BELICE Belice fue parte del Imperio Maya que se extendía desde el sur de México hasta Guatemala y Honduras. La ocupación más temprana del territorio corresponde a la mitad del segundo milenio a. C., alcanzando su florecimiento en torno al siglo IX de nuestra era. El centro político y cultural más importante de la región era el sitio conocido en la actualidad como el Caracol cuyas inscripciones se encuentran en aristocrática variante del maya, llamado Ch’olti’an Clásico por los epigrafistas.3 Al norte de las Montes Maya las inscripciones de Lamanai se encuentran en yucateco desde el siglo VII. En el periodo Clásico, antes del siglo X, vivieron en el territorio actualmente beliceño cerca de 400.000 personas y, si bien hubo un descenso de la población durante el Posclásico, las tierras bajas Mayas seguían ocupadas cuando arribaron los europeos en el XVI; para entonces los principales habitantes eran los Mopán, una rama de los yucatecos. Los primeros europeos que ingresaron en lo que hoy es Belice fueron conquistadores españoles. Ya en el 1524 este territorio formaba parte de la Capitanía General de Guatemala. Desde 1638 se establecieron aventureros ingleses en el sitio conocido como Puerto Valiz (actual Ciudad de Belice), a quienes se debe la introducción de la trata de esclavos africanos en la región. Además de estos colonos, tripulaciones piratas solían establecerse por breves períodos en las islas y la costa usándolas como base para asaltar barcos españoles. En 1670 el Tratado de Madrid puso un alto a estos ataques y los piratas, ya conocidos como “baymen”, tuvieron que dedicarse a otros oficios. En 1821, año de la independencia de la Capitanía General de Yucatán, el territorio pasó jurídicamente a la soberanía de las Provincias Unidas de Centro América pero en la práctica era Gran Bretaña quien seguía controlándolo. En 1840 la región fue unilateralmente declarada colonia británica y se denominó Honduras Británica. Para la devolución de estos territorios, Guatemala firmó con el Reino Unido un tratado que los británicos no respetaron; más bien, quedaría sin efecto al declararse la independencia del país el 21 de septiembre de 1981. Guatemala reconoció tal independencia, si bien reivindica todavía partes del territorio beliceño. EL SALVADOR La Conquista de El Salvador es la etapa histórica en la que las naciones indígenas, como pipiles, lencas, mayas chortís, mayas pokomames, xincas, cacaoperas y chorotegas, cuyos dominios cubrían el territorio, donde en la actualidad se encuentra la república de El Salvador, fueron conquistas por los españoles, durante el reinado de Carlos I de España. El 31 de mayo de 1522 el español Andrés Niño, a la cabeza de una expedición, desembarcó en la isla de Meanguera en el (golfo de Fonseca); y posteriormente descubrió la bahía de Jiquilisco y la desembocadura del río Lempa. En junio de 1524, Pedro de Alvarado salió de la población deI ximché en el actual territorio de Guatemala para iniciar el proceso de conquista de Cuscatlán. Bajo su mando estaban unos 250 soldados españoles y unos 6,000 indígenas aliados, principalmente tlaxcaltecas. Luego de pasar por los poblados de Itzcuintepec, Atiepac, Tacuilula, Taxisco, Guazacapán, Chiquimulilla, Tzinacaután, Naucintlán y Paxco, llegó a las riberas occidentales del río Paz, y lo cruzó para internarse en los territorios pipiles. Luego de algunas leguas de camino llegó a una población deMochizalco (hoy Nahuizalco), que Alvarado encontró desierta, debido a que sus habitantes la habían abandonado luego deenterarse de los atropellos que había realizado al otro lado del río Paz. Luego continuó hasta la población de Acatepec que también había sido abandonada por sus habitantes. Alvarado continuó hacia el sur y llegó a la población de Acaxual (Acajutla); al continuar, se encontró a media legua del pueblo con el ejército pipil, entablándose una cruenta batalla. El mismo Alvarado fue alcanzado con una flecha en el fémur, quedando herido de gravedad. Luego de la batalla, Alvarado realizó un repliegue para curar a los heridos, permaneciendo unos cinco días en Acaxual. A pesar de la gravedad de su herida, que le obligaba a permanecer en la retaguardia, marchó contra el poblado de Tacuzcalco (hoy Nahulingo), que se encontraba situado al sur de la actual ciudad de Sonsonate; allí se entabló una desigual batalla con enormes pérdidas para el ejército pipil. Los españoles descansaron un par de días y continuaron hacia Miahuatán, que encontraron desierta.
