VENTAJAS
A partir de la firma del TLCAN México se volvió un importante proveedor para Estados Unidos, beneficiándose del acceso al mercado más grande del mundo, los niveles de comercio e inversión de las tres naciones se han incrementado, generando un crecimiento económico sólido y constante, además de creación de nuevos puestos de trabajo y una mayor variedad de servicios y bienes de consumo a mejores precios.
El comercio entre los países del TLCAN creció 128% desde que el acuerdo entró en vigor, lo que significó pasar de 297.000 millones de dólares en 1994 a 676.000 millones de dólares en el 2000, las tres naciones comercian trilateralmente aproximadamente 1.800 millones de dólares cada día.
La zona de libre comercio creada por el TLCAN representa un mercado potencial de 406 millones de habitantes que producen más de 11 billones de dólares en bienes y servicios, también la progresiva eliminación de barreras al comercio y la apertura de los mercados han favorecido el crecimiento económico y la prosperidad en los tres países.
La eliminación progresiva de los aranceles a las importaciones dentro de la zona del TLCAN ha propiciado la reducción de los precios de bienes de consumo e insumos para la producción, lo que beneficia a empresas y familias, ya que favorece su competitividad frente al resto del mundo al gozar de una oferta mayor de insumos a mejores precios: durante los primeros siete años del TLCAN la producción creció más de 30 %, comparado con el incremento de casi 20% en los siete años previos a la entrada en vigor del Tratado.
La productividad de los trabajadores de la industria manufacturera ha aumentado 69.6% entre 1993-2005. Uno de cada seis empleos se relaciona a la actividad exportadora, las cuales pagan salarios 37% superiores a las empresas no exportadoras.
México aumento su dinamismo como país exportador, debido al incremento de la participación de las grandes empresas mexicanas que adquirieron maquinaria de mayor tecnología para sus procesos productivos, uso de herramientas informáticas, sistemas de control computarizados, y sobre todo, a la expansión de las grandes inversiones extranjeras, las cuales fueron canalizadas principalmente al sector de exportación manufacturero con alto contenido tecnológico. Las vías de la IED han sido por ejemplo, la compra para ampliar y modernizar los activos provenientes de la venta de empresas paraestatales, la ampliación y modernización de las empresas extranjera y la adquisición de empresas mexicanas del sector del tabaco, tequila y parte de las cervecera.
Debido a las reglas de origen, que son parte importante del TLCAN, las modificaciones y la eliminación gradual de los aranceles, promueve que las empresas de Estados Unidos y Canadá busquen mayor complementación en el sector industrial mexicano principalmente en la producción de textiles, en donde los productores no sólo realizan una parte de la producción sino todo el proceso, lo que incrementa su valor agregado.
Existen una serie de instituciones que tienen a su cargo la responsabilidad de vigilar el cumplimiento del TLCAN y su tarea consiste en garantizar la adecuada interpretación e implementación de sus disposiciones.
DESVENTAJAS
Se dio una disminución de la intervención del Estado en la toma de decisiones estrategias, debido a que el TLCAN representa un nuevo marco estructural de políticas que pueden interfieren en la soberanía mexicana.
Se eliminaron diversas instituciones sociales, además, muchas regiones y localidades han sufrido problemas de pobreza, marginación y desigualdad, debido a los efectos de las libres fuerzas del mercado y el panorama de la globalización
No se generaron todos los niveles de empleo, ni un alto nivel de productividad de muchos sectores productivos, ni tampoco se mejoró como se planteó el bienestar socioeconómico como se había esperado en México.
El flujo de inversiones extranjeras que en su mayoría eran de procedencia estadounidense se ha concentrado en sectores específicos y en las grandes empresas, generando una división regional de desarrollo en México.
Los principales beneficios han sido aprovechados por las grandes empresas transnacionales y nacionales que están mejor colocadas en el marco de la economía globalizada, las cuales son empresas importadoras de insumos industriales, lo cual muestra la dificultad para generar un efecto de arrastre en el resto del sector industrial.
Las Micro Pequeñas y Medianas Empresas han enfrentado presiones debido a los cambios de las reformas económicas y a la creciente apertura comercial, además, enfrentaron el desplazamiento en el mercado nacional, debido a que muchos productos extranjeros entraron a México con precios por debajo del costo de producción de dichas MiPyMES.
Al entrar en territorio mexicano las inversiones de portafolio, el nuevo modelo americano de regulación ha dejado en condiciones de extrema fragilidad a los sectores financieros y productivos, al agudizar la restricción externa en lugar de disminuirla.
El desmantelamiento de importantes cadenas productivas nacionales dado principalmente por el aumento de las importaciones ha dado paso a la creación de nuevas cadenas donde predominan un pequeño número de empresas de ciertos sectores y en algunas regiones.
Se generó una serie de privatizaciones de muchas empresas paraestatales y empresas mexicanas por grandes corporaciones extranjeras, convirtiendo a las privatizaciones en una extensión de monopolios y oligopolios.
El TLCAN tuvo un Impacto negativo para el sector agrícola mexicano al ser desplazados muchos productores nacionales por productores extranjeros, además, los precios a los productores nacionales de productos básicos han venido disminuyendo debido a la creciente importación de estos productos.
