ADMINISTRACIÓN Y NEGOCIOS
Conducta humana, Personalidad y Percepción
¿Relación o Co-dependencia?
NOMBRE: Mario Chaparro Llaves, Gabriela Contreras Uribe CARRERA: Ingeniería en administración de empresas mención finanzas ASIGNATURA: Comportamiento humano en las organizaciones PROFESOR: Sr. Diego Medina Henríquez FECHA: 06 de diciembre 2017
1 Introducción Desde sus inicios el ser humano se ha caracterizado por ser diferente del resto de los seres vivos. Se dice que el ser humano es único e inigualable, ¿qué quiere decir esto?, que por más similitudes psicológicas que tengan dos personas, éstas jamás serán iguales. ¿Por qué psicológicas y no físicas?, porque los gemelos, los hermanos, madre e hijo, o bien dos completos desconocidos pueden tener condiciones muy similares físicamente, por ejemplo, hermanos gemelos idénticos, pero esto es determinado por la herencia genética de cada persona, e incluso esa herencia genética también determina parte de su formación psicológica, pero aun así la psique de cada persona, su comportamiento humano, posee características que lo hacen ser distinto de otros, ser irrepetibles. Los seres humanos poseen entonces en su comportamiento humano, una conducta, una personalidad y una percepción, pero ¿qué va primero?, ¿Cómo se relacionan entre sí estos conceptos?, ¿Cómo determino qué significa cada uno? Mariano Yela en su estudio “Comportamiento animal y conducta humana” hace el siguiente alcance “la conciencia es una propiedad del acto por el que se observa. No es una cosa o lugar donde se capten estados, contenidos o procesos, sino una nota de ciertos actos del ser vivo en virtud de la cual esos actos están referidos a otra cosa que ellos mismos”…”la conciencia es, primariamente, una propiedad del comportamiento de los seres vivos, según la cual el organismo hace algo en una situación, y no meramente algo es hecho pasiva y mecánicamente en él”. (Yela,
1996) Acorde al alcance anterior, obtenemos entonces el primer esbozo de lo que se podría definir como conducta humana, podemos desprender que sin conciencia no podríamos tener un comportamiento “x” y por ende una conducta. Entendamos por conciencia bajo su definición etimológica “conocimiento”, ante lo cual nos surge una nueva interrogante ¿La conducta se
delimita por lo que conocemos?, ¿Somos seres consientes primeramente y luego adoptamos una conducta acorde a lo que conocemos?, ¿entonces influye el lugar de nacimiento, el entorno y las personas con las cuales nos vamos involucrando a medida que vamos creciendo en nuestro comportamiento, pensamiento, desarrollo de la personalidad y la percepción que se tiene de la vida? Son tantas interrogantes que pueden surgir con tan sólo un esbozo, que sólo nos limitaremos a entender bajo varias perspectivas lo que es conducta humana, percepción y personalidad, pero sin olvidar este nuevo factor que es la conciencia. Por otro lado José Bleger a través de sus citas de psicología animal y biología habla de conducta como un “conjunto de fenómenos que son observables o que son factibles de ser detectados”. Conducta etimológicamente es una palabra latina que significa conducida o guiada, según Bleger esto es “todas las manifestaciones comprendidas en el término de conducta son acciones conducidas o guiadas por algo que está fuera de las mismas: por la mente”.
También en este artículo se cita a P. Janet quién a través de una psicología funcionalista incluye en el término de conducta a la conciencia, considerada como una conducta particular, como una complicación del acto, que se agrega a las acciones elementales. Pero ante esto llegó Watson, quién quitó a la introspección como parte de la conducta y a la conciencia como objeto de la
psicología, y planteó la conducta como el estudio elemental de la psicología y lo transformó en conductismo, en donde estudió todos los fenómenos visibles, objetivamente comprobables o factibles de ser sometidos a registro y verificación que son siempre respuestas o reacciones del organismo a los estímulos que actúan sobre él. A nuestro entendimiento de lo que es conducta, no estamos en un cien por ciento acordes con la definición de Watson acerca de esta, debido a que no queremos dejar fuera a la conciencia. Por ende definiremos conducta como: “el actuar de un ser humano ante un hecho determinado guiado o conducido, primero por instinto y luego por la conciencia que posee de aquello que va a realizar”.