Al llegar a la población de Atehuan (actualmente Ateos, La Libertad) recibió mensajeros que traían una declaración de paz de los Señores de Cuscatlán; sin embargo Alvarado avanzó hacia la ciudad de Cuscatlán y encontrándola desierta. Parece ser que en julio de 1524, Alvarado regresó a Guatemala debido a las condiciones climatológicas. La historia de la expedición liderada por Pedro de Alvarado al territorio del Señorío de Cuzcatlán (descrita anteriormente) fue narrada por el mismo Pedro de Alvarado en su Segunda Carta de Relación enviada a Hernán Cortés. Además de este documento existen otros como: el Lienzo de Tlaxcala y la Brevísima relación de la destrucción de las Indias. En el Lienzo de Tlaxcala, los indígenas tlaxcaltecas que acompañaron al ejercito de Pedro de Alvarado narran además dentro de la campaña conquistadora del conquistador otras batallas ocurridas dentro del territorio actual de El Salvador las cuales son: las batallas de Cenzonapan (el mismo lugar donde posteriormente se fundaría Sonsonate), Tecpan Izalco, Yopicalco (Opico) y Xilopango (Ilopango). En cambio la Brevísima relación de la destrucción de las Indias (escrita por Fray Bartolome de las Casas) narra una versión más conquistadora por parte de los españoles que pacífica. A finales de 1524 o principios de 1525 Pedrarias Dávila (conquistador de Panamá y Nicaragua) envió a Francisco Hernández de Córdoba a Honduras y este a su vez envió a Hernando de Soto hacia Olancho pasando por Nequepio (nombre con el que los indígenas Chorotegas conocían al Señorío de Cuzcatlán). Ante esto Pedro de Alvarado envió a un grupo de hombres liderados por Gonzalo de Alvarado para fundar la villa de San Salvador; la villa de San Salvador fue fundada por Diego de Holguín y Gonzalo de Alvarado el 1 de abril de 1525 en el sitio conocido como Ciudad Vieja, en el valle de la Bermuda, a 8 kilómetros al sur de la actual Suchitoto. En 1526 estalló una sublevación indígena que obligó a abandonar la villa. En 1528, la villa de San Salvador fue refundada por Diego de Alvarado. Para 1528 se estima un aproximado de 90pueblos conquistados y repartidos entre los españoles. Desde 1529 a 1540 Luis de Moscoso, Diego de Rojas, Pedro de Portocarrero, entro otros capitanes del ejército de Pedro de Alvarado, prosiguen y ponen fin a la conquista y pacificación de El Salvador. En 1530, una expedición al mando del capitán Luis de Moscoso termina la conquista de la zona oriental y fundó la villa de San Miguel de la Frontera. En 1530 Hernando de Chávez y Pedro Amalín(enviados por Pedro de Alvarado) conquistan el Reino Payaquí y derrotan a Copán Galel en Cítala, siendo apresado y ejecutado finalmente en La Ermita. En 1537 es vencido Lémpira (líder de una resistencia lenca) en Honduras. En1540 el área de El Salvador es pacificada, quedando el actual territorio salvadoreño plenamente controlado por los españoles. HONDURAS La conquista de Honduras comenzó en 1524, año en que Hernán Cortés, conquistador de México, envió a Cristóbal de Olid para que iniciara el sometimiento de los indígenas hondureños, en su mayoría lencas, jicaques, payas y arawacos. La conquista se caracterizó además por las luchas entre los distintos centros de poder español localizados en México, Panamá y Santo Domingo. En cualquier caso, Honduras constituyó una provincia dependiente del virreinato de Nueva España. Cortés llegó en 1525 para ocupar formalmente el territorio, pero el descubrimiento de oro convirtió a Honduras en un centro de intrigas y conflictos durante varios años. Alonso de Cáceres fundó la ciudad de Comayagua en 1537 y venció la resistencia heroica del caudillo indígena Lempira. El lugarteniente de Cortés en Guatemala, Pedro de Alvarado, venció a todos sus oponentes en 1539. Ese año Honduras fue incorporada a la Capitanía General de Guatemala. Comayagua fue la capital durante la mayor parte del periodo colonial, aunque el auge de la minería alrededor de Gracias le dio a esta población tal importancia que en 1543 se convirtió en la capital de la Audiencia de los Confines, creada por Carlos I y que abarcaba toda Centroamérica. Sin embargo, los depósitos de oro y plata fueron más limitados de lo que se creía y Honduras fue perdiendo su importancia inicial, por lo que la capital de la Audiencia fue restablecida en Guatemala. Honduras fue gobernada por esta Audiencia hasta 1552 y después pasó a depender de la Capitanía General de Guatemala. La actividad minera en los alrededores de Tegucigalpa motivó que esta ciudad, cuya Alcaldía Mayor había sido creada en 1579, desafiara también la hegemonía de Comayagua, creando una rivalidad que aumentaría su
