di&o0 JEstoy desolado, no consi&o apartarme de este suéterK A la 3e: la familia se rea&rupa contra m-, pues soy el paciente, y por otro lado esta lieraci.n de (oélle de su lu&ar de paciente desi&nada, crea un malestar en sus padres Si no me 6a&o el loco en ese mo) mento, corro el ries&o de Ir al encuentro del sistema que ellos me proponen Porque, si yo no me asocio a la manera que tienen de desi&nar el s-ntoma, si&nifica que no escuc6o lo que me dicen, y que no ten&o en cuenta la funci.n del s-ntoma Por eso me propon&o como paciente Si es necesario un paciente, puedo ser yo no for:osamente esta c6ica anoré7iea Hen&o astante peso para tener ese rolQ 8ay otros comentarios, otras pre&untas, antes de continuar PA4HICIPANHE0 Cuando, al principio, el padre os presenta el s-ntoma, os pide en al&una parte tomar su lu&ar para ayudar a su 6i/a 9uestra Inter3enci.n pareci. Irritar al padre, que la 6i:o comprender a la madre PA4HICIPANHE0 *as 6ermanas no di/eron nada toda3-a 4etomo a la simulaci.n M E [al padreL: SeBor, Lcómo me so-ortis &os E* PAD4E0 is 6acia adelante as-, tenéis un aspecto de tal manera interesado, del tal manera aierto y deseoso de ayudar No me siento realmente ien en esta posici.n donde 3isilemente no os ayudo, donde ten&o la impresi.n de no poder ayudaros
##
*A MAD4E0 ;o tamién ten&o esta impresi.n? creo que se 6a equi3ocado el camino, aqu- E* PAD4E0 Puede ser M E a CredaL: Estis dis-!esta a ;acer im-ortantes es"!er0os, Lcómo os llamis, adems 24EDA0 2reda M E0 2reda podéis ayudarme un poquito Estoy completa) mente perdido 24EDA@ Pienso >!e nos ay!darais si e4-licaseis !n -oco &!estra manera de tra)a*ar. M E0 A decir 3erdad, no sé ien c.mo traa/o 24EDA Pero pienso que 3enimos con un pedido? a6ora, pienso que a 3os os toca decimos lo que podéis damos M E0 Podéis ayudarme a comprender cu>l es el pedida que os trae y lo que esper>is de m- (Og**E [a CredaL: LJ!ieres decirle lo >!e de)ernos ;acer 24EDA? Pienso, puedo decir lo que pienso, 3amos Son mis padres los que se inquietan por (oélle Eso es lo que nos molesta M E Ua ln salaL: Entonces, &ed cómo reda rede"lne el -ro)lema. Para reda, el -ro)lema no es la anore4ia de s! ;ermana, el -ro)lema es la in>!iet!d de s!s -adres. reda se e4-resa de !na manera )astante am)ig!a -ara >!e se -!eda com-render >!e es la in>!iet!d de los -adres la >!e -resenta -ro)lemas, tanto como el ;ec;o de >!e s! ;ermana no come. 4etomo a la simulaci.n M E0 ; si continu>ramos pasando de uno a otro para que yo comprenda un poco lo que esper>is de mi PAB*A? ;o estoy muy contenta de 6alar, porque estoy 6arta porque, si ella no come, yo empie:o a tener 6amre y me pre&unto qué 6acemos aqu- (Og**E0 Si no te &usta, te puedes ir MONI'BE0 ;o empie:o a encontrar el tiempo lar&o tamién, 6allo que se fastidia un poco demasiado a (oélle, ella est> ien asi Me &ustar-a que la de/aran un poco en pa: Hodos le dicen todo el tiempo0 JCome, come, comeR y adem>s, ueno, ella no est> tan mal asi E* PAD4E0 El cl-nico di/o que si perd-a dos kilos m>s, se la de-a 6ospitali:ar de ur&encia No 6ay que ol3idarlo Estamos por lo tanto ante un peli&ro mortal M E la aula <: Lómo os llamis PAB*A? Paula M E Ua oni!ue: F &os. Lcómo os llamis MONI'BE0 Monique M E0 Se5ora, estoy muy fastidiado Estoy fastidiado porque comprendo que es un prolema 3erdaderamente dram>tico ;
1++
adem>s, aparentemente, nadie fue capa: de ayudaros antes que yo ; por qué, yo, deeré tener é7ito en ayudaros Después de todo, no 3eo por qué, qué es lo que ten&o m>s que los otros *A MAD4E0 Es 3erdad E* PAD4E? ;o, ten&o una pre&unta *a muerte de nuestra 6i/a os de/a indiferente M E0 A m-, en asoluto Se5or, 6acéis como si el 6ec6o de que yo no sea indiferente a lo que puede suceder a 3uestra 6i/a si&nificase que soy capa: de ayudaros Es necesario 3er tamién si soy suficientemente competente Puede ser que no sea astante competente para ayudaros E* PAD4E Ua su mu/er *: LNo nos di*eron los m/dicos >!e sólo Mony Elkalm -!ede sacamos de esto M EUa la salaL: Qed >!/ a-asionante es. e a>! !na "amilia >!e &io, se me di*o al -rinci-io, n!merosos m/dicos sin res!ltado. F, desde el -!nto de -artida, se &e )ien >!e consideran >!e ;ay -ocas ra0ones -ara >!e yo tenga /4ito. !anto ms e4-lcita ;ago mi incom-etencia, ms com-etentes se &!el&en ellos mismos y ms e4igen >!e yo sea com-etente. Es como si e4istiera la demanda sig!iente: 7J!eremos ser ay!dados, -ero no >!eremos !n m/dico com-etente9. Eso me ;ace, -or otra -arte, -ensar en el l!gar del -adre? el l!gar de alg!ien >!e, a -esar de s! -osición -ri&ilegiada, no llega a ay!dar a s! ;i*a. Si tomo el l!gar >!e los miem)ros de la "amilia -arecen o"recerme, e4iste el -eligro de >!e el l!gar del -adre se red!0ca toda&a ms. A -artir del momento en >!e res-ondo a los dos ni&eles de s! demanda, como alg!ien >!e >!iere ay!dar -ero >!e d!da, li)ero en ellos las -osi)ilidades de ser ms "le4i)les. El -eligro sera >!e yo me &ol&iera com-etente, -or>!e entonces no res-ondera ms a !na -arte de s! demanda. Qer/ cómo, a!n siendo incom-etente, -!edo a -esar de todo ay!darlos. 4etomo a la simulaci.n M E [a Jo%lleL: s Me record. que a/o 3uestras sonrisas, a/o 3uestra &entile:a, se desarrollan cosas dram>ticas Podéis decirme esas cosas dram>ticas que pasan (Og**E0 No sé, yo No 3eo cosas dram>ticas Mi 6ermana os lo 6a dic6o? di/o que nada especial pasaa M E0 Se5or, os 3eo decir que no con la cae:a E* PAD4E0 Di&o que estoy aterradoQ M E0 Aterrado, s- Continuad, se5or, por fa3or E* PAD4E0 'ué 6ay que decir cuando (oélle dice que no 6ay
1+1
prolema, mientras que cada comida es un comate M E0 Se5ora *A MAD4E0 S- se5or M E0 Se5ora, dec-s Js-, se5orK como si di/éseis0 JPero, en fin, para qué sir3e todo estoK S- *A MAD4E0 S-, me lo pre&unto, estoy un poco decepcionada de la manera en que tom>is las cosas, cre-a que ser-ais m>s acti3o M E0 C.mo *A MAD4E0 No sé, si 3en&o a 3erlo, es porque mi marido cre-a en eso, yo de 6ec6o nunca cre-
1+2
M E a la sala\: sala\: Q/is, esta "rase es m!y Im-ortante. Ella dice: 7MI ;i*a est en -eligro de m!erteK, y tam)i/n: 7No creo creo >!e se la -!e !ed da ay! ay!darK arK. Esta sta "ras "rase e -!e !ed de ser ser entendida como: 7Mi ;i*a corre el riesgo de morir y yo no me atre&o a es-erar >!e esta sit!ación -!eda cam)iar9. O a!n ms sim-lemente, como: 7No creo >!e esto -!eda cam)iar9. Si el tera-e!ta destaca esta "rase, amena0a no ser&ir de gran cosa, como no sea >!e la madre se -ondr "!riosa contra /l. Para m, el ;ec;o de >!e la madre no lleg!e a creer >!e la sit!ación -!eda cam)iar, -!ede recordar >!e ese sntoma tiene !na "!nción >!e es 8til, >!e es im-ortante. 4etomo a la simulaci.n M E0 Se5or, estoy muy conmo3ido por lo que 3uestra mu/er acaa de decir *o que entend- es0 JComo ten&o deseos de que mi 6i/a me/ore, no me atre3o a creer que es posile, de tal manera temo que eso no marc6eR ia madre ba/a la cabe;a para marcar su aprobaci&n9 o o a!n: 7engo tal miedo de creer >!e eso -!diera s!ceder y >!e eso s!ceda >!e no me atre&o ms a creer >!e marc;ar9. SeBora, decs >!e s con la ca)e0a. *A MAD4E0 S-, 3eo que sois como yo, efecti3amente E* PAD4E0 8aéis comprendido ien nuestros sentimientos M E0 Se5ora, prefer-s creer que al&o que an6el>is no suceder> por temor a ser decepcionada en caso de fracaso *A MAD4E0 S-, todo el tiempo M E0 Dadme un e/emplo *A MAD4E0 No sé, cuando ellas 3an a la escuela, siempre ten&o miedo de que fracasen, prefiero pensar que fracasar>n M E0 S-, qué m>s *A MAD4E0 Mi marido de-a tener un puesto la comida, después es deliciosa M E0 (oélle, qué pens>is de lo que pap> y mam> dicen (Og**E0 O6, mi madre madre cocina muy ien ien M E0 Entend- ien lo que me dec-s ; qué pens>is de lo que pap> y mam> dicen sore su temor de que las cosas que se desean no lle&uen (Og**E0 8al>ais 8al>ais de drama recién, recién, ése es el drama Mam?i Mam?i
est> persuadida de que siempre suceder> al&o catastr.fico Hodo el tiempo No soy yo el drama, es todo el tiempo as-, ella acaa de dec-roslo M E Ua la salaL: emos salaL: emos llegado a !n momento en >!e se me o"rece la -osi)ilidad sig!iente: 7Mony Elkaim, Lests listo a aliarte con nosotros en !n conte4to en >!e t8 tam)i/n temes temes lo -eorK -eorK Eso Eso >!ier >!iere e decir decir >!e. >!e. yo tam)i/ tam)i/n, n, de)o de)o com-ortarme como si no est!&iese con&encido en a)sol!to de >!e tendr/ /4ito. LPero cómo ;acer de ese aco-lamiento alg!na cosa >!e sea !na "!ente de "le4i)ilidad -ara todos nosotros Ay!dadme. Lómo saldr/ de esto PA4HICIPANHE0 Podr-as su&erirles la dificultad que tendr-as en comer en su casa, con esta dama que tiene miedc de fracasar en la preparaci.n de una comida y t que tienes miedo tamién de que ella fracase, y c.mo eso ser> ueno lo mismo M E0 Ante todo, no me &usta ir a comer a casa de los pacientes0 si 3oy resultar> realmente mal ; ser> tan malo que tendré dolor de 3ientre y me pondré enfermo PA4HICIPANHE@ +No -odrais s!gerirles ;alagarlo con !na comida M E0 En nuestro dominio 6ay un se5or que se llama Sal3ador Minuc6in cuya secretaria acaa de proponer a los miemros de la familia dar orden para una comida *as recepciones, en &eneral, tienen lu&ar al mediod-a El traa/a entonces sore lo que pasa entorno a esa comida Pero ese es Sal3ador Minuc6in, no Mony Elkaim PA4HIC PA4HICIPA IPANHE NHE00 Podé Podéis is traa/ traa/ar ar en tomo tomo de aquel aquello lo de que podéis temer lo peor, tanto la familia como 3os M E0 Cada una de 3uestras opiniones es importante y til, pero 6ay al&unas que siento pr.7imas a lo que puedo 6acer, como lo que me aca aca>i >iss de deci decir, r, y 6ay 6ay otra otrass que que no me 3eo 3eo inte intenta ntar r Es i&ualmente importante en formaci.n No es suficiente decir a un estudiant estudiante0 e0 JEsto es lo que se podr-a podr-a 6acerK Es necesario necesario tamién tamién que el estudiante pueda encontrar al&una cosa astante pr.7ima a él, para que pueda atraerlo Por lo tanto, me dec-ais0 JC.mo utili:ar lo que yo temo m>sK PA4HICIPANHE0 S-, traa/ar alrededor de lo que podéis temer de peor, en comn, la familia y 3os mismo M E0 +racias Al&uien m>s PA4HICIPANHE0 ;o 6uiese querido 6alar de mis tetnores de que la terapia no pudiese tener é7ito PA4HICIPANHE0 PA4HICIPANHE0 Por qué no traa/ar con la madre, con la an) !b
sledad de la madre, que es qui:> el 3erdadero paciente desi&) nado M E0 Se lo podr-a 6acer si se construyera la situaci.n as- Cuando 3eo una familia, pienso en términos de lo que la familia entera 6ace y no de lo que 6ace una sola persona Si por otra parte es necesario un paciente, prefiero serlo yo PA4HICIPANHE0 Por qué no tomas t su lu&ar M E0 El prolema, si tomo su lu&ar, es que 6aré como si pu) diese estar en su lu&ar, lo que es imposile, pues no estamos nunca en el lu&ar del otro Crearé mi lu&ar en nuestro sistema Puedo ser el paciente en m- lu&ar Eso camiar> la distriuci.n de los roles en nuestro sistema, pero ser> mi lu&ar, no el suyo 4etomo a la simulaci.n M E0 9osotros 3eis, se5or, se5ora, 3uestra 6i/a (oélle me dice0 JSoy muy sensile a lo que 3i3en mis padres, mis padres son personas que quieren de tal manera lo me/or para nosotros que no osan creerlo y pasan su tiempo en temer Entonces, yo, como terapeuta, entiendo ien que est> por decir0 JEllos no tienen que creer lo peor, lo peor est> aqu- *o peor, soy yo ; no tenéis que estar espantados, est> ya aqu-R Pero yo, estoy espantado, estoy espantado porque es una situaci.n muy dolorosa y muy peli&rosa Es como si (oélle tratara de deciros0 JDe/ad de tener miedo 'ué puede pasar peor de lo que me pasaK ; me di&o0 JC.mo de/ar a una (o3en de esta edad tomar el lu&ar que tomaR Entonces, para m-, es qui:> su manera propia de mostrar su afecto por 3osotros, de deciros0 JNo 6ay m>s ra:.n para tener miedo, llenaré de tal manera el espacio que 6ar> de qué tener miedo, ma5ana mediod-a y noc6eR ; si mi idea un poco loca no es enteramente falsa, lo que aparece como rec6a:o a alimentarse es qui:> su manera propia de amaros Pero qué e7tra5a manera de amarQ 'ué pens>is de ello, (oélle (Og**E0 ;o, ya 6e dic6o todo M E0 Henéis ra:.n 'ué pens>is 3os, se5or E* PAD4E0 ;o di&o que entonces en el fondo, es porque se quiere prote&erlas que se las an&ustia M E0 Como 3eis, lo que me &olpea muy fuerte, se5or, es que ya dec-s0 JPrefiero ser yo el culpale, a fin de que mi 6i/a pueda respirar, a fin de que sea por causa m-a que no est> ienR Es como si di/erais0 JSi 6ay al&uno que dea ser culpale, seré yoR 'ué pens>is 3os, se5ora *A MAD4E0 Bn poco es lo que dec-s0 la culpa es nuestra si (oélle tiene ese prolema
1+2
M E0 Henéis ra:.n en decir lo que dec-s, y eso muestra ien 6asta qué punto me e7preso mal ; eso muestra ien 6asta qué punto es necesario que piense en lo peor Porque Ima&inaos, no 6e pensado en lo que dec-s a6ora, pero me doy cuenta de que 6alo de tal manera mal, que se podr-a comprender eso ;, c.mo puedo 6acer una psicoterapia si 6alo tan mal ; si no di&o solamente tonter-as, sino cosas estpidas, cosas que 6acen mal y que perturan (Og**E0 Es peor que t, mam> *A MAD4E0 S-, parece, 3erdaderamente E* PAD4E0 ;o no sé, doctor, 6allo que dec-s cosas que no son tan tontas, finalmente 3M. E. se calla y s!s-tra. (Og**E0 Henéis miedo de qué para terminar Estamos 6a) ituados en casa Mam> tiene miedo de todo, de lo que pasa, de lo que no pasa, de ma5ana, al mediod-a, de tarde, todo el tiempo F de qué tenéis miedo, de ese modo M E0 Ante todo ten&o miedo por 3os, y adem>s ten&o miedo de no ser capa: de ayudaros ; es tan importante que se>is ayudada que, 3erdaderamente, me espanta no ser capa: de ayudaros ; quisiera 6aer dado una esperan:a a 3uestros padres y a 3uestra familia, mientras que no soy capa: de ayudaros 8e a6- de qué ten&o miedo E* PAD4E0 No estoy de acuerdo en lo que se dice de mi mu/er Ella es c>lida, educ. a las ni5as en el amor, no en el temor rmelo M E0 ;o pienso que 3uestra 6i/a est> en una situaci.n f-sica que puede ser peli&rosa, y me pre&unto c.mo 6aré para ayudaros Hemo no ser capa: de ayudaros *A MAD4E0 Creéis que es 3erdaderamente serio de 3uestra parte saemos aqu- sin ser capa: de ayudamos, sin estar se&uro Hanto si es &ra3e, como si no lo es M E0 Henéis muc6a ra:.n Es tan serio que no puedo traa/ar con 3osotros sino diciéndoos0 JNo estoy se&uro de ayudaros en asoluto, y qui:> deierais constantemente pre&untaros si no ser> necesario camiar de terapeutaR (Og**E0 No, asta con esto E* PAD4E0 Sois como nosotros Pre3éis lo peor para que no suceda M E0 Me 6uiera &ustado que no sucediera, efecti3amente 1D
Entonces, ten&o una proposici.n que 6aceros Como tan ien lo 3io (oélle, soy al&uien que pide constantemente ayuda ; es cierto que ten&o la impresi.n de que sin 3osotros y sin 3uestra ayuda, no puedo 6acer nada Por otra parte, no me atre3o a comen:ar No sé No sé ni siquiera qué podr-a deciros (Og**E0 Empie:o a tener 6amre, a6ora M E0 Perd.n, ol3idé decir que temo i&ualmente que las cosas camien demasiado r>pido ; cuando dec-s que tenéis 6amre, ten&o un poco de miedo Perd.n, se5or E* PAD4E0 Di/e a mi mu/er que sois c.mico M E0 Entonces, si queréis a pesar de todo 3ol3er a 3erme, quiero que lo 6a&amos sin prometeros nada, y se 3er> entonces 8asta la 3ista Mony Elkaim se despide de todos y dala mano a cada miem bro de la familia simulada.L M E0 'uiero pedir a6ora a los miemros de la familia simulada damos parte de lo que 6an 3i3ido antes de que ten&amos un deate m>s &eneral Uirigi%ndose a aula.L LJ!er/is comen0ar PAB*A? Es astante dif-cil de decir, porque en ciertos momentos se&u-a lo que dec-ais, por lo tanto, desempe5aa el rol, y en otros momentos no lo desempe5aa 'uer-a desempe5ar el rol de una persona que no se preocupaa tanto del prolema de anore7ia de su 6ermana Al comien:o, fin&-a qui:> no interesarme 3erdaderamente en el desarrollo Pero, aun si fin&-a esta acti tud, me encontré tomada en el desarrollo Por lo tanto, a pesar del rol en que 6a-a decidido entrar, al&o 6a-a pasado Cuanto m>s a3an:aa la sesi.n, m>s creque ia a pasar al&o ; a6ora que la sesi.n termin., como miemro de la familia ten&o an una pre&unta frente a 3os Hen&o una pre&unta para prose&uir el procedimiento, es todo lo que quer-a deciros MONI'BE0 Al principio, ten-a la impresi.n de que yo inter3endr-a m>s y después, finalmente, de/é 6acer Hen-a la impresi.n de que eso pasaa sore todo entre los padres y mi 6ermana Me puse un poco en retirada Por cierto que si fuera necesario continuar, 3ol3er-a a la pr.7ima sesi.n *A MAD4E0 Al principio estaa muy inquieta porque me dec-a que deer-a desempe5ar un rol muy imporante, y lue&o, poco a poco, por el modo en que la sesi.n se desarrollaa, me sent- como si tu3iera cada 3e: menos importancia Cuanto m>s a3an:aa la sesi.n, m>s se ali&eraa mi fardo, pero al mismo tiempo, de al&n modo, eso me molestaa tamién Hen-a &anas de que el prolema continuara sin emar&o un poco Mi Importancia en la familia 3enia del prolema de (oélle Esta importancia disminuy. a medida que el 1D
prolema de (oélle estaa en 3-as de soluci.n E* PAD4E0 Creo que para m-, 6uo dos fases en esta sesi.n Primeramente una fase en que estaa furioso porque (oélle no era la enferma desi&nada *ue&o una se&unda fase donde 6uo cosas que me eno/aron y cosas que me &ustaron Estaa eno/ado contra mis 6i/as que parec-an decir que el prolema 3en-a de nosotros Nos traicionaan decididamente Estaa eno/ado de que se atacara a mi mu/er, que sent-a des&raciada a mi lado ;, por otra parte, me sente7tremadamente ali3iado de que Mony surayara su incompetencia Al principio, ten-a muc6o, muc6o miedo de él, y lue&o de/. de amena:arme, y, en fin, me ari. perspecti3as en las cuales no 6a-a pensado, y tu3e &anas de continuar (Og**E0 8alaré de c.mo sent- esta sesi.n, y tamién de lo que pude otener de ella Primeramente, traté, para desempe5ar el rol de (oélle, la anoré7ica, de recordar lo que 6a-a cre-do perciir en pacientes anoré7icos En ese momento, el sistema familiar era una noci.n ficticia Pro&resi3amente, 3erdaderamente me reencontré en el lu&ar que el /ue&o me 6a-a dado, y no era m>s un /ue&o Es decir que en 3arias ocasiones, me pareci. que mi padre, mi madre y yo misma trat>amos de urlar lo que 6ac-a Mony, a causa de mi pr>ctica, de mi oficio Lsoy psiquiatra ; después, al cao de un cierto tiempo, eso ya no fue posile En ese momento, ciertamente, se forma un nue3o sistema entre el terapeuta y la familia, es lo que comprend- Eso me pareci. muy, muy interesante para mi pr>ctica El nue3o sistema, el que ser> terapéutico, no se forma ense&uida Pero es oli&ado que e7ista en un momento u otro, y eso inclusi3e en la simulaci.n 24EDA ;o estu3e al principio irritada de que se 6alara de un suéter en lu&ar de 6alar del prolema ; tamién porque el terapeuta utili:aa &randes palaras sore las emociones sin que yo lo pudiera creer Después, me aurr- un poco, pero estaa al mismo tiempo ali3iada de que el terapeuta se ocupara de los padres As- al final, estaa lista para 3ol3er a la terapia, s-, de acuerdo, pero sin esperan:a M E0