Ahora que ya tenemos una definición de conducta podremos pasar a la difícil tarea de buscar una definición acorde a nuestro pensamiento, de personalidad. Entendemos a grandes rasgos que la personalidad se forma a medida que uno va creciendo, y que se define después de los 18 años aproximadamente. “ La personalidad ha sido materia de estudio desde hace más menos un siglo antes de cristo en donde los griegos se interesaron por personificar diferentes papeles en el drama, para lo que las personas se ponían máscaras que cubrían sus rostros y con esto eran capaces de representar distintos estilos de vida diferentes a los propios, sin dejar de ser ellos mismos. Es decir asumir diferentes personalidades dentro de una misma persona, por lo cual el concepto de personalidad se origina del término persona.” (Montaño Sinisterra, 2009)
Con el estudio de Teorías de la personalidad, concepto y medición de varios autores escrito el 2009, queremos definir a grandes rasgos lo que es este concepto tan arraigado en nuestras mentes pero que del cual no sabemos absolutamente nada. Unas de las definiciones la dio Boecio en el siglo sexto, quien dijo que personalidad es la persona que como una sustancia individual, racional y natural. Luego apareció Santo Tomás de Aquino quien exalta al hombre por encima de la realidad, decía que nada podía ser superior a la realidad que el ser posee. Otras definiciones de personalidad indican que es: “la organización total de las tendencias reactivas, patrones de hábitos y cualidades físicas que determinan la efectividad social del individuo”, “un modo habitual de ajustes que el organismo
efectúa entre sus impulsos inter nos y las demandas del ambiente” y “un sistema integrado de actitudes y tendencias de conductas habituales en el individuo que se ajustan a las características del ambiente”. Allport definió personalidad como “ la integración de todos los rasgos y características del individuo que determinan una forma de comportarse”, con esto, se crea una nueva interrogante
¿La conducta es parte de la personalidad?, ¿comportamiento humano es lo mismo que conducta? También describe que la personalidad posee un temperamento y un carácter, los cuales definen cómo es la persona. Con esto volvemos al principio en donde se hablaba de la conciencia y de la conducta, y es que ¿sin conciencia, hay conducta?, ¿sin conducta hay personalidad?, ¿sin
conciencia existe la personalidad?, ¿la personalidad se forma a medida que uno va creciendo o es inherente al individuo desde su nacimiento? Por otro lado se habla que todas las personas percibimos el mundo de forma diferente, aunque poseamos el mismo conocimiento de aquello, puesto que poseemos conductas y personalidades diversas. Se habla de percepción a través del estudio de la Gestalt diciendo que es el proceso fundamental de actividad mental y suponen que las demás actividades psicológicas dependen del adecuado funcionamiento del proceso de organización perceptual. Entonces, ¿Existe una corelación entre conducta humana, personalidad y percepción?, ¿Cuál es primero? O ¿las 3 son un conjunto que nos definen como personas únicas e irrepetibles en el mundo? Es por todo lo anterior que en este informe se desarrollarán éstas últimas interrogantes acorde a lo que se ha compilado en cuanto a información teórica, a lo aprendido y desprendido como definiciones propias, y además se desarrollará en base al crecimiento psicológico de un menor de un año y casi nueves de edad y sus padres (nosotros, quienes escribimos este informe), para poder entender estos 3 conceptos y darles una relación entre ellos.
2 Marco teórico Para poder tener conocimiento y comprensión de los conceptos de conducta, personalidad y percepción nos basaremos en 3 estudios que nos hablan de aquello, e incorporan las definiciones de grandes científicos, filósofos y psicólogos a través de la historia, en donde tomaremos los que a nuestro parecer sean más relevantes. Partiremos con el concepto de conducta humana citando a Mariano Yela y José Bleger. Conducta humana según Mariano Yela Este autor en su estudio sobre conducta humana y comportamiento animal, destaca la importancia de éste último para poder transformar el concepto de psicología de teoría de la conciencia en ciencia de la conducta. Menciona que el experimento de la nueva ciencia es provocar la variación de una variable independiente (estímulo) y estudiar las modificaciones subsiguientes en la variable dependiente (estado de conciencia), examinado por introspección. Pero con esto cabe una pequeña contradicción en su estudio la cual también es tomada porque la psicología animal tiene ciertas limitaciones y una de éstas es justamente el hecho de que no se puede analizar introspectivamente a un animal. Entonces, habla de la conciencia no como un objeto observable, sino como una propiedad del acto por el que se observa. Dice que es una nota de ciertos actos del