La Colocación de la Navaja
Por Rodolfo J. Guerrero Z.
Uno de los temas que, con mayor insistencia, nos solicitan los lectores es el relacionado con la colocación de la navaja o el “ amarrado ” de la misma. Tema, de suyo, complicado por las va riantes que presenta, así como los “ mitos” y “tabúes” que, como muchas otras cosas en los gallos, está presente a la hora de “ montar ” la navaja, ya que, también aquí, pululan los “ avaricios ventajas ”, que todo lo saben, aunque nunca ganen. También, están algunos “ amarradores famosos ” que hacen del tema un lucrativo negocio, pues con
frecuencia algunos incautos se acercan a ellos para querer comprarles las navajas que usan, pensando que con ellas van a gan ar y estos “ divos”, que más bien son “ vivos”, les venden navajas de $600.00, la docena a $300.00 o $400.00 cada navaja, y por supuesto nos les venden las que compraron para su uso. Porque lo triste del caso es que estos “ vivos” quieren hacer creer que los gallos sólo ganan cuan do ellos los “ amarran ”, no dejando ninguna posibilidad de que los gallos corten y ganen por su calidad.
Botanas de diferentes formas, en las que se puede apreciar que no todas tienen el orificio para el espolón en el centro o no está bien terminado. También es importante apreciar el grosor, tamaño y material, algunas tienen una base de aluminio entre la baqueta y el terminado. (fotos: RJGZ)
Pero, bueno, entremos al tema. ¿Cuáles son los primeros pasos para “ armar ” a los gallos
correctamente? 1. Seleccionar la botana adecuada, que ésta se ajuste a la pata del gallo, que sea ligera, con la cavidad para el espolón en el centro de la misma, no como sucede con frecuencia que el gallo se tiene que adaptar a la botana favorita del “amarrador” en cierne s, que con frecuencia sucede, que tuvo un éxito en determinado Derby y/o compromiso y a partir de ese momento, quiere usar esa botana en todos los gallos que amarra, porque con ésa ganó, sin ponderar que cada gallo es un individuo diferente. La forma de la botana deber ser al gusto del cada quien, pero, siempre, respetando que se adapte a la pata del gallo. Lo recomendable es tener varias con diferentes tamaños de “entrada del espolón”, recuerden que no todos los gallos tienen espolones del mismo grosor. E s importante señalar que están de moda las llamadas botanas “trincadas”, con la parte frontal,
donde la navaja, más alta y que, por supuesto, se debe considerar este detalle a la hora de seleccionar la navaja a usar. 2. Selección de la navaja, es importante señalar que, lamentablemente, muchos galleros compran las navajas que tengan más brillo, sin importar ninguna otra cosa, tan es así que ni siquiera “checan el filo ”.
En las imágenes superiores se aprecia la diferencia entre una navaja a escuadra y una navaja con defecto de alineación, cargada a la izquierda. En las imágenes inferiores se aprecia cómo la navaja de la izquierda no hace escuadra con la escala, a diferencia de la imagen de la derecha. (fotos: RJGZ)
Nótese en las imágenes superiores cómo las patas de ambas navajas no asientan en la base, a diferencia de la navaja de la imagen inferior, en que ambas patas están. bien asentadas
¿Qué detalles debemos ponderar? Que la navaja esté perfectamente balanceada, ¿qué quiero decir con esto? bueno, que la hoja esté al centro de la base, que al poner la navaja sobre sus patas en un
botana, que las patas tengan el mismo grosor, que la hoja haga escuadra con la escala. Las navajas para gallo se afilan en dos formas, básicamente: El filo normal abrillantado se realiza al terminar de desbastar la navaja, se afina el filo con lija fina para metal, después se abrillanta con rueda de fieltro. El filo queda brillante y terso. Del filo despalmado existen dos tipos; todo opaco o un filo opaco y otro abrillantado. El primero es más despalmado, pero su apariencia a muchas personas no les gusta, aunque, “ mucho ojo”, es un filo más agresivo. El segundo le da tersura media al filo, un lado es completamente opaco y otro es con un poco de brillo. Para seleccionar mejor una navaja debe usted checar que los hombros de las patas estén bien delineados, que la navaja esté centrada en la escuadra y que la punta llegue a la misma.
La navaja también debe estar pareja de las patas, ya que si alguna esta torcida o levantada, al colocar la navaja sobre la botana, ésta se cargará hacia el lado donde está levantada la pata. El proceso de amarrar la navaja es como se indica en las imágenes superiores: Es primordial iniciar con la colocación del “ tape” o “ parche”, de tal forma que per mita que la botana asiente correctamente, no es necesario colocar el “ tape” como
si fuera una venda, al colocar la botana, debe ajustar como un guante, no debe entrar a presión, pero tampoco debe quedar “ floja”, ya que esto redundará en que los golpes no sean de alto impacto. Es importante que la persona que sostiene el gallo sea de similar estatura a la del amarrador, ya que esto permitirá que el gallo esté cómodo y el amarrador haga su trabajo de manera natural, sin tener que inclinarse demasiado o ponerse de puntas en sus pies.
El amarrador deberá tomar con su mano libre la articulación de la caña y pierna del gallo, como se muestra en las imágenes 4 y 5, de forma que, si quien sostiene al gallo por alguna razón se distrae y afloja la sujeción del ave, permitirá que el gallo realice movimientos. La sujeción del amarrador impedirá accidentes que suelen ser graves. La navaja debe asentar correctamente, después de fijar la botana con tres vueltas de hilo en cuando menos tres puntos diferentes a la largo de la botana, como se aprecia en las imágenes 4 y 5. La colocación del hilo debe ser a lo largo de la botana procurando no dejar bordes o acumular demasiado sobre una zona en particular, como se aprecia en las imágenes 12 y 14. En el ínter se podrán hacer los llamados “ columpios” o “cruzadas”, con la finalidad de sujetar firmemente la navaja para ev itar que con los golpes que el gallo aplica, ésta se suelte, quede insertada en el cuerpo del rival, o bien, no penetre adecuadamente. En las imágenes 16, 17 y 18, se muestra cómo el uso de la llamada botana “trincada” obliga al uso de navajas más rectas, ya que de otro manera el gallo estará golpeando con el lomo de la navaja, lo que impedirá que “corte” y el riesgo de perder la pelea aumente considerablemente. Uno de los “ secretos” mejor guardados es hacía dónde apuntar la navaja, los “expertos” dicen que al “ huesito del codillo”, sólo que el codillo tiene varios “huesitos” a ¿cuál se refieren? en la imagen No. 15 se aprecian en negro los
“huesitos” existentes y con un círculo en rojo se marca el que realmente es
utilizado por la mayoría de los amarradores de mayor éxito. Es importante que, al colocar la navaja sobre la botana, la punta quede verticalmente sobre el “ centro” del espolón, como se muestra en la imagen No. 6. Espero que estos conceptos les sean de utilidad, y quiten de la mente de muchos ideas fuera de contexto que no llevan a ningún lado, excepto meter la mano a la bolsa para sacar la cartera y pagar. Quiero agradecer a René González Trejo y Sergio Calleros Aguilar su paciencia y amabilidad para compartir conmigo y ustedes muchos de los conceptos aquí plasmados, con el deseo de que les sirvan; si dicho objetivo es cumplido, ellos y quien suscribe nos sentiremos satisfechos de haber aportado algo a alguien y que sinceramente esperamos que sean muchos.