RAMATÍS
MEDIUMNISMO OBRA MEDIÚMNICA DICTADA POR EL ESPÍRITU DE RAMATÍS AL MÉDIUM HECILIO MAES CURITIBA, BRASIL Traducida del portugués por
MANUEL VALVERDE
EDITORIAL KIER S.A. Buenos Aires
Titulo original en portugués Mediunismo 1* edición argentina: Editorial Kier S.A. 1968 2* edición argentina: Editorial Kier S.A. 1973 Tapa: Baldessari
1
LIBRO DE EDICIÓN ARGENTINA
Queda hecho el depósito que marca la ley 11.723 e 1973 by Editorial Kier, S.A.; Buenos Aires Impreso en la Argentina Printed in Argentina Se terminó de imprimir en le mes de Julio de 1973, en los Talleres Gráficos DULAU S.R.L, Rauch 1849, Buenos Aires
HOMENAJE
A Rodolfo Dos Santos Ferreira, corazón generoso e idealizador del Hogar "Ramatís" para los niños, en Osasco, Sao Paulo. A Osvaldo Polidoro, espíritu incansable y escritor fecundo, que enriqueció la bibliografía espirita, con su admirable conjunto de obras de alto relieve espiritual. Hercilio Maes. Curitiba, 20 de agosto de 1960 EN EL CAMPO DE LA MEDIUMNIDAD Capitulo extraído de la obra Coletanea Do Alem, dictada por Andrés Luiz al médium Francisco 2
Cándido Xavier. Editada por la Librería Allan Kardec (LAKE), San Pablo, Brasil.
EN EL CAMPO DE LA MEDIUMNIDAD Capitulo extraído de la obra Coletanea Do Alem, dictada por Andrés Luiz al médium Francisco Cándido Xavier. Editada por la Librería Allan Kardec (LAKE), San Pablo, Brasil.
El cerebro físico es un aparato de complicada estructura. Está formado por células emisoras y receptoras que actúan en los diversos centros mentales, reguladores de la vida orgánica. Dentro de él se acumulan poderosas corrientes magnéticas que fluctúan sobre el líquido cerebro espinal, como si fueran los engranajes de un motor, embebidos en aceite adecuado, produciendo vibraciones eléctricas con frecuencia de diez a veinte por segundo. Desde ahí parten infinidad de órdenes, dirigidas al sistema nervioso, al sistema endocrino y a los demás órganos. El cerebro, tal como se conoce en la Tierra, representa la parte visible del centro periespiritual de la mente, imponderable para la ciencia común, en donde se produce la elaboración del pensamiento, que escapa a los conceptos humanos. Hacemos estas referencias para resaltar la necesidad de cooperación por parte del servidor mediúmnico para efectuar el intercambio entre los dos planos -visible e invisible-. La tesis del animismo, no obstante ser respetable por las excelentes intenciones que la inspiran, muchas veces amedrenta a los compañeros que se ven obligados a exponer testimonios en el servicio del ministerio de la verdad y el bien. Los investigadores exigentes no favorecen al esfuerzo que realizan los médiums bien intencionados y, en la mayoría de los casos, les destruyen los gérmenes de la buena voluntad y realización con sus exigencias particulares, en base a los detalles pequeños de la gramática y la adivinación. La organización mediúmnica, como todas las creaciones elevadas, no se improvisa en el camino de la vida. El médium no es una inteligencia o una conciencia anulada en las exteriorizaciones fenoménicas de la comunicación entre las dos esferas. Aún en el llamado sonambulismo puro, en el trance 3
completo y en la hipnosis más profunda, su colaboración será manifiesta e indispensable. indispensable. La energía de la lejana usina, precisa del filamento de la lámpara para manifestarse y producir luz y calor. El artista, para ejecutar una melodía perfecta, necesita de las cuerdas buenas y bien afinadas, que le presten concurso para la demostración musical. El mensaje del cantor, o del político, requiere el aparato de recepción para ser escuchado a la distancia, el que posee los elementos especializados. El violín necesita mucha experiencia y cuidado en su elaboración, y el receptor radiofónico, una gran cantidad de piezas eléctricas para atender a los fines para que fue creado. Si en semejantes servicios de transmisión, a base de materia común, existen imperativos técnicos y de organización, ¿cómo se podrá improvisar un mecanismo mediúmnico, a base de materia viva, asociada a los elementos espirituales, imponderables para la ciencia humana, que además exige una férrea voluntad en los valores de la cooperación? Orientar la mediumnidad es una obra digna de esfuerzo, aliado a la perseverancia a través del espacio y el tiempo. El habitante de una esfera extraña necesita valerse de los recursos que le ofrece el cooperador, identificado con el círculo donde pretende hacerse escuchar. Es una imposición vulgar en las relaciones comunes de los países terrenos, de cultura diversa. El brasileño que es portador de cierto mensaje para Inglaterra, y no haya tenido contactos anteriores con la vida británica, de ningún modo prescindirá del intérprete, y éste, para cumplir su tarea, deberá prepararse debidamente. Adaptarse una entidad desencarnada al cerebro, sistema nervioso y núcleos glandulares del compañero encarnado, como hacer ajustes biológicos y eliminar resistencias celulares, sin mencionar los procesos mentales inaccesibles a la comprensión actual de los fenómenos, no es operación matemática que se efectúa a través de cálculos hechos en un instante. Se organiza pacientemente, exigiendo el adecuado concurso y dedicación por parte de los amigos que sirven desinteresadamente desde la superficie planetaria. planetaria. Y, así aclarado este aspecto, invitamos a los colaboradores sinceros del espiritismo evangélico a dedicar mayor atención a la llamada "mediumnidad consciente", donde el intermediario es compelido a guardar sus verdaderas nociones de responsabilidad con el deber por cumplir. Cultive cada trabajador su campo de meditación, eduque la mente indisciplinada y enriquezca sus propios valores en los dominios del conocimiento, multiplicando las afinidades con la esfera superior, y observará la extensión de los tesoros de servicios que podrá accionar en beneficio de sus hermanos y de sí mismo. Ninguno debe engañarse con relación al mecanismo absoluto en materia de mediumnidad. Todo intérprete de la espiritualidad, conciente o no, en el transcurso de los 4
procesos psíquicos, está obligado a cooperar, ofreciendo algo de sí mismo, según las características que le son peculiares, porque si bien existen facultades semejantes, no encontraremos dos mediumnidades exactamente iguales. Recordamos que no estamos empeñados en las realizaciones exteriores, donde la forma debe sacrificar la esencia, y la letra" asfixie al "espíritu", y sí en la construcción de un mundo mejor, identificado con la experiencia que brinda la vida eterna. Tenga cada colaborador del Espiritismo cristiano la conciencia, la responsabilidad responsabilidad y el espíritu de servicio, cual riqueza celestial, que es necesario valorizar y multiplicar. No olvidemos que, según dicen las profecías, por medio de los canales mediúmnicos, el Señor está derramando su Luz sobre la carne, pero que es preciso purificar el vehículo carnal y enriquecer la mente, para que el hombre sea, de hecho, el intérprete fiel de la Luz Divina.
ALGUNAS PALABRAS DEL MÉDIUM Apreciado lector: Aunque parezca innecesario y cansador cualquier consideración preliminar sobre el contenido de la presente obra de Ramatís intitulada Mediumnismo, que abarca con especialidad los diversos aspectos del ejercicio de la mediumnidad, bajo el patrocinio de la doctrina espirita, tengo la obligación moral de explicar que los errores que se encuentran en este trabajo, se deben a mi exclusiva personalidad. Aún son raros de encontrar los médiums similares a un Francisco Cándido Xavier, que puedan recepcionar con éxito el pensamiento de los desencarnados para verterlo en el ambiente material. Todavía se hace más difícil, cuando las comunicaciones pertenecen a los espíritus de categoría, cuya vibración ultrapasa nuestra frecuencia psíquica común. Mediumnismo se asemeja a las otras obras de Ramatís en lo tocante a su elaboración, pues fue estructurada en base a preguntas preg untas y respuestas. A medida que surgían las dudas a causa de las respuestas anteriores de Ramatís, hacíamos nuevas indagaciones, incorporando a la obra nuevos valores de aspectos interesantes. Todo lo preguntado sobre mediumnidad fue respondido satisfactoriamente por el espíritu de Ramatís, y si algo de interés no fue insertado, no cabe la culpa al espíritu consultado, pero si al olvido o falta de práctica del médium, que hizo las indagaciones. Como sucedió en otras ocasiones, los simpatizantes de 5
esta obra tal vez resuelvan hacer nuevas consultas sobre la mediumnidad, siendo posible la versión de nuevos conceptos, quedando así subsanadas las omisiones actuales. Con respecto a ciertos puntos de la mediumnidad que suelen crear controversias que exigen esclarecimientos minuciosos, Ramatís respondió con otras respuestas, pero sirviéndose de otro vocabulario. De esa forma procuró avivar la memoria del lector sobre los aspectos que deben conocerse con más detalles y que, a su vez, sea favorecida la interpretación sobre el compromiso de la mediumnidad. Habíamos cerrado el último capítulo de la presente obra, cuando uno de los componentes de nuestro grupo de trabajo mediúmnico solicitó a Ramatís que le hiciera el favor de citar algunos tratados en idioma brasileño- portugués para orientar con más precisión al desenvolvimiento mediúmnico y enseñar los métodos sensatos y provechosos para los futuros candidatos a médiums. Ramatís hizo notar que la bibliografía sobre ese tópico es prolífera en el Brasil y otros países, y cumplen su objetivo ampliamente para explicar las relaciones mediúmnicas entre los vivos y los muertos, pero aun así nos. indicó algunas obras que consideró más apropiadas para ayudar al desenvolvimiento mediúmnico conforme a los preceptos de la doctrina espirita. Con el interés de facilitar la adquisición de las obras citadas, para aquellos que todavía no las conocen, especificamos los autores, encarnados o desencarnados, y las editoriales que las editaron: ü ü ü ü ü ü ü ü ü
ü
El evangelio según el espiritismo, de Allan Kardec. Edición KIER. El libro de los espíritus, de Allan Kardec. Edición KIER. El libro de los médiums, de Allan Kardec. Edición KIER. En los dominios de la mediumnidad, de Andrés Luiz. Médium: Francisco Cándido Xavier. Edición brasileña. Editó Federación Espirita Brasileña. Mediumnidad, de Edgar Armond. Edición Librería Allan Kardec (LAXE). Trabajos prácticos del espiritismo, de Edgar Armond. Edición Librería Allan Kardec (LAKE). Puntos de la escuela de médiums. Editado por la Federación Espirita del Estado de San Pablo. Pases y curas espirituales, de Wenefledo de Toledo. Edición de la Librería del Pensamiento. Manual del director de sesiones espiritistas, de Manso Vieira y B. Godoy Paiva. (Traducido al castellano por M. Valverde.) Editorial Allan Kardec. Colección Amalia Nº 3. Mediumnidad sin lágrimas, de Eliseu Rigonattí. Edición Librería Allan Kardec (LAKE). Hercilio Maes. 6
Curitiba, 20 de agosto de 1960.
