MANUAL DEL SANTERO EN CUBA PREÁMBULO: En todos los pueblos del mundo existen historias y mitologías religiosas las cuales se fundamentan fundamentan en dioses cuyas vidas, según cuentan esas leyendas, leyendas, intervienen intervienen en el desenvolvimiento cultural, material y religioso. Se dice en estas leyendas que muchos de esos dioses vinieron a la tierra enviados directamente por Olofin (Dios), como avatares, o sea, no nacidos de mortales, para ordenar y hacer cumplir los mandatos del Altísimo en el plano de la Tierra. Tenemos, por ejemplo lo que nos dice la historia sobre la mitología de los dioses griegos, los cuales existieron ante de la venida de Jesucristo, tales como Neptuno, rey de las aguas del mar; Júpiter, rey de las aguas de lluvia; Tor, rey de la guerra y el fuego; Apolo, rey de la belleza y de tantos otros dioses más. Acorde con esto llegamos al África, donde según datos mitológicos, contamos con avatares, avatares, es decir, decir, dioses descendientes descendientes directamente directamente de OLOFIN, OLOFIN, los cuales fueron fueron traídos por los africanos que arribaron a la Isla en el siglo XVI, época en la que estaba en su apogeo la llamada trata de esclavos. Estos africanos, que fueron separados a la la fuerza de sus países de origen, traídos y vendidos en Cuba para realizar los más duros trabajos, así como sometidos a los más crueles crueles maltra maltratos tos.. A tal extremo extremo llegar llegaron on los abusos abusos que los esclav esclavos os formar formaron on comunidades entre ellos de una misma región para celebrar sus ritos religiosos y poder clamar a sus dioses alivio para sus sufrimientos. De esta manera se fue expandiendo este culto religioso, pese a sus detractores, hasta invadir casi la totalidad de la población criolla de la Cuba de aquel entonces. Rito que a través de los años ha venido ganando adeptos y que en estos días se puede decir que una parte mayoritaria de nuestro país rinde culto al igual que los africanos y los descendientes de aquellos y a todos los dioses de dicho culto. Sin Sin emba embarg rgo, o, exis existe ten n detr detrac acto tore ress que que basa basan n sus sus crít crític icas as sobr sobre e la base base de investigacion investigaciones es superficiale superficialess sobre los secretos secretos y fundamentos fundamentos de la religión africana y en otros casos argumentan que estos esclavos y sus descendientes carecían de cultura cultura y educación educación al estilo estilo occidental, occidental, sin tener en cuenta que cada pueblo tiene su propia cultura cultura y educación. educación. Cabe decir que los pueblos pueblos africanos, africanos, desde antes antes de la llegada llegada de los colonizadores, colonizadores, poseían una gran cultura cultura y sabiduría sabiduría popular, popular, al punto que lograron un sincretismo entre sus dioses y los traídos por la iglesia católica a Cuba. De ahí que se compare a Obatalá con la virgen de Las Mercedes; a Osaín con San Rafael; a Orichaoco con San Isidro; a Elegguá con el Niño de Atocha; a Yemayá con la virgen de Regla; a Oshún con la virgen de La Caridad del Cobre; a Changó con Santa Bárbara; a Oggún con San Pedro; y a Babalú Allé con San Lázaro, entre otros santos que fueron adorados por los esclavos africanos. Para un mayor conocimiento relataremos algunas de las historias de los santos africanos que han llegado a nuestro conocimiento a través de los relatos hechos por esclavos y sus descendientes, en ellos se podrá apreciar la similitud que tienen con las historias de algunos de los santos de la religión católica, aunque los nombres no sean los mismos.
ORIGEN DE LOS SANTOS AFRICANOS De ahí que las lomas (que son oque) es la parte de la Tierra donde se originaron los volcanes, por donde salen toda clase de metrallas, nace el dio Oggún, y éste, el volcán que parió al dios Aggayú, de ahí sale todo para loe santos fuertes, de ahí porque se le llama a su mamá Oro Oña porque es hijo de las entrañas de la Tierra de donde nace el volcán, que a su ves es el mismo Aggayú , razón por la cuales se le considera en África el más fuerte de los santos, porque para ellos el volcán es más temido que el mar, que es donde nació la poderosísima Olokun. Como es lógico, del Sol, la Luna, la Tierra, el volcán, las lomas, la vegetación y el mar, no se puede asentar santo a nadie, ya que nadie resistiría el Sol, la Luna, la Tierra, el volcán, las lomas, la vegetación y el mar en la cabeza. Estos santos solamente se reciben, nunca se asientan. Todas estas historias y tratados que se trasmiten aquí fueron obtenidos de aquellos africanos que vinieron como esclavos y todos ellos creían firmemente y los fueron trasmitiendo de acuerdo a su lugar de Origen.
ORIGEN DE LOS SANTOS AFRICANOS II En el continente africano, al igual que en otras partes del mundo existen distintas creencias, las cuales se fundamentan en alguna originalidad o en algún dato histórico. Una de esas leyendas dice que antiguamente Dios, o sea, Olofin andaba por la Tierra y cuando Olodumare andaba por este mundo, en el planeta no había árboles, ni nada, únicamente rocas y llamas, y esto sucedió por espacio de muchos años o siglos. Y como consecuencia de todo esto era un vapor producido por las llamas internas de la Tierra. Se acumuló en el espacio una gran cantidad de vapores, o sea, nebulosas las cuales ya no se sostenían en el espacio. Esto se produjo porque ya Olofin quería que sucediera, entonces descargó esos vapores ya convertidos en agua sobre las llamas. En la parte donde más trabajó la candela es donde ahora se encuentran los océanos del mundo. Aquí es donde nacen los Yemayases del mar, desde Okute hasta Olokun. Después entiende el africano que esa llama que había en el planeta y que la no existe sucedió por la voluntad de Olodumare, el cual ordenó que se trasladara al cielo par que se convirtiera en el Sol que hoy disfrutamos y que es para ellos el dios Aggayú. Antiguamente este santo era más temido y respetado que en nuestros días. La otra parte más floja de la candela la convirtió en la Luna, otro de los planetas conocidos por los mortales mortales que al igual que el Sol Sol comparten comparten la preponderancia preponderancia del sistema sistema planetario. Después de muchos días las cenizas de aquellas rocas encendidas se acumularon en las partes altas y se fue fue formando una masa fangosa que que era la Tierra, donde reinaría Orichaoco. Esa masa fangosa trajo como consecuencia la pudrición las epidemias y de ahí nace el santo Babalú Allé. Después, producto de las hierbas que nacieron y crecieron en la Tierra, nace el dios Osaín. Más tarde, al formarse grandes lomas nace el dios Oque, nuestro gran Oque que sólo Olofin lo destruye.
HISTORIA DEL SOL Y LA LUNA Dice la mitología africana que en los comienzos del mundo Dios designó al Sol y la Luna para reinaran en todos los espacios siderales, sin destruirse. Sin destruirse destruirse mutuamente mutuamente dependería dependería el uno del otro, estando las constelaciones constelaciones al arbitrio de ellos. Dicen los africanos africanos que al Sol se le dio el poder de Ifá y a la Luna el poder de Ocha, teni tenien endo do que que llev llevar arse se bien bien esto estoss dos dos pode podere ress que que son son en sus sus rito ritoss pode podere ress importantes. Más tarde Olofin quiso crear estos dos poderes en la Tierra y eligió para la selva al león y al tigre para que reinaran entre todos los animales de la Tierra, pero en la selva volvió a repartir estos poderes, dándole a Orula la representación del león y a los representac ntación ión del tigre, tigre, dos fuerzas fuerzas poderos poderosísi ísimas mas que repres represent entan an la Ocha la represe reli religió gión n afri africa cana. na. Ning Ningun uno o de los los dos dos poder poderes es se puede puede invad invadir ir porqu porque e serí sería a la destrucción de los dos. Es por eso que en la selva africana el león no invade el territorio territorio donde caza el tigre, prefiriendo irse a otro lado y el tigre hace lo mismo. Por eso en esa religión los afri africa cano noss se cuid cuidan an muy muy bien bien de no inva invadi dirr sus sus resp respec ectitivo voss camp campos os,, ya que que signifi significar caría ía la destru destrucció cción n de las bases donde donde se asient asientan an el princi principio pio de estas estas religiones.
HISTORIA DE LA SAGRADA AURA TIÑOSAY LA DIVINA CEIBA En cierta ocasión el cielo y la Tierra discutieron. La Tierra porfiaba que era mayor y más poderosa que su hermano el cielo, cielo, llegando incluso a decirle que la Tierra Tierra era el fundamento del cielo. Sin ella el cielo se derrumbaría, no tendría un hermano donde apoyarse, todo sería humo, nada… La Tierra decía: fabrico todas las formas vivientes, las fijo y las mantengo, yo lo contengo todo, todo sale de mí, todo vuelve a mí. Mi poder no tiene límite, ni pueden calcularse mis riquezas… Y la Tierra repetía insolente “solita”, “soy solita”. Tú (el cielo), en cambio, no tienes cuerpo, eres vacío enteramente. ¿Y tus bienes pueden compararse con los míos? Ah, los bienes de mi hermano son intangibles. ¿Qué tienes, di, que se puede tocar y pesar en una mano? Aires, nubes luces. Pues consideren cuánto valgo más que él y baja para hacerme moforibale. Obba-Olorun viéndola tan obcecada y presuntuosa no la replicó por desprecio, le hizo hizo un sign signo o al cielo cielo y este este se dist distan anció ció amen amenaz azad ador, or, horr horribl iblem emen ente te sere sereno. no. “Aprende”, murmuró el cielo al alejarse a inconmensurable distancia. “Aprende” que el castigo tarda lo que se preparación. Las palabras de los grandes no las deshace el viento. Iroko recogió esas palabras y meditó en silencio, en el silencio de una gran soledad que se hizo en ella al separarse el cielo de la Tierra, porque Iroko (la Ceiba) hundía sus raíces vigorosas en lo más profundo de la Tierra y sus brazos entraban hondo en el cielo. El gran corazón de Iroko tembló de espanto al comprender hasta dónde, gracias al acuerdo perfecto que reinaba entre estos hermanos, la existencia hasta ahora había sido venturosa para todas las criaturas terrestres. El cielo cuidaba regular las estaciones con una solicitud tan tierna y paternal que el frío y el calor eran igualmente gratos y beneficiosos. Ni tormentas, ni lluvias torrenciales destructoras, ni sequías asoladoras habían sembrado jamás la miseria y la desolación entre los hombres.
Se vivía alegremente, se moría sin dolor; males y quebrantos eran desconocidos. Ni los individuos individuos que pertenecían pertenecían a las especies más voraces hubiesen hubiesen podido adivinar, adivinar, antes de la discordia, qué era el hombre. La desgracia no era cosa de este mundo, como tampoco tampoco la rogación rogación al cielo. cielo. Y aseguró la tiñosa tiñosa “porque “porque nadie más que yo podrá cruzar arriba a la otra orilla”. Todos miraron con burlona antipatía al sombrío y repulsivo pajarraco que hablaba así cuando el intrépido sarnícaro, gran volador, se elevaba con las ofrendas y a poco se perdía de vista. Pero a un palmo del cielo también se abatía y con él la Tierra perdía el último de sus mejores correos. ¿Sería capaz de salir airoso este pájaro pesado y torpe que se había cebado devorando a los muertos? Sin embargo, era este pájaro asqueroso y pestilente la última esperanza, y Ara-Cole partió llevando la súplica de la Tierra, que no confiando en ella se creyó perdida. Ara-Cole o Canacana voló días y noches, incansable. Serena cruzó la otra orilla de lo infinito y aún voló más allá. Dejó oír la palabra de la Tierra y después depositó las ofrendas. “Oh, cielo, la Tierra me envía a pedirte perdón… perdón de corazón te piden los hijos de la Tierra que son tus esclavos. Señor la Tierra ha muerto. Todos hemos muerto. Abajo, los hombres que saben, no cesan de cantar. Señor, las gallinas, los gallos, las palomas, los carneros, el perro y el gato se han muerto. Todos los hombres se estás muriendo. Perdónanos. El cielo volvió los ojos hacia la Tierra. Hacía tanto tiempo que no la miraba y la contemp contempló ló muerta muerta.. Contem Contempló pló que los hombre hombress lo reveren reverenciab ciaban an debidam debidament ente e y aceptó sus ofrendas. Perdonó a la Tierra diciéndole Ara-Cole. Abajo, al mismo tiempo, las criaturas veían llenarse de nubes los cuatro ángulos del cielo. Las ranas líquidas que venían en las nubes, o que resucitaban invisibles en el polvo muerto. Rodó Rodó el agua agua estr estrue uend ndos osam amen ente te de los los abis abismo moss en que que habí había a perm perman anec ecid ido o estancada y descendió en inmensas cataratas. Ara-Cole voló día y noche en los infinitos desiertos celestiales, huyendo de la crecida que avanzaba tras ella y ya punto próximo a la Tierra estuvo a punto de ahogarse en el derrumbe de la lluvia que durante mucho tiempo cayó torrencialmente y formó un lago profundo que cubrió la Tierra en toda su extensión. El pájaro sagrado en torno a ella. En Iroko y por Iroko las criaturas se salvaron del diluvio. La Tierra, que bebió hasta saciarse, revivió, ocultó su desnudez en verde nuevo y le dio las gracias al cielo. Los espíritus espíritus malignos malignos que provocan los padecimient padecimientos os físicos más adyectos adyectos y que invisible y arteros se introducen por los ojos o volatilizándose se hacían aspirar, no tenían nombres porque no existían, nadie se enfermaba. La muerte, deseable, limpia y dulce, se anunciaba con un sueño suavísimo. El hombre había disfrutado de una vida larga y venturosa. Un viejo, pero sin la triste experiencia de una una vida vida amar amarga ga ni los los queb quebra rant ntos os de la veje vejez, z, sent sentía ía un gran gran anhe anhelo lo de inmo inmovi vililida dad. d. Un sile silenc ncio io avan avanza zaba ba desp despac acio io por por sus sus vena venass que que busc buscab aba a deliciosamente al corazón, despacio se cerraban sus ojos, despacio oscurecía y era la felicidad felicidad infinita de apagarse, de morir; se acababa con un bello atardecer. Entonces Entonces la bondad sí era de este mundo. Un moribundo podía sonreír al representarse al plac placen ente tero ro fest festín ín que que su cuer cuerpo po herm hermos oso o y sano sano proc procur urar aría ía a los los gusa gusano noss innumerables y golosos. Pensar enternecido en los pájaros que picotearían sus ojos brillan brillantes tes conver convertid tidos os en semill semillas. as. En las bestia bestiass frater fraternal nales es que pastarí pastarían an sus cabellos mezclados con la hierba fresca y jugosa. En sus hijos, sus hermanos que conocían sus huesos transformados en tubérculos. Nadie pensaba en hacer daño. Los elementos no habían dado el ejemplo, no había brujos malvados no había plantas nocivas, no había que ganarse a todo trance el favor de las fuerzas maléficas que
nacieron después con el dolor y la miseria, no había que precaverse contra ataques (endokis), espíritus de chiriqui y de malos ojos. Todo era de todos por igual y no había que vencer ni adueñarse, ni que dominar, no criaba alimañas el cuerpo humano. Estaban unidos el cielo y la Tierra y jamás del cielo había caído un rayo, jamás el fuego de arriba había consumido el bosque, ni el Sol despiadado se había hecho sentir como un castigo. El mar, que tampoco revolvía vientos furiosos, era una balsa tranquila. El ratón: el mejor amigo del gato; una gota de miel el veneno de los alacranes. Cualquier monstruo era (lo que hoy se dice muy de tarde en tarde) un alma buena. La hiena y la paloma podían trocar sus corazones. La fealdad vino luego cuando acabaron los tiempos de no padecer. padecer. Aquí fue el llanto llanto de Iroko, la tristeza del árbol amado del cielo y de la tierra en hondo duelo. La ceiba dio entonces sus flores impalpables impalpables y así apareció su pena por la tierra. tierra. Esta tristeza que iba con el viento en él, se comunicó a los hombres, a las bestias y a todo lo viviente. Un pesar jamás sentido se introdujo en las almas e Iroko extendió sus brazos inmensos en gesto de amparo, cuando al caer de la tarde se oyó el grito de lamento de la lechuza (un chillido agudo, desconcertado, nuevo en la mudez de un atardecer distinto. Aquella noche (una noche desconocida como la angustia) el miedo hizo su primera aparición, penetro en los sueños y esa noche engendró a Illondo. Dio formas diversas, rostros rostros y garras crueles crueles a la oscuridad, oscuridad, al día siguiente, siguiente, el hombre, la bestia, bestia, el árbol: todos los seres vivientes se interrogaban sin darse cuenta ni comprenderse unos a otros. Aún no había palabras para la turbación y la ansiedad. Eran ininteligibles las voces que se oyeron amenazadoras en el viento o en la caída de las aguas. Comenzó un día áspero y trabajoso. El Sol comenzó a devorar la vida, la ceiba a cada criatura que cruzaba su sombra le decía: Hagamos rogación por nuestra madre Tierra que ha ofendido al cielo. Tampoco se entendían las palabras de Iroko, pues no se sabía lo que era ofender. Secretamente, la Tierra se acababa, se secaba. Al Sol que obedecía la consigna de no dañarla con su arder o excesiva lumbrosidad, dio órdenes al cielo de agotar agotar las agua agua lentam lentament ente e (enton (entonces ces eran eran todas todas potabl potables, es, caudalo caudalosas sas más inofensivas, inofensivas, claras mansas, llenas llenas de virtudes y todas por las fauces fauces abiertas abiertas del Sol subieron al cielo y éste las guardó en un abismo. La Tier Tierra ra sent sentía ía en sus sus aden adentr tros os los los efec efecto toss de cóle cólera ra de su herm herman ano, o, sufr sufría ía crue cruelm lmen ente te de sed sed y al fin fin le supl suplic icó ó en voz voz baja baja:: Herm Herman ano, o, mis mis entr entrañ añas as se consumen. Envíame un poco de agua. El cielo, para aliviar la sed cada vez mayor y más atroz de su hermana, hermana, la anegaba con un fuego blanco y soplaba luego sobre su cuerpo abrazado la violencia de un ventarrón cadente que a manotazos extremaba el dolor de las quemaduras. Los hijos de la Tierra padecieron con ella los tormentos horribles del fuego, de la sed, del hambre, pero más cruelmente dolían a la Tierra los martirios de sus hijos inocentes, de la hierba marchita y del árbol moribundo. Y ahora humillada pedía perdón al cielo. Se sufrió hasta perderse la memoria del menor bien pasado. El dolor abatió a las criaturas hasta borrar la última huella de la felicidad en que habían vivido. Toda ventura se hizo remota e inverosímil, se maldijo, la fealdad vino al mundo. Fue entonces cuando se incubaron y nacieron todas las desgracias, todos los horrores, la palabra se hizo mala. El reposo de los que habían muerto hace rato fue turbado y los que morían no descansaban en la belleza quieta de una noche cuya dulzura no terminaba. Perdón, pedía la Tierra. Tierra. El cielo, implacable, retenía retenía las aguas. Ya todo era polvo infecundo, casi todos los animales habían muerto; los hombres esqueléticos sin alimentos para sostenerse continuaban cavando para buscar agua en
el seno seco y martirizado de la Tierra, sin fuerzas para devorarse los unos a los otro otros; s; yacía yacían n los los homb hombre ress sobre sobre las las piedr piedras as desn desnud udas as.. La vege vegeta taci ción ón había había desaparecido y sólo un árbol en el mundo árido estaba en pie (la copa gigantesca, milagrosamente verde) era Iroko-Oco. Imperecedero, adornado y adornando al cielo. Allá fueron a refugiarse los muertos del pasado. El espíritu de Iroko hablaba con el cielo en lo profundo, trabajando cono ahínco inquebrantable por salvar la Tierra y a sus criaturas. Iroko era como un hijo preferido de la Tierra y el cielo. Sus ramas poderosas protegieron a los que se abrazaron a su sombra y a su amparo, y resistieron el tremendo castigo de Olorun. A estos dio instrucciones Iroko-Oco. Estos penetraron penetraron en el secreto secreto que estaba en su raíz; estos aprendieron aprendieron y cuando supieron supieron que se humillaron se purificaron al pie de la ceiba o hicieron ebbó. La poca hierba que aún vivía, los animales de cuatro patas, los pájaros, los hombres que quedaban y que se habían habían vueltos vueltos clarivide clarividente ntes, s, consumaro consumaron n el primer sacrifi sacrificio cio en nombre nombre de la Tierra. Y cuando hubo que enviarle las ofrendas al cielo (como éste se había alejado a una distancia incalculable y nadie que no tuviese alas no podía salta de estrella en estrella como antes) se eligió al tomeguín de mandadero. Era el más ligero de todos los pájaros y por eso alcanzaría la máxima altura del cielo. Partió el tomeguín mas no pudo llegar a su destino y a menos de la mitad del camino sucumbió de fatiga. Se le confió al pitirre esa misión, por audaz y valeroso, pero corrió la misma suerte. Se eligieron otros pájaros pero sus alas se quebraban o sus corazones dejaban de latir a gran altura y caían. El pájaro Aracole declaró entonces: Yo llevaré la ofrenda. Y lo hizo, pero la Tierra jamás volvió a conocer la felicidad de los primeros días. El cielo se fue desentendiendo cada vez más de la Tierra hasta que llegó a serle absolutamente indiferente. En fin, ya se sabe lo que ha sido la vida desde entonces. LA HISTORIA DEL LORO En cierta ocasión acordaron los pájaros dar un baile pero sus propósito eran darle muerte al Loro. Ellos le tenían mucha envidia pues sus plumas eran totalmente rojas. El Loro asistió a la fiesta y al despedirse les dijo “Adiós”, palabra que captaron sus enemigos. Se fueron antes que él y se situaron en las esquinas por donde tenía que pasar el Loro y a su paso le soplaron polvos y a pesar de haberse sacudido, quedó convertido con los colores gris y rojo.