ser vivo. Habla de conciencia como una propiedad del comportamiento humano y animal. La introspección se data solo al ser humano y es accesible una vez que éste lo declara en su comportamiento y es ahí y solo ahí que puede ser verificable. Mariano Yela también comenta el nacimiento del behaviorismo que es el estudio del comportamiento humano, que saca a la conciencia por ser un estudio introspectivo, entonces el comportamiento se limita a la verificación física y corpórea llamado estímulo. El estímulo es la variable independiente que es manipulable y la reacción ante el estímulo es la variable dependiente que son las contracciones musculares. Mariano Yela habla del comportamiento como una relación activa del ser vivo con su medio ambiente. Se critica a los analistas del comportamiento humano utilizado en r atas o palomas como lo hizo Skinner o Watson, debido a que no se recibe el mismo estímulo que en su hábitat natural, y no recogen lo peculiar de su aprendizaje en una ni la otra. El comportamiento animal y la conducta humana son totalmente distintos. Se cita que “Entre el hombre y el animal, como sucede entre especies diversas de animales, hay
continuidad de originación pero no continuidad de estructura ni de significación comportamental. La estructura de la inteligencia es distinta en el chimpancé y en el hombre; como es distinta en el niño y el adulto”. “la conducta del hombre no es mero ajuste a una situación estimulante específica. Es atenencia a
la realidad que trasciende toda especificidad estimulante. El hombre vive no solo en un medio de estímulos sino en un mundo de realidades. No sólo responde a él, sino que se encuentra con aquello a lo que responde, con su respuesta, y consigo mismo respondiendo. Ve los colores que ve porque tiene los ojos que tiene. Pero al verlos, se encuentra con la realidad que ve, la contempla y, para atenerse a ella, tiene que indagar qué es y en qué consiste, tiene que decidir qué hacer con ella y desarrolla, así, una interpretación, una ciencia, una cultura y una técnica de la realidad”.
Conducta según José Bleger y su estudio “Psicología de la conducta” Habla de los inicios del concepto de conducta con otras profesiones distintas de la psicología quienes manifiestan que la conducta es “Conjunto de fenómen os que son observables o que son factibles de ser detectados”.
El término conducta, aplicado a las manifestaciones de individuo, tiene siempre la connotación de estar dejando de lado lo primordial del ser humano, sus fenómenos psíquicos o mentales, los cuales según Bleger originan la conducta. Bleger habla de Jaspers quién clasificó la conducta en 4 grupos, según el grado de perceptibilidad de ellos.1.- fenómenos vivenciados 2.- funciones o rendimientos objetivos (memoria, inteligencia, trabajo, etc.) 3.- manifestaciones corporales concomitantes (relacionadas entre sí) 4.- objetividades significativas (expresiones, acciones, obras) Aparece Lagache quién declara conducta como la totalidad de las reacciones del organismo en la situación total, y reconoce en ella: 1.- la conducta exterior; manifiesta. 2.- la experiencia consciente, tal como ella es accesible en el relato, incluyendo las modificaciones somáticas subjetivas. 3.- modificaciones somáticas objetivas, tal como ellas son accesibles a la investigación fisiológica. 4.- los productos de la conducta: escritos, trabajos, dibujos, test, etc. Según el propio José Bleger conducta, son todas las manifestaciones del ser humano, cualesquiera sean sus características de presentación. El estudio de la conducta de José Bleger se hace en función de la personalidad y del contexto social, del cual el ser humano es siempre integrante, con esto defendemos lo que pensamos acerca de la relación existente entre conducta, personalidad y percepción. Se describen a continuación cuatro procesos importantes: 1.- la conducta es funcional (toda conducta tiene una finalidad, la de resolver tensiones) 2.- la conducta implica siempre conflicto o ambivalencia. 3.- la conducta sólo puede ser comprendida en función del campo o contexto en el que ello ocurre. 4.- todo organismo vivo tiende a preservar un estado de máxima integración o consistencia interna.
La conducta entonces tiene dos manifestaciones fenoménicas una es la concreta, que habla de aquello que se ve, por ejemplo el enrojecimiento de la cara, conducir un automóvil, asistir a una fiesta, levantar una piedra, alergia a algún medicamento, etc. O sea todo lo que sea observable a través de nuestros sentidos. Y el otro tipo de manifestación es la simbólica que habla de todos los procesos que no pueden ser percibidos a través de los sentidos pero si percibidos por las sensaciones, que son los fenómenos mentales. Entonces tenemos dos manifestaciones que se presentan ante el mundo externo. El círculo negro es la manifestación simbólica, el azul es la manifestación concreta y el amarillo es el mundo externo.