intensidad después de la independencia. Sin embargo, y de forma general, la Honduras colonial fue una provincia muy poco poblada de la Capitanía General de Guatemala, con la mayoría de su población dedicada a la agricultura y a la ganadería de autoconsumo. A finales del periodo colonial, fue un importante proveedor de alimentos y ganado para las regiones de El Salvador y Guatemala. Durante toda la época colonial, y debido a su situación estratégica, sufrió los ataques de corsarios y piratas británicos, franceses y holandeses. A finales del siglo XVII los ingleses se establecieron en Río Tinto y reivindicaron la costa septentrional de Centroamérica, la costa de los Mosquitos, que posteriormente entregarían a Nicaragua. COSTA RICA El descubrimiento, exploración y conquista de Costa Rica por parte de expedicionarios españoles durante el siglo XVI fue resultado directo de la ola expansiva de la economía occidental de ésta época, las mismas causas que provocaron el sometimiento del continente americano a los europeos. No obstante, en comparación con el resto de Hispanoamérica, en Costa Rica el proceso que lleva del descubrimiento de las costas del mar Caribe por Cristóbal Colón en 1502, a la dominación efectiva del interior del país, hacia 15751580, se caracteriza por un amplio lapso transcurrido entre uno y otro: casi tres cuartos de siglo. El estudio de las diversas expediciones en tan largo periodo permite agruparlas en dos etapas. En la primera, las exploraciones en el Caribe, caracterizadas por la férrea defensa de los indígenas, las condiciones geográficas adversas y las dificultades para obtener provisiones por parte de los conquistadores, que fueron factores que se conjugaron en provocar un fracaso en las sucesivas expediciones españolas. Solamente la Península de Nicoya logró caer efectivamente en poder de los españoles en 1520, merced a las expediciones lanzadas desde las ciudades de Granada y Panamá. Durante la segunda etapa de la conquista, en la segunda mitad del siglo XVI, los españoles lograron establecerse en la región central del país e implantar su dominio sobre gran número de poblaciones indígenas, en gran parte debido a la labor de Juan Vázquez de Coronado. En 1569, Perafán de Rivera procedió al reparto de los indígenas en encomienda, lo que permitió fortalecer el posterior proceso de colonización. Se dan durante este proceso la fundación de la ciudad de Cartago, primer capital del país, en el Valle Central así como de Aranjuez, el primer puerto en el Pacífico, en lo que es hoy el puerto de Caldera, en la provincia de Puntarenas. Por otro lado, tanto en el sur como en las llanuras del norte del país, las poblaciones indígenas se mantuvieron al margen de la dominación española, por lo que estos territorios fueron utilizados como refugio por aquellos que lograban substraerse a la conquista de los territorios ocupados por los hispanos, destacándose en esta labor, sobre todo, la resistencia implantada por el cacique Garabito, rey de los huetares occidentales. PANAMA En 1508 el rey Fernando de España le asigno el territorio de Panama, para su colonizacion, a Diego de Nicuesa y el territorio adyacente, Colombia, a Alonso de Ojeda. La hostilidad de los indios, impidio la colonizacion inicialmente. Entre tanto, por discusiones sobre su autoridad, de Ojeda fue sustituido por Martin Fernandez de Enciso quien fue derrocado por Vasco Nuñez de Balboa que se queda a cargo del territorio panameño, al desaparecer en el mar Diego de Nicuesa. Posteriormente Nuñez de Balboa es sustituido por Pedro Arias Davila (llamado Pedrarias) quien funda la ciudad de Panama en 1519 y se hace cargo de la exploracion y conquista del territorio a su cargo. Pedrarias Davila que reconocia en Urraca un peligroso rival y por ello queria asegurarse de que seria sometido. A pesar de la energica resistencia ofrecida, Urraca tuvo que retirarse y, al darse cuenta que no seguia contando con la ayuda de su gente, porque ya estaban cansados de pelear, se alejo y no volvio a presentar batalla a los conquistadores. De acuerdo con algunos historiadores, la verdadera conquista de Costa Rica no empezo sino en 1560 con la expedicion de Juan de Cavallon y fue llevada a cabo mas humanamente que en otras regiones del istmo.