BIBLIOTECA ELECTRÓNICA PARA EL MAESTRO EL MAESTRO Y SU IGLESIA
ENSEÑANZA Y CAPACITACIÓN EN SU IGLESIA por Guillermo Graves
EDITORIAL MUNDO HISPANO © 2007
ENSEÑANZA
Y CAPACITACIÓN
EN SU IGLESIA
©Copyright 1987, Casa Bautista de Publicaciones. Traducido de la edición revisada de The Church Teaching and Training, Publicado en inglés por Carib Baptist Publications, ©1981. Todos los derechos reservados. Prohibida su reproducción total o parcial.
POR
GUILLERMO GRAVES TRADUCCIÓN POR
RUBÉN O. ZORZOLI
Índice PREFACIO CAPITULO 1 — LAS BASES BÍBLICAS Y PRACTICAS PARA LA EDUCACIÓN CRISTIANA 1. La Naturaleza de la Iglesia 2. Desarrollo Histórico de la Educación Cristiana en la Iglesia 3. Educación Cristiana en las Iglesias Bautistas de la Actualidad CAPITULO 2 — LA IGLESIA ENSENA A SUS MIEMBROS 1. Necesidad de un Programa de Enseñanza Bíblica 2. Trabajo a Realizar por el Programa de Enseñanza Bíblica 3. Provisión de un Programa de Enseñanza Bíblica 4. Mantenimiento de un Ministerio de Enseñanza Bíblica. 5. Conclusión CAPITULO 3 — LA IGLESIA CAPACITA A SUS MIEMBROS EN CUANTO A LA VIDA CRISTIANA 1. ¿Por Qué Capacitar? 2. Desarrollo Cristiano de los Nuevos Miembros 3. Desarrollo de los Miembros en General 4. Planeamiento de la Capacitación CAPITULO 4 — LA IGLESIA CAPACITA A SUS DIRIGENTES 1. Beneficios de la Capacitación de los Líderes de la Iglesia 2. Organización para Proveer la Capacitación a los Dirigentes de la Iglesia 3. Áreas de Estudio para la Capacitación de los Dirigentes de la Iglesia 4. Comprobación de la Efectividad de la Capacitación de los Dirigentes de la Iglesia 5. Conclusión CAPITULO 5 — LA IGLESIA CAPACITA A SUS MIEMBROS EN LAS MISIONES 1. Los Bautistas y las Misiones 2. La Tarea Misionera de la Iglesia 3. Enseñanza Misionera CAPITULO 6 — EL CURRÍCULO PARA LA EDUCACIÓN CRISTIANA 1. Definición de Currículo 2. Diseño del Currículo 3. La Biblia en el Currículo de la Educación Cristiana 4. Contenido del Currículo 5. Mantenimiento de un Currículo Adecuado en el Programa de Educación
Cristiana 6. Conclusión CAPITULO 7 — LA ORGANIZACIÓN DE LA IGLESIA PARA LA EDUCACIÓN CRISTIANA 1. La Responsabilidad de la Congregación por la Educación Cristiana 2. La Comisión Coordinadora o el Concilio de la Iglesia 3. La Organización y el Calendario de Educación Cristiana 4. La Iglesia Pequeña 5. Conclusión CAPITULO 8 — EL PAPEL DEL PASTOR EN LA EDUCACIÓN CRISTIANA 1. Ministerio del Pastor 2. Relación del Pastor con el Programa de Educación Cristiana 3. Cómo Funciona el Pastor Dentro del Programa de Educación Cristiana 4. Conclusión CAPITULO 9 — LA EXTENSIÓN A TRAVÉS DE LA EDUCACIÓN CRISTIANA EN LA IGLESIA 1. Bases para una Decisión de Alcanzar Más Personas 2. Usos del Programa de Enseñanza Bíblica para Alcanzar a Otros 3. Principios de Crecimiento 4. Aplicación de los Principios de Crecimiento CAPITULO 10 — LA EVANGELIZACION A TRAVÉS DE LA EDUCACIÓN CRISTIANA EN LA IGLESIA. 1. El Lugar de la Evangelización en el Programa de la Iglesia 2. Relación del Programa de Enseñanza Bíblica con la Evangelización 3. Aspectos Prácticos para el Uso del Programa de Enseñanza Bíblica en la Evangelización 4. Conclusión CAPITULO 11 — EL PLANEAMIENTO DE LOS EDIFICIOS Y EQUIPOS DE LA IGLESIA PARA LA EDUCACIÓN CRISTIANA 1. La Importancia de un Edificio en la Educación Cristiana 2. Pasos para Planear una Construcción 3. Estudio del Espacio Disponible 4. Planeamiento para Edificación y Equipo 5. Planeamiento para el Uso del Edificio y del Equipo CAPITULO 12 — LOS ORGANISMOS DENOMINACIONALES Y EL PROGRAMA DE EDUCACIÓN CRISTIANA DE LA IGLESIA 1. Ventajas para la Educación Cristiana Cuando las Iglesias Bautistas Se Relacionan Unas con Otras 2. Función de Organismos Denominacionales para Reforzar la Educación
Cristiana 3. Fuentes de Ayuda Locales y Mundiales para la Educación Cristiana BIBLIOGRAFÍA
Prefacio Este libro ha sido escrito y preparado con cuatro propósitos en conexión con los dirigentes presentes y futuros de las iglesias. En primer lugar, el libro trata de proveer una evidencia convincente que refuerce el principio de que los programas y organizaciones de educación cristiana están involucrados vitalmente en ayudar a las iglesias bautistas locales a alcanzar sus fines y cumplir las funciones para las cuales Dios las ha formado. En segundo lugar, el libro trata de ayudar a quienes lo estudien a lograr una comprensión de los principios y el alcance de la educación cristiana en las iglesias bautistas locales. En tercer lugar, se espera que el estudiante se sienta desafiado a aplicar estos principios en la iglesia donde es miembro y en la que está trabajando. En cuarto lugar, se hace un esfuerzo por compartir la convicción de que la participación activa y positiva del pastor o encargado de la congregación es una necesidad absoluta para el desarrollo exitoso de los programas de educación cristiana en la iglesia. El alcance tan amplio de este tema hace imposible la presentación de muchos detalles importantes relacionados con el programa de educación cristiana. Por lo tanto, para usar el libro con éxito se hace necesario el estudio posterior y la actualización continua.
1. — Las Bases Bíblicas Y Practicas Para La Educación Cristiana El punto de comienzo lógico para examinar la tarea de la iglesia en cuanto a la enseñanza y la capacitación es un estudio de las bases para esta tarea. De la misma manera, dicho estudio debe comenzar con una consideración de la naturaleza de la iglesia.
1. La Naturaleza de la Iglesia Definición El pueblo bautista ha buscado definir la iglesia sobre la base de las enseñanzas del Nuevo Testamento acerca de ella. La bien conocida Confesión de New Hampshire (1833) describe así a la iglesia: “Creemos que una iglesia visible de Cristo es una congregación de creyentes bautizados, asociados por convenio en la fe y compañerismo del evangelio; observando las ordenanzas de Cristo; gobernados por sus leyes, y ejerciendo sus dones, derechos y privilegios conferidos a ellos por la Palabra; siendo sus únicos oficiales bíblicos obispos (o pastores) y diáconos, cuyas cualidades, derechos y deberes están determinados en las epístolas a Timoteo y Tito.” f1
J. M. Pendleton en Church Manual (Manual de la Iglesia) define a la iglesia como “una congregación de discípulos de Cristo bautizados, que lo reconocen como su cabeza, confían en su sacrificio expiatorio para ser justificados ante Dios, y dependen del Espíritu Santo para ser santificados, unidos en la creencia del evangelio, en acuerdo para mantener sus ordenanzas y obedecer sus preceptos, que se reúnen para adorar y que cooperan para la extensión del reino de Cristo en el mundo”.
Él también brinda una definición resumida: “Una iglesia es una congregación de discípulos de Cristo bautizados, unidos en la creencia de lo que él ha dicho, y comprometiéndose a hacer lo que él ha mandado.”f2
La Convención Bautista del Sur aprobó una declaración sobre “Fe y Mensaje Bautistas”, que incluía la siguiente definición de la iglesia: “Una iglesia neotestamentaria del Señor Jesucristo es un cuerpo local de creyentes bautizados, los cuales están asociados, por medio de un pacto en la fe y en la confraternidad del evangelio; observan las dos ordenanzas de Cristo, y se someten a las enseñanzas de él; ejercitan los dones, los derechos y los
privilegios con los cuales son dotados por su Palabra, y procuran anunciar el evangelio hasta los fines de la tierra.”f3
Obviamente, estas definiciones no varían mucho entre sí, y se refieren principalmente a la congregación local que será la base para las consideraciones de esta sección.
Bases bíblicas Como él mismo lo afirmó. Cristo edificó a la iglesia (Mat. 16:18). En la iglesia del Nuevo Testamento, “los que recibieron su palabra fueron bautizados; y se añadieron…” (Hech. 2:41). La nación del Antiguo Testamento que había llegado a ser “especial tesoro”, “un reino de sacerdotes y gente santa” (Exo. 19: 5, 6), encontró su expresión cristiana neotestamentaria en la iglesia: “linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido” (1 Ped. 2: 9). El elemento básico en este compañerismo es el amor (1 Jn. 4:10, 11), el amor de Dios al hombre, el amor del hombre a Dios y el amor del hombre a sus prójimos.
Objetivo de la iglesia El objetivo de una iglesia, compuesta por creyentes bautizados que comparten una entrega personal a Jesucristo como Salvador y Señor, es ser un cuerpo redentor en Cristo, mediante el poder del Espíritu Santo, que crece hacia la madurez cristiana a través de la adoración, testimonio, educación y ministerio, que proclama el evangelio a todo el mundo, y que aplica los principios cristianos al hombre y a la sociedad para el logro de los propósitos de Dios. f4
Funciones de la iglesiaf5 La iglesia local tiene ciertas funciones específicas que surgen de su naturaleza y sus objetivos. El grado en el que este cuerpo local de Cristo, compuesto de personas redimidas y bautizadas, se dedique a llevar adelante estas funciones determinará hasta dónde Dios puede bendecir a la iglesia con un buen compañerismo, crecimiento cristiano a semejanza de Cristo, crecimiento numérico e influencia. Las funciones más esenciales de esta iglesia pueden llamarse: adoración, proclamación y testimonio, edificación y educación, servicio y aplicación. Adoración implica el encuentro personal de individuos y de la congregación con Dios. En este encuentro los creyentes experimentan una profundización de su fe y un fortalecimiento de su dedicación al servicio. El porqué Dios desea que los hombres imperfectos le adoren en un encuentro íntimo puede ser un
misterio para muchos de sus hijos. Lo que no puede dudarse es que la Biblia lo enseña así. Proclamación y Testimonio (Evangelización) involucra la proclamación espontánea y planeada por parte de los individuos y de la congregación de la obra misericordiosa de Dios en Cristo para con todos los hombres. Abarca pasos definidos para lograr una decisión guiada por Dios de parte de los hombres no creyentes en que aceptan a Cristo como Salvador y dedican sus vidas enteramente a él como Señor. Edificación y Educación es la función de la iglesia mediante la cual se guía a las personas en su desarrollo progresivo hacia la madurez cristiana. La educación incluye la enseñanza y el desarrollo cristiano involucrados en el proceso de crecimiento. Sin esta función educativa, los miembros de la iglesia tienden a permanecer ignorantes de sus creencias, doctrina, niveles éticos de cristianismo y de la Biblia misma. La iglesia que no cumple esta función se ve a sí misma truncada en su crecimiento y su desarrollo. Servicio es enfrentar las necesidades humanas cruciales en el espíritu de Cristo. Es la función de “suministro”. El pastor multiplica su ministerio cuando sirve a través de los miembros de la iglesia. Aplicación involucra traer los principios cristianos al campo de todos los aspectos de la vida diaria. Abarca la búsqueda con el fin de descubrir la voluntad de Cristo en cada aspecto o problema y la transformación por llegar a ser “hacedores” de la Palabra.
2. Desarrollo Histórico de la Educación Cristiana en la Iglesia Antiguo Testamento El Antiguo Testamento, particularmente el libro de Deuteronomio, da testimonio de un énfasis en la enseñanza que, indudablemente, se remonta hasta muy atrás en la historia de Israel. Según el capítulo 6, la respuesta de los israelitas al amor de Dios por ellos como su pueblo y a su rescate de ellos debía ser, principalmente, un amor hacia él que involucraría todo el ser de ellos y, luego, como una expresión de este amor hacia Dios, sería una enseñanza de su fe a sus hijos y a sus nietos. Esta educación no debía ser simplemente una transmisión de leyes e ideas, sino una extensión aún más amplia de la relación del pacto, que colocaría a cada nuevo israelita en sus privilegios y responsabilidades. Para un israelita, el no cumplir este punto y así permitir que sus descendientes fueran despojados de su única luz verdadera del pacto con Dios, sería una indicación de que no amaba a Dios con todo su corazón, su mente y su alma.
En el mismo capítulo de Deuteronomio hay un énfasis marcado sobre la importancia de la persistencia en la enseñanza. Se enfatiza la utilización de las oportunidades casuales. La repetición del Shemá (Deut. 6: 4-9) y la presencia de la Mezuzá (un pequeño tubo metálico conteniendo un rollo sobre el que está escrita el Shemá) en los dinteles de las puertas de cada lugar de residencia judía, son ejemplos de esta persistencia constante en la enseñanza. El uso del chal para orar y las filacterias (cintas de cuero que sostenían en la frente y el brazo unas pequeñas cajas de cuero conteniendo versículos del Pentateuco), recordaba a jóvenes y ancianos la importancia de la oración y la adoración. La participación de los niños en las actividades sabáticas y los días festivos, tales como la pascua, proveían oportunidades de enseñanza que los padres aprovechaban. Los niños asistían a los servicios de la sinagoga cada sábado y recibían instrucción sobre el simbolismo y el significado de los diferentes aspectos del culto de adoración. La enseñanza y disciplina que recibían en el hogar tenían el respaldo de maestros de entre los levitas. Un proverbio judío dice que “los verdaderos guardianes de la ciudad son los maestros”. f6 El mejor testigo de la eficacia de esta instrucción en el lugar es la historia de la fe de Israel. De esos hogares salieron los profetas. Los hombres se maravillaban de que un granjero como Amos, criado en el campo agreste junto a las colinas de Judea, con muy pocos adelantos culturales, pudiera repentinamente presentarse como un profeta de Dios cuyos mensajes incisivos se expresaban en una forma poética de suma calidad.f7 Aparentemente el mismo profeta era tanto predicador como maestro. Es imposible concebir a un Isaías o un Jeremías contentándose con decir, en cuanto a Dios y a su propósito hacia Israel, sólo lo que podía expresarse en esos discursos públicos a toda nación, que fueron preservados en la colección de sus profecías. Evidentemente, estos profetas enseñaron a otras personas más jóvenes que se sentían llamadas a este ministerio. Del mismo modo, ellos servían como maestros del pueblo. Así vemos a Esdras con las Escrituras frente a él, leyéndolas e interpretándolas a la gente (Neh. 8: 1-9).
Nuevo Testamento El estudioso del Nuevo Testamento encuentra muy difícil trazar una línea definida que distinga entre la enseñanza y la predicación en el ministerio de Jesús. Para las multitudes, él era más maestro que profeta. “Maestro” o “rabí” era el título más común que le adjudicaban. Sin embargo, su enseñanza tenía una nota de autoridad que lo diferenciaba de otros rabinos o maestros. Obviamente, Jesús dedicó mucho tiempo a la enseñanza. La palabra “maestro” se usa cuarenta y dos veces en los Evangelios y las referencias a Jesús como maestro aparecen a lo largo de los Cuatro Evangelios. Es significativo que la
Gran Comisión, el mandato que nos dejó el Cristo resucitado, incluya una orden específica de enseñar.f8 Los apóstoles no sólo eran predicadores, sino que también eran maestros. La enseñanza era una de las actividades principales de la nueva iglesia (Hech. 5:42). Pablo, la personalidad humana del Nuevo Testamento de la cual se habla más, hizo de la enseñanza una parte central de su ministerio en sinagogas, en hogares y en la prisión. Recordaba al joven predicador Timoteo que dos cualidades del pastor son el ser “apto para enseñar” (1 Tim. 3: 2) y el guiar en la administración de todo el programa en las iglesias que él ayudó a establecer. Pablo enseñó a otros por usarlos en la expansión de la obra y por instruirlos. Así continuó instruyendo a las iglesias mediante sus cartas. f9
Desarrollo post-neotestamentario En la iglesia cristiana primitiva, se dio un nuevo énfasis a la enseñanza. La tradición de la enseñanza en el hogar continuó, debido a la necesidad de que los conversos tuvieran una instrucción completa en su fe. También, de la misma manera, a través de la predicación cristiana, continuó la tradición de la sinagoga en cuanto al ministerio de la enseñanza. Pero las clases catequísticas representaron un desarrollo completamente nuevo, y durante los primeros tres siglos jugaron un papel muy importante en la capacitación de los creyentes en los aspectos básicos de su fe. Después del siglo IV, estas clases se fueron desvaneciendo hasta desaparecer. El período medioeval representó el nivel más bajo de todos los tiempos en cuanto a la educación en la iglesia, y la negligencia general se reflejaba en la ignorancia de muchos de los clérigos. El énfasis sobre los sacramentos como medios esenciales para la gracia, llevaron a una declinación y aun al abandono de la predicación. Los feligreses, sin instrucción en cuanto a las Escrituras y la adoración, se sentían incapaces de enseñar a sus propios hijos en el hogar. Las escuelas, ligadas a los monasterios, alcanzaban a pocos jóvenes, principalmente a aquellos destinados a una vocación especial en la iglesia. Las iglesias de la Reforma, con la restauración de la predicación de la Palabra de Dios en el centro de la adoración, con la restitución del catecumenado antes de la confirmación y con la insistencia sobre el deber de cada padre de instruir a los miembros de la familia en la Biblia y en las doctrinas, estaban volviendo al orden existente en las iglesias de los tres primeros siglos. Por supuesto, esto requirió escuelas que enseñaran a los padres a leer, para que éstos pudieran enseñar a sus hijos. También resultó en una combinación de enseñanza en
aspectos religiosos y seculares en las escuelas. Por los comienzos del siglo XVIII este énfasis en la educación cristiana había perdido su fuerza. Luego, en el siglo XVIII, el avivamiento o despertamiento evangélico se difundió rápidamente por Gran Bretaña y los Estados Unidos de América, con movimientos correspondientes en la Europa continental. Al principio, su fuerte eran las grandes reuniones. Cuando estos miles de convertidos se agruparon en iglesias, la situación fue nuevamente favorable para el trabajo educativo, que era una continuación del trabajo evangelizador. La “Escuela Andrajosa” de Robert Raikes en Gloucester, Inglaterra, en 1780, representa el comienzo verdadero en esta era hacia la educación cristiana en la iglesia. Estas no eran escuelas parroquiales, sino escuelas dirigidas por cristianos laicos dedicados. Los alumnos estudiaban lectura, escritura, aritmética y la Biblia. La meta era hacerlos aptos para una vida cristiana inteligente. En aquellos días no había una ayuda pública adecuada para la educación de los niños de padres con bajos ingresos. Por lo tanto, estas escuelas llenaban una necesidad definida, y el movimiento se difundió. Muchas personas que ocupaban lugares altos de influencia en la sociedad y en la iglesia, pensaron que esas “escuelas dominicales” eran un signo de agitación de la gente común con implicaciones revolucionarias. El clero estaba escandalizado de que hombres y mujeres cristianos gastaran tiempo enseñando fuera del alcance y la autoridad de la iglesia. En algunas comunidades, los obreros de la escuela dominical fueron objeto de persecuciones, y el movimiento llegó a tener cierto carácter anticlerical. Sin embargo, fue aceptado ampliamente por las iglesias que surgían de los avivamientos evangélicos guiados por Wesley y Whitefield. Estas nuevas iglesias necesitaban un desarrollo en la educación para llevar adelante el trabajo que habían comenzado. La himnología y la teología de estas primeras escuelas dominicales reflejaban un gran fervor evangelizador. Aunque al principio la escuela dominical también experimentó oposición de los líderes de las iglesias en los Estados Unidos de América, muchas iglesias encontraron en ella un instrumento listo para llevar adelante la tarea de brindar educación cristiana a sus niños. De esta manera, sirvió como la base para el movimiento de avivamiento. La oposición clerical se reflejaba en el hecho de que la Unión Americana de Escuelas Dominicales, fundada en 1824, no permitió que ningún pastor formara parte de su Junta Directiva. El liderazgo de la escuela dominical fue todavía casi totalmente laico.f10
3. Educación Cristiana en las Iglesias Bautistas de la Actualidad Predicación y enseñanza En el Antiguo y Nuevo Testamentos se encuentra tanto la predicación como la enseñanza. La buena enseñanza es también buena predicación y la buena predicación tiene un elemento de enseñanza. Jesús debe ser enseñado y predicado. El contenido de la predicación y de la enseñanza es el mismo. Sin embargo, la predicación depende, en un grado menor que la enseñanza, de la participación activa del que escucha. Busca mover las emociones en un grado mayor que la enseñanza. La predicación incluye una proclamación vigorosa de la Palabra de Dios al incrédulo. Llama al hombre en su pecado e incredulidad a arrepentirse y recibir las Buenas Nuevas de que Dios está dispuesto a venir a su encuentro. La predicación busca asegurar al hombre que, por el poder de su Palabra y la obra de su Espíritu en él, Dios establecerá en el hombre la vida libre y feliz del reino. Como cristianos, necesitamos la predicación de la Palabra de Dios porque, no importa cuánto hayamos crecido en la fe, aún queda la raíz de pecado e incredulidad dentro de nosotros: en una parte de nuestras vidas en que el Mensaje del Evangelio, con la capacidad de humillar y transformar nuestro ser, no ha llegado todavía. La enseñanza tiene un motivo evangelizador y busca incluir entre sus oyentes a las personas no creyentes. También, la enseñanza se refiere a la situación de la persona que se ha arrepentido y ha vuelto hacia Dios, y a la situación de los niños pequeños que no han alcanzado el grado de madurez que haría posible el nuevo nacimiento. La enseñanza busca una madurez espiritual y la aplicación de los principios cristianos a la vida diaria. La predicación y la enseñanza se complementan mutuamente. La iglesia sufre cuando carece, ya sea de la predicación o de la enseñanza. El ministro que se niega a bajar de su pulpito y participar del trabajo de la enseñanza es como el campesino que arroja la semilla a la tierra y no quiere hacer nada más hasta la cosecha. La tarea de sembrar sólo se hace parcialmente en los sermones. También es necesario que se haga en pequeños grupos y de casa en casa. De la misma manera el trabajo de cosechar puede hacerse tanto en el púlpito como en el aula, en el hogar o en la calle. Tanto el predicador como el maestro deben estar alertas por el tiempo de cosecha cuando el grano está maduro y una nueva vida está a punto de comenzar.f11
Principios básicosf12 La iglesia tiene un ministerio educativo. La Gran Comisión afirma esto, dando énfasis a los ministerios evangelizadores y educativos de la iglesia. Cristo
espera que la iglesia eduque. El espera que su iglesia sea una iglesia que enseñe. El evangelio demanda esto. Cada una de las razones para predicar el mensaje redentor de Dios es una razón para enseñarlo. La historia lo prueba. Cada período de despertamiento espiritual en la historia del cristianismo estuvo acompañado por un énfasis fresco en la enseñanza. La gente lo necesita. Los miembros de la iglesia necesitan una relación continua y vital con Jesús. La mejor manera de enseñar esta relación es mediante la educación cristiana efectiva. Los cristianos deben aprender a pensar a la manera de Cristo. La situación actual lo demanda. Las condiciones morales, sociales y espirituales en el mundo claman por una enseñanza mejor. La ignorancia espiritual habla de la necesidad de una educación cristiana efectiva. La gente tiene una capacidad ilimitada de aprender. Esto se demuestra por el número asombroso de cosas que aprende un niño en sus primeros tres años. Dado que el hombre tiene la capacidad de aprender, puede adquirir continuamente nuevas verdades reveladas en Cristo. Si ha adquirido conocimiento en cuanto a los secretos del universo, es lógico que pueda aprender más de la nueva vida en Cristo y del propósito que Dios tiene en la historia. La gente tiene necesidades urgentes que no pueden ser satisfechas fuera de la enseñanza y el desarrollo cristiano. Toda la gente tiene hambre por la verdad. Desean una interpretación de la vida y del mundo. Están confundidos y necesitan instrucción sólida. Tienen habilidades que demandan un desarrollo. Las personas redimidas desean servir a Cristo, pero nunca lo harán adecuadamente hasta que la iglesia les provea un programa de enseñanza bíblica y desarrollo cristiano. El propósito de Dios en la redención incluye un crecimiento continuo hacia la madurez cristiana. Esto depende de la enseñanza y la capacitación. Dios espera que los nuevos creyentes se desarrollen en el fruto del Espíritu, avanzando siempre hacía la estatura de Cristo. Esta es la vida cristiana que las iglesias deben enseñar si quieren progresar. Un ministerio educativo efectivo requiere el uso de principios y métodos correctos. Sin ellos el aprendizaje será deficiente y retardado. Los pastores y líderes de la iglesia local deben hacer que la misma determine y use los mejores métodos y principios. Es necesario cierto plan de organización para desempeñar el ministerio educativo de la iglesia. Dado que la mejor enseñanza bíblica y el desarrollo cristiano deben estar relacionados con las necesidades y las capacidades de los individuos, el ministerio educativo debe ser graduado y abarcar
responsabilidades distribuidas. La organización no es una máquina sino un plan por el cual la iglesia puede trabajar eficazmente para desarrollar y usar a sus miembros. La organización más efectiva es aquella que se caracteriza por su sencillez práctica y su adaptabilidad a las necesidades de la iglesia. Todos los aspectos de la educación cristiana en la iglesia forman una unidad. Todos son controlados por la iglesia. Todos deben encajar dentro del propósito general de la iglesia. Debe evitarse cualquier espíritu de independencia que no considere el bien supremo de la iglesia. Cada miembro de la iglesia puede prepararse para servir. Cada persona es salva para servir y tiene un don que Dios puede usar. La voluntad de Dios para cada persona y para la iglesia es que todos puedan ser capacitados y usados. Los propósitos del ministerio de la educación cristiana deben estar centrados en el individuo. La tarea de la iglesia es la salvación, desarrollo y dedicación de la vida de cada individuo. El valor infinito de cada persona y su propia individualidad son de suma importancia. La promoción no debe ser lo primordial en el ministerio de la educación cristiana en la iglesia. El ministerio es educar. Las metas son educacionales, y se relacionan con la conversión, el desarrollo de la vida y el servicio cristiano. Sin embargo, el logro de estas metas debe ser el mejor medio de mover todo el programa de la iglesia hacia sus fines correctos. Es necesario un programa constante y definido para preparar dirigentes. Esto es una responsabilidad de la iglesia. La evaluación de la tarea educativa de la iglesia es vital. Esto implica reuniones para evaluar, coordinar y planear esta tarea educativa. El ministerio educativo debe edificar la iglesia. El ministerio no es un fin en sí sino un instrumento para ministrar al individuo para el bienestar de la iglesia. El fin es desarrollar y entrenar a algunos para ganar a otros quienes, a su vez, serán desarrollados y entrenados. La educación cristiana es bíblica. El ministerio de la educación cristiana encuentra su autoridad, su campo de acción, su mensaje y su propósito en la Biblia. La educación cristiana debe ser llevada a cabo bajo la guía divina: Un ministerio efectivo de educación cristiana se puede lograr sólo bajo la guía y la dirección del Espíritu Santo. Este ministerio es más que métodos y trabajo. El Espíritu Santo usa estos elementos y obra a través de ellos.