Para nosotros y acorde a los estudios realizados por Mariano Yela y José Bleger nuestra propia definición de conducta es: “el actuar de un ser humano ante un hecho determinado guiado o conducido, primero por instinto y luego por la conciencia que posee de aquello que va a realizar”.
Respecto del concepto de personalidad, existe una importante variedad de teorías como definiciones que hasta el día de hoy la comunidad científica en general no ha podido unificar, así lo indica Montaño y Palacios en su estudio de las teorías de la personalidad haciendo un análisis histórico. Del cual nos basaremos para poder desarrollar este informe con sus interrogantes. Leal, Vidales y Vidales (1997), plantean la personalidad desde tres miradas diferentes; 1.organización total de las tendencias reactivas, patrones de hábitos y cualidades físicas que determinan la efectividad social del individuo, 2.- como un modo habitual de ajustes que el organismo efectúa entre sus impulsos internos y las demandas del ambiente, y 3.- como un sistema integrado de actitudes y tendencias, de conductas habituales en el individuo que se ajustan a las características del ambiente. Los planteamientos psicológicos también hacen referencia a personalidad como un conjunto de cualidades propias de cada persona que se clasifican en tres grupos: 1.- clasificación de los atributos personales, que hacen referencia a la organización del ser humano en las diferentes etapas del desarrollo. 2.- los biólogos y los conductistas la definen en términos de ajustes, debido a que es un fenómeno de la evolución que se refiere a un modo de supervivencia o de adaptación al medio a partir de las características del individuo.
3.- la personalidad definida a partir de las diferencias individuales, es decir, que las características que posee un miembro difieren de las características de otro individuo de su mismo grupo. Allport (1975, citado por Cerdá, 1985) dice que la perso nalidad se refiere a “la integración de todos los rasgos y características del individuo que determinan una forma de comportarse”. Es decir, “que la personalidad se forma en función del desarrollo del individuo, a partir de las
características ambientales, biológicas y sociales que explican, modulan y mantienen su comportamiento. Con la definición anterior obtenemos dos elementos importantes de la personalidad; el temperamento y el carácter. Según Allport el temperamento es un fenómeno naturalmente emocional, que se puede presentar a causa de factores genéticos o hereditarios, pues los individuos reaccionan de manera rápida e intensa ante la estimulación ambiental y por tanto su estado puede fluctuar de acuerdo a las exigencias del medio. Con esto se impulsa el desarrollo de los instintos básicos que son huida, defensa y reproducción que pueden ser llevados a los 3 tipos de temperamentos en tres dimensiones llamados ansiedad, hostilidad y extroversión. Por otro lado está el carácter que es el grado de organización moral que posee un individuo y que se fundamenta a través de los juicios de valor y de una evaluación ética que se hace de la personalidad, éste depende de la propia experiencia de cada individuo. Por lo tanto el carácter controla, modifica, corrige y autorregula la actividad de los individuos, a fin de poder dar respuestas satisfactorias a las exigencias del medio. El carácter es una combinación de sentimientos y valores que un individuo va adquiriendo a lo largo de su desarrollo a través de la interacción, condiciones y circunstancias externas, además difiere en cada individuo de acuerdo con su forma o punto de vista de interpretar la realidad humana. (Lluís, 2002) También se entiende personalidad del punto de vista genético, el desarrollo en cuanto a etapas y la evolución de la especie; de acuerdo con algunas teorías (Domínguez y Fernández, 1999), todos los niños poseen ciertas funciones y estructuras que no han alcanzado su correspondiente maduración, lo cual permite no identificar una base sólida de la personalidad, por tal razón se puede hablar de personalidad a partir de los 3 años, puesto que se han identificado algunos intereses, aptitudes, estilo conductual, y la manera de resolver problemas que facilitan su bienestar y supervivencia en el medio. Teorías de la personalidad Teoría psicodinámica
Es el paradigma teórico más importante de la psicología, Freud, describe la conducta de una persona como el resultado de fuerzas psicológicas que operan dentro del individuo y que por lo general se dan fuera de la conciencia. El concepto de conducta desde esta orientación es de vital importancia porque permite entender la personalidad. (Pervin y John, 1998) plantean que el punto de vista estructural de Freud es una buena manera de abordar este tema. Así se rescata que la estructura de la personalidad la compone el ello, el yo y el súper yo. Teoría fenomenológica
