La Doctrina Monroe El fin de la era de las revoluciones atlánticas a principios de la década de 1820 generó nuevas preocupaciones en los Estados Unidos. Los líderes estadounidenses vieron con recelo los acontecimientos en Europa, donde las fuerzas más conservadoras controlaban los principales reinos e imperaba un ambiente represivo y extremadamente reaccionario. El principal temor de los norteamericanos era la posibilidad da una intervención europea para restablecer el control español en sus excolonias americanas. A los británicos también les preocupaba tal contingencia y tantearon la posibilidad de una alianza con los Estados Unidos. La propuesta británica provocó un gran debate entre los miembros de la administración del presidente James Monroe. El Secretario de Estado John Quincy Adams desconfiaba de los británicos y temía que cualquier compromiso con éstos pudiese limitar las posibilidades de expansión norteamericana. Adams temía la posibilidad de una intervención europea en América, pero estaba seguro que de darse tal intervención Gran Bretaña se opondría de todas maneras para defender sus intereses, sobre todo, comerciales. Por ello concluía que los Estados Unidos no sacarían ningún beneficio aliándose con Gran Bretaña. Para él, la mejor opción para los Estados Unidos era mantenerse actuando solos. Los argumentos de Adams influyeron la posición del presidente Monroe quien rechazó la alianza con los británicos. El 2 de diciembre de 1823, Monroe leyó un importante mensaje ante el Congreso. Parte del contenido de este mensaje pasaría a ser conocido como la Doctrina Monroe. En su mensaje, Monroe enfatizó la singularidad (“uniqueness”) de los Estados Unidos y definió el llamado principio de la “noncolonization,” es decir, el rechazo norteamericano a la colonización, recolonización y/o transferencia de territorios americanos. Además, Adams estableció una política de exclusión de Europa de los asuntos americanos y definió así las ideas principales de la Doctrina Monroe. Las palabras de Monroe constituyeron una declaración formal de que los Estados Unidos pretendían convertirse en el poder dominante en el hemisferio occidental. Es necesario aclarar que la Doctrina Monroe fue una fanfarronada porque en 1823 los Estados Unidos no tenían el poderío para hacerla cumplir. Sin embargo, esta doctrina será una de las piedras angulares de la política exterior norteamericana en América Latina hasta finales del siglo XX y una de las bases ideológicas del expansionismo norteamericano.
El Destino Manifiesto John L. O’Sullivan
En 1839, el periodista norteamericano John L.O’Sullivan escribió un artículo periodístico justificando la expansión territorial de los Estados Unidos. Según O’Sullivan, los Estados Unidos eran un pueblo escogido por Dios y destinado a expandirse a lo largo de América del Norte. Para O’Sullivan, la expansión no era una opción para los norteamericanos, sino un destino que éstos no podían renunciar ni evitar porque estarían rechazando la voluntad de Dios. O’Sullivan también creía que los norteamericanos tenían una misión que cumplir: extender la libertad y la democracia, y ayudar a las razas inferiores. Las ideas de O’Sullivan no eran nuevas, pero llegaron en un momento de gran agitación nacionalista y expansionista en la historia de los Estados Unidos. Éstas fueron adaptadas bajo una frase que el propio O’Sullivan acuñó, el destino manifiesto, y se convirtieron en la justificación básica del expansionismo norteamericano.
La idea del destino manifiesto estaba enraizada en la visión de los Estados Unidos como una nación excepcional destinada a civilizar a los pueblos atrasados y expandir la libertad por el mundo. Es decir, en una visión mesiánica y mística que veía en la expansión norteamericana la expresión de la voluntad de Dios. Ésta estaba también basada en un concepto claramente racista que dividía a los seres humanos en razas superiores e inferiores. De ahí que se pensara que era deber de las razas superiores “ayudar” a las inferiores. Como miembros de una “raza superior”, la anglosajona, los norteamericanos debían cumplir con su deber y misión.