OLOFI N LE TENÍA MUCHA LÁSTIMA A OBBI Obbi era justo y puro de corazón, modesto y sencillo como los justos. Olofin le hizo el corazón blanco, así como las entrañas y la piel, y lo elevó a gran altura, pero Obbi se envaneció en las alturas. A su servicio estaba Elegguá, criado de Olofin también, éste conocía a los innumerables amigos de Obbi, entre éstos, a los grandes de la Tierra: los akukó, colorozú, tobi onisosé, obini ayiyeba loguó. También se contaba a los pobres, los aimioc aimiochí, hí, abureg aburegué, ué, a mio, mio, alakisa alakisa,, alegbó, alegbó, gente gente fea, fea, misera miserable, ble, sucia, sucia, llagada llagada,, pordiosera. Los feos, los deformes y los hermosos, los limpios, los sucios, todos querían a Obbi. Elegguá había observado el cambio de Obbi, le había advertido detalles de arrogancia y de orgullo que manchaban invisiblemente su inmaculada blancura y en vez de invitar a los ricos exclusivamente exclusivamente (como era intención de Obbi), sólo invitó a los limosneros, limosneros, harapientos y mal olientes, hombres y mujeres defectuosos, de fealdad repugnante.
Cuando Obbi contempló a aquella turba el día de su fiesta, les preguntó fuera de sí quién los había invitado, respondiéndoles ellos que Elegguá en nombre suyo. Obbi los despidió no sin haberlos reprendido duramente por haberse presentado ante él en ese estado de suciedad y abandono. Así, los miserables de la Tierra se marcharon abochornados de la casa de Obbi y Elegguá con ellos. Un tiempo después de haber pasado esto, Olofin envió a Elegguá a la Tierra con un recado para Obbi, pero Elegguá se negó a llevarlo llevarlo y le contó la conducta conducta inclemente inclemente del puro, del justo, del intachable Obbi. Olofin se disfrazó de mendigo y fue a buscarlo. Obbi, al ver a aquel okuro sarnoso que amenazaba contaminarlo con sus guiñapos hediondos le pidió que se alejara y le increpó por no haberse bañado y vestido vestido con un aché limpio antes de presentarse, presentarse, y le dio las espaldas. Entonces Olofin, sin fingir la voz pronunció su nombre con indignación indignación y Obbi se volvió extrañado, extrañado, reconoció reconoció a Olofin, Olofin, se arrojó a sus plantas y dijo: perdón… Olofin le dijo: Obbi, tu eres justo, por eso te hice blanco de corazón. Pero ahora para castigar tu orgullo, aunque conservarás las entrañas blancas, bajarás de tus alturas para rodar y ensuciarte en la tierra. El castigo consistió en caer de las ramas y rodar por el suelo.
OTRA HISTORIA DE OBBI Obbi era un santo muy presumido y vanidoso. Un día Olofin dio una fiesta a la que concurrieron todos los santos. Después que llegaron todos al poco rato hizo su entrada Obbi. Pero cuando quiso entrar la gente que acostumbraba a congregarse a las puertas del palacio fueron a saludarle y pedirle dinero (como hacían con los demás santos) pero Obbi los rechazaba y no quería que lo tocaran. Una vez dentro de la reunión, cuando todos se sentaron en el suelo el no lo hizo (porque se ensuciaba) y fue tanta la vanidad y el orgullo que tenía que todos se quejaron, quejaron, llegando llegando estas quejas quejas a los oídos de Olofin y el dijo que iba a ver si era verdad lo que le contaban. Entonces Olofin dio otra fiesta y se disfrazó de manera que Obbi no lo conociera y cuando vio entrar a Obbi le salió al paso para darle la mano y éste se la rechazó. Entonces Olofin se quitó el disfraz y Obbi al ver a quien había rechazado quedó sorprendido y enmudeció. Entonces Olofin le dijo: te voy a devolver el habla pero únicamente podrás hablar en el suelo por ser tan vanidoso y orgulloso. Es por eso que el coco se tira en el suelo y habla por las dos caras.
HISTORIA DE OBBATALÁ De este poderosísimo santo cuentan todos los africanos traídos a Cuba en aquella época que este era un enviado directo de Dios para que pusiera en orden la Tierra, siendo por tanto un avatar, ya que no es nacido de humano, siendo unas veces santo varón y otras santa hembra, de acuerdo con los relatos. Este santo, que en el catolicismo representa a la Virgen de las Mercedes, en el único dueño de todas las cabezas, al extremo de que cuando hay disputas disputas entre los santos por determinado hijo mortal y cada cual lo reclama para sí, al intervenir éste y declararse dueño de su cabeza, todos lo aceptan y se acaba la disputa. De él se cuentan muchas historias. Se dice que en la religión de los Ararás se le consideraba algo algo así así como como a Jesu Jesucr cris isto to,, ya que que hay hay una una hist histor oria ia que que dice dice que que una una vez vez
enco encont ntrá rándo ndose se pers perseg egui uido do por por sus sus enem enemig igos os,, se le acerc acercó ó San San Láza Lázaro ro para para prevenirlo, tratando de que se salvara, ya que él sabía que lo querían matar al igual que a Jesucristo por dedicarse a predicar y practicar los ritos de la religión africana por mandato de Olofin. Y al igual que Cristo, él respondió que estaba allí por mandato divino, que se tenía que cumplir la profecía, que si tenía que morir por cumplir la palabra de Olofin, moriría y que su muerte serviría de ejemplo para la humanidad venidera, que así daba cumplimiento a lo que había ordenado Olofin. En otras historias es un santo inmortal.
OTRA HISTORIA DE OBATALÁ En esta historia Obatalá tiene duda acerca de la sabiduría de sus hijos (oluos, baba loches e illalochas). Estando preocupado por esto se le acerca Elegguá y le pregunta: ¿Baba, en qué piensas? El le respondió: hijo, tengo dudas de la sabiduría de mis hijos y los que me siguen y de sus firmezas y convicciones de lo que yo les he enseñado. Elegguá le respondió; Babá ¿por qué usted no los pone a prueba? Usted debe fingirse muerto muerto para ver la reacción de ellos, respondiéndo respondiéndole le Obatalá: Obatalá: tienes razón hijo mío. Así lo haré. Días después Obatalá se decidió a hacer lo que Elegguá le había aconsejado. Se fingió muerto y ordenó que se le tendiera en su casa para velarlo y así comprobar por sí mismo la sabiduría sabiduría y firmeza firmeza que tenían tenían sus hijos y discípulos, discípulos, sobretodo lo que él les había enseñado y predicado hasta entonces, poniendo a Elegguá en la esquina para que se lo fuera diciendo a todo aquel que pasara por ahí. Elegguá así lo hizo, se paró en la esquina del Ilé de Obatalá, fingiendo que lloraba y que estaba muy triste, y según se iban acercando los hijos y los discípulos, estos le preguntaban porqué llor lloraba aba y el les les respo respondi ndió: ó: porqu porque e Baba Baba ha muer muerto to y le está están n vela veland ndo. o. Todos Todos aceptaron lo dicho por Elegguá y se apresuraron a ir a la casa de Obatalá para participar en el velorio, sin que ninguno se percatara de que era un acto fingido. Más tarde se le acercó un aleyo a Elegguá y le preguntó el motivo de su tristeza y de su llanto. Elegguá le respondió lo mismo que a los demás, pero el aleyo le respondió: imposible, Baba no puede haber muerto. No lo creo. Se dirigió al lugar donde este estaba tendido y acercándose al féretro y dirigiéndose a Obatalá en lengua le dijo: Babá, usted no puede estar muerto porque si usted muriera todo el mundo se acabaría. Así que levántese y no finja más. Obatalá se levantó y dijo maferefun al aleyo, que es el único que no ha creído en mi muerte y ha demostrado ser más firme en sus creencias que todos ustedes pese a ser mis hijos y haberlos enseñado. De ahora en adelante tendrán que rendirle moforibale al aleyo, que ha demostrado ser más sabio que ustedes. Desde entonces hay que tener en cuenta la palabra de los aleyos que de corazón hacen por esta religión.
OTRA HISTORIA DE OBATALÁ En esta historia Obatalá era madre de Changó, estaba pasando mucho trabajo y decidió ir a pedirle consejos a Ifá. Este le dijo que fuera a casa de su hijo Changó, que era rey, pero que antes de marcharse se hiciera ebbó con la espiga de millo de Okableba. Le advirtió también que sufriría tres grandes contrariedades por el camino, mas tendría tendría que callar y seguir adelante. adelante. Al salir, Obatalá Obatalá tropezó tropezó con Echu disfrazado disfrazado de carbonero, rogándole que le ayudara. El carbonero puso su mano sobre la bata de
Obata Obatalá lá que que era era blan blanca ca y se la tizn tiznó. ó. Ella Ella iba a prot protes esta tarr pero pero se acord acordó ó de las palabras palabras de Ifá y continuó continuó andando. Otra vez volvió encontrarse encontrarse con Echu disfrazado disfrazado de vendedora con una canasta de frutas frutas en la cabeza. Ayúdeme, le dijo, a bajar esta canasta. Obatalá fun fun wemé ayuda a la mujer que vuelca la canasta y la mancha toda de manteca de corojo. Obatalá tampoco dijo nada, dominó su in dignación y siguió adelante con la espiga de millo debajo del brazo. Después atravesó un monte (que estaba aurú) donde reinaba una sequía atroz. El caballo caballo de Changó hacía doce años que se había perdido perdido y andaba internado internado en aquel monte. A causa de la sequía estaba hambriento y al ver la espiga que llevaba Obatalá fue tras ella para comérsela. Obatalá espantaba al caballo pero este se volvía y así andando llegaron al lugar donde se hallaban los soldados de Changó quienes reconocieron el caballo. Lo amarraron y prendieron a la mujer de la espiga y la condujeron ante la presencia de Changó que estaba abacoso ite obba, sentado en su trono, pero éste al reconocer a su madre fue a su encuentro dando vueltas de carnero hasta caer a sus pies. Hacía muchos años que no la veía y estaba loco de alegría. Omoyu iya eti kekere. Changó le fabricó un ilé y desde aquel encuentro su collar que era rojo, se matizó con las cuentas blancas de su iya.
OTRA HISTORIA DE OBATALÁ Dice esta historia que Obatalá había sido enviado por Olofin para que pusiera paz en la Tierra y confirmara los dominios de cada uno de los santos que estaban en ella. En la Tierra se encontró con que el rey Olokun era muy severo al extremo que no perdonaba perdonaba nada castigaba castigaba severamente severamente a todo aquel aquel desobedecía desobedecía sus órdenes órdenes o cometía cometía cualquier equivocación. equivocación. Obatalá llamó a Olokun Olokun para que éste modificara modificara su proceder, pero él no le hacía caso y continuaba imponiendo severos castigos, hasta que al fin Obatalá, viendo que Olokun no se detenía lo encadenó encadenó en su palacio en las profundidades del mar. Por eso a este santo hay que respetarlo respetarlo mucho y no se puede jugar con él ya que castiga con mucha severidad y solamente rogándole a Obatalá es posible alcanzar la clemencia de él.
OTRA HISTORIA DE OBATALÁ Oú odede (la flor del algodón) tiene el envidiable privilegio de ser capa y manto de Obatal Obatalá, á, de envolv envolverl erla a perenn perenneme emente nte de vivir vivir pegado pegado al Orishan Orishanla. la. Este Este honor honor provocó una envidia terrible en los Eiyé (los pájaros) los cuales se entrevistaron con el Sol y la Luna para calumniar al pobre algodón. A uno le pidieron que lo quemase con el fuego y a la otra que lo secase con su frialdad. Mas triunfó la inocencia del cándido Oú odede, que a punto de perecer hizo ebbó y los pájaros quedaron ante Obatalá como intrigantes, perversos y despreciables. Obatalá dispuso entonces que cuando estos atacaran al algodón se hincaran los ojos con los capullos que Babá Arubo le había dotado de las espinas pequeñas para su defensa.
OTRA HISTORIA DE OBATALÁ Dice esta historia que Obatalá no come sal por culpa de Babalú Ayé. Este vivía en el el monte y llegó a casa de Obatalá cuando todos habían comido. Quedaba un plato de
comida que era de Obatalá y este de lo dio. Cuando fue a cocinar para comer él se le había acabado la sal, sin la cual se sirvió.
OTRA HISTORIA DE OBATALÁ Cuando Obatalá era dueño del Obbi, reunió a los santos para darles jerarquía a cada uno de ello. Esta asamblea se hizo bajo un cocotero. Obatalá puso a los pies de cada uno un coco partido. Por eso todos los santos tienen derecho al coco, aunque no enteramente, pelado por fuera como por dentro, que es como se le ofrece a Obatalá. Alrededor del árbol se sentaron los orishas para escuchar respetuosamente las instrucciones de Obatalá. El único que se mostró renuente a obedecer sus palabras y demostró inconformidad fue Babalú Ayé, pero Obatalá lo dominó y al fin tuvo que acatar la voluntad voluntad del jefe supremo. supremo. Desde entonces entonces no es posible que se practique un solo rito sin la ofrenda concebida de un coco a los Ikus y a los Orishas.