Algunos problemas Muchas iglesias han heredado ideas tradicionales tales como programas rígidos, enseñanza bíblica sólo para niños, una visión limitada de la función de los líderes de educación cristiana en la iglesia, y una participación limitada de la congregación en la responsabilidad de la educación cristiana. La rigidez de estas tradiciones tiende a limitar el desarrollo máximo de esta fase importante en la vida de la iglesia. Junto con estas tradiciones, existe cierta cantidad de confusión en el área de los métodos de enseñanza, enfoques de la literatura y financiación del ministerio de educación cristiana. En medio de esta confusión la pobreza de la calidad de la enseñanza crea un serio problema. Lamentablemente, muchas iglesias se oponen ante cada esfuerzo por hacer que este ministerio sea más serio y más efectivo. La carencia de personas dispuestas y preparadas para participar es una clara desventaja en muchas iglesias. Paralelamente a estos problemas y contribuyendo más a ellos, está el hecho de que muy pocos pastores tienen algo de preparación en educación cristiana. Esta falta de capacitación no sólo limita su liderazgo en este campo, sino que también hace que no sientan deseos de pedir ayuda y que sean cautelosos acerca de la ayuda que se les ofrece. La educación cristiana es la guía necesaria para evitar un crecimiento mal desarrollado de parte de los nuevos creyentes, para evitar que permanezcan siendo siempre bebés sin memoria, conocimiento o capacidad para actuar. La importancia de esta función y esta herramienta merece todo el esfuerzo de parte de todos los niveles de liderazgo, para que exista conocimiento y capacidad en el campo educativo en la vida de la iglesia.
Preguntas para el Repaso Después de leer el texto, responda a las siguientes preguntas: 1. Mencione cinco enseñanzas bíblicas incluidas en una definición de la iglesia. 2. ¿Cuál es el objetivo de la iglesia? 3. Mencione y defina brevemente cinco funciones de la iglesia. 4. Señale tres ejemplos de educación en el Antiguo Testamento. 5. Dé dos indicaciones de la importancia que Cristo puso en la enseñanza. 6. ¿Cuál fue la condición de la educación de la iglesia en el período medioeval? 7. Mencione la fecha y el propósito de la primera escuela dominical.
8. ¿Qué fue lo que popularizó la escuela dominical? 9. Distinga entre enseñanza y predicación. 10. Mencione cinco razones por las cuales una iglesia debe tener un ministerio educativo. 11. Haga una lista de los diez principios básicos del ministerio educativo de una iglesia. 12. Mencione tres tradiciones que pueden impedir un programa educativo adecuado. 13. Señale tres impedimentos para la educación cristiana.
Temas de Discusión 1. ¿Qué es una iglesia? 2. ¿Cuáles son las funciones de una iglesia? 3. De acuerdo con el desarrollo histórico de la educación cristiana, ¿quién y qué debe ser enseñado en un programa educativo de la iglesia? 4. ¿Cuál es la relación de las iglesias nuevas y en crecimiento hacia la educación cristiana? 5. ¿Cuál es la relación del predicador con el ministerio educativo? 6. ¿Cuáles son los principios básicos del ministerio educativo de la iglesia? 7. ¿Cuáles son los impedimentos para la educación cristiana en su zona?
2. — La Iglesia Enseña A Sus Miembros Las afirmaciones del capítulo uno relacionadas con el objetivo y las funciones de la iglesia, ya han identificado la educación de sus miembros y demás personas a su alcance como parte del ministerio redentor de la iglesia. En este sentido se definió la educación como “esa función de la iglesia en la cual se guía a las personas en su desarrollo progresivo hacia la madurez cristiana”. Dentro de esta función educativa, el ministerio de la enseñanza bíblica de la iglesia es el primer aspecto, y el más importante, de la educación con la que tratará este libro. Mucho de lo que la iglesia haga en las vidas de sus miembros y a través de ellos, dependerá de su habilidad para enseñarles a obedecer todas las cosas que Cristo ha mandado.
1. Necesidad de un Programa de Enseñanza Bíblica Necesidades dentro de la iglesia Los cristianos deben conocer la Biblia. Tradicionalmente ellos se han negado a aceptar credos por ser dogma. Han sostenido que la Biblia, particularmente el Nuevo Testamento, es la única base de la doctrina y práctica. Esta posición firme, que ha sido muy fuerte en la vida bautista, implica que cada miembro debe tener un conocimiento razonable de la Biblia. Sin embargo, una característica común a todas las iglesias bautistas, más notable en unas que en otras, es una ignorancia generalizada de la Biblia. Cualquier esfuerzo sencillo para medir el conocimiento bíblico que tienen los miembros de una iglesia particular o de un grupo de iglesias, casi siempre produce resultados desalentadores y vergonzosos. Es más fácil alabar la Biblia que estudiarla. Es más fácil leerla que aprenderla. Para los dirigentes es aún más fácil predicar y enseñar la Palabra que conocerla íntimamente. Los bautistas tienen la necesidad de comprender la naturaleza de la Biblia. No es un libro de ciencia. Ni es sencillamente historia. Es la revelación del trato de Dios con la humanidad. Es la Palabra de Dios al hombre en el lenguaje de los hombres. Cada creyente necesita la seguridad y la guía que brinda el conocimiento de las personas y preceptos de la Biblia. Cada iglesia precisa conocerse y sostenerse mediante el estudio de la Biblia. Cristo manda a la iglesia que se enseñe a sí misma y a los demás. La iglesia debe responder en obediencia a este mandato para poder sobrevivir. Las iglesias reciben ataques desde afuera y desde adentro. Son vulnerables cuando los de afuera las encuentran confundidas en su fe. Tales iglesias no llegan a ser indecisas con respecto a su propia naturaleza y destino. Muchas iglesias ya no
están seguras en cuanto a lo que ellas y sus miembros deben a Dios y a los demás. Los creyentes necesitan aplicar la Biblia para lograr un crecimiento y un desarrollo adecuados. La iglesia debe procurar el crecimiento individual de sus miembros. Hay que sostenerse financieramente. Debe producir sus propios dirigentes. Conviene brindar una adoración adecuada. Debe testificar de una manera efectiva. Cada una de estas actividades tiene una base bíblica. A menos que los que desempeñan estas actividades estén muy familiarizados y comprometidos con las bases bíblicas, habrá pocas probabilidades de que la iglesia logre su crecimiento y desarrollo adecuados.
Cómo el programa de enseñanza bíblica responde a estas necesidades Para que la iglesia pueda llenar adecuadamente las necesidades anteriormente mencionadas, se debe dedicar a la tarea de enseñar la Biblia. Los líderes de la iglesia y la congregación entera comparten la responsabilidad de esta tarea. Además, el programa de enseñanza bíblica debe planearse de manera que llene ciertas características específicas. Debe enseñarse la Biblia sobre la base de que el conocimiento bíblico es normal y natural para cada creyente. Ningún miembro de la iglesia, joven o viejo, está exento de la responsabilidad de estudiar la Biblia. El conocimiento bíblico que se recibe de fuentes seculares, tales como las escuelas públicas, no es adecuado para el miembro de la iglesia. Ni tampoco la escuela pública da una preparación adecuada de la Biblia para los niños. Es la iglesia la que tiene esta responsabilidad. Debe enseñarse la Biblia por gente preparada. Muy pocas iglesias tienen el número suficiente de maestros preparados adecuadamente. Pero cualquier iglesia puede proveer de entre sus miembros un número suficiente de tales maestros. La antigua discusión en cuanto a sí es mejor tener un pequeño número de maestros altamente preparados o un gran número de maestros poco preparados, no da en el blanco. El pastor y la congregación deben dedicarse a la tarea de proveer un número suficiente de maestros bien preparados. Debe enseñarse la Biblia en situaciones que conduzcan al aprendizaje. Una clase pequeña con un buen maestro dentro de la escuela dominical es un ejemplo de esto. El trabajo de ella debe suplementarse con otros esfuerzos tales como la Escuela Bíblica de Vacaciones, estudio bíblico en la familia, ocasiones especiales de estudio bíblico en la iglesia y grupos de estudio bíblico en áreas suburbanas. Cada uno de estos esfuerzos es parte del ministerio de enseñanza bíblica de la iglesia. Cada uno busca llenar las necesidades de los
miembros de la iglesia y de aquellas que están a su alcance para que se familiaricen y comprometan con la Palabra de Dios. Debe enseñarse la Biblia como la Palabra de Dios. Es más que mera literatura. Es más que un estilo opcional de vida ofrecido sobre una base similar a otros estilos de vida. La Biblia es la Palabra de Dios, el Creador y Señor de este universo. Como tal, tiene autoridad para todos los hombres. Debe enseñarse la Biblia regularmente. Una enseñanza bíblica irregular, presentada ocasionalmente, sin un programa planeado, no responde a las necesidades de la iglesia. Debe enseñarse la Biblia buscando una respuesta positiva a su invitación y a sus enseñanzas. Además de compartir la información y de motivar las emociones, el maestro debe tener la meta de mover la voluntad en respuesta a la enseñanza de la Biblia.
2. Trabajo a Realizar por el Programa de Enseñanza Bíblica Robert Raikes, de Gloucester, tenía un objetivo social: llegar a los niños desposeídos, indisciplinados e ignorantes que estaban en las calles los domingos y enseñarles a leer. Otros que se unieron a su movimiento, como William Fox, agregaron al currículo la enseñanza moral y religiosa, y adoptaron la Biblia como el libro de texto de la escuela. Lentamente, las iglesias bautistas aceptaron la escuela dominical e hicieron que la meta del programa de enseñanza bíblica fuera alcanzar el objetivo total de la iglesia y el llevar a cabo sus funciones.f13
Enseñar la revelación bíblica Lo básico en el programa de enseñanza bíblica es la tarea de enseñar la revelación bíblica. Se debe ayudar a la gente a explorar el contenido de la Biblia, aprender a usarla por sí mismos y encontrar el significado para su propia vida y para el mundo actual, Parte del aprendizaje de la Biblia, aunque pueda parecer mecánico, consiste en ser capaces de ubicar rápidamente los pasajes y de poder utilizar las herramientas para el estudio (diferentes traducciones de la Biblia, diccionarios bíblicos, concordancias, guías de estudio y comentarios). Muy poca gente aprende esas cosas por su cuenta; es necesario que alguien les enseñe. En la enseñanza de la revelación bíblica, el maestro necesita ayudar a los estudiantes de la Biblia a estar familiarizados con su historia, con los diferentes tipos de literatura y con el principio de revelación progresiva de la Biblia. Deben aprender a seguir el rastro del trato de Dios con los hombres desde los
tiempos primitivos hasta el Nuevo Testamento. Se debe presentar a Cristo como Salvador y Señor, el tema central de toda la Biblia.
Alcanzar a personas para Cristo y para ser miembros de la iglesia El funcionamiento práctico y el desarrollo del programa de enseñanza bíblica de la iglesia será para alcanzar a las personas para Cristo y para ser miembros de la iglesia. El uso del programa de enseñanza bíblica para descubrir a personas que deben ser alcanzadas, estar interesados en ellas como gente inconversa, tener compañerismo con ellas, servirles y testificarles a fin de que encuentren la salvación —todos estos temas serán considerados con amplitud en otra sección. Sin embargo, hay que tener claro aquí la responsabilidad del programa de enseñanza bíblica para matricular a incrédulos en los estudios bíblicos, con el propósito expreso de guiarlos a una decisión de aceptar a Cristo y, además, llegar a ser miembros de la iglesia.f14
Aplicar el mensaje de la Biblia El mensaje bíblico no se enseña en un vacío, ni tampoco como mera información. En lugar de ello, el mensaje debe ser aplicado a los alumnos, para su propio desarrollo espiritual en adoración, testimonio, crecimiento espiritual, servicio a las personas necesitadas, y en tratar los temas corrientes como cristianos. Se enseña la Biblia en la esperanza de que las personas, por medio del Espíritu Santo, respondan a Dios con una fe madura, con amor y obediencia. Ellos no están educados para responder, pero la enseñanza de la Biblia les conduce a un encuentro creciente con Dios. Cada maestro de la Biblia debe esperar la respuesta de parte del alumno: “Señor, ¿qué quieres que haga?” La aplicación de la enseñanza bíblica debe tener resultados prácticos en relación con el programa total de la iglesia y de la denominación. Ello vendrá cuando el maestro brinde e interprete información sobre el trabajo de la iglesia y de la denominación. Por supuesto, él hará esto de acuerdo con la capacidad y las necesidades de cada nivel de edad. La cooperación de los estudiantes de la Biblia en la extensión evangelizadora, el programa de mayordomía y la extensión misionera de la iglesia y la denominación debe ser natural y normal.f15 Un elemento importante en la aplicación del mensaje de la Biblia está en el área de la mayordomía. En este punto, la enseñanza bíblica es capaz de brindar un ministerio vital para todo el programa de la iglesia si cada maestro clarifica a su grupo la enseñanza bíblica sobre la mayordomía del tiempo, los talentos y
los bienes. A medida que esos maestros enseñan y practican el diezmo como el punto inicial en la dádiva del cristiano, ellos serán capaces de guiar a los miembros de la clase a practicar muchas virtudes cristianas, y abundar “también en esta gracia” (2 Co. 8: 7).
3. Provisión de un Programa de Enseñanza Bíblica La iglesia que está buscando brindar un programa de enseñanza bíblica debe dar atención constante a lo que se está enseñando, a la organización o vehículo para la enseñanza de la Biblia y al personal involucrado. La iglesia es responsable por todos estos aspectos. En cada caso, las decisiones en relación con estos factores deben ser hechas por la congregación.
Currículo Como se ve posteriormente, el currículo incluye mucho más que la literatura usada en el programa de enseñanza bíblica. En su sentido más amplio, el currículo es la suma de todas las experiencias de aprendizaje en el programa de enseñanza bíblica, que están planeadas y usadas bajo la guía de la iglesia y dirigidas al cumplimiento de los objetivos de la misma. El currículo es lo que le sucede al alumno en la situación local, la suma total de las experiencias de aprendizaje. Por lo tanto, el currículo incluirá la Biblia y la literatura seleccionada por la iglesia para ayudar en la enseñanza de la misma. Incluirá todas las experiencias de aprendizaje, tales como actividades planeadas y diseñadas para alcanzar mayor conocimiento de la Biblia.f16 En este punto, necesitamos establecer que la misma Biblia es el libro de texto principal del programa de enseñanza bíblica de la iglesia. Todo lo demás se considera como una ayuda o una herramienta didáctica auxiliar. Hoy hay disponibles muchas traducciones bíblicas y la mayoría de ellas son útiles en el estudio. Todas ellas pueden ser usadas por el maestro y ser estudiadas por el alumno. Probablemente la iglesia hará bien en recomendar una traducción específica para la mayoría de las oportunidades de aprendizaje; esto será de ayuda en asuntos tales como trabajo de memorización bíblica y lectura en grupo.
Organización Tradicionalmente, las iglesias han considerado a la escuela dominical como la parte de la vida de la iglesia que es responsable de la enseñanza de la Biblia. Muchas iglesias descubren que es valioso ampliar el concepto de la escuela dominical para llegar a ser un programa comprensivo de enseñanza bíblica, que aprovechará las diversas oportunidades para la enseñanza de la Biblia. Así
se tendrá en cuenta la Escuela Bíblica de Vacaciones, el estudio bíblico familiar, los estudios bíblicos en días de semana en los hogares, las conferencias bíblicas, los cursos de estudio bíblico anual y otros esfuerzos para ampliar el conocimiento de la Biblia. Cristo espera que su iglesia enseñe. Cada discípulo es un alumno, y el aprendizaje es un proceso educativo. Pablo mismo señaló en Efesios 4 que la enseñanza es una parte del ministerio, un interés principal de la iglesia.f17 La escuela dominical incluye la enseñanza de la Biblia en grupos pequeños y graduados por edades, como en una escuela. Lo común es que el programa de enseñanza es adoptado por la iglesia y usado en todo el programa. La mayoría de las iglesias descubre que se consiguen mejores resultados reuniendo a la escuela dominical antes del culto de adoración de la mañana, dado que incluye a cada nivel de edad en la iglesia. Los miembros de la escuela deben incluir a todos los miembros de la iglesia, los hijos de los creyentes y miembros en perspectiva que pueden ser alcanzados para el estudio bíblico. Comúnmente se dedica una hora completa a esta actividad. La escuela dominical continúa siendo la piedra angular del ministerio de enseñanza bíblica de la iglesia. Pero no puede ser efectiva a menos que cada familia de la iglesia esté involucrada en una cooperación activa, por medio de una conversación con orientación bíblica, repaso y lectura bíblica en el hogar. La Escuela Bíblica de Vacaciones busca proveer un período de una a dos semanas de estudio bíblico concentrado y de actividades relacionadas para los niños y jovencitos, durante las semanas entre períodos escolares. Lo común es que se reúna por tres horas, cinco días a la semana. Este período concentrado de estudio directo y de actividades relacionadas implica mucho trabajo para los miembros de la iglesia, pero brinda casi tanto tiempo en oportunidades de aprendizaje como los cincuenta y dos domingos de escuela dominical. Las oportunidades evangelizadoras son magníficas. Las posibilidades de extensión son casi ilimitadas, siempre que la iglesia esté dispuesta a continuar el trabajo de conservación con las personas nuevas matriculadas en el estudio bíblico de la Escuela Bíblica de Vacaciones. El servicio o departamento de extensión de la escuela dominical está destinado a ministrar a aquellas personas que por razones de edad o enfermedad o condiciones laborales están incapacitadas para asistir a los programas de estudio bíblico y a otras actividades de la iglesia. Los obreros de este departamento tienen un ministerio rico y valioso hacia estas personas, porque no sólo les enseñan el mensaje de la Biblia, comúnmente en el hogar de los mismos, sino que también mantienen un contacto entre esas personas y todo el programa de la iglesia. Este departamento de la escuela dominical no es sólo
una extensión del programa de enseñanza bíblica, sino que es también un ministerio de amor. Los estudios bíblicos semanales, generalmente celebrados en la casa de los miembros para gente en la comunidad, ofrecen la oportunidad de estudiar libros o temas específicos. Muchas iglesias los han usado, no sólo para conseguir personas nuevas para la iglesia, sino también para abrir centros para el establecimiento de obras nuevas, que posteriormente se convirtieron en iglesias. Las conferencias bíblicas no duplican el estudio de la escuela dominical sino que lo apoyan. El pastor mismo, como maestro, o una persona especialmente calificada que la iglesia invite, vendrá para una semana de estudio bíblico particular y fortalecerá puntos del currículo tales como doctrina y otros temas especiales. Los cursos de estudio bíblico ofrecidos periódicamente durante el año, normalmente en la misma iglesia, brindarán oportunidades adicionales para un estudio profundo, difícil de alcanzar en la escuela dominical de una hora por semana. Todas las actividades de enseñanza bíblica de la iglesia deben estar coordinadas bajo un programa. En una iglesia pequeña la organización de la escuela dominical puede asumir normalmente toda la responsabilidad del ministerio de enseñanza bíblica. Sin embargo, en una iglesia más grande, todas estas actividades pueden ser agrupadas bajo un programa de educación cristiana que incluirá a la escuela dominical.
Personal En su forma más sencilla, la situación de enseñanza consiste en un maestro y un alumno. Sin embargo, aun en la iglesia más pequeña, el programa de enseñanza bíblica es más complejo. Los alumnos son de todas las edades. Cada uno de ellos tiene una capacidad en relación con Dios; cada uno de ellos es competente bajo Dios; aquellos que son creyentes tienen una experiencia que compartir. Aun los creyentes maduros entre ellos tienen la necesidad y la posibilidad de un crecimiento mayor en su vida por medio del estudio bíblico. Estos alumnos son agrupados en clases de acuerdo con su capacidad para el aprendizaje, con sus necesidades y con sus intereses. Allí los alumnos comparten la responsabilidad del programa de enseñanza bíblica en la iglesia. Como miembros de la iglesia ellos determinan la estructura y el contenido del programa. Como miembros de la clase participan activamente en grupos del aprendizaje, la extensión y la evangelización, siempre investidos por el Espíritu Santo. Asumen sus responsabilidades como individuos y como grupo.
El maestro es la clave para este programa de enseñanza bíblica. Como cristiano con una experiencia para compartir, tiene la presencia de Cristo que le fue prometida y el poder del Espíritu Santo. Debe ser una persona en crecimiento espiritual. La responsabilidad del maestro incluirá el planeamiento y la conducción de las actividades de estudio bíblico, la visitación de los miembros en sus hogares, la búsqueda para descubrir y alistar miembros en perspectiva, el interés personal en el nuevo nacimiento y el crecimiento cristiano de cada miembro de la clase. El maestro buscará guiar a los miembros de la clase que son creyentes en la adoración, el testimonio, el aprendizaje, la ayuda a la gente en el nombre de Jesús y en la aplicación de las enseñanzas de Cristo a la vida diaria. El maestro participará activamente en el planeamiento y en la proyección del programa integral de enseñanza bíblica. f18 A medida que el ministerio de enseñanza bíblica va creciendo más, asume más responsabilidad e importancia el lugar del director del mismo. Se espera que esos líderes administrativos lleguen a sus puestos con una experiencia amplia en la enseñanza, y un conocimiento integral de la Biblia. Su responsabilidad implicará la recomendación, el alistamiento y la orientación de los maestros. Ellos trabajarán con el pastor y otros dirigentes de la iglesia en la planificación del currículo. Los directores participarán con el director de desarrollo cristiano en el planeamiento de la preparación para responder a las necesidades de los maestros. Planearán con los maestros y otros miembros del personal el trabajo del ministerio de enseñanza bíblica, supervisarán el mantenimiento de los registros e informarán a la congregación en cuanto a su progreso. A medida que la iglesia alcance a cubrir su presupuesto, el director o los directores serán responsables de recomendar los distintos aspectos y las cantidades para la operación de este ministerio. Muy probablemente ellos deberán dirigir los cultos de adoración que se incluyen en el programa de enseñanza bíblica y las actividades de compañerismo. El liderazgo administrativo del programa tiene la misma necesidad que los maestros de someterse y ser guiados por el Espíritu Santo.f19
4. Mantenimiento de un Ministerio de Enseñanza Bíblica En el caso de muchas actividades de la iglesia, la iniciación es mucho más fácil de lograr que el mantenimiento a un nivel elevado y en avance constante. El trabajo efectivo, el crecimiento y el mejoramiento no vienen naturalmente, sino que son el resultado de la atención constante a los factores básicos incluidos en el programa mismo. En esta sección, se considerarán tres importantes actividades de mantenimiento: control por la iglesia, planeamiento y mejoramiento constante y evaluación.
Control de la iglesia Se consideran más las bases amplias para el control del ministerio de enseñanza bíblica por la iglesia en el capítulo 7 que trata la organización de la iglesia para la educación cristiana. Ahora se mencionarán solamente los elementos básicos de este control. En primer lugar, la congregación debe asumir la responsabilidad por el ministerio de enseñanza bíblica del mismo modo que la asume por cualquier otra actividad de la iglesia. Quizá esta declaración parezca innecesaria, pues uno puede sentir que la responsabilidad de la iglesia por el ministerio de enseñanza bíblica es normal y natural. Esto no ha sido cierto históricamente. Aún hoy hay iglesias en que este ministerio, y en realidad toda fase de la educación cristiana, funciona casi como un trabajo independiente. La responsabilidad congregacional implica la responsabilidad de liderazgo. Por lo tanto, el pastor de la iglesia es el pastor del ministerio de enseñanza bíblica. Su responsabilidad pastoral implica una relación estrecha y una participación activa en dicho ministerio. Como parte de su responsabilidad en este ministerio, la congregación determinará el contenido del programa. Dicho contenido incluirá el currículo, el calendario de actividades y la determinación de los objetivos. Una vez que éstos han sido aprobados por la congregación, los directores y los maestros del programa de enseñanza bíblica serán responsables de los detalles para llevarlos a cabo. No deben hacer modificaciones básicas sin volver a la iglesia para su aprobación. Como parte de su responsabilidad la congregación elegirá los directores, personal administrativo y los maestros del programa de enseñanza bíblica. De ese modo, las personas que participen en la selección no son responsables únicamente ante la organización por el programa, sino que por medio del director son responsables ante la iglesia. Además, la iglesia proveerá los fondos necesarios para el programa de enseñanza bíblica por medio de su presupuesto. Dichos fondos son necesarios para la literatura, el equipo y cualquier actividad que necesite provisión de fondos. De la misma forma, todas las ofrendas que se reciban por medio del ministerio de enseñanza bíblica deben ser canalizadas directamente al fondo unificado de la iglesia. De la misma manera que la iglesia es responsable de la enseñanza de la Palabra de Dios, es responsable de los aspectos financieros de su trabajo. El control congregacional involucra recibir informes periódicos del progreso, trabajo, problemas y proyectos del programa de enseñanza bíblica. Aun
cuando los informes pueden ser preparados por personal de secretaría, el director del programa es responsable de informar a la congregación. Sin este informe periódico, el control de la congregación no es una realidad. Con estos informes periódicos no sólo se ejerce control sino que se mantiene la participación y el interés.
Planificación y mejoramiento constantes La planificación y el mejoramiento implican por lo menos un sistema sencillo de registro, a fin de determinar el progreso que se está haciendo. También involucra el mantenimiento de objetivos y de mejores métodos en forma constante delante de todo el personal incluido en el ministerio de enseñanza bíblica. Esto no puede lograrse durante la ejecución del programa en sí. Es necesario tener una reunión periódica (preferiblemente, una cada semana) de maestros y personal administrativo de este programa. En dichas reuniones se llevan a cabo varias actividades vitales, las cuales incluyen: 1. Examen de los informes de las clases anteriores de enseñanza bíblica. Incluye factores tales como asistencia, puntualidad, participación de los alumnos y efectividad del maestro. 2. Planes para el futuro inmediato y planes a largo alcance. La participación activa de parte del personal del programa de enseñanza bíblica en esos planes depende de su comprensión integral de los mismos y de su dedicación a ellos. 3. Mejoramiento de la capacitación y la enseñanza. Debe darse atención específica a las lecciones en el futuro inmediato, pero a la vez pueden presentarse materiales para la capacitación del maestro. 4. Consideración de problemas específicos y de necesidades de personas en particular para su salvación y su desarrollo cristiano. Esta reunión periódica es realmente el punto clave del mantenimiento de un programa efectivo de enseñanza bíblica. Es el taller en donde se produce un programa efectivo.
Evaluaciónf20 El mejoramiento no puede alcanzarse sin evaluación. El desarrollo cristiano no puede ser medido, pero hay algunas maneras disponibles para determinar si la escuela dominical está logrando sus fines o no. La evaluación del trabajo se hace sobre la base de las tareas asignadas. Los medios de evaluar el cumplimiento de dos de estas tareas serán presentados aquí a modo de ejemplos.