El Expansionismo Norteamericano (resumen) España se caracterizó por la acumulación de metales preciosos y de la prohibición de la producción en las colonias que pudiera competir con el comercio español. Los ingleses, gozaron de la libertad de crear empresas que permitían la extracción de minerales, dieron impulso al obrero artesanal y a la creación de industrias basadas de recursos de las colonias.
La expansión de los Estados Unidos en el siglo XIX empieza desde su declaración de independencia en 1783. Sus motivos de expansión fueron claramente económicos, pero también influyó el espíritu emprendedor del agricultor americano y la necesidad de acabar con las tribus indias a favor de la civilización. Estados Unidos básicamente se expandió de cuatro maneras:
Por colonización Por compra de terreno Por cesión de terreno Por conquista militar (a la fuerza)
Inglaterra se opuso a la Santa Alianza porque se dio cuenta de que no necesitaba a nadie para pelear contra sus colonias; en otras palabras Inglaterra quería que se hundiera el Imperio Español en América. La Doctrina Monroe Dictada por el presidente James Monroe Define la política exterior de los EU Sus principios son: A la no colonización del continente americano A la NO intervención en las colonias recién independizadas Unos de los puntos de la Doctrina Monroe aclara que: Los EU no ha intervenido ni intervendrá en ningunas de las colonias. Los EU mantendrán una relación estrecha con las potencias europeas Se define en: “América para los Americanos” El Destino Manifiesto Es básicamente un “arreglo no oficial” a la Doctrina Monroe. ¿Por qué?: Porque ahora los EU tienen el derecho predeterminado para “ayudar” y desarrollar el “experimento” democrático. Sus razones fueron: Es una misión dada por Dios. El pueblo Estadounidense tiene la misión de explorar y conquistar tierras. Con el fin de llevar la luz de la democracia, libertad y civilización. La primera manifestación de esta doctrina fue cuando EU intentó comprar el territorio a México y cuando los mexicanos se negaron EU declaró la guerra. (La tierra fue cedida) La Revolución Industrial de cierto modo había dictado las futuras potencias del mundo: Inglaterra, Francia y los EU. Con el potencial que tenían (con líneas de teléfono, ferrocarriles, procesadores de materia prima) necesitaban un lugar de implementación: los estados Latinoamericanos. Aquí viene la palabra neocolonialismo: los estados latinoamericanos salieron del yugo español para someterse a estas potencias. Esto llega hasta el punto de que los recursos de los países latinos son administrados por empresas privadas extranjeras. Esto se llama la penetración del capital. Genocidio contra el pueblo paraguayo La Triple Alianza (Brasil, Uruguay y Argentina) quisieron tumbar la próspera e independiente economía del pueblo paraguayo (población 1,300,000) que luego quedo con una población de 200,000 personas. Las repúblicas bananeras: gobiernos tiranos que imponían impuestos a las compañías bananeras de entroamérica y el Caribe. Los EU comenzaron a manifestar sus intereses de una gran potencia:
EU les interesa la producción azucarera en países caribeños como Cuba y Puerto Rico. La guerra contra España demostró la necesidad urgente de un medio de comunicación rápida entre los dos océanos; por razones militares, políticas y económicas (hoy en día son más que todo políticas) La Política del Gran Garrote o “Big Stick” Dictada por el presidente Teodoro Roosevelt. Era un “arreglo definitivo” a la doctrina Monroe: Se abrían las puertas para una intervención siempre que implicara una ocupación de terrero o para cobro de deudas con potencias europeas. Se menciona a los EU como la nación más civilizada, con derecho de intervenir en problemas de naciones menos civilizadas. Era con el objetivo que los vecinos de los EU fueran estables, ordenados y prósperos. El resultado de la política del “Big Stick” fueron las continuas intervenciones estadounidenses en Centroamérica (Guatemala, Honduras, Nicaragua) y en el Caribe (Cuba, Granada, Haití y Santo Domingo) Diplomacia del Dólar Dictada por el presidente William Thaft. Ponía a los EU como el banco prestamista de América. Los EU cancelaban las deudas de los países latinos que habían contraído con los europeos. Los EU prestaban bajo una condición: el derecho a intervenir para cobrar la deuda. La Política del Buen Vecino Dictada de Franklin Delano Roosevelt. Bajaron la guardia y cambiaron su política de relaciones exteriores agresivas por unas más pacíficas y literalmente pasivas. Las relaciones exteriores norteamericanas fueron el reflejo de un imperialismo en pleno desarrollo económico, industrial y político. Los siguientes fenómenos determinan la política de los EU en los años 30: Llegada de Franklin D. Roosevelt a la presidencia. Las Conferencias Interamericanas donde se firmaron los Derechos y Deberes del Estado Americano. (Montevideo, Uruguay 1933) Surgimiento de gobiernos fascistas en Europa y Asia. (de políticas militares agresivas) Cual fue la política norteamericana hacia América Latina. Contextos sociales 8 Pag.205 Completa un cuadro como el siguiente: Características
Lugar en donde se presentó.