OTRA HISTORIA DE OBATALÁ Obatalá ordenó a tres esclavos suyos llamados Aruma, Addima-Addima y Ochama que fueran a cortar guano (mariwo) para hacerse una casa. Addima-Addima tuvo la preocupación de hacerse ebbó antes de internarse en el bosque, pero Orula le pidió para verificarlo, el machete que llevaba (que no era suyo, sino de Obatalá). Cuando se reunió con Aruma y Achama y estos lo vieron sin el machete se rieron de él, le dijeron que cortara el guano con los dientes y lo dejaron solo. Addima-Addima, dispuesto a no cortar las pencas con los dientes, pero sí a arrancarlas con las manos, entró en el monte buscando las palmeras más bajas. Una ceiba llamó enseguida su atención, allí había un bulto raro que colgaba atado al tronco. Addima-Addima Addima-Addima,, ayudándose ayudándose de un palo logró desprenderlo desprenderlo haciéndolo caer. Halló dentro una gran cantidad de plumas de loro. El hallazgo era de una importancia inca incalc lcul ulabl able. e. Obat Obatal alá á en secre secreto to busc buscaba aba con con gran gran afán afán plum plumas as de loro loro.. Esta Estass escaseaban desde hacía mucho tiempo y nada podía tener tanto precio a los pies del orisha moderador y rey del género humano, como aquellas plumas que a la sazón necesitaba urgentemente. Addima-Addima sabía tejer. Tejió inmediatamente cestos de guano g uano y en ellos guardó las codiciadas plumas. No había terminado de amarrar aquel precioso cesto cuando vio cerca de laceaba un ayanaku (elefante) (elefante) muerto. Le arrancó los dos colmillos blancos, blancos, magníficos y los ató con las plumas. Achama y Aruma llegaron mucho antes que Addima-Addima al ilé de Obatalá y el orisha le preguntó por Addima-Addima. Ellos respondieron: no sabemos, él nos siguió y luego se fue y nos dijo que le había entregado su machete a Orula. Orula. ¿Mi machete, el machete que le di para que me sirviese? tronó Obatalá y llamó a Oggún y le dijo: en cuanto llegue Addima-Addima, que ha perdido mi machete, córtale la cabeza y bébete la sangre de él. Oggún Olé Adá Pkutá. Oggún afiló su machete y se sentó a esperar a Addima-Addima. Cuando Addima-Addima llegó lo primero que Obatalá vio fueron las plumas y los espléndidos enjijin (colmillos) que traía el muchacho muy ufano y Obatalá haciéndole un gesto a Oggún que iba a ponerse de pie para cumplir sus órdenes, le pidió que esperara.
Addima-Addima colocó ante Obatalá las plumas y los marfiles. Obatalá mando a buscar un chivo y se lo entregó a Oggún y le dijo: toma este chivo, córtale la cabeza y márchate. En su alegría alegría Obatalá bendijo bendijo a Addima-Addima, Addima-Addima, que que había visto lo que el orisha necesitaba. Lo cubrió de riquezas y por Ifogué Igo (ciegos y estúpidos) castigó a Aruma y Achama.
ORIGEN DE LA MALDICIÓN DE OGGUN Dice la historia que Obatalá vivía con Llembó, que era su mujer, y junto con ellos Elegguá, Elegguá, Oggún, Ochosi y Osun. También También tenía a Dada, pero esta no vivía con ellos Obatalá salía a trabajar todos los días quedando los demás en la casa. Cuando llegaba, Osun era el que tenía que decirle lo que había pasado en la casa. Oggún era el que más trabajaba en la casa y por eso era muy mimado y todos tenían que obedecerle. Oggún, viendo que Elegguá le estorbaba para sus planes, comenzó a darle menos comida ya que el era el cocinero de la casa. Oggún se enamoró de su mamá Llembó y quiso muchas veces obligarla a hacer algo indigno con él, pero Elegguá siempre estaba vigilando y se lo decía a Osun, quien le llamaba la atención a Oggún. Oggún Oggún se dio cuenta que Elegguá Elegguá se lo había dicho todo a Osun y buscando buscando una tragedia con Elegguá lo botó de la casa. Elegguá se quedó en la esquina dando vueltas sin entrar en la casa. Mientras, Oggún cogía cuatro sacos de maíz y se los daba daba a Os Osun un para para entr entret eten enerl erlo, o, pues pues mien mientr tras as comía comía no podr podría ía dela delata tarl rlo, o, pero pero Elegguá no perdía de vista a Oggún. Todos los días a una misma hora, Oggún cerraba la puerta y como Osun estaba comiendo no veía nada. Un día Elegguá esperó a Obatalá. Este, al verlo, le pregunto: qué pasa, hijo. Elegguá le contestó: -- Hace muchos días que yo no como. -- Por qué, preguntó Obatalá. -- Porque Oggún no quiere que vea lo malo que está haciendo en la casa -- Cómo Osun no me ha dicho nada, preguntó Obatalá -- Porque Oggún le da mucha comida y se queda dormido, respondió Elegguá. Ento Entonce ncess Obat Obatal alá á dijo dijo:: “Imp “Impos osibl ible, e, Os Osun un no pued puede e acos acosta tars rse e y mucho mucho menos menos quedarse dormido. Elegguá dijo: bueno, papá, usted no diga nada esta conversación y mañana levántese como de costumbre, salga para el trabajo y regrese a la hora regrese a la casa para que usted vea con sus propios ojos. Aquello dejó muy triste a Obatalá, quien aquella noche no pudo dormir con tranquilidad, soñando y delirando toda aquella noche. Al otro día, Obatalá salió para su trabajo como de costumbre, pero se escondió detrás de los matorrales del mangle y entonces vio a Osun acostarse y quedarse dormido y a Oggún cuando cerró la puerta. Obatalá lloró de sentimiento y cogió un bastón de mangle para apoyarse porque le faltaban las fuerzas y poco a poco se acercó a la puerta y tocó con el bastón. Llembó oyó y dijo tú vez Oggún, qué necesidad tenía yo de buscarme este lío. Oggún dijo: qué se le va hacer, yo abriré la puerta. Oggún viendo viendo que Llembó no era culpable dijo: eso no mamá yo soy un hombre. Cuando abre se encuentra a Obatalá el cual tenía la mano levantada para maldecirle y él se anticipa y le dice: papá, no hable, no me eche maldición, yo mismo me voy a echar maldición, y la maldición será que mientras yo viva y el mundo sea mundo, todo el trabajo que haya en este mundo, yo Oggún Aguanillé, Oggún Ñaceñilé, Oggún Cobú Cobá, Oggún Tocumbí, yo papá,
de día día y de noche noche traba trabaja jaré ré.. Obata Obatalá lá dijo dijo:: Aché Aché.. Ento Entonce ncess Obata Obatalá lá entr entró ó para para amonestar a Llembó, más Oggún le dijo: no papá, mamá es inocente no la culpe. Entonces Obatalá dijo: Oggún, vete no puedes vivir dentro de la casa. Llamó a Osun y le dijo: yo he confiado en ti y tú por la comida te has vendido. De ahora en lo adelante Elegguá estará de guardiero y si Elegguá no come nadie come en mi casa. Elegguá no pasará más hambre y en esa puerta, para entrar o salir habrá que contar con él lo bueno y lo malo. Tú serás el que dejará entrar o salir. A ti, Llembó, no voy a mal decirte pero si te digo que cualquier hijo varón que tengamos, yo, Obatalá, lo mataré. Llembó lloró sin decir una palabra. Oggún se fue y entonces se hizo alaguede, empezó a trabajar en una herrería (eso es a lo que se le llama alagguaddé, alagguaddé, es decir, herrero). Nace Orula y Obatalá lo coge y sin decir nada se lo lleva lejos de allí, pero Elegguá lo sigue. Obatalá llega a un lugar donde había una ata de ceiba, abre un hoyo y entierra a Orula hasta la cintura con los brazos por debajo de la tierra. Elegguá Elegguá ve todo eso y se lo cuenta a Llembó. Esta, llorando, mandaba todos los días a Elegguá con comida para Orula. Desde el momento que Obatalá enterró a Orula, todo se le olvida. Al poco tiempo nace Changó. Era un niño muy bonito y hermoso. Obatalá lo coge en sus manos y se compadece de él y no quiere hacerle daño. Entonces piensa que Dada, su hija mayor, podía cuidarlo que vivía separado de él y así, no viendo a Changó él no podía hacerle daño porque Obatalá se había quedado encantado con Changó. Pasados cuatro años, Dada quiso que Changó viera a su papá y a su mamá, y lo vistió con un traje muy limpio y se lo llevó a Obatalá. Cuando este lo vio con un traje muy limpio se puso muy contento, pero Llembó estaba muy triste porque se acordaba de Orula. Changó estaba vestido de colorado. Obatalá se lo sentó en las piernas y Chang Changó ó pregu pregunt ntó ó porqu porqué é su mamá mamá llor lloraba aba.. Yo te lo diré diré con con calm calma, a, hijo hijo mío. mío. Diciéndole Diciéndole a Dada: yo quiero quiero que todos los días me lo traigas, y Dadá así lo hizo. De ahí nace el canto de Changó que dice: achei guoguo changó moque guaguo orufina beguaguo, lo cual significa: siendo chiquito Changó, Obatalá le contaba su vida. Pues Pues bien, bien, Dadá Dadá traí traía a todo todoss los los días días a Chang Chango o donde donde esta estaba ba Obata Obatalá lá y éste éste sentándoselo en las piernas le contaba día por día lo que Oggún le había hecho, así fue creciendo creciendo Changó con odio y rencor hacia Oggún. Ya hecho un hombre, Changó tenía muy mal genio y siempre estaba peleando peleando pero no tenía armas armas y se fue a casa de su padrino Osaín y este le dio un güirito y le dijo: cuélgalo en un rincón de la casa y todos los días por la mañana antes de salir, te haces una cruz en la lengua. Changó hizo lo que le mandaron y es por eso que cuando usted saluda a Changó y el le contesta, por su boca le salen llamas de candela. Es por lo que todos decimos cuando truena eloeco osi osaín porque la llama es el relámpago y el trueno es la voz de Changó, que cuando grita todo el tiempo eso es gustito ni soro illa, así como grita es de grande. Pasa Pasado do un tiem tiempo po la situ situac ació ión n se puso puso muy muy mala mala y como como Obat Obatal alá á esta estaba ba muy muy desmemoriado, no acertaba aliviar la situación de todos, pero Llembó no le decía nada. Changó viendo el apuro de Obatalá y queriendo salvar a su hermano Orula de aquella aquella prisión prisión involuntaria, involuntaria, estando Obatalá, Obatalá, Elegguá, Elegguá, Llembó y Changó en la casa, Obatalá hablaba y comentaba la situación. Elegguá y Changó se querían mucho y se comprendían de lo mejor. Elegguá le hizo una seña a Changó para que éste tratara el asunto con Obatalá (porque ya ellos habían hablado de eso). Ya Orula lo sabía también. también. Entonces Changó esperó la ocasión y le dijo: papá, yo siempre siempre te he hecho caso y te he dado buena pauta. Cada vez que te he dicho algo tu has salido adelante.
Obatalá le dijo: hijo, eso es verdad. Changó le dijo: antes de nacer yo tú habías jurado no tener hijos varones y nació Orula y tú lo enterraste. Obatalá le dijo: qué tiene que ver eso y Changó le dijo: espera. Después nací yo y aquí me tienes ante tu presencia y tú saber que Olofin Olofin te oye todo. Como todos todos los varones varones tuyos son iguales iguales ante él, no tiene nada de particular que Orula sea hijo de nuestra madre también (porque Obatalá Obatalá le había dicho que que su mamá era Odemasa Odemasa que quiere quiere decir la madre de la candela, así que Changó nunca mencionada a Llembó. Obatalá le respondió que Orula ya estaba en manos de Olofin, pero Elegguá le respondió: papá, puede ser que no. Entonces Obatalá salió para donde había enterrado a Orula, pero como Obatalá no se acordaba del camino, Elegguá le iba saliendo por el camino vestido de varias maneras maneras y le iba indicando hasta que llego al lugar y encontró encontró a Orula, Orula, sacándolo del lugar, pero como Orula no sabía trabajar, Changó se subió a un árbol y arrancando una tablero le hizo un tablero y le dijo: con esto tu trabajarás y serás adivino. Haciendo Orula su primer registro, que fue a su propio padre, rindiéndole marifobale y resolviendo la situación con lo que se le había mandado a hacer. Cuando Obatalá hizo lo que Orula le había indicado, su memoria estuvo por completo restablecida, entonces queso que Changó reconociera reconociera a su madre y de ahí para que la tuviera presente, le vistió de blanco y punzó (hasta hoy en día se viste Changó) para que de esta manera se acuerde de el pacto entre él y su mamá, esto es: su collar blanco y punzó. Llembó se vestía de blanco. En un Yemayá con el camino de Obatalá todas sus vestimentas son de color blanco. El tiempo pasaba pero changó no se olvidaba de lo de Oggún. Un día se vistió de guerrero y montado en un caballo se fue a las posesiones de Oggún. Éste estaba trabajando y era marido de Ollá. Changó sabía todo eso y pasó por casa de Ollá, ésta al verlo quedó enamorada de él. Changó correspondió a las palabras amorosas de Ollá y se la llevó (el interés de Chango era vengarse de la felonía felonía de Oggún) y como Oggún bebía mucho y era muy revolucionario revolucionario no le fue muy difícil difícil a changó que Ollá se fuera con él. Changó Changó ser la llevó a casa de Dadá (ambos se querían querían como madre madre e hijo) después de Obatalá era a la única que obedecía. Al saber Oggún que Changó se había llevado a Ollá le hizo la guerra, perdiendo la guerra Changó. De este resultado Ollá no quedo conforme. Así pasaron los días. Dadá nunca había andado en las cosas de Chango, pero un día Olla (que había visto que Changó todos los días al levantarse iba donde estaba un güirito güirito introduciend introduciendo o un dedo dentro dentro y se hacía una una cruz en la lengua lengua y al salir salir para llamar a Dadá le salía candela por la boca, ella hizo lo mismo que Changó, pero cuando salió para llamar a Dadá le salió candela por la boca, asustándose ella y salió corriendo y se escondió en una palma. Dadá llamó a Ollá y no la encontró. Al ver el güirito de Changó notó que este estaba diferente y entonces movida por la curiosidad se acerca al güirito metiendo un dedo, hace lo mismo que Ollá y cuando fue a llamarla le salió candela por la boca, entonces corre y se entierra junto a Ollá. Cuando Changó regresa a la casa y llama a Ollá y a Dadá y estas no aparecen, se dirige al güirito y ve que no estaba como él lo había dejado. Entonces va a la palma donde él se metía y encuentra a las dos, regañándolas. Ollá no le hace caso y le dice: tú lo que tienes que hacer es declararle la guerra a Oggún, pero hacerle una guerra diferente a la anterior. Oggún se había preparado mejor para esta guerra y cuando Changó ya la tenía perdida, perdida, Ollá acude en su ayuda. Changó, por una parte, con los truenos, los rayos y los relámpagos, Ollá con la centella le ganan la guerra a Oggún, obligándolo a irse para dentro del monte, donde Chango un día lo encontró vestido de colorado y se
asustó. Le quitó la ropa y la puso él, y vistió a Oggún de mariwo (guano). Por esta razón hasta nuestros días se dice que donde quiera que exista un caballo de Oggún y uno de Chango, es seguro que en ese cabildo habrá una tragedia entre esos dos santos.
OTRAS HISTORIAS SOBRE EL NACIMIENTO DE ELEGGUÁ Había Había en una tribu tribu un obba que se llamaba llamaba Oquibu Oquiburu ru y su esposa esposa Añagui. Añagui. Ellos Ellos tuvie tuviero ron n un hijo hijo al cual cual llam llamar aron on Elegg Elegguá uá.. Como Como era era prín prínci cipe pe,, cuand cuando o crec creció ió le nombraron nombraron un séquito séquito palaciego. palaciego. Un día, siendo Elegguá Elegguá muchachón, se fue a hacer una expedición acompañado de su séquito. Al llegar a un lugar él ordenó detener la marchar y se apartó solo para comprobar una cosa que había visto. Lo que Elegguá había visto era una luz brillante, brillante, como si fueran tres ojos deslumbrantes deslumbrantes que estaban en el suelo. Elegguá lo recogió y vio que era un obbi (coco seco). Aquel muchacho era muy travieso travieso y no le tenía tenía miedo a nada ni a nadie, fuera fuera bueno o malo. Tan Tan pronto podría ser amigo como enemigo. Él estaba muy envalentonado con ser príncipe. Elegguá Elegguá se llevó el coco para el palacio y les contó a sus padres lo que había visto y como no fue creído por ellos, ellos, tiró el coco detrás de la puerta del palacio y allí lo dejó. Pero un día, estando reunida la familia real y su séquito en una fiesta que celebraban, vieron con asombro las luces que salían de aquel obbi y todos horrorizados. Aconteció que a los tres días murió Elegguá y durante mucho tiempo después estuvo alumbrado aquel obbi, siendo respetado y temido por todos. Pasado algún tiempo, el pueblo pasaba por una situación tremenda y desesperada. Se reunieron los Aguos y sacaron la conclusión de lo que estaba pasando: era debido al estado de abandono en que tenían aquel obbi dejado por el príncipe detrás de la puerta. Entonces fueron allí y vieron que el obbi estaba vacío y comido por los bichos. Entonces deliberaron y llegaron a la conclusión deque había que hacer algo sólido que perdurara a través de los tiempos y pensaron que el otá (piedra) de santo era lo más indicado y fue aceptado el acuerdo. Hicieron el Otá y lo pusieron detrás de la puerta del palacio. Esta Esta es la piedra que utilizamos hoy cuando hay que hacer santo. Ese fue el nacimiento nacimiento de Elegguá Elegguá y por eso se dice: Ikú babá ocha, que quiere decir: decir: el muer muerto to pari parió ó al sant santo, o, pues pues si el prínc príncipe ipe no hubie hubiera ra muer muerto to no se hubi hubier era a abandonado aquel obbi por no saber qué hacer con él. Es por eso que utilizamos el Otá para hacer santo.
