Como Detectar Mentiras (“Telling Lies”) Paul Ekman
Resumen Basándonos en nuestras propias investigaciones investigaciones y en las experiencias que nos han explicado distintos profesionales profesionales de los cuerpos de seguridad, tengo plena confianza en lo siguiente. Las probabilidades probabilidades de distinguir distinguir con éxito si una persona miente miente o dice la verdad verdad son máximas máximas cuando: La mentira se cuenta por primera vez. • La persona no ha contado contado antes mentiras mentiras de esta clase. clase. !ay mucho en "uego, sobre todo si existe amenaza de un castigo severo. #l entrevistador carece de pre"uicios y no se apresura a sacar conclusiones. #l entrevistador sabe c$mo alentar al entrevistado para que cuente su relato %cuanto más palabras se digan, digan, me"or se podrá distinguir distinguir la mentira mentira de la verdad&. verdad&. #l entrevistador y el entrevistado proceden del mismo contexto cultural y hablan el mismo idioma. #l investigador considera que los indicios descritos en Cómo detectar mentiras se'alan la importancia de obtener más informaci$n en lugar de verlos como pruebas de que se miente. #l entrevistador es consciente de las dificultades %que se describen en Cómo detectar mentiras) de identificar a quienes se encuentran ba"o sospecha de haber cometido un delito pero son inocentes inocentes y dicen la verdad. verdad.
Mentiras, autodelaciones e indicios del engaño #xisten dos clases de indicios del enga'o: un error puede revelar la verdad, o bien puede sugerir que lo dicho o lo hecho no es cierto sin por ello revelar qué es lo cierto. (uando por error un mentiroso revela la verdad, yo lo llamo autodelaci6n)* y llamo pista llamo pista sobre el embuste a las caracter+sticas de su conducta que nos sugieren que está mintiendo pero no nos dicen cuál es la verdad. na pista sobre el embuste responde al interrogante de si el su"eto está o no mintiendo, pero no revela lo que él oculta: s$lo una autodelaci$n puede hacerlo. (on frecuencia, eso no importa. La pista sobre el embuste es suficiente cuando la cuesti$n es saber si la persona miente, más que saber qué es lo que oculta. #n tal caso no se precisa ninguna autodelaci$n. La informaci$n sustra+da puede imaginarse, o no viene al caso. -efin+ antes la mentira como una decisi$n deliberada de despistar a un destinatario sin darle una notificaci$n previa de dicho prop$sito. !ay dos formas principales de mentira: el ocultamiento, o sea, el hecho de no transmitir toda la informaci$n, y el falseamiento o presentaci$n de informaci$n falsa como si fuera verdadera. tros modos de mentir son despistar al otro reconociendo la emoci$n propia pero atribuyéndola a una causa falsa, decir falsamente la verdad, o admitir la verdad pero de una manera tan exagerada o ir$nica que el destinatario se vea desorientado o no reciba informaci$n alguna* el ocultamiento a medias, o admisi$n de una parte /nicamente de la verdad, a fin de desviar el interés del destinatario respecto de lo que todav+a permanece oculto* y la evasiva por inferencia incorrecta, o decir la verdad pero de un modo que implique lo contrario de lo que se dice.
Por qué fallan las mentiras !ay dos clases de indicios del enga'o: indicios revelatorios que, inadvertidamente, ponen la verdad al desnudo, y simples indicios de mentira, cuando el comportamiento mentiroso s$lo revela que lo que él dice no es cierto. 0anto los indicios revelatorios %autodelaci$n& como los simples indicios de mentira son errores que comete un mentiroso. 1ero no siempre los comete. 2o todas las mentiras fallan en sus prop$sitos.