PREÁMBULO Mis hermanos y amigos: AI entregaros esta obra que denominamos con buen sentido Mediumnismo, también dejamos atrás una etapa más del programa sideral, cuya responsabilidad asumimos junto a nuestros mayores cuando nos ofrecimos para cooperar en el progreso espiritual de algunos espíritus encarnados en la Tierra. Merced a la bondad del Creador, gozamos jubilosamente al verificar que hemos atraído la simpatía de quienes se interesaron por el contenido sencillo de nuestros mensajes mediúmnicos. Comprobamos también que modificaron algo su antiguo modo de vivir y adoptaron principios evangélicos en sus vidas, alcanzando una frecuencia espiritual más elevada, apresurando su renovación, y que más tarde serán elegidos para morar en los planos paradisíacos. paradisíacos. Reconocemos la imposibilidad de agradar a todos los que toman contacto con nosotros, tampoco poseemos vanidades mesiánicas, ni pretendemos distinciones especiales en medio de las comunidades siderales. Nos alegramos considerablemente por la oportunidad de cooperar en los trabajos de esclarecimiento espiritual y de socorro fraterno, que lo Alto realiza en favor de las almas que pertenecen a la escuela benefactora en los planos materiales. Comprendemos la necesidad de mantenernos por encima de los preconceptos y equívocos humanos, extendiendo nuestro afecto espiritual a todos los hombres, a pesar de la posible mala impresión que nuestros mensajes mediúmnicos puedan causar a los espíritus ortodoxos en sus creencias. Ojalá que, al servirnos de la organización mediúmnica que nos transfiere el pensamiento hacia la materia, podamos corresponder a la inmerecida confianza de aquellos que nos permitieron participar en el bendecido servicio del Bien. Realizamos así este modesto esfuerzo en el sentido de ayudar, en todo lo posible, a la liberación espiritual de nuestros hermanos encarnados, presentando un trabajo exceptuado de los pruritos científicos, apreciaciones filosóficas destructivas de las mentalidades intoxicadas por el sentido académico del mundo y de los conceptos dogmáticos; formulamos una sincera 7
invitación espiritual a los hombres de buena voluntad para que a la brevedad se interesen por ingresar al reino amoroso del Cristo. Aunque la vida física sea una escuela de elevado mérito, que proporcione al espíritu sumergido en la carne transitoria el desenvolvimiento de su conciencia, la realidad es que las Fortísimas raíces adquiridas por el instinto animal retardan al hombre por mucho tiempo bajo la capa del sufrimiento redentor. El dolor en la vida material, casi siempre resulta ser el corolario inmediato de los placeres descontrolados. descontrolados. Por eso debemos reconocer la importancia indiscutible del curso experimental de la vida terrena, resaltando la valiosa oportunidad que significa ayudar a despertar la centella sideral emanada del Creador y situada en la carne humana, causa por la que insistimos en la necesidad de que el hombre aprenda su lección espiritual con cierta urgencia, para liberarse lo más pronto posible de las formas esclavizantes de la materia. No obstante ese beneficio prestado por la carne al alma en su aprendizaje angélico, es implacable en su acción atávica y bastante difícil para desatarlo de sus cadenas milenarias. Si el estado angélico es la condición definitiva que Dios estatuyó para todos los hijos creados por su Conciencia Cósmica, es justo que el espíritu se sirva eficientemente de los laboratorios planetarios que le facilitan las pruebas redentoras; pero debe ser sensato y trabajar eficientemente para lograr su ventura, a la que tanto e indiscutible derecho tiene. Reconocemos que algunas criaturas encadenadas a las pasiones deletéreas de la carne, se angustian cuando comprueban que en nuestros mensajes condenamos la negligencia espiritual del hombre. Nuestro proceder no tiene interés en condenar solamente las flaquezas naturales de la vida humana, ni tampoco excomulgar a nuestros hermanos encarnados por sus equivocaciones. En verdad, todos viven en la carne las mismas experiencias y equívocos que nosotros también debimos afrontar en innumerables existencias planetarias. Nuestro principal objetivo es invitar insistentemente, con elevado espíritu de fraternidad, a los encarnados, para que despierten de su negligencia tan común en su peregrinar por los caminos terrenales; que aceleren sus pasos, pues están próximos a la ventura eterna de la vida angelical. En realidad, constantemente nos hemos referido a los inconvenientes que les esperan a los espíritus que se demoran, por sus ataduras a la hoguera de las pasiones' devoradoras y pecaminosas del mundo de la carne; pero también les anunciamos las perspectivas sublimes y el panorama paradisíaco que alcanzan las almas sufrientes después de su liberación del compromiso redentor del cuerpo físico. Con mucha razón deberíamos ser condenados a la repulsa pública, si en detrimento de las virtudes angélicas del espíritu inmortal, 8
prefiriésemos exaltar los vicios y pasiones pecaminosas que se agitan bajo el combustible ofrecido por las energías del instinto animal. Mediumnismo es un simple trabajo ofrecido por nuestra cooperación espiritual por vía mediúmnica, mientras rogamos a Dios que nos permita encender la llama de la vida inmortal en algunos corazones que aún están torturados por las vicisitudes y dolores de la vida material. Realizamos nuestros mejores esfuerzos para contribuir en forma provechosa, junto a los médiums confusos e indecisos, que vacilan en tomar la ruta efectiva para emprender su desenvolvimiento desenvolvimiento mediúmnico. Es obvio que no tenemos la presunción de acrecentar con cualquier novedad las obras fundamentales de Allan Kardec que los espíritus le dictaron sobre la mediumnidad; de la misma forma reconocemos que existen muchas y acreditadas obras en el género, realizadas por encarnados estudiosos de la fenomenología mediúmnica, que superan estas simples exposiciones de nuestro haber espiritual. Sirviéndonos del médium que nos recepciona el pensamiento, hemos procurado atender las diversas indagaciones sobre el complejo y sublime problema de la mediumnidad, exaltándola como la tarea espiritual que debe ejercerse con excesivo celo moral y alejada de los intereses mercenarios y de las vanidades humanas. Obedeciendo a la necesidad selectiva del programa elaborado por nuestros superiores, algunas veces fuimos compelidos a destacar los ángulos sombríos de la práctica mediúmnica, sobre la imprudencia, el interés mercenario y la capciosidad de ciertos médiums. Procedimos de esa forma para distinguir a los que merecen la confianza de lo Alto y que prestan un valioso y dedicado servicio al prójimo. En algunas de nuestras consideraciones existe un tono de censura hacia los médiums prejuiciosos, que sienten extraño placer por querer conservarse en la misma ignorancia de cuando se iniciaron en su desenvolvimiento. Y no debe olvidarse que el éxito del mandato mediúmnico y su transparencia espiritual exige a sus intérpretes, además de su evolución moral, que despierten su dirección mental y mejoren" su intelecto. Advertimos a todos los médiums que el éxito del servicio mediúmnico depende mucho de la renuncia, desinterés, humildad y ternura de sus mediadores, desechando cualquier manifestación de tipo espectacular que opaca los sentidos físicos, y que de ningún modo convierte al espíritu hacia el Bien. Aunque no hayamos podido alinear conceptos espiríticos más avanzados que los consignados por Allan Kardec en sus obras doctrinarias, nos sentiremos bastante compensados si a través de estos simples mensajes se pudiera comprender el sentido liberador del Espiritismo y la función redentora de la mediumnidad. Al término de este breve preámbulo rendimos nuestro homenaje 9
de simpatía y admiración a Allan Kardec, espíritu sensato y heroico, que renunció a su propia tranquilidad e intereses del mundo físico para servir benefactoramente benefactoramente a la humanidad terrena. Considerando que la doctrina espirita es la reaparición del Cristianismo en toda su pureza Iniciática y simplicidad conmovedora, los médiums que se disponen a servirle bajo su égida doctrinaria también precisan cumplir su mandato espiritual en el siglo atómico, como nuevos apóstoles, pregonando la inmortalidad del espíritu. Ramatís. Curitiba, 21 de abril de 1960.
Capítulo 01 CONSIDERACIONES SOBRE EL "LIBRO DE LOS MÉDIUMS" 01 Pregunta: Pregunta: Para comenzar, gustaríamos que nos indicaseis qué método es más eficiente para alcanzar éxitos en él desenvolvimiento mediúmnico, o qué proceso es más aconsejable para educar al candidato a médium. Ramatís: Así como al futuro profesional le compete primero estudiar las bases primarias para aprender el alfabeto que más tarde le servirá para proseguir con los estudios complejos de la cátedra universitaria, el médium precisa comenzar su desenvolvimiento mediúmnico orientado por las lecciones básicas de la doctrina espirita. El hombre puede llegar a ser ingeniero, abogado, médico o magistrado, pero no puede eludir la alfabetización. alfabetización. Actualmente, a medida que el mundo terreno progresa, su humanidad también ingresa en los cursos educativos, que comúnmente se utilizan para ejercer las profesiones más simples, causa ésta que permite multiplicar y popularizar los tratados científicos y los compendios técnicos. Hoy se estudian y consolidan reglas y leyes basadas en las lejanas experimentaciones del pasado, graduando disciplinadamente los estudios más variados, y a su vez facilita el derrotero educativo de los estudiosos. Foco a poco se eliminan las indecisiones, equívocos, trastornos y sorpresas comunes a las tentativas empíricas y propias de las experimentaciones sin métodos seguros.
10
En consecuencia las iniciativas culturales, cursos científicos y conocimientos técnicos modernos son tratados en lenguaje accesible a todas las mentes estudiosas y aceleran el progreso de la humanidad terrena, porque reducen la pérdida de tiempo empleado en el empirismo desordenado. Proliferan, entonces, las academias destinadas a oficializar los trabajos humanos, pues diploman a las costureras, peluqueros, fabricantes de varias industrias, pedicuros y decenas de técnicos de las más variadas profesiones. Es evidente que si la facultad mediúmnica está destinada para objetivos sublimes, también es más compleja e importante que las profesiones comunes del mundo, debiendo dedicarse con esmero y cariño por parte de sus cultores. En ese perfeccionamiento mediúmnico están en juego las elevadas enseñanzas de la vida evangélica, y su finalidad es proporcionar al hombre a la brevedad posible su liberación espiritual. Todo éxito depende muchísimo de las condiciones morales y conocimientos del médium, que debe apartarse de todo asunto que lo induzca al ridículo, a la censura o al sarcasmo sobre la doctrina espirita. El médium bien desenvuelto, en la acepción de la palabra, es el fruto de largas experimentaciones en favor del prójimo; sólo el servicio desinteresado, la imaginación disciplinada, el equilibrio emotivo y moral es el que garantizará el trabajo en sus comunicaciones con lo Alto. El desenvolvimiento mediúmnico correcto, supervisado por gente sensata y experimentada, garantizará los trabajos provechosos y evitará las espinas de las decepciones prematuras o el desencanto de las tareas fracasadas. Aunque alguien se deja atraer por las manifestaciones manifestaciones y escenas raras que impresionan a los legos en los fenómenos mediúmnicos, el intercambio satisfactorio y provechoso con el Más Allá requiere disciplina semejante a la exigida en los cursos profesionales del mundo profano._ Sería absurdo que alguien pretendiera ser candidato a un curso profesional habiéndose negado a la alfabetización primaria o intentara alcanzar su objetivo superior por medio de tentativas empíricas y experimentaciones confusas, como también es absurdo que el candidato y necesitado del desenvolvimiento mediúmnico espirita, despreciara las reglas y normas fundamentales del Libro de los médiums, en donde Allan Kardec definió positivamente las prácticas correctas de la mediumnidad. Si no confiáis en quien dice tener un diploma profesional sin antes haber hecho el curso primario, tampoco podéis confiar en la capacidad, seguridad y entendimiento de cualquier médium que ignore los principios más elementales sobre la mediumnidad, expuesto en el Libro de los médiums. Mucho más importantes y peligrosas que las relaciones profesionales en la Tierra son los contactos entre los vivos y los muertos, pues el médium no puede prescindir de
11
un curso seguro para su desenvolvimiento, tal como lo estableció Allan Kardec en sus obras fundamentales. fundamentales. 02 Pregunta: Pregunta: Conocemos algunos colegas que se consideran "buenos médiums" y además son seguros en sus trabajos mediúmnicos, pero afirman que jamás han leído una sola página del Libro de los médiums, ni consultaron los libros que compuso Allan Kardec. ¿Qué nos decís al respecto? Ramatís: Ramatís: En cuanto a que haya médiums buenos y seguros e ignoren las obras de Allan Kardec, no tenemos dudas, pues el Catolicismo, el Protestantismo, la Teosofía, el Esoterismo, el Budismo, el Islamismo, el Induismo y el Judaísmo, como las instituciones Rosa-Cruz y otras asociaciones iniciáticas, contaron con magníficos magníficos médiums de elevado criterio espiritual, pero ajenos a los postulados espiritas. El Espiritismo es el conjunto de leyes morales que disciplinan las relaciones del "mediumnismo" entre el plano visible e invisible y coordina el progreso espiritual de sus adeptos. El fenómeno mediúmnico se comprobó antes de codificarse la doctrina espirita y actúa en forma independiente. Sin embargo, debéis distinguir, pues el mediumnismo es una manifestación que puede presentarse ajena a todas las doctrinas y creencias; es una facultad, y el Espiritismo es "doctrina" moral y filosófica codificada por Allan Kardec, con la elevada finalidad de liberar a los hombres de los dogmas asfixiantes y de las pasiones esclavizantes. La literatura mediúmnica que proviene de las diversas fuentes religiosas y doctrinarias es pródiga y podéis comprobar la cantidad de sensitivos que reciben mensajes de este plano, aunque no operen bajo la inspiración del Espiritismo codificado por Allan Kardec. Por lo tanto, en forma independiente de la codificación kardecista, fueron recibidos del Espacio las importantes Cartas de meditación y la obra Luz del alma, dictadas por el instructor tibetano a Alice Bailey; las misivas de escritura directa a Helena P. Blavatsky, fundadora de la Sociedad Teosófica, de los Maestros Moria y K.H.; las Cartas del otro mundo, dictadas a Elza Barker por un magistrado inglés; las comunicaciones intituladas Treinta años entre los muertos, por la facultad de la señora Wicklan; la Luz en el camino a Mabel Collins, inspirada por los mentores yogas; el magnífico poema A los pies del maestro, inspirado al joven Krishnamurti; La vida en los mundos invisibles, dictada por monseñor Robert Hugs Benson a Anthony Borgia; los Mensajes del padre Marchal, a Ana de G.; •
•
• •
• • •
•
12
•
•
•
•
•
•
•
La vida más allá del velo, al pastor protestante reverendo reverendo G. Vale Owen, de su progenitora. Las inéditas experiencias experiencias de Eduardo Van Der Naillen entre los mayas -que ignoraban el Espiritismo- dieron origen a El gran mensaje, obra admirable como repositorio de conocimientos sobre el Más Allá. El obispo anglicano C. H. Leadbeater, uno de los luminares de la Sociedad Teosófica, que reveló poderosas facultades de clarividencia y escribió instructivas obras de esclarecimiento espiritual, sin haber tenido contacto con el Espiritismo doctrinario de Kardec._ En vuestro siglo, ajeno al área espirita, Pietro Ubaldi os entregó La grande síntesis, obra extraordinaria y de inspiración mediúmnica dictada por una sublime entidad sideral; Rosalía de la Torre compuso mediúmnicamente Arpas Eternas, de la autoridad espiritual Hilarión del Monte Nebo, destacado iniciado sideral. Los profetas eran médiums poderosos: Jonás, Isaías, Jeremías, Ezequiel, Daniel, Naum, Samuel, Job, Habacuc y otros más, iluminaban los relatos bíblicos con sus poderes mediúmnicos; Moisés hipnotizó a la serpiente y la transformó en bastón, haciéndola revivir, más tarde, delante del faraón sorprendido. Sabía extraer ectoplasma a la luz del día, practicaba levitaciones, transportes y producía llagas en el cuerpo físico, curándolas rápidamente. Realizó la más asombrosa hipnosis de la historia, usó al pueblo egipcio como "sujeto" haciéndole ver el río Nilo saturado de sangre; actuaba en las fuerzas vivas de la naturaleza, pues conocía el proceso de magia sobre las salamandras, esparciendo fuego a su alrededor, rodeándose de "zarzas ardientes", poniendo en fuga a los soldados escogidos para matarlo._ En la esfera católica Teresita veía al Sublime Señor nimbado de Luz; Antonio de Padua se transportaba de Portugal a España para salvar a su padre inocente; Don Bosco, en trance psicométrico reveía a Jesús en su infancia, o profetizaba sobre el futuro, inclusive las realizaciones actuales sobre vuestro país (Brasil)*;
(*La profecía de Don Bosco se publicó en la obra "O Brasil y Suas Riquezas" de Waldomiro Potsch, 30» edición, editada por la Fundación Herculano Xavier Potsch, Río de Janeiro. ) •
Vicente de Paúl curaba úlceras con la simple imposición de las manos, y San Roque curaba la lepra a fuerza de oraciones.