HISTORIA DEL ORISHA ELEGGUÁ En cierta ocasión Olofin padecía de un mal misterioso misterioso que agravándose agravándose por el día le impedí impedía a trabaja trabajarr en sus labran labranzas zas.. Todos Todos los santos santos había había intent intentado ado aliviar aliviarlo lo al meno menos, s, pero pero sus sus medi medicin cinas as no habí había a logr logrado ado ning ningún ún resu resultltado ado El padre padre de los los Orishas, el Creador, ya no podía levantarse, pues se encontraba extremadamente débil y adolorido. Elegguá, a pesar de sus pocos años, pidió a su madre Olla que lo llevase a casa de Olofin, asegurándole que lo curaría. Ollá lo llevó. El chivo escogió unas hierbas, hizo un brebaje y tan pronto el viejo se lo tragó, haciendo una larga mueca, empezó a sanar y a fortalecerse rápidamente. Agradecido Olofin, ordenó a los orishas mayores que precedieran a Elegguá las primicias primicias de toda ofrenda. ofrenda. Depositó en sus manos unas llaves y lo hizo dueño de los caminos.
Desde aquel día toleró con ilimitadas complacencias las picardías de Elegguá.
OTRA HISTORIA Elegguá Elegguá abre y cierra todos los caminos caminos y las puertas, tiene las llaves del destino, es espía y mensajero de los dioses, por su genio de niño revoltoso (siempre dispuesto a alguna travesura) malévolo además por naturaleza, cuando es Eschu por suerte se le soborna fácilmente, pues comelón y goloso (como los Ybellis, predilectos de Obatalá y Changó). Elegguá está en todas partes acechando, es dueño de los papalotes, bolas, trompos. Elegguá comía en las basuras, ésta lo alimentaba, pero al enfermar de gravedad Olofin, Olofin, fueron todos los inteligente inteligentess a verlo y nadie puso curarlo. Elegguá Elegguá se puso un gorro blanco (como el que usan los babalaos) y con sus hierbas lo curó muy pronto. El viejo dijo: y con tantos hijos sabios como tengo y ninguno se sirvió curarme. Elegguá pide lo que quieras, muchacho. Y este que conocía la miseria le contestó: Comer antes que nadie y que me pongan en la puerta para que me saluden antes que nadie también. Así será, dijo Olofin y además te nombro correo.
OTRA HISTORIA En una oportunidad oportunidad Elegguá Elegguá descubre descubre que los adivinos Aguos registraron registraron el año y le habían trocado a Olofin los Odón. Esto sentó un precedente coei boleri.
OTRA HISTORIA Una vez Elegguá invita al Creador a un encuentro con un ratón que los orishas insu insubor bordin dinad ados, os, dese desean ando do dest destro ronar narle le,, habí habían an pues puesto to a las las puer puerta tass de su ilé, ilé, sabiendo que a Olofin le inspiraba terror los ratones. Por eso Olofin le consagra el ratón y por eso Elegguá Elegguá come ratón y para obtener de él algo grande se le mata uno. Pero la más ligera equivocación en el rito resultará en perjuicio de quien lo realiza, ya que los peores daños o bienes se han utilizando un ratón.
OTRA HISTORIA En la época que Elegguá Elegguá andaba de juerga con Osun, otro mensajero de Obatalá, lo emborrachó y éste se quedó dormido. Elegguá aprovechó el sueño para robarse un chivo. Lo mató, mató, se lo comió y la culpa de aquel aquel que robó cayó sobre Osun Osun porque Elegguá le embarró de sangre la boca, dejó a sus pies los huesos y desapareció. Cuando Achelu vio la boca de Osun y media cara ensangrentada ensangrentada,, le fue fácil deducir quién era el ladrón. La pasión del baile, como en todos los santos mortales, es también muy fuerte en Elegguá, por ir a una fiesta era capaz de cualquier sacrificio.
OTRA HISTORIA Se cuenta que una vez hallándose muy pobre, sin zapatos y carente de dinero, se decidió a pedirle a Obatalá que le permitiera limpiarle y barrerle su Ilé a cambio de un poco de dinero. Los primeros días (escoba nueva barre bien) limpió admirablemente la casa. Obatalá le pagó y Elegguá se fue a un baile. Al día siguiente, cansado de una
mala noche, tuvo que volver a cumplir sus obligaciones con Obatalá, y como todas las noches bailaba y bebía, todo lo que hacía le salía mal y de mala gana pues estaba cansa cansado do.. La limp limpie ieza za dejab dejaba a mucho mucho que que dese desear ar por lo cual cual Obat Obatal alá á enfe enferm rmó ó y temeroso de despedir a Elegguá llamó a Orula, quien dijo después de consultar su Ekuele, que el muchacho que estaba en su casa debía marcharse cuanto antes, pues de lo cont contra rari rio o no reco recobra brarí ría a la salud salud por la gran gran cant cantid idad ad de polvo polvo y basu basura ra acumulada. Sin embargo, Obatalá, para no indisponerse con el peligrosísimo criado, espero a que se celebrara una nueva fiesta y dándole una cantidad apreciable de eguó (que no era entonces monedas, sino caracoles) le dijo: toma este dinero y no me debes nada, ve a bailar y visítame de vez en cuando. Obatalá en su casa limpia se repuso rápidamente.
OTRA HISTORIA En un principio, principio, Olofin, Olofin, antes de distanciarse distanciarse del mundo mundo le dijo a cada Orisha Orisha que le dejaría una misión. Repartió los empleos y Elegguá, como es tan vagabundo, se quedó sin desempeñar alguno. Andando el tiempo se le quejó a Changó de su situación, a éste le había tocado a Ifá en el reparto, pero como era muy joven y rumbero (existían enfermos en el mundo pero no había médicos) le había traspasado Ifá a Orula. Dijo Elegguá: changó, ando por ahí sin ocupación fija. ¿Tengo que predicar para mantenerme? Changó llevó a Elegguá a casa de Orula y le dijo al viejo: este será tu centinela. Estará siempre vigilante a las puertas de tu casa a cambio que le des de comer. Orula se quedó con Elegguá y le dio el cuidado de su puerta, pero como Elegguá no comía todo lo que él quería y veía a Orula adivinando, se enceló y le dijo: yo también quiero hablar un poco y ganar algo. Tú tienes todo lo que necesitas, qué más quieres, le contestó Orula. Al día siguiente llaman a la puerta. ¿Está Orula? Orula estaba en casa ca sa pero p ero Elegguá contestó: No está. Y a todo el que tocaba Elegguá le respondía lo mismo. Pasaron varios días en esta situación y Orula acostumbrado a aconsejar y curar a todo el mundo y a mejorar oguó le preguntó a su guardiero: ¿Es posible que la gente no venga a verme? Vienen pero yo no los dejo pasar. Orula le dijo: Ven acá y le dio tres caracoles para que adivinara. ¿Estás conforme? Está bien, le respondió, es suficiente.
OTRA HISTORIA Al ir Elegguá a monte en busca de una jutía que necesitaba se tendió y se quedó dormido. Lo despertó un quejido y vio que muy cerca de él asomaba de la tierra una forma semejante a la de un pie. Kilonché, preguntó. No le respondieron. Volvió a escuchar otro quejido y era la tierra que pujaba. Entonces Elegguá le dijo al ñame que nacía: Dide (levántate (levántate)) y lo sacó de la tierra. Se lo mostró a Orula y este dijo: esto es Ichu y en tu ausencia te remplazará ofrendándoselo a Obatalá cocinado y amasado arriba en una loma. El ñame y el coco acompañan a Elegguá, nunca puede faltarle a él ni a ningún Orisha.
OTRA HISTORIA Para Olofin conocer la capacidad de Orula y si estaba a la altura de su cargo como era el de ser dueño del tablero, lo mandó a buscar a través de Changó y cuando se
marchó éste, éste, Olofin tomó tomó maíz crudo y maíz tostado, sembró sembró en un cuadro de tierra el crudo y al lado, a un palmo de distancia, el tostado. Elegguá vio hacer esta operación y rápido se lo contó a Changó de que Olofin no tardaría en llamar a Orula para que le señalase dónde estaba sembrado el maíz. Changó previno a Orula a tiempo, y cuando Olofin efectivamente lo mandó a buscar en el quicio de de su puerta, Elegguá le reveló al oído el secreto y la situación exacta de los maíces. Olofin lo llevó al terreno y le preguntó a Orula. Orula no le dejó terminar y le respondió: Babami, ahí, en esa parte, a la izquierda, no saldrá maíz porque usted lo sembró tostado, para saber si yo ofe (lo veo), pero aquí estamos parados los dos sobre uno que pronto crecerá. crecerá. Satisfecho Olofin Olofin le entregó entregó el tablero a Orula y todos los instrumentos de adivinar.
HISTORIA DEL NACIMIENTO DE ORULA Dicen los africanos que vinieron a Cuba que Orumila o Orula es un santo pero Orula nació después de haber maldecido Obatalá y no querer tener hijos varones. Orula nació primero que Changó, Changó, es mayor que Changó por nacimiento, nació con su virtud de adivino, poder que le dio Olofin para que no se cumpliera cumpliera la maldición maldición de Obatalá de no tener hijos varones, ni siguiera uno. Después de Orula nació changó. El Oddún donde nació Orula es el 10. Ofun mafun (donde nacieron los fenómenos, donde nació la maldición. Donde nació Ananagu. ¿Quién es Ananagu? Nosotros los cristianos, los hijos de Olofin los hijos de dios Ofun, es el Oddún que parió a Elliro sun, por eso muchos creen que Osun es un santo al igual que otro cualquiera. cualquiera. Osun es el santo que comunica todo a Obatalá o a Olofin (Osun madubale-dureganga la bosú) que quiere decir: Osun no puede estar acostado, sino parado firme. Ese es el sullere que osuboro osuboro madubale ureganga ureganga la bosú asubororo asubororo mandubule mandubule dureganga dureganga labosu aguo. Entonces si esto es así, resulta resulta ser un intérprete de Olofin, de Orula y de Obatalá, un heraldo que lo ve todo y lo dice a Olofin todo lo que respecta a nosotros. También comunica lo relacionado de Olofin a Obatalá, de Olofin a Orula. Ese es el papel de Osun y por eso no puede estar acostado ni se puede caer, siempre tiene que estar firme. firme. Ahora bien, si Osun comunica nuestra nuestra situación situación a Olofin, Olofin, a Obatalá, a Orula y viceversa para nosotros, ¿qué es Orula en el campo de nuestra religión? Pues es el babalao o illalosha. Para aclarar un asunto importante debe dirigirse a Orula, el supremo supremo adivino adivino de nuestr nuestra a religi religión. ón. Pero para hacerlo hacerlo no será con ekuele, ekuele, sino bajando a Orula con tres o más babalaos (los que usted quiera), pues es un error pensar que se baja a Orula o se saca el Tablero con un solo bacalao. A todo esto se le llama Junta de Bacalaos. Boguo oguo omocu baba mofa Orula: reuniendo a los jueces de Orula. El santero no debe entregar a Osun. No es de su competencia. Esto es de los bacalaos. La competencia de los santeros es entregar todos los santos que lleven diloggún (caracol) menos Osun. También es deber de un santero cuando esté haciendo un registro y sale una letra mayor de 12 (Ellilá) mandar a esa persona a donde está Orula. Orula. Esto es de justicia de obrar bien de acuerdo con la religión. Cuando se hace un santo hay veces que la persona que se lo hace por la letra le sale que tiene que hacer o coger Orula. Se le debe advertir a esa persona, sea hombre o mujer, si es hombre puede coger de una mano hasta hacerse Oluo, aunque tenga santo hecho, y las mujeres desde un iddé hasta Aicofá.
Cuando una persona persona se hace santo santo y tiene que coger coger a Orula, hay muchas muchas formas que el santo manda a esa persona para hacerlo, pero hoy la mayoría de los que auspician un santo no lo hacen así. A Orula se manda a recibir cuando esa persona tenga en su signo sign o lo siguiente: 4-8-84, 6-4-4-6-8-8-5, 10-4, 10-10-10-6, 6-6 y 5-5 en su cabeza o en Elegguá 6-10-10-6, 810-10-8 y 5-10. Estas letras marcan la necesidad de hacer Orula o recibirlo, y con cualquier otra letra cuando el santo que tenga hecho no responda por su cabeza y Orula sí, o por salvarlo de enfermedad o de algo malo en contra de la persona. Cualquier bacalao puede hacer lavar o mandar entregar a Elegguá por cualquier camino que éste traiga, pues es de competencia. La illalocha (santera) puede hacerlo igual pero hasta cierto extremo por tratarse del santo que es Aroye, o sea, Echu, esto es porque hay un Elegguá que es Echu que es como se llama este santo. Elegguá en todo lo que se pone detrás de la puerta como guardiero, todo lo que sirve para responderle a usted (todo lo que sea para velar por lo suyo), a esa casa se le da un solo nombre: Elegguá. Ahora bien, Echu hay siete, con 21 caminos y los siete Echu, cada uno de ellos tiene tres caminos, caminos, que son los 21 en total. total. Los Echu son los siguientes: siguientes: Añagui, que es la madre de todos los Elegguá; Echu Ocuboro, el de la muerte o la vida; Echu Maguana, el que está en todas partes; Echu Lalliqui, nadie sabe cómo empiezan las cosas y cómo acaban; Echu Laroye, el que siempre está peleando o forma discusión; Echu Batielle, el que acaba con todos de cualquier forma; Echu o de maza, el del momento lo mismo para bien que para mal. Dentro Dentro de estos Echus la illalocha illalocha los puede hacer todos, pero hay ciertas ceremonias que son para hacerlas un hombre, pero ella puede hacer todo lo demás. Es cost costum umbr bre e que que much muchos os sant santer eros os y sant sante eras ras diga digan n (tal (tal vez vez por por falt falta a de conocimientos) que son los Oluos quienes dan los santos guerreros. Esto en realidad no es de los Oluos, es de la competencia de los santeros. A no ser que el mandato del santo diga que se haga en la casa de un Oluo. Entonces hay que respetar eso. Ahora debe ser una cosa bien hecha. Este oluo debe primero tener hecho santo, entonces puede dar los guerreros aunque no lo mande ningún santo, si quieren la madrina o el padrino del que los necesite. Esto no quiere decir que cualquier Oluo no pueda dar Elegguá, si tiene o no hecho santo. Cualquier puede dar un Elegguá y Osun, Elegguá de Orula, Elegguá de Maza, pero Oggún no es de su competencia. Tampoco puede dar Elegguá de piedra sola, porque todo esto necesita un proceso de oro y de sulleres que es exclusivamen exclusivamente te de los santeros (es lógico que si los santeros no saben como se hace un Icofá, que no lo dé, ni tampoco debe dar Osun porque desconoce los sulleres que esto requiere para lavarlos y para que sirva. Asimismo el oluo debe abstenerse abstenerse de dar una cosa que ellos desconocen desconocen sus procesos procesos básicos. No se trata de quitar la autoridad a los oluos, sino de aclarar las facultades de cada uno. Otro caso donde los oluos piensan que babalochas e illalochas se abrigan facultades facultades en el caso de Achogún. Todo el que alcanzó lucumí en Cuba sabe que pasa hacer Achogún basta ser hombre y si este hombre ho mbre era hijo de Oggún, mejor. A estos eran los que se utilizaban como Achogún. En cuanto a esto y para ser justote acuerdo al criterio de la mayoría de los africanos antiguos, se debe llamar a uno que no tenga santo hecho, aunque otros prefieren que lo haga un bacalao por su gran práctica y porque él no deja de ser un santo más con distintas categorías y para darle más seriedad a la obra que se está realizando. Ahora bien, en todos los casos siempre hay que decir la verdad por la verdad misma y si así pensaba la mayoría, así se debe hacer. Existen Existen muchos santeros y santeras que no usan el afache (el aché de Orula)
en los casos que lo quieran algunos lo hacen con cascarilla, mal precedente, porque ya lo dice la palabra: afache, afache, esto es necesario. necesario. Y quien lo puede hacer mejor que el Oluo. El Llefá no es de los santeros, santeros, es del oluo y cuando el santero necesita necesita de el es justo que vaya a buscarlo a casa del oluo.
OTRA HISTORIA DE ORULA Olofin Olofin dio una fiesta y todos los santos le llevaron llevaron regalos suntuosos. Orula no quiso llegar con las manos vacías. El tenía una siembra de ñames, ñames, escogió el menor y se lo llevó a Olofin. Era cuanto tenía. Todos los santos se rieron de la pobreza de aquel regalo, se burlaron de Orula y de su ñame. Pero Olofin, ante la sorpresa de todos y de manera que ninguno dejara de oírlo dijo: Ñame, serás bendito. Pasó el tiempo, se desató una plaga, peste peste y adversidad adversidad para el pueblo. pueblo. Los ricos se arruinaron y hasta para comer se dificultaba. Los tuvieron que ir a pedirle ñame a aquel de quien tanto se burlaron. Orula precisamente estaba recogiendo su cosecha de ñame y puso socorrerlos. Desde entonces todos los santos comieron ñame.
HISTORIA DEL SALUDO DEL ORULA Un día, el Rey llamó a todos los babalaos de su pueblo para que fueran a adivinarlo, para que saber qué era lo que tenía su hija que estaba en cama diciendo diciendo que estaba embarazada. Ya habían ido todos los babalaos a adivinar qué era lo que le pasaba a la hija del Rey, pero ninguno pudo acertar. El rey le dijo que se fueran. Entonces llamó a Orula que era el único que faltaba para ver si adivinaba. Orula venía caminando y se encontró encontró con una niña que estaba estaba sentada al lado lado de un manantial manantial cogiendo cogiendo agua con una tinaja. Al ver a Orula que estaba fatigado de tanto caminar, le brindó agua y se pusieron a conversar y ya dentro de la conversación él le dijo que era una de las hijas del Rey y que su padre estaba fingiendo que tenía una hermana en estado y que eso no era cierto, porque lo que tenía era una muñeca de trapos, porque ellas nada más eran tres hermanas y que eso lo hacía el padre porque él no creía en ningún babalao. Cuando Orula iba a proseguir su camino, le preguntó su nombre y ella le respo respond ndió ió que que se llam llamaba aba Ibor Iboru. u. El sigui siguió ó su cami camino no y cuan cuando do ya divi divisa saba ba la población, población, le salieron salieron al paso dos niñas que jugaban, jugaban, las cuales cuales resultaron resultaron ser las otras hijas del rey. Estas le dijeron lo mismo que su hermana a Orula. Él les preguntó que cómo se llamaban, ellas respondieron que: Ibolla y la otra Ibochiche. Cuando Orula llegó a casa, le dijo al Rey, que si los otros babalaos del pueblo no pudieron adivinar lo que él preguntaba, como el Rey quería que él, siendo de más lejos lejos pudie pudiera ra adivi adivina nar. r. Que Que él (Oru (Orula la)) no podr podría ía adiv adivina inar; r; que que eso eso que que él tení tenía a (fingiendo que era hija suya) y que decía que estaba en estado no era más que una muñeca de trapos que él no tenía más que tres hijas. El rey se quedó encantado de cómo Orula había adivinado su engaño y le hizo grandes regalos. Por eso Orula cambió el saludo que se le hacía de moddukue por el Iború, Ibolla, Ibochiché, que es como se saluda hoy a los Oluos.
