CHUCHO V ALDÉS & THE AFRO-CUBAN MESSENGERS
BORDER FREE es un trabajo diferente a Chucho`s Steps, en este CD se busca el acercamiento a muchos géneros compatibles con las raíces Afrocubanas y hemos tenido la suerte de contar con el aporte del genial Branford Marsalis. Un músico que le ha dado color y fuerza a este material. Santa Cruz , con un toque Flamenco, es un tema dedicado a un guitarrista Canario (Santi), lo compuse en 1986 en época de carnaval en Las Palmas de Gran Canaria. Abdel es un tema con las raíces rítmicas y escalas arábigas dedicado a un gran músico marroquí. Afro-Comanche es la historia de algunos Comanches deportados a Cuba a las provincias orientales en el siglo XIX. Se llama AfroComanche pues en Cuba se relacionaron con los Afro-Cubanos e hicieron familias. Al mezclarse sus hijos fueron reconocidos como Afro-Comanches. Bebo, un tema dedicado a mi padre y a su estilo de componer y tocar, como tributo de cariño y respeto. Pilar , a mi querida Madre ya fallecida que tanto hizo por mi en todo momento. A ella le gustaban los preludios y fugas de Bach y también el tema Blue in green de Miles Davis, por esa razón tomé elementos de estos temas para homenajearla. Caridad Amaro, mi abuela. Siempre me pedía que le tocara el concierto de Rachmaninov y el tema que le dediqué termina con una versión a mi manera de una parte de ese concierto. Tabú, un tributo a Margarita Lecuona. Compositora además del clásico Babalú Ayé y hermana de Ernesto Lecuona, reconocido como el mejor pianista cubano de todos los tiempos. Conga-Danza , el cual está dedicado a María Cervantes hija del genial Ignacio Cervantes, uno de los padres de la pianística Cubana y compositor de las 36 Danzas Cubanas. Espero que disfruten de este material. Chucho Valdés
BORDER FREE est un travail qui se distingue nettement de Chucho’s Steps. Dans cet album nous avons voulu rapprocher des genres
compatibles avec les racines afro-cubaines et nous avons eu la chance de pouvoir compter avec la participation du grand Branford Marsalis, un musicien qui a donné de la couleur et de la force à ce matériel. Santa Cruz , avec un air amenco, est dédié au guitariste Canario (Santi). Ce morceau a été composé en 1986 à l’occasion du carnaval de Las Palmas de Gran Canaria. Abdel , aux racines rythmiques, proche des gammes arabes, est dédié à un grand musicien marocain. Afro-Comanche raconte l’histoire de quelques Comanches déportés à Cuba, dans les provinces orientales, au cours du XIX e siècle. Ce morceau s’appelle Afro-Comanche car à Cuba ils ont rencontré les Afro-Cubains et ont fondé des familles. De ce métissage sont nés des enfants reconnus comme Afro-Comanches. Bebo est une évocation de mon père, de sa façon de composer et de jouer, c’est un hommage plein de tendresse et de respect. Pilar , ma chère mère décédée, à qui je dois tant de choses. Elle aimait les préludes et les fugues de Bach et aussi le morceau Blue in green de Miles Davis dont j’ai repris quelques éléments dans ce morceau pour lui rendre hommage. Caridad Amaro, ma grand-mère. Elle aimait que je joue pour elle le concerto de Rachmaninov et la n de ce morceau reprend vers la n une version, à ma façon, d’une partie de ce concerto. Tabú est un hommage à Margarita Lecuona qui a composé, entre autres, le classique Babalú Ayé et qui est la sœur d’Ernesto Lecuona, reconnu comme le meilleur pianiste cubain de tous les temps. Conga-Danza est dédié à María Cervantes lle du grand Ignacio Cervantes, l’un des pères des pianistes cubains et compositeur des 36 Danses Cubaines. J’espère que vous aimerez cet ensemble de morceaux. Chucho Valdés
Traduction Antonia Garcia Castro
BORDER FREE is an album which clearly distinguishes itself from Chucho’s Steps. On it, we have tried to combine compatible styles