Destino manifiesto. Doctrina Monroe.
1. ¿Qué justificó la Doctrina Monroe? 2. ¿Cómo se relacionan la Doctrina Monroe y el Destino Manifiesto? 3. ¿Cuáles son los planteamientos del Destino Manifiesto? Los Estados Unidos de América están destinados a expandirse desde las costas del Atlántico al Pacífico, expandirse hacia los cuatro vientos. Justifican las adquisiciones territoriales hechas por EU. Explica la manera en que este país entiende su lugar en el mundo y se relaciona con los demás pueblos. Pretende dar a entender al mundo que Dios eligió a ese pueblo para ser una potencia política y económica, ser una nación superior al resto del mundo. 4. ¿Qué proponía el Gobierno estadounidense a través de la doctrina Monroe? 5. ¿Qué importancia tuvo el Destino Manifiesto en el movimiento de expansión territorial de los Estados Unidos? ¿Qué efectos tuvieron estas políticas en las relaciones internaciones de Estados Unidos?
¿Cómo justificaban ambas políticas la entrada de Estados Unidos a Puerto Rico? ¿Qué opinas sobre ambas políticas? ¿En qué consistió la doctrina Monroe? ¿Qué beneficios le trae a Colombia y por qué? ¿Qué es el Destino Manifiesto y la Doctrina Monroe? ¿Cómo influyo la Doctrina Monroe y la filosofía del Destino Manifiesto a la visión de desarrollo de EU?
Cuál es la relación entre la doctrina Monroe y el destino manifiesto? La doctrina Monroe de Adams y Monroe.... Era un aviso a Europa de que no permitirían que intervinieran o influyeran en América, refiriéndose propiamente a su territorio pero haciéndolo extenso a todo el continente.......... En esta se notaba una leve pero de cierta forma visible política de expansión pues se autoniminban a defender al continente y tomar cierto liderazgo...
El destino Manifiesto...... como diría Martinoli, es Infamame...... Es su forma de tratar de justificar su Política de expansión, su forma de intervenir Directamente en territorios que no les pertenecen con el argumento de defender los derechos de sus ciudadanos, afectando primeramente a América Latina pero que se ha utilizado en medio oriente y otras regiones del Planeta..... ¿similitudes y diferencias de la doctrina de Monroe ,destino ... La Doctrina Monroe, sintetizada en la frase «América para los americanos», fue elaborada por John Quincy Adams y atribuida a James Monroe en el año 1823. Establecía que cualquier intervención de los estados europeos en América sería visto como un acto de agresión que requeriría la intervención de Estados Unidos. La doctrina fue presentada por el presidente James Monroe durante su séptimo discurso al Congreso sobre el Estado de la Unión. Fue tomado inicialmente con dudas y posteriormente con entusiasmo. Fue un momento definitorio en la política exterior de los Estados Unidos. La doctrina fue concebida por sus autores, especialmente John Quincy Adams, como una proclamación de los Estados Unidos de su oposición al colonialismo, pero ha sido posteriormente reinterpretada de diversas maneras. Interpretar el principio de la no intervención de los Estados europeos en los asuntos americanos de una manera absoluta conduciría a que un Estado americano pudiera conculcar los principios de la justicia en sus relaciones con los individuos extranjeros, violar la ley moral, negarse a tomar en consideración las justas reclamaciones de los extranjeros perjudicados, crear de este modo un estado de cosas anormal e ilícito según los principios de Derecho común y de la Moral internacional, y rechazar después cualquier forma de injerencia para hacer cesar tales manifiestas