Al ministerio de enseñanza bíblica se le asigna la tarea de enseñar la revelación bíblica. La efectividad de la escuela dominical en la realización de esta tarea puede ser determinada por la respuesta a las siguientes preguntas: 1. ¿Ha aumentado la asistencia a la clase individual y en el total de la escuela? 2. ¿Ha tenido cada clase a un maestro preparado cada domingo? 3. ¿Muestran los registros que los miembros traen y usan sus Biblias? 4. ¿Muestran la participación en la clase y los registros que los miembros están preparando sus lecciones? 5. ¿Hay evidencia de participación del hogar en el programa de enseñanza bíblica de la escuela dominical?
Otra tarea asignada al ministerio de enseñanza bíblica es la de alcanzar personas para Cristo y para que sean miembros de la iglesia. Alguna indicación del éxito de la escuela dominical en llevar adelante esta tarea sería indicado por la respuesta a estas preguntas: 1. ¿Se ha realizado algún censo o algún otro medio para descubrir miembros en perspectiva en los últimos seis meses? 2. ¿Tiene cada maestro el nombre y la dirección de cada miembro en perspectiva conocido para su clase? 3. ¿Ha sido visitado cada miembro en perspectiva? 4. ¿Cuántos miembros nuevos han sido matriculados desde el comienzo del año actual?
La evaluación implica dar pasos hacia el mejoramiento. La iniciación de esos pasos es la responsabilidad del personal de liderazgo en el programa de enseñanza bíblica. La disposición a seguir los mismos depende de los líderes, los maestros y los alumnos.
5. Conclusión El mundo actual se caracteriza por cambios rápidos y drásticos. Los indicadores nos llevan a creer que el futuro tendrá cambios más drásticos y más rápidos. Si los creyentes y sus iglesias han de mantenerse y avanzar en este ambiente, la enseñanza bíblica es de absoluta necesidad. Si la iglesia espera continuar existiendo, debe continuar enseñando. El contenido de la enseñanza es el mismo que el de la iglesia primitiva. Los métodos variarán para adecuarse al ambiente y a las personas. La aplicación del contenido debe responder a las necesidades de cada miembro de la iglesia.
De ese modo, las congregaciones deben dar una atención constante y sincera al comienzo, el mantenimiento y el mejoramiento del ministerio de enseñanza bíblica.
Preguntas para el Repaso Después de leer el texto, responda a las siguientes preguntas: 1. Defina la educación en la iglesia. 2. ¿Cuáles son las tres necesidades dentro de la iglesia que requieren un programa de enseñanza? 3. Mencione cinco características específicas que deben ser tenidas en cuenta en el programa de enseñanza bíblica. 4. ¿En qué sentido le ayuda al individuo que necesita aprender el usar la Biblia por sí mismo? 5. ¿Qué tareas debe hacer el ministerio de enseñanza bíblica además de enseñar la Biblia? 6. ¿Qué incluye el mensaje bíblico sobre mayordomía? 7. Mencione el significado del currículo. 8. Indique cinco partes de un ministerio de enseñanza bíblica. 9. Mencione tres valores de la Escuela Bíblica de Vacaciones. 10. ¿Cuáles son los tres grupos de personal y sus responsabilidades principales en una escuela dominical? 11. Mencione tres requisitos para el mantenimiento del ministerio de enseñanza bíblica. 12. ¿Cuáles son las áreas de la escuela dominical que debe controlar la congregación? 13. ¿Por qué deben darse a la iglesia los informes de la escuela dominical? 14. ¿Qué debe incluirse en el planeamiento? 15. Mencione cuatro áreas que deben ser evaluadas para determinar la efectividad de la escuela dominical. 16. Indique tres actividades requeridas por la escuela dominical para llevar a cabo sus responsabilidades evangelizadoras.
Temas de Discusión 1. ¿Por qué la iglesia necesita un ministerio de enseñanza bíblica y qué debe incluirse en el mismo?
2. ¿Cuáles deben ser las metas del ministerio de enseñanza bíblica? 3. ¿Cuál debe ser el contenido o currículo del ministerio de enseñanza bíblica? 4. Bosqueje una organización adecuada para responder a las necesidades de estudio bíblico en cada nivel de edad en su iglesia. 5. ¿Qué debe hacerse para mantener el ministerio de enseñanza bíblica?
3. La Iglesia Capacita A Sus Miembros En Cuanto A La Vida Cristiana 1. ¿Por Qué Capacitar? Definición de desarrollo cristiano o capacitación El desarrollo cristiano o la capacitación puede ser definido como un proceso educativo destinado a mejorar la actuación individual y en grupos. Desde el punto de vista del alumno, la capacitación es el proceso en el cual se adquieren comprensión, actitudes, conocimiento y habilidades esenciales para la realización inteligente y eficiente de las responsabilidades asignadas. f21 Se pueden mencionar dos ejemplos específicos de capacitación para los miembros de la iglesia: 1. Capacitación de padres creyentes para que reconozcan la facilidad de aprendizaje de sus hijos, a fin de poder guiarlos en forma efectiva en su desarrollo cristiano. 2. Familiarizar a los estudiantes universitarios con las actitudes, comprensión y marco de referencia religioso de sus amigos incrédulos a fin de poder testificarles en forma más efectiva.
Sin embargo, mucha de la capacitación brindada está destinada a mejorar la actuación general de los miembros de la iglesia.f22
Naturaleza de la capacitación de los miembrosf23 Un ministerio sano de capacitación de los miembros de la iglesia pone énfasis fuerte en ayudar a ser tanto como a hacer. Ellos deben ser capacitados a ser verdaderos cristianos para poder capacitarse en hacer las cosas que deben como cristianos. Por lo tanto, deben recibir capacitación en ser, es decir, en tener las actitudes correctas, y en las aptitudes para la vida cristiana. Debido a esta característica, la capacitación no es sencillamente estudiar acerca de algo, sino que es el cultivo de las actitudes y las habilidades necesarias para alcanzar algo. El desarrollo cristiano o la capacitación destaca la habilidad y requiere práctica. Por naturaleza, el desarrollo cristiano o la capacitación de los miembros de la iglesia puede ser específico o general. Gran parte del mismo está destinado a desarrollar en las personas la habilidad de manejarse en situaciones específicas, tales como los padres y los estudiantes universitarios mencionados anteriormente. Sin embargo, la vida es muy complicada y la sociedad está
cambiando demasiado rápidamente como para que una iglesia pueda proveer a sus miembros un desarrollo cristiano especial para solucionar cada situación específica en la que se encuentren. Mucho de ese proceso de capacitación debe estar destinado a mejorar la actuación general del miembro de la iglesia, a fin de proveerles recursos para enfrentar problemas y situaciones no anticipados. El cultivo de actitudes correctas es un elemento importante en la capacitación. Las personas pueden tener el conocimiento y la habilidad requeridos para una actuación efectiva y faltarles, sin embargo, la actitud adecuada hacia su trabajo o hacia otra gente. Por ejemplo, algunos esfuerzos para alcanzar personas para Cristo han engendrado antagonismo porque los posibles “evangelistas personales” han memorizado pasajes de las Escrituras pero son insensibles en cuanto a la condición de las personas perdidas. Además, su falta de comprensión de la naturaleza y el significado de la experiencia de conversión crea dentro de ellos actitudes que les hacen incapaces de usar los pasajes bíblicos memorizados. Las tareas del ministerio de desarrollo cristiano de la iglesia son: 1. Equipar a los miembros para el discipulado y el ministerio personal 2. Enseñar teología y doctrina cristianas, ética, historia, gobierno y organización de la iglesia 3. Equipar a los líderes de la iglesia para el servicio 4. Interpretar y fundamentar el trabajo de la iglesia y de la denominación f24
Obviamente, el ministerio de desarrollo cristiano o capacitación está relacionado con todos los otros programas y servicios de la iglesia. Ayuda a los nuevos miembros a comprender y participar adecuadamente en los mismos. Ayuda a todos los miembros de la iglesia a desarrollar sus aptitudes para una participación efectiva en el cumplimiento de la misión de la iglesia a través de sus programas y servicios. Finalmente, ayuda a todos los miembros a descubrir su liderazgo potencial y a desarrollar sus habilidades para ser más fructíferos y efectivos.
Beneficios de la capacitación de los miembros de la iglesia En la discusión previa se han aclarado muchos beneficios de la capacitación de los miembros de la iglesia. Este ministerio se hace evidentemente más valioso cuando la congregación se da cuenta de que por medio de un ministerio adecuado de desarrollo cristiano:
1. Los miembros de la iglesia son “arraigados y sobreedificados en él (Cristo), y confirmados en la fe” (Col. 2: 7). Ellos desarrollan creencias sanas y modelos de conducta cristianos. 2. Los miembros de la iglesia advierten las contribuciones que han hecho los héroes cristianos del pasado a la vida de los bautistas. De ese modo aprecian mejor su herencia. 3. Los miembros de la iglesia se familiarizan con el gobierno y los procedimientos que movilizan la vida de la iglesia y brindan los medios para evitar disensiones. 4. El desarrollo cristiano tiende a producir el fruto de la vida cristiana yla acción positiva que se desarrolla a partir de estos frutos. Como fue evidente en el caso de ministerio de enseñanza bíblica de la iglesia, los beneficios obvios del desarrollo cristiano de los miembros son tan grandes y los resultados negativos de no ocuparse en dicha capacitación son tan formidables, que la congregación se siente obligada a emprender el programa.
2. Desarrollo Cristiano de los Nuevos Miembros Necesidades del nuevo miembro de la iglesiaf25 Todas las personas que son o han de ser recibidas en la comunión fraternal de una iglesia tienen necesidades especiales de capacitación. Algunos han hecho una entrega superficial a Cristo sin experimentar realmente el nuevo nacimiento. Sin embargo, algo positivo ha sucedido en su vida. De lo que sucede con ellos en este intervalo depende si son bautizados y recibidos en la familia de la iglesia como cristianos no regenerados o si son guiados cara a cara a una entrega real de su vida al Señor Jesucristo. Muchos nuevos convertidos vienen de un trasfondo totalmente ajeno al cristianismo. Otros miembros nuevos son recibidos por recomendación de iglesias que tienen poco desarrollo en la plenitud de la vida cristiana y la manera de funcionar como miembros de la iglesia. Miles de nuevos miembros gastan toda su vida viviendo una vida infructífera, incumplida, semicristiana por falta de una orientación adecuada. De ese modo, el ministerio de desarrollo cristiano para nuevos miembros es un lazo vital que une el empuje evangelizador de la iglesia a sus esfuerzos educativos para ayudar a los miembros de la iglesia a ser cristianos maduros y efectivos.
Programa para el desarrollo cristiano de nuevos miembros En una iglesia pequeña de veinticinco miembros o menos, el pastor puede y probablemente debe ser el responsable de orientar a los nuevos miembros. Sin embargo, en iglesias más grandes, esta responsabilidad debe ser compartida con miembros entrenados, con la cooperación del pastor.
La orientación de los miembros nuevos debe comenzar con la sesión inicial de aconsejamiento en el momento de la profesión de fe en Cristo en el caso de nuevos creyentes, y antes de la recepción como miembros de la iglesia en el caso de aquellos que son recibidos por recomendación de otra congregación. Este contacto inicial debe ser continuado con clases de enseñanza, cuya cantidad dependerá de la situación de los interesados. Una sesión final de conclusión, si es posible individual, es útil para determinar si el nuevo miembro necesita mayor orientación. Quizá es más importante, aparte de las clases de capacitación, el involucramiento inmediato del nuevo creyente o del miembro transferido en la comunión fraternal, trabajo y adoración de la iglesia. El fracaso en hacerlo puede resultar en un letargo fatal que ninguna orientación puede mejorar. En el capítulo seis se discuten los temas para las clases de capacitación.
Cómo alcanzar a los nuevos miembros para el desarrollo cristianof26 Hay varios pasos que la congregación debe considerar al hacer el plan para la orientación de los nuevos miembros. Algunos de ellos, que indudablemente variarán de acuerdo con la congregación, son: 1. Repasar la lista de miembros para descubrir la experiencia de participación y entrega de los mismos a fin de determinar la necesidad de un programa de desarrollo cristiano para los nuevos miembros. 2. Repasar o adoptar un pacto para la iglesia, los artículos de fe y la historia de la iglesia local. El pastor puede desarrollar una mejor comprensión de estos temas por medio de su predicación y su enseñanza. 3. Conseguir los materiales de orientación para los nuevos miembros. 4. Orientar si es necesario, a los miembros actuales. Debe haber tiempo suficiente para la promoción, a fin de lograr buena asistencia. Puede haber clases simultáneas para niños mayores, jóvenes y adultos. Se pueden planear las clases durante el período regular del programa de desarrollo cristiano de la iglesia o en el tiempo de la escuela dominical. 5. Seleccionar, elegir y capacitar a los líderes para dirigir la orientación de los nuevos miembros. 6. Adoptar un procedimiento de la iglesia para la orientación de los miembros nuevos. 7. Determinar los grupos y horarios para el programa de orientación. 8. Sostener cada paso en oración para que sea guiado por el Espíritu Santo.
Mucho del éxito en la implementación de este programa de desarrollo cristiano dependerá de la genuinidad y la calidez de la comunidad cristiana en la cual son introducidos los nuevos creyentes y miembros nuevos que se capaciten. Los nuevos creyentes deben ser animados por todos los medios posibles a expresar su propia comprensión de lo que sucede y sus propios sentimientos con relación con estas áreas de su nueva vida.
Mejorar el programa Las iglesias que ya tienen un programa para la capacitación de nuevos miembros deben estar continuamente alertas a los medios por los cuales puede hacerse que dicho programa sea más efectivo. Algunas de las siguientes preguntas son útiles para examinar el programa ya existente y para hacer decisiones que lleven a mejorarlo: 1. ¿Es adecuada la presentación y la oportunidad de la capacitación para que cada miembro nuevo participe, sea antes o muy poco después de convertirse en un nuevo miembro? 2. ¿Son las clases lo suficientemente pequeñas para lograr la participación individual? 3. En el caso de miembros por transferencia, ¿está diseñada la capacitación para responder especialmente a sus necesidades? 4. ¿Están las clases divididas de tal forma que las necesidades particulares de los miembros jóvenes y adultos serán respondidas adecuadamente? 5. ¿Se está utilizando ampliamente el testimonio de conversión de cada participante? 6. ¿Considera toda la iglesia que tiene una responsabilidad e involucramiento en este programa? 7. ¿Se tienen clases individuales al final del programa para determinar si se han logrado los objetivos en cada caso? 8. ¿Están involucrados los nuevos miembros, desde el primer día, en una participación activa de la vida de la iglesia?
3. Desarrollo de los Miembros en General Definir la necesidad El Nuevo Testamento enseña claramente que todos los miembros de la iglesia tienen una parte en el cumplimiento de la misión de la misma. El desarrollo cristiano de la totalidad de los miembros implica que cada miembro de la
iglesia debe desarrollar los dones y las habilidades que son necesarios para hacer la tarea que Dios le ha llamado a realizar. Además, nadie disputará la importancia de una demostración visible y diaria del evangelio en la vida de cada creyente relacionado con la iglesia. Esto implica fidelidad continua en la adoración, testimonio, aprendizaje y ministerio de cada miembro de la iglesia. Lamentablemente, son pocos en comparación los miembros involucrados en plenitud.f27 Cualquiera que crea que esta última afirmación es pesimista, encontrará que se confirma si examina las estadísticas de su propia congregación. Sin duda, se necesita que más miembros compartan la vida y el trabajo de la iglesia. Algunos miembros de la iglesia son inactivos porque han caído en una vida apagada, tranquila, carnal. En muchos casos eso se debe a la falta de orientación de los nuevos miembros en la época de su conversión. En otros casos puede deberse a la necesidad insatisfecha de la comprensión, actitudes y habilidades necesarias para lograr avances en la vida cristiana. La capacitación es esencial si la congregación ha de cumplir su papel en el mundo.
Objetivos específicos f28 Las tareas distintivas de un programa de desarrollo cristiano para los miembros en general están comprendidas en dos categorías: 1. Capacitar a los miembros en general para realizar las funciones de la iglesia 2. Enseñar teología, ética, historia del cristianismo y los elementos del gobierno y organización de la iglesia
Cuando se logran estos dos objetivos, una gran parte, si no todos los miembros de la iglesia están capacitados para realizar las funciones de la misma. Les ayuda a adquirir el aprendizaje y la disciplina personal que necesitan como miembros responsables y comprometidos. Provee un fundamento sólido del conocimiento, comprensión y actitudes que son necesarios.
4. Planeamiento de la Capacitación Pasos para proporcionar el desarrollo cristiano o la capacitación de los miembros La congregación puede comprender la necesidad de capacitación de los miembros en los meses iniciales de su vida como iglesia. Puede recibir orientación de la iglesia madre durante el tiempo en que aún es una obra misionera en cuanto a la importancia de la capacitación de los miembros. Posiblemente puede llegar el momento en la vida de una congregación madura
en el cual los dirigentes y los miembros por igual descubran que un mayor avance dependerá de más cantidad de miembros entrenados. En cualquier momento de su vida en que la congregación advierte esta situación, debe comenzar a analizar sus necesidades de capacitación. Ese análisis debe ser hecho en forma periódica. Las necesidades de desarrollo cristiano pueden descubrirse por las necesidades expresadas de sus miembros, por un estudio de las metas y ministerios de la iglesia y por encuestas llenadas por los miembros actuales. Salvo en muy contadas ocasiones, un estudio real de las habilidades de los miembros de la iglesia revelará la necesidad de capacitación de los creyentes. Una vez que ha determinado la necesidad, la congregación debe pensar seriamente en los medios para solucionarla. Muy temprano en el proceso es necesario considerar el plan. ¿Debe ser hecha la capacitación en forma continua o en un período breve? Normalmente, lo mejor es una combinación de esos dos sistemas. Casi siempre se pueden lograr buenos resultados si los miembros son guiados a apartar una hora específica de la semana en la cual habrá clases de desarrollo cristiano para todos los miembros en grupos divididos según sus edades. Muchas congregaciones encuentran adecuada la hora previa o posterior al culto del domingo por la noche. Otras iglesias prefieren una noche durante la semana, quizá el sábado por la noche. Ese esquema fijo ofrece la ventaja de alcanzar a todos los niveles de edades al mismo tiempo.f29 El desarrollo cristiano o la capacitación ofrecido sobre la base de tal esquema debe suplementarse por medio de oportunidades específicas de entrenamiento de corta duración, en varias oportunidades durante el año. Esos proyectos suplementarios de capacitación, que pueden ofrecerse sin interferir con otros programas de la iglesia, pueden ser: 1. Programas de lectura guiada en áreas de interés 2. Campamentos, retiros y conferencias planeados para capacitación y compañerismo 3. Proyectos especiales de capacitación avanzada y estudios en profundidad para los que están interesados 4. Oportunidades prácticas a fin de desarrollar habilidades especiales
La capacitación ofrecida por medio de todos estos canales debe coordinarse en una manera tal que alcance el máximo progreso en la solución de las necesidades reconocidas de capacitación. f30
La selección de líderes es parte de la tarea. El tipo de liderazgo dependerá de la naturaleza y extensión de la capacitación ofrecida. Además de tener una persona responsable para cada actividad y para cada grupo, la iglesia probablemente necesitará nombrar un director del ministerio de desarrollo cristiano de los miembros. Cada uno de los dirigentes debe ser elegido por la iglesia, y el programa total incluirá las metas y el bosquejo general de sus actividades, que debe ser aprobado por la congregación. Para que los proyectos individuales y el ministerio de desarrollo cristiano de los miembros sean exitosos, deben darse los pasos necesarios para cultivar el clima adecuado y para crear la motivación que conduzca a la capacitación de los miembros. Los feligreses tienden a estar más interesados si están involucrados en la planificación del proyecto. Es útil hacer los arreglos necesarios para tener las facilidades de espacio. Hasta el lugar más sencillo puede resultar atractivo si se le presta atención. El interés puede desarrollarse por medio de una cálida bienvenida y luego la libertad para participar dentro de los grupos. También la habilidad para introducir los proyectos de desarrollo cristiano y la relación que se haga de los mismos a los intereses de los alumnos, crearán un clima favorable para participar activamente en la capacitación de los miembros de la iglesia. Uno de los verdaderos problemas y desafíos relacionados con el desarrollo cristiano de los miembros de la iglesia es la provisión de materiales adecuados para el currículo. Las iglesias que están relacionadas con una asociación o convención grande tienen una ventaja distintiva, dado que las agencias denominacionales normalmente proveen dicho materiales. Los líderes de la iglesia que no están en estas condiciones deben ejercer una cantidad considerable de iniciativa, trabajo e imaginación para proveer los materiales adecuados. Es posible adaptar los materiales provistos por otros grupos bautistas. En este punto es importante señalar el valor de una biblioteca y medios de comunicación en la iglesia que sean adecuados, activos y crecientes. Junto con los materiales impresos para el currículo, debe darse énfasis a la necesidad de tener a mano algunas de las ayudas básicas para el aprendizaje: pizarrón, cuadernos de aprendizaje, grabador portátil, fotos y objetos llamativos, ayudas visuales y carteles, entre otros. Se debe recordar que esos elementos están designados para ser ayudas, no adornos ni cosas para pasar el tiempo. Su uso debe ser adecuado a los métodos de capacitación generales y específicos.
Medición de los resultados La evaluación y la medición de los resultados en el ministerio de desarrollo cristiano o capacitación es muy difícil, pero es tremendamente importante. Las metas que se pongan para el programa servirán como bases para medir los resultados y la efectividad. Algunas de las mejores maneras para acopiar los datos necesarios para la evaluación de los resultados son los registros del año, las conversaciones con los dirigentes de la iglesia y la evaluación por los participantes. Preguntas que deben considerarse son: 1. ¿Qué capacitación se ha provisto para los adultos, jóvenes, niños y preescolares? 2. ¿Fue mayor o menor que la ofrecida el año anterior? 3. ¿Cuántos cursos fueron ofrecidos? 4. ¿Cuántas personas estuvieron involucradas y completaron el curso o la unidad? 5. ¿Cuántos miembros estuvieron involucrados y completaron cada curso o unidad? 6. ¿Cuántos miembros estuvieron involucrados en planes del desarrollo individual? 7. ¿Cooperó la iglesia durante el año con otras iglesias en programas de desarrollo cristiano? 8. ¿Fueron distribuidos para estudio personal materiales de desarrollo cristiano para los miembros? 9. ¿Qué proporción de miembros de la iglesia ha estado involucrada en la capacitación de los miembros? 10. ¿Cómo se compara ese resultado con la proporción alcanzada en el período anterior? 11. ¿Cuáles fueron los puntos fuertes y débiles de la capacitación ofrecida a los miembros?
Estos y otros temas y preguntas que vienen rápidamente a la mente de aquellos involucrados en la dirección del programa de desarrollo cristiano o capacitación de los miembros ayudarán a determinar su efectividad e indicarán los pasos que deben ser tomados para mejorarla.
Preguntas para el Repaso Después de leer el texto, responda a las siguientes preguntas:
1. Defina “desarrollo cristiano” o “capacitación”. 2. ¿Qué debe incluir el desarrollo cristiano? 3. ¿Cuáles son las tres tareas del ministerio de desarrollo cristiano? 4. Mencione tres beneficios del desarrollo cristiano de los miembros. 5. ¿Cuáles son las necesidades de los nuevos miembros? 6. Bosqueje brevemente un programa para el desarrollo cristiano de los nuevos miembros. 7. Mencione cinco pasos en el planeamiento del desarrollo cristiano de los nuevos miembros. 8. Indique cinco sugerencias para el mejoramiento del desarrollo cristiano de los nuevos miembros. 9. ¿Por qué están inactivos los miembros de la iglesia? 10. ¿Cuáles son algunos objetivos específicos para el desarrollo cristiano o la capacitación de todos los miembros? 11. ¿Cómo se pueden determinar las necesidades de desarrollo cristiano o capacitación de una iglesia? 12. ¿Debe ser el desarrollo cristiano continuo o realizado en períodos breves? ¿Cómo? 13. Mencione tres maneras adicionales para suplementar el desarrollo cristiano de la iglesia. 14. Indique los pasos a seguir para brindar el desarrollo cristiano o la capacitación de los miembros. 15. Señale tres fuentes para medir los resultados del programa de desarrollo cristiano. 16. ¿Por qué es importante guardar registros en un programa de desarrollo cristiano?
Temas de Discusión 1. ¿Qué es el desarrollo cristiano o la capacitación? 2. ¿Cuáles son las áreas en las cuales los miembros necesitan ser desarrollados o capacitados para el servicio cristiano? 3. Sugiera un plan para responder a las necesidades de desarrollo cristiano de una iglesia típica.
4. ¿Cuáles son las necesidades de desarrollo cristiano de los nuevos miembros? 5. ¿Cómo puede medirse el éxito de un programa de desarrollo cristiano o capacitación?
4. La Iglesia Capacita A Sus Dirigentes En el capítulo tres fueron considerados dos tipos de desarrollo cristiano: el que se provee para los nuevos miembros y el general para todos los miembros de la iglesia. Como señala el título de este capítulo, hay una tercera clase de desarrollo cristiano o capacitación que debe ofrecer la congregación creciente, y es aquella provista para aquellos miembros de la iglesia que son elegidos para la responsabilidad del liderazgo. Dicha responsabilidad puede incluir el trabajo de los diáconos, secretarios, tesoreros, bibliotecarios, consejeros, directores de alcance o directores de visitación y evangelización. La capacitación que se ofrezca debe ser para ayudar al alumno a aumentar su confianza y para ser capaz de servir en forma efectiva y eficiente. Incluye más que conocimiento; por ser un proceso de preparación incluirá un desarrollo de actitudes, comprensión y habilidades. En esta área de instrucción la influencia del maestro es muy importante, dado que en la capacitación del líder se transmite mucho que no es enseñado.f31
1. Beneficios de la Capacitación de los Líderes de la Iglesia Problemas que ilustran la necesidad Muy pocas iglesias están libres del problema de tener un número insuficiente de líderes que están capacitados. Por el contrario, la mayoría de las iglesias están llenas de vacantes en las posiciones de liderazgo. La mayoría de esas mismas iglesias están caracterizadas por una cantidad de líderes sobrecargados que tienen trabajos múltiples. Por lo general se encuentra en estas mismas iglesias un cambio rápido de personal en muchas de sus posiciones de liderazgo. Estos cambios son el resultado de sobrecargar a los mismos dirigentes y de poner a muchos líderes en posiciones en las cuales se requieren ciertas habilidades para las cuales no se provee capacitación. La extensión de este problema complicado significa una cantidad creciente de personas sin atención y una proporción excesivamente grande de los miembros de la iglesia en un papel de espectadores.f32 Este problema existe en casi cualquier iglesia y un estudio de la situación revelará que esto es cierto. Muchas congregaciones olvidan que la iglesia misma es, por lo menos, parcialmente responsable por la realización exitosa de las tareas asignadas a los miembros, pues, continúan poniendo a las personas en posiciones de liderazgo sin capacitarlas adecuadamente. Casi todos esos cargos requieren habilidades y conocimientos específicos. Aun las primeras cosas que haga un nuevo líder demandarán algunas aptitudes. Su desarrollo
continuo en el lugar de servicio demostrará crecientemente la necesidad de conocimiento más profundo y de habilidades desarrolladas.f33 En contraste, la iglesia que provee el ambiente espiritual y la capacitación adecuada para la función de sus líderes, experimentará una provisión amplia de líderes capaces y bien entrenados. También tendrá una reducción en la lista de los miembros inactivos. La actuación de los dirigentes mejorará en forma constante y permanecerán en los puestos asignados. Junto con esto la congregación experimentará un progreso continuo hacia el logro de las metas que se han adoptado y un número creciente de seguidores de Cristo completamente consagrados.f34
2. Organización para Proveer la Capacitación a los Dirigentes de la Iglesia Determinar las necesidades a suplir El reconocimiento de la necesidad general de desarrollo cristiano o capacitación para los líderes de la iglesia es evidente con sólo un estudio superficial de la vida de la iglesia. Pero la determinación de las necesidades a suplir involucra un estudio más amplio. Algunos aspectos serán la consulta a los dirigentes actuales, el análisis de los puestos de liderazgo vacantes, el estudio de los cambios anticipados de líderes y la consideración de los nuevos lugares de liderazgo de acuerdo con el crecimiento de la organización. Este estudio debe incluir también un análisis de cada posición de liderazgo. Un análisis como este puede resultar en el tipo de descripción de trabajo que señalará las aptitudes requeridas de las personas que ocupen cada posición. Sin ese tipo de estudio, es probable que la capacitación que se ofrezca sea inadecuada y pobre para cubrir las necesidades.