13
Teresa Neumman, en vuestro siglo, presenta los estigmas de la crucifixión, y algunos sacerdotes católicos se vuelven curanderos milagrosos bajo la terapéutica de las bendiciones. En la India, Sri Rama Maharsi y Nirmala Devi entran en Samadhi integrándose a la Conciencia Crística, en goce inefable y totalmente ajenos a la técnica espirita. Lahiri Mahasaya se levitaba delante de la esposa, la que se arrodillaba estática, y Babaji, el Yogi Cristo de la India, materializaba, curaba y resucitaba revelando los más altos poderes mediúmnicos; Buda fue una antena viva ligada a lo Alto, vertiendo para el Asia el elevado Mensaje Espiritual; Ramakrishna, a través de la Biblia de la Naturaleza reproducía a sus discípulos los profundos pensamientos transmitidos por los maestros desencarnados. Lutero, Juan Huss, Prentice Mulford, Savonarola, Sócrates, Pitágoras, Apolonio le Tyana, etc., revelaban distinguidas facultades mediúmnicas mucho antes que Allan Kardec estableciera el derrotero por medio del Libro de los médiums y el Libro de los espíritus. Todos esos seres tradicionales de la historia religiosa, en la acepción del vocablo, fueron médiums aunque ellos mismos lo ignoraban. Esos inolvidables trabajadores de la Verdad no se ufanaban por ser "buenos médiums"; fue el servicio cristiano, consagrado por la Historia, el que los clasificó así. En consecuencia, creemos un tanto precario el juzgar como causa propia dicho aspecto, como quien se jacta de ser "un buen médium", pero que desconoce la disciplina del desenvolvimiento preconizado por Allan Kardec, y sobre todo mucho antes de presentar un trabajo convincente en la esfera espiritualista. El médium que realmente tiene propósitos serios y pretende un desenvolvimiento técnico y disciplinado, que aspira a realizar servicios cristianos en la siembra espiritual, puede ignorar el método experimental de Kardec o subestimarlo si lo creyera conveniente, pero de modo alguno se librará de las confusiones confusiones propias de los experimentos empíricos. •
•
•
•
•
•
03 Pregunta: Vuestro decir nos sorprende un poco, pero escuchamos a ciertos médiums, que justifican su ignorancia sobre el Libro de los médiums o cualquier tipo de obra mediúmnica, alegando que sus "guías" le suplen tal actitud. Dicen que esos guías evitan que se les fortalezca el animismo, que sería muy intenso a causa de la asociación de ideas por los autores leídos. Esos médiums son adeptos a un desenvolvimiento mediúmnico espontáneo, afirmando que se liberan de cualquier acondicionamiento literario y métodos doctrinarios que 14
puedan restringirles la libre eclosión de la facultad en florecimiento. ¿Qué nos decís? Ramatís: Es verdad, tales médiums pretenden justificar su prejuicio mental o alergia hacia el estudio de la doctrina espirita. No vemos una razón sensata que pueda sancionar tales disparates. Vosotros sabéis que de "este lado" muchas veces se dan consejos y orientaciones maquiavélicas por parte de los pseudos guías que acostumbran a sembrar incongruencias y excitan las necedades entre los médiums adversos a la disciplina espiritual. Aunque la facultad mediúmnica sea espontánea en su esencia, su desenvolvimiento debe encuadrarse en rigurosos procedimientos y experimentaciones, liberándolo de las prácticas y ritualismos ridículos, como de los inconvenientes que sean censurables. No hay dudas que existen médiums de excelente estirpe espiritual, que alcanzan su desenvolvimiento mediúmnico exceptuados de las experiencias aflictivas y alejadas de los desengaños ocasionados por la interferencia capciosa de los desencarnados. Cuando sucede así se trata de criaturas acreditadas y están bajo la protección excepcional del Más Allá, porque su trabajo de médium es "menos prueba" y más incumbencia superior. Bajo cualquier hipótesis, los espíritus benefactores del área espirita prefieren comunicarse a través de los médiums que se desenvolvieron y orientaron por las normas expuestas en el Libro de los médiums, que es el admirable repositorio de reglas sensatas y advertencias saludables, concretadas después de una abundante experimentación mediúmnica. Es una obra que puede contribuir al progreso del candidato a médium, distanciándolo de las decepciones y pérdidas de tiempo, como es natural en el desarrollo empírico y sin experiencia. experiencia. Kardec estudió profundamente las características psicológicas de los médiums y los clasificó conforme al tipo de su facultad inicial, disciplinándole la imaginación exacerbada por las comunicaciones incipientes. Las organizó en grupos afines y les graduó la capacidad de realización, seleccionó a los médiums positivos, calmos, seguros, devotos, coherentes y modestos de aquellos que son improductivos, lacónicos, nerviosos, inseguros, vanidosos o prejuiciosos. Creemos que no guarda relación que los médiums incipientes se introduzcan en la floresta espesa de las contradicciones mediúmnicas, cuando las flores del buen mediumnismo aparecen al margen de los extensos caminos, que ilustran los compendios espiritas. Esos médiums sólo atienden con propiedad al imperativo intrínseco de su mediumnidad en crecimiento, sin aliarlo al contenido doctrinario y moral del Espiritismo. Es la simpatía o la conveniencia espiritual de sus tipos psíquicos el que los hace emprender el desenvolvimiento 15
en ambientes con características diferentes a las reglas que dictó específicamente Kardec junto a la mesa espirítica. Es lo que sucede en los terreiros de la Umbanda, pues desenvuelven a sus médiums bajo una técnica exclusiva, inherente al fenómeno mediúmnico, despreocupándose totalmente de relacionarse con cualquier tipo de disciplina doctrinaria consagrada a través del tiempo. También han de contrariar la pureza del lenguaje espirita aquellos que se colocan bajo la protección o simpatía del Espiritismo, pero que desprecian las bases del desenvolvimiento desenvolvimiento mediúmnico enseñado por el Libro de los médiums. Sería una perfecta tontería, que los científicos terrenos, después de tantos sacrificios y experimentaciones para alcanzar las proporciones y elementos químicos que se combinan para formar las sustancias útiles, como el agua, la sal, el azufre, el azúcar, etc., y los estudiosos modernos de química resolviesen proceder inadecuadamente a través de nuevas y fatigosas tentativas de experimentación, para terminar en las mismas fórmulas de sus antecesores. Tampoco se justifica que ciertos candidatos a médiums prefieran el desenvolvimiento desenvolvimiento mediúmnico empírico, cuando existe el Libro de los médiums, donde la sabiduría, experiencia y la ayuda cordial de Allan Kardec apartaron de las prácticas las fórmulas inapropiadas de las creencias supersticiosas o de las escenas ridículas. 04 Pregunta: Pregunta: Algunos espiritualistas, pensadores, y también algunos médiums "libres" que subestiman el Libro de los médiums, son partidarios de la espontaneidad espontaneidad incondicional del desenvolvimiento desenvolvimiento mediúmnico, alegando que el "kardecista" es un adepto a los postulados absolutos y de enseñanza anacrónica, que en la actualidad, afirman, están superados por los conceptos del espiritualismo moderno. Juzgan que el "kardecismo" es viejo y sinónimo de sectarismo intransigente. intransigente. ¿Qué nos no s decís? Ramatís: No aconsejamos la ortodoxia espirita, capaz de impermeabilizar a sus adeptos contra cualquier esfuerzo ajeno y digno en el campo de la espiritualidad. El Espiritismo, conforme manifestamos, no tiene por objetivo agrupar prosélitos de hierro o estimular movimientos intolerantes; es una iniciativa liberadora de conciencia y no impone sectarismo alguno. Es el generoso fermentó que acelera el psiquismo humano e incita al hombre a liberarse rápidamente de su animalidad. Su misión fundamental, como un catalizador divino, es modificar y exaltar las cualidades de todo cuanto puede intervenir o influir. Es el denominador espiritual común que tasa los nobles valores de las almas, antes de ser una excrescencia sectaria que aísla a los trabajadores devotos, que pertenecen a la misma causa del espíritu inmortal.
16
En base a esas consideraciones veréis que es inapropiada cualquier ironía o calificación de algunos espiritualistas faltos de conocimientos que emiten conceptos contra Allan Kardec y su codificación espirita. Ninguno de sus postulados hiere a otros movimientos religiosos o doctrina espiritualista, pues fueron elaborados sobre las raíces que milenariamente entrelazan a todos los movimientos consagrados a buscar la Verdad. Son principios tan viejos como el espíritu del hombre; están exceptuados de preconceptos de sectas o castas, orientan el curso humano hacia objetivos avanzados de la vida inmortal y superior. Las obras de A. Kardec fueron inspiradas por elevados mentores de los destinos humanos y cotizados psicólogos siderales, conocedores indiscutibles de las ínfimas necesidades de la humanidad terrena. Son tratados accesibles al hombre común, pero suficientes para ayudarlo a su emancipación espiritual. En su trabajo redentor Kardec fue orientado por el Espíritu de Verdad, bajo cuyo pseudónimo se ocultó uno de los más sabios instructores espirituales espirituales de la Tierra, el que además de ser un genial psicólogo sideral, capacitado para descubrir los complejos recónditos del alma humana, es un portentoso cientista que domina todos los problemas kármicos de vuestro planeta._ A Allan Kardec, espíritu generoso, liberado de los absurdos religiosos y de las limitaciones dogmáticas, no se le debe responsabilizar por el fanatismo de algunos "espiritas" irascibles, intolerantes y sectaristas. El Espiritismo no fue codificado para competir con otras religiones existentes, pues sus postulados están basados en la Causa y el Efecto del Karma y en el lógico proceso de la Reencarnación, principios que están consagrados a través de los milenios por todas las filosofías orientales, que se preocupaban por iniciar rápidamente el perfeccionamiento del hombre. El vocablo "kardecismo", bastante generalizado generalizado entre los espiritas, es la indicación apropiada para ejercer el compromiso de la mediumnidad, exceptuada de rituales, idolatrías, ofrendas, distinciones jerárquicas o cualquier tipo de exigencias que exterioriza aquello que sólo requiere un entendimiento sencillo y común. Definitivamente, es la distinción correcta de un procedimiento doctrinario, pero sin menospreciar cualquier idea o movimiento espiritualista ajeno. Las instituciones religiosas, las doctrinas espiritualistas o los estatutos políticos del mundo, no deben ser ajusticiados por el sectarismo infeliz de sus adeptos ignorantes y sentenciosos, que hacen de su creencia el basamento de desquite personal contra aquellos que no concuerdan con sus ideas. Por lo tanto, "kardecismo" no es una agrupación de hombres sustentando doctrinas o religiones ante otro grupo de hombres; es la conceptuación tradicional de un sistema de trabajo mediúmnico. En el campo del mediumnismo es una 17
preferencia técnica, un modo particular de trabajar en contacto con el mundo invisible. El "kardecista" es el que simpatiza con el trabajo mediúmnico de la "mesa", conforme lo preceptuó Allan Kardec para los adeptos de la doctrina espiritista. Mientras tanto, existen otros sistemas de practicar mediumnismo, tal como lo efectúa la Umbanda, el que tiende a objetivar todas las expresiones y aspectos que sus comunicantes poseían en la vida física; o las sesiones de la "mesa blanca" de los Tatwas esotéricos, donde sus afiliados se limitan a transmitir conscientemente la "inspiración" que les ofrecen los familiares de su movimiento. De ese modo, no es lícito que el "kardecista" censure a cualquier movimiento ajeno que atiende el modo peculiar de su institución, practicando un mediumnismo diferente al preconizado por el Espiritismo en su seno doctrinario.
Capítulo 02 LA MEDIUMNIDAD Y EL CONSOLADOR PROMETIDO 05 Pregunta: ¿Qué nexo existe entre la mediumnidad y el Consolador prometido por Jesús? La mediumnidad en sí, ¿qué es? Ramatís: La mediumnidad es un patrimonio del espíritu, es una facultad que se engrandece en su percepción psíquica, tanto como evoluciona y se moraliza el espíritu del hombre. Es de origen esencialmente espiritual y no material, como algunos equivocados sostienen. No proviene del metabolismo del sistema nervioso, como dicen algunos científicos terrenos, pero sí de las interioridades del alma, donde la mente, a semejanza de una eficiente usina, organiza y se responsabiliza por todos los fenómenos de la vida orgánica, que se inician en la cuna física y terminan en la tumba. La mediumnidad es una facultad extraterrena e intrínsecamente espiritual; su manifestación en el campo de las fuerzas de la vida material se vuelve un elemento receptivo de las energías sublimes y constructivas, provenientes de las elevadas esferas de la vida angélica. Cuando se aplica bien, se transforma al contacto magnánimo de la angelitud, trabajando en favor del progreso humano. Mientras tanto, como recurso que faculta el intercambio entre los "vivos" de la Tierra y los "muertos" del Más Allá, también sirve como puente o ligazón para que los espíritus de las sombras actúen con éxito sobre el mundo 18
material. Muchos médiums que abusan de su facultad y se entregan al servicio mercenario, exclusivamente exclusivamente a sus intereses particulares, no demoran en ligarse imprudentemente a las entidades malhechoras de los planos inferiores, de cuya compañía difícilmente consigan liberarse. 06 Pregunta: Dicen ciertos médicos, estudiosos del asunto, que la mediumnidad es un "fenómeno orgánico". ¿Qué opináis sobre ese concepto? Ramatís: Ramatís: La mediumnidad no es el fruto de la materia transitoria, ni es causada por sensibilidades o anomalías del sistema nervioso. Repetimos: es la manifestación característica característica del espíritu inmortal. Es una percepción espiritual o sensibilidad psíquica, cuya manifestación varía de una persona a otra, pues en su esencia depende del tipo psíquico o del grado espiritual del ser que la posee. Aunque todos los hombres son originarios de la misma fuente creadora, que es Dios, se diferencian entre sí, porque son conciencias individualizadas en el Cosmos, pero que conservan sus características particulares, que varían conforme a su mayor o menor edad sideral. Existe un tono espiritual propio y específico en cada alma, que se pone de manifiesto durante el trabajo mediúmnico. Es como la flor, que revela su perfume particular, o la lámpara que expone su luz característica. 07 Pregunta: Conforme hemos observado, la mediumnidad se ha generalizado y recrudece entre los hombres en forma ostensiva. ¿Por qué se manifiesta ese fenómeno con particularidad en nuestro tiempo? Ramatís: Es un fenómeno resultante de la hipersensibilidad psíquica que en el presente resalta entre los hombres, en concomitancia con el "fin de los tiempos" o el simbólico "juicio final", tantas veces profetizado. El siglo en que vivís es el período final de la "Era de la Materia", que hasta el momento se ha regido por la belicosidad, codicia, codicia, astucia, cólera, egoísmo y crueldad, pasiones propias del instinto animal y que predomina sobre la centella espiritual. Os encontráis en los umbrales de la "Era del Espíritu", en donde la humanidad ha de sentirse impulsada hacia el estudio y el cultivo de los bienes de la vida eterna, con acentuado deseo de solucionar los problemas de origen espiritual. Las comprobaciones científicas de la inmortalidad del alma, a través del progreso de la fenomenología mediúmnica, reducirá bastante la fanática veneración del hombre por la existencia existencia transitoria del cuerpo físico. Así como el organismo carnal del hombre en cierto tiempo se verticalizó para servirle en un nivel biológico superior, su espíritu también ha de verticalizarse de la horizontalidad de los fenómenos y de los intereses prosaicos de la vida provisoria, para actuar definitivamente en la frecuencia vibratoria del mundo crístico. 19
La época profética que vivís actualmente, bajo la emersión colectiva del instinto animal simbolizado en la "Bestia del Apocalipsis" que intenta subvertir al espíritu del hombre, esclavo de las formas terrenas, produce ansiedad, nerviosidad e inquietud en las masas humanas, incitándolas bárbaramente a las guerras y revoluciones, luchas entre clases y odios raciales, mientras los científicos investigan cómo hacer para matar más rápido por medio de las armas nucleares. La humanidad del presente que llegó a su hora angustiosa de la selección espiritual y consolidación planetaria, tendrá que decidirse definitivamente por la "derecha" o la "izquierda" del Cristo, pues conforme reza la profecía, serán separados los lobos de las ovejas y el trigo de la cizaña. Conturbase el magnetismo del ser humano a la periferia de su psiquismo exaltado por la energía animal, emergiendo en su desesperada tentativa de subvertir las costumbres, tradiciones y disciplina del espíritu inmortal. Los hombres se encuentran confusos por estar al extremo de dos épocas antagónicas, pues con el reiterado llamado de los planos superiores hacia la cristificación humana, recrudece también la efervescencia del automatismo instintivo de la vida animal. En los hospitales se albergan cantidades de criaturas alienadas u obsesas que provienen de las miserables villas más afectadas económicamente y también de las altas esferas sociales, cuya mayoría se tortura por las crisis financieras o morales. En esa miseria espiritual, que tanto alcanza a los ateos como a los egresados de las doctrinas y religiones, vuestro mundo comprueba que el sacerdocio organizado de las religiones oficiales fracasó en su misión salvadora. Y lo peor es que durante esa eclosión incontrolada del instinto inferior, los espíritus desencarnados y malhechores afirman sus bases en la materia grosera y ejecutan su programa diabólico contra los terrícolas, que tontamente se manifiestan apáticos a las sublimes enseñanzas salvadoras del Cristo Jesús. Actuando en las más contradictorias circunstancias, viviendo en algunos días lo que sus antepasados vivieron en algunos años, el hombre del siglo atómico desequilibra sus nervios y superexcita su psiquismo, perdiendo terreno sobre su control espiritual, volviéndose un instrumento dócil en manos de los espíritus desencarnados y malévolos. Esa constante relación de los "vivos" con los "muertos", aunque los primeros sean inconscientes del fenómeno, terminan por sensibilizarse, con el agravante de que se efectúa en ellos un verdadero desenvolvimiento mediúmnico de inferior calidad. Esa es una de las causas y también la necesidad urgente para que el hombre prudente y bien intencionado se integre definitivamente en los preceptos salvadores del Cristo y los viva siempre a la luz del día.