violaciones de los principios de la justicia, atrincherándose en el principio de su independencia y en la doctrina de Monroe escribe Fiore La doctrina o política del Gran Garrote o Big Stick es el nombre con que se conoce a una tendencia en las relaciones diplomáticas estadounidenses de principios del siglo **. La expresión se origina en una frase escrita por el presidente de Estados Unidos, Theodore Roosevelt, en el año 1901, donde manifestaba su agrado porque el comité del Partido Republicano de Nueva York había expulsado a un corrupto consejero. La frase, tomada de un proverbio del África occidental era: "habla suavemente y lleva un gran garrote, así llegarás lejos" (speak softly and carry a big stick, you will go far). Tal concepto ilustra la voluntad de Roosevelt para realizar negociaciones y pactos con sus adversarios internos y externos, pero siempre mostrando la posibilidad de una actuación violenta como modo de presión. Aplicada a la política de Estados Unidos en América Latina, la frase mostraba que el régimen de Roosevelt podía presionar a los países latinoamericanos, particularmente los ribereños del Mar Caribe con una intervención armada. Señala el inicio del imperialismo estadounidense y de su actuación como potencia mundial. En América Latina comenzaría una ola de dominio político y económico estadounidense (a principios del siglo **) justificada en la marcada extensión del "derecho" de EEUU a intervenir en asuntos de otros países en defensa de los intereses de ciudadanos estadounidenses, encontrada en el "Corolario a la Doctrina Monroe" emitido por Theodore Roosevelt en su mensaje anual de 1904.
Si una nación demuestra que sabe actuar con una eficacia razonable y con el sentido de las conveniencias en materia social y política, si mantiene el orden y respeta sus obligaciones, no tiene por qué temer una intervención de los Estados Unidos. La injusticia crónica o la importancia que resultan de un relajamiento general de las reglas de una sociedad civilizada pueden exigir que, en consecuencia, en América o fuera de ella, la intervención de una nación civilizada y, en el hemisferio occidental, la adhesión de los Estados Unidos a la Doctrina Monroe (basada en la frase «América para los americanos») puede obligar a los Estados Unidos, aunque en contra de sus deseos, en casos flagrantes de injusticia o de impotencia, a ejercer un poder de policía internacional. La Doctrina Monroe afirmaba que EEUU actuará a fin de evitar intervenciones provenientes de fuera del continente americano (esencialmente de los países europeos). Se ha resumido, famosamente, en la frase "América para los americanos". Con el advenimiento del corolario, la frase llego a adquirir el irónico sentido de "América para los estadounidenses". Bajo la política del Gran Garrote se legitimó en la política exterior de EEUU el uso de la fuerza como medio para defender los intereses -en el sentido más amplio- de los EE. UU., lo que ha resultado en numerosas intervenciones políticas y militares en todo el continente. Ejemplos de la aplicación de la política del Gran Garrote contra las naciones de América Latina, sólo en el periodo previo a la Primera Guerra Mundial, incluyen: El apoyo estadounidense a la Separación de Panamá de Colombia en 1903, cuando el gobierno Colombiano rechazó la propuesta de Roosevelt para construir el Canal de Panamá. La ocupación militar de la República Dominicana entre 1916 y 1924. La ocupación militar de Cuba entre 1906 y 1909. La ocupación militar de Haití desde 1915 hasta 1934.