Carl Rogers y Gordon Allport consideran que el ser humano no debe ser comprendido como resultados de conflictos ocultos e inconscientes, sino que tienen una motivación positiva y que, conforme a cómo evolucionan en la vida, el hombre va logrando obtener niveles superiores de funcionamiento, teniendo en cuenta que la persona es responsable de sus propias actuaciones y por ende de las consecuencias que le sobrevienen. Rogers considero que los seres humanos construyen su personalidad cuando sus acciones están dirigidas a alcanzar logros que tienen un componente benéfico. Para Rogers, la persona desde que nace viene con una serie de capacidades y potenciales los cuales tiene que seguir cultivando a través de la adquisición de nuevas destrezas. Esta capacidad se ha denominado tendencia a la realización. Allport, resaltó la importancia de los factores individuales en la determinación de la personalidad, señaló que debía existir una continuidad motivacional en la vida de la persona. Teoría de los Rasgos
Se refiere a las características particulares de cada individuo como el temperamento, la adaptación, la labilidad emocional y los valores que le permiten al individuo girar en torno a una característica en particular (Engler, 1996) Teoría integradora
Esta teoría plantea que la personalidad no podrá limitarse a describir o a explicar el temperamento, el carácter, o la inteligencia, sino que deberá incluir los tres aspectos sin separar uno del otro. No se puede limitar sólo al consciente o al inconsciente, como tampoco a las conductas observables o a las internas, debe tener los dos factores en cuenta. No se puede limitar a las diferencias entre hombres y mujeres y tampoco debe orientarse solo a la conducta normal, es evidente que tiene que tener en cuenta la psicopatología y por lo tanto aportar posibles estrategias de cambio. Distingue cinco rasgos; extroversión, agradabilidad, escrupulosidad, estabilidad emocional y apertura a la experiencia. (Costa y McCrae, 1994) Concepto de Percepción según la Gestalt "La percepción visual no opera con la fidelidad mecánica de una cámara, que lo registra todo imparcialmente: todo el conglomerado de diminutos pedacitos de forma y color que constituyen los ojos y la boca de la persona que posa para la fotografía, lo mismo que la esquina del teléfono que asoma accidentalmente por encima de su cabeza. ¿Qué es lo que vemos?... Ver significa aprehender algunos rasgos salientes de los objetos: el azul del cielo, la curva del cuello del cisne, la rectangularidad del libro, el lustre de un pedazo de metal, la rectitud del cigarrillo" (Arnheim, 1995, p. 58-59). El primer supuesto básico desarrollado por la Gestalt es la afirmación de que la actividad mental no es una copia idéntica del mundo percibido. Contrariamente define la percepción como un proceso de extracción y selección de información relevante encargado de generar un estado de claridad y lucidez consciente que permita el desempeño dentro del mayor grado de racionalidad y coherencia posibles con el mundo circundante.
Se puede afirmar que, de la enorme cantidad de datos arrojados por la experiencia sensorial (luz, calor, sonido, impresión táctil, etc.), los sujetos perceptuales toman tan sólo aquella información susceptible de ser agrupada en la conciencia para generar una representación mental. La percepción, según la Gestalt, no está sometida a la información proveniente de los órganos sensoriales, sino que es la encargada de regular y modular la sensorialidad. El hecho de recibir de manera indiscriminada datos de la realidad implicaría una constante perplejidad en el sujeto, quien tendría que estar volcado sobre el inmenso volumen de estímulos que ofrece el contacto con el ambiente. La Gestalt definió la percepción como una tendencia al orden mental. Inicialmente, la percepción determina la entrada de información; y en segundo lugar, garantiza que la información retomada del ambiente permita la formación de abstracciones (juicios, categorías, conceptos, etc). James Mill consideraba que la mente recibía una inmensa cantidad de datos y los organizaba según su contigüidad espacio-temporal. Así, por ejemplo, una silla es un conjunto de experiencias sensibles elementales como el tamaño, color, peso, etc., que, en el momento de ser recibidas por el sujeto crean en él la impresión de una idea compleja o de un objeto definido en el que las ideas simples quedan mezcladas dentro de un solo estado mental.