20
08 Pregunta: El progreso científico actual, ¿contribuye a la hipersensibilización humana, sintonizando al hombre con las fuerzas del mundo oculto? |Ramatís: El cientificismo avanzado del siglo XX ha dado origen a los satélites artificiales, aviones a repropulsión, proyectiles teleguiados y cohetes interplanetarios, mientras que las investigaciones sobre los viejos "tabúes" y secretos de la mente humana son importantísimas contribuciones que aceleran la dinámica del pensar y aumentan el área de la conciencia, sensibilizando la emotividad del ser. Os repetimos, el hombre de hoy vive en algunas horas y en forma simultánea, los raciocinios, reflexiones, conjeturas y las mutaciones mentales y emotivas, que sus antepasados no llegaban a experimentar en decenas de años. El ciudadano del siglo XX enfrenta y resiste obligadamente una cantidad apreciable de fenómenos "psico-físicos" tan equidistantes en sus manifestaciones, que serían suficientes para entontecer a la mayoría de los habitantes terrenos de algunos siglos pasados. Crece la sensibilidad psíquica entre los terrícolas, se acentúa la eclosión de la mediumnidad común, porque se vive bajo la constante presión de los espíritus desencarnados, que explotan esa oportunidad para actuar inquisidoramente sobre la materia. Indiscutiblemente, se confirman los vaticinios de Jesús cuando decía que en el "fin de los tiempos" los viejos y los jóvenes, y hasta los niños tendrían visiones, oirían voces extrañas y profetizarían; todo eso, después del advenimiento del Espíritu de la Verdad. El Maestro indicó claramente el siglo que estáis viviendo en el presente, prediciendo los acontecimientos materiales y neurálgicos de vuestros días y la eclosión simultánea de la mediumnidad, generalizándose entre los hombres, simbolizando al Consolador prometido derramándose sobre sus cuerpos. Así se manifestó el Divino Amigo con sus palabras inolvidables: "Si me amáis, guardad mis mandamientos; y yo rogaré a mi Padre y Él os enviará otro Consolador para que quede eternamente con vosotros el Espíritu de Verdad, que el mundo no puede percibir, porque no lo ve ni tampoco lo conoce. Más vosotros los conoceréis, porque quedará con vosotros y estará en vosotros. Por lo tanto, el Consolador, que es el Santo Espíritu que mi Padre enviará en mi nombre, os enseñará todas las cosas y os hará recordar todo aquello que os he dicho". (S. Juan, Cáp. XIV, vs. 15, 16, 17, 26.) 09 Pregunta: ¿Podríais aclararnos un poco mejor, el sentido correcto de esa promesa hecha por Jesús? Ramatís: Procuramos alcanzar el sentido exacto de la figura que Jesús enunció en la promesa referida y verificamos que el Maestro aludió en particular, a los espíritus desencarnados de orden superior, que son los equipos de condición angélica. Bajo la alegoría del Espíritu Santo o el Consolador 21
prometido es fácil identificar a los grandes grupos de seres angélicos que actualmente trabajan con los médiums dignos y desinteresados de los tesoros del mundo ilusorio de la carne. Os explicó que el Consolador sería el Espíritu Santo, con capacidad para enseñar a los hombres "todas las cosas y también recordaros de sus palabras", no hay dudas, que Jesús se estaba refiriendo a los espíritus angélicos, los únicos que podrían enseñar "esas cosas", pregonar el Evangelio y recordar sus máximas, por intermedio de la facultad mediúmnica de los hombres. El Maestro, al haberse referido a "otro" Consolador en su promesa profética, quiso advertiros que en la Tierra se había manifestado anteriormente un Consolador, que era Él mismo, que vino con la misión de salvar al hombre de la animalidad inferior. Si el Maestro fue el Salvador de la humanidad, debemos considerarlo como "el primero" de los Consoladores que a través del Evangelio sintetizó las leyes que rigen la vida cósmica. El "otro" Consolador, el Santo Espíritu que tenía que venir a derramarse sobre la carne, en todas las criaturas, traería las enseñanzas del "salvador" directamente desde el mundo espiritual, sirviéndose de las voces de los espíritus desencarnados e inmortales. Es lógico entonces, que sólo un espíritu inmortal es el que podría quedar eternamente con vosotros. Jesús también aclaró que los pueblos de su época mesiánica no podían "ver" o "conocer" al Espíritu de Verdad, porque no estaban mentalmente capacitados y mediúmnicamente sensibilizados para comprender y recepcionar con éxito los mensajes de los espíritus elevados. En la primera revelación del Consolador a los hombres. Jesús fue el único representante directo del Santo Espíritu, pues conversaba con los ángeles sobre la salvación de los hombres. Y, conforme a su vaticinio, ese Espíritu Santo, en su segunda venida, nos enseñaría todas las cosas, comprobando la gloria y la realidad de las enseñanzas enseñanzas del Evangelio. En la enunciación del Maestro existe un tópico indiscutible que confirma totalmente su referencia sobre la facultad mediúmnica, que se derramaría sobre los hombres en el siglo actual, cuando dice: "que el Consolador, el Espíritu Santo nos recordaría todo cuanto Él dijera anteriormente. En verdad, gracias al intercambio mediúmnico que progresa aceleradamente, familiarizando a los espíritus desencarnados con los hombres, poco a poco, se va restableciendo correctamente la identidad del Maestro en su peregrinación terrena. Algunas obras psicográficas realizadas por médiums juiciosos y competentes, os revelan con nitidez el porte exacto de Jesús en aquella época, alejándolo de las obras milagrosas y de las contradicciones psicológicas en su tipo espiritual, como asegura la historia religiosa cuando le atribuye la función de mago de feria, deslumbrando a las multitudes en el escenario bíblico de la milenaria Hebrea. Los espíritus de responsabilidad, en sus comunicaciones mediúmnicas, 22
exceptúan al Maestro de las prendas tontas con que lo adornó la ignorancia humana y destruyen el mito religioso de su nacimiento, contrario a las respetables leyes de la genética humana. En verdad, el Santo Espíritu o el Consolador prometido, es el "conjunto de espíritus sabios, bondadosos y angélicos, que a través de los médiums, os enseñan las cosas que el actual progreso de la mente humana les permite evaluar y conocer, y también esclarecer la realidad y verdad sobre la figura y naturaleza sublime del Nazareno en su vida por la Judea. Por todo lo expuesto, debéis saber que el Maestro Jesús, además de haber sido un ángel plasmado en la carne, por su ternura y amor para el hombre terreno, también fue el Sabio, el Sociólogo y el Científico, que tanto conocía las leyes siderales que rigen la evolución de los orbes en sus movimientos cósmicos, como las leyes de la vida humana que regulan los movimientos de los seres. Jamás precisó de los atavíos mitológicos y de los procesos antinaturales de nacimiento para cumplir con su divina misión. Revestido por la indumentaria de los hombres sencillos de la Judea y sin contradecir las reglas sensatas y milenarias de la vida humana, dejó a los terrícolas el más sublime y exacto tratado de redención espiritual.
Capítulo 03 ¿TODAS LAS PERSONAS SON MÉDIUMS? 10 Pregunta: Entre las mediumnidades, ¿cuál es la más avanzada? Ramatís: La mediumnidad más evolucionada es la Intuición pura. No es una facultad ostensible, pero es sublime y oriunda de la elevada sensibilidad espiritual. Es natural y definitiva, es una especie de percepción panorámica que se afina conforme el espíritu se ajusta a sus relaciones e inspiraciones de las esferas elevadas. Es el "eslabón" que une al alma encarnada con la Mente Divina que la creó, facultándolo para transferir hacia la materia el sentido y entendimiento de la vida espiritual superior. Como vosotros sabéis, la mediumnidad es una facultad que no pertenece al organismo carnal, sino al recurso sublime que debe fluir y difundir el esclarecimiento espiritual entre los hombres, y se refina y exalta según la dedicación de su portador con el intercambio superior del espíritu inmortal. El diccionario terreno os: explica el fenómeno. Intuición -dice- es el acto de ver,
23
tener percepción clara, recta, inmediata de las verdades, sin necesidad de raciocinio; presentimiento, visión beatífica. La intuición, por lo tanto, es la etapa más elevada del espíritu; es el corolario de la gran escala que comenzó en el curso primitivo del instinto, hasta alcanzar la razón angélica. Mientras al hombre le domine la razón humana, será gobernado por las fuerzas rígidas del intelecto, será esclavo del mundo de las formas y sometido a las leyes coercitivas de la vida física. Sólo la intuición pura le dará la percepción interior de la realidad cósmica, o le permitirá la concepción panorámica del Universo. En realidad, es la facultad inconfundible que "religa" a los seres humanos con el Creador. Es la divina lente que amplía la visión humana para observar la sublimidad de la vida inmortal. La pureza cristalina de la Intuición fue el atributo de los seres de elevada estirpe espiritual, que delinearon los caminos de luces para vuestro orbe, como lo hicieron Krishna, Confucio, Pitágoras, Buda, Jesús, Francisco de Asís y otros, que en su peregrinación por la vida física, se conservaron constantemente constantemente ligados a las esferas sublimes del espíritu superior, cual puente vivo que une el mundo exterior de la materia a la intimidad del Espíritu Cósmico. La Intuición pura es la "voz sin sonido", la "voz interior", la "voz del sonido espiritual" que habla en la intimidad del alma, es el lenguaje misterioso, verdadero y exacto del Yo Superior guiando al ego que fuera puesto en la corriente evolutiva de las masas planetarias. Como la razón ayuda al hombre para comprender y apreciar la expresión fenoménica de las formas en el mundo material, la Intuición le permite "sentir" todas las leyes ocultas y "saber" cuál es la naturaleza original del Espíritu Creador del Cosmos. Refiriéndonos a la Intuición, como elevado y divino camino para alcanzar la Conciencia Cósmica de su autor Eterno, dice el lenguaje poético de los yogas: "Antes que el Alma pueda ver, deberá alcanzar la armonía interior y los ojos de la carne volverse ciegos a toda ilusión. Antes que el Alma pueda oír, la imagen (el hombre) tiene que volverse sorda a los rugidos de las fieras, a los secretos, a los gritos de los elefantes furiosos, como al susurro de la luciérnaga de oro. Antes que el Alma pueda comprender y recordar, primero debe unirse al Conversador Silencioso, como la forma que se dio al barro para unirse o identificarse al espíritu del escultor. Porque así el Alma oirá y podrá recordar. Entonces el oído interior escuchará la Voz del Silencio" *. *(Nota del médium: Ramatís nos solicitó que transcribiéramos esta parte de la obra "La Voz del Silencio").