RESULTADOS
El resultado de la liberalización comercial y económica derivada del TLCAN se ha traducido en una notable expansión de los flujos de comercio e inversión extranjera hacia México en las últimas décadas, en el año previo a la entrada en vigor del TLCAN a l actualidad el comercio exterior de México se multiplicó 1.9 veces, el cambio de la composición de las exportaciones mexicanas ha sido particularmente notable, por ejemplo los productos petroleros que, entre 1982 y 1985, representaban en promedio el 60.3% del total de las exportaciones mexicanas, para el período de 1993 a 2003 sólo significaron el 9.6%
Mientras tanto, los productos manufacturados pasaron a ocupar el lugar que anteriormente correspondía al petróleo en las ventas externas de México, creciendo de 32.7 % en el período 1982-1985, a 86.8 % en la década de 1993-2003, así mismo, desde la entrada en vigor del TLCAN se ha registrado un cambio en la dinámica de los flujos de capital extranjero hacia México, ya que antes del acuerdo, la inversión extranjera directa promediaba cerca de 3.700 millones de dólares anuales, mientras que, en la década de vigencia del TLCAN, ha sido de 12.600 millones de dólares por año.
Ahora si bien el TLCAN fue un determinante muy importante del dinamismo exportador y del fuerte influjo de inversión extranjera registrados por México, el acuerdo modificó también la naturaleza de los intercambios entre México y sus socios de América del Norte, con un aumento significativo en los flujos comerciales.
Asimismo, la integración con América del Norte ha resultado en un cambio significativo en el ciclo económico de México. Si bien el TLCAN ha contribuido de forma importante a la estabilidad macroeconómica y al fortalecimiento institucional de México, subrayando el papel del acuerdo como ancla y propulsor de la modernización. Al haber consolidado la liberalización económica en un convenio internacional con la mayor economía del mundo, el TLCAN ha sido fuente de certidumbre y estabilidad y también, ha estimulado la adopción de políticas modernas y la creación de instituciones de una economía de mercado, como son la promoción de la competencia, la protección de los derechos de propiedad intelectual e, indirectamente, la mejora regulatoria.
La liberalización comercial y financiera dio lugar a un rápido crecimiento de las exportaciones aunque de un modo no sostenido y en lo que respecta al desempeño económico fue decepcionante, ya que en vez de reducirse, la diferencia del producto interno bruto real per cápita mexicano respecto al de los EUA, se amplió, a finales de los años noventa México comenzó a reducir moderadamente esta diferencia, sin embargo con la crisis económica del año 1995 la amplió de nuevo y desde entonces se ha mantenido con escasos cambios.
Este diferencial con respecto a los Estados Unidos se mantiene actualmente en un nivel comparable al que existía en la década de los años cincuenta, así y en contra de las expectativas creadas por el TLCAN, México no ha logrado de forma significativa acelerar la convergencia de sus ingresos medios reales con sus principales socios comerciales regionales, lo que deja en evidencia que no hay ningún proceso de reducción de las brechas por término medio de los niveles de vida en México a los de los EUA o de Canadá.
La evolución del mercado de trabajo de México después del TLCAN está lejos de satisfacer las expectativas que generó, se ha producido una recomposición del empleo total hacia las actividades relacionadas con la exportación, pero la tendencia global de empleo no ha ganado ningún impulso significativo
Un rasgo característico y destacable de la transición mexicana al libre comercio fue la falta de un proceso de reasignación drástica del capital y del trabajo en la industria manufacturera, ya que en cierta medida los patrones comerciales y la composición industrial después del TLCAN no han variado sustancialmente respecto de las tendencias anteriores.
Aunque existen algunas excepciones, los procesos de reasignación del TLCAN han tendido a extrapolar las tendencias pasadas en el comercio y en las pautas industriales, con escasa evidencia empírica de una reestructuración masiva de la producción manufacturera.
Conseguir altos niveles de desarrollo económico debería de ser una de las prioridades de la agenda nacional, la economía mexicana necesita expandirse al menos en una tasa anual media entre el 5% y 6% en términos reales, tasa mínima indispensable para crear los puestos necesarios para absorber su incremento anual del 2.5% en su fuerza de trabajo, la expansión de la economía necesita ser, incluso, más fuerte para mejorar significativamente los niveles de vida de más de 20 millones de mexicanos que viven en condiciones de pobreza extrema.
En la medida en que las ganancias de productividad se basaron en una tendencia a eliminar o a desplazar a los productores locales, su impacto social en el corto plazo pudo ser adverso, ahora si en el mediano plazo ese impacto llega a ser positivo, solo dependerá del grado en el que el trabajo excedente consiga realizar la transición empleándose productivamente en los sectores más dinámicos, sin embargo y al contrario de las políticas de apoyo que se aplican en EUA., México no cuenta con ningún programa para facilitar este tipo de transición o para compensar a los trabajadores desplazados por el efecto negativo del TLCAN
Referencia electrónica:
http://www.tlcan.com.mx/VENTAJAS
Referencias Bibliográficas:
LA ECONOMÍA MEXICANA DESPUÉS DEL TLCAN 1 JUAN CARLOS MORENO BRID* / JUAN CARLOS RIVAS VALDIVIA * PABLO RUIZ NÁPOLES ** *Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) Naciones Unidas **Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO) de México Marzo 2005
Jaime Zabludovsky* EL TLCAN Y LA POLÍTICA DE COMERCIO EXTERIOR EN MÉXICO: UNA AGENDA INCONCLUSA Abril 2005
KOSE, M. A.; MEREDITH, G. M. y TOWE C. M. (2004). How Has NAFTA Affected the Mexican Economy? Review and Evidence. IMF.