with Afro-Cuban roots and in doing so, we were lucky enough to work with the great Branford Marsalis, a musician who brought avor and power to our material. Santa Cruz , set to a amenco melody, is dedicated to the guitarist Canario (Santi). It was composed in 1986 for the Las Palmas de Gran Canaria carnival. Abdel , with its rhythmic roots and scales similar to those used in Arab music, is dedicated to a great Moroccan musician. Afro-Comanche tells the story of a number of Comanche Indians who were deported to the Eastern parts of Cuba during the 19 th century. It’s entitled Afro-Comanche since in Cuba, the Indians met Afro-Cubans and founded families with them. From this mixed heritage were born children known as Afro-Comanches. Bebo is a reference to my father and his way of composing and playing music. It’s a tribute full of tenderness and respect. Pilar is for my dearly departed mother to whom I owe so much. She loved Bach’s preludes and fugues and also the piece Blue in Green by Miles Davis, a few elements of which I included in this piece in her honour. Caridad Amaro is for my grandmother. She liked me to play Rachmaninov’s concerto for her and at the end of this piece, I play my own version of one part of that concerto. Tabú is a tribute to Margarita Lecuona who composed, among other pieces, the classic Babalú Ayé, and who is the sister of Ernesto Lecuona, the man acknowledged to be the best Cuban pianist in history. Conga-Danza is dedicated to María Cervantes, the daughter of the great Ignacio Cervantes, one of the fathers of Cuban pianists and the composer of 36 Cuban Dances . I hope you will enjoy this collection. Chucho Valdés
Translation Lorna Coing
CHUCHO VALDÉS BORDER FREE
(Sin Fronteras)
Cada nuevo disco de Chucho Valdés -en revelación asombrosa- es como un ramillete o catauro de cubanismos, iluminaciones y unión de contrarios (máxima energía vs. poesía).
Aún dentro de una danza arrolladora como la conga inicial, tiene momentos de interiorización tan personales como las reexiones lentas o la cadenza (gran solo) que anticipa el nal. La ternura del segundo tema Caridad , preparada por la más hermosa introducción imaginable, obliga a repetir la audición de inmediato. Después del “solo” de bajo, regresa el piano (recuperar el aliento se vuelve imposible). La belleza extrema de su pianismo hace que la visita de Rachmaninov se haga entre amigos (cita del famoso concerto del gran compositor ruso). En Chucho Valdés hay connotaciones más curiosas. La importancia de los “puentes” y/o introducción como ideas “contrastantes”, se hace evidente al acercarse al mundo clásico-contemporáneo (en términos de forma), como algunos coros “desnudos” -sin armonía inicial- que van tomando cuerpo poco a poco. El acompañar el bajo no solo le “recuerda” la armonía, sino que se funde con la “sonoridad” de éste. Respeto y maestría saltan a nuestra memoria escuchando a Chucho junto a consagrados y jóvenes. Ejemplo cercano lo tienen en Pilar , (surco 6 del disco), junto a Gastón Joya, un prodigioso bajista de 25 años. (Otra virtud que hermana a nuestro Chucho Valdés con Miles Davis o John McLaughlin es que toca con los mejores músicos; ya veteranos como Marsalis o jóvenes como Gastón).
Este disco rompió el “record” de audición en mi entorno familiar. Después de la primera vez, mi espíritu crítico y el disfrute lucharon a brazo partido sin que hubiese vencedores ni vencidos, aunque ya en la tercera escucha -en un solo día- comencé a disfrutar la sabiduría y el arte de Chucho. Otra vez el “mago” preludia en Abdel (surco 8) una introducción en metro ternario -de alto voltaje- que da paso a solos de bajo, piano (excepcional!) y al saxo de Marsalis, que en alternancia con el tema cuyo aire “oriental” hace uso de las escalas, llamadas por algunos teóricos, “exóticas”, resulta electrizante!