SENTIMIENTOS PROPIOS RE!CION!DOS CON ! MENTIR!S 2o todo enga'o implica ocultar o falsear una emoci$n, pero a menudo intervienen emociones en mentiras que no se di"eron con el fin de ocultar emociones. 3 una vez que ellas intervienen, hay que ocultarlas para no traicionarse. (ualquier emoci$n puede ser responsable de esto, pero tres de ellas están tan asiduamente entrelazadas con el enga'o, que merecen una explicaci$n aparte: el temor a ser atrapado, el sentimiento de culpa por enga'ar y el deleite que provoca embaucar a alguien. 4iempre es dif+cil distinguir el temor del inocente a que no le crean, del recelo del culpable a ser detectado. Los exámenes con pol+grafos no s$lo fracasan porque algunos inocentes temen ser falsamente acusados o porque por alg/n otro motivo los perturba el hecho de ser sometidos a un examen, sino también porque algunos delincuentes no creen en la máquina mágica: saben que pueden burlarla, y por eso mismo se vuelve más probable que sean capaces de lograrlo.
#l detector eléctrico de mentiras, o pol+grafo, opera basándose en los mismos principios que la persona que quiere detectar mentiras a través de se'ales conductuales que las traicionen, y está su"eto a los mismos problemas. #l pol+grafo no detecta mentiras sino s$lo se'ales emocionales. 4us cables le son aplicados a l sospechoso a fin de medir los cambios en su respiraci$n, sudor y presi$n arterial. 1ero en s+ mismos el sudor o la presi$n arterial no son signos de enga'o: las palmas de las manos se humedecen y el coraz$n late con mayor rapidez cuando el individuo experimenta una emoci$n cualquiera. 1or desgracia, sometidos a tales presiones algunos inocentes confiesan falsamente para no tener que seguir soportándolas.
Los mentirosos naturales están al tanto de su aptitud, no menos que quienes los conocen bien. #stas personas no sienten ning/n recelo de ser detectadas, todo lo contrario: conf+an en su capacidad para enga'ar. #sta confianza. #sta falta de recelo al mentir, es una de las marcas caracter+sticas de la personalidad psicopática* pero es la /nica caracter+stica que los mentirosos naturales comparten con los psic$patas. 5 diferencia de éstos, no revelan poseer escaso discernimiento, ni de"an de aprender con la experiencia. Tampoco presentan estos otros rasgos de los psic$patas: .....encanto superficial %...& falta de remordimiento o de verg6enza, comportamiento antisocial sin compunci$n aparente, ego centrismo patol$gico e incapacidad de amar7.
5l contrario de lo que sucede con los psic$patas, no utilizan su habilidad para mentir con el ob"eto de da'ar a otras personas %los criminales que son psic$patas enga'an a los expertos&. Los máximos exponentes del uso del enga'o en el pasado han sido personas sumamente individualistas y competitivas, que no se amoldar+an a una gran organizaci$n y más bien tienden a traba"ar solas. 4uelen estar conven cidas de la superioridad de sus propias opiniones. #n ciertos aspectos su carácter concuerda con el que, seg/n se supone, tienen los artistas bohemios, excéntricos y solitarios* s$lo que el arte que ellos practican es distinto. #stos 7grandes art+fices7 pueden necesitar dos clases de habilidad muy diferentes: la indispensable para planear una estrategia enga'osa y la imprescindible para desorientar al contrincante en un encuentro cara a cara.
E TEMOR ! SER !TR!P!DO !asta ahora he descrito dos factores determinantes del recelo a ser detectado: la personalidad del mentiroso y, antes que esto, la fama y carácter del descubridor de la mentira. 2o menos importante es lo que está en uego al mentir! La regla es muy simple: cuanto más sea lo que está en "uego, mayor será el recelo a ser detectado. 1ero la aplicaci$n de esta regla puede ser complicada, porque no siempre es sencillo averiguar qué es lo que está en "uego. #l recelo a ser detectado será mayor si lo que está en "uego es evitar un castigo, y no meramente ganar una recompensa. n enga'o puede acarrear dos clases de castigo: el castigo que aguarda en caso de que la mentira falle y el que puede recibir el propio acto de mentir. 4i el descubridor de mentiras puede hacerle saber con claridad al sospechoso, antes de interrogarlo, que su castigo por mentir será peor que el que se le imponga por su delito, tiene más probabilidades de disuadirlo de que mienta 1ara sintetizar, el recelo a ser detectado es mayor cuando: #l destinatario tiene fama de no ser fácilmente enga'able* #l destinatario se muestra suspicaz desde el comienzo* #l mentiroso carece de mucha práctica en el arte de mentir, y no ha tenido demasiados éxitos en esta materia* #l mentiroso es particularmente vulnerable al temor a ser atrapado* Lo que está en "uego es mucho* hay en "uego tanto una recompensa como un castigo* o bien, en el caso de que haya una sola de estas cosas en "uego, es el castigo* #l castigo en caso de ser atrapado mintiendo es grande, o bien el castigo por lo que se intenta ocultar con la mentira es tan grande que no hay incentivo alguno para confesarla* • #l destinatario de la mentira no se beneficia en absoluto con ella.