Corolario Roosevelt El corolario de Roosevelt es una sustancial alteración (llamada “enmienda”) a la Doctrina Monroe por parte del presidente de los Estados Unidos de América Theodore Roosevelt. En su estado alterado, la Doctrina de Monroe ahora consideraría a América Latina y el Caribe como territorio para expandir los intereses comerciales de los Estados Unidos en la región[cita requerida], adicional a su propósito original, de mantener la hegemonía europea fuera del hemisferio. El corolario fue formulado ante el Congreso en el Discurso del Estado de la Unión del 6 de diciembre de 1904, una vez que las potencias europeas (Alemania, Inglaterra e Italia) habían amenazado con el Bloqueo Naval a Venezuela de 1902-1903. El motivo de la acción bélica fue cobrar por la fuerza el pago de una deuda contraida por el gobierno de Venezuela en las últimas décadas del siglo XIX, sin embargo el bloqueo fue levantado para someterse las partes a un arbitraje bajo presión del mismo Roosevelt. En esta enmienda se afirma, que si un país latinoamericano y del Caribe situado bajo la influencia de los EE.UU. amenazaba o ponía en peligro los derechos o propiedades de ciudadanos o empresas estadounidenses, el gobierno de EE.UU. estaba obligado a intervenir en los asuntos internos del país "desquiciado" para reordenarlo, restableciendo los derechos y el patrimonio de su ciudadanía y sus empresas. Este corolario supone, en realidad, una carta blanca para la intervención de Estados Unidos en América Latina y el Caribe y establece de facto derechos "quasi o neocoloniales" de EEUU sobre países de la
región, derechos similares a los que tanto Inglaterra como Francia se otorgaban a sí mismos sobre los países de sus áreas de influencia de acuerdo a los tratados de la Entente cordiale firmados el 8 de abril de 1904. Roosevelt aplicó su variante a la Doctrina Monroe por primera vez tomando las aduanas de la República Dominicana en 1905 para pagar a los acreedores extranjeros de esa nación. En un intento diplomático de revertir la percepción de "Imperialismo Yanqui" sembrada por la administración de los EEUU en 1904 al estilo del "Gran Garrote", el corolario Roosevelt fue suplantado por la Política de buena vecindad (el llamado panamericanismo) una iniciativa presentada por la administración del presidente Franklin Delano Roosevelt en el marco de la VII Conferencia Panamericana de Montevideo en diciembre de 1933. Entre las actividades de distensión y acercamiento se destaca la producción de filmes basados en las culturas de los países latinoamericanos como Volando a Rio, Los tres caballeros o Saludos amigos. Sin embargo los EEUU apoyaron las dictaduras de Fulgencio Batista en Cuba, de Rafael Leonidas Trujillo en Republica Dominicana, Anastasio Somoza en Nicaragua y Francois Duvalier en Haiti. Con el inicio de la Guerra Fria en 1945, Estados Unidos reestableció la doctrina del Corolario Roosevelt con la finalidad de bloquear el avance del comunismo soviético en el hemisferio. En este caso EEUU considera que la amenaza de la instalación de régimenes izquierdistas o demasiado reformistas también implica una intervención, aunque menos directa.Sus acciones a la larga causaron que la mayor parte de la América Latina y el Caribe se llegara a convertir en anti estadounidense, los efectos de esto último se aprecian aún hoy en día. En la Doctrina Monroe ESTADOS UNIDOS ve como amenaza que los gobiernos de los países europeos extendieran su influencia en America.... asi que se proclamó la Doctrina Monroe en la cual se decía el famoso "América para los americanos"... pero para qué? Pues para que su Destino Manifiesto pudiera llevarse a cabo sin intervención de Europa... En el destino Manifiesto se dice que es "voluntad de Dios" que los Estados Unidos se expandan sobre todo el continente americano segun ellos para divulgar la palabra divina.