3 Desarrollo Tras definir los tres conceptos, de conducta, personalidad, y percepción, primero creemos que la conducta es el actuar de un ser humano ante un hecho determinado guiado o conducido, primero por instinto y luego por la conciencia que posee de aquello que va a realizar. Segundo que la personalidad según Allport es la integración de todos los rasgos y características del individuo que determinan una forma de comportarse y tercero la definición de percepción que a nuestro entendimiento es la organización que posee el cerebro en conjunto con nuestros sentidos de todas las sensaciones que se nos presentan, o nos causan situaciones, objetos, lugares, etc. El ejemplo que daremos a continuación será para comprender un poco más estos tres conceptos. Mateo es un niño de un año y casi nueve meses. Desde su nacimiento el actuó primero por instinto, al dirigirse de lleno al pecho de su madre, porque era claro que no entendía los estímulos que ella le proclamaba, con los días su instinto le dio indicó que su madre era una y no otra, esto gracias al reconocer el olor de su madre, a diferencia de su padre que no lo reconoció hasta los tres meses de edad aproximadamente. Entonces hablamos de rasgos de conducta y personalidad representadas por el “ello”. Aq uí Mateo busca la satisfacción de sus necesidades básicas, alimentarse y seguir seguro en el seno de su madre fuera de su vientre materno. Desde los tres meses y medio en adelante Mateo ya posee una percepción parcial o particular que se manifiesta a través de su sonrisa, y sus gesticulaciones cuando ve a su papá o mamá, pero aún no tiene una conducta ni posee personalidad. A los cinco meses y medio y seis meses Mateo ya tiene un avance significativo y empieza a percibir de acuerdo a sus sentidos del gusto, del tacto, de la visión y la audición, empieza a tener preferencias en lo que come, en lo que le da risa. A los ocho meses empieza a descubrir su casa, a gatear, a jugar, ya con una percepción más amplia, conoce los parques, la casa de sus abuelos, familiares, etc. Al año Mateo ya tiene rasgos de conducta, ya entiende palabras, dice palabras, reconoce sin problemas a su mamá y papá, se adhiere a ciertos hábitos y horarios. Percibe de manera distinta que meses atrás, pero aún no tiene una personalidad, sólo rasgos de éstas que se demuestran por sus rasgos de temperamento. Al año y nueve meses que es su edad actual Mateo ya entiende conceptos de orden, de acostarse, lavarse los dientes, todo esto a través de estímulos y juegos. Ya posee preferencias en cuanto al gusto, en cuanto a lo que ve, sabe diferenciar el enojo de una sonrisa en los padres. Ya va adecuándose al entorno en el cual vive. Interactúa y saluda a otros niños, juega en los parques, reconoce animales en distintos lugares y de distintos colores. Mateo no tendría todos estos conocimientos, primero si no hubiese tenido el instinto, tanto él como su madre en sus primeros días y meses de vida, si la madre y padre no fueran conscientes de que Mateo es un bebé. Mateo a medida que va creciendo se va formando su propia visión del entorno que lo rodea, pero no sería la misma visión si fuese un entorno diferente, su percepción es acorde a su conciencia, o sea acorde a lo que él va conociendo de acuerdo a lo que los padres pueden y quieren presentarle, sus rasgos de conducta son tanto genéticos como propios y se van formando por su estado de consciencia y de percepción. Su personalidad todavía no es sostenida y
no se puede referir a esta, hasta cuando cumpla aproximadamente los tres años, según los estudios que investigamos y mencionamos anteriormente, pero discrepamos de esto, puesto que a los tres años Mateo aún será moldeable, y por lo tanto su percepción, su conducta y su personalidad aún pueden cambiar. Si bien a los tres años él podrá resolver problemas básicos, o sea acorde a su edad, aún no se puede ver claramente, sus gustos o preferencias, puesto que es un niño, y ellos cambian constantemente por el entorno que los rodea y los estímulos que se le van entregando a medida que va creciendo, pero sí ya tiene rasgos y una conducta, ya percibe de acuerdo a su edad.
4 Conclusión Creemos que la percepción es transversal en el individuo desde que nace hasta que muere, que la conducta se expresa gracias a sus instintos, su consciencia, su genética, durante sus primeros años de vida hasta que muere, y que su personalidad, si bien tiene una parte genética que se expresa al iniciar los tres años, ésta no se define hasta que entra a la etapa de la juventud, en donde se dice posee criterio y ya plena consciencia de las cosas. Entonces la percepción es transversal la cual puede modificar la conducta y la personalidad. La conducta aparece primero que la personalidad, debido a que es la forma de actuar, y la personalidad se define con el tiempo, pero aparecen rasgos en conjunto con la conducta. Si existe una co-dependencia entre los tres conceptos, ninguno de ellos puede existir sin el otro, y estos conceptos son moldeables o hacen distintos a unos de otros de acuerdo al entorno, a la sociedad y a las experiencias de quienes se van conociendo con el pasar de los años, y a las propias experiencias.