Responsabilidad para la capacitación de los dirigentes de la iglesia Muchas iglesias dejan a cada programa o ministerio la tarea de reclutar y preparar a sus propios líderes. A pesar de que ese enfoque de la preparación de los dirigentes tiene algunas ventajas, crea frecuentemente una competencia no saludable y una duplicación de los esfuerzos. Debido a estas experiencias negativas, la mayoría de las iglesias incluyen ahora la responsabilidad de capacitar a sus dirigentes en el programa de desarrollo cristiano o preparación de la iglesia. Además de ocuparse de la capacitación de los nuevos miembros y de la capacitación de los miembros en general, el programa de desarrollo cristiano de la iglesia proveerá la capacitación a aquellos que ocupen el
liderazgo de los distintos programas. De ese modo, mientras que los encargados del programa de enseñanza bíblica serán responsables de la determinación de las aptitudes específicas para la tarea de liderazgo en esa área, comunicarán esas necesidades a los que dirigen el programa de desarrollo cristiano de la iglesia, pidiéndoles que determinen y provean la capacitación en dichas aptitudes para las personas específicas que lo realizarán. f35
Reclutamiento de dirigentes como una parte de la capacitación A pesar de que la responsabilidad principal de la capacitación de líderes descansará sobre el programa de desarrollo cristiano de la iglesia, deben reconocerse aquí los aspectos de capacitación involucrados en conseguir y ubicar a los dirigentes de la iglesia. La comisión de nombramientos de la iglesia realiza una tarea importante en la capacitación al descubrir y reclutar a estos líderes potenciales. Dicha comisión, reconociendo que cada adulto o joven maduro es un líder en perspectiva, y que necesita ánimo y desafío, usará todos los medios a su disposición en el descubrimiento de dirigentes en perspectiva. Algunos de esos medios son: estudio de la lista completa de miembros de la iglesia; recomendaciones de otros dirigentes; observación de los miembros de la iglesia en acción y la consideración de los dones y habilidades naturales y profesiones de algunos miembros de la iglesia. f36 La forma en que la comisión de nombramientos trata con los dirigentes en perspectiva es una parte de la capacitación. Por lo general, dos personas deben conversar con el posible obrero en una oportunidad y lugar fijado de antemano. Se explicará el propósito de la entrevista y se orará para que el Espíritu Santo dirija sus resultados. Los representantes de la comisión de nombramientos describirán el trabajo específico para el puesto y bosquejarán las expectativas de la iglesia en relación con la persona que ocupará esta posición. También le indicarán los recursos con los cuales cuenta la iglesia para ayudarle a cumplir la tarea. Si no es posible una decisión inmediata, se dará tiempo para considerar la invitación. Cuando el obrero en perspectiva ha tomado la decisión positiva de aceptar un lugar de responsabilidad, debe ser invitado a estar presente en una o más sesiones de la actividad para la cual se lo ha propuesto. Pueden ser reuniones para información general. Los encargados del programa y los representantes de la comisión de nombramientos deben evaluar con la persona lo que se vio y oyó en estas sesiones. Mucha de la capacitación necesaria se habrá alcanzado con la instalación del nuevo dirigente en su lugar de responsabilidad. Tanto él como la
responsabilidad que se asume merecen que se instale al líder en un culto especial de la iglesia. Debe involucrar una acción de apartamiento para la tarea de parte de la iglesia y una oración en su favor en la nueva tarea. f37
Provisión de los medios para mayor capacitación de los líderes Además del reclutamiento y la experiencia de instalación, el ministerio de desarrollo cristiano de la iglesia planeará y conducirá actividades de aprendizaje adecuadas al proyecto y a la persona involucrada. Los encargados de este ministerio anticiparán las necesidades del currículo y los materiales necesarios para el entrenamiento, y evaluarán la respuesta a la capacitación de parte de los interesados. En base a un período corto de clases se dará una capacitación inicial y algo de entrenamiento continuo. En muchos casos se puede hacer en cooperación con otras iglesias o agencias denominacionales. Estos cursos breves intentarán brindar la comprensión general de las tareas y las aptitudes necesarias para las mismas. Además de estos esfuerzos de capacitación general en períodos breves, hay que utilizar otros medios para la preparación de los que están en servicio: f38 1. Aprendizaje. El nuevo obrero puede tener responsabilidades definidas por un período como interino. Durante este tiempo él debe familiarizarse con todo el proceso y tener la oportunidad de hacer todo el trabajo. También durante este tiempo tendrá la ventaja de conversar con sus directores inmediatos y con aquellos involucrados en la capacitación de los dirigentes. 2. Reuniones de líderes. Estas reuniones periódicas tienen que ver con la discusión de la administración del trabajo. Pueden ser sesiones sobre cómo llevar a cabo aspectos específicos de la tarea, como visitación, preparación de lecciones, fuentes para los materiales, planeamiento del currículo y evaluación del trabajo realizado. 3. Talleres de planeamiento del currículo. En dichos talleres, bajo una supervisión competente, los líderes pueden planear el currículo para un trimestre o para un año. Estos talleres pueden animar a los maestros y otros dirigentes a comenzar su planeamiento con la suficiente anticipación como para seleccionar metas a largo plazo y para relacionar las unidades individuales, las clases y los materiales a utilizar.
Se proveen otras oportunidades de capacitación por medio de estudios anticipados, talleres para desarrollo de aptitudes, cursos adicionales de corta duración, conferencias denominacionales y el uso de la biblioteca de la iglesia. Estas sugerencias no agotan las posibilidades. Los dirigentes de desarrollo
cristiano estarán constantemente alertas para usar los medios de mejorar las aptitudes y aumentar la consagración de los líderes en cada posición de la vida de la iglesia.
3. Áreas de Estudio para la Capacitación de los Dirigentes de la Iglesia El director del programa de desarrollo cristiano o capacitación necesitará tomar en cuenta el panorama completo de conocimiento y aptitudes que debe adquirir cada segmento de liderazgo de la iglesia. La lista que sigue es parcial, pero dará una idea de la amplitud de la tarea. Una lectura rápida de la lista brinda una demostración amplia de la tremenda ventaja para la iglesia de tener a sus dirigentes familiarizados con estos campos de conocimiento. Las áreas de capacitación son:f39
Conocimiento básico Teología sistemática Ética cristiana Historia del cristianismo Historia de la misma iglesia local Gobierno y organización de la iglesia Conocimiento y comprensión de la Biblia Metas de la iglesia local, pacto, constitución y procedimientos Ministerios de la iglesia local Mayordomía
Capacitación General de los Dirigentes Cursos introductorios al liderazgo de la iglesia Comprensión de los niveles de edades y de grupos especiales en la iglesia Desarrollo de las aptitudes generales de liderazgo Aptitudes en orientación vocacional Aptitudes en el ministerio a las familias Aptitudes en la visitación y testimonio personal Aptitudes en larealización de las funciones de la iglesia
Capacitación Específica de los Dirigentes Naturaleza de la enseñanza bíblica y de la tarea de desarrollo cristiano de los miembros de la iglesia Enfoques para realizar las tareas de la iglesia Uso de los recursos destinados a cada tarea Aptitudes específicas requeridas en los programas de la iglesia Características de las diferentes edades para el grupo particular involucrado
4. Comprobación de la Efectividad de la Capacitación de los Dirigentes de la Iglesia La capacitación de los líderes de la iglesia requiere una evaluación constante y esfuerzos permanentes para mejorar su calidad. Hay algunas preguntas que las personas responsables de la preparación de los dirigentes deben hacer y a que deben responder en el proceso de evaluación: 1. ¿Qué capacitación fue ofrecida a los líderes? 2. ¿Fue mayor o menor que la ofrecida durante el período previo? 3. ¿Cuántos cursos han sido ofrecidos? 4. ¿Cuántos líderes asistieron? 5. ¿Cuántos completaron cada curso? 6. ¿Qué proporción de dirigentes estuvo involucrada? 7. ¿Cuántos dirigentes participaron en los planes de estudio individual? 8. ¿Cuántos líderes en perspectiva fueron inscritos en alguna clase de preparación para el servicio? 9. ¿Cuáles fueron los puntos fuertes y las debilidades de los cursos ofrecidos? (Las personas que participaron en cada curso pueden brindar la información que se necesite para responder a esta pregunta.) 10. ¿Qué evidencia hay de mejoría en la calidad del trabajo que está siendo hecho por los líderes? (La evidencia que se debe buscar puede incluir más interés y entusiasmo de parte de los dirigentes que participaron, mejor alcance o resultados de alistamiento, mejoría en la comunión o interés entre los dirigentes y entre los miembros de la iglesia en general, mayor involucramiento de los miembros en el testimonio y el ministerio.)
5. Conclusión La vida victoriosa y el avance del reino vienen por medio del poder del Espíritu Santo. El mismo mensaje dado por el ángel a Zacarías para Zorobabel, que decía: “No con ejército, ni con fuerza, sino con mi Espíritu, ha dicho Jehová de los ejércitos” (Zac. 4: 6), puede darse a los líderes de las iglesias de la actualidad. Este poder de origen divino es prometido a las personas a las cuales Dios ha asignado responsabilidades relacionadas con su iglesia. Este poder fluye por medio de las personas. Es un don. Jesús les prometió a sus discípulos: “He aquí, yo enviaré la promesa de mi Padre sobre vosotros” (Luc. 24:49). Lucas se refiere a esta misma promesa nuevamente cuando escribe: “Pero recibiréis poder, cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo” (Hech. 1: 8). El Nuevo Testamento indica que los cristianos han de crecer “en la gracia y el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo” (2 Ped. 3:18). Estos dones y talentos deben ser cultivados, pulidos y usados. La iglesia tiene una responsabilidad en esto. Por un lado, el creyente individual es animado a esperar a Jehová (Sal. 27:14), a estar quieto (Sal. 46:10) y a no desmayar (Gál. 6: 9). Por otro lado, la amonestación a Timoteo es “Que avives el fuego del don de Dios que está en ti por la imposición de mis manos” (2 Tim. 1: 6) y el cuadro de esfuerzos conscientes hacia el crecimiento indicado en la amonestación de Pedro también habla a las iglesias hoy. El dice: “Vosotros también, poniendo vuestra diligencia en esto mismo, añadid a vuestra fe, virtud; a la virtud, conocimiento; al conocimiento, dominio propio; al dominio propio, paciencia; a la paciencia, piedad; a la piedad, afecto fraternal; y al afecto fraternal, amor” (2 Ped. 1: 5-7). Esto brinda una fuerte indicación a los individuos y a la iglesia de que deben cultivarse tanto los dones como el fruto del Espíritu Santo. f40 El hecho de que se estudie este libro indica la convicción de parte de, por lo menos, un maestro, y por lo menos, un alumno que necesita capacitación. La necesidad de capacitar a los líderes llamados por Dios dentro de la iglesia no debe ser resistida.
Preguntas para el Repaso Después de leer el texto, responda a las siguientes preguntas: 1. ¿Cuáles son los dirigentes en la iglesia que necesitan desarrollo cristiano o capacitación?
2. Mencione cinco problemas en una iglesia que indican la necesidad del desarrollo cristiano de los dirigentes. 3. ¿Cómo pueden ser determinadas las necesidades de desarrollo cristiano o capacitación de los líderes? 4. ¿Quién es responsable del desarrollo cristiano de los dirigentes de la iglesia? 5. Describa el enfoque de la comisión de nombramientos en la búsqueda de los candidatos. 6. Sugiera tres canales para el desarrollo cristiano en el servicio. 7. Mencione tres áreas de desarrollo cristiano o capacitación y dos ejemplos de cada una de ellas. 8. Mencione la pregunta que considere que es la más importante al evaluar el desarrollo cristiano o la capacitación de los dirigentes.
Temas de Discusión 1. ¿Cuáles son las necesidades más grandes en el desarrollo cristiano de los líderes para las iglesias de su zona? 2. ¿Cuáles son los impedimentos más grandes para un programa adecuado de desarrollo cristiano de los dirigentes? 3. ¿Quién es responsable del desarrollo cristiano de los dirigentes? 4. Sugiera un programa de desarrollo cristiano o capacitación de los líderes de la iglesia que sea factible para una iglesia, asociación o convención. 5. ¿Cómo puede determinarse si un programa de desarrollo cristiano de los dirigentes es efectivo?
5. La Iglesia Capacita A Sus Miembros En Las Misiones La orden de marcha de la iglesia continúa siendo el cumplimiento del mandato dado por Cristo en Mat. 28:19, 20; Marc. 16:15; Luc. 24:46-48; Juan. 20:21 y Hech. 1: 8. El desafío contemporáneo sigue siendo el dar el evangelio a todo el mundo y el peso de ese desafío es constante. Involucra las necesidades totales del mundo entero. La iglesia que Cristo edificó, en particular su expresión en la congregación local, sigue siendo la agencia divina para la redención del mundo. Cada iglesia debe medirse en términos de relación con la tarea mundial. La iglesia local puede comenzar sólo donde está geográficamente ubicada, pero debe extender sus horizontes hasta que el alcance de sus intereses incluya a todo el mundo. f41 El cumplimiento de esta responsabilidad involucra a todas las personas de una iglesia. Pero para que ellos participen en forma significativa, deben entender el porqué y el cómo. Más adelante en este capítulo se consideran las tareas misioneras de la iglesia. Pero en este punto se puede distinguir muy bien entre actividad misionera y educación misionera. Actividad misionera es aquello que hace un creyente para compartir su fe con otros en su ciudad y fuera de ella, por medio de un uso dedicado de su tiempo, dinero, talento e influencia. En cambio, educación misionera es aquella parte de la educación cristiana que tiene como tema principal la interpretación y la aplicación del mensaje misionero de la Biblia.
1. Los Bautistas y las Misiones En forma no específica ni intencional, los bautistas estuvieron involucrados en las misiones durante los primeros años del siglo XVII, poco después de que fueron identificados como un grupo cristiano. Al huir de la opresión gubernamental en Inglaterra y siguiendo los canales normales de colonización durante todo el siglo, las iglesias bautistas se establecieron en las colonias inglesas en el Nuevo Mundo, particularmente en aquellas de Norteamérica. Algunos dirigentes bautistas, como Roger Williams, comenzaron a predicar el evangelio a los indios. Los bautistas negros, como Frank Spence y George Lyle, sintieron evidentemente la urgencia misionera en la década de 1780, la que los llevó a las Bahamas y a Jamaica. Sin embargo, el movimiento misionero moderno, que involucra el envío de misioneros por parte de un cuerpo bautista para establecer testimonio en una nueva tierra y entre nueva gente, tuvo sus comienzos con Guillermo Carey. Después de algunos rechazos
previos en una reunión de pastores, este joven predicador y zapatero de Inglaterra predicó el 31 de mayo de 1792 su famoso sermón “Esperad grandes cosas de Dios, emprended grandes cosas para Dios”, sobre Isaías 54: 2, 3, estableciendo las grandes máximas misioneras. La impresión que produjo fue profunda. Poco después, en Kettering, un grupo de doce personas formó la primera sociedad misionera bautista. Carey se ofreció como su primer misionero. A eso siguieron una oposición severa y pruebas de fe. Le negaron pasajes en un barco inglés por la hostilidad de la Compañía de la India Oriental al trabajo misionero. Finalmente, con su esposa y un acompañante, zarparon en junio de 1793 en un barco danés. Cinco meses más tarde desembarcaron en Calcuta. Su mensaje de despedida a sus amigos tiene un contenido sucinto e impresionante: “Allá en la India hay una mina de oro; yo descenderé y excavaré, pero ustedes los que se quedan en casa, tienen que sostener las sogas.” f42
El comienzo de la participación de los bautistas en las misiones mundiales desde el lado americano del Atlántico fue el resultado de la formación de la Junta Americana de Comisionados para las Misiones Foráneas, en 1810. Esa Junta, de la Iglesia Congregacional, envió a sus primeros misioneros en 1812, entre ellos Adoniram Judson y su esposa y Lutero Rice. Durante el viaje por el océano, Judson y su esposa cambiaron su concepto en cuanto al bautismo, y al llegar a la India ellos, y luego Rice, fueron bautizados por inmersión por el pastor Willlam Ward, asociado con Carey. Inmediatamente, ellos renunciaron a la Junta Congregacional. Los Judson permanecieron en la India y Lutero Rice regresó para recaudar fondos. Por insistencia de los misioneros bautistas ingleses y de los bautistas en Inglaterra, se formó la Sociedad Bautista para la Propagación del Evangelio en la India y en Otras Partes del Extranjero, en octubre de 1812, con Judson como su primer misionero.f43 Rice fue instrumento fundamental para la formación, en 1814, de la Convención General Misionera de la Denominación Bautista en los Estados Unidos de América para las Misiones Foráneas. La obra bautista en todo el mundo ha sido iniciada a partir de esas dos bases, Inglaterra y Estados Unidos de Norteamérica. Otros grupos cristianos han hecho contribuciones tremendas a las misiones mundiales. Los bautistas continúan hoy siendo el grupo líder entregado al Id de la Gran Comisión. La participación de los bautistas en las misiones está caracterizada por la falta de coordinación entre el trabajo de los diferentes cuerpos bautistas. Desafortunadamente, esta falta de coordinación a veces lleva a rivalidad y lucha. Por ejemplo, en el Caribe hay por lo menos trece grupos bautistas que llevan a cabo trabajo misionero. Sin embargo, este movimiento con su falta de
coordinación ha resultado en que haya muy pocos lugares en nuestro mundo que no tengan testimonio de parte de los bautistas. La extensión de la empresa misionera mundial puede llegar a extenderse hasta cierto punto considerando las estadísticas: La contribución de los protestantes a la fuerza misionera mundial está estimada entre 50.000 y 55.000, de los cuales entre el 65 y el 70 por ciento vienen de Norteamérica (Estados Unidos y Canadá). La investigación realizada en 1973 acerca de las agencias protestantes de Norteamérica con ministerios misioneros mundiales reveló que había 35.070 personas sirviendo en el extranjero al 1 de enero de 1973, trabajando en 158 países fuera de Norteamérica. De este total, 34.057 eran de los Estados Unidos y 1.013 de Canadá. El 44 por ciento de este personal eran hombres y el 56 por ciento mujeres.f44
2. La Tarea Misionera de la Iglesia Durante siglos los dirigentes de las iglesias han discutido en cuanto a si la iglesia debe poner el énfasis en el ser o en el hacer. Algunos han sentido que la iglesia es tal por ser sencillamente lo que es, el cuerpo de Cristo, y que cualquier acción que vaya más allá de la predicación y la enseñanza es activismo y debe ser rechazada. Esa línea de pensamiento es típica de los teólogos europeos de principios del siglo XX. Otros han sostenido que aun el cuerpo debe trabajar para su cabeza; la esposa debe trabajar para el esposo; y la fe sin obras es muerta. La verdad es que ambas ideas son importantes. No hay elección entre hacer y ser en lo que se refiere a la vida de la iglesia. Pablo aclaró esto cuando escribió: Pues por la bondad de Dios han recibido ustedes la salvación por medio de la fe. No es esto algo que ustedes mismos hayan conseguido, sino que les ha sido dado por Dios. No es el resultado de las propias acciones, de modo que nadie puede jactarse de nada; pues es Dios quien nos ha hecho; él nos ha creado en Cristo Jesús para que hagamos buenas obras, según él lo había dispuesto de antemano (Ef. 2: 8-10 Dios Habla Hoy).f45 Por casi tres siglos los bautistas han tratado de hacer ambas cosas. Muchas veces han tendido más a la edificación del cuerpo que al énfasis en el ministerio del hacer, olvidando que habiendo mirado “atentamente en la ley perfecta, …(el hombre) no olvida lo que oye, … cumpliendo lo que ella manda” y entonces “será feliz en lo que hace” (Stg. 1:25 Dios Habla Hoy). La iglesia permanece en el centro de dos círculos. El primer círculo incluye a las personas dentro de su alcance inmediato. El segundo círculo, mucho más amplio, incluye a las que tienen necesidades y circunstancias especiales que les
colocan más allá del alcance de la iglesia. El programa misionero de la iglesia está dirigido a individuos en el círculo más amplio.f46 ¿Cuáles son las tareas misioneras de la iglesia? No es posible responder a esta pregunta únicamente sobre la base de las declaraciones neotestamentarias de la Gran Comisión. La respuesta está esparcida por todo el Nuevo Testamento, pero el resumen siguiente de esas respuestas es pertinente hoy para una iglesia bautista que toma en serio su participación en sus tareas misioneras.
Enseñar misiones “Enseñar misiones” significa guiar a las personas a explorar con una comprensión creciente la naturaleza y las implicaciones del propósito misionero de Dios y a responder a ese propósito en entrega personal y obediencia. Las iglesias con mentalidad misionera surgen después de largos años de duro trabajo por sus dirigentes que tienen una visión misionera mundial. Estos “líderes-maestros” comprenden que los miembros de la iglesia nunca estarán profundamente entregados a las misiones aparte de una educación misionera positiva, regular y seria. Es muy interesante que este tipo de educación misionera frecuentemente tiene el efecto de enfocar el llamado de Dios a los jóvenes para un servicio cristiano de tiempo completo, aun cuando este llamado no los conduzca al servicio misionero. La iglesia debe ofrecer oportunidades bien organizadas y sistemáticas para un estudio de las misiones especializado y completo.f47 En una sección posterior de este capítulo se hará una consideración detallada de lo que está involucrado en la enseñanza de las misiones.
Emprender actividades misionerasf48 Las actividades misioneras son esfuerzos organizados para buscar a las personas fuera del alcance inmediato de la iglesia. Tales acciones representan proyectos pioneros en áreas de la sociedad humana que muchos miembros pueden considerar inalcanzables. Algunos de estos individuos pueden estar lejos geográficamente; otros pueden estar cerca en cuanto a distancia, pero muy lejos socialmente. Las personas que necesitan ser alcanzadas por medio de actividades misioneras locales pueden ser descubiertas dentro de alguno de los siguientes grupos: Prisioneros Personal militar Alcohólicos Drogadictos Gente pobre
Analfabetos Extranjeros Ancianos Padres y madres solteros Delincuentes juveniles
Grupos idiomáticos Migrantes Viajeros y turistas
No evangélicos Grupos minoritarios
Las actividades misioneras son más que actividades sociales, sino que tienen las intenciones cristianas de: honrar a Cristo y hacer que la atención de los necesitados se enfoque en Cristo, enfrentar las necesidades físicas o sociales inmediatas de la persona y, al mismo tiempo, solucionar su necesidad mayor con el evangelio. El resultado deseado es que ellos descubran por sí mismos el amor de Dios en Cristo. Las situaciones locales que demandan actividades misioneras de parte de la iglesia pueden descubrirse por investigaciones de la comunidad, estudios hechos por la misma iglesia o contacto con agencias comunitarias. La respuesta a estas necesidades de parte de la iglesia puede incluir proyectos a largo alcance de la congregación, de las organizaciones, de las familias o de los individuos. La iglesia que quiere realmente participar en actividades misioneras será flexible en relación con el tipo de necesidades que buscará solucionar tanto como a la provisión de la respuesta de acuerdo con las necesidades.
Proveer e interpretar la información en relación con el trabajo de la iglesia y de la denominaciónf49 La iglesia y sus miembros, a fin de participar adecuadamente en actividades misioneras, necesita estar informada en cuanto a lo que ya se está haciendo, sea por cuenta de la misma iglesia local o por parte de la denominación. Dentro de la iglesia, los diferentes ministerios comparten la tarea común de comunicar esta información a la congregación. Esta clase de información es sumamente importante, dado que las personas alcanzan un conocimiento del trabajo de la iglesia y de la denominación que les ayuda en su motivación tanto como en su comprensión. De ese modo, los dirigentes de los ministerios tienen la responsabilidad definida de conseguir la información de fuentes denominacionales y de la iglesia y de comunicarla a las audiencias apropiadas dentro de la iglesia.
Apoyar las misiones por medio de la oración y las ofrendasf50 ¿Por qué orar por las misiones? Una razón suficiente es que Jesús lo hizo, como es evidente en Juan 17. La oración se convierte en el medio por el cual se alcanza el poder de Dios para la misión mundial de la iglesia. La oración intercesora es evidencia de interés de parte de los individuos y de la congregación por los perdidos, los oprimidos y los hambrientos. La oración es más significativa cuando se enseñan las misiones a cada miembro de la iglesia, cuando se ocupa a los miembros en actividades misioneras, y cuando se les
mantiene informados en cuanto al programa misionero de la iglesia y de la denominación. El apoyo financiero a las misiones, sea por medio del programa cooperativo regular de ofrendas o de las ofrendas especiales, es una de las cosas más sanas y productivas que hace la congregación— aún más productiva que un nuevo edificio o que muchos otros proyectos locales. La congregación puede tener un gran edificio, pero la iglesia no tiene nada por lo cual vivir excepto para sí misma si carece de una visión de las necesidades del mundo y de la comunidad, y la motivación para solucionar esas necesidades. A fin de apoyar las misiones mundiales, una iglesia debe ocuparse en ciertas acciones esenciales: (1) descubrir las necesidades misioneras mundiales que necesitan apoyo de la iglesia; (2) proveer las oportunidades para que las personas participen en el apoyo a las misiones mundiales; (3) enrolar a las personas en el apoyo a las misiones mundiales.
3. Enseñanza Misionera Al considerar previamente las tareas misioneras de la iglesia se hizo referencia a la enseñanza misionera. Aquí consideraremos el contenido y la estructura de esa enseñanza.