1D
PA4HICIPANHE0 'uisiera saer lo que (oélle sinti. cuando Mony Elkaim le 6al. de su suéter (Og**E0 Era comple/o, estaa a la 3e: molesta como paciente, y di3ertida Estaa toda3-a en la primera fase de la sesi.n, en que aun no estaa interesada Pero la pro3ocaci.n era demasiado importante para que pudiera continuar estando yo misma afuera, y me puse r>pidamente en la piel de la anoré7ica M E0 Con ese suéter, comprend- que, sin 6acerlo a prop.sito, 6alaa de una met>fora0 las partes que rillaan y las que no rillaan 9e-a esos p>/aros que quer-an 3olar y sent-a que al&una otra cosa estaa por decirse sin que yo tu3iera que e7plici) tarla PA4HICIPANHE0 Estoy sorprendido, porque tom>steis una po) sici.n a/a frente a los padres 'uisiera saer si 6acéis eso 6ai) tualmente si tenéis el 6>ito de colocarlos en posici.n m>s alta y de pre&untarles lo que ellos podr-an encontrar como soluci.n a lo que est> por suceder en la familia M E0 *o interesante es que me sir3o sore todo de esta posi) ci.n en las simulaciones en los &randes &rupos Por qué Porque 6aéis 3enido aqu- para escuc6ar a personas que aparentemente tienen una e7periencia astante lar&a, y e7iste ya el peli&ro de que os ima&inéis que ellos saen m>s que 3osotros sore lo que podr-ais 6acer Para m-, es e7tremadamente importante, cuando 3en-s aqu-, que descur>is 3uestra rique:a, m>s que la m-a C.mo puedo 6acer para 6acer aparecer me/or 3uestra rique:a Proponiendo el e/emplo de un terapeuta que quiere ocupar el menor lu&ar posile Entonces, qué se descure 'ue cuanto menos lu&ar tomo, m>s tomo lu&ar ; entonces, eso se 3uel3e una situaci.n in3eros-mil Se me dice0 JPero, toma tu lu&arQ Homa el lu&ar que se quiere que ten&as, como terapeuta o como animador de este seminarioR ; respondo0 J'ueréis realmente que tome un lu&ar Desde cu>ndo al&uien puede curar a al&n otro Desde cu>ndo al&uien puede ense5ar al&o nue3o a al&n otro No puedo sino ayudaros a encontrar en nosotros lo que ya est> all- No puedo sino ayudaros a captar cosas pr.7imas a 3osotrosR ; eso es lo que 6ace que, frecuentemente, en animaciones con amplios &rupos, tome el mayor lu&ar posile tomando el menor posile 'uién desea tomar la palara PA4HICIPANHE0 ;o 3ol3er-a a las oser3aciones que fueron 6e) c6as al principio, es decir sore esta noci.n de Jconstrucci.n de lo realR Me dec-a que era una familia en simulaci.n, que sus miemros lle&aron con una especie de re/a, que 6a-an planifica
55)
do un poco lo que eran ; lue&o, a tra3és de lo que pasaa, pien) so que se construy. otra cosa que lo que tra-an Hen-a &anas de 3ol3er a las familias que no son simuladas y a este aspecto de construcci.n, qui:>s aun de creaci.n, que puede producirse en la relaci.n con la familia M E0 *as familias simuladas son en &eneral m>s reacias al camio que las familias no simuladas *os miemros de familias simuladas tratan de mantener el escenario que construyeron Pero como el (ue&o se llama JpsicoterapiaR, en un momento dado, se descuren en el proceso de camio *o que 6ace que, para m-, 6ay se&uramente diferencias entre una familia simulada y una que no lo es, pero el camio se opera en los dos casos ;, en los dos casos, desconf-o del camio No se 6ala de cuerda en la casa del a6orcado No se 6ala de camio a personas que tienen necesidad de un no camio Por otra parte, estoy tan enamorado de la e7traordinaria elle:a de la arquitectura que construyen las familias y las pare/as que, a 3eces, no oso camiar ese notale edificio Me di&o entonces0 J; si m>s ien se coe7istiera con esta situaci.nR o0 JCon qué me me:cloR Cuando el s-ntoma es un s-ntoma doloroso y peli&roso como en este caso, me siento completamente des&arrado entre este Jcon qué me me:cloR y el ries&o que el s-ntoma 6ace pesar sore el paciente y la familia Intenté entonces aqu- respetar el equilirio e7istente proponiéndome a m- mismo como s-ntoma, lo que e3identemente modifica por otro lado este equilirio y are entonces otras 3-as Muc6as &racias a los miemros de la familia simulada, muc6as &racias a todos 3osotros
Herapeutas y pare/as Dos super3isiones
*as dos super3isiones 3ueltas a transcriir aqu- fueron efec) tuadas durante un con&reso sore las terapias de pare/a que se celer. en 4oma *a primera se desarroll. en francés, con una psicoterapeuta de ori&en italiano? la se&unda tu3o lu&ar en in&lés, con una psicoterapeuta que traa/a en los Estados Bnidos *a primera situaci.n, espero, permitir> al lector 3er astante claramente c.mo mi modelo de terapia de pare/a puede aplicarse en un conte7to que incluye los diferentes miemros del sistema terapéutico En la se&unda situaci.n, deeré aandonar en parte mi modelo para traa/ar m>s directamente con la psicoterapeuta? este i]F]F
modelo modelo no se 3ol3e 3ol3er> r> esclar esclarece ecedor dor por por el loqu loqueo eo del del sistem sistema a terapéutico m>s que a los fines de super3isi.n Este Este cap-tu cap-tulo, lo, como como el prece preceden dente, te, se quiere quiere que sea una ilustraci.n de los conceptos introducidos en los tres primeros ca) p-tulos *a super3isi.n titulada JBn nudo parad./icoK mostrar> ien, sin emar&o, c.mo un traa/o de super3isi.n o de terapia desorda todo modelo, cualquiera sea su fle7iilidad DE* SISHEMA DE PA4E(A A* SISHEMA HE4APgBHICO MON; E*[AlM0 Para empe:ar, propon&o esta ma5ana que, uno de 3osotros presente en super3isi.n un traa/o terapéutico con una pare/a Esta super3isi.n me permitir> descriiros mi modelo para las terapias de pare/a 'uién entre 3osotros es el 3oluntario UBna participante le3anta la manoM mano M M E0
M E0 He escuc6o l es el prolema mico ; ella dec-a que, en la i&lesia, él 6a-a (urado fidelidad M E0 *a se5ora dice0 JEl se5or es in"ier. Otros reproc6es m>s relaci.n con lo que pasa Se trata de lo que constru- como modelo para tratar de comprender una situaci.n y para ayudar a las personas a camiar Diu/o por lo tanto esto fi&ura !@F i]F]F
El se interesa por otras mu/eres y no solamente por m-
2i&ura !@
M E0 'uieres muc6o a esta mu/er, importante contarme Cuando el la:o nico entre de esta psicoterapia, una terapia firmada a ser utili:ale, y utili:ado Diré0 primera re&la Cuando 3eis una pare/a o una familia, escuc6ad lo que nace en 3osotr 3osotros, os, presta prestadl dle e o-dos o-dos Se&un Se&unda da re&la0 re&la0 no lo utilicéis tal cual, porque lo que sent-s en ese momento, si lo se&u-s, os arrast arrastrar rar> > a menudo menudo 6acia una 6omeosta 6omeostasis sis m>s &rande &rande del del sistema terapéutico En &eneral, la primera cosa que os 3iene a la mente es a la 3e: muy importante, porque indica el puente nico entre las personas y 3osotros, y corre el ries&o al mismo tiempo, si la se&u-s como la 3i3-s, de conduciros a permitir a los miemros del sistema sistema terapéuti terapéutico co no pone0 en cuestiona cuestionamient miento o sus creencias creencias profundas Es decir, para retomar mi len&ua/e, arries&>is refor:ar tanto 3uestra construcci.n tiei mundo como la de ellos, y crear un sistema terapéutico onde cada uno ayudar> al otro a no camiar Entonces, qué 6acert Dee decirse0 Jlo que yo siento es im) portante, lo que siento tiene una funci.n y un sentido importante en i]F]F
este conte7to para ellos como para m-, pero deo utili:arlo ae otra manera maneraK K C.mo C.mo *o 3erem 3eremos os Nuestr Nuestro o traa traa/o, /o, m>s all> all> de la super3isi.n de una terapia de pare/a, consistir> en refle7ionar sore la cues cuesti ti.n .n si&u si&uie ient nte0 e0 JC. JC.mo mo pued puede e el tera terape peut uta a traa traa/a /arr situ>ndose al mismo tiempo en el cora:.n de la autorrefe) renciaK A6ora, 3ol3amos a mi modelo de terapia de pare/a *a mu/er di/o, si comprend- ien Jmi marido no se ocupa de m-K
i]F]F
s que de mu/eres s que de mu/eres M E0 Perfecto Henemos aqu- un ciclo con un se5or que se ocupa de otras mu/eres y no nicamente de su esposa Entonces, mi 6ip.tesis es la si&uiente0 si ellos 6an permanecido /untos tanto tiempo, es que ese comportamiento tiene una utilidad, si no ella lo 6uiera de/ado ndole 3ol3er a 3i3ir con él M E0 Cuando su marido est> de rodillas, por qué acepta ella 3ol3er con él Podr-a decirle0 JHe amo muc6o, querido marido de rodillas, quédate de tu lado y yo del m-oK Por qué acepta s que ella Mi 6ip.tesis es la si&uiente0 el Jpro&rama o5cialR de la se5ora es0 Jquiero ser la nica mu/er que cuentaK0 lo que yo llamo Jla construcci.n del mundoK de esta persona ser-a0 Jlas otras mu/eres pasan antes que yoK0 mi 6ip.tesis ser-a, pues, que el marido esculpi. su comportamiento de tal suerte que refuer:a la construcci.n de su mu/er cuando él se conduce como lo 6ace
Ufi&)
Se5ora
4.5. 9eora: 'uiero ser la nica mu/er que cuenta
Se5or
C M. 9eora *as otras mu/eres pasan antes que yo El se interesa en otras mu/eres y no nicamente en m-
M E0 A6ora es necesario 3erificar? se puede pre&untar0 JPodéis 6alarme de una situaci.n seme/ante en que 6ay>is tenido la impresi.n de que otras mu/eres pasan antes que 3osK <*ANCA Creo que ella tenia esa impresi.n M E? Contadnos <*ANCA Ella tenia dos 6ermanas El padre estaa a menudo ausente y ella era la se&unda *a mayor y la menor eran las pre) feridas de su madre y de su padre M E0 Me diréis0 JMony Elkaim, siempre 6emos insistido en el enfoque sistémico sore el cuestionamiento de un 3-nculo causal directo entre el pasado y el presente ; 6e aqu- que, /ustamente, es lo que pareces defender No est>s por 3ol3er a esta ant-fona0 J*os padres een y los 6i/os trincanR ;a, en tiempo de los profetas, el refr>n J*os padres comieron las u3as 3erdes y los dientes de los 6i/os se irritaronK [F;e!uiel 13, 2 no era citado ms >!e -ara ser com)atidoK. (es-ondo a esto: no creo >!e ;aya !n &nc!lo ca!sal directo entre el -asado y el -resente, -ero -ienso >!e ;ay !n cóctel com-le*o de elementos ligados a la &e0 al -asado y al -resente en el c!al los elementos ;istóricos no -!eden ser s!)estimados. Esos elementos ;istóricos c!entan, -ero no desem-eBan !n -a-el ca!sal. Mi inter/s -or los tra)a*os de Ilya Prigogine y de s! e>!i-o so)re los sistemas a-artados del e>!ili)rio esta)a -or otra -arte ligado a la im-ortancia del a0ar, de las am-li"icaciones y de las )i"!rcaciones en esos sistemas es-ec"icos c!ya ;istoria ya no tiene !na e&ol!ción lineal. a ;istoria c!enta, -ero es !na ;istoria no ca!sal, es !na ;istoria en la >!e los elementos del -asado act8an sin ser "or0osamente la ca!sa del com-ortamiento de ;oy. LEst claro PA4HICIPANHE0 Puedes precisar un poco m>s este punto en particular M E0 Durante muc6o tiempo, en psicoterapia, 6emos 6ec6o como si nuestro comportamiento de 6oy estu3iese li&ado al pasado se&n una relaci.n causal Para m-, la elecci.n no es entre la afirmaci.n Jno 6ay 3-nculo entre el pasado y el presenteR y la afirmaci.n opuesta J8ay un 3-nculo de causa a efecto entre el pasado y el presenteK Propon&o una tercera 3-a que es0 J8ay un 3-nculo entre el pasado y el presente, pero este la:o no es un 3-nculo de causa a efectoR 8ay un la:o seme/ante a aquel que e7iste entre los diferentes elementos que componen un c.ctel Cada elemento /ue&a, pero nin&n elemento es la causa del &usto del c.ctel
Cuando planteo una pre&unta sore el pasado a partir del re) proc6e que una persona diri&e, en el presente, a su c.nyu&e, no es porque pienso que e7iste un 3-nculo mec>nico, autom>tico entre ese pasado y el presente Para m-, los elementos li&ados a nuestro pasado son necesarios pero no suficientes Es necesario aun que e7ista un conte7to particular para que esos elementos puedan amplificarse 6asta el punto de 3ol3erse dominantes en una relaci.n espec-fica En un determinado conte7to, esos elementos puedan quedar quietos? en un conte7to diferente, pueden adquirir en el seno del sistema una funci.n tal que se amplificar>n y podr>n desde entonces aparecer como determinantes Para que una cuerda 3ire en nosotros, es necesario no solamente que sea nuestra sino tamién que un conte7to adecuado 6aya podido 6acerla 3irar En nomre del principio de equifinalidad, se&n el cual los elementos seme/antes pueden estar li&ados a los elementos ini) ciales diferentes, el enfoque sistémico prefiri. desconfiar de la l.) &ica lineal causal Eso no contradice el 6ec6o de que el pasado pueda contar, pero quiere decir que no es la nica causa de lo que sucede 6oy *os elementos del pasado son uno de los factores que actan, no son la causa 9es la diferencia El c.ctel puede camiar de &usto si camiamos uno de los componentes, una situaci.n terapéutica puede modificarse sin que ten&amos que actuar for:osamente sore el solo e/e del pasado 9ol3amos a la situaci.n presentada *a se5ora dice0 JMi marido prefiere otras mu/eres a m-R ;o pre&unté0 JEsta mu/er 6ar> 3i3ido en el curso de su pasado situaciones seme/antes con otras mu/eres que eran ya preferidas a ellaK ; a6-,
1 lí)
M E0 Se podr-a decir i&ualmente que, cada 3e: que el se5or eli&e a la se5ora, ésta lo disuade de una manera e7pl-cita o impl-) cita Puede entonces, pro&resi3amente, dise5arse un comporta) miento, en que él no le muestra m>s que la prefiere Pero, de nue3o, no 6ay solo elemento causal Para que el se5or acepte amplificar este tipo de reacci.n, es necesario toda3-a que ella corresponda tanto a sus creencias propias cuanto a las re&las li&adas a los sistemas en los cuales amos e3olucionan 'uisiera darte i&ualmente otra respuesta que acentuar-a m>s el aspecto pra&m>tico de mi modelo Para eso, deo contarte una 6istoria 8uo una época de mi 3ida en que traa/aa en el sur del ndome0 JC.mo podéis ayudarme entonces, y se 3a ;o cre-a que era una roma que me 6a-an 6ec6o los miemros de mi centro y recordé la 6istoria sucedida en Palo Alto, donde se le 6a-a pedido a (ackson, que era psiquiatra, que tu3iera una entre3ista con un psic.tico delirante que se cre-a un psiquiatra0 Es necesario a&re&ar que este ltimo era psiquiatra él mismo y que se le 6a-a pre&untado lo mismo que a (ackson Después me di cuenta de que era muc6o m>s simple que eso Descur- que en el sur del n 6aituados a que los médiums entren en trance y les descrien el prolema que los preocupa S.lo después comien:a el traa/o de e7orcismo Por lo tanto, si yo no sa-a lo que él ten-a, c.mo pod-a pretender ayudarlo 2ue necesario que el 4e3erendo Padre de la i&lesia pentecostista le di/ese0 JElkaim se ocupa de las ra:ones materiales de los prolemas, yo me ocupo de las r a:ones espiritualesR para que 3ol3iese a 3erme? pudo desde entonces aceptar 3ol3er? aun si yo era incapa: de adi3inar lo que ten-a Cu>l es la relaci.n con tu pre&unta Es la si&uiente Sé ien que el comportamiento del marido no est> qui
11'
:> li&ado al pasado de la se5ora, lo sé pero si yo reencuadro su comportamiento como protector con respecto al des&arramiento de la se5ora, camio completamente su manera de 3er Si ella me dice0 JEfecti3amente, no tu3e nin&una e7periencia como ni5a de 6aer sido preferida, es cierto, no ten&o nin&una e7periencia como mu/er de 6aer sido al&uien que contaa o que era la primera0 contaa, pero como se&unda o tercera, no como primeraR, si ella me dice eso, retomo0 JEn qué medida este marido, sin 6a cerlo e7presamente, no encontr. una manera ori&inal, dolorosa, de mostrar su amor, teniendo un comportamiento Insoportale que lo da5a a él, pero que podr-a prote&er a ellaR Cuando inter3en&o asi, los miemros de la pare/a caen de las nues, pero no pueden rec6a:ar completamente el la:o que estale:co Eso los 6ace 3i3ir de otra manera su drama Comprendes lo que quiero decir Mi traa/o es un traa/o aritrario que no pretende la 3erdad *o que usco, es construir intersecciones de construcciones de lo real que ayuden a las personas a camiar Por otra parte, me pre&unto si toda psicoterapia no funciona de esta manera, cualquiera que sea su teor-a suyacente A6ora, qué es lo que el marido reproc6a a la mu/er ndose por la 3entana cuando él ten-a @ a5os M E0 No di&as demasiado, de otro modo pierdo el placer de uscar Es como una no3ela policial que diera la cla3e del misterio en la primera p>&ina 'uién leer> seme/ante no3ela Dé/ame el placer de descurir partiendo de las que/as que cada uno e7presa 'ué es lo que el marido reproc6a tamién a su mu/er
1 17
M E0 El oser3ador no e7iste separado del sistema oser3ado Sur&e en el sistema mismo que oser3a *o que yo quisiera 6acer con 3os, con s <*ANCA0 'ue es un poco desordenada M E0 'ué m>s <*ANCA0 El se7o, eso funciona M E0 s Hen&o necesidad para construir ese modelo de sentir al&una cosa que me conmue3a *o que encontraré ser> pues al&o en la inter secci.n de lo que parece importante no solamente a is un marido que responda0 JNo ten&o nada que reproc6ar a mi mu/er, es perfectaR Puede ser tamién que él insista, declarando0 JElla es perfecta, soy yo el que no tiene ra:.nK Entonces, usc>is en qué puede serle til no tener ra:.n Cu>l es la construcci.n del mundo del marido que 6ace que él no pueda ser sino el malo ; en qué el 6ec6o de que ella lo trate como el malo, puede ser til a esta pare/a 'ué m>s le reproc6a el marido nunca contenta, no tiene nunca astante M E0 *o que se5al>is muy adecuadamente, es que aun si cada uno de los ;ec;os >!e el marido re-roc;a a s! m!*er -!ede -arecer sec!ndario s! -!nto com8n es im-ortante. Es: 7Ella no
116
o
(" i V G ]f [. $.