24
11 Pregunta: Considerando que la mediumnidad es una manifestación natural del espíritu del hombre, ¿entonces, todas las personas, sin excepción, son médiums? Ramatís: Sí, porque todos nosotros transmitimos hacia el ambiente de la materia los más variados influjos de nuestro espíritu, influenciando a los compañeros con nuestros pensamientos, actos y sentimientos. Existen hombres que por su espíritu altamente optimista y constantemente ligados al bien, son verdaderos médiums de la alegría, esperanza, ánimo y confianza, afectados a los elevados objetivos espirituales de la vida humana. Mientras que los pesimistas vierten constantemente de su intimidad psíquica el mal humor que nubla el azul del cielo de la jovialidad ajena, transformándose en médiums indeseables de melancolía, tristeza y desánimo. La mente del hombre encarnado es el campo que refleja su vida interior, transfiriendo hacia el mundo exterior todo su comportamiento anímico, los pensamientos de los espíritus encarnados o desencarnados de los más variados matices que los influencian en sus relaciones r elaciones cotidianas. Entonces no hay dudas, todas las personas son médiums. La mediumnidad no es un patrimonio particular o exclusivo de los espiritas, pero sí de todos los hombres encarnados, siendo intermediarios de las buenas o malas inspiraciones del Más Allá de la Tumba. También es evidente que la facultad mediúmnica se manifiesta conforme al entendimiento y el progreso espiritual de cada criatura humana. En general, los seres humanos ignoran o no perciben su facultad mediúmnica, porque es el fruto de la sensibilidad psíquica, ni tampoco la mayoría tienen noción cuando participan en los fenómenos del mundo oculto, confundiéndolos confundiéndolos fácilmente con hechos comunes y naturales de la vida terrena. Los hombres que dicen ser ateos o descreídos de la inmortalidad de su propia alma, no justifican que estén exceptuados de la mediumnidad. Ellos también pueden ser instrumentos inconscientes de innumerables acciones, fenómenos e inspiraciones de los desencarnados. 12 Pregunta: ¿Por qué la mediumnidad no se manifiesta en forma apacible, cual fruto de la evolución humana? Generalmente aparece en los seres humanos produciéndoles disturbios mentales o perturbando el organismo físico. ¿Tienen justificación tales hechos? Ramatís: La mediumnidad apacible y natural es el fruto equilibrado de la espiritualidad del alma y se manifiesta en forma serena y espontánea, como un don innato y sin producir sensaciones desagradables en el ser. Lo contrario sucede cuando se trata de una "concesión" provisoria otorgada por la Administración Sideral, siendo comúnmente la denominada "Mediumnidad de 25
Prueba", como causa de una hipersensibilización prematura despertada excepcionalmente por los técnicos del mundo astral a fin de favorecer a los espíritus endeudados para su pronta recuperación espiritual. Durante el período de desarrollo de la mediumnidad, la mayor o menor perturbación psíquica u orgánica del médium depende mucho del tipo de sus amistades espirituales y su forma y conducta de vida con el mundo material. Las alegrías, sufrimientos o tristezas que les embargan súbitamente, se deben a la aproximación del Ser Invisible que se sintoniza perfectamente a sus pensamientos pensamientos y sentimientos manifestados. La tarea mediúmnica no comprende solamente la función mecánica para que el médium transmita las comunicaciones de los espíritus desencarnados hacia el escenario terrícola, atendiendo la prosaica función de ser el "puente vivo" entre el mundo material y el Más Allá. Requiere que sus mediadores vivan una existencia digna y sublime, para conseguir sintonía con los elevados espíritus, responsables por la redención del hombre. Toda imprudencia, desarreglo, rebeldía, mala voluntad o pasiones viciosas por parte de los médiums en prueba, genera toda clase de disturbios psíquicos y sufrimientos físicos incontrolables, por eso el proceso de desarrollo mediúmnico se vuelve torturante. Es muy común a la mayoría de los médiums, iniciar el despertar de sus facultades bajo la actuación de los espíritus sufrientes, imperfectos u obsesores que aprovechan la "puerta mediúmnica" (abertura para la fenomenología del mundo material) para satisfacer sus objetivos impuros y crueles. Si el médium es poco celoso e indisciplinado de su condición mediúmnica y estuviera comprometido por su estado de rescate kármico, entonces se convertirá en el instrumento deseado para el vampirismo de los desencarnados, que se inclinan ávidamente sobre el mundo material. La mediumnidad, en sentido general, se despierta en los seres humanos a través de los sufrimientos que les afecta la carne y el psiquismo, para después docilizarse por medio de un desenvolvimiento ordenado en los ambientes favorables y dirigidos por elementos capacitados. Así entonces, el médium neófito y perturbado, poco a poco se irá ajustando a la tarea fenoménica y controlará el psiquismo para conducir su cuerpo, mientras procura sintonizarse vibratoriamente con el espíritu guía y benefactor, que deberá protegerlo en su trabajo de intercambio con el mundo invisible. 13 Pregunta: El desarrollo mediúmnico, para ser eficaz, ¿debe ineludiblemente ajustarse a las orientaciones del Libro de los Médiums de Allan Kardec? Ramatís: El desenvolvimiento mediúmnico, conforme a la técnica y orientación dejada por A. Kardec en el Libro de los Médiums, tiene la finalidad 26
de proteger la facultad que se manifiesta ostensiblemente entre los hombres y permitir que desde el Espacio se emita el pensamiento de los desencarnados autorizados para encaminar a la humanidad. La necesidad de desenvolver la mediumnidad, en cierta forma, nos recuerda al fenómeno de la electricidad; si ésta es controlada y orientada por el hombre para servirse beneficiosamente, le prestará servicios admirables y le ayudará a formar un mundo más agradable. Mientras tanto, manejada por personas sin experiencia, o aplicada sin discriminación alguna, será una fuerza que destruye y mata. De idéntica forma, la facultad mediúmnica bien aplicada siembra esperanzas, orienta a las almas en medio de los caminos peligrosos, de las seducciones de la materia y soluciona los motivos de innumerables problemas dolorosos de los destinos humanos. Mal usada, perturba, falsea y deforma el verdadero sentido de las cosas, causando desilusiones inolvidables. La leyenda bíblica de Adán y Eva, la primera pareja expulsada del Paraíso terrestre, no deja de advertiros en su simbolismo mitológico, que ambos eran espíritus creados por Dios, con el derecho y ,el libre albedrío de escoger "intuitivamente" "intuitivamente" aquello que más les conviniera. Y, como nos cuenta la leyenda, la primera pareja prefirió atender a la voz maléfica de la serpiente, símbolo del instinto animal inferior, en vez de aceptar el consejo del ángel del Señor, que les inspiraba para la contemplación espiritual. En Adán y Eva, mito bíblico que significa la aparición de la raza adámica, surgiendo al mismo tiempo en varias latitudes de la Tierra, verificándose la existencia del espíritu capacitado para escoger su destino, señor de una capacidad espiritual, con suficiencia para discernir entre las voces del Mal y del Bien. Habiéndose establecido que los primeros encarnados de la Tierra podían tomar relación con los ángeles o los diablos, es decir, con los buenos o malos espíritus, se comprueba también que el primer habitante terreno era un médium en potencia. Después del advenimiento espirita y de los estudios avanzados de Allan Kardec, se consolidó un derrotero evolucionado para el ejercicio de la mediumnidad. He ahí entonces por qué defendemos la tesis de que el médium desenvuelto, pero sin el mecanismo técnico del Espacio y la comprensión psicológica explicada en el "Libro de los Médiums", llegará a corresponder integralmente a las elevadas iniciativas del plano superior. 14 Pregunta: Pregunta: La mediumnidad ¿evoluciona? Ramatís: Tanto como evoluciona el psiquismo del hombre, dado que es correlativo a su progreso y evolución espiritual. También es necesario distinguir que la base evolutiva de la mediumnidad no debe llevarse a cuenta de la 27
manifestación ostensiva de los fenómenos incomunes del mundo material. Tanto es así que el médium de fenómenos físicos, aunque demuestre una fenomenología espectacular y sorprendente para los sentidos carnales, no sobrepasa al médium altamente intuitivo, que es el fruto de elevado grado espiritual, alcanzado alcanzado por el hombre. Con respecto a los fenómenos físicos en sí, dependen fundamentalmente de la mayor o menor cuota de ectoplasma producido por el médium, para permitir la materialización de los desencarnados en el ambiente físico; el médium intuitivo, de elevado nivel espiritual, es capaz de transmitir mensajes que ultrapasan los niveles comunes de la vida humana. Aunque no sorprenda ni satisfaga los sentidos físicos en sus comunicaciones de carácter espiritual, puede trazar derroteros definitivos para el progreso sideral de los hombres. En el primer caso, la mediumnidad de fenómenos físicos se manifiesta en forma espectacular al contacto con el mundo de las formas, es un acontecimiento transitorio que convence a muchos sobre la realidad espiritual, pero no siempre los convierte al reino amoroso del Cristo. En el caso de la Intuición Pura y elevada, el ser pone de manifiesto la realidad crística de los planos superiores, despreocupado en probar si el alma es inmortal, pues "siente" en sí mismo, que su ventura está más allá de las formas perecederas del mundo fenoménico de la materia._ Francisco de Asís tenía para sí mismo la facultad divina que le hacía vislumbrar los mundos angélicos de Jesús, sin necesidad de demostraciones espectaculares, fenómenos de materializaciones, levitaciones o voz directa- de los desencarnados. En consecuencia, la mediumnidad intuitiva, o más propiamente dicha, la "mediumnidad espiritual" es una facultad superior, que sobrepasa a todas aquellas que dependen de la fenomenología del mundo transitorio de la carne para probar la realidad del espíritu inmortal. Aunque sea loable la preocupación de los estudiosos del Espiritismo para profundizar los fenómenos mediúmnicos destinados a convencer a las personas sistemáticamente incrédulas, la más evolucionada de las mediumnidades sigue siendo la Intuición Pura, porque ayuda al hombre para relacionarse directamente a la fuente de su origen divino. 15 Pregunta: ¿Entonces no es conveniente la intensificación de los trabajos de fenómenos físicos; no precisan desenvolverse conforme a la técnica adecuada a su tipo mediúmnico? Ramatís: Así es, deben desenvolverse, no somos adversos a los trabajos de fenómenos físicos, donde se producen los de materializaciones, voz directa, levitaciones o transportes, los cuales obedecen a un programa elevado y elaborado por los mentores de la Tierra. Por otra parte, ese género de fenómenos mediúmnicos cada día se multiplican más en vuestro mundo, como un imperativo determinado por la evolución del planeta. Dios, Padre Magnánimo 28
y Justo, atiende a todos sus hijos conforme a su capacidad, entendimiento intelectual y gradación espiritual. Todos los hombres, a su debido tiempo, tendrán la oportunidad de conocer el mensaje que comprueba la sobrevivencia del alma, y todos aquellos que por falta de sensibilidad espiritual no pueden concebir su propia inmortalidad espiritual, serán despertados por el espectáculo ostensivo de la fenomenología medianímica de los trabajos de efectos físicos, donde la voz directa, las materializaciones, materializaciones, levitaciones y acontecimientos acontecimientos incomunes serán suficientes y capaces de aplastar al más intransigente de los escepticismos humanos. También debe tenerse presente que la mayoría de los asistentes a la fenomenología mediúmnica no se convertirán repentinamente ante los principios de la vida espiritual, ni adoptarán inicialmente las bases morales afirmadas en la sobrevivencia del alma. El tiempo, el buen ánimo y una decisión valerosa removerán los hábitos envejecidos, las convicciones y prevenciones estratificadas en los siglos pasados. Aquellos que dan muestras de sentirse cansados de las ilusiones de la vida física, serán los más indicados, después que comprueben la sobrevivencia del espíritu a través de los fenómenos citados, para dedicarse sinceramente al culto de los valores espirituales elevados, con cierta ansiedad para alcanzar brevemente la ciudadanía sideral. 16 Pregunta: Pregunta: Si todas las personas son médiums, ¿también deberán sufrir la influencia constante de los espíritus descarnados? Entonces, ¿serán estimulados hacia el bien o el mal, en base a su sintonía mediúmnica? Ramatís: Siempre existen las posibilidades para que todos los vivos sean influenciados por los espíritus desencarnados, que los acechan constantemente, valiéndose de cualquier susceptibilidad psíquica o vulnerabilidad moral, para insinuarles sus intenciones maléficas. También es verdad que no todos los hombres perciben psíquicamente la presencia de los desencarnados, o distinguen fluídicamente los buenos de los malos espíritus, por cuyo motivo dicen que están exceptuados de las sensibilidades mediúmnicas. El acontecimiento es más común de lo que ellos piensan, pues es constante la acción o intervención de los espíritus en medio de las actividades humanas de los encarnados. Muchas personas, que dicen ser insensibles a la influencia oculta del Más Allá, no saben que hace tiempo son verdaderas prolongaciones vivas de algunos desencarnados astutos y dañinos, reproduciendo en el medio ambiente del mundo terreno sus deseos pervertidos. Conforme hemos afirmado, todo es cuestión de afinidad electiva, en donde los vivos se sintonizan con los muertos, conforme a su característica mental y naturaleza de sentimientos cultivados durante la vida terrenal.