Contenido de la enseñanzaf51 La enseñanza misionera involucra: 1. Enseñanza del mensaje misionero de la Biblia. Este mensaje está tipificado en Efesios 3, que resume el mensaje misionero de Cristo. Dios tiene un plan en desarrollo para el mundo que se centra en Jesucristo como el Redentor para todos los hombres. La iglesia es responsable de la proclamación de este plan y de Jesucristo. La iglesia compartirá la victoria con la consumación de este plan cuando “en el nombre de Jesús se doble toda rodilla de los que están en los cielos, y en la tierra, y debajo de la tierra; y toda lengua confiese que Jesucristo es el Señor, para gloria de Dios Padre” (Fil. 2:10, 11). El mensaje misionero de la Biblia corre a través de toda la Palabra y es consistente, a medida que desarrolla la revelación progresiva del amor de Dios para todo el mundo. 2. Progreso de las misiones cristianas. Las misiones no son un fenómeno moderno. A partir del libro de Hechos, las iglesias siempre han ido adelante, a veces lentamente, otras veces como en un torrente, pero siempre abundando para mayores y más significativos lugares de servicio y de oportunidad. Las
misiones no son una historia con un comienzo y un fin. Aún están sucediendo y continuarán ocurriendo hasta que Cristo venga otra vez. De modo que la enseñanza del progreso de las misiones cristianas involucra la lectura de la historia de las misiones. Los miembros de la iglesia necesitan encontrarse en el medio de este evento cristiano porque la historia misionera es historia viviente. 3. Misiones contemporáneas. El conocimiento acerca de las misiones que se comparte con los miembros de la iglesia y con otras personas no puede descansar únicamente en las cosas del pasado, porque el presente y el futuro son parte de las misiones mundiales. Los miembros de la iglesia necesitan saber la situación geográfica, política, sociológica y económica en la cual se hace el trabajo misionero. La iglesia debe examinar constantemente lo que se está haciendo con la intención de involucrarse y aumentar su participación. El conocimiento de las misiones contemporáneas incluye la comprensión de la filosofía y la estrategia de las misiones mundiales.
Estructura educativa La iglesia deberá enseñar con una estructura diseñada de acuerdo con el interés y con la capacidad de aprendizaje de los hombres, mujeres, jóvenes y niños que necesitan ser enseñados en cuanto a las misiones mundiales. Cada uno de estos grupos tendrá su propio interés particular y sus necesidades relacionadas con esta tarea. En una iglesia pequeña de veinticinco o menos miembros, la organización de la escuela dominical es probablemente el canal por medio del cual la iglesia deberá llevar a cabo la tarea de la enseñanza misionera. De ese modo, las clases de hombres, mujeres, jóvenes y niños estarán ocupadas en esa tarea. A medida que la iglesia crece, probablemente querrá proveer en su programa la estructura organizadora para las distintas tareas misioneras de la iglesia, incluyendo la enseñanza misionera. Muchas iglesias tienen organizaciones paralelas: una para la enseñanza de hombres y muchachos en las tareas misioneras, y otra, para los mismos fines, para mujeres, señoritas, niñas y preescolares. Cada uno de estos dos programas de educación cristiana trabaja organizadamente dentro de la iglesia para cumplir los mismos fines. Lamentablemente, muchas iglesias en el pasado han dejado todo el énfasis sobre las misiones a las mujeres. Afortunadamente, las mujeres han sido muy diligentes y fieles en llevar a cabo esta tarea. En este tiempo, un número creciente de iglesias está descubriendo que los hombres quieren aprender acerca de las misiones y que ellos participarán en las tareas misioneras de la iglesia si son guiados a hacerlo. Cuando el enfoque puede ser integral, que llegue a todos los niveles de la iglesia, la congregación tiene la posibilidad mucho mayor de prosperar en esta área tan importante de la vida de la iglesia.
La estructura organizadora comúnmente es sugerida por la denominación, pero donde esto no sea el caso, cada congregación puede desarrollar la estructura que sea adecuada a su situación. La iglesia querrá asegurarse el desarrollo de grupos para ir, hacer discípulos, bautizar y enseñar, los cuales son parte de la tarea mundial que Cristo dio a sus iglesias.
Preguntas para el Repaso Después de leer el texto, responda a las siguientes preguntas: 1. ¿Cuál es el mandato de Cristo para la iglesia? 2. Distinga entre actividad misionera y educación misionera. 3. Mencione cuatro misioneros bautistas de los primeros tiempos e indique el origen del movimiento misionero moderno. 4. ¿Cuáles fueron las circunstancias que impulsaron a los primeros misioneros bautistas norteamericanos? 5. Evalúe el trabajo bautista en la actualidad en el país donde reside. 6. ¿Qué cuestión en relación con la iglesia ha originado debate entre los líderes? 7. ¿Cuáles son los dos círculos de los cuales la iglesia es el centro? 8. ¿Qué es lo que se quiere decir por enseñar “misiones”? 9. Mencione diez grupos de personas que están normalmente fuera de alcance social de la iglesia. 10. ¿Cuáles son las intenciones de las actividades misioneras? 11. ¿Por qué los líderes de la iglesia deben brindar información en relación con el trabajo de la iglesia y de la denominación? 12. ¿Por qué la oración y las ofrendas son medios importantes para apoyar las misiones? 13. Mencione tres actividades misioneras importantes de la iglesia. 14. Mencione tres áreas de información misionera que deben ser enseñadas. 15. ¿Qué estructura para la enseñanza de las misiones debe desarrollar una iglesia pequeña?
Temas de Discusión 1. Defina las misiones y la tarea misionera de una iglesia. 2. ¿Qué es lo que debe ser incluido en el programa de la iglesia para capacitarla en el cumplimiento de sus tareas misioneras?
3. ¿Qué organización se necesita en una iglesia para capacitarla a fin de cumplir su tarea misionera? 4. ¿Qué se puede hacer para involucrar a los jóvenes y a los hombres en las tareas misioneras de la iglesia?
6. El Currículo Para La Educación Cristiana En los capítulos dos a cinco fueron considerados los aspectos de la educación cristiana en la iglesia local que tienen que ver con la enseñanza, la capacitación y las misiones. Estos capítulos se limitaban a una consideración de las necesidades y responsabilidades involucradas en llevar adelante estas áreas de la educación cristiana. Fueron considerados los pasos administrativos necesarios para iniciar y proveer la organización del programa. También se sugirieron medios a través de los cuales la iglesia podía asegurar el logro de sus objetivos. En este capítulo se tratará lo relacionado con el contenido de la enseñanza, la capacitación y el programa misionero. Se conoce a ese contenido como “currículo”.
1. Definición de Currículo La palabra currículo viene del verbo latino currere, que significa correr. Se refiere, literalmente, a una carrera. Muchas personas piensan en el currículo en términos de libros o revistas. Pero el término casi involucra el programa total de enseñanza bíblica y desarrollo cristiano. Un concepto sano, y aquel por el cual está guiado este libro, es el siguiente: currículo es “la suma de todas las experiencias de aprendizaje que resultan de un plan curricular usado bajo la guía de una iglesia y dirigido al logro de los objetivos de la misma”.f52
Es, entonces, lo que le acontece al alumno en la situación local, la suma total de las experiencias de aprendizaje en la situación de aprendizaje. Por lo tanto, el currículo involucra más que materiales impresos. Incluye las experiencias que los dirigentes del programa de educación cristiana proveen intencionalmente para los alumnos. Las mismas podrían incluir actividades, proyectos, discusiones y otros elementos del proceso educativo. El currículo funciona dentro de la vida y ministerios de la iglesia mientras la congregación adora, testifica, enseña, ministra y aplica el evangelio a las diferentes áreas de la vida. Puede decirse que el currículo incluye el hogar cristiano. De ese modo, la calidad del hogar cristiano y la vida de la iglesia afectan positiva o negativamente la calidad total del currículo. Por ello, si una iglesia no demuestra efectivamente la realidad y el poder de la fe que busca comunicar, sus esfuerzos para enseñar serán contrarrestados por su propio fracaso en ser una iglesia.f53
2. Diseño del Currículo Idealmente, la congregación local tendrá ayuda de parte de la convención u otra organización denominacional a la cual pertenece, para diseñar el currículo necesario para alcanzar sus objetivos. Sin embargo, la disponibilidad de esas ayudas no elimina la responsabilidad de parte de cada congregación para asegurar que cada uno de sus programas tenga el contenido adecuado. El currículo es como un árbol. Parte del árbol, incluyendo el tronco, ramas y follaje, está sobre el terreno y es visible. Otra parte del árbol, el sistema de raíces, no es visible, está debajo del terreno, pero es absolutamente necesaria para la existencia del árbol. Las raíces del currículo son la perspectiva teológica, la filosofía educativa y el diseño o plan para el currículo. Todas ellas apoyan y mantienen la parte visible del currículo, esto es, las situaciones de enseñanza y aprendizaje en la iglesia, las experiencias de los alumnos bajo la guía de la iglesia, y los recursos de materiales impresos junto con otras ayudas didácticas.f54
Objetivos Los objetivos a ser alcanzados por el currículo surgen del objetivo de la iglesia. El objetivo de la iglesia, sugerido en el capítulo uno, era: El objetivo de una iglesia, compuesta por creyentes bautizados que comparten una entrega personal a Jesucristo como Salvador y Señor, es ser un cuerpo redentor en Cristo, mediante el poder del Espíritu Santo, que crece hacia la madurez cristiana a través de la adoración, testimonio, educación y ministerio, que proclama el evangelio a todo el mundo, y que aplica los principios cristianos al hombre y a la sociedad para el logro de los propósitos de Dios. f55
De acuerdo con este objetivo de la iglesia, la congregación puede establecer un objetivo educativo para su currículo como el siguiente: Ayudar a las personas a reconocer a Dios como está revelado en Jesucristo, a responder a él en una entrega personal de fe, a guiarles a seguirle en el significado pleno del discipulado, a relacionarse en forma efectiva con su iglesia y con su misión en el mundo, a vivir en un reconocimiento consciente de la guía y el poder del Espíritu Santo, y a crecer hacia la madurez cristiana.f56
En la sección siguiente se presentará un ejemplo de objetivos específicos dentro de grupos de edades definidas para una porción definida del currículo total.
El alcance del currículo El alcance del currículo de educación cristiana ha sido definido como el campo total de relaciones a la luz del evangelio. Los elementos dentro de este alcance serían: 1. La experiencia cristiana del hombre bajo Dios —la dimensión divina de la realidad a la luz del evangelio. 2. La experiencia cristiana de la relación del hombre con el hombre —la dimensión humana de la realidad a la luz del evangelio. 3. La experiencia cristiana del hombre dentro del mundo —la dimensión natural de la realidad a la luz del evangelio. f57
Obviamente, este alcance curricular es bastante amplio. De lo que incluye, cada iglesia elegirá el contenido curricular que quiere usar en un período dado. La declaración previa acerca del alcance y el contenido del currículo de educación cristiana toma en cuenta el currículo que será utilizado con todos los grupos de edades. La iglesia es responsable de enseñar el contenido completo de este material a cada nivel de edades. Por supuesto, la manera, el detalle y la profundidad de esta instrucción variará grandemente. Además, y esto es importante, el evangelio entero, el alcance total de la experiencia cristiana, debe ser enseñado a cada uno de los niveles de edades casi como si nunca antes se hubiera enseñado. La manera en la cual se trata el alcance del currículo depende de la capacidad de aprendizaje y la experiencia en la vida del nivel de edad de que se trate.f58 Esta aplicación del alcance integral del currículo a todos los niveles de edades puede entenderse mejor con una ilustración limitada.f59 Asumiendo, por ejemplo, que en el programa de enseñanza bíblica el contenido del currículo para un período particular es el amor redentor de Dios por los hombres, la declaración de este tema puede ser la siguiente: Por medio del amor incambiable y activo de Dios por el hombre, manifestado en forma suprema en Jesucristo (su vida, muerte, resurrección y ascensión), la redención es posible, de modo que se vence el alejamiento del hombre de Dios y se abre el camino para que sea reconciliado con Dios. De ese modo, la persistente necesidad del hombre por reconciliación, significado, aceptación, integridad, seguridad y libertad es enfrentada en forma adecuada.
Dentro de esta área del amor redentor de Dios por el hombre, el programa de enseñanza intentará enseñar ciertas verdades a cada nivel de edades. La declaración de algunas de estas verdades será ilustrativa de las diferentes variantes de profundidad en la instrucción.
Preescolares. Dios nos ama y quiere que le obedezcamos. Jesús nos muestra cómo es el amor de Dios. Escolares. Dios, quien nos creó, nos ama y quiere que le amemos y le obedezcamos. Dios ha mostrado su amor para con nosotros por medio de la vida, muerte, resurrección y ascensión de Jesucristo. Jóvenes. El amor redentor de Dios para con el hombre, manifestado desde la creación en adelante, tiene su manifestación suprema en Jesucristo: en su encarnación, vida, crucifixión, resurrección y ascensión. En la encarnación. Dios se identificó con el hombre y se ofreció a sí mismo para que el hombre pudiera ser redimido. Dios hace al hombre responsable de su elección de aceptar o rechazar su amor redentor. Adultos. El amor y el perdón de Dios no borran los resultados inevitables del pecado y el mal, pero capacitan al hombre para reorientar su vida a pesar de estos resultados. En su amor activo hacia el hombre. Dios lo capacita para reconocer su necesidad de redención y para expresarla por medio del arrepentimiento y la confesión.
Por supuesto, la capacidad de aprendizaje de cada nivel de edad será diferente. Dicha capacidad incluye las habilidades inherentes de los alumnos, su facilidad general para experiencias de maduración, y su facilidad específica para estar significativamente involucrado en explorar una área particular del currículo. La facilidad específica de los niveles de edad, relacionada con el enfoque sobre la frase “El amor redentor de Dios hacia el hombre”, puede ser ilustrada por las siguientes afirmaciones generales: Preescolares. Los niños de esta edad necesitan ser deseados, aprobados y aceptados. El niño es capaz de percibir algo del amor de Dios por medio de los padres y las imágenes paternales, los cuales están dedicados a Dios. Escolares. El niño de edad escolar tiene la capacidad creciente para comprender que Dios nos ama y que quiere que le obedezcamos. El tiene una capacidad para la comprensión inicial del amor de Dios como está demostrado en la vida, muerte y resurrección de Jesucristo. Jóvenes. La juventud tiene frecuentemente un sentido de desubicación, fracaso o inseguridad. El joven está buscando el significado y propósito de su vida. La juventud está en una etapa de la vida en la cual tiene la capacidad intelectual para reconocer que Dios, por medio de su amor redentor manifestado en la vida, muerte y resurrección de Jesucristo, ha hecho que el perdón esté disponible para todos. Adultos. En los años adultos la mayor necesidad es la seguridad que se alcanzará para el futuro. En esta edad llega la responsabilidad hacia otros, de modo que el adulto está abierto para apreciar lo que Dios ha hecho y está haciendo por él.
Tomando en cuenta la facilidad de los niveles de edad que fue indicada anteriormente, las personas responsables del planeamiento del programa de enseñanza misionera en la iglesia y el diseño del currículo de la denominación, buscarán establecer la mejor edad en la cual introducir los diferentes conceptos. Ellos tratarán de determinar los métodos y las actividades que serán utilizados en cada nivel de edad. Determinarán, a su mejor saber y entender, la secuencia adecuada para presentar el contenido del currículo en el curso de toda la vida. Ellos procurarán que todas las organizaciones educativas en la iglesia sean consistentes en los conceptos y enfoques usados con cada nivel de edad. Como un paso final en la ilustración, se presentan seguidamente algunos de los resultados esperados de los alumnos en el área del “amor redentor de Dios hacia el hombre”: Preescolares. El niño puede alcanzar una comprensión inicial de que Dios ama a cada uno. Puede alcanzar una comprensión inicial de que Jesús nos muestra cómo es Dios. Escolares. El niño de edad escolar puede alcanzar la comprensión del significado de la vida, muerte, resurrección y ascensión de Jesús. Puede lograr el deseo de tener una relación personal con Dios, quien le expresa su amor por medio de Cristo. Jóvenes. La juventud puede alcanzar la comprensión del amor perdonador que hace posible el perdón del pecado. Puede tener confianza en que el amor redentor de Dios puede hacer una vida íntegra y aceptar el hecho de que el amor de Dios trae significado verdadero y propósito a la vida. Adultos. El adulto puede lograr la realización del significado de la redención y una lealtad a Dios más profunda en gratitud por su redención en Cristo. El adulto puede alcanzar la comprensión de que el amor de Dios capacitará a las personas para mantener un balance adecuado entre los hechos y las luchas de la vida diaria en las demandas de la entrega cristiana.
3. La Biblia en el Currículo de la Educación Cristiana Aunque se pueden incluir distintos materiales impresos o experiencias de aprendizaje en el contenido del currículo de educación cristiana en la enseñanza bíblica, capacitación o desarrollo cristiano de los miembros de la iglesia en las misiones, la Biblia siempre mantiene el lugar central. Ella provee la base para el propósito de la iglesia. La Biblia no sólo indica las demandas a la congregación para enseñar, capacitar y desarrollar a sus miembros en las misiones, sino que también brinda el contenido de dichos programas. La
Biblia, con su contenido, provee el fundamento firme y autoritario para la vida cristiana y para el desarrollo y trabajo de la iglesia.
Consideración de la Biblia como currículof60 Al considerar a la Biblia como la parte central del currículo para la educación cristiana, es necesario tener en cuenta la naturaleza de la Biblia. En este registro de la autorrevelación de Dios, el maestro y el alumno encuentran un desarrollo gradual y progresivo del propósito persistente de Dios de comunicar a los hombres el conocimiento acerca de sí mismo y su voluntad para ellos. Esta autorevelación progresiva de Dios es el fundamento indispensable para toda la enseñanza cristiana. Es el depósito del mensaje redentor de Dios para el mundo, inspirado por Dios mismo y providencialmente reunido y preservado. Casi todas las iglesias bautistas aceptan la Biblia como la única guía con autoridad para la vida y el trabajo cristianos, y como el instrumento efectivo por medio del cual el Padre llama continuamente a los hombres y mujeres a la comunión con él como Dios y con Cristo como Salvador. Debido a su naturaleza, la Biblia debe ser considerada como la fuente básica de la enseñanza cristiana, y su contenido debe ser presentado como la Palabra de Dios, de modo que el alumno sabrá que Dios quiere hablarle. El alumno no sólo debe ser enseñado en cuanto al contenido de la Biblia, sino que toda la enseñanza cristiana debe ser juzgada a la luz de las Escrituras. La Biblia es relevante. Es pertinente porque es el Dios eterno que habla a los hombres por medio de ella. El mismo Espíritu Santo que habló a los hombres fieles de la antigüedad, instruyéndolos para escribir las palabras que hoy constituyen la Biblia, es el que habla al lector actual de la Biblia en la búsqueda de la verdad. La Biblia considera en forma vital y auténtica las necesidades persistentes de la vida humana. De esta manera, el amor permanente y activo de Dios buscando al hombre, manifestado en forma suprema en Jesucristo, se encuentra justamente con el hombre de hoy y su necesidad permanente de reconciliación, significado, aceptación, integridad, seguridad y libertad. La Biblia tiene autoridad. Debido a que viene de Dios, el contenido de la Biblia es verdadero y por esto habla con autoridad a cualquier situación en la cual pueda encontrarse el hombre. También, debido a su origen divino, la Biblia tiene poder hoy. Cuando las personas responden a su mensaje llegan a ser individuos transformados. El poder de Dios se manifiesta en la vida y el trabajo de las iglesias que están formadas por individuos cambiados. De la misma forma, el poder de Dios revelado en la Biblia, es adecuado cuando es aplicado a los grandes problemas sociales. Cuando la iglesia usa la Biblia
como material curricular, debe reconocer la inspiración divina de este instrumento, aunque haya sido escrita por seres humanos. Debe reconocer la naturaleza progresiva de su revelación, usando correctamente esta revelación como está expresada a través de la variedad de formas literarias en la Biblia. La iglesia está obligada a aprovechar los resultados de la sana erudición en la búsqueda de conocer el significado verdadero de la Biblia. Debe ejercer cuidado en usar la revelación bíblica de acuerdo con su propósito espirtual. A fin de utilizar la Biblia, la iglesia y sus maestros están obligados a interpretar adecuadamente este instrumento del amor de Dios. Dichos maestros no deben descartar los esfuerzos espirituales y eruditos que otros han hecho al tratar de descubrir el significado divino del mensaje. Pero ellos tienen una responsabilidad personal de ejercer su propia competencia otorgada por Dios, bajo la dirección del Espíritu Santo, para explorar la Biblia a fin de descubrir su significado y aplicar este significado a sus propias vidas y a las de sus alumnos. Este criterio se aplica al uso de cada pasaje. ¿Debe tomarse el pasaje literal o figuradamente? ¿Presenta el pasaje una verdad permanente y universal, o es solamente local y temporaria? Si el pasaje es una narración, el intérprete debe reconocer que la descripción del evento incluye la creencia del testigo en relación con el significado del evento. ¿Cuál es el mensaje central del pasaje? ¿Qué peso tienen otras porciones de la Escritura sobre la interpretación de este pasaje particular? En este proceso, el Espíritu Santo tiene un papel activo, particularmente cuando el maestro y el alumno están listos para reconocer que Jesucristo mismo es el Señor de toda la Biblia. Al considerar a la Biblia como currículo, surgen preguntas particulares en relación con su uso con los niños. La Biblia no fue escrita para los niños sino para los adultos. Por lo tanto, ellos deben ser preparados. Sin embargo, al adaptar las enseñanzas bíblicas a la capacidad de los niños, el maestro debe evitar muy cuidadosamente enseñarles algo acerca de la Biblia que más tarde tengan que desechar. Aun en esa etapa temprana del desarrollo, es posible comunicarles los grandes temas de la Biblia. Los niños encuentran que es más fácil aprender las verdades relacionadas con las personas o situaciones individuales en la Biblia cuando ellos pueden ser guiados a identificarse con esa persona o situación. Todos los niveles de edades necesitan comenzar un aprendizaje temprano para aprender la Biblia como un libro total. Necesitan conocer la historia y la geografía relacionadas con la Biblia. Necesitan conocer la gente de la Biblia: quiénes eran, dónde vivían, cuáles eran los eventos más importantes de sus vidas, qué verdad religiosa era revelada especialmente por medio de personas particulares, qué logró cada persona en relación con Dios y qué es lo que
podemos aprender de sus vidas. Además, la Biblia debe ser dominada libro por libro e idea por idea.
Preparación del maestro para usar la Biblia como currículo Además de la preparación particular de las unidades individuales de lecciones, los maestros de la Biblia tienen una responsabilidad real de un estudio independiente de la Biblia. Este estudio debe incluir la lectura de toda la Biblia tan frecuentemente como sea posible. Debe incluir también la provisión progresiva que el maestro haga de sus propias herramientas para el estudio bíblico. La selección que haga del estudio bíblico debe tener en cuenta el tamaño del tipo de imprenta más conveniente, el sistema de referencias y mapas y la concordancia. Además de su estudio regular de la Biblia, el maestro debe tener otras traducciones bíblicas modernas. Otras ayudas, que debe tener en su propia biblioteca o disponibles en la biblioteca de la iglesia son: un diccionario bíblico, una buena concordancia, comentarios básicos que no requieren un conocimiento de los idiomas originales, un atlas bíblico, una guía de estudio reconocida como la de Halley (Compendio Manual de la Biblia) y una armonía de los Evangelios como la preparada por A. T. Robertson. Esta lista puede extenderse considerablemente, pero incluye los elementos básicos necesarios para ayudar al maestro a conocer su Biblia.
4. Contenido del Currículo La Biblia misma es el material principal del currículo en el programa educativo de la iglesia. También forma una parte importante del programa de desarrollo cristiano o capacitación de la misma. En efecto, una parte importante del contenido del currículo de desarrollo cristiano está directa o indirectamente relacionada con la Biblia. En esta parte del estudio del currículo, se darán los lineamientos del contenido del mismo en los diferentes aspectos del programa de desarrollo cristiano de la iglesia.
Capacitación de nuevos miembros Algunos aspectos del desarrollo cristiano de los nuevos miembros están diseñados particularmente para los nuevos convertidos. Parte del currículo son las entrevistas de aconsejamiento sobre el significado de la conversión y de los miembros de la iglesia, y deben ser previas al bautismo de los nuevos creyentes y de su recepción como miembros de la iglesia. Algunos temas recomendados para todos los nuevos miembros, incluyendo los que han sido recomendados por otras congregaciones, serían:f61
Su nueva vida en Cristo Su iglesia trabajando unida Su crecimiento como cristiano Su iglesia trabajando con otras Su Biblia y cómo usarla Su iglesia y su pacto Su iglesia y su historia Su iglesia y sus creencias. Su iglesia y su hogar Compartir su fe
Algunas iglesias descubren que aun la presentación de los nuevos miembros a la iglesia para aprobación es una parte valiosa del currículo de desarrollo cristiano para los nuevos miembros.
Capacitación general para los miembros de la iglesiaf62 Las cuatro áreas principales del contenido del currículo para el desarrollo cristiano de todos los miembros son: teología, ética, historia del cristianismo y gobierno y organización de la iglesia. Las experiencias de capacitación variarán de acuerdo con los niveles de edad, pero el currículo total está relacionado de tal manera que puede proveer toda una vida de experiencias significativas de aprendizaje. Ciertamente, la preparación efectiva del discipulado cristiano no puede ser completada nunca. Los cambios constantes traen nuevos problemas que los miembros de la iglesia deben encarar, y que producen una nueva necesidad de desarrollo o renovación en la misma. La teología cristiana está interesada en las grandes realidades de la fe cristiana, como Dios, el hombre, el pecado, Satanás, la salvación, la iglesia, la Biblia y las últimas cosas. El desarrollo cristiano en la teología cristiana debe dar énfasis a la experimentación de estas doctrinas como realidades dinámicas. Lleva toda una vida el aprender a expresar efectivamente las creencias personales en la vida diaria basadas en estas realidades espirituales y desarrollar un sistema válido de creencias cristianas en cuanto a Dios y su relación con el hombre. Ellas son también una parte del currículo de capacitación de los miembros de la iglesia. La ética cristiana está interesada en los ideales de Dios para la vida. Esos ideales están establecidos en las Escrituras y proveen los “deberes” de la vida cristiana. La ética cristiana comprende la exploración de los principios y normas básicos para la vida cristiana, la conducta personal, las relaciones interpersonales, la relación entre grupos, la relación interna en los grupos, la vida familiar, la ciudadanía cristiana, el trabajo diario y la vida económica. Aunque algunas de estas áreas del currículo pueden ser consideradas en un
período relativamente breve, la necesidad de conducir a los miembros a crecer en el carácter cristiano y en su habilidad para expresar sus ideas en cuanto a la ética cristiana en cada relación de su vida diaria, hace que la tarea de desarrollo cristiano se extienda durante toda la vida del miembro de la iglesia. La historia del cristianismo procura enseñar los hechos de la historia cristiana. Su misión más importante es la búsqueda del discernimiento histórico que ayuda al miembro de la iglesia a tratar más constructivamente con los problemas de la vida diaria. El desarrollo de la historia corriente a lo largo de la vida de un miembro de la iglesia pone sobre la iglesia la tarea de descubrir y apropiar el significado y los valores en la historia del cristianismo como se desarrolla en la actualidad. El gobierno y la organización de la iglesia es el estudio de cómo los miembros trabajan y realizan juntos la tarea de la iglesia. Este estudio procura responder a la pregunta: ¿Por qué deben trabajar juntos? Es más probable que los miembros de la iglesia bien informados sean motivados como buenos mayordomos de su tiempo, talentos y dinero en el cumplimiento de la misión de la iglesia. También en este caso, es una tarea que dura toda la vida, la de explorar constantemente maneras en las cuales los miembros de la iglesia pueden trabajar unidos para alcanzar los objetivos de Cristo para la iglesia. Este estudio del gobierno y la organización de la iglesia debe incluir el conocimiento del grupo particular de iglesias al cual pertenece esa congregación y el conocimiento de otros grupos cristianos, incluyendo el de otros grupos bautistas.