T
< tc 3
5 c
T/
K)
E a L.
¿¡ o
o?
cft
E u 2
m e d a t n e t n o c > t s e o n a l l E
E& o- <
h c G)b
§[
J Sf £
c Y u]u O d ( C c id
% O
E c \ $ % s R c PI 9 S i@
T
or
$
crex
1
I icF cu i
C '0
9i
j C/
est> contenta ;o no soy al&uien que puede contentarla En qué medida no podemos construir como 6ip.tesis la dole coerci.n si&uiente0 J'uiero que se esté contento de miK, pero por otra parte JNo ten&o la e7periencia de 6aer contentado a aquellos que eran importantes para m-K Podemos diu/ar esto as- (figura 1). 'ué piensas t, ticamente con3encido de que no se estaa contento de él porque cuando ten-a @ a5os, su madre se suicid. tir>ndose por la 3entana El padre siempre pretendi. que ella se 6a-a ca-do y los miemros de la familia siempre confirmaron esta 3ersi.n M E0 contenta del marido, refuer:a sin dudarlo la construcci.n del mundo de éste0 JNo se puede estar contento de m-R 8asta el presente, todo lo que 6ice era muy simple Se trataa simplemente de descriir c.mo parto del reproc6e que uno 6ace al otro para mostrar la funci.n del comportamiento que se quiere modificar en el otro, y c.mo ese comportamiento puede /ustamente ser3ir para Jprote&erK a aquel que se que/a Os muestro las funciones de los s-ntomas El s-ntoma, para él, es que su mu/er no est> contenta de él? el s-ntoma, para ella, es que su marido prefiere a otras mu/eres 9eo all- aa/o un se5or que le3anta la mano PA4HICIPANHE0 8asta el presente, todas las inter3enciones
fueron 6ec6as por mu/eres Eso dee tener un sentido con respecto a esta situaci.n de pare/a M E0 C.mo te llamas PA4HICIPANHE0 2idel
I4isas en la sala y aplausos prolon&ados.) M E0 Al comien:o de este traa/o partimos de los reproc6es de una primera persona con respecto a una se&unda a fin de construir 6ip.tesis li&adas a la 3isi.n del mundo de esta primera persona *ue&o, 3imos que nuestras 6ip.tesis eran efecti3amente sustentadas A6ora, es necesario continuar con la terapeuta y el super3isor para comprender sus propias resonancias con respecto a los temas seleccionados Entonces, dime, qué piensas, sica, podr-amos ir muc6o m>s le/os Aqu-, estamos en un seminario con un contrato muy diferente No nos di&as sino lo que quieras 3erdaderamente decimos ndo lo
<*ANCA0 Me conmue3e a causa de su pasado Si no tu3iera el -asado >!e tiene...
M E0 *o que me dices es0 KEste 6omre 6a perdido un pro&e) nitor /o3en, como yo, y me siento muy cerca de él Me conmue3e la idea de que no se 6aya podido mantener con 3ida al padreK <*ANCA0 S, as es. M E0 Entonces, en este momento, podemos pre&untamos en qué medida lo que siente tico Nuestro esquema se 3uel3e por lo tanto el si&uiente [figura 13N
Se5or
Se5ora Preferencia
Mantener al pro&enitor con 3ida Mantener al pro&enitor con 3ida
Preferencia
2i&ura !
8emos 3isto que s Importante *o que se /ue&a en super3isi.n, por e/emplo, es una intersecci.n entre elementos li&ados al terapeuta, a la pare/a, pero tamién al super3isor, a las re&las de la instituci.n en la cual 6a 12+
tenido lu&ar la terapia, a las re&las del &rupo de super3isi.n, etc Aqu-, el término Jele&idoR puede m>s all> de los elementos puramente familiares, remitir a otras referencias
121
*a Intersecci.n entre las construcciones de lo real del terapeuta y de los miemros de la familia est> li&ada, se&uramente, a elementos propios de esas personas, pero esta intersecci.n no es en manera al&una reducile a estos solos participantes 1 En ciertas sit!aciones, so)re lo >!e ;ay >!e insistir, es ms )ien so)re el &nc!lo con las reglas de la instit!ción? en otros es so)re !na intersección con otros conte4tos. A>!, -or e*em-lo, encontr/ -!ntos >!e ligan a Cianca a esas -ersonas y >!e me conm!e&en nat!ralmente a m tam)i/n, de otra manera no ;!)iera -odido decir nada. Podemos &i&ir di"erentes cosas. o >!e me interesa es la c!estión L>!/ es lo >!e ;ace >!e yo &i&a esta cosa en este momento -reciso L!l es la "!nción, no solamente -ara m, sino tam)i/n -ara el conte4to ms am-lio al >!e -ertene0co LF cómo !tili0ar esto El tiempo se desli:a con marc6a 3erti&inosa y ya tenemos que separamos Muc6as &racias a
BN NBDO PA4AD(ICO M E0 'uién quisiera tener la &entile:a de 3enir aqu- y de presentar una situaci.n de terapia de pare/a UBna participante se ofreceV M E0 C.mo te llamas (OAN? (oanHen&o miedo de 6acerlo M E0 Entonces no lo 6a&as? por qué deer-as 6acerlo, (oan (OAN0 Porque es ueno para m- M E0 (oan me dice a la 3e:0 JHen&o miedo de 6acer esoR y JEs ueno para m-R Es muy importante ;a estamos traa/ando Deo conser3ar en la memoria que puede ser que lo que ella dice se aplique ya a una intersecci.n posile entre la situaci.n de pare/a que nos presentar> y ella misma No ten&o nin&una idea de la relaci.n que pueda 6aer entre una situaci.n donde lo que es ueno para s- es /ustamente lo que puede dar miedo y el sistema terapéutico del cual nos 6alar> Pero 3eremos Puedes comen:ar a presentamos la situaci.n de esa pare/a (OAN0 Es una pare/a cuyos miemros pertenecen a culturas diferentes El 6omre, que es 3ietnamita, tiene WW a5os *a mu/er es c6ina, nacida en los Estados Bnidos Hienen tres 6i/os *os 3i cuatro 3eces M E0 Cuando fueron a 3erte, qué que/a e7presaa cada uno ! 9er el cap-tulo titulado0 KDel sistema terapéutico, al ensamla/eK, para un desarrollo m>s profundi:ado de este punto
(OAN0 El marido estaa deprimido y encoleri:ado con su mu/er Disputaan Estaan de acuerdo sore el 6ec6o de que no lo&raan comunicarse M E0 Puedes darme e/emplos m>s concretos de las ra:ones de sus conflictos (OAN0 El dice que ella no lo escuc6a M E0 Si empleo mi modelo, dir-a0 el pro&rama oficial del se5or es J'uiero que ella me escuc6eR (OAN0 ; que me respete M E0 Esto podr-a formar parte de un se&undo ciclo Pero, de acuerdo, traa/emos, pues, con Jescuc6ar y respetarR Si&uiendo mi modelo, formular-a una pre&unta a este 6omre para 3erificar mi 6ip.tesis sore su Jconstrucci.n del mundoR *e pre&untar-a0 K8aladme de la e7periencia que 6aéis tenido de ser escuc6ado En 3uestra familia de ori&en, quién os escuc6aa *o saes t ;5A6: "q!e ;a credo >!e la -reg!nta se diriga a ella misma y no a s! -aciente : Sobre "odo mi madre. M E0 Escc6ame, le 6iciste esta pre&unta (OAN0 No M E0 Saes si pudo ser escuc6ado y respetado en su pa sado (OAN0 Por su 6ermana y su madre M E0 'ué 6ac-an ellas (OAN0 *e escuc6aan M E0 El te lo di/o (OAN0 S- M E0 Por lo tanto, di/o que su 6ermana y su madre lo escu) c6aan, pero que su esposa no lo escuc6a (OAN0 S- M E0 *o escuc6as t (OAN0 S- ; deo realmente 6acer esfuer:os No 6ala ien el in&lés Cuando 6alamos, lo 6acemos muy lentamente Deo 6alar muy lentamente y pedirle frecuentemente que repita, 6asta tal punto su pronunciaci.n es mala M E0 El dice, pues0 JCuando era /o3en era respetado, cuando era (o3en era escuc6ado, pero mi esposa no me respeta y no me escuc6a (OAN0 S- El era tamién respetado en 9ietnam porque era polic-a M E0 *o que trato de 6acer es intentar construir un modelo que me permita ayudar a los miemros de la pare/a a 3er lo que les sucede con otros o/os (oan me responde lo que pasa sin 6aer podido plantear pre&untas precisas a los miemros de la pare/a Por e/emplo, supones que este 6omre era respetado porque era polic-a Para m-, eso no es e3idente Pues, por qué me 6e 3uelto polic-a Es porque as- yo deer-a ser respetado'ué pasa
entonces con ese prolema de respeto Como la pare/a no est> aquy no puedo en3iar a (oan para 3erificar esta 6ip.tesis, pasemos a otro reproc6e (OAN0 El dice que su mu/er mira a otros 6omres y que él se siente en peli&ro M E0 Nue3amente, si me sir3o de mi modelo, deeré uscar, para comprender me/or su que/a, la e7periencia que tiene de 6aer estado en peli&ro 8as e7plorado esto (OAN0 No M E0 6ec6o para ser ol3idado No es m>s que una 6erramienta transitoria 8aces esto (soplando en el a"e) y se lo lle&a el &iento. Pre"iero seg!irte. !/ntame !na ;istoria. @ )lame de esa -are*a como &enga. (OAN0 No estoy se&ura de la manera en que deer-a presentarla M E0 Como ten&as &anas, como quieras (OAN0 Bno de los aspectos que 3eo y que 3i con esta pare/a es la diferencia cultural *a mu/er creci. en una familia c6ina, sin nin&una independencia con relaci.n a esta familia Su familia se ocupaa de un restaurante, y ella 3i3i. all- 6asta que conoci. a su marido Se casaron, y su familia nunca 6a-a 6alado el in&lés Cuando se cas., la familia c6ina no lo acept., ella quer-a que él traa/ara en el restaurante familiar sin que le pa&aran, adem>s de su traa/o afuera *a esposa se sinti. des&arrada entre su lealtad 6acia esta familia de la que nunca se 6a-a separado y esta alian:a nue3a que se 6a-a formado con su marido M E0 Por qué fueron a 3erte (OAN0 Porque disputaan constantemente y estimaan que no era saludale pelearse delante de los ni5os, aunque no sa-an c.mo 6acer de otra manera Cuando se presentaron en la instituci.n donde traa/o, no 3i3-an m>s en casa de los padres de ella 9i3-an solos ME0 Por lo tanto, te fueron a 3er porque disputaan y esti) maan que no era sano 6acerlo delante de los ni5os (OAN0 S- M E0 Entonces, por qué no disputan cuando los ni5os no est>n (OAN0 Porque los ni5os est>n siempre all- M E0 Por qué no ense5an a sus 6i/os que las disputas forman parte de la 3ida 'uién tiene necesidad de camiar una pa)r re/a que pelea
(OAN0 *os ni5os est>n presentes durante la sesi.n y 3en lo que pasa con los padres M E0 Por qué 3es a los ni5os con los padres (OAN0 Bna ra:.n pr>ctica9eo a las familias reunidas, no e7cluyo a los ni5os Pero est> tamién el 6ec6o de que no 6ay lu&ar donde de/ar a los ni5os, y no 6ay nadie que pueda cuidarlos M E0 Por lo tanto, 6ay una familia con un prolema de pare/a y no 6ay espacio para esta pare/a (OAN0 S- M E0 Por qué dees 6acer con ellos una terapia conyu&al o familiar (OAN0 Por qué M E0 S- (OAN0 No estoy se&ura de comprenderte Ellos 3ienen y piden ayuda M E0 Entonces, escc6alos, pero por qué quieres ayudarlos Para qué sir3e eso de ayudar a las personas (OAN0 Para qué sir3e ayudar a las personas M E0 S- Ellos est>n me/or y os de/an 'uién tiene necesidad de ayudar a las personas a aprender a de/arlo Pienso que ser-a una uena, idea mantener a las personas astante contentas para que quieran quedarse con nosotros, pero no astante sanas para que nos de/en 'uién tiene necesidad de que sus 6i/os lo de/en Es el drama de esta familia *a madre trata de de/ar a sus padres, pero feli:mente sus 6i/os no los de/ar>n 9an con ellos a terapia No tienen lu&ar donde de/arlos No se los puede de/ar en la sala de espera Deen quedarse con sus padres delante del terapeuta Entonces, pienso que no deer-as ayudarlos, deer-as tenerlos conti&o Deer-as pasar muc6o tiempo con ellos, escuc6arlos lo m>s posile, no ayudarlos, y aun tratar de no 6acer caso de lo que los des&arra Si te pones a comprender lo que les pasa, puede ser que un d-a eso ten&a sentido tamién para ellos, y entonces andar>n qui:> me/or y correr>n el ries&o de de/arte (OAN0 Eso no me molesta M E0 No te molesta que la &ente te de/e (OAN0 No M E0 C.mo lo lo&ras (OAN0 De otro modo, se quedar>n para siempre y no crecer>n nunca M E0 'uién tiene necesidad de crecer 'uieres t realmente crecer (OAN0 Entonces, t quieres que ellos queden adolescentes para siempre y que no de/en nunca a sus padres M E0 Es tanto m>s a&radale cuando las personas no os de /an En fin Por qué 6aces este oficio
(OAN0 Me &usta traa/ar con las personas M E0 Entonces traa/a con ellas, no las cures (OAN0 No los curo, se curan solos M E0 Contra ti (OAN0 Contra m- M E0 O conti&o (OAN0 Bn poco de las dos cosas M E0 E7pl-came c.mo los ayudas a de/arte (OAN0 No sé Es una uena pre&unta No estoy se&ura de que crecer>n al&n d-a M E0 Si no piensas que crecer>n un d-a, no 6ay prolema Por qué quieres 6alar de este caso (OAN0 Ellos no crecen astante r>pido M E0 Por qué te 3isitan (OAN0 Porque quieren quedarse /untos M E0 'ué tienes t contra las disputas (OAN0 Nada, si comaten lealmente M E0 H comates lealmente (OAN0 No siempre M E0 'ué es un comate leal (OAN0 No sé Si deiera comatirte, por e/emplo, no deer-a tener las manos atadas detr>s de la espalda M E0 Si deieras comatirme, me pe&ar-as
(OAN0 No f-sicamente Pero podr-a 6acerlo con palaras M E0 D.nde me alcan:ar-an tus palaras (OAN0 All- donde fueras 3ulnerale Puede ser el cora:.n M E0 En el cora:.n, o tamién d.nde (OAN0 En los o/os M E0 'ué o/o, el derec6o, el i:quierdo (OAN0 *os dos M E0 *os dos o/osD.nde tamién (OAN0 Proalemente en los .r&anos &enitales M E0 Dios m-oQ 2eli:mente no me peleo conti&o El cora:.n, los o/os, los .r&anos &enitales, d.nde m>s 3isas en la sala. (OAN0 Eso no asta M E0 Entonces las disputas pueden ser incre-lemente peli) &rosas S- Puede ser que deiéramos ayudar a las personas a no disputar (OAN0 Deemos ayudarlos a pelear M E0 A no pelearse o a pelear (OAN0 O a no pelear M E0 He lo pre&unto (OAN0 US-lenc-ol Pienso que para ayudarlosCuando me pre) &untas qué es un comate leal, me siento realmente loqueada M E0 Por qué no 6ay comate leal (OAN0 Pienso en c.mo peleo con el 6omre que cuenta para m- Esta ma5ana, traté de tener una disputa por teléfono a die: mil millas de distancia de aqu-, y me pre&unto si era un comate leal o no M E0 A die: mil millas Pienso que tiene suerte U4isasV (OAN0 Creo que él estar-a de acuerdo conti&o M E0 Estoy encantado de eso y somos as- por lo menos dos (OAN0 Sin emar&o no cort. M E0 Cortaste t (OAN0 No, nin&uno de los dos lo 6i:o M E0 Pero entonces, las disputas pueden ser uenas (OAN0 Creo que cuando 6alo de un comate leal, lo que quiero decir, Mony, es que, cualquiera que sea tu c.lera, es importante que el otro te pueda escuc6ar No es necesario que la acepten o que la comprendan, sino solamente que puedan escuc6ar esta c.lera ; en esa pare/a, eso no sucede M E0 Si tocas mis o/os, mi cora:.n y mis .r&anos &enitales, quéme queda para escuc6arte *as ore/as que flotan en el aire UA la saia: LJ!/ estoy -or ;acer osas m!y sim-les. En
s!-er&isión, no ;a)lis de !na -are*a o de !na "amilia, ;a)lis de !na Intersección entre -or lo menos tres sistemas: los de la -are*a, el tera-e!ta y el s!-er&isor. Por lo tanto, estamos en )8s>!eda de estos -!ntos de intersección, de resonancia. !e*an de s!s dis-!tasK. Por otro lado, no me dice: 7Qeo a esas -ersonas, en tanto >!e "amilia, -or elección deli)eradaK, sino: 7os &eo como "amilia -or>!e as ;ago ;a)it!almente, y adems, no tengo a nadie >!e se oc!-e de los niBosK. rato -!es de tra)a*ar con ella am-li"icando ciertos as-ectos y -ro&ocndola !n -oco, insistiendo so)re los temas del con"licto y de la se-aración. Qeremos !lteriormente lo >!e -odremos ;acer. 3A ;oan<: Qol&amos a n!estra disc!sión so)re las dis-!tas. Qosotros ;a)/is tenido !na dis-!ta esta maBana. LEl so)re@ &i&ió (OAN0 S- M E0 H tamién sore3i3iste (OAN0 S- M E0 Por lo tanto, era un comate leal Piensas que 6ar-a 6aido una disputa del mismo tipo si él 6uiese estado aqu- (OAN0 [SilencioL. Pienso >!e no ;a)ra oc!rrido. M E0 ;a 3eo Por lo tanto la distanpla crea las disputas (OAN0 En este caso, s- M E0 Pero en otras situaciones, no separarse puede e3itar disputas (OAN0 S- M E0 ; t quieres ayudarlos a aprender a separarse sin dis) putas (OAN0 A separarse de m- M E0 No sé (OAN0 ; sin emar&o, siendo capaces de pe&arse M E0 'uieres que puedan separarse de ti y que puedan pe) &arse (OAN0 No espero que ellos deten&an toda disputa M E0 Pero si ellos disputan y se 6ieren muc6o el uno al otro (OAN0 Pero no pe&arse en esta familia, Mony, si&nifica que al) &uno dee ceder M E0 Puedes ceder t (OAN0 Puedo yo ceder M E0 S- (OAN0 ISt-enc-oV No tan f>cilmente como eso Hen-a el 6>ito de ceder todo el tiempo, pero ya no ME0 8as descuierto 6asta qué punto era doloroso ceder (OAN0 S- 1$+