El quinteto de Chucho -columna vertebral de este conjunto de piezaslo forman conocedores a fondo del Latin Jazz: Rodney Barreto (batería), Gastón Joya (bajo), Dreiser Durruthy (tambores batá), Reinaldo Melián (trompeta/iscorno) y Yaroldy Abreu (percusión cubana). Se suma a ellos la colaboración de un invitado “de lujo”: Brandford Marsalis en el saxo.
Este fonograma responde a múltiples homenajes que Chucho hace a sus seres queridos y a los ancestros que pueblan y enriquecen su vida cotidiana y espiritual. La historia del Jazz Latino recibe nueva muestra magistral de Chucho Valdés y su equipo, los as ombrosos Afrocuban Messengers. Leo Brouwer
Chaque
nouvel album de Chucho Valdés – comme une révélation étonnante – est un bouquet de “cubanismes”, d’illuminations et d’unions de contraires (énergie maximale versus poésie). Même dans une danse entraînante comme la conga du début, il y a des moments d’intériorité aussi personnels que des réexions lentes, ou cette cadence (grand solo) qui anticipe la n. La tendresse du deuxième morceau Caridad , annoncée par la plus belle introduction qui soit, oblige à une réécoute immédiate. Après le “solo” de la contrebasse vient le piano (et on ne peut plus, du tout, reprendre son soufe). La beauté extrême de ce piano fait que la visite à Rachmaninov se fait entre amis (sorte de rendez-vous avec le célèbre concerto du grand compositeur russe).
La Habana, 14 de febrero de 2013
Dans Chucho Valdés il y a des connotations plus curieuses. L’importance des “ponts” et/ou l’introduction comme idée “contrastante” devient évidente lorsqu’on frôle le monde classico-contemporain (en termes de forme), c’est le cas des chœurs “nus” – sans harmonie initiale – qui prennent corps progressivement. Lorsqu’il accompagne la contrebasse, il ne fait pas que “rappeler” l’harmonie mais se fond dans sa “sonorité”. Respect et brio, c’est ce qui vient en tête lorsqu’on écoute Chucho jouer avec ses musiciens qu’ils soient jeunes ou consacrés. Un exemple dans Pilar : Gastón Joya est un prodigieux contrebassiste de 25 ans. C’est encore une vertu qui fait de notre Chucho Valdés un frère de Miles Davis ou de John McLaughlin : il joue avec les meilleurs musiciens, des vieux de la vieille comme Marsalis et des jeunes comme Gastón.
J’ai battu avec cet album une sorte de “record” familial. Après une première écoute, mon esprit critique et le plaisir se sont affrontés dans un bras de fer sans vainqueurs ni vaincus, mais ce n’est qu’au bout de la troisième écoute – le même jour – que j’ai été pénétré par la sagesse et l’art de Chucho. Une fois encore le “magicien” ouvre Abdel avec une introduction dont la mesure ternaire – de la haute tension –, laisse le pas aux solos de contrebasse, de piano (exceptionnel !), et au saxo de Marsalis qui aborde en alternance le thème “oriental” aux gammes dites “exotiques” ; selon certains théoriciens : électrisant !
Le quintet de Chucho – pièce centrale de cet ensemble – est composé de grands connaisseurs du latin jazz : Rodney Barreto (batterie), Gastón Joya (contrebasse), Dreiser Durruthy (tambours batá), Reinaldo Melián (trompette/iscorno) et Yaroldy Abreu (percussion cubaine). Sans oublier l’apport d’un invité “de marque” : Branford Marsalis au saxo.
Ce disque répond à de multiples hommages que Chucho rend aux siens et aux ancêtres qui habitent et enrichissent sa vie quotidienne et spirituelle. L’histoire du jazz latino marque une nouvelle page magistrale signée par Chucho Valdés et son équipe, les étonnants Afrocuban Messengers. Leo Brouwer
La Havane, 14 février 2013 Traduction Antonia Garcia Castro
Each
new album Chucho Valdés releases – as if making a surprising revelation – is a collection of ‘cubanisms’, of ashes of inspiration and of opposite ideas united (such as all-out energy versus poetry). Even during a lively dance like the conga at the start, there are intimate moments as personal as slow musings, and the rhythm (during the big solo) pregures the end. The tenderness of the second piece, Caridad , signaled by the most beautiful introduction possible, forces listeners to play it again immediately. After the ‘solo’ on the double bass, the piano comes in (and then it becomes impossible to catch your breath again, ever). The exquisite sound it makes puts this track on a par with the Rachmaninov work it borrows from (in a sort of musical encounter with the great Russian composer’s famous concerto).