Contenido del currículo para la capacitación de los líderes de la Iglesia (Ver el capítulo cuatro punto tres: “Áreas de Estudio para la Capacitación de los Líderes de la Iglesia”.)
Contenido del currículo en el programa de desarrollo de las misiones En el capítulo cinco se hizo referencia al hecho de que la educación misionera es una de las tareas misioneras de la iglesia. Se mencionó en ese punto el estudio de las misiones contemporáneas y el énfasis sobre el apoyo de la iglesia en las misiones a través de la oración, finanzas y personal. También se habló de la tarea de enseñar el mensaje misionero de la Biblia. El cuadro de un Dios que busca al hombre es común a través de todas las Escrituras, comenzando con su obra en la creación y su búsqueda del hombre pecador. Esta línea de pensamiento lleva al lector a través de las evidencias
continuas del interés de Dios por el hombre y de su provisión de un testimonio a los no redimidos. Aun en los tiempos del Antiguo Testamento, se encuentran ejemplos del amor de Dios que busca al hombre en casos como el de Abraham, Noé, Jonás y los profetas. El Nuevo Testamento muestra cómo Dios envió a su Hijo a llamar a todo el mundo al arrepentimiento y la salvación y a morir para que esto pudiera ser posible. El Nuevo Testamento también aclara el papel del Espíritu Santo en guiar y fortalecer a aquellos que responden a la búsqueda de Dios. El papel de la iglesia en las misiones, comenzando en Mateo y en Hechos con la declaración de la Gran Comisión y siguiendo con la respuesta efectiva de las iglesias del Nuevo Testamento a la misma, brinda el material para el contenido del currículo a fin de desarrollar a las iglesias en las misiones. La participación misionera de una iglesia local es también una parte del contenido del currículo, como lo es el plan que esta iglesia tiene para apoyar su propio programa misionero y el programa misionero de la denominación. En ningún lugar en el programa de educación cristiana es tan clara la importancia de las experiencias planeadas como una parte del currículo como lo es en la educación misionera.
5. Mantenimiento de un Currículo Adecuado en el Programa de Educación Cristiana Para asegurarse de que el programa de educación cristiana de la iglesia local es llevado a cabo con un currículo adecuado, hay que considerar problemas constantes que se presentan. Algunos de los problemas pueden ser ilustrados con las quejas que más o menos son familiares a los maestros: Los materiales del currículo no consideran los temas de mayor interés para los miembros de mi clase en las oportunidades cuando ellos están más interesados en estudiarlos. Yo no puedo lograr que los miembros de mi clase se interesen en un estudio y discusión serios. Algunos de los miembros de mi clase monopolizan la discusión. Los miembros de mi clase no encuentran que los materiales del currículo sean interesantes y desafiantes. ¿Cómo puedo enfrentar las necesidades reales de los miembros de mi clase? f63
Parte de la respuesta a los problemas típicos mencionados es la vigilancia constante en la provisión de un buen currículo. Un buen currículo para el programa de educación cristiana de la iglesia tendrá las siguientes características básicas:
Sanidad bíblica y doctrinal Relación relevante (currículo adecuado a la naturaleza y las necesidades de los alumnos Amplitud Equilibrio Secuencia Flexibilidad Correlación (relación adecuada entre sus partes)f64
Administración para el mantenimiento de un currículo adecuado Los encargados del programa de educación cristiana de la iglesia son responsables de mantener un currículo adecuado. Los líderes de grupos y los maestros en el programa quizá no tengan la preparación apropiada para determinar y mantener un currículo adecuado. De modo que una carga de responsabilidad muy pesada cae sobre los dirigentes de la iglesia que aceptan la carga para este programa. Debe presentarse a la iglesia un plan curricular y que la misma lo adopte por voto de una asamblea. Aunque los materiales puedan venir de una casa publicadora de la denominación, comúnmente es necesaria una selección dentro de los materiales ofrecidos. Las decisiones incluidas en esta selección son afectadas por la naturaleza de la iglesia y sus necesidades, las metas, tamaño, ubicación, componentes de los miembros y problemas educativos especiales. Todos los maestros y otros líderes necesitan comprender que no deben utilizarse materiales curriculares que sean diferentes del currículo adoptado por el programa de la iglesia. En este punto es necesario ejercer una supervisión constante. Además, es necesario proveer suplementos y unidades alternativas al currículo. Dichos suplementos incluirán ayudas didácticas tales como mapas, fotografías, carteles, pizarrones, y ayudas audiovisuales. Las unidades alternativas incluyen el material para trabajos fuera de clase. No se debe animar su uso indiscriminado, pero es altamente recomendable su disponibilidad. También dichas unidades alternativas pueden incluir estudios previos, que son muy efectivos para la preparación de los dirigentes. La biblioteca de la iglesia es un centro de recursos muy importante y un lugar para almacenar y poner a disposición los materiales curriculares.
6. Conclusión A medida que se estudie el currículo surgen claramente algunas ideas. La organización de la educación cristiana en una iglesia es muy importante, pero sin el contenido curricular adecuado esa organización es de poca utilidad. Además, la provisión y el uso de materiales adecuados para el currículo es una tarea muy desafiante a la cual la iglesia debe prestar una atención muy especial.
Preguntas para el Repaso Después de leer el texto, responda a las siguientes preguntas: 1. ¿Qué significa “currículo”? 2. ¿En qué forma un árbol es una analogía del currículo? 3. ¿Cuál es el objetivo educativo de una iglesia? 4. ¿Cuál es el objetivo de la iglesia? 5. Mencione tres relaciones que deben considerarse en el alcance del currículo. 6. ¿Cuáles son los niveles de edades que deben ser considerados en el enfoque del currículo? 7. Ilustre la diferencia en profundidad de instrucción para los escolares y los adultos en relación con el amor redentor de Dios. 8. Declare brevemente la diferencia en necesidades entre los preescolares y los jóvenes. 9. Con relación al tema del amor redentor de Dios, ¿cuáles deben ser las metas para cada nivel de edad? 10. Mencione tres afirmaciones en cuanto a la naturaleza de la Biblia. 11. ¿Por qué es relevante la Biblia? 12. ¿Por qué tiene autoridad la Biblia? 13. ¿Qué responsabilidad personal tienen los maestros como intérpretes? 14. ¿Qué necesita conocer cada nivel de edad para comprender la Biblia como un todo? 15. Mencione tres libros indispensables para estudiar la Biblia. 16. Indique cinco cosas que necesita saber un nuevo creyente. 17. ¿Cuáles son cuatro áreas del contenido del currículo para todos los miembros de la iglesia? 18. Mencione seis doctrinas básicas que los creyentes necesitan estudiar.
19. ¿Qué es la “ética cristiana”? 20. ¿Por qué es importante la historia del cristianismo? 21. ¿Qué debe incluirse en el currículo para el desarrollo de las misiones? 22. Mencione tres problemas que surgen en el mantenimiento de un currículo adecuado. 23. Indique siete características de un buen currículo. 24. ¿Quién es responsable del mantenimiento de un currículo adecuado?
Temas de Discusión 1. ¿Qué se quiere significar por currículo? 2. ¿Por qué los objetivos o temas específicos a ser enseñados deben variar de acuerdo con cada nivel de edad? 3. ¿Por qué la Biblia es la fuente básica del currículo de educación cristiana? 4. ¿Cuál debe ser el contenido curricular para el desarrollo cristiano del miembro nuevo y para la capacitación de todos los miembros? 5. ¿Cuál debe ser el contenido curricular para el desarrollo cristiano o la capacitación de los líderes de la iglesia? 6. ¿Cuál debe ser el contenido curricular en un programa para el desarrollo de las misiones?
7. La Organización De La Iglesia Para La Educación Cristiana En el capítulo dos, punto cuatro, y en otras discusiones anteriores se indicó la responsabilidad que tiene la congregación por todo el programa o ministerios, incluyendo el de educación cristiana. Este capítulo procurará definir esta responsabilidad y sugerirá los medios para llevarla a cabo.
1. La Responsabilidad de la Congregación por la Educación Cristianaf65 A medida que la iglesia considera su tarea integral, se ve envuelta en muchas decisiones. Dichas decisiones tienen que ver con asuntos tales como: Gobernar la vida y el trabajo de la iglesia bajo el señorío de Cristo. Determinar los programas de la iglesia, los servicios de la misma y las reuniones administrativas. Establecer, si es necesario, la organización para guiar y/o coordinar los programas y servicios de la iglesia. Determinar el trabajo cooperativo de la iglesia en conjunto con otras iglesias. Establecer y mantener relaciones extemas apropiadas. Seleccionar al pastor, equipo pastoral y líderes voluntarios y asignarles sus responsabilidades. Proveer y distribuir los recursos para la tarea integral de la iglesia.
Dentro de este proceso de tomar decisiones, incluyendo el programa total de la iglesia, tiene responsabilidad específica en relación con el programa de educación cristiana.
Provisión de la forma y el personal para las organizaciones de educación cristiana La organización es importante en el trabajo de la iglesia, pero únicamente si es útil en llevar a cabo sus asignaciones básicas y en cumplir los fines deseados. La organización de la iglesia para su programa de educación cristiana debe: Reflejar la teología de la iglesia. Tener clara la autoridad congregacional. Agrupar las tareas similares. Procurar el logro de las metas deseadas.
Ser tan sencilla como sea posible. Ser flexible. Coordinar responsabilidad con autoridad. Delimitar responsabilidades. Establecer claramente los reglamentos.
La organización nunca es más importante que la gente. Debe ser dignificada y efectiva; sin embargo, la congregación debe recordar que la organización en sí misma no provee la motivación. Esta viene del trabajo del Espíritu Santo por medio de los dirigentes que forman una parte de la organización. Comúnmente, el primer paso en proveer y seleccionar el personal para el programa de educación cristiana es elegir una comisión de nombramientos que será responsable de recomendar a la iglesia el personal para todo su programa. Se ha hecho ya referencia al enfoque que la comisión de nombramientos en la búsqueda de los líderes de la iglesia debe utilizar. En su búsqueda, esta comisión tendrá ideales elevados, pero no fuera del alcance, pues nadie es perfecto. Dios usa personas para el cumplimiento de su trabajo y ellas son la clave para el éxito o fracaso de cualquier programa de la iglesia. Algunas de las cualidades que la comisión de nombramientos buscará en la gente que considere será que sean creyentes y miembros de la iglesia, que tengan una personalidad extrovertida, que sean activos en la vida de la iglesia y que muestren evidencias de consagración en el crecimiento cristiano. Razonablemente se espera que sean buenos contribuyentes, que sean leales a la iglesia, que cooperen y que sean testigos activos. Deben demostrar amor hacia la gente, disposición a aprender y disposición a visitar. Una preocupación de la comisión de nombramientos será la tarea de involucrar a todos los miembros de la iglesia en el trabajo, y un paso hacia ese fin es animar a la congregación a orar por los futuros obreros. La comisión de nombramientos estudiará la lista de miembros, buscando los posibles obreros. Comúnmente, seleccionará primero a los directores y los incluirá en la búsqueda de los demás obreros, siendo cuidadosa en dar atención individual y orientación adecuada a cada persona. Los pasos necesarios en este proceso serán la elección por la iglesia y la instalación pública, cuando sea posible. f66
2. La Comisión Coordinadora o el Concilio de la Iglesia Muchas iglesias usan una comisión coordinadora o un concilio de la iglesia, descargando sobre el mismo la mayor parte de la responsabilidad para la supervisión del programa de educación cristiana. Este concilio, como cuerpo representativo, sirve a la iglesia en la planificación, coordinación y evaluación del programa de educación cristiana.
Razones para tener un concilio de la iglesia El programa de educación cristiana de la iglesia tiene muchos aspectos que requieren coordinación. La mayoría de las iglesias han aceptado como tarea o función de las mismas la responsabilidad de descubrir a los no creyentes, ganarlos para Cristo, hacerlos parte de la comunidad, prepararlos para la membresía, enseñarles la Biblia y darles capacitación en evangelismo, misiones y mayordomía. Hay confusión cuando no hay coordinación de todas estas tareas, resultando en duplicación de esfuerzos y falta de comprensión. Los grupos con tareas distintas no reconocen la relación de sus trabajos con aquellos de los otros grupos y en cuanto al programa total de la iglesia. El grupo de diáconos de la iglesia no está comúnmente preparado para llevar a cabo la tarea de coordinación que es necesario hacer. De ese modo, el concilio o comisión coordinadora es la mejor manera para alcanzar este fin. El concilio tiene valores definidos. Creará un espíritu de cooperación entre los directores de las diferentes actividades y organizaciones. Ayudará a desarrollar un aprecio por cada fase del programa de educación cristiana de la iglesia y una mejor comprensión de su propósito en relación con el programa total. El concilio facilitará la tarea de definir los propósitos y metas para cada aspecto del trabajo y servirá para balancear el programa, centralizar todo sobre la misma iglesia y, a través de la misma, sobre Jesucristo. Además, esta comisión coordinadora de la iglesia es el mejor canal para evaluar los resultados y las actividades para unificar los esfuerzos de la iglesias.
Establecimiento del concilio de la iglesia La congregación puede resolver, por su propia decisión, la elección de un concilio o comisión coordinadora de la iglesia y usarlo para los propósitos indicados arriba. Comúnmente, el nombramiento para el concilio viene en virtud a una posición ya ocupada en el programa de la iglesia. Por ejemplo, en muchas iglesias los miembros del concilio son: el pastor, el director de educación cristiana, el director de la escuela dominical, el director del programa de desarrollo cristiano o programa de preparación de la iglesia, los directores de programas misioneros, el director del programa de música, el presidente del cuerpo de diáconos y el presidente de la comisión de mayordomía. Otros miembros ex oficio, que no tendrían que asistir a todas las reuniones pero que tendrían voz y voto cuando asistan, podrían ser el bibliotecario, los presidentes de comisiones, el moderador o presidente, el secretario y el tesorero. De ese modo, el liderazgo de los ministerios de la iglesia estaría incluido en un concilio o comisión coordinadora responsable ante la iglesia para el cumplimiento de las tareas asignadas a cada ministerio. f67
Lo común es que el pastor funcione como presidente del concilio. El secretario de la iglesia u otra persona designada por el concilio tomará nota de las recomendaciones para la iglesia y de las decisiones sobre asuntos para los cuales el concilio está autorizado para actuar. Cada iglesia definirá los deberes del concilio. Algunos de los deberes pueden ser: 1. Estudiar las necesidades y los problemas relacionados con el ministerio de educación cristiana de la iglesia. 2. Preparar un programa adecuado de educación cristiana para la aprobación por la iglesia y supervisar que esté siendo llevado a cabo por los responsables de cada aspecto de este programa y por las comisiones permanentes de la iglesia. 3. Definir claramente los propósitos y los deberes de cada organización y comisión de la iglesia para su aprobación por la congregación. 4. Formular las metas para el ministerio de educación cristiana de la iglesia. 5. Estudiar los mejores métodos de educación cristiana para alcanzar esas metas. 6. Recomendar a la iglesia los planes y los proyectos para mejorar y coordinar todos sus ministerios o programas. 7. Definir las responsabilidades para llevar a cabo los ministerios de la iglesia. 8. Preparar recomendaciones para la comisión de mayordomía de la iglesia en relación con las necesidades económicas del ministerio de educación cristiana. 9. Formular el calendario de actividades para el año y presentarlo a la iglesia.
El concilio o comisión coordinadora de la iglesia probablemente deba reunirse mensualmente o por lo menos trimestralmente, preferiblemente en una fecha y hora fijadas con anterioridad. Sin embargo, el pastor o el presidente del concilio puede citar a reuniones especiales cuando sea necesario. Es importante que estén presentes todos los miembros para tomar decisiones válidas. Una cosa importante que debe ser recordada es que el concilio no es un cuerpo gubernativo o legislativo. Su función es aconsejar y recomendar, pero no ejecutar sus decisiones, ni tampoco es un grupo administrativo. Cuando los programas y proyectos han sido aprobados por la congregación, el líder es responsable para ejecutarlos. El concilio es un cuerpo en el cual los líderes de la iglesia coordinan sus actividades y armonizan su trabajo.
Esta comisión coordinadora de la iglesia tiene varias relaciones. Se relaciona con la congregación, a la cual aconseja, recomienda e informa. Se relaciona con el pastor y con su equipo pastoral, ayudándole a proveer el liderazgo para el programa integral de la iglesia. Se relaciona con las organizaciones, ayudándoles a encontrar su lugar adecuado en la vida de la iglesia, sugiriendo y recomendando a la congregación los pasos a tomar por las diferentes organizaciones. Cada congregación decidirá si desea recibir informes directamente de las organizaciones o por medio del concilio de la iglesia. El concilio se relaciona con los oficiales de la iglesia porque la mayoría de ellos están en el concilio, capacitándolos para aprovechar el mismo como un canal de información y evaluación de su trabajo.f68
El concilio o la comisión coordinadora de la iglesia coordinando el programa de educación cristiana Uno de los primeros pasos en el trabajo del concilio de la iglesia es guiar a la congregación a formular sus propósitos y objetivos a largo alcance tanto como sus objetivos inmediatos. Con todo ello a mano, el concilio está en posición de asignar al programa de las organizaciones individuales el logro de esas metas y objetivos. De ese modo, el planeamiento comienza en el nivel del programa de cada organización con esa información a mano. La mejor clase de planeamiento incluye la participación de aquellos que deben implementar los planes. Esa modalidad crea un clima abierto, en el cual se expresan libremente las ideas y se hace posible la identificación personal con las metas de la iglesia. De este modo, se facilita el apoyo a los planes que son el resultado de esta consulta, y es más efectiva la comunicación en relación con los planes que se están formulando. Las organizaciones procurarán basar sus planes en los objetivos y metas de la iglesia. Los planes incluirán los detalles de organización, actividades y contenido del currículo. Permitirán también la flexibilidad. Cada organización formulará sus planes por escrito, los cuales incluirán la descripción de los recursos físicos, financieros y de personal para realizarlos.f69 Con los planes individuales de cada organización del programa de la iglesia a mano, la comisión coordinadora está capacitada para formular un plan integral. Puede determinar si los objetivos y metas generales de la congregación tienen probabilidad de ser cumplidos al llevar a cabo estos planes. También podrá solucionar los conflictos inevitables en cuanto a fechas y personal, y a su tiempo presentar por escrito a la congregación el plan integral en la forma de un calendario de actividades, presupuesto y una declaración en cuanto a las necesidades de personal.f70
Coordinación del trabajo del concilio de la iglesia Charles A. Tidwell hace esta afirmación en cuanto a la cooperación: La cooperación de las organizaciones para producir un programa armonioso de trabajo requiere coordinación. No se puede estar seguro al asumir que la coordinación se desarrollará sin los esfuerzos concentrados de aquellos que dirigen las organizaciones, cuyo trabajo tiene que ser unificado. El concilio de la iglesia y las organizaciones tienen que dar una atención debida a la coordinación.f71
Ya se ha visto cómo se aplica este proceso de coordinación a las etapas de planificación del trabajo, pero debe continuar como un proceso en la ejecución y concreción de los planes aprobados. Los problemas surgirán continuamente y aparecerán situaciones inesperadas. La comisión coordinadora de la iglesia debe considerar todos estos asuntos y encontrar una solución en consulta con los dirigentes de la organización. En ocasiones, será necesario hacer recomendaciones a la congregación.
Trabajo de evaluación del concilio de la iglesiaf72 Cada organización que desarrolla un trabajo en el ministerio de educación cristiana de la iglesia tendrá su propio sistema de evaluación. Además de esto, el concilio de la iglesia se ocupará en la evaluación del trabajo integral de educación cristiana. Como parte de los planes que presenta a la iglesia, el concilio planeará también la evaluación. Esto animará a los individuos y a las organizaciones a mantenerse dentro de aquello que la iglesia espera. La evaluación conducida por el concilio de la iglesia considerará el proceso de educación cristiana en cada organización y el resultado alcanzado. El concilio evaluará en forma cualitativa y objetiva a través del estudio de las estadísticas. También hará una evaluación subjetiva y cualitativa a través del estudio de la calidad del trabajo realizado. Al comunicar el resultado de la evaluación a la iglesia y a las organizaciones, acentuará los resultados positivos y hará sugestiones para lo que requiera mejoría. Los informes evaluatívos deben ser realizados en el tiempo oportuno, para permitir modificación en las actividades y mejoría en los resultados. Todo esto demanda una demostración ejemplar del amor y la paciencia semejantes a la de Cristo de parte de todos.
3. La Organización y el Calendario de Educación Cristiana La iglesia, como una comunión fraternal, es más un organismo que una organización. No es hierática; todos los miembros son iguales. Aun el pastor es
el primero entre otros iguales. Sin embargo, cuando la iglesia se prepara para el trabajo y el servicio, asume un modelo de organización con líneas de autoridad. Los miembros ocupan lugares iguales dentro de la comunión fraternal de la iglesia. También ocupan lugares de responsabilidad y autoridad dentro del modelo organizador porque la congregación se los delega.
Diseño o modelo organizador La organización aprobada por la iglesia debe ser adecuada para ayudarla a cumplir su trabajo, pero suficientemente sencilla para ser adecuada para la situación pequeña. La organización no debe hacer demandas innecesarias para lograr el liderazgo y mantenimiento. El organigrama siguiente, que es sólo una sugestión, puede ser útil para la comprensión de este proceso:
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Cada iglesia desarrollará su propio modelo de organización. Su modelo estará sujeto a expansión interna y diseñado para estimular el crecimiento. Note que el pastor es el responsable ante la congregación por el planeamiento y la coordinación del programa total de la iglesia. El puede trabajar sobre una base de persona apersona como líder; puede citar a reuniones de líderes para el planeamiento y la coordinación de su trabajo; o puede trabajar a través del concilio de la iglesia.
Cómo hacer el calendario del programa de educación cristiana La formulación de un calendario de actividades es una de las responsabilidades más importantes de la comisión coordinadora de la iglesia. El mismo constituye el centro del programa de la iglesia y todo lo que gira en torno al
mismo, y sirve como una guía para cada actividad, organización y comisión. Para que el calendario de actividades sea efectivo, todos los líderes deben participar en su elaboración. Tal calendario tiene valores definidos. Presenta un programa definido a seguir; ayuda a evitar los planes y trabajo a medio hacer. Contribuye a que las actividades importantes de la iglesia tengan las fechas más ventajosas y ayuda a que se haga el trabajo de la iglesia en paz y orden por el conocimiento de antemano de todos los planes. Un calendario de actividades bien hecho evita conflictos, duplicación y tensiones y asegura un programa balanceado. Además, brinda a los miembros de la iglesia una visión panorámica del programa general de la misma y ofrece un medio de promoción para todas las actividades de la iglesia. El calendario de actividades incluye, por un lado, los eventos regulares realizados cada semana, los cuales tienen un lugar bien conocido en el programa, y por otro lado, incluye las actividades especiales para las cuales es necesario coordinar las fechas. En el cuadro que sigue se presenta un ejemplo de las actividades semanales. Note que ese calendario intenta ubicar la mayoría de las actividades en domingo y en una sola noche de la semana, la cual será elegida por la congregación; muchos deciden por el miércoles. Se ha hecho esto debido a que estas son las oportunidades en que se cree que es más probable que se reúnan los miembros para participar en las actividades de la iglesia. Este calendario trata de brindar tiempo para las áreas básicas del programa de actividades de la iglesia, como la enseñanza bíblica, desarrollo cristiano o capacitación, desarrollo en las misiones, adoración y música.
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Para entender plenamente este calendario es menester hacer algunas observaciones. Las actividades de estudio bíblico asignadas el domingo por la mañana pueden incluir planes del trabajo de visitación y servicio. Note la capacitación sugerida para la tarde del domingo. Puede incluir cualquier combinación de capacitación de los miembros, capacitación de dirigentes y orientación de los nuevos miembros, lo cual enfrenta las necesidades de la
iglesia y puede ser adecuado con los horarios de aquellos que dirigen y participan. Observe el horario sugerido para el ensayo del coro. Algunas iglesias pueden preferir ensayar en otra noche de la semana para dedicarle más tiempo. En relación con la reunión o sesión administrativa, cada congregación descubre el mejor horario para esta actividad tan importante, la que está sugerida en este calendario es sólo una de varias posibilidades. Algunos pueden desear que se tenga el domingo por la tarde en relación con la celebración de la cena del Señor. Las reuniones del concilio, actividades recreativas, reuniones de diáconos y otras actividades semejantes, que incluyen a menos personas que a los miembros en total, pueden ser ubicadas en horarios que sean más convenientes para la mayoría de las personas involucradas. Antes que la comisión de coordinación trabaje sobre el calendario de actividades para todo el año, su secretario debe hecer copias en blanco de un calendario mensual grande, uno por cada mes del año. Cada miembro recibirá un juego completo para su propio uso en las sesiones de planificación. Para comenzar con el mismo, los integrantes anotarán en los calendarios en blanco las reuniones y actividades regulares de la iglesia, incluyendo las reuniones de los diferentes grupos, las de los dirigentes, de la comisión coordinadora y los días de visitación. También se anotarán las actividades denominacíonales. En algunas ocasiones, la asociación o convención sugerirá actividades para el desarrollo de la iglesia, tales como campañas evangelizadoras, estudios especiales, campamentos, actividades juveniles especiales y semana del hogar cristiano. Los responsables de la preparación del calendario tendrán que decidir en cuanto a cada una de las mismas. Debe dejarse tiempo para actividades planeadas para desarrollar y llevar adelante diferentes aspectos del programa de la iglesia local. Cuando haya conflictos de fechas, el concilio buscará las maneras de resolverlos. Las actividades deben ser planeadas y ubicadas de tal manera que cada una contribuya al éxito de la otra, y que todas juntas se dirijan hacia el logro de las metas de la iglesia. Luego de ser completada la preparación por la comisión coordinadora, el calendario de actividades debe ser duplicado de modo que cada miembro de la iglesia pueda tener una copia y pueda estudiarlo durante la presentación a la iglesia para su aprobación. Es posible que la comisión no sea capaz de incluir cada una de las actividades recomendadas por la asociación o denominación. Cuando el calendario está repleto, el programa total sufre las consecuencias. Por lo tanto, la comisión elegirá las actividades que pueden ser realizadas con éxito y que sean más beneficiosas para la iglesia. Una vez que el calendario ha sido aprobado por la iglesia, cada miembro debe recibir una copia, y el pastor
y los demás dirigentes se ocuparán de la tarea de realizar aquellas actividades de la mejor manera posible.f75
4. La Iglesia Pequeña La mayoría de las iglesias en las que estarán trabajando aquellos que estudien este material pueden ser iglesias pequeñas, con cien miembros o menos. Es necesario considerar las necesidades particulares de estas iglesias pequeñas. A pesar de que estas iglesias tengan menos miembros que otras, las necesidades de los miembros individuales son las mismas que las de los miembros de las iglesias grandes, pero llevadas a cabo por organizaciones desarrolladas de acuerdo con modelos simplificados. Aunque el número de líderes disponibles es menor en proporción, deben ser adecuados para las necesidades de liderazgo de la iglesia pequeña. En situaciones aisladas, estos líderes pueden tener menos capacitación formal que los líderes en las grandes iglesias metropolitanas. Esto pone una mayor responsabilidad sobre la congregación así como sobre las organizaciones denominacionales para la capacitación de estos líderes de la iglesia. La iglesia pequeña tiene comúnmente un espacio limitado. El uso máximo de ese espacio requiere un estudio cuidadoso, ingenio y una cantidad considerable de cooperación de parte de los miembros de la iglesia. Ese espacio disponible limitado probablemente estará acompañado de recursos financieros escasos en la iglesia pequeña. Sin embargo, el número pequeño de miembros no significa necesariamente que estos miembros sean de escasos recursos. Los recursos financieros escasos implican fondos limitados para la compra de materiales curriculares, ayudas didácticas y equipo. Por lo tanto, la iglesia debe determinar en oración sus prioridades reales en el uso del espacio y de sus recursos financieros.