M E0 Entonces no deer-as ceder (OAN0 Eso es lo que me sucedi. en mi familia de ori&en M E0 'ué es lo que sucedi. (OAN0 'ue las mu/eres siempre de-an ceder y que los 6omres &anaan M E0 ; t no crees en eso (OAN0 No, porque 3i ceder a mi madre M E0 ; (OAN0 ; lo que ella no dec-a la 3ol3-a pasi3a)a&resi3a, y entonces estaa constantemente enferma M E0 +racias a eso, tu maritu padre puede decir KHen&o una mu/er a&resi3aR, lo que le permite sentirse c.modo y ser prote&ido del temor de ser destronado (OAN0 Destronado M E0 Si comprend- ien, tu madre ced-a, lo que permit-a a tu padre &anar Por otro lado ella era pasi3a)a&resi3a lo que si&nifica que le 6ac-a la 3ida dif-cil, y no darse cuenta 6asta qué punto ella lo cuidaa de/>ndolo &anar As-, él pod-a a la 3e: tener su pastel y comerlo Hu madre, as-, sufr-a por prote&erlo 'ué mara3illosa mu/erQ Deeremos qui:>s ense5ar en la escuela a las ni5as a prote&er a los 3arones (OAN0 Por otra parte, es lo que mi padre esperaa de m- M E0 'ué (OAN0 Eso ;o deer-a ser3ir a mi marido y ser feli: de 6acer aquello que le permitiera tener é7ito en sib carrera M E0 ; él tu3o rillante é7ito en su carrera (OAN0 S- M E0 No &racias a ti (OAN0 No, tu3o é7ito &racias a él Est> en un dominio comple) tamente diferente del m-o M E0 Si las mu/eres no deen ceder, qué deen 6acer en) tonces (OAN0 SilencioV Pienso que deen pelear por s- mismas y lo &rar ser escuc6adas, comprendidas y respetadas M E0 Por lo tanto las mu/eres deen pelear para ser escuc6adas y respetadas Empleas las mismas palaras que el marido de esa pare/a que pide ser escuc6ado y respetado y que tiene la Impresi.n de que su esposa no lo escuc6a y no lo respeta (OAN0 Porque para eso, ella deer-a renunciar a lo que ella es M E0 Bn se&undo Piensas que es posile ser escuc6ada y respetada (OAN0 S- M E0 Sin ceder (OAN0 Silencie' No estoy seg!ra de lo >!e >!iere decir 7ceder9 -ara m. eder so)re lo >!e ellas son, ren!nciar a s! -ro-io sentimiento de ser ellas mismas. 1$1
M E0 En tu familia, pod-as ser escuc6ada y respetada sin ceder (OAN0 No en la familia en la que 6e crecido M E0 El marido dice0 JElla no me escuc6a No me respeta 'uiero que me escuc6e y me respeteR *a terapeuta, por su lado, nos dice0 JEn mi construcci.n del mundo constituida en mi familia de ori&en, no podéis ser ni escuc6ada, ni respetada si no cedéisK Por otra parte, Jen mi pro&rama oficial, deer-amos poder ser escuc6adas y respetadas sin tener que cederK *a terapeuta no puede por lo tanto aceptar que este 6omre ceda para ser es) cuc6ado y respetado Por otra parte, ella no puede aceptar tampoco que esta mu/er ceda ante la demanda de este 6omre, pues ser-a, entonces, la mu/er la que ceder-a para ser escuc6ada y respetada En la medida en que no 6ay aparentemente espacio entre comatir y ceder, esta pare/a est> condenada al comate perpetuo si sus miemros se nie&an a ceder Eso nos muestra que no se puede 6alar de una pare/a y de las construcciones del mundo de sus miemros sin 6alar i&ualmente de las construcciones del mundo del terapeuta y del super3isor Hodo aquello de que nos 6ala el terapeuta no es sino el fruto de un acoplamiento estructural, para retomar el término de 8umerto Maturana, entre él mismo, la pare/a que cree descriimos, nosotros, etcétera Os 6aéis dado cuenta de la inanidad de mi squeda cuando traté de e7plorar a partir del material que me pro3e-a la terapeuta sore esta pare/a Cuando adopté otro camino, a tra3és de la relaci.n entre la terapeuta y yo, pro3oc>ndola, amplificando en un tono del que romea sin parecerlo las posiciones que parec-an asurdas, al&o sur&i. *o que apareci. es esto0 JHenemos el derec6o de ser escuc6adas y respetadas, pero se&n mi e7periencia de ni5a, de adolescente y de mu/er (o3en, me parece que deemos pa&ar un precio muy ele3ado para esto, lo que equi3ale a decir que nunca somos escuc6adas ni respetadas Si deo ceder para ser respetada, es e3idente que no soy respetada 'ué
1$2
tipo de respeto es ese que no se ofrece espont>neamente, sino que 6ay que comprar Por otro lado, si pa&o para ser respetada c.mo puedo ser respetada por al&uien cuyo respeto compro *os elementos que estructuran la dole coerci.n est>n claros0 = 'uiero ser escuc6ada y respetada, pero para eso es necesario que ceda = Ceder si&nifica que ya no soy escuc6ada ni respetada *a dolé coerci.n aparece entonces en toda su l.&ica imposile de detener0 J'uiero ser escuc6ada y respetada, pero no es posile ser escuc6ada y respetada El pro&rama oficial es0 J'uiero ser escuc6ada y respetadaK0 la construcci.n del mundo, por su parte, es JNo es posile ser escuc6ada ni respetadaR s all> de los miemros de la pare/a y de la terapeuta, me ata5en tamién, de otro modo no 6uiera podido otener un sentido No se trata so) lamente del reconocimiento de al&una cosa conocida, sino tamién de la construcci.n de un acoplamiento estructural entre mi e7periencia y este medio que me rodea 9i3imos constantamente en un mundo autorreferencial y parad./ico Les el nico que tenemos Hodo lo que puedo 6acer en este conte7to con (oan, es mostrarle que no es por a:ar que ella destac. los elementos que me present. y surayar la utilidad para ella y los miemros de la pare/a de e3itar el camio UA JoanL: F entonces, t8 -!edes "lotar y -!ede ser >!e, con !n -oco de s!erte, ceders y no sers ni esc!c;ada ni res-etada, -ero es el -recio >!e -agamos >!i0 -or la &ida >!e lle&amos. Por otra -arte, Lalg!ien nos esc!c;a L!ando gritamos ;acia ios, El nos esc!c;a e)emos en&e*ecer, de)emos morir, L-ero crees >!e ios nos res-eta...LJ!ieres morir !n da (OAN0 S- M E0 No es tan f>cil para m- tener que ceder (OAN0 Pero dees ceder M E0 Pero deo cederEntonces, lo que me parece interesante, es comproar que lo que podemos decir de la condici.n 6umana no es tan diferente de lo que podemos decir de las pare
1$+
as Por un lado, 6ay esta especie de cuento de 6adas0 formamos pare/a para ser felices Bna pare/a deer-a ser feli: y no desdic6ada Entonces comien:a la luc6a0 JHe corresponde 6acerme feli: por qué te re6sas Si 3i3o solo, soy prisionero y carcelero, no ten&o sino a m- mismo con quien tom>rmelas Pero si estamos /untos, t eres mi carcelero y soy tu prisionero ; cuanto m>s sufro, m>s me las tomo conti&o0 J9ete, pues, para que por fin yo sea feli:QX Pero apenas 6as partido, mi DiosQ qué an&ustia, estoy tan solo, 3uel3o 6acia ti y te pido0 JPerd.name, 3uel3e a m-K ; me di&o0 JEstoy completamente loco, por qué le pido que 3uel3a ; 3ol3er>s y 3ol3eremos a des&arramosPuede ser que las pare/as 6ayan sido creadas para ayudamos a soportar me/or la condici.n 6umana, para tener a al&uien a quien ec6arle la culpa, al &uno que sea responsale de nuestro sufrimiento Si estu3iéramos solos, no podr-amos &ritarle m>s que a Dios Pero Dios es un compa5ero particularmente dif-cil de arrastrar a una disputa Es tanto m>s f>cil con una esposa o con un maridoQ Entonces, quién sae, qui:> las pare/as fueron creadas para ayudamos a atra3esar me/or las dificultades de la e7istencia (oan, quieres a&re&ar al&o (OAN0 Muc6as &racias, Mony M E0 Muc6as &racias (oan, &racias a todos
Del sistema terapéutico al acoplamiento
En el cap-tulo precedente, insist- sore la importancia y la utilidad de lo 3i3ido por el terapeuta, frente a los miemros de la pare/a Es e3idente que el mismo an>lisis podr-a 6aer sido 6ec6o partiendo de lo que siente cada miemro del sistema terapéutico *o que un marido o una esposa 3i3en durante la sesi.n tiene una funci.n no solamente con respecto al c.nyu&e, sino tamién con respecto a las Jconstrucciones del mundoK del terapeuta *os sentimientos que nacen en uno u otro miemro del sistema tera) péutico no remiten nicamente a la 6istoria de esta persona? se trata con se&uridad de una 3i3encia sin&ular, pero amplificada y mantenida por un conte7to, de tal suerte que lo que 3i3e uno de los prota&onistas del sistema terapéutico est> a la 3e: li&ado a él y no es reduclle a él Se 3uel3e entonces menos reductor interro&arse sore la funci.n y el sentido de esa 3i3encia con respecto al con/unto del sistema terapéutico que limitar sus 6ip.tesis a una econom-a puramente personal
I. A*+BNAS SIHBACIONES 'uisiera iniciar este cap-tulo descriiendo cuatro situaciones que me permitir>n introducir un concepto que denomino JresonanciaK? este concepto me ayudar> a surayar la importancia de los Conte7tos li&ados a los miemros del sistema terapéutico, pero no reduclles a ellos
1. Homado entre dos fue&os 'uiero presentar primero una super3isi.n en el curso de la cual comencé a elaorar este concepto de resonancia El estudiante que yo super3isaa, ori&inarlo de otro continente, era responsale de la educaci.n en una instituci.n de formaci.n profesional especiali:ada Len este caso, un internado donde 3i3-an durante la semana (o3encitas de quince a diecinue3e a5os El director de este internado pidi. a mi estudiante que se 6iciera car&o de una situaci.n particular, /unto a la psic.lo&a del estalecimiento? él acaaa de reciir un llamado telef.nico de la auela materna de una de las pensionistas, que le 6a-a pedido 6acer lo posile para que la (o3en de/ara de pe&ar a su madre cuando 3ol3-a para el fin de semana Esta madre parec-a depender estrec6amente de su propia madre0 era la auela, por e/emplo, la que conduc-a el autom.3il cuando quer-a 3isitar a su 6i/a Se&n las informaciones que pose-a mi estudiante, el espacio personal de la madre era e7tremadamente restrin&ido0 estaa constantemente In3adida por su 6i/a y su propia madre, siempre tomada entre dos fue&os Mi estudiante me descrii. en detalle c.mo, al intentar ocuparse de esta familia, se 6a-a encontrado inmo3ili:ado 3e: a 3e: entre el director y los educadores, lue&o entre éstos y la psic.lo&a0 tamién él se sent-a co&ido entre dos fue&os ;, cuando yo descur- la coincidencia entre la situaci.n institucional y la de la familia de la pensionista, él me inform. que en su familia de ori&en e7ist-an elementos seme/antes Su padre se 6a-a casado con su madre en se&undas nupcias, después de tener tres 6i/os de, su primera mu/er A él se di ri&-an sus 6ermanastras y su 6ermanastro cuando quer-an pedir al&o a los padres, y especialmente al padre Por otra parte, cuando sur&-a un prolema entre este ltimo y los tres 6i/os mayores, el padre se las tomaa con él El era i&ualmente el 6i/o que de-a inter3enir cuando sus padres disputaan Hamién aqu- se sent-a loqueado entre los miemros de su 6ermana:&o y sus padres, entre su madre y su padre Ltomado entre dos fue&os
En esa época yo 6a-a sido particularmente sensile a esta intersecci.n entre tres sistemas diferentes Por otra parte, me 6a-a dado cuenta de que lo que 6a-a nacido en esta super3isi.n estaa i&ualmente li&ado a la intersecci.n entre la construcci.n del mundo de mi estudiante y mi propia construcci.n del mundo Perteneciente como él a diferentes culturas, 6aiendo sido yo mismo tomado entre dos fue&os en diferentes momentos de mi e7istencia, se me apareci. claramente que de-a tener en cuenta el aspecto autorreferencial de esta construcci.n
2. JEstoy aqu- y es como si no estu3iera aqu-R Esta super3isi.n se desarroll. en el marco de un &rupo de formaci.n que animo re&ularmente en un pa-s europeo Mi estudiante presentaa el re&istro de 3-deo de una entre3ista con un padre y su 6i/o de diecioc6o a5os de edad, descrito como psic.tico desde la muerte de su madre sore3enida die: a5os antes? esta terapeuta 3i3-a en otro pa-s y de-a efectuar 3ia/es re&ulares para continuar su formaci.n Al principio del re&istro, el padre no cesaa de e7presar la amar&ura que le 6a-an inspirado las tentati3as infructuosas de los médicos, incapaces de ayudar a su 6i/o desde 6ac-a die: a5os El, clamaa, siempre 6a-a ayudado a los miemros de su familia, pero nadie lo ayudaa a él? todo el mundo lo 6a-a decepcionado, ten-a la impresi.n de no poder esperar nada de mi estudiante, de ser alltodo, no siéndolo 9iendo esta anda de 3-deo, me di cuenta de que la terapeuta parec-a &anada por una ner3iosidad creciente0 cuanto m>s es) cuc6aa a ese padre repetir 6asta qué punto no se pod-a 6acer nada por su 6i/o y por él y qué solos estaan, m>s irritada parec-a *e pre&unté por lo tanto si recordaa lo que 6a-a 3i3ido en ese instante, a lo que respondi.0 JEstaa all- y era como si no estu3ieraK mientras precisaa que no pod-a asociar f>cilmente esta reacci.n con una e7periencia importante para ella *e propuse entonces pensar en un color? lue&o, después que me 6uiese replicado J>marR, le su&er- so5ar con este color y decirme lo que emer&-a en ella Ella se descrii. a la edad de cinco a5os, ante la puerta del escritorio de su padre0 él estaa adormecido en un sill.n, frente a su mesa de traa/o, rodeado de armarios de madera car&ados de liros encuadernados en cuero amarillo dorado, color >mar 8uiese querido 6alarle, pero no se atre3-a a despertarlo, ella estaa all- y era como si no estu3iera E3oc. a continuaci.n otra situaci.n 3i3ida a la misma edad
s 6ermosos 3estidos, la 6a-a re&a5ado se3eramente y, mientras que la re5-a as-, al&uien 6a-a llamador la puerta0 se trataa de una ami&ui) ta acompa5ada de su mam>, qué 3en-a a uscarla para ir a /u&ar Ella estaa llorando, y su madre 6ac-a como si no fuese nada Comentando este episodio, declar. ante m-0 JEra como si nada 6uiese pasado Para mam>, la ima&en que ella daa a las personas era m>s importante que lo que yo 3i3-a No me 3e-a, era como si no estu3iese all-R 8asta aqu-, esta situaci.n est> muy pr.7ima a las descritas en el cap-tulo precedente0 3emos de qué manera un mismo tema puede 3erificarse importante tanto para el terapeuta como para los miemros de la familia, y c.mo sus construcciones del mundo pueden contriuir con/untamente a mantener la 6omeostasis del sistema terapéutico M>s adelante, me enteré de que el psiquiatra que diri&-a el ser3icio donde esta familia era se&uida ten-a la intenci.n de partir, y de que no 6uiera m>s consultas de terapia familiar0 el 6ec6o de que mi estudiante fuese ella misma psiquiatra y reciido ella tamién familias, no cami. en nada la decisi.n de interrumpir esas consultas0 una 3e: m>s, ella estaa all-, y era como si no estu3iese Después discutimos sore lo que ella 3i3-a en el &rupo de su) per3isi.n Sus acti3idades profesionales la reten-an en un pa-s en ciertos per-odos, y 6a-a sucedido en los ltimos meses que esos per-odos correspond-an a los momentos en que ella de-a participar en mis sesiones de formaci.n? a6ora ien, yo 6a-a re6usado modificar por ella las fec6as de mis seminarios0 nue3amente 3i3i. mi rec6a:o como la confirmaci.n de que no contaa, de que estaa all-, pero de que todo pasaa como si no estu3iese Descur- as- que una misma re&la se puede aplicar, a la 3e:, a la familia del paciente, a la familia de ori&en del terapeuta, a la instituci.n en la que el paciente es reciido y al &rupo de super) 3isi.n Aqu- aun quiero surayar que esta intersecci.n entre di) ferentes sistemas no e7ist-a en la realidad, sino que resultaa de una cons"rucci&n mu"ua de lo real o-erada -or mi est!diante y yo mismo en el gr!-o ae s!-er&isión.