OTRA HISTORIA DE ORULA
Orula tenía un hijo que se llamaba Ocuequeña, y la Muerte tenía otro que se llamaba Alé. Ocuequeña y Alé siempre se odiaron. Un día por la mañana Orula estaba registrando el día y le salió que lo venía a visitar la Luna. El hijo de Orula se enteró que con la claridad de la Luna querían matar a Orula. Alé oyó que la Luna visitaría a Orula y se lo fue a decir a la Muerte y ésta pensó que con la claridad podría sorprender a los curiosos que saldrían a ver la Luna, ya que ésta hacía tiempo que no salía. Pero el hijo de Orula y de la Muerte se encontraron y se fajaron. Ocuequeña se enteró de lo que planeaba la Muerte si salía la Luna y fue a decírselo a Orula para que la muerte no lo ganara. Orula llevó al camino real por donde venía la Luna comidas de todas clases con bastante manteca de corojo y fue tanta la cantidad de auras tiñosas que bajaron a comer lo que había en el camino real que la luz de la Luna no se vio esa noche en el pueblo, y así Orula le pudo ganar a la Muerte.
HISTORIA DE CHANGÓ Cuenta la historia que Changó fue a ver a Ochún y ésta le dijo: Eluekon, es posible que un hombre tan elegante como tú no le dé vergüenza vivir con una mujer defectuosa. defectuosa. Qué mujer, mujer, le respondió. respondió. Obbá, contestó contestó Ochún. Obbá Changó (maggué aladó y yina). Y todo se averiguó. Changó el pañuelo blanco con el que se tapaba Obbá la cabeza cabeza vio que le faltaba faltaba una oreja. ¿Qué ¿Qué has hecho, Obbá? Obbá? Le preguntó preguntó changó “Obbá odí etí” (no te abandonaré) serás mi principal, pero como te has mutilado no viviré más en tu casa. Obbá reclamó judicialmente a Changó. El juez, que era Orischaoco Orischaoco (San Isidro), Isidro), el que falla falla los pleitos de los santos. santos. Changó explicó explicó porqué motivo abandonó a Obbá. Después del juicio Changó la llevó al cielo, por eso no baja a ninguna cabeza. Si Obbá “Yuru” baja es solo para llevarse de este mundo a algún hijo. Como mujer legítima de Changó, (Obbá Seré, Changó Iloro) se le canta. Es tan tremenda como él y Changó siempre siempre consultaba con ella. ella. Está en el cementerio, cementerio, al borde de las tumbas. Cuando se baila Obbá, laque baila se lleva las manos a la cabeza ocultándose las orejas. En una fiesta batá en que estaba bailando Changó, Ollá fue a llevárselo, pero el le enseñó la cabeza del carnero y ella se asustó y se fue. Obbá, por propia voluntad voluntad y para amarrar a Changó, se cortó la oreja y la echó en el quimbombó, pero Changó vio la oreja cortada nadando en el caldo y se marchó. Entonces Obatalá cubrió la cabeza de Obbá con un pañuelo blanco que ella no se quita nunca. Estas diosas están enemistadas desde entonces. Obbá, que adora a Changó se llama Obadimelli, cuando esta en la tierra de su suegro Obatalá; Obakoso, cuando está en la tierra de Kosé, Olufina. Chan Changó gó,, que que cuan cuando do pequ pequeñ eño o se sent sentab aba a en las las pier pierna nass de Obat Obatal alá, á, no ha perdonado a Ollá (ella fue la que le dio el consejito de la oreja) aunque hay quien dice que fue Ochún. Una leyenda explica porqué las palmas, más que los árboles, son blanco de los rayos. Changó subía a una y desde allí se comunicaba por señas con las mujeres con las que tenía relaciones secretas, para evitar la sospecha de Ollá y el temible enojo de la diosa. Changó supo inmediatamente que Ollá había subido a lo último de la copa y dedujo que la diosa estaba alerta y a punto de descubrir sus secretos. No la requirió pero llenó el árbol de lagartijas, que asustan a Ollá, de manera que cuando esta volvió a la palma y comenzó a trepar, innumerables lagartijas pardas y verdes se deslizaron por el tronco en todas direcciones direcciones y la diosa en su azoramiento azoramiento y por nadería quemó la palma de una centella. Desde entonces las palmas son víctimas de los celos de
Ollá, defraudada por la evidente complicidad de las lagartijas alcahuetas que le impidieron llevar más adelante sus pesquisas.
OTRA HISTORIA DE CHANGO Una vez Changó adivinaba en público y un cojo leproso que oía su palabra le preguntó: porqué no me dices algo, no quieres adivinarme. Te diré, le contestó Changó, yo tengo un hermano y un medio hermano mayores que yo, este medio hermano eres tú. Escucha ahora. Donde nací no pude vivir. Hoy me llamo Oni Changó pero vivo en tierra ajena. Tu porvenir y tu suerte están lejos de aquí, vuelve las espaldas y vete, atraviesa el monte y encontrarás donde reinar ¿Cómo voy a andar por el mundo en el estado en que me encuentro (aquel hombre era Babalú Ayé). Entonces changó se dirigió también a otro hombre que se hallaba también presente (era Oggún), su otro hermano, acompañado acompañado de dos perrazos, le quitó los perros y se los dio a Babalú Ayé. Oggún se lo reclamó después a Changó. Oggún tiene muchos perros y Changó muchos caballos. caballos. Por esta acción los dos guerreros se mantuvieron mantuvieron en discordia.
OTRA HISTORIA DE ORULA Una de las veces que tuvo que esconderse de sus contrarios contrarios porque querían cortarle cortarle la cabeza, introdujo Changó en casa de Ollá, su concubina oficial. Sitiaron la casa y no había manera de escapar. Changó vaciló aquel día y entonces Ollá se cortó sus trenzas y se las puso, lo vistió con sus ropas, lo adornó con sus prendas e hizo correr la noticia de que ella ella iba a dar un paseo (Changó y Ollá Ollá tenían los mismos cuerpos). cuerpos). El salió salió vestido vestido de mujer. mujer. Altane Altanera ra como ella y saludando saludando a todo todo el mundo mundo muy ceremoniosamente y sin hablarle a nadie (Ollá es muy seria). Los enemigos de Changó muy respetuosos creyeron que era la santa, le abrieron paso a Changó y pudo escapar. Cuando ya no tenía peligro, salió Ollá de verdad y ellos se decían: ¿pero ¿pero qué es esto? Que Changó Changó se nos fue de dentro dentro de nuestr nuestras as manos, manos, con las trenzas trenzas y el traje de Ollá. Con esta vestimenta vestimenta es como se adora a Santa Bárbara Bárbara en las iglesias católicas.
OTRA HISTORIA DE CHANGÓ Se dice que Changó llegó a la tierra de Yemayá y sin saber que era su madre la enamoró en una fiesta. Yemayá le dijo que ella también lo quería y que fuera a verla a su azul grande. “Aquel que ves allá lejos esa es mi casa”, y le señaló el mar. ¿Hay que ir allá? Le dijo changó. Yo no se nadar pero si me llevas voy. Caminaron hasta la orilla, orilla, tenem tenemos os que ir más lejos, lejos, le dijo dijo Yemayá. Yemayá. Yo no se nadar volvió volvió a decir decir Changó. Yemayá saltó a su bote, hizo entrar a Changó. Yemayá se tira y baja hasta el fondo, levanta al hundirse una ola grande, vira el bote y Changó cae al agua, se agarra al bote y lucha por no ahogarse. Yemayá vuelve a la superficie. Ve la desesperación de Changó que grita y pide auxilio, pero ella, quieta, riéndose de él no lo socorro. En eso llega Obatalá (con los pies apoyados en el majá) y dice: Yemayá, no permitas permitas que tu hijo se muera: adyacuá adyacuá omodukué onisaggó. onisaggó. Contesta Contesta Yemayá, alekatta oni faba orischa nigwa. Cuando changó no podía más Yemayá lo sostuvo sostuvo en el agua. Te voy a salvar pero en lo adelante respeta respeta a tu illá (cofiedeno (cofiedeno Ollá mí), dijo
Changó que significa: yo no sabía que eras eras mi madre. Yemayá Yemayá enderezó el bote y lo ayudó a entrar. Entonces Changó ante los dos santos reunidos preguntó cuál de los dos me trajo al mundo: Obatalá (dijo Yemayá) yo te cuidé pero ella te parió. Changó y Yemayá se abrazaron en el mar y cuando hay batá y bajan estos dos ochas, Changó (que dice después de Olofin) en el mundo no hay santo más grande que él (layé layé mi sagguó), se achica ante sus madres, las respeta a las dos y las dos lo amansan cuando se arrebata.
HISTORIA DE OCHÚN Dice la historia africana que Ochún en la dueña de Oro, del río, la mensajera de Olofin, que por su intervención salvó el mundo, la niña mimada de los santos. Tiene entr entre e sus sus múlt múltipl iples es face faceta tass la de haber haber hech hecho o la prim primer era a lámp lámpar ara a de cala calabaz baza a (bailando con ella en la cabeza con la luz). Ochún empezó a hacer milagros curando curando mujeres en el río con calabaza y millo y en uno de sus milagros aparecieron los jimaguas y le hicieron Oro con rezos, santos cascabeles y campanillas fueron cantando hasta un calabazar. La calabaza es vientre, por eso el que padezca del vientre no debe comerla mucho). La primera cazuela de Changó fue una calabaza (mucho antes de la cazuela de barro), la gangá se guardó en una calabaza. Después del diluvio diluvio los babalaos babalaos registraron registraron en Oyó para averiguar averiguar quiénes serían serían los reyes. A Babá bajo el nombre de Aboyi le dieron el reino de Dahomei, pero no sabía ningún camino egueyuko (manigual) comenzando las cosechas y nació la calabaza, que señaló el camino de Oyó a Dahomei, bendijeron el terreno, le dieron de comer e hicieron la ciudad. Quedó Babalú Ayé en Dahomei Dahomei como rey (Asoyi fe mayi, agronica, nobitasa. Todo el mundo tocó el suelo con las manos y el rumbo lo dio el tallo de “alaguede”. Ochún guarda su brujería en ella y su brujería y dinero lo guarda dentro de una calabaza en el río.
OTRA HISTORIA DE OCHÚN Ollá quería a Changó para ella sola pues sufría sufría cuando salía éste. éste. Para impedir que se fuera de su lado, llamó a los muertos, rodeó la casa de Ikus y así tuvo a Changó prisionero. Cada vez que éste abría la puerta tratando de salir, los muertos venían a su encuentro chillando ifulli. Changó se retiraba y cerraba la puerta. Un día que Ochún fue a ver a Changó en ausencia de Ollá, éste se quejó de la situación en que se hallaba. Ochún buscó una botella de aguardiente, oñí y efún, pintó a Changó con cascarilla y al muerto que estaba de guardia la puerta lo emborrachó con Otí y lo endulzó con oñí, coqueteándole al iku y este empezó a enamorar a Ochún, creído que iba a conquistarla, mientras Changó pintarrajeado de blanco se pudo librar de los muertos que no lo reconocieron y escapó de Ollá.
OTRA HISTORIA DE OCHÚN Ochún salvó a Orula en cierta ocasión con cinco pañuelos, ya que sus enemigos querían matarlo por envidia.
Cuando Cuando Ochún Ochún se enteró enteró dónde dónde estaba estaba Orula Orula prision prisionero ero,, present presentándo ándose se ante ante el carcelero, carcelero, el cual emborrachó emborrachó con otí y endulzó endulzó con oñí, quitándole quitándole luego las llaves llaves y se introdujo donde estaba preso Orula a quien disfrazó con los pañuelos y según dice la histor historia ia el último último de los pañuel pañuelos os era el menstr menstruo, uo, quedand quedando o comple completam tament ente e desnuda ante Orula que al verla así se enamoro de ella, llegando a ser Ochún su mujer después de ella haberlo liberado de su encierro.
OTRA HISTORIA DE OCHÚN Se dice en esta historia que Obatalá hacía todos los esfuerzos junto al resto de los santos tratando tratando de sacar a Oggún del monte donde éste se había internado. Cuando ya todos los santos habían fracasado en su empeño de sacara Oggún del monte, se presentó Ochún ante el bravío guerrero sacándole del monte para lo cual utilizando una jícara con oñí, cantándole y poniéndole oñi en los labios él fue siguiéndola detrás hasta la ciudad y allí lograron encadenarlo y llevarlo ante la presencia de Obatalá. De esta forma triunfó Ochún donde los demás santos habían fracasado.
OTRA HISTORIA DE OCHÚN Dice esta historia que estando Ochún en un pueblo de África, había vaticinado que lloverían del cielo bastantes monedas, y el pueblo salió y las recogió. Más tarde dijo que llovería alimentos y el pueblo salió y los recogió; después dijo que llovería machetes y todo tipo de armas, pero nadie las recogió, saliendo entonces Ochún y las recogió. Más tarde hubo una guerra y la gente del pueblo no tenía armas para defenderse y tuvieron que comprárselas a Ochún que se quedó con el dinero.
OTRA HISTORIA DE OCHÚN Se dice en esta historia de los africanos que Olofin al repartir los achés, le concedió a Babalú Ayé la potestad de ser el dueño de las mujeres, o sea, de ser el que más mujeres conquistará. Babalú Ayé se envaneció y no quiso respetar la abstinencia de los Jueves Santos. Por ese motivo se hubo de enfermar de lepra, lo cual le costó la muerte poco después. Ochún fue a ver a Olofin y le rogó por él, logrando que Olofin lo resucitase, por lo tanto San Lázaro en África es un santo que ha resucitado de entre los muertos. Por eso los hijos de esta letra donde habla San Lázaro personalmente son hijos de él y tienen que ver con los muertos.
LA HISTORIA DE UN GALLO KIKIRIKÍ Había un hombre que tenía muchos animales en la casa y también tenía muchos familiares que vivían con él en su casa. El tenía de todos los animales. Un día se enfermó enfermó un familiar familiar de la casa y se puso a la Muerte. Muerte. Todo el mundo estaba triste triste en la casa menos el gallo kikirikí, el cual no tenía porqué estar triste. triste. La enferma enferma estaba al borde la muerte y es que ésta quería llevársela. El kikirikí no estaba triste porque él conocía el lenguaje de los animales por eso estaba sin novedad.
Un día el perro le habló y le dijo. No te huyas que no te voy a hacer nada, porque la señora del amo está enferma y nosotros no debemos estar correteando, y el kikirikí se sonreía y decía: “qué cobarde son todos, en el momento que el señor los necesita es cuando ni uno solo solo sirve”. Llevó Llevó el día en que la Muerte Muerte se decidió ir a buscar a la señora. Cuando llegó, todos los animales se asustaron, el ganso gritaba, el gato maullaba, el perro ladraba, el gallo grande cantaba, en fin, todos los animales gritaban y le huían a la Muerte, Muerte, pero el kikirik kikirikíí (que (que era entre entre todos todos el más atrevido atrevido y que a todos se les cuadraba) se enfrentó contra la Muerte y en uno de los revuelos que le tiró se le quedó enganchado una pluma suya a la Muerte. Esta al ver la pluma se asustó (porque (porque no sabía qué era aquello) y se fue corriendo, corriendo, cada vez que se veía la pluma corría corría más y así de esa manera el kikirikí kikirikí ahuyentó ahuyentó a la Muerte de la casa. casa. La enferma enferma se sanó y el dueño de la casa se dio cuenta que el animal más útil que tenía tenía en la casa era el kikirikí, el lo sabía porque entendía el idioma de los animales. Así que si usted puede, p uede, tenga en su casa un kikirikí ya que es bueno para usted y sus familiares, si estos están en su casa. En cambio, no tenga nunca gallinas malayas, ni grifas, ni gallos grifos, porque si usted es mujer nunca tendrá esposo y si es hombre nunca tendrá mujer. Las palomas la pueden tener los hijos de -8, Elleúnle; -10, Ofún; 9-9, Osa Melli; -7-7, Oddi Melli; -3-3 Oggimda Psa; -3-5, Oggunda Osché. Si usted es hijo o hija de -5-5, Osce Melli, no vaya a matar hormigas y no permita que entre en su casa otro animal que no sea el canario.