Comprensión básica en relación con las iglesias pequeñas El liderazgo de las iglesias pequeñas debe tomar en cuenta las necesidades particulares de la iglesia y el hecho de que la tarea básica para su congregación es la misma que la de una iglesia grande. 1. La mayoría de las iglesias pequeñas, aun aquellas con menos de cien miembros, tienen por lo menos dos cultos de predicación por domingo. 2. Las limitaciones de tiempo son las mismas para las pequeñas como para las grandes congregaciones. Las iglesias pequeñas probablemente seguirán así, a menos que sus miembros estén dispuestos a invertir tiempo en las actividades de crecimiento espiritual.
3. La mayoría de los líderes en la iglesia pequeña tienen más de una posición de liderazgo. 4. La mayoría de las iglesias pequeñas tienen una asistencia a la escuela dominical fuera de proporción con el número de sus miembros; sin embargo, en muchos casos esta asistencia consiste principalmente de niños. Para romper el molde de la iglesia pequeña es necesario alcanzar a los padres de los niños. 5. Todas las facetas del programa deben ser llevadas a cabo en la iglesia pequeña; sin embargo, la responsabilidad por las mismas puede ser asignada por decisión de la iglesia a las personas, comisiones u organizaciones a las cuales no pertenecen normalmente estas tareas. De ese modo, la estructura organizadora de la iglesia pequeña puede ser mucho más sencilla que la de la iglesia grande, pero debe tener en cuenta el programa integral.
5. Conclusión El Nuevo Testamento no recomienda ninguna forma particular de organización para efectuar el trabajo de la iglesia. Lo que hace es especificar claramente cuáles son las tareas que la iglesia debe realizar. Sobre la base de las sugestiones de este capítulo y de la experiencia en la situción local, cada congregación es suficientemente capaz para determinar la organización que mejor se adapte al cumplimiento de sus propias necesidades.
Preguntas para el Repaso Después de leer el texto, responda a las siguientes preguntas: 1. Mencione cinco tareas de la iglesia que requieren decisiones. 2. Indique cinco cosas que debe hacer el ministerio educativo. 3. ¿Cómo se selecciona el personal para el ministerio educativo? 4. Mencione cinco cualidades deseadas en los líderes de la iglesia. 5. ¿Qué es el concibo o la comisión coordinadora de la iglesia? 6. ¿Quiénes integran, normalmente, el concilio o la comisión coordinadora de la iglesia? 7. Mencione cinco deberes del concilio o la comisión coordinadora 8. Indique tres relaciones del concilio de la iglesia y su responsabilidad hacia cada una. 9. ¿Cuál es el primer paso que debe tomar la comisión coordinadora de la iglesia? 10. ¿Qué detalles incluirán los planes organizativos?
11. ¿Cómo evalúa el concilio o la comisión coordinadora el trabajo de la iglesia? 12. Mencione cinco programas primordiales a los cuales brinda coordinación el concilio de la iglesia. 13. Señale tres valores del calendario de actividades de la iglesia. 14. ¿Por qué se programan en domingo y en una noche entre semana las actividades principales de la iglesia? 15. ¿Cuáles son las actividades que deben ser incluidas en el calendario de la iglesia? 16. ¿Qué similitudes hay entre iglesias pequeñas y grandes?
Temas de Discusión 1. ¿Quién es responsable por el programa de educación cristiana de la iglesia? 2. ¿Cómo se seleccionan, comúnmente, los líderes de la iglesia? 3. ¿Cuál es el propósito, constitución y trabajo del concilio o comisión coordinadora de la iglesia? 4. ¿Es práctico que una iglesia pequeña tenga un calendario de actividades? 5. ¿De qué manera difiere el trabajo de los diáconos de la tarea del concilio? 6. Explique la relación de los miembros y de los oficiales de una iglesia hacia la autoridad y responsabilidad dentro de la congregación de acuerdo con el organigrama de la misma.
8. El Papel Del Pastor En La Educación Cristiana Muchas iglesias hacen menos de lo que deben en el trabajo de educación cristiana porque el pastor tiene una comprensión inadecuada de su papel en el programa. La iglesia cuyo pastor entiende la importancia de su participación personal en este programa y tiene una comprensión real del plan, goza de una gran ventaja en el cumplimiento de esta parte de su mandato divino. El Nuevo Testamento utiliza varios términos para referirse al oficio de la iglesia que se ha desarrollado en lo que comúnmente se llama pastor o ministro. Pablo usó el término “obispo” (1 Tim. 3: 1; Tito. 1: 7) para referirse a este oficio. A pesar de que hoy la palabra ha adquirido una implicancia mayor, su uso original tenía un sentido más limitado. Pablo también se refirió a los “ancianos” (1 Tim. 4:14), los que posiblemente eran pastores, oficiales de los cuales se hablaba como predicadores (1 Tim. 2: 7; 2 Tim. 1:11). Aun cuando el término “apóstol” se limitaba a un grupo particular de personas, a veces se usaba la palabra con referencia al ministro de la iglesia (Ef. 4:11). Los pastores son llamados maestros (2 Tim. 1:11), evangelistas (2 Tim. 4: 5), pastores (Ef. 4:11) y ministros (2 Cor. 6: 4). En cada caso, esos hombres llamados por Dios a través del Espíritu Santo tenían una relación particular con la iglesia en la realización de la tarea de la misma.
1. Ministerio del Pastor El pastor “ministrará” a la congregación de muchas maneras, la mayoría de las cuales no son del interés de este capítulo. En su ministerio, el trasfondo original de la palabra “pastor” aparece en lugar central mientras él busca cuidar de las ovejas alimentándolas, guiándolas, conduciéndolas, protegiéndolas y guardándolas. Por supuesto, “alimentarlas” incluye la idea de desarrollo y crecimiento para el servicio. Cada creyente tiene una responsabilidad misterial y cada cristiano es pastor y oveja a la vez, pero el pastor tiene un lugar específico en pastorear la congregación. Además de su ministerio a los individuos en particular, el pastor guía a la iglesia en general a ocuparse en una comunión fraternal de adoración, proclamación, educación y servicio hacia otros. Por lo tanto, el ministerio pastoral incluye la proclamación del evangelio a los creyentes y a los incrédulos. Incluye la atención de los miembros de la iglesia y de otras personas en la comunidad.
En su ministerio pastoral, como una parte de su esfuerzo por guiar a la iglesia a llevar a cabo sus tareas, el pastor procurará elevar la calidad de la comunión fraternal de la iglesia. El éxito dependerá de crear un ambiente que conduzca a la comunión. Dicho ambiente incluye a los miembros regenerados y fieles para que se relacionen adecuadamente el uno con el otro. Incluye la preocupación por otros. Están involucrados ciertos aspectos del gobierno de la iglesia, tales como una comunicación adecuada dentro de la congregación, un pacto de la iglesia que sea actual, una constitución bien planeada, tener normas y procedimientos claros y el uso de la disciplina en sentido restaurador. Todo lo señalado indica la necesidad de una habilidad concreta de liderazgo de parte del pastor. Este don particular del ministerio pastoral es muy necesario cuando el pastor trabaja directamente y por medio de los oficiales de la iglesia para guiar a la congregación a la realización de sus funciones. El debe estar involucrado en la determinación del programa total de la iglesia. Su papel es vital en el desarrollo de la motivación adecuada y el interés para la tarea. El descubrimiento de líderes disponibles depende en gran medida del pastor. Frecuentemente, él es la herramienta del Espíritu Santo para lograr una participación responsable de parte de una gran cantidad de miembros de la iglesia para el trabajo de la misma.
2. Relación del Pastor con el Programa de Educación Cristiana Jesús fue un maestro; Pablo también lo fue. Pero hoy hay muchos pastores que no consideran que el programa de educación cristiana sea una parte esencial de su ministerio. Son predicadores y pastores, y consideran que estas funciones son los únicos aspectos importantes de su llamado. Están bloqueados en cuanto a los aspectos educativos de sus tareas y no se preparan para la misma. El ministro que no está capacitado para enseñar y supervisar el programa de educación cristiana de la iglesia es como un soldado que está entrenado para enfrentar solamente la mitad de las situaciones y oportunidades que posiblemente se le presentarán en el curso de una batalla. Tiene una posibilidad cierta de perder la batalla.
Razones por las cuales el pastor debe relacionarse con el programa de educación cristiana 1. Cuando el pastor no se involucra como un educador es posible y fácil que la iglesia produzca miembros espectadores en un auditorio en lugar de producir discípulos. Este fracaso de los miembros en convertirse en discípulos tiene resultados drásticos. 2. Cuando el pastor no participa hay comúnmente una falta notable de dirigentes y maestros laicos.
3. Si el pastor está involucrado, los padres se sienten más responsables por cumplir su parte en la educación cristiana de sus familias. 4. Si el pastor participa, es más probable que los que aceptan responsabilidades en la iglesia se brinden al máximo para la tarea.f76 5. El pastor debe mirar el trabajo educativo de la iglesia desde el punto de vista de lo que puede hacer por los miembros de la iglesia. Esta tarea es el canal básico por cuyo intermedio la iglesia realiza gran parte de su ministerio.
Cómo se relaciona el pastor con el programa de educación cristianaf77 El pastor se relaciona como director con el programa de educación cristiana. En la mayoría de las iglesias, él es el único obrero de tiempo completo o de medio tiempo, y debe ser el director del programa educativo de la iglesia. Las congregaciones que están experimentando gran crecimiento numérico son aquellas cuyos pastores han tenido la visión y disposición para dedicar tiempo y energía al programa educativo de la iglesia. Es difícil que una congregación avance más allá de la visión de su pastor. Un ministro que no entiende ni tiene interés en este aspecto del trabajo de la iglesia no tendrá un ministerio provechoso. Un aspecto importante de la relación del pastor con el programa de educación cristiana de la iglesia es la de brindar apoyo. El animará a los miembros manifestando un interés continuo en el programa integral de educación cristiana. También lo hará reconociéndolos por su trabajo en el programa y por el tiempo que brindan al mismo. También apoyará dando consejo, ayuda y cooperación a los directores de los diferentes ministerios del programa educativo. Además, el pastor es el promotor más efectivo del programa de educación cristiana. Tiene la gran ventaja de su posición como pastor y su participación en la vida total de la iglesia. Su preparación para el ministerio y sus oportunidades de mantenerse al tanto de los nuevos métodos lo capacitan para funcionar adecuadamente en este papel promocional. Al hacer el trabajo de promoción, debe ser cuidadoso. Es más fácil promover la asistencia que el trabajo bien hecho. El hace promoción por medio de la predicación cuando enseña como parte de la misma, cuando guía a la iglesia en una adoración efectiva y cuando hace énfasis en el crecimiento cristiano. En todo esto, el ministerio total del pastor es muy beneficiado. Se multiplican sus propios esfuerzos y Dios los bendice. Su relación con la gente se establece sobre una base firme y permanente. Su predicación es más efectiva y alcanza a más gente. Su ministerio se fortalece por el grupo mayor de colaboradores que
lo rodean, compartiendo su visión y gozo en el servicio de la iglesia. Sus oportunidades evangelizadoras se multiplican y extienden. Sus miembros están mejor preparados para servir. La iglesia de la cual es pastor se convierte en una congregación activa y fuerte, y una madre patrocinadora de obras misioneras y nuevas iglesias. Es probable que su ministerio produzca gozo y satisfacción, no sólo en la congregación sino también en su propio corazón.
3. Cómo Funciona el Pastor Dentro del Programa de Educación Cristiana Función en el concilio o comisión coordinadora de la iglesia A menos que la iglesia tenga un director de educación cristiana entre su personal, es bastante probable que el mismo pastor necesite funcionar como presidente del concilio de la iglesia. Esto lo involucra en el trabajo con los directores de las organizaciones que hacen efectivo el programa de la iglesia. También de esta forma el pastor participará en el planeamiento y en la coordinación del programa educativo de la iglesia. Le brinda al pastor la oportunidad de tomar la iniciativa para efectuar mejoras. A medida que participa en el concilio, necesitará mantener un criterio balanceado del programa integral de educación cristiana. Debe resistir el poner todo el énfasis en aquella parte en la cual él tiene el mayor interés personal. Debe ser cuidadoso en el desarrollo de la iniciativa de parte de otros dirigentes de la iglesia dentro del concilio.
En el programa de capacitación de la iglesiaf78 La mayoría de las iglesias tienen dificultad en el mantenimiento de un interés permanente en la capacitación de sus miembros. En este punto fundamental el pastor tiene un papel de apoyo muy importante. El, más que ningún otro, puede ser la clave para cultivar una actitud positiva hacia la capacitación dentro de la iglesia. El mismo debe tener esta actitud y estar plenamente convencido del valor de la capacitación para ser capaz de transmitirlo a la iglesia. El pastor puede proteger el lugar de las actividades de capacitación en el calendario de la iglesia. Puede guiar a la iglesia a tener su propio programa de capacitación. Algunas áreas en las cuales su liderazgo e influencia pueden ser notables son: 1. Proveer un liderazgo capacitado. El pastor debe trabajar cercanamente con la comisión de nombramientos de la iglesia en sus consultas y en el apoyo público de su trabajo.
2. Expandir y fortalecer la organización del programa de capacitación de la iglesia. 3. Reclutar a los miembros de la iglesia para la capacitación. 4. Proveer el espacio necesario para enfrentar las necesidades de capacitación. 5. A través del consejo personal ayudar a capacitar líderes a medida que ellos se desarrollan.
Esta participación en el programa de capacitación afecta en forma positiva el ministerio del pastor. Normalmente, mejora el culto del domingo a la mañana y el grupo de oración de entre semana. También ayudará a sus esfuerzos en evangelización proveyendo obreros personales y conservando más efectivamente los resultados. Todo el ministerio de la iglesia progresará en forma más efectiva cuando el pastor está involucrado en el programa de capacitación de la iglesia.
En el desarrollo del currículo El pastor es la figura clave en guiar a la iglesia a tener el debido aprecio en cuanto al valor del currículo. Pocos son los miembros de la iglesia que tienen un concepto adecuado de lo que es el currículo. Es muy probable que el pastor deba orientar al concilio de la iglesia en cuanto a los elementos y las necesidades de proveer un currículo, materiales y actividades adecuados. El es el único que posiblemente deba convencer a la congregación de que una parte importante del trabajo de la iglesia es tener un programa de educación digno y con la clase de currículo apropiado. Un buen currículo hará más para que la iglesia sea verdadera, fuerte y efectiva que ninguna otra cosa a la cual el pastor puede brindarle su atención. El pastor y su biblioteca son frecuentemente los mejores recursos en cuanto a materiales que tendrán muchos maestros para el desarrollo del contenido curricular. El pastor es también la mejor línea de conexión entre la iglesia y las fuentes denominacíonales que brindan recomendaciones en cuanto al currículo.
En visitación y evangelismof79 El pastor dará el ejemplo ganando almas en forma personal y predicando sermones evangelizadores que terminen con una invitación definida. El es también la figura clave en hacer que cada aspecto del programa educativo sea evangelizador. El pastor debe estar bien familiarizado con los pasos necesarios para alcanzar a la gente nueva en la escuela dominical y completamente dedicado a alcanzar un mayor número de incrédulos de cada nivel de edad. Debe saber cómo guiar
a los maestros y oficiales de enseñanza bíblica en la evangelización, porque este es el grupo que posiblemente más siga su ejemplo en visitación personal y ganancia de almas. Probablemente la hora que el pastor dedica a las reuniones de maestros y oficiales sea una de las más importantes que pasa con los miembros de la iglesia, además del culto de adoración. Los maestros y oficiales de la escuela dominical y los miembros deben ser adoctrinados en la evangelización. Ellos necesitan estar plenamente convencidos en cuanto a los resultados del pecado, la necesidad de cada persona del Salvador y del mismo plan de salvación. La escuela dominical debe estar dedicada a la tarea de alcanzar gente para Cristo de todas las edades, desde niños hasta ancianos. El pastor debe ser el primero en proteger a los niños de todos los que quieren forzarlos a una decisión de arrepentimiento. A la vez, él debe estar involucrado en cultos de decisión dentro de la escuela dominical, y debe animar a los maestros a hacer un trabajo personal con los niños. Los padres de los niños en la escuela dominical son excelentes miembros en perspectiva que deben ser alcanzados para la enseñanza bíblica y para una decisión personal de seguir a Cristo.
En la supervisión del programa de educación cristianaf80 Muchos líderes y obreros de educación cristiana en las iglesias bautistas reaccionan negativamente ante la palabra “supervisión”, teniendo en mente la imagen de una acción policial. Pero supervisión incluye las actividades y esfuerzos para incrementar la efectividad del programa de educación cristiana y es totalmente necesaria para la continuación y mejoría de esta parte de la vida de la iglesia. El pastor debe estar involucrado profundamente en la misma, La supervisión tiene que ver con la calidad del proceso. La calidad del producto depende de las metas que se han establecido y del currículo. También en esto el pastor estará constantemente activo con la comisión coordinadora y los dirigentes de la iglesia en cada aspecto de la educación cristiana, a fin de diagnosticar la situación educativa y descubrir lo que está bien y lo que está mal en los factores que entran en juego. Ellos deben relacionar las causas de ineficiencia y los resultados pobres con sus fuentes. Además, se buscarán y aplicarán los remedios para los mismos. La supervisión no consiste en espías administrativos y búsqueda de errores, sino más bien en el esfuerzo de la iglesia por hacer un mejor trabajo. La supervisión viene del nivel denominacional a través de recomendaciones y estudios para mejorar el nivel de trabajo. Se realiza mejor en el nivel de la iglesia local. La supervisión es necesaria debido a la importancia de la educación cristiana en la iglesia. Es necesaria por la demanda de líderes
capaces y preparados, los que estarán mejor equipados y serán más eficientes si reciben una guía sana y comprensiva por medio de la supervisión. No siempre es fácil hacer efectiva la supervisión. Muchas iglesias y pastores no la toman seriamente en cuenta porque no tienen una visión de los resultados ciertos y disponibles por medio de la educación cristiana. El uso generalizado de líderes sin preparación, sin ninguna costumbre de aceptar la supervisión, llega a complicar esta tarea. Esto convierte al pastor en la figura clave para introducir y mantener un sistema de supervisión como parte del programa de educación cristiana. Al comenzar este aspecto de su trabajo, el pastor puede, y probablemente debe, buscar ayuda de dirigentes denominacionales capacitados en la educación cristiana. El no debe trabajar en la supervisión en forma independiente, sino por medio de los líderes, especialmente a través de la comisión coordinadora de la iglesia. La idea de supervisión debe ser entendida por todos, a fin de que pueda haber una relación correcta entre los que supervisan y los que han de ser supervisados. La supervisión debe llevarse a cabo siempre con tacto y simpatía, y de acuerdo con un plan que todos aceptarán. La supervisión sólo puede tener éxito cuando el objetivo principal es hacer mejor el trabajo que está realizándose.
4. Conclusión Cada pastor desarrollará su propio papel de participación en el programa de educación cristiana de la iglesia. Los principios de este capítulo pueden ser de ayuda. El asunto importante es que él debe participar, estando involucrado profundamente como un participante activo. Su actividad en este sentido es costosa en términos de tiempo y esfuerzo, pero produce ricos dividendos.
Preguntas para el Repaso Después de leer el texto, responda a las siguientes preguntas: 1. ¿Sobre qué ministerio se enfoca la palabra “pastor”? 2. ¿Cómo trabaja un pastor, por medio de los oficiales de la iglesia, en la conducción de la misma? 3. ¿Qué precedente bíblico indica que el pastor es responsable de la educación cristiana? 4. Mencione cinco razones por las cuales el pastor debe relacionarse con el programa de educación cristiana. 5. ¿Cuál es el lugar del pastor en el programa de educación cristiana?
6. ¿Cómo se beneficia el ministerio integral del pastor por el programa educativo? 7. Como presidente del concilio o de la comisión coordinadora de la iglesia, ¿cuáles son las responsabilidades del pastor? 8. Mencione cinco responsabilidades del pastor en las actividades de desarrollo cristiano. 9. ¿Cuáles son las responsabilidades del pastor en el desarrollo del currículo? 10. Mencione cuatro actividades del pastor que ayudarán a desarrollar una iglesia evangelizadora. 11. ¿Qué significa supervisar el programa de educación cristiana? 12. ¿Dónde puede recibir ayuda el pastor para el mejoramiento de su programa de educación cristiana?
Temas de Discusión 1. ¿Qué se quiere decir por ministerio pastoral y cuál es la relación del pastor hacia el mismo? 2. ¿Cuál es el lugar del pastor en el programa de educación cristiana? 3. ¿Por qué es tan importante para el pastor ser el líder de un programa efectivo de desarrollo cristiano o capacitación de los miembros? 4. ¿Qué es lo que se requiere para que un programa de capacitación de la iglesia sea efectivo? 5. Explique la función del pastor como supervisor de la educación cristiana.
9. La Extensión A Través De La Educación Cristiana En La Iglesia La palabra “extensión” ha llegado a ser muy significativa en los círculos bautistas. Algunos grupos bautistas están completamente dedicados al principio que dice que una iglesia que está haciendo un buen trabajo inevitablemente crecerá. Otros grupos bautistas han llegado a sentir que calidad y cantidad no siempre son compatibles. Siguiendo este concepto erróneo, tienden a dedicar todos sus esfuerzos sobre las personas ya incluidas en la iglesia, haciendo más y más para cada vez menos gente. La iglesia se convierte de este modo en una isla sin impacto sobre el mundo que la rodea. Todas las indicaciones en el Nuevo Testamento señalan que Dios tiene la intención de que sus iglesias crezcan en número y en espíritu.
1. Bases para una Decisión de Alcanzar Más Personas Base Bíblica La Biblia enseña claramente que Dios elige y llama a su pueblo (Rom. 8:29; Ef. 1: 4), pero también brinda evidencias amplias de que su amor es hacia la humanidad y “no queriendo que ninguno perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento” (2 Ped. 3: 9). De la misma forma, el impacto de la Gran Comisión no deja dudas de que el evangelio debe ser predicado y la gente ganada de cada comunidad en el mundo. Por lo tanto, cada persona en cada comunidad es un miembro en perspectiva para una iglesia cristiana en ese lugar. Esta actitud está ejemplificada en las iglesias primitivas, comenzando con la de Jerusalén. El modelo de aquellas iglesias fue el de un crecimiento rápido y continuo. No hay ninguna indicación de que el deseo de Dios para la iglesia local sea menor que el que era en el siglo I.
Beneficios del crecimiento El crecimiento numérico en la iglesia, además de agradar a Dios, provee otros beneficios adicionales. Una iglesia en crecimiento es constantemente capaz de aumentar su organización para que más gente pueda desarrollarse en la vida cristiana y capacitarse para ganar a otros. Cuando una iglesia creciente da énfasis a la expansión, la calidad de su trabajo mejora casi inevitablemente. Las unidades adicionales hacen posible enfrentar las necesidades específicas con mayor exactitud. Además, brindan la oportunidad de dar lugar a más gente.
¿Quién puede decir cuándo una iglesia es suficientemente grande? ¿Es un objetivo deseable en la iglesia local el crecimiento continuo? La respuesta es sí. Por otro lado, cuando la iglesia crece lo suficiente como para llevar a cabo un programa integral dentro de la propia congregación, ha llegado el momento para que esa iglesia adopte un plan sistemático para canalizar regularmente algunos de sus recursos en la formación de nuevas obras misioneras que se convertirán en nuevas iglesias. De ese modo, el proceso de crecimiento es llevado a cabo con una extensión mayor.f81
2. Usos del Programa de Enseñanza Bíblica para Alcanzar a Otros Uno de los diversos ministerios de la iglesia, el de enseñanza bíblica, es el más adecuado para la extensión o alcanzar a otros por una serie de factores: 1. El programa de enseñanza bíblica tiene comúnmente dentro del mismo más personal de obreros elegidos por la iglesia que cualquier otra organización. 2. El programa de enseñanza bíblica está organizado sobre la base de los niveles de edades, capacitándolo para compro- meter en la extensión a personas que están preparadas en forma particular para alcanzar a individuos por niveles de edad. 3. La Biblia, que encomienda a la iglesia una actitud y disposición hacía el crecimiento, es el libro de texto del programa de enseñanza. 4. La organización de este programa brinda los mejores medios para canalizar la responsabilidad a los individuos.
La extensión o el alcanzar a otros por medio del programa de enseñanza bíblica incluye buscar e involucrar en el estudio de la Biblia a incrédulos, a creyentes que no son miembros de iglesia alguna, a miembros inactivos y a hijos de todas esas personas. Lamentablemente, muy pocas iglesias tienen hoy dentro de la matrícula del programa de enseñanza bíblica a un número sustancial de personas no creyentes. La extensión requiere la localización geográfica de estas personas. Demanda ir a sus hogares, negocios u otros lugares donde se pueda tomar contacto con ellas. Requiere testimonio personal, servicio y expresión del amor cristiano para hacerles comprender el amor de Dios y el de la iglesia por ellos. La extensión por medio del programa de enseñanza bíblica requiere una rededicación y entrega renovada de parte de los dirigentes y otros miembros de la iglesia.f82 Cualquier iglesia puede renovarse espiritualmente en algunos meses si el pastor guía a los oficiales, maestros y alumnos de la escuela dominical en la visitación casa por casa, invitando a la gente a venir a la casa de Dios para
adoración y estudio. Si el pastor de una iglesia, que está confrontada con un grupo pequeño en el estudio bíblico y la adoración, toma este paso en el uso de la escuela dominical, habrá nueva vida en la iglesia.
5. Principios de Crecimientof83 Principio de liderazgo La extensión hacia los miembros en perspectiva depende del promedio de obreros dedicados a la búsqueda de los mismos, y está directamente relacionada con el grado de consagración manifestado por los mismos. Pocas escuelas dominicales crecerán más allá de diez veces el número de obreros que trabajan en ellas. Esta proporción variará de acuerdo con los niveles de edades, dado que en los grupos de niños se necesitan más obreros, pero se mantendrá bastante constante en relación con toda la escuela. Hay pasos definidos que son necesarios para lograr una buena proporción entre obreros y miembros. El promedio actual puede determinarse con bastante precisión, y los que están interesados en el crecimiento de la iglesia decidirán dónde necesita mejorarse la proporción. En esta decisión está incluida la de cuántos miembros se quieren alcanzar, cuánto crecimiento se debe lograr. Estas decisiones abren el camino para la búsqueda de más obreros a fin de realizar la acción de extensión.