29
También es muy necesario recordar que los espíritus desencarnados en su mayoría se arrastran por la superficie terrena, encadenados a las pasiones y deseos carnales que no pueden satisfacer desde su plano astral, ni tampoco se dedican o preocupan en mejorar su situación aflictiva. Algunos ambulan víctimas de su propia incuria espiritual, siendo esclavos de las emociones animalizadas y primitivas, a causa de su relajamiento y desinterés por su suerte; otros, bastante experimentados en los trabajos repulsivos de la obsesión y la perfidia, tratan de entrometerse en vuestra vida material, insuflando ideas erróneas y orientaciones confusas para precipitaros al ridículo y desesperación. No retroceden delante de los mayores obstáculos, siempre que puedan perjudicar vuestra estabilidad moral o situación financiera. Ociosos, exigentes, exigentes, sensuales y esclavos de los vicios terrenos, vampirizan las energías ajenas, haciendo de sus víctimas la prolongación viva y viciosa para saciar algunas de sus pasiones impuras. Pablo de Tarso, en su epístola a los Romanos, afirma lo citado anteriormente, cuando dice: "Estamos rodeados de nubes de testimonios", confirmando que los hombres están rodeados de masas de espíritus que los vigilan en todos sus actos y actividades de la vida física. En medio de la masa que conforma los espíritus malévolos, livianos y viciados, se infiltran algunas almas benefactoras, benefactoras, dispuestas para la lucha tenaz a los fines de convertir a esos desventurados de las sombras y menguar la acción perniciosa sobre los encarnados. Son almas que salen del mundo oculto para inspiraros hacia el Bien y hacen todo lo posible para ayudaros satisfactoriamente en los problemas justos de la vida humana, para liberaros de las tristezas ocasionadas en las vidas planetarias. Desgraciadamente, cuando un espíritu consigue desviaros de la senda tortuosa, existen decenas de almas pervertidas que realizan ingentes esfuerzos para arrastraros a los peores deslices y equívocos espirituales. Y, conforme os manifestamos anteriormente, aunque todas las personas sean médiums, su mayor o menor sintonía con los espíritus desencarnados depende de la sensibilidad mediúmnica de orden inferior o superior. Toda persona es un médium en potencia, y puede relacionarse ostensiblemente con los desencarnados por medio de la fenomenología mediúmnica, visible para el mundo material, como recepcionarlos en la intimidad de su conciencia inmortal. 17 Pregunta: Las afirmaciones que hicisteis sobre los médiums en potencia que somos todos los encarnados y que estamos continuamente continuamente observados por los buenos o malos espíritus, ¿no podrían causar grandes temores en las personas de poco conocimiento para entender esta revelación espontánea? Si somos espíritus encarnados, estamos en desventaja ante los espíritus malhechores y con cierta libertad en el Más Allá. Creemos que nos sería muy 30
difícil resistir por mucho tiempo el asedio inescrupuloso de esos seres mal intencionados. intencionados. ¿No lo creéis así? Ramatís: Nosotros no podemos modificar la realidad de la vida creada por Dios desde el comienzo de la humanidad y que obedece al siguiente e inmutable principio: "los hombres buenos atraen a los buenos espíritus, y los hombres malos atraen a los malos espíritus". Esa relación se ejerce a través de la "afinidad electiva", que es responsable por la atracción y armonía entre los astros, al igual que rige la simpatía entre las sustancias y el amor entre los hombres. En base a tales consideraciones, que regulan el efecto, la atracción o él entendimiento entre todas las cosas creadas por Dios, existe la oportunidad para que los encarnados sufran la mala acción de los espíritus desencarnados, cuando se pierde el sentido directivo de conducta espiritual en la materia. Tales hechos pasan porque se apartan de las enseñanzas crísticas de la vida superior, que fueron divulgadas y pregonadas a todos los pueblos por los instructores adecuados a cada raza, índoles psicológicas y sentido artístico. Ninguno puede alegar ignorancia sobre esos acontecimientos, pues Dios atendió a todos los hombres, cuando envió a la Tierra en su época propicia a Hermes en Egipto, Antulio en la Atlántida, Buda en Asia, Zoroastro en Persia, Krishna y Rama en la India, Confucio en China, Pitágoras en Grecia, y el inconfundible Jesús en la Hebrea, fueron todos mensajeros divinos que esclarecieron a los hombres sobre los principios que transforman a la criatura animalizada en un ciudadano angélico de la morada celeste. Ellos fijaron las bases o elaboraron los estatutos divinos del largo camino humano por la senda evolutiva en busca de la Verdad; muchas veces sus palabras se revistieron de poesía; otras se deslizaron bajo la gravedad sentenciosa de la responsabilidad espiritual, o el pensamiento augusto y sublime era auspiciado por las parábolas encantadoras. encantadoras. Pero en esencia, lo que esos admirables instructores pregonaron al hombre -sorprendido por tener que apartarse de su tarea animalesca permaneció en un solo fundamento, en una sola verdad: la revelación del Espíritu Inmortal. También dejaréis vuestro cuerpo en la sepultura terrena, y seréis espíritus desencarnados, desencarnados, tan benefactores o malignos, según haya sido vuestro trato con las pasiones, vicios o virtudes expuestas en la superficie del mundo físico. Conocéis el derrotero que os puede apartar de las malas compañías o del dominio, de quienes se alimentan en el banquete detestable de las pasiones y 'vicios del mundo animal. Los desencarnados respiran por afinidad en vuestro hálito mental, sintonizándose a vuestra esfera emotiva en correspondencia del alimento adecuado que les ofrecéis; o ellos se nutren con vosotros en la
31
efervescencia de las pasiones delictuosas, o intercambian los pensamientos crísticos decepcionados decepcionados en la esfera del Cristo. Cr isto. Todo depende de vosotros, conforme a la resistencia o inmunización contraria a los espíritus malhechores del Más Allá, pues el proceder elevadamente, el apartarse de los vicios que estigmatizan y de las iniquidades humanas, es lo que sintoniza al hombre con la faja vibratoria y sideral de los seres angélicos, que los protegen contra los espíritus imperfectos. Así como los gérmenes nocivos son atraídos por el deterioro de la fruta podrida, los espíritus mal intencionados también acuden presurosos junto a aquellos que les ofrecen el alimento impuro y adecuado. 18 Pregunta: Concordamos en que todos los hombres son espíritus encarnados y médiums potencialmente innatos; preguntamos entonces: ¿por qué la doctrina espirita es la única en pregonar tal condición humana, cuando los demás credos e instituciones espiritualistas guardan silencio al respecto? Ramatís: No es preciso que el hombre sea espíritu para que se le considere médium; lo importante es que sea digno y bueno, a fin de rodearse de buenas influencias y atraiga los seres excelsos. El Catolicismo y el Protestantismo Protestantismo no admiten la mediumnidad con la denominación denominación específica que le da el Espiritismo, pero la consideran como una "gracia" extemporánea que Dios concede a las almas santificadas. Mientras tanto, la interpretación diferente o la denominación de fenómeno mediúmnico, no le cambia el carácter por revelarse en otro ambiente espiritualista o adverso a los postulados espiritistas. Es suficiente decir que la Biblia como la historia de la religión católica y protestante está saturada de relatos, visiones y otros fenómenos mediúmnicos, aunque se expliquen bajo el antifaz de los "milagros" o "gracias" inesperadas otorgadas por Dios. Todo eso está corroborado por las visiones proféticas de Don Bosco, Francisco de Asís, Antonio de Padua, Papa Pío XII, Santa Teresa de Jesús, María y otros, inclusive las apariciones de Lourdes y Fátima, que son fenómenos mediúmnicos registrados por niños y personas "médiums". En otras oportunidades hemos explicado que ciertas instituciones espiritualistas trataron de sublimar o aristocratizar los acontecimientos poco comunes del intercambio que tenían sus adeptos con el mundo oculto, los que fueron médiums en la acepción exacta y vulgar de la palabra, a pesar de ocultar la veracidad de los fenómenos mediúmnicos con terminologías iniciáticas._ La diferencia consiste en que el Espiritismo trata el asunto de la mediumnidad a las claras, sin tabúes iniciáticos o nomenclaturas complejas. Las expone a la luz del día y las examina sin ritualismos complicados. El hombre que es beneficiado desde lo Alto con la "dádiva" de la facultad mediúmnica, conoce por 32
medio de la doctrina espirita sus deberes ante el mundo físico y sus responsabilidades responsabilidades para consigo mismo. Por encima de todo, que el médium sea beneficiado por la riqueza, posea un cerebro genial glorificado por la academia del mundo, o sea la criatura paupérrima afectada por el cargo de una familia numerosa, su deber es servir en la medida de sus fuerzas, pues la causa principal que lo debe impulsar es su redención espiritual. Despreciando todas las interpretaciones sibilinas, las nomenclaturas aparatosas y las gradaciones excepcionales de los acontecimientos iniciáticos de muchas instituciones espiritualistas, en esencia, todos son fenómenos mediúmnicos. En esas circunstancias se encontraban como médiums el reverendo G. Vale Owen, protestante, cuando recibía los mensajes mediúmnicos de su progenitura en la sacristía de su iglesia; Alice A. Bailey psicografiaba en el ambiente iniciático las orientaciones del iniciado Tibetano; eran médiums la señora Helena P. Blavatsky, el obispo anglicano Leadbeater, Geoffrey Hodson, Elsa Barker y otros afiliados a la Sociedad Teosófica, quienes recibieron comunicaciones directas o indirectas del mundo oculto, a pesar de haberles dado una procedencia completamente opuesta al fenómeno mediúmnico y la forma como lo encara la doctrina espirita. Aunque tales movimientos espiritualistas o religiosos no usen el vocablo "médium" como expresión espiritista, sus mediadores no dejan de encuadrarse en la técnica sideral de la manifestación mediúmnica, cuando captan los mensajes directamente de sus Maestros o por vía de la intuición. Las escuelas teosóficas, rosa-cruces, esotéricas y yogas evitarán en sus enseñanzas y prácticas el contacto mediúmnico con las regiones inferiores del mundo invisible y aseguran, que "ni bien el discípulo se encuentra pronto, el Maestro aparece". Fervorosamente pugnan para que sus adeptos se modifiquen primero en su intimidad espiritual, para que después intenten sus relaciones con los seres etéreos del mundo invisible. No hay dudas que son disposiciones loables, meritorias y sensatas, mas el Espiritismo es un movimiento popular y de amplitud general, destinado a todos los hombres. Mucho antes de atender con preferencia a quienes se encuentran en el "Camino de la Verdad", está destinado en sus principios a amparar a los hombres incrédulos, desajustados y torturados por la eclosión de la mediumnidad de prueba. El despertar de esa facultad exige cuidados urgentes y un derrotero seguro, para evitar el fracaso del programa delineado por el Espacio. La manifestación mediúmnica no depende de la creencia o poderío religioso, ni de las convicciones personales del hombre o del ambiente donde viva, es una consecuencia inalterable del compromiso que el espíritu asumió antes de reencarnar, cuyo mandato requirió para su beneficio y deberá 33
cumplirlo en la hora fijada. Quienes sean ateos, devotos a cualquier secta religiosa o se encuentren comprometidos con alguna institución iniciática, la facultad mediúmnica de "prueba" les aparece en el momento exacto para comenzar su tarea sacrificial. Ignoran muchos teósofos, esoteristas, adeptos Rosacruces y algunos fraternalistas afiliados afiliados a los cursos iniciáticos, que siendo ponderable su método idealista, empleado para desenvolver conscientemente sus facultades ocultas, ajenos al intercambio espiritual con las almas superiores, cuando reencarnan comprometidos para ejercer la "mediumnidad de prueba", tendrán que someterse al proceso graduativo y disciplinado por la técnica espirita de desenvolvimiento, preconizado por Allan Kardec. Mientras tanto, los hombres que por su sensibilidad espiritual son médiums naturales y usufructúan el don espontáneo de la intuición pura, presentarán condiciones psíquicas poco comunes y satisfactorias para lograr una gradación destacada en cualquier doctrina o institución iniciática, sin necesidad de ejercer la función pasiva del médium en servicio con los espíritus del astral inferior. Pero los que en vidas pretéritas abusaron de su dirección mental y utilizaron su inteligencia lúcida para someter a los menos agraciados por la suerte, sea por cupidez, egoísmo, avaricia o "que calumniaron para usurpar los bienes ajenos, sembrando perjuicios irreparables, han de cumplir con su mandato mediúmnico en la condición humillante de ceder su organización carnal para que los viejos adversarios o víctimas del pasado puedan reajustarse, a la brevedad, a los preceptos del Cristo. 19 Pregunta: Todas las instituciones espiritualistas que reciben la influencia de los desencarnados, ¿son movimientos análogos al Espiritismo? Si todos los hombres son médiums y de una u otra forma ejercitan su facultad en medio de su doctrina, ¿por qué deben diferenciarse de los espiritistas? Ramatís: Primero, es conveniente distinguir lo que es Espiritismo y qué significa Mediumnismo. Espiritismo: es una doctrina disciplinada por un conjunto de leyes, principios y reglas, que tanto orienta las relaciones entre los espíritus encarnados y desencarnados, como promueve la renovación filosófica y moral de sus adeptos. La facultad mediúmnica: puede existir en forma independiente independiente en la criatura espiritista o en aquellos que ignoran los fenómenos mediúmnicos. Existen ciertos médiums que actúan en varios sectores espiritualistas pero no aceptan ninguno de los postulados básicos del Espiritismo, como también existen espiritistas que son alérgicos a las sesiones mediúmnicas y sólo se interesan por el contenido filosófico de la doctrina. Muchas veces es preferible admitir los conceptos lógicos con que A. Kardec integró la codificación espirita, 34
antes que buscar pruebas y colegir los principios doctrinarios del Espiritismo por intermedio de algunos médiums mañosos, tontos, anímicos y prejuiciosos, que no siempre mantienen una conducta regular en el mundo profano. El hecho de comprobarse la actuación de los espíritus en cualquier tipo de trabajo mediúmnico, no quiere decir que allí se practique Espiritismo. La doctrina espirita se confirma en sus prácticas, cuando sus adeptos aceptan y cultivan las reglas y principios morales en el trato con la vida material, sin utilizar los dones de la facultad mediúmnica. No es suficiente que el hombre frecuente los centros espiritistas, que escuche a los espíritus en palestras pales tras sobre el espíritu inmortal, solicite recetas y pases, para considerarse excelente espiritista. De la misma forma nacen los católicos y demás religiosos, que consideran confusamente la devoción interesada y la mendicancia a los santos y profetas, como si fuera su propia renovación renovación espiritual. Es necesario que los adeptos de la doctrina espírita, antes de ser meros espectadores de las reuniones mediúmnicas y "pedigüeños" incorregibles de los beneficios ofrecidos por el Más Allá, se integren al cumplimiento incondicional de sus postulados morales, que por encima de todo, deben mejorar la conducta del hombre. Hay muchos espíritus egresados del Catolicismo, antiguos y ociosos frecuentadores de misas, novenas y viciados en las comuniones, que después de afiliarse al Espiritismo, conservan la idiosincrasia y displicencia anterior para cumplir con sus deberes. A pesar de encontrarse muy impresionados por la fenomenología mediúmnica, todavía no se hallan a gusto con la doctrina, y continúan extrañados espiritualmente sin ajustarse a las enseñanzas que objetivan a la brevedad, la integración del hombre al reino del Cristo. Apáticos a la misión redentora del Espiritismo, algunos ex católicos que recién se incorporan a la siembra, subliman sus antiguas devociones y ruegos, viciándose con el pase que "siempre hace bien" o la receta mediúmnica, que debe atender desde la afección del brazo, hasta la hepatitis provocada por el abuso de los condimentos y alcoholes. Estos se equivocan equivocan con respecto r especto al sentido exacto del Espiritismo, como doctrina de redención espiritual, donde los neófitos requieren la atención de los fatigados trabajadores del Espacio, para que les solucionen las enemistades domésticas o corrijan a los parientes que viven desajustados de los caminos espirituales. El espirita, como decía Allan Kardec, "se conoce por la modificación moral que efectúa a través de todos los días". De no ser así, bastaría la presencia constante de sus simpatizantes a los centros espiritistas, la utilización indiscriminada del servicio mediúmnico, para caracterizarse como un verdadero espirita. Con esa forma de pensar y obrar, también se podría instituir "la cartera de puntualidad y frecuencia", a semejanza de las escuelas, graduándose el 35
espiritista conforme sea su presencia a las reuniones y a la mayor cantidad de pases y recetas que pudieran solicitar a los médiums, exactamente a lo que sucede en la Iglesia Católica, donde la prodigalidad de confesiones, misas y comuniones, gradúan al buen católico. 20 Pregunta: Si todos somos médiums, y diferimos solamente por la sensibilidad medianímica, ¿cómo podríamos ubicar a quienes deben desenvolver desenvolver sus facultades bajo la técnica espirita? Ramatís: Las personas que demuestran su facultad en forma ostensiva, donde se percibe claramente el fenómeno "incomún", algo que les domina la mente, la voluntad o padecen de perturbaciones psíquicas, son seres necesitados de un desarrollo mediúmnico disciplinado y bajo el control de personas muy experimentadas. Conforme explicamos anteriormente, son espíritus que reencarnan comprometidos con la "mediumnidad de prueba" y tienen severas obligaciones kármicas a causa de sus iniquidades cometidas en el pasado. Esos espíritus son agraciados por la bondad de los Mentores a través de la hipersensibilidad de su periespíritu y de la intervención de los, técnicos siderales, reencarnando con la "gracia prematura" de participar en un servicio extra, pero obligatorio en el mundo físico, que les despierta la sensibilidad hacia los objetivos espirituales. Tanto los hombres cultos e ignorantes, ricos o pobres que sufran la insidiosa perturbación que les afecta el psiquismo y desequilibra los nervios, no son más que criaturas necesitadas de urgente ayuda de los trabajos espiritas, para lograr ajustarse nuevamente en su dirección psíquica y armonizarse definitivamente definitivamente con sus viejos adversarios. Algunos encarnados, cuya mediumnidad repunta súbitamente, con síntomas obsesivos, requieren los cuidados urgentes de otro médium bien desenvuelto, pues han reencarnado con la obligación kármica de cambiar las convicciones infantiles o ateístas de su familia carnal. Al ser responsables en el pasado por acontecimientos morales, que llevaron a algunos seres a la desesperación, la locura, o el suicidio, están obligados a soportar las pruebas de la obsesión y curar posteriormente, a fin de modificar las convicciones de su parentela, que generalmente fueron sus víctimas. Aunque todos los hombres más o menos son influenciados influenciados por los espíritus desencarnados, no debéis olvidar que también existen espíritus buenos, dedicados a benefactores que actúan con todos los que en la vida física buscan su rehabilitación espiritual. También es necesario que el hombre se renueve constantemente en la estructura de sus pensamientos y manifestaciones de sus sentimientos, debiéndose introducir, tanto como le fuera posible, en el curso superior de la vida espiritual. Los que desean liberarse de las entidades 36
opresoras de las sombras, no deberán descuidar su reajuste moral, el estudio superior y su control emotivo y mental, sobre sus deseos inferiores y pasiones violentas.