RELACION DE ALGUNOS SANTOS Oloddumare Obba Moro Olofin Elegguá Osaín Oggún Ochosi Obatalá Ollá Aggayú Yemayá Ochún Orula Babalú Ayé Ñañaburugu Orischaoko Oddúa Obba Ochagrina Dada Yewa Aguema Los Ybellis
Dios Jesús de Nazareno El Espíritu Santo Anima so sola, Sa San An Antonio, Sa San Ro Roque, Ni Niño de de At Atocha, Sa San Pedro, San Pablo San Silvestre y San Antonio, San Rafael en el campo, INLE en la ciudad. San Pedro y San Juan San Norberto La Virgen de las Mercedes La Candelaria y Santa Teresa San Cristóbal La Virgen de Regla La Virgen de la Caridad del Cobre San Francisco de Asís San Lázaro Nuestra Señora del Carmen San Isidro Labrador San Manuel La Candelaria (en La Habana, Santa Catalina) San José Nuestra Señora del Rosario Santa Clara de los Desamparados Santa Filomena San Cosme y San Damián
Iroko Changó Oke Eschu Efru-Elefuro Inle Aguidai Olosi
La Purísima Concepción Santa Bárbara San Roberto San Miguel Arcángel Santa Ana San Rafael en La Habana, San Ambrosio en el campo San Bartolomé El diablo
La comparación de estos santos con los santos de origen africano la han hechos los criollo criolloss por ser estos estos la mayorí mayoría a de los católicos católicos o cristi cristiano anoss por pertenec pertenecer er a la Iglesi Iglesia, a, por las formas formas,, costum costumbres bres,, hasta hasta por sus vestua vestuarios rios,, han hecho hecho estas estas compara comparacio ciones nes,, ya que los africano africanoss si siquie siquiera ra sabían sabían leer para así conocer conocer la historia de Santa Teresa de Ollaza, Ollaza, de Santa Bárbara ni de otros otros santos del santoral crist cristia iano. no. Pero Pero a travé travéss de los los tiem tiempos pos s fuer fueron on gene general raliza izand ndo o y hacié haciéndo ndose se comparaciones. Los africanos vieron que los mismos días en que ellos celebraban sus fiestas de unos de sus dioses, los católicos, a su vez, estaban celebrando la fiesta de uno de sus santos. Usted no tiene que pensarlo mucho. Si se da cuenta, el santoral africano data de siglo atrás mientras que el cristianismo es más reciente. Esta es la razón por la cual los criollos fueron los que más se ocuparon de buscar un sincretismo entre los santos africanos y los santos católicos. Por esta razón, Ollá Llanzá, que se celebra en La Habana el dos de febrero (es el día de la Candelaria) el 15 de octubre es día de San Rafael (Osaín), pero en la capital es el día de Inle. El 24 de junio, en el campo, es el día de San Juan, pero en la capital es el día de Oggún. Sin embargo, ese día de Oggún en el campo no lo tienen como tal, sino el 28 del propio mes y también como el día de Elegguá (San Pedro y San Pablo). Por eso no es de extrañar la confusión que para algunos representa esta disparidad de cristianos. Todos los hombres que viven en núcleos familiares sociales de más o menos grado de civilización, civilización, necesitan necesitan del lenguaje lenguaje para exteriorizar exteriorizar sus deseos o sus ideales. Luego Luego entonce entoncess los lucumíes lucumíes también también tienen tienen su lengua lenguaje je que es distin distinto to al de sus vecinos cercanos y hasta en los mismos lucumíes existen diferentes dialectos que son los siguientes: El Yesa, el Tecua, Aguadó, Ara-Usa, Ara-Taco. Este último es el que utilizamos en el libro y a continuación brindamos las palabras más usadas del dialecto lucumí Ara-Taco en nuestra religión. Agua Adelante Ante mis ojos, no Arco iris Allá tú Aguja Abanico Acuérdese Agacha los ojos Agachó la frente
Oni Suayú Oyú-niniosi Oronú ochumale Iguo lona Aberé Abebé Mobagué Ofoyudé Ofuyó eledá
Ajos Aceite Agua de lluvia Allá lejos
Alubezaguere Adí Olleure Iguelen aní
Agujero Acariciar Así como grita Es de grande Agrio Aquí estoy
Ode Mababé Oguetitó Ñisoreillá Loun Becó nileí
Aquí Acostumbrado Almidón Allá bueno Abre A comer Abuela Arrancar Acompáñame Agua bendita Arrodíllate Acostado Alza Astro Apúrese Anjá Amigo a fondo Andar Boca Brazo Bofe Buenos días Viento Bueno Beber Borracho Blanco Bollo grande Baile Brazo Babosa Bate Batea Bonito Basura Camarón Corazón Caballo Cucaracha Canario Comida Candela Caliente Cuero Cenizas
Becó azamini Raguca Obatilé Bia Gualleún Illá Torun ori Oguedemí Oní olofi Cúle Dubule Didé Otonaguá Nurasí Monijey Oré gumá gumá Vodé Enú Acuá adofí Ocú olliero Afefé Odá Mamú Ocu majana Oibé (persona) Abebé (batirí) Oyeré Ibín Ibín Cumanbé Vuadé Televí Icen Edé Ocás Echín Enagó Lleún Icán-iná Boná Aboreo-igue Bebeina
Amigo inseparable inseparable Amigo mata mata amigo amigo
Niqué Teille oudoce Ofo tele Lain Checheú Babalá Adún Ogurullenú Oré Eñí Eú Dedebalo Ibaé Omí erududú Omí lasazán Oré catá catá Oré ocuá oré
Adonde Barriga Bollito Buey Buenas tardes Buenas noches Bien Bebida Boniato Blanco (color) Bebida de color Bandera Bomba Bulto Bien muy bien Baño Buen camino Basurero Cabeza Carnero Camaleón Codorniz Comer Caldo Casa Calor Carbón Cama
Youn Ifún Ocará Malú Ocú ollumeo Ocú azán Odará iré Otí Cucunducú Fun fun Otí loro Asia lequé Lazazan Cuanducú Odá modá Uniere Onare Icen nicún Erí Abué Aguema Acuá Acuaro Llilé Obé Ilé Barausa Edú Ení-igui
A mi sí Acto sexual Allá malo Aire Andar Abuelo va Año Atrevido Amigo Amarilo Algodón Acuéstese Alto Agua de café Agua bomba
Efún Eleguedó Cocotava Cucuá Cofagua Fofo Muraguiri Lequé Aván Elo Ceúma Odanico Olodumare Ollineri ilá Ori Ñale lequé Azán Azán ni Erán Malú Erán acucó Ibe chagueré Allé cuejera Cuerí Afofó Chismoso, conversador Elenú Eran guiguí Chorizo Tori Dio Olofin El santísimo Llican Dos cosas iguales Ení la Espalda Tillá tillá Discusión Fumí Dame Dobule Dormir La Ozún Durmiendo Ibaé bayé tonú Descansa en paz Chileviafo Dos testarudos melli Dos narizudos no se Odafó imúz pueden besar Guanguará Dueño, hable claro Dos personas fuertes Melli agadagó Isumo Esposo Malú o Elefante allanacú Allaí El año que viene Cascarilla Calabaza Cachita Colorado Cójalo Cerrado Corre Collar Canasta Cuantos Catarro Cocotazo Con favor de dios ¿Cómo se llama? Cacao Cuentas de collar Costumbre Costumbre de ellos Carne de res Carne de gallo Camino Cascabeles Concha de caracol Chucho Chismoso
Cazuela Caldo Cuchillo Claro Cállese Cielo Cuchara Ciego Cochino Comerciante Caracol Cadena ¿Cómo está? Ceiba Coco Caña Cállate Cubo Carnes Corona Caminar Chiva Chivo Chino Maracas Chulo De Dios Diablo De otra Dientes Día Donde Dinero Dale Despacio De prisa Dueño Demasiado hace Dulce De lado Espíritu Esposa
Icoco Solve Obé Guangua Otonaguá Cuacó Ofallú Eledé Arboní Allé Chabá Iguandé Araba Obbi Iguerí Meguicán Bade Erán Adé Chon chon Bure Aúco Filani Cheré Isú Uón oloddumare Alosi La odé Eñé Yodo Illecún Oguó Babanacuero Molo moló Muraquiri Loco mola Aseyú mocho Oquiquie Yicán yicán Eggún Isumo
El cuerpo de la persona
Está pelando contigo Enséñamelo Estoy bravo El que siente algo El que se mueve Dinero saca tragedia Envidioso Entrégamelo El hombre mata Enfermedad Escalera Entra Está bien Espacio Fondo Fracasado Frijoles Flecha Falso Familia Frente Gato Gallina Guabina Guajiro Grandísimo Guanajo Guerra Género Género negro Género punzó Harina Hueso Húmedo Hueco Hierro Huevo Hombre Hijo mío Hizo Hoy Hay enfermo Hierbas Y su casa
Uón ni erari Otocomí Afín jami Aí mabinú Bambeni Chebo Ogué uón nindillalé
Eguemí Guaní comió Evincuami Anona Chaso Ueleé Modá Lodé Gumá Sarandá Jeré Ofá Dudaqué Agueré Eledá Olevue Adié Ellare Allabadó Gagá Toló Toló Trullá Achó Aché erú Achó cu cuá Amalá Egugú Omiche Sodo Laguadé Eñiadié Ocuní Omó mí Mose ona Yodí Oúnve ano Egue Uónile
El campo El mundo este El otro mundo Está embarazada El mar El río Enemigo
Uón ni areoko Ellé guey Allé onú ni oleñú Uón ni ocun Uón ni losa Otaco
El viento Escopeta Espejo Embarazo El pueblo Esclavo Extensión Escoba Fresco Fracasó Falso Firme Fuerte Favor Favor grande Gallo Guinea Gracias Güiro Guía Guía de melón Gente Género blanco Género amarillo Gancho Garganta Hasta otro día Hace demasiado Hechicería Hablar Huevos Hijo Hermano (a) Hizo Hijo del rey Hoy no puedo Hígado Y su casa
Uón ni Afefé Ebá Agueña Aleñu Uón nilú Aguadá Lodé Aquisa Tute Obesebí Oquesorde Loasó Agadagó Mokuezun Modukuesún Acucó Etú Modokué Agué Gaisollú Gaisollú ollé Onia Aché fun fun Aché Eñí Ogán Gunuguache Odí olomi Ise Aseyú Everá Soró Cocoroadié Omó Abure Loguosé Omobá Llodí cosi Adofá Ilé Iguo
Y su casa Jicotea Jugar Lavar Loco Las tetas Lagartija Lo dio Lo hizo Luna Levántese La mujer parió Le dije Lo agarró Lo tumbó Lo aguantó Lo llamo a usted Llovió Lloviznando Llama Llegó Llegó a mi casa Yo lo vi Yo sí Ya llegó Lleno Yo sabía Muertos Mecha Mano Mano izquierda Excremento Madre Mayor Majá Mañana Mundo Muchacho Echó a perder la religión
Muñeca Mar Manteca cerdo Maíz tierno Malanga Misa
Ilenco Ayapa Sire o sireré Misí Asigueré eledá Emú Aguema Uón Tori Uón guaso Usucán Didé Obini lovi Emiché Cogagua Equimale Iveo Macuedé Iguo Ollereguá Olleureguajere Cuedé Guasi Megualami Olluminí Aiqué Gaidele Baguiri Nanllé enfé Ikus Acará Legué Legué osí Cheré añaga Illá Abuá Beelló Odelá Allé Omó abusallé Ochaní Aguema, ogueré Ocún Etáelodo Aguadó tut Ichú Oro
Jutía Jícara Jabón Limpiarse Lengua León Loro La Leña La tierra La zanja La plaza Lo cogió Lazo La agarré Lo puse Loma Laguna Lloviendo Llamó Siéntese Yo no Yo lo dije Yo Llegó el mar Lluvia Llorar Yuca Murió Muerte Mano derecha Miembros Mujer Muchacho Mono Madrugada Malo Me ayudó Me acompaño Manteca corojo
Ecú u oquete Iguá Oché Saraundere Inú Ecunlá Coidé Uón Egué igui Ará Guaseodo Melollá Oguesó Llaga Oguede Ive Oke Ibaode Olleregüey Mocuedé Lloco Acisi mi muche Aí Guancelokún Olleuro Socún Baguadá Otokú Otokú Legué otun Ocoguirí Obini Moquaquere Oboe Oslé Ofodá morerá Oguemi Oguedemí Epó
Manteca cacao Maíz Maíz seco Melón Mango
Etáoro Aguadó Aguadó guiguí Ollé Oroe
Mis costumbres Mi pueblo Mundo de hoy
Azán mimi Ilumí Allá guesi
Me ayudó Mayor de la familia Moverse
Ogué mini Ocuá buyurule Agué agueré Burucusele
Majadero Mi mamá
Ogurú Illá mi
Majadero en la casa Machete Mentiroso No se pueden besar
Aguruyule Adá Oroní
Mata con su revolución
Mulato Me ayudó en la guerra
Me van a dar algo Matar Mi querido Mi papá Majadero en el otro mundo
Misa en la iglesia Maní Me llamó Mesa
Ilé mi Achése mi lema Orile Olofin Epán Mokué de mí Guataco
Naranja No hablé contigo No me gusta No tengo No paso nada No puedo No sabe
Ozán Omebe Caguemí Osi Cabiosile Aí cosi Asu agufó Ollú Ollú cuará cuará Letó Odi ilemí Eramí letiguemí Lana Amilana Guoleti
Mi casa Me puso aché en la lengua
Melli imúz agadagogo osi
Mentira Mandado a buscar Nariz Niño Negro No hable así No se mira
Iron Metiloguague Imúz Moquequeré Erú Coche osí
No me olvides No sirve
Mabagé Ofedá
Ojos Ojos brillantes
No se desespere Ñame Ojos abiertos Ojos cerrados Orina Por su puesto
Coyusoun Ichú Ollú cuará Ofellú Ote Ogó Fadesio
Orejas Otro día Hormiga Óyeme Ola Olas de agua Oíste
Objetos chicos y hondos como jícaras
Pelo Padre Paloma Perro Pescado fresco Ponlo arriba Pollito Pescado Por detrás de mí Pasado mañana Palo
Coco Cococa caib ibó ó osí
Egú Babá Ellelé Allá Ellá tuto Cade Adielo Ellá Idi la mado Otunlá Igui
enfe enfeyú yú
Acuamadé Ogué mi nilla Ogua guilleyumi Ocuá Ocolomi Babá mi Agurullemu
Olas del mar Ojo de agua Oro Palabras pescuezo Porrón Pimienta Pintura ado Poco a poco Poco Polvo
Omilanaocún Ibuedo Afefá Aché Gunuguaché Otun Ataré Ozún Meló meló Dié Afeché (para bueno)
Polvo Plátano Palangana Plato Plato
Ofún Oguedé Gade Gade agué
Poquito Péinelo Poquito Para Pintado Piedras Persona Pato Paciencia Pueblo Pelado Puente Párese firme Párese a la vista Perdónelo Que Qué hacemos Qué hace Quién lo trajo Quién te enseñó Quitó Qué es eso Rebaño Ruéguese Robo Reloj Revolucionario Revolucionario Carnero Rodillas Ratón Rey de sabana Rebosado Revólver Repartió Rosita Rabo
Titicú Guase laerí Quqún Arere Guaefifi Ocutá Onia Cuecuellé Amazoún Ilú Ofarí Cahe ode Durolaose Adó achureo Cofiedenu Qui Cuelé cuelé Quila se Tanimoguá Quina ofiji Coleguade Ibo siaré Alá Cobo ollee Agogo aguruyonú Ogurú Obue Onocú Ecúte Obanigue Adé Ituborá Daguadí Niña Oleñi Aguro tente
Revolucionó el otro mundo
Aguán (forma vulgar)
Pañuelo Pan Ponlo Paño Peinado
Guelé Oca Guasi Acho Larí
Peine Plato Pedacito Pintar Píntalo Piedra grande Parió Palabra mía Plantillero Pueblo ciego Pelado Párese derecho Párese delante
Elaerí Abuá Quéun Fifí Mochese ofifi Ocutá guanlá Loví Aché mi Afullalaza Ilú ofoyú Ofaerí Duro loase Adé churé Duro Suayú Téru Losí losí Allada Erro Ocolomi Allé Ibó si Icucocué Cobo erí Eborallillé Buruyule Guadé Oroyé Odaquéen Ogután Monucú Obá Gangaa lórun Burucú Cucurú Aguadé niña Tingui Afiza Menamana
Párese aquí delante
Quítalo Quieto Querida Quieto Querido quimbombó Qué paso Pequeño Ruéguese la cabeza
Revoltoso Revolución Rebosado Revoltoso Regular Carnera Rodillas Rey Redondo como sol Revólver Romper Rositas de maíz Respeto Rabo Relámpago
Rehilete Se hizo Seguro Sabroso Cintura Señorita Sábana Sala de mi casa
onú Laigué Mocheeona Ollaló Maimai Baradí Móndia Acholá Colladé ilé mi
Señora Sal Seco Se va ¿Se va usted? Siempre adelante Sube Sable
Mori Illó Guigui Moúnlo Boleni Geisolú Obeso Adá
Si no llueve, maíz no crece
Ollenú soco ni aguadó
Tiñosa Toro Tarde Beber Tierra Todas partes Tengo sed Trabajo Tu me gustas Todos Tumbó Tramposo Mujeres malas Uñas Usted ¿Usted me llamó?