$. Hener un lu&ar Esta super3isi.n tu3o lu&ar en el Instituto de Estudios de la 2amilia y de los Sistemas 8umanos de
*a estudiante que deseaa ser super3isada ten-a un peinado muy particular, que no de/aa de llamarme la atenci.n0 sus caellos disimulaan la mitad de su rostro, por lo dem>s muy a&radale 8e aqu- la situaci.n a la cual estaa confrontada Bn director de escuela 6a-a pedido a la instituci.n en la que ella traa/aa tomar a su car&o un alumno con prolemas, a&re) &ando que este alumno no quer-a asolutamente encontrar psi) c.lo&o Sucedi. de &olpe que los miemros del equipo terapéutico afectado a esta instituci.n no ten-an lu&ar preciso0 funcionaan como si fuesen intercamiales? aparentemente, nadie pod-a rei3indicar un lu&ar diferenciado ; era claro, por otra parte, que la demanda del director no de/aa nin&n espacio al inter3i) niente Contactada por la estudiante, la madre 6a-a respondido no 3er incon3eniente en que la /o3en 3isitara a su 6i/o a domicilio, a condici.n de que le ocultara cuidadosamente su estatuto de psl) c.lo&a y el o/eto de su 3isita Destacando el elemento comn a la instituci.n en la que ella e/erc-a, a la requisitoria del director de escuela y a la respuesta de la madre, ped- a la estudiante 6alarme de lo que representaa para ella el 6ec6o de tener un lu&ar 0 me 6i:o saer que era la 6i/a preferida de sus padres, que 6a-a 3i3ido dolorosamente esta situaci.n con respecto al resto de sus 6ermanos, y que tener un lu&ar si&nificaa a sus o/os roar el lu&ar de los otros Pensé entonces que la super3isi.n comen:ada a/o mi direcci.n de-a ser prose&uida por mi cole&a durante las sesiones si&uientes, y que, en este &rupo de formaci.n, i&ualmente, todo pasaa como si los lu&ares fueran intercamiales Aqu- tamién se 6ar-a dic6o que todo estaa 6ec6o para que no pudiera estalecerse una relaci.n espec-fica entre la estudiante y el super3isor
'. Si cuento para ti, no me de/es contar
*a pare/a de que se trata 6a-a 3enido a consultar a un 6os pltal en la que traa/aa un equipo de terapeutas familiares colocados a/o mi super3isi.n0 un terapeuta reci-a a las pare/as, mientras que los otros miemros del equipo y yo mismo se&u-amos la sesi.n detr>s de un espe/o sin alinde El marido e/erc-a una profesi.n lieral, la mu/er deutaa en un oficio Independiente, y amos se que/aan de conflictos conyu&ales incesantes Durante la primera sesi.n, estos pacientes di/eron a la psiquiatra que los recii. que 6ar-an preferido 3enir a consultarme en mi &ainete pri3ado pero que no me 6a-an contactado, porque estimaan que mis 6onorarios serian sin duda demasiado ele3ados para ellos? 6a-an decidido por lo tanto consultar en el 6ospital, saiendo que el traa/o terapéutico se efectuaa de todos modos a/o mi super3isi.n Después, 6alando todo el tiempo de dinero y
de conflictos financieros, e7plicaron 6asta qué punto contaan poco para sus familias de ori&en y qué poco contaan, en el presente, el uno para el otro Cada uno quer-a contar a los o/os del otro, pero no cre-a que eso fuese posile Después de 3arias entre3istas, un prolema ur&ente me llam. fuera del 6ospital mientras que esos c.nyu&es esperaan ser reciidos? como tomé un corredor 3ecino a la sala de espera, me 3ieron partir Al principio de la sesi.n, el esposo declar. a la tera) peuta que esperaan que la cita fuese anulada, a&re&ando la mu/er por su lado0 J;o no cuento, el doctor Elkaim se 3aR Después aludieron en 3arias ocasiones a una e3entual separaci.n0 surayaron que esta soluci.n les parec-a ineluctale, pero que no 3e-an c.mo separarse Cuanto m>s se prolon&aa la entre3ista, la terapeuta y los miemros del equipo Instalados detr>s del espe/o tu3ieron el sentimiento de que el tema de la separaci.n pod-a tener un aspecto creati3o? apro3ec6aron, pues, la Interrupci.n de la sesi.n para preparar la Inter3enci.n que si&ue Cada miemro de esta pare/a, di/o la terapeuta, deseaa con tar? al mismo tiempo, cada uno afirmaa no 6aer tenido nin&una e7periencia positi3a en este dominio, no creer que pod-a contar al&n d-a para el otro, y estar persuadido de que, si se presentaa tal situaci.n e7traordinaria, no podr-a resultar sino una traici.n En qué medida, en consecuencia, cada uno no ima&inaa que era Importante ayudar al otro a no ser confrontado con esta creencia profunda En tanto que pod-a reproc6ar a su compa5ero no permitirle contar, cada uno de esos c.nyu&es e3itaa pre&untarse si sar-a aceptar sin temor el 6ec6o de poder contar al fin El enemi&o -ntimo fue, pues, descrito como una suerte de protector enmascarado que intentara des3iar la atenci.n sore él a fin de ali3iar al c.nyu&e de tormentos de otro modo m>s crueles A mi re&reso, fui sorprendido por la soltura con la cual la te) rapeuta asistida por el resto del equipo, 6a-a efectuado este re) encuadre positi3o de los reproc6es que estos esposos se diri&-an mutuamente, y acompa5ado este reencuadre con un comentario parad./ico e7tremadamente interesante 2ui tanto m>s sorprendido cuanto que esta psiquiatra, que era una notale terapeuta de inspiraci.n anal-tica y que se 6a-a formado conmi&o en el enfoque sistémico, era en &eneral astante recalcitrante a este tipo de inter3enci.n Cuando discutimos esta sesi.n, apareci. que la terapeuta y los otros miemros del equipo, todos ellos, por ra:ones muy di3ersas, 6a-an tenido la fuerte sensaci.n de no contar en tal o cual momento de su e7istencia ; descurimos i&ualmente que, a continuaci.n de mi partida sita, al&unos 6a-an tenido el
sentimiento de no contar a mis o/os *os miemros de esa pare/a nos ped-an mostrarles que ellos contaan, sin que no ostante lle&aran a creerlo 2rente a esta dole coerci.n, sin quererlo, 6a-amos respondido a estos dos ni3eles a la 3e:0 la terapeuta, reciiéndolos, les 6a-a mostrado ien 6asta qué punto contaan? en cuanto a m-, al partir, les 6a-a ayudado a no temer contar al fin para al&uno Este elemento comn a la pare/a y a los miemros del equipo terapéutico se ensanc6aa él mismo, por otra parte, a nuestro ser3icio0 pues esas consultas de terapia familiar no 6ac-an sino comen:ar y, para el 6ospital uni3ersitario en el que 6a-a tenido lu&ar, contaan toda3-a relati3amente poco *lamo resonancias a esos ensamla/es particulares constituidos por la intersecci.n de diferentes sistemas que comportan un mismo elemento
1. 4esonancias y autorreferencia *as resonancias que descrio no e7isten en tanto que tales0 sur&en en los acoplamientos, en las intersecciones entre las construcciones de lo real de los miemros del sistema en/ue&o *a resonancia no es un J6ec6o o/eti3oK, no se trata de una 3erdad escondida que se deer-a 6acer aparecer a tra3és de un punto comn a diferentes sistemas0 nace en la construcci.n mutua de lo real que se opera entre aquel que la nomra y el conte7to en el cual él se descure a punto de nomrarla
2. El efecto de umral En las situaciones descritas m>s arria, el lector constatar> que 6a entrado en acci.n en un momento dado, un elemento de) sencadenante, una especie de acoplamiento En la se&unda si) tuaci.n JEstoy aqu- y es como si no estu3ieraRF, por e/emplo, cuando la terapeuta manifest. su irritaci.n, ocurri. entre ella y yo cierta cosa que cre. un efecto de umral a partir del cual la re) sonancia comen:. a e7istir ;, en la situaci.n titulada Hener un lugar8, lo >!e yo &i& "rente a la *o&en est!diante c!yos ca)ellos disim!la)an !n rostro agrada)le, -ermitira ;acer el mismo seBalamiento )r!scamente, elementos a-arentemente anodinos se artic!laron y s!rgió !n cam-o n!e&o.
$. 4esonancia e inter3enci.n C.mo utili:ar este concepto de resonancia Parece que el traa/o efectuado sore tal o cual punto de resonancia con tal o cual prota&onista de un sistema particular modifica los otros sistemas en interrelaci.n Es as- que a continuaci.n del traa/o reali:ado en super3isi.n con la terapeuta que 6a-a reciido a ese padre y su 6i/o rotulado como psic.tico desde 6acia die: a5osse 6i:o claro en el seno del sistema terapéutico una modificaci.n importante0 la pare/a padre6i/o se 3ol3i. menos simi.tica, el 6i/o interrumpi. sus &estos estereotipados y ces. de defender constantemente a su padre contra toda intrusi.n e7terior? el padre y el 6i/o pudieron comen:ar a 6alar de su soledad Adem>s, un d-a en que la terapeuta lle&. con retraso, el 6i/o pudo 3erali:ar su temor de que su padre y él no fuesen astante Importantes para ella No propon&o tanto emprender una in3esti&aci.n e76austi3a de los sistemas en resonancia Laquellos que 6ar-a podido nomrar o los que otro inter3inlente 6uiera podido se5alarLcomo pensar aquello a lo que estamos confrontados en términos de resortes pr>7icos de una situaci.n Por ra:ones puramente operatorias, cuando traa/amos con &rupos en super3isi.n, los sistemas en resonancia sore los que insistimos son a menudo el sistema familiar del paciente, la familia de ori&en del terapeuta, el sistema institucional y el &rupo de super3isi.n Intentamos apoyamos sore los puntos de intersecci.n entre los diferentes sistemas en/ue&o, a fin de modificar as- los di3ersos sistemas de resonancia Es e3idente que la Inter3enci.n depender> del lu&ar en que se situar> el inter3inlente0 si se trata de una Instituci.n, all- podr> ser modificada la resonancia con prioridad Pero en la resonancia pueden desempe5ar un papel importante otros sistemas Me ocurri., por e/emplo, super3isar un equipo de psic.lo&as su) damericanas que empleaan mi enfoque en las terapias multifa) miliares U!V Me 6a-an propuesto traa/ar en el caso de mu/eres /efes de familia, madres de ni5os con prolemas0 para al&unas, los padres de estos ni5os 6a-an desaparecido durante el per-odo de dictadura militar que acaaa de sufrir el pa-s El director de la instituci.n donde estas psic.lo&as e/erc-an les 6a-a dic6o que ellas eran JclandestinasK0 no ten-an lu&ar fi/o donde or&ani:ar esos encuentros de terapia multlfamiliar, y pocas de entre ellas eran pa&adas En el sistema de super3isi.n aparecieron puntos de resonancias mltiples0 las desapariciones, la clandestinidad, la 3iolencia, tener un lu&ar, etc No traa/é m>s que sore el punto de resonancia que me resultaa m>s pr.7imo, y que parec-a concernir a todos los miemros presentes del equipo terapéutico *a e3oluci.n positi3a de esas familias y la me/or-a ulterior de los
miemros del equipo en esa instituci.n no si&nificaan que yo tu3e Jra:.nR en ele&ir un punto de resonancia particular? qui:>s el traa/o efectuado en tomo de un tema espec-fico comn a diferentes sistemas en lnterrelaci.n, simplemente ensanc6. el campo de lo posile
'. Conte7to social, resonancia, 6omeostasis
MI pr>ctica de la terapia familiar tu3o por conte7to inicial la psiquiatr-a social 8aiendo comen:ado a e/ercer en el sur del ctica, por lo tanto, terapias multifamiliares diferentes de las que e7ist-an0 contrariamente a lo que entonces estaa preconi:ado, in3ité a reunirse a familias que ten-an el mismo tipo de prolema e inscritas en el mismo conte7to socioecon.mico, lo que permit-a entre otras cosas entre3er en qué un prolema aparentemente indi3idual pod-a ser tamién colecti3o ; transformé i&ualmente las inter3enciones de red creadas por 4oss Speck y Carolyn Att) nea3e TF en pr>cticas de red0 &racias a este enfoque, los miemros del sistema ampliado pod-an 3er el prolema de un indi3iduo como el prolema de un &rupo tomado en las mismas contradicciones En esta época, mi construcci.n era muy pore0 3e-a casi el mundo como un con/unto de mu5ecas rusas enca/adas las unas en las otras? part-a del indi3iduo, lue&o pasaa a la familia, al arrio, al conte7to social, etc A continuaci.n, el concepto de resonancia me permiti. por fin encarar que estos diferentes sistemas pod-an ser unidos por un la:o que no consist-a nicamente en la reproducci.n casi mec>nica de una misma re&la, de estrato en estrato Este concepto de resonancia plantea, sin emar&o, otros pro) lemas pues, podemos pensar en términos de 6omeostasis cuando los sistemas en resonancia se 3uel3en 6asta tal punto di3ersos Cuando los sistemas en/ue&o son los sistemas familiares del terapeuta y del paciente as- como el sistema institucional donde la familia es reciida, se puede en ri&or pensar en términos de mantenimiento de una re&la comn a diferentes sistemas, necesaria a la 6omeostasis de los sistemas en interrelaci.n Pero, cuando esos sistemas son i&ualmente sociales y pol-ticos, como es el caso de la situaci.n de terapia multifamiliar que acao de recordar, puede continuarse pensando en términos de 6omeostasis estrec6a 4etomemos el e/emplo de la super3isi.n de
elecci.n para deeres y no para derec6os, etc C.mo inte&rar esos elementos puestos en resonancia al concepto de 6omeostais entendido en un sentido estrec6o No deseo responder a esta pre&unta, pero me parec-a importante plantearla
5. 4esonancia, sentido y funci.n En lo concerniente a estos puntos, se podr-a suscitar la misma pre&unta que acaa de ser formulada a prop.sito de la 6o) meostasis Apre6ender un conte7to en términos de sentido y de funci.n nos parece un paso e3idente en el caso de un sistema particular o cuando los sistemas en relaci.n presentan una co) 6erencia espec-fica, pero se puede an pensar en estos términos cuando la resonancia pone en /ue&o dominios tan di3ersos que desordan completamente la acepci.n cl>sica de lo que es un sistema
III. *OS ENSAM<*A(ES
1. *eyes &enerales, re&las intr-nsecas y sin&ularidades 'ué relaci.n 6ay entre el concepto de resonancia y el de en) samla/e presentado en el cap-tulo II Perm-tame el lector resumir de nue3o lo que entiendo por en) samla/e0 denominé Jensamla/eK el con/unto creado por diferentes elementos en lnterrelaci.n en una situaci.n particular, elementos que pueden ser tanto &enéticos o iol.&icos como li&ados a re&las familiares o a aspectos sociales o culturales Bn ensamla/e terapéutico puede estar constituido por elementos a los cuales se aplican leyes &enerales, por elementos li&ados a re&las Intr-nsecas propias de este sistema terapéutico particular, pero tamién por sin&ularidades que pueden ser tanto si&nificantes como asi&nificantes *a resonancia no es m>s que un caso particular de ensamla/e constituido por la intersecci.n de diferentes sistemas alrededor de un mismo elemento? las resonancias son elementos redundantes que li&an los uni3ersos m>s dispares, mientras que las sin&ularidades, aunque autorreferenciadas, permanecen nicas En el caso de la familia /ud-a de Africa del Norte descrita en el cap-tulo II, pudimos 3er en acci.n leyes 3alederas para di3ersos sistemas aiertos tales como la 6omeostasis, as- como re&las in tr-nsecas como las que permit-an comprender las funciones de los
s-ntomas de esos pacientes Por otra parte, se 6a-an puesto en acci.n una serle de sin&ularidades0 el a&ua, la transpiraci.n, los llantos, la utili:aci.n del espacio, la manera de e7presarse, etc Estas sin&ularidades eran autorreferenciadas y concern-an a todos los miemros del sistema terapéutico? al&unas remit-an a otros ni3eles, pero pod-an tamién no remitir sino a s- mismas0 es lo que llamo sin&ularidades asl&nl-lcantes Hen&o la Impresi.n de que son estos elementos 6etero&éneos considerados como restos los que desempe5an a menudo el papel de un catali:ador para el de3enir del sistema terapéutico Durante un con&reso or&ani:ado recientemente en los Estados Bnidos, uno de los oradores el doctor Sifneos, especialista en terapia re3eF narr. la 6istoria si&uiente0 una paciente, cont., le 6a-a declarado que pensar en el contenido de las palaras que él pronunciaa en la sesi.n no camiaa &ran cosa en su estado, pero que astaa que rememorara su acento para estar muc6o me/orEse acento podr-a remitir a toda una cadena de elementos si&nificantes, pero no se podr-a Ima&inar que pudiera i&ualmente desempe5ar un papel en tanto que tal En el e/emplo de esta familia ori&inaria de Africa del Norte, el a&ua no podr-a tamién tener una 3ida propia, fuera de los aspectos metaf.ricos y otros a los cuales remite Por otra parte, puede 6alarse de Js6ockR estético producido por la 3ista de un cuadro o la audici.n de)una msica nicamente en términos de sentido o de funci.n No es reducir la rique:a suyacente de lo que 3i3imos
2. *a emer&encia del oser3ador *a se&unda ciernética, a/o el Impulso de 8ein: 3on 2oers) ter, insiste sore las retroacciones no solamente entre los consti) tuyentes del sistema oser3ado lo que 6ac-a ya la primera cier) néticaF, sino, sore todo, entre el sistema oser3ador y el sistema oser3ado Hanto 3on 2oerster como 9arela surayan, sin emar&o, que el oser3ador no puede ser separado del que es oser3ado0 pues éste emer&e en el sistema mismo que oser3a C.mo emer&e el oser3adorC.mo aparecen sus sentimientos y sus pensamientos 'ué parte de liertad tiene con respecto al sistema en el seno del cual emer&e C.mo puede suceder lo nue3o Estas pre&untas quedan aiertas y , al recordar en estas p>&inas los conceptos de resonancia y de ensamla/e, 6e querido simplemente aortar mi contriuci.n a lo que podr-a ser un eso:o de respuesta Estos conceptos tienen la 3enta/a de de/ar las puertas
aiertas a elementos de toda naturale:a, e3itando as- que la cuesti.n de la emer&encia del oser3ador sea ac6atada por una &rilla de lectura unidimensional En cuanto al camio, lo que decidir> sore el de3enir de un sistema estar> m>s li&ado al modo en que el inter3iniente se 6ar> implicado, para 6acer de modo que di3ersos constituyentes puedan a&enciarse, que a la decodificaci.n de una 3erdad escondida Por otra parte, en conte7tos culturales espec-ficos, pasar por una intersecci.n de construcciones de lo real edificadas alrededor de una decodi5caci.n puede ser una etapa indispensale al a&enciamlento de un ensamla/e producti3o *a decodi5caci.n 6ar> sido entonces uno de los constituyentes necesarios de este ensamla/e Parece que escritores como Proust 6an sido maestros en el arte de elaorar descripciones que mantienen aiertas mltiples pistas y que desordan por a6- toda lectura reductora Comentando el pasa/e de + la recherche du "emps perdu donde STann asocia el rostro de Odette al retrato de ^/-;ora tal como a-arece en !n "resco de la a-illa Si4tina -intado -or Cotticelli, /li4 !attari escri)e: Cu>l es el ori&en de esta potencia de3astadora del rostro de Odette UV No se trata, por parte de S=ann, sino de una Jiden) tificaci.n re&resi3aR con un persona/e matemoDe la consecuencia de una carencia, en él, de un polo sim.lico paterno que le pro6iir-a JasumirR con3enientemente su Jcastraci.nKQV Después de todo, esta 1ép6ora cuyo rostro se superpone al de Odette, no fue dada a Moisés por su padre, el sacerdote (ét6ro, en prenda de su retomo al Dios de Ara6am ; este fresco de la Capilla Si7tina no fue conceido como un contrapunto entre la 3ida de (ess y la 3ida de Moisés Eso no nos indica que estamos aqu- sore un dole re&istro0 el de una fi/aci.n arcaica de S=ann a un equi3alente imaginario de la mala madre =-!ta= ;i*a Incest!osa, y el de !na inscri-ción cristiana esencialmente sim)ólica de !na "alta originaria de la "!nción -aterna Por otra -arte, Lno es a contin!ación de s! matrimonio con Odette y de !na s!@ )limación de s! -asión incest!osa, >!e en ocasión del as!nto rey"!s, STann llegar !lteriormente a as!mir s! condición *!da H' +uattari muestra aqu- que se puede muy ien 6acer entrar por la fuer:a los detalles descritos por Proust en el marco de las interpretaciones tradicionales, pero que se de/a entonces de lado la sin&ularidad del rostro de Odette, la materia de la frase musical de 9inteuil, el arre&lo del sal.n de 9erdurin, otros uni3ersos, otros de3enires Bna lectura reductora que pusiera en un mismo ni3el la creaci.n art-stica y la psicoterapia, i&norar-a que los elementos
aparentemente desde5ales en ciertas condiciones pueden 3ol3erse determinantes cuando esas condiciones camian En esta .ptica, la psicoterapia podr-a ser definida como el arte de mantener posiles los posiles
4eferencias ilio&r>ficas H1 M Elkaim0 JSystéme familial et systéme socialR, en Aahiers cri"i !ues de "h%rapie famA'íale e" de pra"l!ues de r%seau#, Pars, amma, NV 1, 1##? 7/"amilialiserK. a t;/ra-ie "amiliale. e lRa--roc;e "amllia@ le a lRa--roc;e socio@-ollti>!eK, en Aahiers cri"i!ues de "h%rapie famia le e" de pra"i!ues de r%seau#, Pars, amma, NW 2, 1#3+. H2 M Elkaim compF0 B%seau +l"ema"i$e 5 la sychia"rieH, Pars, %nion /n/rale dREditions, 1#, coll. 71+@13V. M. Elkaim Dcom-.: 'es pra"i!ues de r%seau. Scm"% men"ale e" con"e#"e socla' Pars, ES, 1#3. Hay &ersión castellana: 'as pr5c"icas de la "erapia de red, Carcelona, edisa, 1#3#. H$ 4 Speck y C Attnea3e0 Camily *e"Gor4s, N!e&a Fork. Qintage Cooks, 1#$. H' 2 +uattari0 'inconsclen" machini!ue. Fssais de shi;oanalyse, Paris, (ec;erc;es, 1##, -g. 2'6.