Capítulo 04 LA "PRUEBA" DE LA OBSESIÓN 21 Pregunta: ¿Podríais explicarnos esos casos, donde el espíritu debe reencarnar bajo el fatalismo de la obsesión, para que sus familiares despierten y se interesen en los postulados de la vida inmortal, y que después sean curados por el Espiritismo? Nos extraña ese aspecto de la obsesión, pues sabemos que ninguno renace en la Tierra bajo el determinismo de sufrir penalidad o castigo alguno, por imposición de los espíritus superiores. ¿Cuál es vuestro pensar? Ramatís: Los Mentores Espirituales jamás determinan que los espíritus se reencarnen bajo el estigma implacable de la obsesión, víctimas de homicidios o sufran accidentes fatales, fatales, lo que sería punición deliberada e incompatible con la Bondad del Creador. Los espíritus afectados son encaminados hacia la materia por sus propias causas, basadas en faltas e indisciplinas cometidas en existencias pasadas, siendo colocados en medio de las influencias mórbidas o maléficas, semejantes a las que promovieron en el pretérito. La nueva existencia física puede serle favorable o no, depende fundamentalmente de la forma cómo piensa y actúa en la materia y en medio de sus viejos compañeros, víctimas o verdugos, pues están sujetos a sus pasiones, vicios o virtudes. Siempre que sean dignos y vivan amorosamente en favor del prójimo, podrán sobrevivir sin conflicto o tragedias, recibiendo con justicia la ayuda espiritual de sus mentores, que de modo alguno desean castigarlos, pero sí recuperarlos espiritualmente. El espíritu que haya renacido en medio de malhechores y fuere blanco de un obsesor cruel, siempre que se dedique heroicamente al bien ajeno, ejercite su ternura, amor y magnanimidad hacia todos, sin distinción de creencias, razas o castas, tendrán mayores posibilidades de sobrevivir en la materia y distanciados de las violencias o fines trágicos. 22 Pregunta: ¿Qué concepto podríamos tener de esos espíritus que renacen con la "probabilidad" de sufrir la prueba de la obsesión, a causa de las iniquidades cometidas en vidas pasadas?
37
Ramatís: Es natural que la rebeldía, el ateísmo, la sensualidad o el pesimismo son estimulados en los humanos por los malos escritores, oradores intencionados y líderes intelectuales maquiavélicos, que influenciados por el existencialismo apocalíptico de la época, utilizan su inteligencia y perspicacia mental para afectar el alma de sus ingenuos lectores y admiradores desprevenidos. Ciertas filosofías, crónicas y adoctrinamientos modernos, inducen al hombre a la confusión y toman los raciocinios rebuscados de la mente terrena, como si fueran bienes supremos del espíritu inmortal. Aconsejan a sus discípulos intencionadamente para que se reencuentren consigo mismos, provocando una especie de "fuga interior" que los libere de las obligaciones que pudieran tener hacia la jerarquía espiritual, e intentan convencerlos que serán humillados si concuerdan o simpatizan con la idea de un Dios, que reina por encima de los valores del intelecto humano. Esos espíritus exageradamente intelectivos, que emplean sus talentos para sembrar el descreimiento, inconformidad, rebeldía y ociosidad espiritual, que viven preocupados en fundar escuelas filosóficas exóticas, que alejan al hombre de su responsabilidad espiritual y lo excitan hacia una existencia puramente sensual, dificultan la perfecta aplicación de la Ley de Evolución en la marcha progresiva de las criaturas de menor sensibilidad mental. Y, conforme a la Ley Sideral que dice: "la cosecha siempre ha de ser conforme haya sido la siembra", tales filósofos aniquiladores, tendrán que corregir en vidas futuras los desvíos que provocaron en sus tontos discípulos, curándoles los raciocinios insensatos y haciéndoles reconquistar el respeto perdido. Como sembraron confusiones mentales y psíquicas en otros cerebros incautos, deberán encarnar en medio de "esas familias", cuyas creencias discordantes o infantiles, los retardaron en la senda del progreso espiritual. Entonces les cabe ayudarlas a liberarse del negativismo secular o del dogmatismo asfixiante, a fin de compensar los perjuicios causados en base a los postulados contradictorios que pregonaron en el pasado._ Por lo tanto, nacen en el futuro con ese implacable deber de despertar a sus viejos familiares o amigos, atrofiados por el culto a los dogmas incisivos o totalmente apáticos a la vida inmortal, Gracias a su sacrificio y a la cura por medio de la doctrina espirita, esos espíritus perturbadores del pasado, terminan reajustándose meritoriamente junto a aquellos de cuya confianza, candidez o vulnerabilidad mental abusaron. 23 Pregunta: Los líderes o maestros de filosofías extrañas y perturbadoras, ¿son los que en futuras existencias deberán inmolarse para despertar a sus seguidores engañados del pasado? 38
Ramatís: Aquellos que sedujeron a los ignorantes para el culto de sus doctrinas subversivas, aniquiladoras y negativistas, deberán renacer posteriormente y volverse "obligados objetivos" para reformar y recuperar a sus antiguos seguidores, aún confusos en la senda de la espiritualidad. Bajo, una disciplina férrea pero justa de la Ley Sideral, que rectifica y no castiga, retornarán al ambiente del mundo físico, situándose en medio de las familias terrenas, comprometidos para incentivar el despertar de la ilusión intelectiva, de la hipnosis de los sentidos pasionales o de la esclavitud del ateísmo infeliz, a quienes les siguieron tontamente en otras vidas. Esa tarea abnegada no se les impone arbitrariamente; la razón esclarecida y consciente por reducir su débito kármico, les permite aceptar el servicio doloroso en favor del prójimo y también para su propio beneficio. También es una gran verdad que la familia humana ignora la razón de los acontecimientos dolorosos que se manifiestan y que constituyen las desventuras en medio del camino evolutivo en que les toca actuar. Así se forman los cuadros del sufrimiento redentor: aquí es el hijo que nace con la enfermedad congénita y se arrastra penosamente, provocando angustias en sus consanguíneos; allí, el jefe de la familia es acosado por una cruel enfermedad, que resiste a los esfuerzos realizados por la medicina oficial, marchando tristemente hacia el cementerio y a su vez lacera los corazones de sus familiares íntimos; acullá, una enfermedad dañina ataca a la hijita querida, haciéndole padecer la "vía crucis" de los consultorios e instituciones psicópatas, profiriendo gritos extraños y ofendiendo con palabras groseras. Mas la Ley es atenta y permanece en observación y cuando la desesperación alcanza a la totalidad de la familia, sucede un milagro inesperado y bajo fortuita coincidencia surge el médium curativo, que recupera al hijo en sus movimientos atrofiados desde la cuna, restablece la salud del jefe de la casa, cuya medicina oficial no tenía remedios curativos, curativos, y aún, gracias a la dedicación de algunos adeptos a la doctrina espirita, logran esclarecer al espíritu obsesor que torturaba a la hija maldiciente, pero siempre querida. De esa forma el Espiritismo se acepta en el hogar, volviéndose venturoso y, por ende, los postulados de la inmortalidad del alma penetran en aquellos que vivían ciegamente esclavizados a los dogmas infantiles o en absoluto descreimiento. Desplázanse las viejas convicciones ateístas y los sectarismos condenables en los familiares, gracias a la cura milagrosa en alguno de ellos a través del agua fluídica, del recetario mediúmnico o de los pases espiritas. Y aquellos que en el pasado abusaron del mando o del intelecto en contra del prójimo, de esa forma los planos superiores suministran nuevos enfoques de la vida espiritual, sirviéndose de los cuerpos atrofiados o de los nervios 39
desequilibrados. Los conceptos equivocados o negativos de antes son compensados compensados por el sacrificio del dolor físico o psíquico del presente. 24 Pregunta: Ese hijo o hija obsesa, que más tarde es curada a través del Espiritismo y que ha convertido a la familia, ¿no podrían ser espíritus buenos que aceptan el sufrimiento con el deseo magnánimo de ayudar a su familia y también para activar su ascensión espiritual? Ramatís: Os repetimos que en el Espacio al igual que en la Tierra, no hay regla sin excepción, pues Jesús, espíritu excelso y justo, no eludió la ocasión de sumergirse en las sombras de vuestro mundo, para salvar a los hombres ignorantes y posibilitarles el camino hacia su realidad espiritual. También es verdad que hay espíritus bondadosos, que descienden a la carne y se ajustan a la familia consanguínea de la tierra, con el fin de despertar espiritualmente a sus viejos y milenarios amigos. En algunos casos se sacrifican heroicamente para socorrer a sus adversarios de otrora y que en el presente todavía demoran hipnotizados hipnotizados por las filosofías destructivas o las doctrinas enfermizas del mundo material. Cuando esas almas sublimes comprueban la inutilidad de sus esfuerzos para inspirar desde el Más Allá a sus pupilos negligentes, se deciden a reencarnar por amor hacia ellos. Así fue como el excelso amor de Jesús, apiadado del sufrimiento humano, lo condujo hacia la Tierra; por eso, muchas almas angélicas abandonan sus planos paradisíacos, sometiéndose voluntariamente a una nueva encarnación a fin de despertar sentimientos crísticos en sus tutelados. Muchos de ellos, cuando renacen junto al adversario empedernido, enfrentan terribles situaciones a fin de atenuar la fiereza, el odio y la violencia que aún sustentan. Movidos por la compasión del ángel, efectúan toda clase de esfuerzos para sustraerlos de las tragedias odiosas, que en el futuro engendran karmas torturantes. Muchas veces son sacrificados por las mismas almas delincuentes, a quienes intentan salvar de los padecimientos inenarrables que les esperan en el fango del astral inferior. Aun así se sienten felices cuando consiguen acentuarles el fuego del remordimiento o arrepentimiento, provocándoles los primeros impulsos de redención espiritual. También os reiteramos que Dios no es vengativo ni sádico, ni creó la obsesión incurable, la dolencia fatal, las deformaciones corporales, ni cualquier tipo de desventura para el ser humano. El Padre sólo tiene objetivos concretos, que es la recuperación amorosa de todos sus hijos eternos. Los acontecimientos trágicos o mórbidos son el fruto de la debilidad moral y de la ignorancia del hombre, que mal balbucea las primeras letras del alfabeto de la vida inmortal. 40
Capítulo 05 LOS TRABAJADORES ACTIVOS EN EL SERVICIO MEDIÚMNICO 25 Pregunta: ¿Podríais explicarnos qué distinción existe entre los hombres con facultades en desarrollo junto a la mesa espirita y aquéllos que, siendo médiums, no necesitan del mismo procedimiento? Ramatís: Pueden considerarse "médiums oficiales" en la Tierra, aquéllos que reencarnan y están comprometidos en sus servicios obligatorios con la siembra espirita. Esos seres tendrán que desempeñarse constantemente en esa actividad, pues necesitan compensar con cierta urgencia los perjuicios causados a terceros y además deberán acelerar su propia recuperación espiritual. Se destacan de los otros humanos porque gozan acentuadamente de la facultad mediúmnica, tomando relación directa y rápida con los desencarnados. desencarnados. Conforme sean sus pensamientos, conducta y objetivos en sus vidas, atraerán a los espíritus de frecuencia vibratoria afín, que en base a sus contexturas espirituales, los influenciarán para el bien o el mal._ Y como son raros los médiums misioneros o de Intuición Pura, también son pocos los que alcanzan el "clímax" bendecido del servicio mediúmnico, sin antes haber pasado por el desenvolvimiento penoso. Existen médiums a quienes les afloran los residuos de las viejas pasiones que los perturbaban en el pasado; sus pensamientos, palabras y sentimientos son blanco de los desencarnados, que realizan todo lo posible para impedirles su éxito en el servicio mediúmnico en la siembra espirita. Intentan hacerles buscar su desarrollo de facultades, alejados de la disciplina y protección doctrinaria, les explotan el amor propio y la vanidad, apartándolos de los ambientes donde la experiencia del más capacitado podría ayudarlos e inmunizarlos del astral inferior. En la fase penosa y contradictoria, saturada de dudas y esperanzas, es cuando el hombre siente despertar su facultad, pero al no haber logrado la fuerza moral, la mente desenvuelta y los sentimientos equilibrados, no pueden sintonizarse inmediatamente con las almas benefactores. Un poco más tarde, el médium comprende la naturaleza y objetivos de su ejercicio mediúmnico obligatorio, pues a pesar de haber enfrentado sacrificios severos, comprueba que lo pasado era de provecho e incidía para su bien. Entonces, como un sembrador incondicional de las elevadas enseñanzas de los planos superiores, 41
