Diana Carolina Quintero Código: 0841498
Análisis de los Relatos de José María Arguedas “Amor Mundo” El Horno Viejo En este este rela relato to de José José Marí María a Argu Argued edas as hay hay vari varios os elem elemen ento tos s a res rescata catar, r, uno uno de ello ellos s que que me parec areció ió de gran gran inte interé rés, s, es el relacionado con la fusión de los dos mundos, en este relato veo la pres presen enci cia a de lo carn carnal al pero pero tamb tambié ién n esta esta siem siempr pre e pres presen ente te lo espiritual, mientras el personaje del Caballero lleva a Santiago a ser test testig igo o de sus sus aber aberra raci cion ones es y sus sus acto actos s sexu sexual ales es,, en el cami camino no Santiago es testigo de la presencia de una naturaleza viva que habla que tiene una vida propia a la par que se sucede en la otra extremidad donde se suceden las calamidades, las violaciones y todo tipo tipo de aberra aberracio ciones nes produc producida idas s por el misti o caball caballero ero,, por esa entidad “superior” que rebaja a los indios hasta el punto mas extremo de la indignidad, la burla y la humillación. Vemos por tanto, en este relato presentes varios rasgos relacionados con la imagen proyectada entre el capataz y el siervo, el indio y el blanco, la mujer y el hombre entre otro tipo de polaridades polaridades que se chocan, chocan, situando situando a una en una posición de inferioridad y de subyugación. En este relato del horno viejo, vemos situada la posición de poder y gran grand deza eza por por part arte del del blan blanco co y la visi visió ón ind indigna igna adem ademá ás de humillante que tienen estos primeros por los indios y más aún, que son las mujeres las principales victimas en la dicotomía del dominio sobre el otro. Algu Alguno nos s estu estudi dios os reali realiza zado dos s sobr sobre e la obra obra de Argu Argued edas as resc rescat atan an principalme principalmente nte por encima encima de su influencia influencia en la reivindicac reivindicación ión de la imagen del indio en su obra, una profunda presencia de un factor estrictamente subjetivo y singular de su personalidad, de tal caso que algunos críticos como Vargas Llosa deducen que lo mas importante en la obra obra de Argu Argued edas as es tal tal vez vez la pres presen enci cia a emin eminen ente teme ment nte e
literaria por encima de un rastreo historiográfico o étnico de la cultura inca. Y precisamente en este cuento se hace ver uno de esos factores estrictamente literarios en el sentido de la exageración y del uso de personajes similares en otros relatos de Arguedas, en el momento de la violación a la infancia que se comete con Santiago, al hacerlo testigo de dos actos sexuales con influjos violentos, esta personificación de los cuentos de Arguedas cita Vargas Llosa hacen parte de un reflejo ínfimo de las experiencias traumáticas de las que fue víctima en su infancia, porque según algunas declaraciones de Arguedas, el hermanastro, diez años mayor que él, de igual manera que el personaje de Santiago, lo hacía testigo de sus relaciones sexuales y aberraciones. De aquí que, en estos relatos correspondientes al Amor mundo veamos esa presencia de lo violento en la sexualidad humana.
La Huerta Estos relatos que hacen parte de Amor mundo podríamos citarlos como el crecimiento de un niño hasta la adultez, en la primera, el horno viejo vemos al niño, al pequeño Santiago que es testigo abrupto de una violación y es este suceso algo que le marcaría la visión del joven Santiago en este relato La huerta. Este relato es tiene una marcada visión femenina por parte del personaje Santiago, y es visión del ser mujer es influenciada por ese suceso que marcó su infancia, para él la mujer es un ser lastimado, herido, un ser ideal y puro que es mancillado por las manos varoniles, en un principio del relato Santiago habla con Ambrosio sobre los padecimientos de la mujer, y este otro le anuncia que la mujer disfruta del dolor y de la violencia, que ella también goza de su padecimiento, comentario que molesta a Santiago. Existen dos polaridades singulares en el relato, en principio cuando se habla de la mujer del hacendado, Hercilia, que para Santiago es una mujer pura con una proyección casi que virginal y por otro lado, en ese otro extremo la mujer Marcelina, una mujer envestida de desagrado y desenfreno, este personaje es descrito por Arguedas de manera sucia relacionado su enfermedad de ninfómana con esa imagen de repudió, pese a que están presentes esos dos extremos de lo femenino, para Santiago la condición de mujer es la misma, esta condenada al sufrimiento y al padecimiento “Tú también sufres. ¿De que estarás enferma, pobrecita, triste Marcelina?- Se preguntó, mientras la luz del sol se enfriaba en la quebrada” La huerta Otro elemento importante que vi en el texto fue la presencia mas directa de la comunicación con la naturaleza y los elementos que la
representan, Santiago parte hacia la montaña luego de haberse sentido sucio por lo sucedido con Marcelina y se excusa reiteradamente con la deidad del Arayá e incluso a esa representación la pone por encima de la imagen del Padre que representa la otra polaridad, lo mágico y lo religioso, la comunión, belleza y lo representado por el poder católico que promueve la sumisión, Santiago en este relato resalta la importancia del Arayá por encima de la postura del Padre que cumple la función de regular, e incluso es Santiago quién ve en su frente la imagen fétida y sucia de Marcelina “No se arrodilló. Estuvo mirando al sacerdote. Unos vellos rojizos, como los que había visto que temblaban en el rostro de la gorda Marcelina, aparecieron clarísimos en la frente del cura, debajo mismo del borde del sombrero. Pero estos vellos jugaban, no estaban separados uno a uno, feos como en la cara de la borracha” La huerta
El Ayla A lo largo de este relato vemos el proceso de un ritual llamado El Ayla, la celebración de la última ceremonia de la pascua con la que hacían la limpieza de los acueductos, y para hacer énfasis en una gran diferencia con los relatos anteriores, en este no vemos la incursión de la crudeza y violencia vistos en el horno viejo y la huerta, por todo lo contrario hay toda la muestra de la cosmovisión y todo un proceso de ritual de cortejo, de festejo, de libertad y comunión absoluta con el otro, la música y el baile cumplen la función conmemorativa de unión absoluta, de individualidad colectiva y además de comunicación con el medio y las deidades. En este ya no vemos toda una visión del sexo como algo mordaz y cruel, por el contrario la sexualidad es un encuentro en común que unifica, redime pero solo a través de la ceremonia y de la trascendencia a lo corpóreo.