JPensar con los piesR0 la inter3enci.n en psicoterapia familiar I. PENSA4 CON *OS PIES
Era un d-a de prima3era en Marruecos Mi madre y yo 6a-amos encontrado a la sir3ienta en el curso de uno de nuestros paseos Esta mu/er respondi. a mi madre, que le 6a-a pre&untado adonde se diri&-a0 JAll- adonde me lle3an mis piesR El ni5o que yo era no 6a-a podido 3er en eso una tentati3a de esqui3ar la pre&unta presentada, sino m>s ien una respuesta que de-a tener sentido propio0 me pre&unté c.mo los pies pod-an pensar, y ese prolema me sumi. en una profunda perple/idad No empecé a entre3er la pertinencia de esta refle7i.n sino muc6os a5os m>s tarde, en ocasi.n de una inter3enci.n terapéutica efectuada en el marco de la super3isi.n de una terapia familiar *os miemros de esta familia, ya presentados en el cap-tulo I, estaan afli&idos por mltiples prolemas de salud, y la madre y sus dos
6i/as 6a-an entrado en la sesi.n apoyadas en muletas Se&n una de las 6ip.tesis que 6a-amos elaorado, pod-a tratarse de una familia para la cual la ayuda constitu-a una re&la importante, pero donde, paralelamente, no era cuesti.n de pedir la asistencia de otro? 6a-amos 3isto en esta contradicci.n la e7presi.n de la dole coerci.n0 JAyudadnosK, pero JNo podemos aceptar ser ayudados, no podemos sino ayudarK Después de 6aer discutido sore la situaci.n con el &rupo de super3isi.n, la terapeuta 6a-a deseado reencuadrar los s-ntomas de los miemros de esta familia como un medio de in3itar al otro a aportar su ayuda sin que nada fuese pedido Surayando que un prolema f-sico permit-a al otro 3olar en socorro del enfermo, esta interpretaci.n reencuadraa positi3amente los s-ntomas? y este reencuadre era acompa5ado de un comentarlo parad./ico, puesto que estaa Indicado, al mismo tiempo, que esta ayuda tan deni&rada no era menos, qui:>s, impl-citamente pedida *a terapeuta esperaa que esta inter3enci.n lle3ar-a a los miemros de esta familia a aandonar la 3-a as- encuadrada? esperaa que ellos osar-an entonces e7plorar otras posiles, m>s ricas y menos peli&rosas (ustamente antes de salir de la sala de super3isi.n, la tera peuta resal. sore la alfomra y se sal3. de caer por poco, apoy>ndose en el muro Su inter3enci.n, que se&uimos sore una pantalla de tele3isi.n de circuito cerrado re3el. camiar de direcci.n r>pidamente? con toda e3idencia, la terapeuta no lle&aa a presentarse como susceptile de ayudar0 y no lo&raa tampoco utili:ar las dificultades que encontraa como una 6erramienta terapéutica En esta época, me suced-a aun inter3enir como con) sultante /unto a mis estudiantes en dificultad diri&iéndome yo mismo a la sala de terapia,G y es lo que 6ice 8e aqu- la transcripci.n del comien:o de mi inter3enci.n0 M567 !L8AlM: Hentrando en la sala de tera-ia y sal!dando
s!cesi&amente a los di"erentes miem)ros de la "amilia @uenos días a "odo el mundo, e#cusadme de moles"aros. @uen día, seOora [a la madre. @uen día [a la ;i*a mayor /. @uen día Ha la ;i*a menor L. @uen día, seOor Hal -adre. De pronto, cuando estaa por estrec6ar la mano del padre, me enredé el pie en el 6ilo del micr.fono y casi ca-? no e3ité la ca-da sino col&>ndome de la mano que me fue tendida Mony Elkalm [dirigi%ndose cd padreL: racias -or ;a)erme ay!dado. *ue&o fui a instalarme entre el padre y la terapeuta form>a) mos un c-rculo? est>amos sentados en este orden0 la madre, las dos 6i/as, el padre, yo mismo y la terapeutaF #8oy, sal3o muy raras e7cepciones, no Inter3en&o como consultor sino desde
la pie:a situada detr>s del espe/o sin a:o&ue *o que cuenta para mi, en efecto, es traa/ar sore la intersecci.n de las construcciones de lo real de mi estudiante y de los miemros de la familia que él recie, apoy>ndome sore el aspecto autorreferenclal de mi 3i3encia Me parece que quedarse detr>s del espe/o sin a:o&ue permite al consultor respetar me/or el puente sin&ular e7istente entre la familia y el terapeuta, lo que de/a as- a este ltimo la posiilidad de crear él mismo su propia inter3enci.n Cuando la consulta tiene lu&ar en la sala de terapia, 6ay que tener en cuenta, adem>s de estos elementos, el acoplamiento entre las sin&ularidades del consultor y las de los otros miemros del sistema terapéutico
El padre0 Este es un &olpe premeditadoQ Mony Elkaim0 No, no es un &olpe premeditado enredarme el pie en el 6ilo del micr.fono Estaa inscrito en la familia =isas de la madre. Fn alguna par"e, mues"ro la con"raseOa. DM!estro mi mano derec;a, con la -alma &!elta ;acia la "amilia. a madre sonriendo, me -resenta entonces s! mano i0>!ierda en&!elta en !n &enda*e )lancd. P6 c&mo mos"rar la con"raseOa si no es proponi%ndoos ayudarme, ya !ue acabo de ayudarosQ Mis pies acaaan de encontrar una soluci.n a la dole coerci.n Me 6a-an permitido, adem>s, poner en acci.n la inter3enci.n que mi estudiante 6a-a preparado? a saer, 6aciéndose ayudar se ayuda II. 8IPOHESIS, C4EAHI9IDAD ; SISHEMA HE4APgBHICO 8ay necesidad de precisar que esta ca-da no era de nin&n modo premeditada El 6ec6o de que 6aya podido ser comprendida como una soluci.n a la dole coerci.n de esta familia se inscri-a en el conte7to de la 6ip.tesis que 6a-amos elaorado? era necesario, sin duda, que esta 6ip.tesis fuese presentada para que pudiera sur&ir este acto creati3o determinante para la constituci.n de un nue3o sistema terapéutico Este re3e e/emplo presenta el prolema de la aparici.n del acto creati3o en psicoterapia Si este acto 6uiese sido querido, 6uiera perdido todo impacto? pues nin&n J&olpe premeditadoR, para 6alar como el padre, podr-a pretender la espontaneidad y la fuer:a del acto creati3o, en su sur&imiento A menudo, por otra parte, en situaciones en las que el terapeuta se encuentra entre la espada y la pared repentinamente, salta este elemento que parecer> a posteriorQ 6aer desempe5ado un papel capital en el desloqueo del sistema terapéutico El caso si&uiente me parece desde este punto de 3ista particularmente esclarecedor Se trataa de una paciente e7tremadamente interesante, de 3eintisiete a5os de edad y anoré7ica desde la edad de catorce a5os, con episodios ul-micos 8aituada a tomar enormes dosis de la7antes y de diuréticos, esta (o3en presentaa una to7icoman-a a
di3ersos medicamentos? 6a-a intentado suicidarse en mltiples ocasiones y pasado numerosas estad-as en el 6ospital ;o la se&u-a desde 6ac-a tres a5os en el marco de una terapia familiar duplicada con una terapia indi3idual en casa de un cole&a psiquiatra A pesar de todos mis esfuer:os, y por m>s que tu3iese la im) presi.n de 6aer comprendido astante ien los elementos que manten-an los s-ntomas de esta paciente, los resultados tera) péuticos eran de lo m>s limitados En el curso del tercer a5o de tratamiento, me pareci. Imposile continuar reciiendo serena) mente a esta familia e7tremadamente cooperadora mientras que la 3ida de la paciente estaa en peli&ro y mis tentati3as se re3elaan tan ineficaces Declaré en consecuencia a los miemros de la familia que 6a-a fracasado y que la situaci.n era demasiado &ra3e para que yo continuara como si nada pasara0 propuse 6acerme super3isar por anti&uos estudiantes con3ertidos en mis colaoradores, y ped- a la familia no presentarse a mi &ainete pri3ado para las entre3istas ulteriores, sino diri&irse al Instituto donde traa/aan mis colaoradores Durante las semanas si) &uientes, la terapia se desarroll., pues, en los locales del Instituto, con la super3isi.n de mis cole&as Este episodio me parece 6aer constituido un momento cla3e de esta psicoterapia *a paciente fue me/orando su estado pro) &resi3amente, y conoci. a un 6omre con el cual tu3o una relaci.n importante 4eci- a esta pare/a el 6omre ten-a tamién sus prolemasF durante un nmero limitado de sesiones, lue&o mi paciente y su ami&o fueron a estalecerse al e7tran/ero Bn a5o m>s tarde, esta /o3en me escrii. para decirme que estaa muy ien y no ten-a m>s prolemas de alimentaci.n ni de sore) consumo medicamentoso? me 6i:o saer que deseaa ardientemente tener un 6i/o, y, al a5o si&uiente, una tar/eta me anunci. el feli: acontecimiento Puede ser que este episodio no 6aya desempe5ado un papel esencial m>s que a mis o/os Es posile que esta paciente 6aya 3i3ido en esa época en su terapia indi3idual al&una cosa particu) larmente Importante, puesto que manten-a e7celentes relaciones con su psicoterapeuta As- como es posile que la presencia del marido y la constituci.n de una pare/a 6ayan modificado profun) damente las re&las de los sistemas en que esta mu/er e3oluciona) aEs cierto que todos estos elementos (untos, desempe5aron un papel que no puede ser suestimado, pero esta secuencia no me parece menos determinante *os terapeutas confrontados a situaciones de anore7ia mental conocen ien la opci.n de 6ierro que se en&anc6a en &eneral entre la paciente y su entorno No i&noran el sentimiento de impotencia que oprime al terapeuta confrontado a una paciente que parece
poner a sus alle&ados de rodillas al 3ol3er su a&re) si3ldad contra smisma Ello no Impide que yo 6aya construido mi Inter3enci.n con el o/eto de surayar la Inanidad de la opci.n de 6ierro0 no usqué mostrar que pod-a, yo tamién, fracasar como sus padres, y sin emar&o aceptar la ayuda de cole&as m>s /.3enes para salir de la impasse en que estaa Este acto creati3o sur&i. a continuaci.n de una comproaci.n de fracaso y, si fa3oreci. la aparici.n de nue3as posiilidades, no lo dee, a mi modo de 3er, sino a la espontaneidad de su aparici.n En un articulo notale titulado J'uelques pas 3ers la contrée o les an&es ont peurR U!V (ean)*uc +irione descure este dilema0 descrie el acto creati3o que modifica completamente una situaci.n como un acto Jque camiar-a de naturale:a, perder-a su eficacia, y aun cesar-a de e7istir en tanto que tal, si fuese cumplido con el o/eto consciente de esperar el resultado a que lle&ar> a condici.n de que ese resultado no sea eri&ido en o/eti3oK Para escapar a esta dificultad, ()* +irione cita las palaras del ru/o ;aqul JDon (uanR, persona/e esencial del aprendi:a/e de Carlos Casta5eda tal como él lo cuenta, especialmente, en 'e $oyage a >#"lan H2 >!eriendo enseBar a s! al!mno el arte de ser g!errero, 7on ctica, y aordé un poco esta cuesti.n en mi art-culo JDole coerci.n y sin&ularidades en una situaci.n de formaci.n en la terapia familiarR UT! Descri- all- una inter3enci.n en ocasi.n de la cual, a pesar de mi decisi.n de 3erificar mi 6ip.tesis antes de inter3enir, me 6a-a encontrado en la Imposiilidad de separar estas dos etapas *os formadores sistémicos, tanto como los terapeutas, por lo dem>s, ponen el acento sore el traa/o de preparaci.n Bna ora de De&as ilustra mara3illosamente el 3-nculo que e7iste entre la preparaci.n y la espontaneidad0 se trata del retrato de la se5ora H6éodore +oillard, pintado en !Y% y e7puesto en el Metropolitan Museum de Nue3a ;ork Este cuadro al .leo fue precedido de muc6os estudios que representaan tanto a la se5ora +oillard sentada sin la decoraci.n que la rodea, como el marco del sal.n, sin persona/e0 es claro que De&as prepar. lar&amente esta ora, pero esta premeditaci.n no quita nada a la e7traordinaria espontaneidad de la tela *a fase de elaoraci.n de las 6ip.tesis es considerada, pues, como una etapa fundamental Para m-, esta fase no consiste en
descurir re&las ocultas, sino que constituye m>s ien una cons) trucci.n comn del terapeuta y de los miemros del sistema te) rapéutico Constituye una in3enci.n comn, sorprendente y por lo menos plausile El momento m>s importante de la primera sesi.n es aquel durante el cual se construye la 6ip.tesis0 los miemros de la familia entran pro&resi3amente en el marco de la &rilla e7plicati3a adoptada por el terapeuta en su in3esti&aci.n, 6aciéndose entrar él mismo en sus propias construcciones de lo real? y la 6ip.tesis no podr> ser fructuosamente compartida por los miemros del sistema terapéutico m>s que si es a la 3e: astante pr.7ima para ser aceptale y astante sorprendente para autori:ar una nue3a lectura Hen&o la impresi.n de que es en el curso de esta fase de elaoraci.n de 6ip.tesis que se construye el sistema terapéutico y que son planteados los fundamentos de una nue3a 3isi.n, compartida, del mundo El momento, situado al final de la sesi.n, en que ser> utili:ada la 6ip.tesis no ser> m>s que comentario? lo esencial estar> ya /u&ado Naturalmente, el inter3iniente, en terapia sistémica, no se contentar> con a3an:ar 6ip.tesis o rede5nir situaciones, propondr> tamién tareas Pero, las tareas propuestas no tendr>n un impacto m>s que si los di3ersos miemros del sistema terapéutico participan en la edificaci.n del marco en el cual éstas se inscrien Si la inter3enci.n terapéutica tiene é7ito, si&nificar> que m>s all> de la construcci.n comn, la 6ip.tesis compartida se 6ar> re3elado operatoria III. 9I9I4 DE OH4O MODO *A MISMA SIHBACION No asta, sin emar&o, compartir una misma 6ip.tesis En el caso de la familia, recordado m>s arria, la terapeuta me 6i:o saer i&ualmente que la 6a-a acometido un 3iolento dolor de espalda? estos dolores se 6a-an declarado al final de una sesi.n en la que la madre le 6a-a dic6o que conoc-a e7celentes kinesi.lo&os y ten-a sus direcciones a su disposici.n para el d-a en que tu3iera necesidad Este dolor en la espalda no desapareci. sino después de la ca-da relatada m>s arria, y de la inter3enci.n que la acompa5. Se 6a-a creado, por lo tanto, una intersecci.n entre la cons) trucci.n de lo real de mi estudiante y la de los miemros de la fa) milla 8a-a aparecido un nue3o sistema, pero este sistema no se 6a-a 3uelto terapéutico por eso *a alian:a terapéutica es siempre necesaria, pero a 3eces in) suficiente Para que una 6ip.tesis pueda desemocar en una in) ter3enci.n e7itosa, dee no solamente sorprender, sino permitir 3i3ir de otro modo la misma situaci.n
IQ. *ECHB4A DI2E4ENHE ; DESCA*I2ICACION DE* PACIENHE Esta squeda de una lectura diferente no dee conducimos a permanecer sordos a las palaras de nuestros interlocutores Demasiado a menudo, el terapeuta sistémlco est> tan asorido por su in3esti&aci.n de una comprensi.n circular del s-ntoma presentado que ol3ida tomar en cuenta los sentimientos de descalificaci.n que puede sentir la persona a la cual él se diri&e Para tomar un e/emplo, ima&inemos a un adolescente que no cesara de 3ituperar a sus padres? e ima&inemos, i&ualmente, que el terapeuta se contenta con redefinir la c.lera del /o3en como un medio de des3iar sore él la atenci.n de sus padres, a fin de dis) traerlos de sus propios conflictos Se correr-a el ries&o de que el adolescente 3iera al terapeuta como incapa: de aceptar su a&re) si3idad y descalificando lo que no se inscrie en su propia 3isi.n del mundo Sorprender no si&nifica renunciar a aliarse a las di3ersas maneras de decodificar su uni3erso que caracteri:an a los miemros de un sistema *a construcci.n comn efectuada con la ayuda del terapeuta deer>, pues, ser propuesta como una posiilidad suplementaria, y no como una 3erdad que rec6a:ar> las otras lecturas del mundo Q. 9E4 'BE NO SE 9E Bna situaci.n descrita por 8ein: 3on 2oerster en su art-culo J*a construction dXune realitéK UWF atesti&ua la importancia de esta posiilidad adicional Se trata de la e7periencia 3i3ida por los soldados afectados de lesiones en la re&i.n occipital del cerero como consecuencia de 6eridas de ala? estas 6eridas curan astante r>pidamente? lue&o, después de al&unas semanas, comien:an a aparecer trastornos motores, por e/emplo al ni3el de un ra:o o de una pierna? los tests cl-nicos muestran entonces que el funcionamiento del sistema ner3ioso motor es normal, pero que Jen ciertos casos, las lesiones si&nifican para el enfermo la pérdida de una &ran parte del campo 3isualK Lpérdida que el paciente no 6a-a perciido asolutamente A&re&a 3on 2oerster0 JBna terapia efica: consiste en 3endar los o/os del paciente durante uno o dos meses, 6asta que recora el control de su sis) tema ner3ioso motor, y eso al despla:ar su Jatenci.nR, de los puntos de se5ali:aci.n 3isuales no e7istentesF que lo informan normalmente sore la posici.n de su cuerpo, 6acia los canales completamente operacionalesF que le pro3een directamente se)
5ales posturales pro3enientes de receptores sensoriales propio) cepti3osF alo/ados en sus msculos y sus articulacionesR El paciente no 3e que no 3e ;, en tanto que no 3e que no 3e, no puede e7plorar nue3as posiilidades ni 6allar soluciones a su prolema No es sino cuando 3e que no 3e que otro de3enir puede sur&ir *a terapia, en ese sentido, podr-a ser encarada como un proceso consistente en ayudar a al&uien a 3er que no 3e, y a apoyarse precisamente sore este l-mite para arirse a nue3os posiles
QI. COE4CIN ; ABHONOMIA Este 3-nculo entre el l-mite y la posiilidad, entre la coerci.n y la autonom-a, nos remite a la liertad del oser3ador con respecto al conte7to en el seno del cual emer&e, a la autonom-a del terapeuta o del paciente con relaci.n a los sistemas de los que son miemros Hodos los l-mites no son coerciones que podemos sorepasar *a 3e/e:, la muerte, la falta in6erente a nuestra condici.n 6umana son aspectos fundamentales de lo que constituye nuestro destino Entre los mltiples modos de 6acer frente a los l-mites que est>n a nuestra disposici.n, quisiera destacar dos e/emplos que me sorprendieron particularmente En primer lu&ar, siempre fui sensile al drama de S-sifo Es) cuc6emos lo que nos dice 8omero0 JEmpu/aa con sus dos ra:os una enorme piedra Apoy>ndose en sus manos y sus pies, empu/aa la piedra 6acia la cima de una colina? pero, cuando ia a sorepasar la cumre, la masa lo arrastraa 6acia atr>s? de nue3o, la c-nica piedra rodaa 6acia la llanura 4ecoradas las fuer:as, recomen:aa a empu/arla, el sudor corr-a por sus miemros y el pol3o se ele3aa como un nimo sore su cae:aK U@! *os /ueces de los Inflemos 6a-an condenado a S-sifo a empu/ar una enorme roca 6asta lo alto de una colina, a fin de 6acerla caer sore la otra ladera Apenas S-sifo lle&aa a la cima la roca lo arro/aa 6acia atr>s y de3ol3-a aa/o, lle3ado por su propio peso *o menos que se puede decir de S-sifo, es que era un 6omre particularmente astuto Cuando Autolycos intent. apropiarse de su &anado, S-sifo supo desaratar su plan, a pesar del poder de metamorfosear a &usto a los animales que 8ermés 6a-a dado al ladr.n ;, cuando para casti&arlo por 6aer traicionado los secretos de los dioses 1eus le despac6. a H6anatos, 6ermano de 8ypnos, para que lo condu/ese al H>rtaro y le infli&iese un casti&o eterno, S-sifo sorprendi. a H6anatos y lo&r. encadenarlo 8ec6o prisionero el &enio de la muerte, nadie pod-a ya morir