Colé colé icolé Malú Cualimae Mamú Ará ecó Guelodé Eguegue mí Oro Guegué mí Bogué Equi malle Oquesodo Alacuatá Acana Iguó Igué me cuedemí Iguó monillé efe Ataná Tillu aguá Aleyo Umboguá Molo ilé Ollá Cuachumbanc hou
Usted lo conoce Vela Vergüenza mayor Visita Viene Ve a la plaza Vaya partiendo
Respeto al mayor Rana Sapo Santo Saliva Sangre Silla Salió
Tingui aguó Apolo Iguegueré Ocha Omiso Ellé Apotí Lladé
Se salió Señor Sí señor Sombrero Sombrilla Sábana
Lladé Móri Benámi Agueté Agueté llouro Nigue o ebó bisaguena Ogá Dodobalei
Saltando como muñeco
Soga Tírese Tiñosa Tarro Tigre Tiene Tinaja Tengo hambre Tragedia Todavía no se acabó
Traicionero Trampa Porfiado Tiró Tira Tallo de plátano Ternero Usted habla todo
Aracolé Ogué Ecún Uonbe Otunde Ebín cuso Elló Uón otiobusé Oquesodo Oquesodo Biafó Fiboceña Fibóe Odí oguede Aguadán Iguó Iguó mozec ozecu u era era taco
Un solo ojo
Ofeyú ocán
Viejo Ud. Lo compró Venado Vergüenza Ve a dormir Vino
Arubo Iguó medicuén Iguaní Tillú La Ozún Guano
Vicioso Venga adelante Vengan todos Va a salir Zapatos Médico Abogado Escribiente Policía Amo A los pies de Dios Puso la palabra en mi boca
Jefe de policía Dueño Con el permiso Salud Con el permiso de la casa
Quien está cantando Cantadora El permiso es suyo
Ocobe Adó achuré Bogué aguá Mónleo Batalsé
Ven Venga bien Va a salir Vino seco Va
Obachégun Obafeicita Feicitá Acheilú Yaguatina
Venga Viva Zanja Princesa Presidente Juez
Guasí Aguaré Oún nicollado Otí gui Unléni o moloni Agualona guangueo Cuasé ode Allobo Oba Omo coloba Ilú
Afaché semilé Obacheilú Locoloma A yuba Kimkamaché
Tropezón Se va Tres esquinas Cuatro esquinas
Toleí Osaní y osaoló Erita mera Erita merin
Para afamar a Changó le decían
Ogodó maculecué
Aggó ilé Mani mosullé Mosullera Aggolloá
Acabó bien Cantos Arriba
Embelse oloddumare
Tobi Sulleres Calucú
Saludos al nuevo año
Atodun fodun Atochu fochu Atpsi fosi
Año sobre año Mes sobre mes Semana sobre semana
EL BAUTIZO DEL ÑAME MOLANO ICHI ADUN (Voy a bautizar el ñame este año) La cabeza del ñame se asa y se le pone a Elegguá. Se le pone tomate, frijol de carita, arroz, manteca de corojo y 85 centavos. Después se parte el ñame en cuatro, se le unta manteca manteca de corojo y miel de abejas, se le pone un pedazo de carne de puerco y otro de res, después se le mata una paloma, un gallo y un pato; se le echa la sangre a todo el que esté presente y tiene que poner la lengua en el pedazo del ñame crudo. Se le unta sal, manteca de corojo, oñí y lo que sea de Obatalá, manteca de cacao, hay que hacer chequeta cuando se va a hacer ebbó. Cuando se le va a dar una guabina se coge un poquito de agua que queda en el plato y se riega toda la casa. Al río se manda un éco desbaratado con agua de guabina y se dice cuando se le echa éco al río: “no te lleves a mi casa para el río”. Ogueo codiré omo. Esto quiere decir: no te llevaré mi casa para el río ni para el mar. mar. No me me dejes dejes morir morir loca loca (o) ni cieg ciega a (o) por por favo favorece recerr a los los hijos hijos de Dios. Dios. Eban Ebaní, í, oddo oddo,, eban ebaníí olok olokum umu u ollá ollá reo reo to obba obbanil nille le funi funi mess messen en messen.
PARA BALDEOS Se prepara con lechuga, perejil, canela, agua de Florida y oñí.
PARA DARLE COCO AL SANTO Se empieza empieza con Elegguá Elegguá y se dice (echando (echando poquitos poquitos de agua agua en el el piso): “Omí tuto tuto,, ana ana tuto tuto tuto tuto ilé olodd loddum umar are e ayub ayuba a Ibaé Ibaé ball allé ton tonu to embelese oloddumare”. Después de echar el agua y decir estas palabras, se cogen cuatro pedazos de coco y se echan en los poquitos de agua, diciendo “obiní ikú, obiní elló, obiní ofo, aricú babagua” . Después Después se ponen los cuatro pedazos pedazos de coco en el suelo y con la mano derecha sobre todos los cocos dice tres veces: “ ilé mocuó Elegguá”. Los demás responden: acueda. Entonces se recogen los cocos y se le pregunta al santo lo que desea. Antes de tirar el coco, a la altura de las rodillas diciendo: “Ireo Elegguá, Oggún, Ochosi y Osun”. Una vez tirado los cocos, si estos cayeron en esta forma (0000) es Alaffía, esta letra dice que sí, que lo que se sabe no se pregunta. Si cayera (00XX) quiere decir que sí a lo que usted ha preguntado, que la letra es Elleífe. Si saliera saliera (00X0) (00X0) la letra es Etagua, por lo que usted tendrá que volver a tirarlos. Si cayeran nuevamente de esa manera sería Etagua Melli y dice que sí. Si cayera (XXX0) es Ocana sorde y dice que no sabe lo que usted ha preguntado. preguntado. Por último, si cayera (XXXX) a la pregunta echa echa la respuesta es NO, o hay un muerto pidiéndole algo, o está hablando con su cabeza o es un aviso de una mala letra. Se le llama Ocana-Ellecun.
DESPUÉS SE LE DA COCO AL SANTO Después de echar agua en el suelo se dice lo siguiente: “ Aché babá, aché yeyá, aché achedú, aché acordá, aché olúos, aché ollubona, aché mí” Después se van partiendo pedacitos de coco echándolo en los poquitos de agua y se Osché bilo, bilo, adagué adagué biang biangué?, ué?, babad babadon on adafú adafún n un dice lo siguiente. Osché Obbá Obb á alaqueta. alaqueta. Osché bile bile adagué adagué biangué biangué babadona babadona adafún adafún un babalao babalao alaque alaquetú tú ofigar ofigarellú ellú conall conallé é alaque alaquetú tú ofigar ofigarello ello comall comallé é alaqué ofigarello comalé alaquitú, obba…” (al santo que sea).
¿CUÁNDO SE LE DA TAMBOR A UN SANTO? Se le tambor a un santo cuando usted por cualquier causa lo haya ofrecido (por agradecimiento o haciendo solicitud de cualquier cosa para obtenerla. Cuando un santo se lo pida, en cabeza de otro. Cuando usted vaya a donde Orula y le diga el Oluo que tiene que darse a tal o más cual santo, por salud o mala situación o para obtener algo. Cuando en un itá o registro le salgan las siguientes siguientes letras, 2 tambor, 9 tambor, 5 tambor, 8 tambor. Cuando en una Lariche o un Adima el santo se lo pida por salud, por mala situación. El tambor es la música de los santos africanos.
También se le toca tambor a los muertos cuando se hace levantamiento de platos (que es la misa africana) o cuando por cualquier cosa Eggún lo pida para el muerto. Nunca se le toda dos veces seguidas, a no ser cuando halla un cadáver presente que por cualquier motivo halla que velarlo dos o tres tres veces, o tres noches seguidas como en África. En cuando se le toca a Eggún, se le toca un día, al otro día se hace una fiesta. Cuando usted haya tocado para un santo o a Eggún, si la música es gratis o paga usted debe procurar que de una manera u otra esos tambores salgan comidos. Llévele su derecho a Osaín (es el santo que tiene el tambor) y que a usted le conviene que salga de su casa alimentado. Cuando usted da un tambor tambor usted debe procurar procurar que esos tambores tambores le hagan un oro sin santo a su santo. Es muy importante el motivo de este oro seco (llamado así por los tamboreros) es Iku lovi ocha, que quiere decir El muerto parió al santo. Este oro seco es para los muertos que están parados delante del santo que se le está tocando y este oro seco debe ser siempre antes de las doce del día en que se celebra la fiesta. AÑA por tratarse de un tambor que no es igual a los demás (es un santo) san to) este tambor es de Changó, es de tierra Agodó , es un tambor de ciudad para fiestas. Este tambor se fabrica de una forma, o sus secretos para uno y para muerto, sus secretos son otros, pero con distintos secretos por eso este tambor que tenemos en Cuba no se puede tocar por la noche, porque de noche bailan los espíritus y es malo hasta para la persona que da la fiesta porque no se sabe lo que traerá esa falta. Por eso cuando usted toque un batá, cuando llegue las siete o las ocho de la noche debe detener esos tambores. Que despidan a los muertos con ellos con ellos y siga con otros si existe la necesidad de continuar tocando.
PARA DETENER A LOS SANTOS GUERREROS A Elegguá se le saluda por la mañana y por la noche en esta forma: se echan tres poquitos de agua en el suelo diciendo : “Omi tuto, alaroye, Aché babá, aché yeyé. O aché Olúo, Aché Aché Illá, Ollubona, Ollubona, Aché Illalocha baba baba loche.
REZO A ELEGGUÁ
Eleg Eleggu guá á Eschu Eschu bara baraqu quiq iqueñ ueño o alar alaroy oye e asuc asucum umach aché, é, aché aché babá babá Añagui kilo leyú, kilo fé, ariki babagua laroye . REZO A OGGÚN
Oggún Aguanillé oque Oggún arere cobú a Goñi orischa mayubareo . REZO A OCHOSI
Ochosi o de odemata malesí oque Aguanillé REZO A OSUN
Osun borosunganga laguesé Todos los lunes se limpia con un paño húmedo y se le unta manteca de corojo y se le rocía con aguardiente y humo de tabaco; se le echa maíz tostado, pescado y jutía ahumada, se le enciende una vela. Al lunes siguiente se le quita y se reparten entre papeles, se limpia con ellos a la persona y se botan en tres maniguas distintas. Se le pone frutas de toda clase, bollitos, pelotas de ñame (amasada con manteca de corojo), harina de maíz amasada con manteca de corojo. Cada mes un gallo, pollo o chivito. Así es como se atiende a los santos guerreros.
PARA HACER EBBÓ DE ESTERA PARA HACER ALGUNA ROGACIÓN
“Omi tuto, ana tuto, tuto ilé oloddumare ayuba ibaé ballé tonú to embelese oloddumare”. “Ebbó guire ateo oloddumare ”. Los presentes contestarán arufí rufí, arudandi dandi . “Esc “Eschu hu a Magu Maguan ana a chuc chuchu hugu guer ere e guere uere aguo aguo um umbo bo oton otonig igor oro o adaf adafun un Ob Obat atal alá á oni oni tani tani ebbó ebbó oni oni to aban aban esch eschu u bogo bogo aral arallé lé tobarabo ebbó a da moguisí bararí arun bararí ofó ade degante locún aba teto aba tete aba tete”. Se mallubará a todos los muertos hasta los babalaos que uno conozca diciendo al final: To laguá leguá de aré onú, que tocún de aguá to embelese Oloddumare ibaé balle tonú. Se mall mallub ubar ará á a los los vivos vivos que que a su alca alcance nce esté estén, n, dici dicien endo do así: así: Kimk Kimkam amac aché hé cama camari rián án cama camara rano no camá camá ofó ofó cama cama iña iña aric aricub ubab abag agua ua.. Moll Mollub uba a aceddá molluba acoddá illalocha oluo que cogualé. Después, rodando el diloggún por la estera se dice : “Laroye, akiluyú elebbó mi siallo, elebbó ni queni iború lechún, Obbi (a fulano de tal) que mose ebbó, que balle bogbo jujú bogbo temullén bara qui elebbó de ojuani a rufi aguadedé, Ojuani Abelarí aguadedé, Ojuani abalaría aguadedé”. Después se harán los rezos siguientes y por su orden. Ocan Ocana a Sord Sorde: e: Ocan Ocana a Sord Sorde, e, sord sordeom eomá, á, sord sordeog eogué, ué, batio batioso sord rde, e, aricubabagua. Ojuaní Ojuaní:: Ojuaní Ojuaní,, chobi, chobi, obbe obbe gu guasi asisa, sa, chimic chimiché, hé, aguó, aguó, aguaddé, ofeyú ellá aguaddé, ofeyú agganam achemiché, addie banebere, cana mafetán . Ellioc Ellioco: o: Ellioc Ellioco, o, temi temi tan, tan, temi temi tiche, tiche, monigu monigueloc elocún, ún, telarocún temerán, Temi tiche moniguelocuán. Oggun Og gunda da:: Oggun Og gunda da gu guede ede tetlí tetlí tetellí tetellí faranl faranllé lé afesul afesullé lé beosulenu Osu. Ofún Mafún: Ofún mafún que mafún eleguedé eleguedé Ofún saro obirín,
Oke orilla adi Elleunde: Elleunde: olocha ati
Ofún Lara Lara Ofún soñori soñori efuru lo lo cocú efurú lecogué Arallé coletú. Elleunde Elleunde denden denden labolu labolu lenden lenden la bosí denden denden labo Colerí adaí boletí ada oguelese ada oboñu o unle
onife obi tibitire Ocurubuke oballe aún tototo a un bororo ototo belle epa afisenú. Elliroso: Elliroso aponagua acha agualodere adafun olodere rioloro tale Gale eniemururu capicapalenu adaode adaredo colle eleco odere Coloro tale tale obon aillá ala deré nofieraguó. Osa-Osa: Osa-Osa: Osa guo iguorí iguorí guó guó afonicú afonicú agué cose ya cosi congo obo Nichoro Ifá derebichoro ecún. Obbara: Obb ara: Obbara Obb ara ola bara ellebara ellebara quicate quicate coma cate cate arallé. Oddi: Odd i: Oddii achamá Odd achamá odima odima dima codima codima ikú codima codima arun codima elló. Quile codima cama na allé ollita guile collima colleOsche: Osche: Psche mullucú mullucú mulucú olleteba olleteba leguó leguó aché mulucó mulucú Lordafun acatampo lorí aché iballé deguá codidé sara uniere oguo Iba oguó iba omo iba yalorde abe. Ellilá: Ellilá: Ellilá Ellilá cheverá cheverá aganagalla aganagalla agabagall agabagalla a ocacún allagagabada quini Orischa Orischa quinchetiba quinchetiba otá lorifá lorifá quinteché quinteché iba ete quemado eté ikú Aquamacheté arún quecheté ofó quemachete elló. Canto : Larilá fitocheo Contesta: iba otá larira fitecheo iba otá MANERA DE CORTAR LA CARNE DEL ANIMAL QUE SE SACRIFICA AL PRESENTARLO AL SANTO
Las cuatro patas Las costillas El rabo El pecho La gandinga Los pedazos que se echan del vientre Las tetas Los testículos El cocote
Iteke ese acuá melli Igalla igata iaemi enuré aché Holón guengue erú Guengué allá Adofó adofí ocan Ifá dotú Ifá dosí aboñú Eñu Tichomo ocuní Allabala ikú allabala ano allabala
(ofó) El pedazo de la costilla pegado al pescuezo
El cuero
Manucú manucú aché Aguoreo o comunicú
ELEMENTOS QUE SE PUEDEN HACER EN EL ACHÉ DE OCHA Se puede hacer aché o polvo con: la cabeza de la jutía, de la paloma, de la guabina, de la jicotea. Aché con la cáscara del ñame (después de bautizado). Aché con las hojas de antípoda, de la hoja del bledo blanco de la hoja h oja del mango, de la hoja del egué orille, de la hoja del quimbombó (que es la verdadera casca cascaril rilla la), ), de la semi semilllla a del del cait caitel el,, de la hoja hoja del del vina vinagr grilillo lo,, de la hoja hoja del del culantrillo.
PARA PREPARAR UN OMIERO, ADEMAS DE LAS DISTINTAS HIERBAS QUE SE EMPLEAN, HAY QUE ECHARLE LAS SIGUIENTES COSAS: En una cazuela grande y nueva, se echan las distintas hierbas con que se va a hacer o sazonar el omiero. Una vez que las hierbas estén dentro de la cazuela se empieza despalillar (esto tiene su canto) y después de quitados todos los tronquitos se empieza a cantar para Elegguá y después para Osaín. Después que estén bien ripiadas y mezcladas estas hierbas con las dos manos (como si se estuviera estregando una ropa y echándole agua, cada vez que se mude, un canto. Una vez que se haya hecho el omiero, se acabará de llenar de agua la cazuela. Acto seguido hay que añadirle ecú, ellá, oñí, aguadó, pedacitos de coco. Siempre hay que sacar (antes de sazonar el omiero) un poco para Obatalá, que no se le echará manteca de corojo, sino manteca de cacao y cascarilla. Hay echarle tantas Pimientas de Guinea como el número del santo que se marca. Agua bendita y Yefá. Después se buscará una braza de candela y se dejará caer dentro de la cazuela y en ese momento el que haga esa operación dirá: Es mejor morir ahogado que quemado y saca esa braza de la candela de dentro de la cazuela. Acto seguido hay que echarle ecú. (esta operación también lleva su canto). Cuando estén echando el Yefá, el que lo hace dirá: Aché Olofin, aché oluo. Terminado esto hay que darle obbi a Osaín. NOTA: cuando se prepara el omiero de Babá no se le echa manteca de corojo y sí lleva manteca de cacao y cascarilla. PARA RECIBIR LA BENDICIÓN DE DIOS AL LAVAR COLLARES O CABEZA
Se dirá: Oklen agué arumbole illami (que quiere decir: válgame, Dios, en el cielo y en la Tierra). Para lavar la cabeza se dice: aqueibo aqueté agué omó, agué agura aricubabagua. Orí agueje aguñe tomireagué tomiré. Para enjuagar esa misma cabeza se dice: oyoromí togue la fichera.
LAVADO DE CABEZA PARA TENER BUENAS REVELACIONES Clara de huevo, estregándosela en la cabeza. Mientras se hace esta operación se mall mallub ubar ará á a los los muer muerto toss y los los sant santer eros os mayo mayores res vivo vivos. s. Lueg Luego o reza rezará rá desde desde Elegguá hasta el Ángel de la Guardia de uno mismo. Luego se enjuaga la cabeza con un cocimiento preparado con anterioridad de albahaca fresca, siempre viva, hierba de Orula, manteca de cacao y cascarilla, agua de Florida, ligada la espuma con jabón de Castilla se secará con una toalla blanca. Se dará ocho baños para que dé resultado. La campanilla en la mano, tocándola, hasta que la hierba esté disuelta. Después se cuela y se le echa oñí, se prepara de hoy para mañana. La persona que sea tiene que venir antes de que salga el Sol, con un peine nuevo, toalla y palangana nueva, un jabón blanco. Se le lavará la cabeza con jabón blanco y agua clara y el peine se le echa en el agué. Luego se le enjuaga la cabeza, se coge la jícara con agua en una mano y en la otra la campanilla (si es para santo hembra) si fuera para santo macho el Agogó. Durante los días que marque se le echará esa misma agua, todos todos los días, antes antes de que salga el Sol. Esa persona, sea hombre o mujer, no puede tener contacto sexual esos días, ni puede darle el Sol en la cabeza) cuando se termina se le entrega entrega el peine (que ha sido lavado). lavado). Nadie puede peinarse con él. Se untará en la cabeza nada más.