Pues tuvo muchisima importancia La Doctrina del destino manifiesto del inglés "Manifest Destiny" sostiene que: El pueblo estadounidense, en su calidad de pueblo elegido, tiene un fin manifestado por Dios según el cual le es permitido apropiarse de todo territorio que estuviese destinado a formar de parte de los Estados-Unidos. El origen del concepto del "Destino Manifiesto" se puede remontar hasta los primeros colonos llegados, desde Inglaterra, al territorio de lo que más tarde serían los Estados Unidos de América. Ellos, en su mayoría, eran de origen puritano, protestantes radicales, y cruzaron el océano convencidos que la tierra prometida era el lugar donde iban a cumplir con la misión que Dios les había encomendado, se sentían un pueblo elegido. El término se reavivó en la década de 1890, principalmente usada por los Republicanos, como una justificación teórica para la expansión estadounidense fuera de América del Norte. También fue utilizado por los encargados de la política exterior de EEUU en los inicios del siglo XX, algunos comentaristas consideran que determinados aspectos de la Doctrina del Destino Manifiesto, particularmente la creencia en una "misión" estadounidense para promover y defender la democracia a lo largo del mundo, continua teniendo una influencia en la ideología política estadounidense. El historiador William E. Weeks ha puesto de manifiesto la existencia de tres temas utilizados por los defensores del Destino Manifiesto:
1) La virtud de las instituciones y los ciudadanos de EE.UU. 2) la misión para extender estas instituciones, rehaciendo el mundo a imagen de los EE.UU. 3) La decisión de Dios de encomendar a los EE.UU la consecución de esa misión.
La descripción del presidente Abraham Lincoln de los Estados Unidos como "la última y mejor esperanza sobre la faz de la Tierra" es una expresión muy conocida de esta idea. A partir de este supuesto los Estados Unidos, anexan el territorio de Texas (1840), California (1845) e invaden México (1848) incorporando Colorado, Arizona, Nuevo México, Nevada, Utah y parte de Wyoming. Después, en muchas otras ocasiones, se ha citado este Destino Manifiesto tanto a favor como en contra de otras intervenciones militares. Uno de los ejemplos más claros de la influencia del concepto de Destino Manifiesto se puede apreciar en la declaración del presidente Theodore Roosevelt en su mensaje anual de 1904. "Si una nación demuestra que sabe actuar con una eficacia razonable y con el sentido de las conveniencias en materia social y política, si mantiene el orden y respeta sus obligaciones, no tiene porque temer una intervención de los Estados Unidos. La injusticia crónica o la importancia que resultan de un relajamiento general de las reglas de una sociedad civilizada pueden exigir que, en consecuencia, en América o fuera de ella, la intervención de una nación civilizada y, en el hemisferio occidental, la adhesión de los Estados Unidos a la doctrina de Monroe ( basada en la frase "América para los americanos") puede obligar a los Estados Unidos, aunque en contra de sus deseos, en casos flagrantes de injusticia o de impotencia, a ejercer un poder de policía internacional". El Presidente Woodrow Wilson continuó la política de intervencionismo de EE.UU en el Americas, e intentó redefinir el Destino Manifiesto con una perspectiva mundial. Wilson llevó los Estados Unidos a la Primera Guerra Mundial con el argumento de que "El mundo debe hacerse seguro para la democracia". En 1920 en su mensaje al Congreso, después de la guerra, Wilson declaró: "... Yo pienso que todos nosotros comprendemos que ha llegado el día en que la Democracia está sufriendo su última prueba. El Viejo Mundo simplemente está sufriendo ahora un rechazo obseceno del principio de democracia (...). Éste es un tiempo en el que la Democracia debe demostrar su pureza y su poder espiritual para prevalecer. Es ciertamente el destino manifiesto de los Estados Unidos, realizar el esfuerzo por hacer que este espíritu prevalezca". La versión de Wilson del Destino Manifiesto era un rechazo del expansionismo y un apoyo al principio de libre determinación, dando énfasis a que Estados Unidos tenían como misión ser un líder mundial para la causa de la democracia. Esta visión estadounidense de sí mismo como el líder del mundo libre crecería más fuerte en el siglo XX después de la Segunda Guerra Mundial. Sin embargo, en la guerra de Vietnam, esta idea de ser los estadounidenses un pueblo diferente a los demás y perseguir unos ideales más elevados que la mera codicia o expansión demográfica, se vio seriamente dañada por el hecho de apoyar a gobiernos dictatoriales (con generales que llegan a proclamar en público su admiración por Hitler), realizar bombardeos masivos o cometer matanzas contra la población civil indefensa. Otra publicaciones como Nam Crónica de la Guerra de Vietnam va aún más lejos afirmando que la guerra del sureste asiático fue el fin de esta idea.