necesita inmunizarse contra las críticas ajenas, como también impermeabilizarse de las lisonjas o evidencias peligrosas de la vanidad personalista de la vida humana. Sus dolores, ingratitudes e injusticias son menos importantes que las desventuras del prójimo; sus opiniones no deben provocar conflictos u hostilidades en el prójimo a causa de la doctrina espirita, que lo acoge y beneficia para usufructuar el camino de la renovación espiritual. Los demás hombres (aunque sean médiums en potencia) serán responsables por sus actos y forma de influir en sus familiares. Los médiums consagrados o admitidos como trabajadores activos en el servicio mediúmnico organizado de la siembra espirita, son para el mundo profano la idea espiritual elevada, que no puede ni debe mancharse por sus intereses personales o caprichos vanidosos. 26 Pregunta: Sin querer contrariar los elevados conceptos vertidos y en contradicción a los postulados crísticos, hemos tenido muchas veces la oportunidad de conocer médiums poderosos, que producían fenómenos dignos de mención y curas extraordinarias; pero algunos comerciaban vilmente sus facultades, mientras que otros eran esclavos de los vicios comunes. De este paradójico ejemplo, ¿qué nos podéis decir? Ramatís: ¿Cuántas veces las autoridades públicas, de vuestro mundo, confían en determinados individuos para desempeñar servicios de importancia en favor del pueblo, que los considera hombres honorables y de buenos propósitos? Al comienzo ganan la confianza de sus superiores ejecutando los trabajos debidamente y poco a poco se dejan tentar por la codicia, avaricia o la fortuna fácil, terminando por cumplir deshonestamente aquello que les fuera solicitado para el bien común._ El mandato mediúmnico, que autoriza al poseedor a prestar un servicio útil para la colectividad encarnada, también beneficia a su espíritu imperfecto, y es un compromiso que debe ejecutarse con dignidad y elevación moral. Aceptando la tarea medianímica de suma importancia para sí y para el prójimo, es evidente entonces entonces que el médium es el responsable por cualquier desvío o perturbación que produzca durante el ejercicio de su tarea en el mundo profano. También es cierto que los ángeles del Señor, que son almas llenas de ternura y amor, tienen esperanzas para corregir o renovar a los espíritus, que siendo culpables e imperfectos, son convocados para el servicio espiritual de la mediumnidad en el mundo físico. Por eso no los privan súbitamente de la facultad que los pone en contacto con el mundo espiritual; les multiplican las oportunidades de recuperación por las nuevas faltas y los ayudan a corregir sus deslices cometidos en la doctrina que desarrolla sus facultades. Paradójicamente, como si fueran árboles saturados de savia inservible, esos 42
médiums continúan en su propósito de dar buenos frutos... ¡Ellos ignoran, que es el generoso "toque" angélico el que higieniza y sublima sus deslices y que promueven las curas y garantiza las revelaciones buenas!_ Ciegos por la vanidad de juzgarse auto-suficientes, capaces de realizar todo, prescindiendo de la intervención del mundo invisible, abdican de la vigilancia y el buen sentido, inmunizándose para recibir las vibraciones angélicas, cayendo fragorosamente en el lodo de sus imprudencias. Infelices y orgullosos, no alcanzan a percibir cuándo "cambia" la entidad oculta que los protegía; es decir, cuando se retira el ángel y ocupa su lugar la figura maquiavélica y astuta del genio de las sombras. Desde allí en adelante existe un solo "dueño" y no un "guía"; en vez de un orientador tierno y tolerante, que todos los equívocos e intereses inconfesables inconfesables del médium, los toma bajo su responsabilidad espiritual; espiritual; surge entonces el alma cruel, dañina, orgullosa y llena de vicios, que exige, domina y castiga. Desaparece el ángel amoroso, que conduce a las almas hacia el reino de Luz, para manifestarse el señor de los esclavos, que aprisiona desde la tumba al espíritu imprudente para conducirlo a las regiones inhóspitas de las tinieblas. Ese es el fin de los médiums, que después de haber sido agraciados con destacados poderes espirituales, para el bien de sí y de la colectividad encarnada, terminan enlodando su tarea con la vileza del negocio impuro, generando la desconfianza y hostilidad hacia el servicio mediúmnico. 27 Pregunta: ¿No sería más prudente, que los espíritus superiores no concedieran la facultad mediúmnica a los hombres que no tuvieran capacidad y amor para exponerla en la Tierra? Ramatís: No son poderes concedidos extemporáneamente por los mentores de la Tierra a los hombres inmaduros de espíritu; a veces esos espíritus son antiguos magos, que dominaban fácilmente las fuerzas ocultas, ejercían sus poderes sobre los elementales y usaban la hipnosis para fines interesados, tal como lo hacía Rasputín, que aprovechando sus poderes extraterrenos realizaba sus objetivos equivocados, como un instrumento de las tinieblas. Cuando esos espíritus retornan a la carne, deben intentar su renovación espiritual, manejando los mismos poderes que desvirtuaron en el pasado, pero bajo la promesa de emplearlos para el bien. El corazón atrofiado y la mente agudizada por la voluntad poderosa y que fuera ejercitada en vidas anteriores, es lo que tienen esos espíritus para ejecutar el trabajo mediúmnico del Bien, siempre que no se inclinen humildes desde el comienzo de su tarea a los postulados redentores del Cristo. Cuando los responsables por el progreso del orbe comprueban la imposibilidad de conservarlos en el servicio activo de la siembra propuesta, se ven obligados a
43
separarlos de cualquier forma, para que terminen los graves perjuicios causados por sus actividades incontroladas. Pero Dios siempre concede la oportunidad de renovación moral y el trabajo honrado para todos sus hijos. Y la prueba más evidente de lo que estamos manifestando la tenéis en vuestras manos, pues si en el presente vosotros portáis principios espirituales dignos y superiores, se los debéis a la bondad divina, que toleró vuestras iniquidades del pretérito, concediéndoos la gracia del servicio redentor, tantas veces como las equivocaciones cometidas. En verdad, los pecadores son los que necesitan más del Amor, tanto como los enfermos necesitan del médico. Si del lodo puede surgir el lirio inmaculado, es obvio que de los labios de los hombres impuros también pueden nacer las esperanzas y el derrotero para los seres desviados del camino honesto de la vida humana. Y si Dios, el Creador del Universo, que debería exigirnos el máximo de sumisión y acatamiento a los sublimes objetivos de su Obra, multiplica los medios para nuestra rápida redención espiritual, sin duda que el hombre, su criatura, no tiene el derecho de odiar, maltratar, robar y execrar a sus hermanos de destino sideral. Ese es el motivo principal de todo médium fenoménico o intuitivo, cuyo compromiso se fundamenta incondicionalmente incondicionalmente en cultivar su mediumnidad con el Cristo y revelarse como un trabajador activo en la siembra del Maestro. No basta ver, oír y sentir a los espíritus en el plano invisible, pues el médium, bajo cualquier hipótesis, debe ser un hombre que además de contribuir para la divulgación de la inmortalidad del espíritu, es un ciudadano comprometido por los deberes comunes inherentes a la colectividad encarnada, donde la bondad, el amor, el afecto, la renuncia y el perdón constante pueden liberarlo de las cadenas del astral inferior. 28 Pregunta: ¿Cuáles son vuestras consideraciones sobre la mediumnidad con el Cristo? Ramatís: Considerando que la Facultad Mediúmnica de "prueba" o de "obligación" es el préstamo que las Esferas Elevadas conceden al espíritu endeudado para conseguir su rehabilitación espiritual, bajo ningún aspecto debe negociarse o vilipendiarse. Es un servicio de confianza que el médium debe ejercer en favor ajeno, sin dejar de cumplir con sus obligaciones en la familia, sociedad y poderes públicos. Los mentores siderales no le exigen el sacrificio económico de la familia, la negligencia educativa de la prole, el descuido de las necesidades justas con sus parientes, para que atienda indiscriminadamente el ejercicio de su facultad.
44
Cada médium, como espíritu en evolución, conduce su bagaje kármico generado en el pretérito delictuoso y que le determina las obligaciones en el hogar, donde víctimas y verdugos, amigos y adversarios de antes, inician el curso de aproximación espiritual definitivo. Por eso, en última instancia debe prevalecer sobre el servicio mediúmnico el cumplimiento exacto de las determinaciones determinaciones kármicas que le dieron origen a la existencia en la materia.> m ateria.> Y, considerando que el mundo del César es el reino transitorio de los intereses de la vida material para la educación del espíritu imperfecto, el don mediúmnico es la dádiva espiritual del Reino del Cristo, antes que una mercadería de especulación mundana.
Capítulo 06 EL MÉDIUM "KARDECISTA" Y EL MÉDIUM "UMBANDISTA" 29 Pregunta: Conforme a vuestras consideraciones en el capítulo anterior, creemos que el único desenvolvimiento mediúmnico aconsejado, es el desarrollado en el ambiente espirita, bajo la codificación de Allan Kardec. ¿No es verdad? Ramatís: No debéis apresuraros en vuestras consideraciones extremistas, pues es muy fácil distinguir al médium de "mesa" que se desenvuelve bajo la égida de la doctrina espirita y el médium que prefiere desenvolverse por la técnica de la Umbanda. Umbanda. En el primer caso, es espiritismo, y el segundo, es mediumnismo. No nos compete juzgar ésta o aquella predilección medianímica, ni tenemos el derecho a inclinarnos exclusivamente hacia la esfera espirítica, porque los fenómenos y acontecimientos acontecimientos que sucedieron desde el comienzo de la humanidad hayan sido mediúmnicos. Lo que más interesa en la efectividad del servicio mediúmnico, tanto en la siembra espirita, en el ambiente umbandista o cualquier otro, es saber si se realiza por el amor al Cristo e inspirado por su divino Evangelio. Apreciamos considerablemente al médium que se integra totalmente a su trabajo espiritual, guiado por los preceptos evangélicos distintos, al médium de "mesa" que se vuelve mercenario y corrompido. En esos casos, la distinción nos parece perfecta respecto a la naturaleza interpretativa de la manifestación mediúmnica, pues mientras el médium de 45
mesa se preocupa específicamente por las ideas de sus comunicantes, en su intercambio acentuadamente mental, el médium de la Umbanda (por ejemplo) toma el máximo de cuidado para reconocer la identidad del espíritu que lo incorpora. En la disciplina de la Umbanda existen códigos, puntos cantados y convencionales, cruces de líneas y tienen el concurso de las falanges que operan a través de la magia práctica, caracterizando a cada grupo o individualidad que participe. Así, conforme sean los puntos, señales, toques o códigos determinados, determinados, el médium y los frecuentadores de la Umbanda deducen las intenciones, capacidad, naturaleza y especialidad del servicio que pueden realizar con los comunicantes.> Junto a la mesa espirita se nota un cierto individualismo de trabajo en las relaciones con los encarnados por parte de los espiritas, una preelección de naturaleza elevada y de contenido responsable respecto al nombre o a la identidad del comunicante, que tanto puede ser un apóstol, como un "Juan nadie". Mientras tanto en la Umbanda, a pesar de no haber consolidado su unidad doctrinaria definitiva, ni afirmado su sistema particular de trabajo en todas las latitudes del orbe, por medio de su sincretismo afro-católico se transforma en un trampolín favorable para los católicos, protestantes y otros religiosos dogmáticos para familiarizarse con las enseñanzas de la Reencarnación y la disciplina de la Ley del Karma. Las imágenes, los cánticos, el incienso, las velas y las ofrendas de los rituales de la Umbanda, algo parecidos a los usos de la Iglesia Católica, atenúan el miedo prejuicioso de los católicos por las manifestaciones mediúmnicas, para ir ganando poco a poco el gusto por el conocimiento de la inmortalidad del espíritu pregonado por todas las filosofías reencarnacionistas. Los jefes, las falanges y las líneas de la Umbanda, con sus mestizos, negros y salvajes, a pesar de la multiplicidad de costumbres, temperamentos y propósitos diferentes del servicio que realizan junto a la materia, entrelazados por severos compromisos, deberes jerárquicos y obligaciones espirituales, aún no fueron comprendidos por sus propios profesantes. En el inmenso panorama de las relaciones entre el plano material y el mundo oculto de los espíritus, fundamentados por el proceso de la magia, en el ámbito umbandista resaltan ciertas combinaciones confusas y tonterías condenables, que van a cuenta del elevado trabajo espiritual. Luchan aún los umbandistas para alcanzar su constitución doctrinaria y eliminar las excrecencias ridículas que deforman su base esotérica. En ese terreno fue más feliz el Espiritismo, pues partió de una unidad concreta y basada en constantes constantes investigaciones, con "tests" mediúmnicos que agotaron a Allan Kardec, pero lo ayudaron exitosamente para extirpar las contradicciones, exotismos y escenas ridículas de la práctica mediúmnica
46