E SENTIMIENTO DE C"P! POR EN#!$!R 5l igual que el recelo a ser detectado, el sentimiento de culpa por enga'ar es de fuerza variable. 1uede ser leve, o tan intenso que luego la mentira falle porque dicho sentimiento de culpa hace que el mentiroso se autodelate o dé alguna pista sobre su embuste. 5hora bien: estos episodios pueden crear culpa a algunos, pero para otros son un est+mulo, el aliciente que los lleva a considerar que la mentira vale la pena: deleite que pro"oca embaucar a alguien!
La diferencia entre la verg6enza y la culpa es muy importante, ya que estas dos emociones pueden impulsar a una persona a actuar en sentidos contrarios. #l deseo de aliviarse de la culpa tal vez la mueva a confesar su enga'o, en tanto que el deseo de evitar la humillaci$n de la verg6enza tal vez la lleve a no confesarlo "amás. 4e estima que la marca distintiva de un psic$pata es que no siente nunca ni culpa ni verg6enza en ning/n aspecto de su vida. #xisten mentiras altruistas de las que el mentiroso no saca provecho alguno. 4i un mentiroso piensa que su mentira no lo beneficia en nada, probablemente no sentirá ning/n sentimiento de culpa por enga'ar.
1ara sintetizar, el sentimiento de culpa por enga'ar es mayor cuando: #l destinatario no está dispuesto a aceptar que lo enga'en #l enga'o es totalmente ego+sta, y el destinatario no s$lo no saca ning/n provecho de él sino que pierde tanto o más que lo que gana quien lo enga'a #l enga'o no ha sido autorizado, y en esa situaci$n lo autorizado es la sinceridad #l mentiroso no ha enga'ado durante mucho tiempo #l mentiroso y su destinatario tienen ciertos valores sociales comunes #l mentiroso conoce personalmente a su destinatario 5l destinatario no puede clasificárselo fácilmente como un ruin o un incauto #l destinatario tiene motivos para suponer que será enga'ado* más a/n, el mentiroso procur$ ganarse su confianza.
E DEEITE DE EM%!"C!R ! OTRO 8entir puede dar lugar asimismo a sentimientos positivos. 1ara sintetizar, el deleite por el enga'o es mayor cuando: • #l destinatario plantea un desaf+o por tener fama de ser dif+cil de enga'ar* La mentira misma constituye un desaf+o, ya sea por la naturaleza de lo que debe ocultarse o de lo que debe inventarse tras personas observan o conocen el enga'o y valoran la habilidad con que se lleva a cabo. 999999999999999999999999999999999999999999999999999999999999999999999999999999999999999999999999999999999999999999999999999999999999
Tanto la cul&a como el temor ' el deleite &ueden e(idenciarse en la e)&resi*n facial, la (o+, los mo(imientos del cuer&o, &or ms que el mentiroso se afane &or ocultarlo- !un cuando no e)ista una autodelaci*n de carcter no (er.al, el em&eño &or im&edir que se &rodu+ca &uede dar lugar a una &ista so.re el em.uste- En los dos ca&/tulos siguientes e)&licaremos c*mo detectar el engaño a &artir de las &ala.ras, la (o+, el rostro ' los mo(imientos del cuer&o9999999999999999999999999999999999999999999999999999999999999999999999999999999999999999999999999999999999999999999