In Chucho Valdés’ work, there are more peculiar connotations still. The importance of ‘bridges’ and/or introductions as way of providing ‘contrast’ becomes obvious when the style comes close to that of the contemporary classical scene (in terms of form). This is the case with the ‘unadorned’ backing vocals which are initially left with no supporting harmony – and which then take shape little by little. When Chucho accompanies the double bass, he does not only provide a ‘reminder’ of the harmony but also melts into its ‘sound’. The two words which come to mind when you listen to him play with his musicians, be they newcomers or old hands, are respect and brio. One example on Pilar is Gastón Joya, a wonderful 25 year old double bass player (this is another virtue which puts Chucho Valdés on an even standing with Miles Davis and John McLaughlin: he plays with the best musicians, both old pros like Marsalis and youngsters like Gastón). With this album, I broke a sort of family ‘record’. When I rst listened to it, my critical mind and my enjoyment battled things out with no clear victor, but it was only after I listened for the third time – the same day – that Chucho’s acumen and skill truly struck me.
Once again, the ‘magician’ opens Abdel with an introduction whose electrifying ternary beat then makes way for solos on the double bass, the piano (on exceptional form!) and Marsalis’ saxophone which alternately tackles the ‘oriental’ theme and scales some theoreticians call ‘exotic’: it’s stunning!
Chucho’s quintet – the centerpiece of this ensemble- features some major Latin Jazz specialists: Rodney Barreto (on the drums), Gastón Joya (on the double bass), Dreiser Durruthy (on the batá drums), Reinaldo Melián (on the trumpet/ugelhorn) and Yaroldy Abreu (who provides Cuban-style percussion). And of course, there is a prestigious guest: Branford Marsalis on the saxophone. This recording is Chucho’s way of making a number of tributes to his family and to the forefathers who ll out and enrich his day-to-day life and his spiritual existence. In making it, he and his team - the amazing Afrocuban Messengers - have written a masterly new page in the history of Latino jazz Leo Brouwer
La Havane, February 14th 2013 Translation Lorna Coing
CONGADANZA 2 CARIDAD AMARO 3 TABÚ 4 BEBO 5 AFRO-COMANCHE 6 PILAR 7 SANTA CRUZ 8 ABDEL 1
9’13 6’28 9’50 7’49 11’55 10’08 6’24 9’04
Composed, arranged and conducted by Chucho Valdés, except Tabú, composed by Margarita Lecuona. / Publishing: Misa Negra except Tabú by Peer International Corporation.
ChuchoValdés – piano
WITH ReinaldoMeliánAlvarez - trumpet DreiserDurruthyBombalé - batás, lead vocals RodneyBarretoIllarza - drums, vocals ÁngelGastónJoyaPerellada - double bass, vocals YaroldyAbreuRobles - percussion, vocals
AND BranfordMarsalis (appears by courtesy of Marsalis Music) - tenor sax on Tabú & Bebo - soprano sax on Abdel .
Produced by Chucho Valdés. Executive production by Lorena Salcedo and Yousi Valdés Torres, assisted by Rita Rosa Estrabao Verdecia. Recording and mixing by Orestes Águila Recording assistant : Rebeca Alderete. Mastering by Orestes Águila and Victor Cicard. Recorded in Abdala Studio, Havana, Cuba and in Comanche Recording Studio, Málaga, Spain, in December 2012. Mixed and mastered in Abdala Studio, Havana, Cuba, in January 2013. Piano technician: Tomás Casanova. Cover Photo: Frank Steward / Booklet Photos: Lorena Salcedo. Tipis Photos: Walter McClintock, Yale Collection of Western Americana, Beinecke Rare Book and Manuscript Library. Rodney Berreto Illarza plays Sabian cymbals.
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