Para salir de esta impasse, Ares lier. a H6anatos y lo lir. de S-sifo Pero éste no era corto de ima&inaci.n0 6a-a ordenado a su mu/er Meropea no enterrarlo, por m>s que lle&ado al palacio de 8ades, pudo pedir a Perséfona la autori:aci.n de 3ol3er a la tierra para ser enterrado y casti&ar a aquellos que no 6a-an cumplido sus deeres fneres Perséfona lo mand. a la tierra por tres d-as, lo que le permiti. escapar una 3e: m>s de su suerte 2ue necesario que 8ermés fuese a apoderarse del auda: y lo lle3ase por la fuer:a a los Inflemos 'ué ia, pues toda3-a, a in) 3entar S-sifo para salir del asunto Alert Camus le concede esta ltima 3ictoria0 JS-sifo mira entonces la piedra a/ar en al&unos instantes 6acia este mundo inferior de donde ser> necesario remontar 6acia las cimas 9uel3e a descender a la llanura S-sifo me interesa durante este retomo, esta pausa UF S-sifo proletario de los dioses, impotente y reelado, conoce toda la e7tensi.n de su miserale condici.n0 en ella piensa durante su descenso *a clari3idencia que deer-a ser su tormento consuma al mismo tiempo su 3ictoriaK UY! Para Camus a partir del momento en que S-sifo ec6a a los dioses, en que 6ace del destino un asunto del 6omre, su destino le pertenece y su roca 3uel3e su cosa Para el oser3ador e7terior, S-sifo puede parecer un condenado que repite para siempre los mismos &estos intiles Pero, para él, esta roca es su roca y esta empresa desesperada es la suya, no le es m>s impuesta, inclusi3e la rei3indica *a roca puede rodar toda3-a, cualquiera que sea el 3eredicto de los dioses, S-sifo se 3uel3e su propio amo Su aureola no es la del m>rtir que accede a la santidad0 S-sifo no est> qui:> nimado m>s que de pol3o, pero es este pol3o Lesta roca, su condici.n 6umanaLlo que 6ace su &rande:a En un re&istro m>s ale&re C6arles Perrault, en su cuento 'a bella durmien"e, intenta tam)i/n integrar el lmite a "in de esca-ar a s! ser&id!m)re. (eleamos esta ;istoria... a &ie*a ;ada >!e no ;a)a sido in&itada a las ceremonias del )a!ti0o aca)a de condenar a la -rincesa a tras-asarse la mano con !n ;!so y a morir -or eso? la !ili0aos, rey y reina, &!estra ;i*a no morir? es cierto >!e no tengo )astante -oder -ara des;acer enteramente lo >!e mi anciana ;i0o. a -rincesa se atra&esar la mano con !n ;!so? -ero en l!gar de morir, caer solamente en !n -ro"!ndo s!eBo >!e d!rar cien aBos, al ca)o de los c!ales el ;i*o de !n rey &endr a des-ertarlaK. H Hen&o a menudo la impresi.n de que a la ima&en de S-sifo o de la /o3en 6ada no podemos e3itar componerlas con ciertos l-mites
que nos impone nuestra condici.n 6umana y los conte7tos en los cuales e3olucionamos Como ellos, no podemos orrar lo que 6a sucedido Podemos, solamente, tratar de transformar nuestras deficiencias en triunfos Pero, para eso, es necesario aun que los sistemas de los cuales participamos estén aiertos al camio QII. EN E* PAIS DE *OS CIE+OS E* HBE4HO ES Bn d-a, durante un seminario que anim>amos los dos, 8ein: 3os 2oerster destac. un aspecto poco conocido de la ale&or-a plat.nica de la ca3erna En el liro 9II de 'a Bepblica, Sócrates imagina !na ca&erna c!ya entrada estara a)ierta a la l!0. esde s! in"ancia &i&en all ;om)res encadenados de tal s!erte >!e no -!eden &er ms >!e la -ared >!e constit!ye el "ondo de s! -risión. a l!0 &iene de !n "!ego encendido so)re !na alt!ra, a lo le*os, detrs de ellos. Entre este "!ego y los -risioneros ;ay tra0ado !n camino )ordeado -or !n -e>!eBo m!ro. A lo largo de ese m!ro des"ilan ;om)res >!e lle&an o)*etos de todas clases y estat!illas de ;!manos y de animales, >!e so)re-asan el m!ro. os ca!ti&os no &en ms >!e las som)ras -royectadas -or el "!ego so)re la -ared del "ondo de la ca&erna, y no oyen sino el eco de las -ala)ras -ron!nciadas -or los -ortadores. Si uno de los prisioneros era lierado de sus cadenas y lle3ado al e7terior, le lle3ar-a astante tiempo 6aituarse a la lu: y al mundo e7terior ; si, por a:ar, 3ol3-a a su lu&ar de ori&en y trataa de con3encer a sus anti&uos compa5eros de la e7istencia de una realidad e7terior, trope:aa con su incredulidad Inclusi3e correr-a el ries&o de que se lo matara si se ostinaa en querer lierarlos y lle3arlos fuera de su prisi.n? S.crates dice a +laucon0 J; si al&uno intenta desatarlos y conducirlos arria, y pueden tenerlo en sus manos y matar, no lo matar>n UV y esta frase 6i:o decir a 3on 2oerster0 JEn el reino de los cie&os, el tuerto 3a al asiloQR Cito esta oser3aci.n de 3on 2oerster, no para oponer el mundo de la oscuridad al de la lu: o, como dir-a S.crates, el de la i&norancia al de la instrucci.n, sino alinde s!)rayar la im-ortancia del sistema donde nace el cam)io. Para >!e !n cam)io tenga !na -osi)ilidad de am-li"icarse, -ara >!e toda &ariación no sea cond!cida a normas -resta)lecidas, es necesario >!e se c!m-lan ciertas condiciones. Para >!e !na inter&ención modi"i>!e !n sistema ;!mano a largo -la0o, es necesario >!e el cam)io a"ecte la manera de &er del con*!nto de los miem)ros de ese sistema. F esta modi"icación -!ede o-erarse de m!c;as maneras.
QIII. A*+BNOS P4INCIPIOS SB<;ACENHES A MI EN2O'BE PSICOHE4APEBHICO
1. Para un tiempo sistémico Me parece importante, en psicoterapia, de/ar atr>s la oposici.n simplista entre una 3isi.n de la 6istoria se&n la cual los elementos del pasado determinar-an autom>ticamente los elementos futuros y una lectura que en nomre de la equifinalidad, insistiera nicamente sore el aqu- y a6ora Preconi:o, en las terapias familiares, un uso m>s fle7ile del tiempo Para comprender el presente, los elementos del pasado se re3elan &eneralmente necesarios, pero no suficientes Para que un acontecimiento traum>tico contine desempe5ando un papel importante al ni3el del presente, es necesario que el mantenimiento de un comportamiento ten&a una funci.n y un sentido importantes con respecto al sistema donde se perpeta Podr-a ser pro3isto un e/emplo interesante, desde este punto de 3ista, por lo que pasa cuando se forma una pare/a Ima&inemos una mu/er que, por ra:ones li&adas a su propia 6istoria, no estu3iera a &usto en una relaci.n de pare/a sino a condici.n de ocupar el lu&ar de consoladora Ima&inemos tamién que, en ocasi.n de los primeros encuentros, al comien:o de la 6istoria de esta pare/a, esta mu/er se ima&ina que su compa5ero est> triste cada 3e: que permanece silencioso o parece perdido en sus ensue5os E Ima&inemos por fin que pre&unta a su ami&o0 JEst>s tristeR 6aciéndole sentir 6asta qué punto ella estar-a pr.7ima a él y a ayudarlo si le responde por la afirmati3a Si el compa5ero acepta responder a esta in3itaci.n impl-cita el sistema de pare/a amplificar> y mantendr> ciertos comportamientos li&ados a acontecimientos pasados Pero se podr-a tamién ima&inar que éste le replique0 JNo, no estoy triste, so5aa simplementeR? ser-a posile, se&uramente, que su compa5era lo de/ara, pero si quedara a pesar de todo con él, este aspecto de su personalidad podr-a muy ien no amplificarse ni mantenerse Ocurre por otra parte lo que suele producirse en psicoterapia indi3idual0 el paciente intenta reproducir ciertos esquemas ante) riores con su psicoterapeuta, a pesar de que este ltimo, por sus reacciones, crear> un conte7to diferente que, en cierto momento de la terapia, permitir> modificar los comportamientos del paciente Por a5adidura, el tiempo, tal como lo encaro a la lu: de la lec) tura de los traa/os de Ilya Pri&o&ine y de su equipo, no es m>s un tiempo lineal donde los elementos se suceden en un proceso de causas y efectos *as amplificaciones de ciertos ensamla/es, en los cuales el a:ar desempe5a un papel no desde5ale, pueden en
efecto desemocar en una transici.n arupta, una ifurcaci.n, un nue3o de3enir impre3isto
2. Ensamla/es y autorreferencia En el cap-tulo II, insist- particularmente sore los ensamla/es autorreferenciales que 6a-an aparecido durante una sesi.n de psicoterapia Estos ensamla/es, constituidos tanto por re&las como por sin&ularidades, pueden amplificarse en un momento dado, y tomar una consistencia que modificar> el de3enir del sistema terapéutico El ensamla/e cuya amplificaci.n puede loquear o permitir la e3oluci.n del sistema est> formado por elementos li&ados a los diferentes miemros del sistema terapéutico, pero no reduciles a ellos El arte del terapeuta consistir> en autori:arse a deri3ar con la familia para permitir a esos ensamla/es constituirse, aun si no corresponden a lo que se supone si&nificante por sus &rillas e7plicati3as Esos ensamla/es pertenecen no solamente al sistema de la familia, sino tamién al sistema terapéutico0 el terapeuta est> siempre incluido all- Es capital, me parece, que el terapeuta no usque saer lo que es ueno para la familia ni se interro&ue sore la direcci.n que el sistema terapéutico deer-a se&uir0 su traa/o podr-a m>s ien consistir en ayudar a los miemros de la familia a no tomar los circuitos de relaciones que impon-an el mantenimiento del s-ntoma, a fin de arirles otros posiles En cuanto a estos posiles, el terapeuta los descurir> al mismo tiempo que la familia, camiando él mismo a medida que ayuda a los otros a camiar *a terapia podr-a por lo tanto ser descrita como una serie de situaciones en las cuales el terapeuta se esfuer:a en ayudar al sistema terapéutico a salir de los carriles donde se atasca
$. Bna lectura sistémica de los sentimientos *a primera 6erramienta del terapeuta es él mismo *ar&o tiempo, los terapeutas desconfiaron de los sentimientos que les inspiraa su paciente pues consideraan que sus afectos no pod-an sino suprimir la Jo/eti3idadR de sus oser3aciones En lo que me concierne, no estoy con3encido de que lo que sentimos en psicoterapia como terapeutas sea una deficiencia Naturalmente, no podemos e7perimentar un sentimiento particular, en una situaci.n espec-fica, m>s que si en al&una parte, una cuerda sensile 3ira en nosotros Pero, para m-, el sentido y la funci.n de la 3iraci.n de esta cuerda no deen ser uscados nicamente en mi econom-a
personal? est>n li&ados al mismo tiempo, al sistema en cuyo seno me descuro en camino de 3i3ir ese sentimiento Dic6o de otra manera, as- como, para el terapeuta sisté) mico, el s-ntoma del paciente destinado a un sentido y una funci.n en el sistema en donde ese s-ntoma sur&e, considero que los sentimientos que racen en tal o cual miemoro del sistema terapéutico tienen un sentido y una funci.n con respecto al sistema mismo en que ellos emer&en Para m-, esos sentimientos indican los puentes espec-ficos que est>n por constituirse entre los miemros de la familia y el psicoterapeuta? estalecen los fundamentos comunes sore los cuales puede edificarse la terapia No quiero decir con eso que el terapeuta puede por eso des) cuidar las apuestas en curso? muy por el contrario, s.lo una con) ciencia a&uda de esas apuestas le permitir> e3itar refor:ar las Jconstrucciones del mundoK de los miemros de la familia as- como las suyas ; es cierto que en al&unos casos espec-ficos, una 3i3encia demasiado in3asora en el terapeuta, puede conducir a reducir la 3i3encia de los miemros de la familia a lo que se ima&ina decodificar Pero, aun en este caso, esta situaci.n no puede perpetuarse si tiene una funci.n con respecto al con/unto del sistema terapéutico En la parte de este cap-tulo consa&rada m>s espec-ficamente a las Inter3enciones, indicaré c.mo el terapeuta puede utili:ar en la sesi.n este aspecto autorreferencial
'. *as resonancias Me parece esencial, durante una psicoterapia o una super3isi.n, no perder de 3ista los diferentes sistemas en/ue&o *a squeda de puntos de resonancia puede re3elarse crucial para el de3enir del sistema terapéutico
Ib. A*+BNAS 8E44AMIENHAS DE INHE49ENCION Antes de presentar un tipo de inter3enci.n que desarrollé en terapia de pare/a y de descriir c.mo la autorreferencia puede 3oX3erse un triunfo en las manos del terapeuta, desear-a e7tenderme un poco m>s sore el reencuadre, que es una 6erramien ta empleada por todas las escuelas de terapia sistémica
1. El reencuadre
;a en el cap-tulo II, e7plicité re3emente la noci.n de reen)
cuadre a partir de la definici.n que dan at:la=ick, eakland y 2isc60 reencuadrar, lo 6emos 3isto, consiste esencialmente en modificar el conte7to de una situaci.n a fin de camiar comple) tamente su sentido No puedo resistir, aqu-, al placer de citar un e/emplo tomado de la pr>ctica de 2rancoise Dolto, tal como ella lo descrii. en una entre3ista difundida por +n"enne 2 -oco des-!/s de s! de@ sa-arición Del l5 de se-tiem)re de 1#33. 2ran&oise Dolto recordaa en esta emisi.n el caso de una madre que se presentaa como ansiosa, por m>s que 6uiera 3i3ido ien su emara:o? su eé, anoré7ico, rec6a:aa la lec6e materna, mientras que aceptaa sin dificultad los ierones dados por la enfermera Dolto e7plic. a esta madre, que 3i3-a muy mal esta situaci.n, que su ni5o la amaa tanto que quer-a amarla como cuando estaa Jin teroR y no ten-a toda3-a oca Esta inter3enci.n modific. totalmente la relaci.n de la madre con su eé, y con la enfermera que lo nutr-a *a rique:a suya) cente de este reencuadre salta inmediatamente a la 3ista0 sura) yaa, entre otras cosas, que este lactante pod-a ec6ar de menos tanto como su madre ese momento mara3illoso que 6a-a sido esa pre5e:, de/ando as- entender que la madre no era la nica en sentir nostal&ia por ella Otros elementos, aparentemente anodinos, desempe5aron sin duda un papel0 por qué Dolto declara en esta entre3ista que el ni5o Jin teroK no ten-a oca, en lu&ar de decir que no se alimentaa por este orificio Estos detalles forman parte de la constelaci.n e7tremadamente comple/a que rodea toda inter3enci.n terapéutica El ensamla/e operatorio es siempre muc6o m>s rico que la 3ersi.n racionali:ada que puede darse El reencuadre es una de las 6erramientas m>s frecuentemente utili:adas por los terapeutas sistémicos Para 3ol3er a la familia citada al comien:o de este cap-tulo, por e/emplo, la madre e7clam. en el curso de esa misma sesi.n que ella era Juna torpeK? en otro momento de la terapia, este término que para la paciente desi&naa a al&uien estpido, fue retomado por la consultante, y empleado en otro sentido0 el de un recipiente que permite saciar la sed en medio del desierto No podr-a ima&inarse que /ustamente al comportarse como Juna torpeR, en esta familia en particular, la madre permit-a a los otros miemros saciarse Para que puedan ser aceptados, los reencuadres deen parecer culturalmente plausiles a aquellos a quienes les son propuestos Bn reencuadre muy a menudo utili:ado, en nuestro campo, es el que consiste en descriir a los miemros de una familia como Jprote&iéndoseR mutuamente, o el s-ntoma del paciente desi&nado como pareciendo, a sus o/os, Jprote&erR a los suyos El é7ito de esta forma de inter3enci.n consiste qui:>s, en que se une a ciertos 3alores de nuestra ci3ili:aci.n lar&o tiempo alimentada de lecturas
-licas Se encuentra ya un primer reencuadre de este tipo en Isa-as >saías, R, 0) c!ando el -ro"eta declara: 7Sin em)argo son n!estras en"ermedades de las >!e esta)a cargado, n!estros s!"rimientos >!e /l lle&a)a mientras, nosotros, lo tom)amos -or !n desgraciado a"ectado...K El mismo ti-o de reenc!adre o-eran los doctores del alm!d c!ando, al citar este -asa*e de >saías, cali"ican al Mesas de 7est!diante le-roso9 (s cerca de nosotros, el filme de 2rank Capra 'a $ie es" belle D1#'6 nos o"rece otro e*em-lo de tal reenc!adre: el ;/roe del "ilme, desem-eBado -or !e el deses-erado no es otro >!e s! ngel g!ardin, >!e se ;a)a ser&ido de este medio -oco com8n -ara arrancarlo de s!s ideas s!icidas. Para m- es importante que el terapeuta no otor&ue al reencuadre sino un 3alor opera"orio. El salto >!e -ermite este ti-o de inter&ención no tiene !tilidad si no o"rece otra lect!ra de la sit!ación, no a)re otras -osi)ilidades. A;ora )ien, si el tera-e!ta se instala en la -osición de a>!el >!e est -lenamente anclado en !n m!ndo de &erdad y considera lo >!e est -or oc!rrir 7como &erdadero9, corre el riesgo de !s!r-ar el l!gar del otro y de limitar toda tentati&a de alteridad. S!s reenc!adres arriesgarn ser otros tantos sentidos -ro;i)idos im-idiendo a los -acientes a)rir -osi)ilidades en &as >!e no sean las del tera-e!ta. !ando, en tera-ia de -are*a, reenc!adro -ositi&amente el com-ortamiento de !n cóny!ge, acom-aBando este reenc!adre de !n comentario -aradó*ico >!e m!estra cómo este com-ortamiento -rotege la constr!cción del m!ndo del com-aBero, no )!sco sino o"recer !na &i&encia di"erente: es-ero sim-lemente >!e esta &i&encia li)erar n!e&as -osi)ilidades >!e -ermitirn cam)iar al con*!nto de los miem)ros del sistema tera-/!tico: si eso se -rod!ce, la in@ ter&ención ;a)r sido o-eratoria, -ero lo >!e ;a)r sido dic;o no ser 7&erdaderoK -or eso.