PARA LAVAR CADENAS O CABEZAS Se lavará egué de Obatalá y cuando son santos fuertes como Changó, Ochún, Ochosi, Oggún, Ollá o Elegguá se echa parte del egué que pertenezca cada uno. Tiene que ser fresco (algodón blanco), verdolaga y canutillo (eso no perjudica a ningún santo, al contrario los refresca. Las hierbas se escogerán frescas antes de que salga el Sol, siempre pagándole a Osaín su derecho por cada uno para que salga bien. Después uno se sienta y va arrancando por hojitas, luego las echa al agua agua y las las va estr estrega egand ndo, o, desb desbar arat atan ando do a la vez vez que que va rezá rezándo ndola lass bien bien,, empezando por pedir permiso al ángel de la guardia del aleyo y diciendo: olomo omo agicoire, que quiere decir: “el Sol sale por aquí y se pone por allá”. Se le pide permiso a los padres del aleyo y se ayuba a los padres de la madrina, a la allubona de uno mismo. Enseguida se le pide permiso a Elegguá y se molluba y se le hace igual a los restantes ochas. Terminado este cumplido se empieza a cantar siete cantos para Osaín que tengan egué de Ocún. Si la cadena es para Ochún se le canta su rezo. Fofoba lochuren yeyé. Male: son los círculos círculos que se hacen en el suelo para sentar sentar al iyawó en el pilón el día del asiento. Kiloché. ¿qué pasa? ¿Chica che? Qué se hace para aliviar al consultante o al enfermo que se registra.
Cobu cobu. Hombre grande, se emplea para dar categoría a Oggún Alaguede gumá gumá.
PARA MOLLUBAR LAS CAZUELAS
Molluba bobo icoco chú dimale. Quiere decir: Dios bendiga las cazuelas que cocinan ñame. PARA SALUDAR EL CARACOL
Babá Babá oquid oquidiga igaba ba alcom alcomaco aco alamu alamululí, lulí, babá babá abebe abebenill nille e omom omoma a catun osocotonen apraellé lana aché babá, aché Yeyé, aché oluo. Siguayu ollubona caé acoada achedá, babá eriqué caymbada lelai lugal lugalé é aquit aquitifú ifún. n. Ollum Olluman aner eric icii baisi baisiel ello lo loria loriane nellé llé,, aché aché babá babá lobiní, aché oloddumare icopa, aché isení lenú igún merillá. LAS DISTINTAS CASAS
Ilé otanela Niké Colla Olokun Iyumú Lanza Ochosi Oloddumare Oke
Las cuatro esquinas La manigua La plaza El mar El río El cementerio La cárcel La iglesia La loma
PARA HACER ACHÉ DE OCHA Cabeza de paloma, de jutía, de guabina, de ñame o la cáscara, Egué aticuanlá (hierba de Obatalá), hojas de mango, harina de maíz con Ichú, cascarilla (Ichú es ñame: eró, cola, Osun, son los polvos de África.
DISTINTAS FORMAS DE CAER LOS COCOS ELLEIFE: dos cocos blancos y dos prietos. Aquí responden con firmeza que Sí a la pregunta que se le está haciendo al santo. ALAFFIA: cuatro cocos blancos. Quiere decir que todo viene bien desde el cielo y se dirá Alaffía oguó, Alaffía omó, Alaffía omó, Alaffía ikú babagua. También quiere decir: lo que se sabe no se pregunta. Si uno quiere Preguntar si ese Alaffía es de corazón, se tira de nuevo y si contestara repartiendo la letra (que sería Alaffía melli) o por si el contrario contestará en el suelo, dándole gracias a Olofin. (Maferefun
Olofin). ETAGUA: Tres cocos blancos y uno negro. Quiere decir en principio que sí, pero no es muy seguro, hay que volver a tirar y preguntarle al santo, porque seguramente faltará algo para que sea firme la pregunta. Después de repetir la pregunta pregun ta si se repitiera el mismo tiro sería Etagua Mello, tiene preguntar si es con Iré, pues ahí dice que Si, Se puede aceptar pero no se debe confiar mucho en eso, porque hay santos que siempre contestan con Etagua y hay que estar muy seguros. OCANA SORDE: Tres cocos negros y uno blanco. La La letra significa que NO a la pregunta que se está haciendo al santo. Dice que usted oiga bien lo que se le está diciendo o lo que el santo quiere. Hará la pregunta de si ese Ocana Sorde es bueno. Si dice que SÍ usted se va a enterar de algo que le conviene, y si contestara que NO, usted va a enterarse de un muerto en la familia o morirá un enfermo grave en la familia, habrá un preso o un chisme grande que le perjudicará o tendrá problemas con la justicia. OCANA ELEGGUN: En este tiro el coco debe caer las cuatro partes negras, quiere decir
NO a lo que se ha preguntado (entonces se halará las orejas y dirá “Que lo malo se vaya de mi camino”. Aquí puede hablar un santo o un muerto. Hay que volver a preguntar si está hablando algún santo o un muerto. Si es este último hay que preguntarle qué si quiere algo en particular con alguno de los presentes como familiar o protector, o si por el contrario se trata de un muerto enviado que está estorbando a la persona que se registra. Si se creyera que el coco no está hablando bien entonces se dice: Obbí koué Yiré lo cual quiere decir: coco, háblame claro. Dame un camino que sea cierto. NOTA: En estos cinco tiros del coco, como se verá, solamente se emplea para hablar directamente con el santo, ya bien sea en un registro o cuando se da algún animal que se ha sacrificado a algún santo para que responda si lo ha recibido y si está conforme y el camino que va el animal después de sacrificado en su honor, así como para hablar con el muerto cuando se le haga alguna pregunta directamente. Ahora bien, el coco es más extensivo cuando se utiliza para registrar, utilizando los Oddún que se usan para mirar con Diloggún, o para tirar con Okuele de Ifá el coco habla lo mismo, o sea, contesta por los dieciséis Oddún, solamente hay que tener en cuenta la posición en que cuentan para lo cual se pondrán en forma vertical después de lanzados y sin alterar la forma de leerlos, como cuando se habla directamente con el santo. En otra parte de este libro se podrá apreciar esta aseveración, pues a los nombres de los Oddún aparecerán las distintas posiciones en que pueden caer dichos cocos, la forma de su lectura y el Oddún que se aplica. De esta manera el santero que lo desee puede aplicar aplicar el sistema sistema del caracol para
registrar o el coco di ese es su gusto y tiene conocimiento para hacerlo. Teniendo en cuenta que a veces hay personas que hacen ocha y se les prohíbe tocar el diloggún por el santo, puede dedicarse a consultar con el coco, que es atributo de todos los santos y sobre el cual no cae prohibición ninguna.
NOMBRE DE LAS DISTINTAS PARTES DEL AVE EN LENGUA LUCUMÍ Leri Efa Imán Ocán Igo Oro Afan Alla eloni
La cabeza Los huesos El hígado El corazón La molleja Las patas Las alas La pechuga
ELEMENTOS NECESARIOS PAR CUALQUIER TIPO DE EBBÓ Cualquier tipo de ebbó que se haga res posible que lleve las siguientes cosas: Ecú, Ellá, Epó, Tierra, Ecó, Cascarilla, Oñí, Pimienta de Guinea o de la otra, tres tres pedazos de hoja de malanga verde y aché. Desde luego, existen otros ebboses con hierbas y otros ingredientes, pero ya se preguntará y el santo ordenará lo que estime necesario para el ebbó de la persona que lo necesite.
REZOS PARA HACER ROGACIÓN
OJUANI Ikú, Ojuani Ellá, Ojuani Oguó, Ojuani Ellé, Aricubabagua de Deguantelocún. ELLI ELLIO OCO Tem Temi Tan, Tan, Tche Tche Moni Monigu guol oloc ocún ún Tele Telero roco co Tem Temerán erán,, Oggunda Guade Chubiriqui Ala Ilua. OSHOSI Gurugú Odemata Matosi. OSAIN Aguanillí, Aguaní Aguó, Aguní Omó, Aguaní Aricubabagua Tincheleguá de Deguantolocún. Deguantolocún. OBBA OB BALU LUBE BE Acot Acotíí Emen Emeníí Ob Obii Areiñ Areiña a Oluc Olucos osob obii Allag Allaguó uó Iche Ichela la Quiniba. YANSA YANSA Apitoque Apitoque Iguó Quinlú Quinlú Aguamad Aguamada a Ikú Jéri Jéri Illá Ocoboní Ocoboní Asallá Bielocún, Asallá Bielocún, Ollubona Olokun Allacoto Afefé Ikú Orieallé Illá Acohiní Ilenyao. YALORDE YALORDE Erí Oguó Oguó Teonipele Teonipele,, Yalorde Yalorde Illá Orgua Orguaré ré Lliomo Lliomo Ñidé Ñidé Isa Igañale Coguo Osí Yeyé Obiní Bona.
OSUN OSUN Isa Bara Bara Birinig Birinigua ua Oinigu Oinigua a Lano Lano Jécua Jécua Erubu Erubuqu qué é Ocuat Ocuatí í Ocualona. ODDÚA Abeli Ni laché Jécua Iba Olúo Iba Ochoa Iba Illalocha Iba Babaloche Iballe Tolocún. REZO PARA EL DILOGGUN
Baraquí Digaga a la Comaco, a la Mula Bubata Abebonillo, Afoforé Tulé ,Amamará Tumana, Araco Loni, Apa Lana, Babá Aché Yeyé, Aché Aché Olodd Oloddum umare are,, Aché Aché Oluo, Oluo, Aché Aché Ollubo Ollubona, na, Canica Canicada da Araba Araba Borigu Boriguo o aún Baité Baité Baiga Baigale le Qu Quitie itiemp mpo o Alluma Allumama ma Tada Tada Ilasie Ilasiello llo Labicú Leno Igún Merillá Lleni Aricharo Adaché Nipé Allé Maro Tilatoque Tilatoque Titilatoque Titilatoque Allalún Allalún Babai Babai Humbo Humbo Coofini Allalún Babai Babai Ni ello Humbo Allalún Babai.
REZO PARA LA ROGACIÓN DE CABEZA
Iba Babá, Iba Yeyé, Iba Eschu Alaguana, Iba Ilé Apocollerí, Iba Ata Meta Meta Bidiga Bidigaga ga,, Kinkam Kinkamach aché é Ollubo Ollubona, na, Kinkam Kinkamach aché é Apete Apeterví rví,, Kinkamaché mi Orí, Kinkamaché Bobo Ocha Abalaba Kinkamapoda Arún Candela Abaniché Obani Omó Anacuní Mana Ebaní Llemí Cachocho Eni Cachocho. REZO PARA HACER LA ROGACION EN ORITE OCANA SORDE OSORDE OKE, Osorde Omó Aricubabagua. ELLIOCO Temi tan Temi Tiche Moniguolocún Telaroco Temerán Moniguolocún Omo llegoró Acucó. Oggunda Tetellí Tetellí Farnillé Farnillé Afesullé Afesullé Biosulenu. Osún Ofún Mafún Que Mafún Ofún Saro Obarín Ofún Lara Ofún senirí Efuru. La Coco Efururú La Gogué Oque Orisha Adi Arallé Coletú. OBATALÁ Derere Blú Dederé La Bochicé Dedere La Auro Tentiesco Didé Lorí Lordafún Iboletí Lordafún Aboñú Onife Obi Tibitire Ocurún Elurule Ni un Balle Aponaguá Aché Aguolideré Collé Elecó Tale. Tale Obon Aicón Abón Ailá aladeté Nichareguó Osa Guó Igueriguó Gué Aguo Afonicú Aguó Cosé Ya Cosí Anco Obón. Nichoro Olobon Nichero Ifá Denichoro, Eggún. OBARA Ola Bara Ellé Bara Quicate Coma Cate Cate Arallé. ODDI Achamá Adima Dima Codima Ikú Codina Arún Codima Ofó Guile Collima Gollo. OSCHE Mulucú Mulucú Ollotoba Leguó Aché Mulucú Mulucú Lordafun Acatampo Lorí Aché Iballó Deguá Codidé Sara Underé Ogúo Iba Oguó Iba Omó Iba Illalorde Abe.
PARA DARLE COCO Y AGUA AL SANTO Echando tres poquitos de agua en el suelo delante del Santo a quien se le da coco, coco, se va diciendo diciendo:: Omi tuto tuto Laro Laro Eropes Eropesíí Pesila Pesilabeq beque ue cocolo cocolodó dó Peleri Peleriquí quí Boma Boma Igabe gaberí rí Igabo gabolllla a Igabo gaboch chic iché hé y Illé Mope Mopeco como mope pelo loní ní Intop ntopri ri Ikú Ikú MopeloniInteri Ano Mepoloni Intori Elló Mopeloni Interi Ofó Malabí Punloni Obbí El ó Obbi Ofó Obbi Elabareo. En ese momento todos los que estén presentes contestarán Aguaña Osino Osoña y se tiran los cocos. MANERA DE MOLLUBAR A LOS SANTOS ELEGGUÁ: Elegguá Laroye Akilollá Agure Tenti Onu Apagurá Acamese Arale
Tusé Amabula Omubata Acocó Afofó Ocoloñiñi Ocoloñiñi Tenti Canafó Canafó omo Oreguno Yona Aloriquí Ayuba. OGGÚN: Oggún Aguanillé Ireballó Omo can Oke Alaguan Oggún Oke Aguara Aguanillé Oggún Chibiriquí Ala Oke. OCHOSI: Ochosi Achinigenre Ode Odemata Odo Beru Braliye Acucó Musiere Camaricú Oamarama Camalelló Camarafó Babá mí Ochosi Gugú Ode Odemata Matesi. Osun un duru durun n Madub Madubul ule e Durun Durun Ganga Ganga Lavé Lavéis is,, Os Osun un Durun Durun Madub Madubule ule OSUN: Os Duranganga Labosio. Aguanilillílí Agua Aguane neye ye Agua Aguane ne Oguo Oguo Agua Aguana na Omó Omó Tichó Tichón n Beguá Beguán n De OSAÍN: Aguan Deguantolocún. ORISCHAOCO: Afefé Ikú Oriaye, Orischaoco mobi Bareo Oke. INLE: Kinkamaché Inle Dada Obbaloké Kinkamaché Aina Dada Belleoro Tegue Kaínde Alaba Alaffí Kuncueo Oloddumare. AGGALLÚ: Aggayú Chola Kiniba Achegú Iba. CHANGO: Eloni Changó Obakoso Kisieke Akamasí Kaguo Cabiosile Changó. Changó Cabiosile Elecuó Asiosan Fina Manafina Fina Malareye Maraní Oguo Cabiosile Changó Obbasoso Kisi Eko Acacame si Ocumí Basururú Kuontologuo Obakoso Caguó Cabiosile Chango. LOS JIMAGUAS: Billioro Alaba Kaindé Achoniré Guafumí Orumule Iguamale Niré Alleniré Aricú Cofiedemu Oinlacheniré Cofiedemu Oinlachenire Iku Coffa Ano Cofá Ello Cofá Cofá Yetutú Canatutu la Jolle. Orimigan Aguabitasé Iba Pelonise Agronica Jécua Mí SÁN LAZARO: Babalú Ayé Orimigan Ubi Bagado Orischa Jécua Mí Fiedemu. OBATALA: Obatalá Obbalanlá Abirinigua Lano Acoconiké Alaguanché Birinigga Olleco Tequete Tequete Omi tuto tuto Aché Tuto Acan Tuto Tuto Ori Tuto lé Tuto Umbo Omaque Omaque queré lledé Codidé Cofiedemu Babá Mí. YEGUÁ: Yeguá Omaso Olocacá Untoda fun Obbaguayo. ODDÚA: Oddúa Jécua Orubuqué Acuáti Aguacatona Oddúa. Moroyeyeo Alde Inso Indemade Indemade Odo Illamí Ade Kinran Nsguemi Nsguemi OCHUN: Ochún Moroyeyeo Ori Yeyeo Idemado Odo Illami Cota Yeyé Care en su Oroso A la Decoyú Ibañalé Ibañalé Titieco.
rumila Acua cualorí Acacafeitacú Aché Babá Tumaricic cici Ellu ORUMILA: Orum Mamaro Mamarosedd seddo o Cofied Cofiedenu enu Kinkama Kinkamaché ché Emí Oguo Orumila Orumila Moí Ború Moí Boí Chiché Orumila Acualorí Aguedé Oddúa Aca Feuticú Aché Babá Aché Yeyé Aché Oluo Aché Ullabona Camacoda Elluma Marsesado Cofiedemu Kinkamanché Mí Oguo Moí Beru Moi Lo Moí Bochiché. OLLÁ: Ollá Yansá Jécua Jey Yansa Ebeguedé Olliladá Ami tiono Jécua Jey Yansa Atimano Obini Dodo. YEMAYÁ: Omío Yemayá Ataramagua Asayabí Olokun Boboladé Melleguá Oniba Oyye Yemayá Olukun Losan Lórun Laboso Daye Illami Mofin Toe Aguanganerí Illaro coco Ochadima Orumadima çomadima Fiedehu Illamí Yemayá Illamí Ocubiní Atamara Omibaye Illamé Mofintio (recuéstame en ti) un coguamí Olaran Illá Maye Leguaco Yemayá Mayaelrguao Onibayee Taramagua Sabia Pabia Olokun Oyee Ori Yee.
ALGUNOS REZOS IMPORTANTES Para mollubar a los santos se echan tres poquitos de agua en el suelo se dice: Omi tute, Ana Tute, Tute Laroye, Tute Ilé. Para mollubar a Dios: Oloddumare. Ayuba