2. *os rituales en terapia de pare/a
'uisiera descriir aqu- una de las 6erramientas de que me sir3o frecuentemente en terapia de pare/a0 a saer, las tareas parad./icas que se diri&en, al mismo "iempo, a los dos ni&eles de la do)le coerción >!e &i&e cada !no de los -rotagonistas. El e/emplo que si&ue est> sacado de una terapia de pare/a efectuada con mi super3isi.n en un 6ospital uni3ersitario de
sa&rada a las resonancias *a esposa deseaa que su marido J tu3iese cora:.nK y se ocu) para de ella Por otra parte, su madre se 6a-a ocupado poco de ella y ten-a la costumre de reproc6arle Jaun &astos insi&nificantesK? en cuanto a su padre, no 6ar-a osado ocuparse de ella sino a escondidas de su madre, e inclusi3e la 6ar-a JtraicionadoK cuando ella ten-a diecioc6o a5os0 interna del liceo, no pod-a salir de la pensi.n el fin de semana, pues JestoraaR y Jel tren costaa demasiado caroR El marido deseaa que su esposa le manifestara un poco m>s de ternura y lo apreciara m>s Por otra parte, él se 6a-a sentido un ni5o no deseado, y se 6a-a 3i3ido como J6uérfanoK? declaraa a la terapeuta0 JMi madre me rec6a:aa Mi auela me traicionaa, a&re&ando0 JSufr- de una falta total de ternura, de afecto, de se&uimientoR Si empleo mi modelo, la esposa deseaa que su marido Jtu3iera cora:.nR y se ocupara de ella al ni3el de su pro&rama oficial? al mismo tiempo, al ni3el de su construcci.n del mundo, pensaa que no pod-a m>s que JestorarK y no cre-a que al&uien pudiera ocuparse de ella ; el marido deseaa, en un cierto plano reciir ternura y ser m>s apreciado, pero, no 6aiendo 6ec6o la e7periencia en su infancia, no lle&aa a creer que sus demandas pudieran ser satisfec6as Si uno de estos c.nyu&es respond-a a la espera e7pl-cita del otro, ia Ine3italemente al encuentro del se&undo aspecto de la dole coerci.n 8e aqu- e7tractos de una sesi.n donde la terapeuta propuso tareas parad./icas0 *A HE4APEBHA [a la esposa.L: LJ!/ ;!)i/seis >!erido >!e &!estro marido ;iciera *A ESPOSA0 'ue ten&a cora:.n 'ue me consa&re una 6ora por semana 'ue no se quede sentado all- *A HE4APEBHA0 Se5or, qué 6uiéseis querido que 3uestra mu/er 6iciera por 3os E* MA4IDO0 'ue aprecie lo que 6a&o Bn poco de ternura *A HE4APEBHA0 Podr-ais ser m>s preciso E* MA4IDO0 'ue no se opon&a sistem>ticamente a mi 'ue de/e los reproc6es0 sus reproc6es me parali:an 'ue no me destruya sistem>ticamente, que sea constructi3a Aqu-, la sesi.n fue interrumpida, y el equipo discuti. detr>s del espe/o sin a:o&ue *ue&o la terapeuta 3ol3i. a la sesi.n *A HE4APEBHA Os 3oy a pedir al&o que qui:> no marc6ar> Mis cole&as piensan que eso no marc6ar> UAl maridoL a seBora -ide >!e &os le consagr/is !na ;ora -or semana. Fo &oy a -ediros tomar, dos &eces -or semana, !na media ;ora -ara estar li)re, atento. J!iero >!e tom/is
ese tiem-o -ara estar con ella, y eso a -esar de lo >!e -edir/ a &!estra m!*er. UA la esposaL Por &!estra -arte, decidle >!e no >!er/is. J!e no es -or>!e yo lo -ido >!e es necesario >!e &os lo ace-t/is. E* MA4IDO0 8ay una contradicci.n contradicci.n aparente *A HE4AP HE4APEB EBHA HA Ua la espos esposa a e)/is e)/is re;!sa re;!sarlo rlo -or>! -or>!e, e, c!ando se lo -eds, /l no lo ;ace? no lo ;ace ms >!e c!ando yo le -ido -ido.. .... En c!an c!anto to a &os, &os, seBo seBora ra,, >!is >!isie iera ra >!e >!e le mani"estrais tern!ra. *A ESPOSA Pero él me rec6a:a *A HE4APEBHA0 Uai maridoL !ando ella sea tierna con &os, >!isiera >!e -ongis m!c;a atención a no ser conmo&ido -or s! tern!ra. *A ESPOSA El ya es as-Q *a terapeuta repiti. entonces las tareas a los dos miemros de la pare/a y les pidi. tomar nota de lo que ian a sentir uno y otra Ella supo la sesi.n si&uiente que la esposa 6a-a cocinado para su mari marido do y le 6a6a-a a escr escrit ito o pala palar ras as dulc dulces es00 éste éste le 6a6a-a a a&radecido, lamentando que ello no ocurriera m>s a menudo, lue&o se apercii. de que era /ustamente la tarea que 6a-a sido pedida a su mu/e mu/er? r? lo que que no 6a6a-a a impe impedi dido do a la paci pacien ente te cont continu inuar ar ocup>ndose de su c.nyu&e El 6omre declar. ante la terapeuta0 JEra un rayito de solK, y la mu/er le 6i:o eco a&re&ando0 J6alamos 6asta las tres de la ma5ana, dos noc6es se&uidas D... El esta)a en !na s!a&e e!"oria, ;a)a re*!&enecido die0 aBos. o encontr/ tal como lo ;a)a conocido die0 aBos antes9. 8asta all-, si su marido se ocupaa de ella, esta paciente no lo cre-a, lo rec6a:aa, pro3ocaa en él una reacci.n de retirada y se que/aa de esta reacci.n ;, si su esposa le manifestaa ternura y le mostraa que lo apreciaa, este paciente no lo cre-a tampoco, pues tem-a que este comportamiento pusiera en cuesti.n su construcci.n del mundo? su compa5era se sent-a entonces rec6a:ada, y él mismo pod-a continuar que/>ndose de no ser apreciado +racias a esas tareas que prescri-an a estos dos c.nyu&es lo que ya 6ac-an, la tera terape peut uta a 6a6a-a a por por lo tant tanto o lie liera rado do a cada cada uno uno de esto estoss prota&onistas prota&onistas de la dole coerci.n que los oprim-a En este conte7to, cada miemro de esta pare/a pudo intentar 6acer coe7istir en él los dos ni3eles de la dole coerci.n sin 3er a su c.nyu&e como a&resi3o? si al&uno tend-a una trampa, no era m>s el compa5ero compa5ero,, era esta terapeuta? terapeuta? si era necesario necesario que 6uiera un carcelero, no ser-a m>s el otro miemro de la pare/a, sino esta terapeuta de prescripciones tan e7tra3a&antes e7tra3a&antes Es claro que lo que pas. en esta terapia es muc6o m>s comple/o de lo que acao de descriir0 si esta terapeuta construy. un modelo
de doles coerciones rec-procas articulado en tomo de esos temas espec espec-fi -fico cos, s, por e/empl e/emplo, o, es porque porque esos esos temas temas la conmo conmo3-a 3-an n tam tamié ién? n? el cam camio io se prod produ/ u/o, o, en cons consec ecue uenc ncia ia,, al ni3e ni3ell del del con/unto del sistema terapéutico, y no solamente al de los miemros de la pare/a Por otra parte, las tareas como éstas no son m>s que un episodio de un proceso terapéutico que puede tener un rusco camio de direcci.n Pues, apenas apare:ca en un ni3el una fle7iilidad m>s &rande, otra dificultad se manifestar> en otra parte Piensen lo que pensaren aquellos que querr-an 3er en el psicoterapeuta una especie de ma&o, el sistema terapéutico dee &eneralmente uncirse a un traa/o lar&o y dif-cil
$. De la autorreferencla como triunfo en psicoterapia Al leer los diferentes e/emplos de autorreferencla dados en este liro, el lector 6ar> podido pre&untarse c.mo es posile escapar a estas situaciones A mi modo de 3er, la soluci.n no consiste en e3itar la autorreferencla, sino en traa/ar a partir del cora:.n mismo de ésta Propo Propondr ndré é por por lo tanto tanto a los terapeut terapeutas as respe respetar tar los los puntos puntos si&uientes0 1. Aceptar que lo que nace en nosotros no est> nicamente li) &ado a nuestra propia 6istoria, sino que tiene i&ualmente un sentido y una funci.n en relaci.n con el sistema terapéutico donde ese sentimiento aparece 2. Desconfiar de ello Si se&uimos el sentimiento que sur&e en nosotros sin 6aer 3erificado en él el eco en los miemros de la pare/a o de la familia, 3amos al encuentro de dos tipos de difi) cultades0 a. Es siempre posile que nuestra 3i3encia esté m>s li&ada a nuestra propia 6istoria que a lo 3i3ido por los otros miemros del sistema terapéutico b. Si se&uimos se&uimos nuestra nuestra 3i3encia 3i3encia sin precauci precauci.n, .n, arries&am arries&amos os muc6o refor:ar nuestra construcci.n del mundo y las de los miemr miemros os de la famil familia ia 8arem 8aremos os creado creado entonc entonces es un sistema donde Jcuanto m>s camia al&o m>s es la misma cosaK $. 9erificar que lo que sentimos tiene una funci.n a la 3e: con respecto a los miemros de la pare/a o de la familia y con respecto a nosotr nosotros os mismos mismos Si eso se confi confirma rma,, 6arem 6aremos os descui descuiert erto o un puente nico y sin&ular entre los miemros de la pare/a o de la familia y nosotros mismos Nos transformaremos al mismo tiempo que ayude ayudemos mos a los otros otros miemr miemros os del sistem sistema a terap terapéut éutico ico a cam camia iar r Al inte intent ntar ar modi modifi fica carr las las cons constr truc ucci cion ones es del del mund mundo o
pr.7imas a las nuestras, participaremos en una empresa comn de lie liera raci ci.n .n que que se conf confir irma mar> r> tant tanto o m>s m>s c.mo c.moda da cuan cuanto to los los elemen elementos tos sur&id sur&idos os de nuestr nuestro o pasado pasado nos difere diferencie ncien n de los miemros de la familia, contraalanceando as- la similitud e3entual de las creencias profundas que e7isten de una parte y de otra '. El traa/o de psicoterapia consistir> entonces en fle7iili) :ar los elemen elementos tos aparec aparecido idoss en la inters intersecc ecci.n i.n de los difer diferent entes es uni3ersos de los miemros del sistema terapéutico El modo en que esta fle7iili:aci.n podr> operarse, las condiciones en las cuales el terapeuta podr> camiar al mismo tiempo que los miemros de la pare/a o de la familia, depender>n de las teor-as suyacentes de la escuela a la que pertene:ca el terapeuta *o importante, para m-, no es tant tanto o la teor teor-a -a suy suyac acen ente te como como la adec adecua uaci ci.n .n entr entre e los los miemros del sistema terapéutico y esta teor-a 8emos lle&ado a una primera etapa Os 6e propue propuesto sto,, lo me/or me/or que pude, mis mis const construc rucci cione oness en cuanto al desarrollo posile de un enfoque en terapia sistémica Si, a continuaci.n de no sé qué felices intersecciones, estas cons) trucciones trucciones pudieron pudieron encontrar encontrar las 3uestras 3uestras y permitiro permitiross entre3er entre3er nue3as perspecti3as, este esfuer:o no 6ar> sido 3ano
4eferencias ilio&r>ficas ilio&r>ficas H1 (ean)*uc +irione0 K'uelques pas 3ers la contrée o les an&es ont ont peur peurK, K, en +u"or%f%rence e" "h%rapiefamiliale Ddirigida -or M. Elkaim Elkaim y . Sl!0ki, Sl!0ki, Aahiers cri"i!ues de #"lan, Pars, alllmard, 1#2. H$ Mony Elkaim0 KDoule)con KDoule)contraint trainte e et sin&ularités sin&ularités dans une si) tuation de formation > la t6érapie familialeK, en M Elkaim compF0 Cor ma "íons e" pra"i!ues en "h%rapie familiale, Pars, ES, 1#35. UW( 8ein: 8ein: 3on 2oerst 2oerster0 er0 J*a constr construcci ucci.n .n dune dune realité realitéK, K, en Paul Paul at:la= at:la=ick ick comp compF0 F0 '>n$e '>n$en"i n"ion on de la reali"% reali"%,, Parts, Editlons d! Se!il, Se!il, 1#33, 1#33, -gs. -gs. '@'3. '@'3. Day &ersió &ersión n castella castellana: na: 'a realidad in$en"ada, C!enos Aires, edisa, 1#33. H5 8omé 8omére re00 'Ksys%e, Pars, Pars, . . lammar lammarion ion,, coll. coll. 7K, 7K, canto canto 11, 1#65, 1#65, -g. -g. 1$. 1$. Day Day &ersió &ersión n castella castellana: na: 'a Kdisea, Madrid, Es-asa@ al-e, 1#3', 15V ed.. H6 Alert Alert Camus0 Camus0 'e my"he de Sisyphe, Pars. alllmard, coll. olio Essals, 1#3, -gs. 165@166.
U$! C6arles Perrault0 Aon"es, Pars, e l&re de Poc;e, i)rairie /@ nerale ran"alse, 1##, -g. 1$'. Day &ersión castellana: !entos, Carcelona, Prod!cciones Editor <. <. ernnde0 (i)era, 1#32. U! Plat.n0 'a B%publi!ue, Pars, . . lammarion, 1#66, -g. 25 Day &ersión castellana: 'a Bepblica D$ &ols., Madrid, Instit!to de Es t!dios Polticos. 1#31, $V ed..
*
EPI*O+O
Bna 6istoria de (6a (6a, persona/e muy conocido de las 6istorias marroqu-es, se diri&i., un 3iernes, a la me:quita Ese d-a, los fieles lo instaron a tomar la palara y diri&irse a ellos Después de 6aer intentado durante lar&o rato sustraerse a su espera, (6a termin. por pre) &untarles0 JSaéis lo que os 3oy a contarK Al responder la asis) tencia por la ne&ati3a, les di/o0 JC.mo puedo 6alaros de lo que i&nor>isK El 3iernes si&uiente, los fieles con3inieron lo que responder-an si (6a tratara de nue3o de e3itar diri&irse a ellos Después de que éste les 6uiese pre&untado una 3e: m>s0 JSaéis lo que os diré, ar&yeron en coro0 JS-, lo saemosR (6a replic.0 JPero entonces, de qué sir3e que os lo di&aR, y fue a sentarse tranquilamente entre la asistencia El tercer 3iernes, la asamlea crey. al fin 6aer encontrado la réplica que les permitir-a saer lo que (6a pod-a tener que decirles A la pre&unta reiterada0 Saéis lo que os 3oy a decirK, una mitad de los oyentes respondi. JNoR, y la otra mitad e7clam.0 JS-R (6a les di/o entonces0 J'ue aquellos que saen lo di&an a los que no saenR # Al&unas l-neas para aquellas o aquellos que no conocen estas nociones de reencuadre y de comentarlo parad./ico En su liro >han)ements, 4arado?es et 4sychot2ra1ie, Paul at:la=ick, (o6n 8 eakland y 4ic6ard 2is6 definen as- el reencuadre0 K4eencuadrar, escrien, si&nifica por lo tanto modificar el conte7to conceptual yo emocional de una situaci.n, o el punto de 3ista se&n el cual es 3i3ida, situ>ndola en otro marco, que corresponde muy ien, o aun me/or, a los K6ec6osK de esta situaci.n concreta, cuyo senBdo, en consecuencia, camia completamenteK Y! Descrien a titulo de e/emplo c.mo Hom Sa=yer, el 6éroe de Mark H=aln, lo&ra reencuadrar un casti&o para con3ertirlo en un placer0 un d-a de-a lanquear un cerco con cal, present. este traa/o oli&atorio de tal manera que en lu&ar de mofarse de él, sus ami&os solicitaron tamién ellos el derec6o de poder repintar el cerco En lo que concierne al comentario parad./ico, ima&inemos que