Principio de agrupamiento La extensión hacia los miembros en perspectiva se simplifica por medio de un plan gradual que agrupa sistemáticamente a los individuos de edades e intereses compatibles y permite la promoción anual de todos los grupos. Un plan como ese brinda un medio ambiente que facilita el crecimiento.
Principio de organización La extensión hacia los miembros en perspectiva muchas veces se acelera por la creación de nuevas unidades y por el mantenimiento de un balance en la provisión para cada nivel de edad. Una escuela dominical llega a su crecimiento máximo o punto de saturación de acuerdo con su modelo organizador. La razón es que las clases comúnmente llegan a su crecimiento máximo después de pocos meses de haber comenzado. Si el crecimiento ha de continuar es necesario comenzar regularmente con nuevas clases. Además, las clases o unidades nuevas normalmente crecen más rápidamen- te, alcanzan a más gente inconversa, proveen más obreros y estimulan el crecimiento y la mejoría de las clases existentes. Por lo tanto, para continuar su crecimiento, la
escuela dominical debe expandir constantemente su modelo organizador. Si es una escuela con clases debe progresar hasta convertirse en una escuela con departamentos, y de una escuela con departamentos pasar a una escuela con departamentos múltiples.
Principio del espacio y las facilidades La extensión hacia los miembros en perspectiva se ve estimulada por la expansión continua del espacio y las facilidades provistas para el estudio bíblico. Puede crecerse sin esto, pero es muy difícil mantener la expansión sin agregar espacio.
Principio de la participación de los alumnos El éxito en la extensión hacia los miembros en perspectiva se influye grandemente por el grado y la calidad del involucramíento en el estudio bíblico. Esto implica guiar a cada individuo en una búsqueda personal de la verdad y en compartir mutuamente lo que se descubre. Los maestros requieren capacitación en las técnicas de participación; un crecimiento sostenido está relacionado con un alto grado de participación. Esto se logra mejor dentro de una diferencia de edades lo más estrecha posible. Las clases o unidades dentro del programa de estudio se diseñan mejor cuando son pequeñas y se enfocan hacia un nivel de edad limitado. Proveen la mejor garantía de alcanzar a cada individuo por el cual la iglesia es responsable y para lograr el crecimiento mucho más rápidamente. También es más probable lograr una enseñanza efectiva en estas clases. La participación es necesaria para alcanzar a las necesidades espirituales individuales por medio del estudio bíblico. El compañerismo cristiano y la dedicación al servicio son resultados agregados a la participación de toda la matrícula de la escuela dominical.
Principio de visitación La extensión hacia los miembros en perspectiva está determinada grandemente por la cantidad y la calidad de las visitas que se hacen. La extensión hacia los perdidos y hacia los que no son miembros de la iglesia es una relación de persona a persona. Esto significa que el crecimiento consistente sólo será alcanzado cuando el número máximo de miembros de la iglesia participe en salir del edificio de la iglesia hacia los hogares de las personas que necesitan ser alcanzadas, para presentarles las demandas de Cristo y para invitarlas a participar en el estudio de la Biblia para su crecimiento cristiano y desarrollo personal.
4. Aplicación de los Principios de Crecimiento Para que los principios de crecimiento mencionados en el punto tres sean efectivos en alcanzar el crecimiento de la iglesia, deben ser aplicados. A partir de las experiencias de muchas iglesias bautistas en diversos lugares del mundo, se han desarrollado los siguientes cinco pasos prácticos: 1. Conozca sus posibilidades 2. Agrande su organización 3. Provea el espacio necesario 4. Busque y capacite a los obreros 5. Salga a buscar a la gente
Conozca sus posibilidades El primer paso en la búsqueda de alcanzar el crecimiento es determinar, en forma realista, cuál es el crecimiento que la iglesia puede esperar dentro del futuro previsible. Por supuesto, este es un proceso continuo. Pero al principio de un programa de extensión, la iglesia por medio de su organización de escuela dominical debe intentar determinar el número de personas que puede alcanzar, su nombre, su dirección, su edad y su condición espiritual. Sólo después de hacer esto la iglesia está en condiciones de moverse hacia adelante, dando los pasos en la aplicación de los principios de crecimiento. Hay disponibles muchos medios para lograr esta información: 1. Los nombres y direcciones de las personas que visitan los cultos de la iglesia; 2. Los nombres de amigos, proporcionados por los miembros; 3. Gente nueva en la ciudad.
Pero hay dos planes sistemáticos que han dado resultados excelentes dondequiera que se los ha aplicado. Uno de estos planes puede ser llamado el censo interno. En este plan, la iglesia hace una investigación de toda la familia de la persona relacionada con algún aspecto de la vida de la iglesia. Se logran mejores resultados usando una ficha separada para cada familia. La ficha debe brindar un lugar para el apellido y dirección de la familia (un modelo se presenta más adelante). Debe tener, además, una línea para cada miembro de la familia y para todas las otras personas relacionadas con esa familia (familiares políticos, sobrinos, nietos, en especial aquellos que viven en la misma dirección). En la línea para cada persona, se deja espacio para indicar sí la persona ha hecho o no alguna
decisión de fe en Cristo, si es miembro de iglesia y si está matriculada o no en los programas de la iglesia. El completar estas fichas y la tabulación de la información que se extrae de las mismas, proporciona inevitablemente un número grande de personas con las cuales la iglesia ya tiene algún tipo de contacto y hacia las cuales la iglesia tiene una responsabilidad definida. Relacionado con este censo interno está el censo comunitario de la iglesia. Dicho censo es posible casi en cualquier comunidad, si es hecho por obreros capacitados y con amor cristiano. Consiste en un sondeo casa por casa de cada hogar de la comunidad, a fin de lograr los nombres de todas las personas que no son miembros activos de otra iglesia cristiana. La información conseguida por este medio puede ser suplementada por un sondeo telefónico de la comunidad. Se pueden conseguir más nombres por una “cacería de bebés” constante, en la cual los miembros de la iglesia están alertas ante el nacimiento de nuevos niños en el vecindario y aprovechan esta oportunidad para visitar los hogares involucrados. Estas visitas expresan el interés de la iglesia, el amor de Cristo por los niñitos y por sus familias.
Ficha Para Censo Interno
La tabulación de todos los nombres conseguidos por medio del censo interno, del censo comunitario de la iglesia y los esfuerzos adicionales, debe ser hecha en fichas individuales que brinden una información adecuada como nombre, dirección, edad, número de teléfono (si es posible) y algo acerca de la situación del individuo. También deben llenarse fichas con los miembros de la iglesia que no están matriculados en el programa de estudio bíblico. Esas tarjetas, clasificadas por niveles de edades y agregadas a los totales de matriculación de
la escuela dominical, brindan un panorama del nivel de edad y de las metas totales de crecimiento para el cual la iglesia debe planear y trabajar. La información provista por este estudio da la base para ir movilizándose hacia los otros pasos en la aplicación de los principios de crecimiento.
Agrande su organización La responsabilidad de ampliar la organización, y se habla específicamente de la organización del programa de enseñanza bíblica, pertenece a un grupo de dirigentes. El pastor es responsable en la medida en que busca guiar a la iglesia en un programa de crecimiento, reconociendo que la escuela dominical es la mejor herramienta para este propósito. Los oficiales de la iglesia, incluyendo a los dirigentes del ministerio de enseñanza bíblica, son responsables por la preparación y la ejecución de los planes para agrandar la organización. La congregación es responsable en la medida en que trabaja por medio de los líderes que elige, en respuesta a las recomendaciones de la comisión coordinadora de la iglesia.f84 En el logro de la ampliación de la organización, los dirigentes de la escuela dominical estudiarán la organización: ¿Está funcionando sin problemas? ¿Sostiene la extensión y el crecimiento numérico? ¿Ha disminuido el crecimiento? ¿Permanecen estáticas algunas de las unidades en cuanto al crecimiento? ¿Provee la organización actual una base para la aplicación de los principios de crecimiento de la iglesia?
En forma específica, los líderes necesitarán determinar si la organización debe o no ser agrandada a fin de brindar el crecimiento. Esta decisión puede ser hecha comparando la organización actual y su potencialidad con los resultados del primer paso (conozca sus posibilidades), lo que muestra las posibilidades de crecer en relación con los miembros actuales de la escuela bíblica. Habiendo hecho esto, se puede proyectar una nueva y más grande organización. Por supuesto, es necesario reconocer y tratar el problema de la limitación de espacio. Es necesaria mucha fe en las bendiciones de Dios a fin de poder extenderse para el futuro. La organización no puede ser estática. Continuamente deben agregarse nuevas unidades. Esto implica un estudio constante y vigilancia en cuanto a nuevos obreros. Además de la expansión de la organización de la enseñanza bíblica, deben desarrollarse otros canales para alcanzar a personas nuevas y lograr el crecimiento. Los nuevos grupos de enseñanza bíblica en los hogares alcanzan
multitudes de personas incrédulas en comunidades suburbanas, antiguas, complejos de viviendas y comunidades rurales. Estos estudios bíblicos a domicilio son una de las mejores maneras de alcanzar a personas nuevas y eventualmente ganarlas. Hay que proveer obreros para estos estudios. En lugar de sobrecargar a los obreros existentes, deben conseguirse miembros adicionales en la iglesia que realicen el proyecto. Estos nuevos estudios bíblicos pueden servir tanto para alcanzar crecimiento en la iglesia madre como para el punto de partida de nuevas obras misioneras o nuevas iglesias. f85
Provea el espacio No se tratará aquí este tema porque se lo hará más ampliamente en el capítulo once.
Capacite a los obreros Este tema ya fue considerado en el capítulo cuatro. El lector debe volver a este capítulo para repasar los medios que la iglesia debe adoptar para preparar a sus obreros, a fin de enfrentar las necesidades actuales y expandirse hacia los nuevos.
Salga a buscar a la gente Muchas iglesias se mueven diligentemente en el cumplimiento de los primeros cuatro pasos aplicando los principios de crecimiento de la iglesia. Pero paran allí. No se cumple con ir a los hogares en el nombre de Cristo y se pierde todo el potencial de los primeros pasos. La clave del éxito en buscar a personas es el desarrollo del interés cristiano. El amor hacia personas que movió a Cristo con compasión cuando vio a las multitudes (Mat. 9:36), enviará a los miembros de la iglesia en su misión hacia afuera. El amor de Cristo, que le hizo mirar a la ciudad de Jerusalén y anhelar reunirlos “como la gallina junta sus polluelos debajo de sus alas” (Mat. 23:37), no permitirá que los creyentes en la congregación permanezcan ociosos mientras la gente alrededor de la iglesia está viviendo y muriendo en pecado. En este punto la función del pastor es crítica. Su liderazgo moral y participación personal, seguido por los diáconos y otros oficiales de la iglesia, desafiará a los miembros de la congregación a que lo sigan. Puede proyectarse un plan de visitación por medio del concilio de la iglesia, hacerlo parte del programa básico de la misma y promoverlo diligentemente por medio de toda la iglesia, pero especialmente a través de la escuela dominical. Los oficiales y maestros deben ser incluidos si la iglesia ha de crecer por medio de esta organización.
En este punto es esencial la capacitación para dar testimonio de puerta en puerta, si el programa de visitación ha de producir resultados. El énfasis sobre el testimonio diario de la vida de los miembros de la iglesia y el desarrollo de las capacidades de testimonio han de producir frutos. Los miembros deben tener la capacidad de compartir su testimonio. Ellos deben desarrollar en forma progresiva una comprensión y habilidad en el manejo de la Palabra de Dios. El interés por los perdidos y los creyentes que no pertenecen a ninguna iglesia será una bendición para ellos. Cada iglesia desarrollará el plan de visitación que mejor se adecue a sus necesidades. Los planes deben brindar una visitación constante, frecuente, continuada. Los miembros de la iglesia que no están matriculados en la escuela dominical deben también ser visitados. El Espíritu Santo bendecirá inevitable e invariablemente esta clase de salida en el nombre de Jesús. La visitación constante y consistente producirá crecimiento numérico y poder espiritual a la vez que dará un fruto evangelizador cuando es hecha una parte permanente e importante de la vida de la iglesia.
Preguntas para el Repaso Después de leer el texto, responda a las siguientes preguntas: 1. Mencione tres ejemplos bíblicos que dan evidencia de que los creyentes deben alcanzar a otros para Cristo. 2. Señale tres beneficios de la extensión. 3. Mencione tres razones por las cuales el programa de enseñanza bíblica es adecuado para la extensión. 4. ¿Qué implica la extensión por medio del programa de enseñanza bíblica? 5. Explique brevemente los seis principios del crecimiento. 6. Mencione cinco pasos prácticos que son esenciales para aplicar los principios del crecimiento. 7. Indique cinco fuentes de información en relación con la gente incrédula. 8. ¿Cómo debe determinarse la necesidad de agrandar la organización? 9. ¿Cómo se determina el crecimiento potencial? 10. ¿Cuál es el paso en la aplicación de los principios de crecimiento de la iglesia que es más frecuentemente descuidado? 11. Mencione cuatro requisitos de un programa activo de visitación.
Temas de Discusión 1. ¿Por qué es adecuado para la extensión el programa de enseñanza bíblica? 2. ¿Qué es lo que se requiere para que una iglesia continúe creciendo? 3. ¿Cuáles son los impedimentos para mantener un programa de visitación?
10. La Evangelización A Través De La Educación Cristiana En La Iglesia En el capítulo uno se establecieron las funciones esenciales de la iglesia, incluyendo la adoración, proclamación y evangelización, compañerismo y educación, ministerio y aplicación. En ese punto no se sugirió ningún orden de importancia; sin embargo, la mayoría de los creyentes estarían de acuerdo en que la iglesia debe testificar para sobrevivir. Algunos han señalado correctamente que la iglesia cristiana está siempre dentro de la última generación antes de su propia extinción. Por lo tanto, los programas de la iglesia deben, obviamente, incluir esfuerzos para ganar a toda la familia de cada creyente, y la extensión del testimonio evangelizador hacia otra gente que no ha oído o no ha respondido al evangelio. La Biblia presenta a la población de la tierra como un mundo rebelde, profundamente necesitado de Dios. La enseñanza directa de la Biblia y las actividades de Pablo y de otros cristianos primitivos estuvieron caracterizadas por un interés serio en el mandato de nuestro Señor de ir, hacer discípulos, bautizar y enseñar. Esas acciones expresan la mente de Dios y el corazón de su propósito. En la actualidad, el trabajo del Espíritu Santo es fortalecer a los creyentes en su misión de compartir las buenas nuevas.f86 En las iglesias de la actualidad hay muchas ideas equivocadas en cuanto a la evangelización.f87 Para algunos, la evangelización implica simplemente relatar, testificar, proclamar, pero sin ningún elemento de persuasión. El objeto de la evangelizacíón no es sencillamente hablar, sino ganar a personas para Jesucristo, asegurar una respuesta positiva al evangelio, ver el nuevo nacimiento del que escucha. Para algunos, la evangelización es una “campaña anual”. Las épocas de esfuerzos especiales para ganar a los perdidos son muy deseables, pero no son adecuadas en sí mismas para enfrentar las necesidades de las almas de todas las personas perdidas en la comunidad. Para algunos, la evangelización es un “día de decisión” en la escuela dominical. Este es un método cargado de grave peligro, y si se lo usa debe ser bajo la guía del pastor. El pastor debe estar seguro de que está siguiendo el liderazgo del Espíritu Santo. Para algunos, la evangelización es un “impulso para ganar almas en Semana Santa”. Al sugerir que este concepto es inadecuado, no implica que la iglesia no debe aprovechar el interés en esa época en la muerte y en la resurrección de
Cristo. Debe hacerlo, pero con mucho cuidado. La evangelización no debe estar limitada a esta época. Para muchos, la evangelización es el esfuerzo limitado de los “pocos fíeles”. Cada iglesia debe estar agradecida por sus miembros fíeles, pero la evangelización debe incluir a todos los miembros.
1. El Lugar de la Evangelización en el Programa de la Iglesia El Dr. J. N. Barnette escribió lo siguiente: La misión de la iglesia es alcanzar y salvar a los perdidos. Las almas de las personas deben ser salvadas del pecado por el poder de Cristo. El lugar de la evangelización en una iglesia neotestamentaria es fundamental. Las iglesias existen por la evangelización —el espíritu de la evangelización debe empapar todo el trabajo de la iglesia, así como la levadura influye en el pan. f88
Necesidad de un programa de evangelización Cada iglesia neotestamentaria tiene un programa evangelizador dado por Jesús y registrado en Mat. 28:18-20. Pero este programa debe ser reconocido como tal. J. N. Barnette señala en su libro, The Place of the Sunday School in Evangelism, que los programas de evangelización pequeños no son dignos de la Gran Comisión. Desarrollan iglesias pequeñas, hombres pequeños, cristianos pequeños con poca fe; ganan poca gente y hacen que las iglesias fracasen. Limitan a Cristo en su ministerio por medio de la iglesia.f89 Los programas pequeños no ganan a los perdidos. Cualquier iglesia que bautiza pocas personas, o ninguna en un año, necesita examinar su programa de evangelización. Cualquier clase de la escuela dominical que no gana ninguno para Cristo debe examinar su programa de evangelización. El Padre es glorificado en que se lleve fruto (Juan. 15: 8). Por lo tanto, la iglesia es una congregación de pecadores redimidos, los que deben ser capacitados, organizados y guiados hacía afuera a buscar a los perdidos en un programa de evangelización. Esto se hace en obediencia a Cristo y es para glorificar a Dios.
Características de un programa efectivo de evangelización Un programa efectivo de evangelización es un plan permanente, es decir, continuo. Es también un programa balanceado, que utiliza los cultos de adoración, el ministerio de enseñanza bíblica, las campañas evangelizadoras, los estudios bíblicos en obras misioneras, los tratados, la distribución de la Biblia y las comunicaciones masivas. Un programa efectivo de la iglesia en la evangelización es integral: busca alcanzar cada nivel de edad y a cada persona
dentro de una área considerada por la iglesia como su responsabilidad. Un programa efectivo de evangelización será conducido por el pastor. Las iglesias que buscan que la evangelización sea básica en la vida total de la congregación, estarán caracterizadas por algunos de los siguientes elementos: f90 1. Una escuela bíblica creciente, dedicada a una extensión continua y a una enseñanza de la Biblia clara y centrada en las personas 2. Visitación personal con fines evangelizadores 3. Uso constante de las oportunidades evangelizadoras presentadas en los cultos del domingo 4. Cultos evangelizadores especiales en los programas conjuntos de la escuela dominical 5. Campañas evangelizadoras periódicas 6. Períodos de estudio y esfuerzos especiales para ganar almas 7. Días especiales de esfuerzos evangelizadores 8. Uso de la Escuela Bíblica de Vacaciones en la evangelización de los niños y jovencitos que asisten regularmente a los cultos de la iglesia 9. Evangelizacíón por medio de nuevas obras misioneras y lugares de predicación 10. Predicación en las calles y otros lugares abiertos 11. Programas de evangelización personal 12. Liderazgo y supervisión pastoral (ninguna iglesia va delante de su pastor en esta tarea divina)
2. Relación del Programa de Enseñanza Bíblica con la Evangelización Muchas iglesias pasan año tras año sin tener un solo miembro agregado por el bautismo. Esto es serio aun para una sola iglesia, y mucho más para los cientos de iglesias que están en esta condición. La pregunta que surge es: ¿Qué están haciendo estas iglesias y sus pastores? Ciertamente, no están manifestando al mundo que ellos tienen la mente y el espíritu de Cristo. Quizá algunos de los miembros y algunas de las iglesias anhelan ganar las almas, pero no tienen un programa definido para hacerlo. Por lo tanto, terminan el año sin tener una cosecha de almas.f91 Esto no debe suceder. Ninguna iglesia debe pasar todo un año sin bautizar algunas personas para Cristo.
La tesis de este capítulo, y en particular de este punto es que la iglesia tiene una ventaja definida en la evangelización si hace un uso integral de su programa de enseñanza bíblica y de las organizaciones involucradas en este ministerio. Es posible que una iglesia pueda ser exitosa en la evangelización sin usar su escuela dominical; sin embargo, cualquier iglesia que usa integralmente las ventajas de la escuela dominical en la evangelización verá seguramente mayores resultados.
La escuela dominical como la agencia de evangelización más fructífera de la iglesia Los miembros de la escuela dominical y sus familias componen el campo evangelizador más grande de la iglesia. Cuando funciona como debe hacerlo, la escuela dominical tendrá en su matrícula a individuos inconversos pero que están familiarizados con el evangelio y pueden ser alcanzados por maestros, otros dirigentes y alumnos interesados en su salvación. En las iglesias que usan la escuela dominical en la evangelización, la mayoría de los miembros nuevos están matriculados en la misma. Los incrédulos pueden ser enrolados para el estudio de la Biblia. Muy pocos no creyentes que no están matriculados en la escuela dominical asistirán a los cultos de adoración, especialmente en las comunidades antiguas y establecidas.
Razones por las cuales la escuela dominical debe ser usada como la agencia principal para la evangelización en la iglesiaf92 El ministerio de enseñanza bíblica y la escuela dominical, que es su instrumento organizador principal, tienen ventajas específicas en la evangelización. 1. La escuela dominical tiene como su libro de texto la Biblia, que contiene la Palabra de vida. Por lo tanto, la actitud de los maestros y líderes hacia la Biblia es de suprema importancia. 2. La escuela dominical probablemente tiene a la mayoría de los ganadores de almas efectivos en su organización. Probablemente, la mayoría de ellos serán maestros y líderes. 3. La escuela dominical tiene, o puede tener, a los inconversos de la comunidad dentro de sus miembros y puede asignarse fácilmente la responsabilidad de ganarlos. 4. Dentro de la escuela dominical, la influencia combinada de los obreros, incluyendo al pastor, los directores y los maestros, puede ser dirigida en una manera organizada hacia la evangelización.
5. La enseñanza de la Palabra de Dios prepara los corazones de los niños, jóvenes y adultos que son inconversos para aceptar el evangelio.
La evangelización vitaliza el trabajo de la escuela dominicalf93 Al estar involucrada en el programa de evangelización de la iglesia, la escuela dominical estará libre del peligro de los esfuerzos superficiales. La evangelización brinda un propósito más profundo a la escuela dominical. Es interesante considerar que, cuando la escuela dominical participa en extensión en beneficio de la evangelización, los resultados garantizan el crecimiento continuo de la misma escuela dominical. La participación en la evangelización desarrollará ganadores de almas efectivos dentro del personal de la escuela dominical. Como resultado, esta organización se beneficia directamente al mismo tiempo que está participando en la edificación de una gran iglesia. Como parte del proceso, el pastor está más cercanamente relacionado con la escuela dominical. Esto es bueno. El dará el ejemplo en ganar almas en forma personal. La participación en el programa de evangelización de la escuela dominical hará que la predicación del pastor sea más efectiva. La enseñanza de la evangelización personal a los obreros de la escuela dominical los traerá hacía el pastor y cimentará los lazos de compañerismo dentro de la congregación. La importancia del trabajo personal fue enseñada por Jesús (Mat. 4:19 y 10:16; Luc. 15: 4-6; Juan. 20:21). Sus mandamientos fueron enfatízados por su ejemplo cuando trató con gente como la mujer samaritana, Zaqueo, Nicodemo, Felipe y el hombre que fue bajado a través del techo de la casa. Lucas hizo claro que los cristianos primitivos respondieron a su enseñanza y a su ejemplo en que ellos “iban por todas partes anunciando el evangelio” (Hech. 8: 4). Su diligencia fue recompensada por resultados que fueron registrados por miles. Desde ese tiempo, el trabajo personal ha sido el método usado por los ganadores de almas que tienen éxito. Cada maestro y oficial de la escuela dominical puede ser un ganador personal de almas. Muchos de ellos deben vencer algunos impedimentos tales como un sentimiento de indignidad, falsa modestia, ignorancia de la Biblia, temor de cometer errores, conciencia de pecado en sus vidas y el hábito de la dilación. Todos ellos pueden desarrollar hasta cierto punto las características de un ganador de almas efectivo: seguridad personal de la salvación, conciencia de que la gente está perdida, fe en Cristo como el único Salvador, práctica de la oración pública y privada y dependencia del Espíritu Santo en cuanto a los resultados. Estos factores, combinados con compasión hacia los perdidos, un
conocimiento activo de la Biblia y un espíritu de fidelidad y diligencia, producirán resultados. Los esfuerzos de individuos para ganar almas son muy efectivos. Ellos son canalizados por medio de un programa organizado bajo liderazgo responsable, mientras cada individuo estará buscando tiempo cada día para testificar a aquellos que le rodean. La escuela dominical y la misma iglesia se beneficiarán por tener estos esfuerzos utilizados en tiempos específicos y dirigidos hacia personas específicas. Deben seleccionarse días y horas en los cuales pueda participar el pastor. Deben brindarse preparación y materiales adecuados para ganar almas. Deben asignarse nombres definidos de miembros en perspectiva y requerirse informes. En cuanto sea posible, los nombres asignados a los individuos deben ser de personas por las cuales ellos serán responsables dentro de la estructura de la escuela dominical. Los propósitos consistentes de este programa organizado para ganar almas, serán: 1. Matricular y asistir a la escuela dominical 2. Aceptar a Cristo como Señor y Salvador 3. Bautizar y ser miembro de la iglesia 4. Crecimiento en la gracia y participación activa en ganar a otros para Cristo
Trabajo del director de la escuela dominical en la evangelización El director de la escuela dominical tiene también un papel clave en relacionar el trabajo de cada clase y departamento dentro de la escuela dominical con el programa de evangelización de la iglesia. El director estará promoviendo una visitación destinada a ganar almas. También estará entrenando a los obreros de la escuela dominical en la evangelización. En las reuniones periódicas de maestros y oficiales hará el mayor uso posible de tiempo para orar por los perdidos, para asignar inicialmente la tarea de evangelización personal y para recibir los informes de la visitación evangelizadora.
3. Aspectos Prácticos para el Uso del Programa de Enseñanza Bíblica en la Evangelización Grupos a ser evangelizados por medio de la escuela dominical Niños. La edad en la cual un niño puede hacer una decisión válida de aceptar a Cristo como su Señor y Salvador variará de acuerdo con la naturaleza del niño, el ambiente del cual proviene y la duración de su relación en la iglesia. Sin embargo, sería seguro decir que la mayoría de los niños en las edades superiores de este grupo, quizá a partir de los nueve años, pueden ser
considerados para el esfuerzo de buscar una decisión personal. Las iglesias deben buscar que estos niños sean ganados. La actitud apropiada de parte del pastor, en cuanto a ganarles, conducirá a los niños en esta dirección. Los maestros de niños de estas edades deben ser guiados a sentirse responsables por la salvación de los mismos. Jóvenes: Sin duda, el grupo de jóvenes de la iglesia puede y debe ser ganado para Cristo. Ellos responden al amor, la paciencia y la comprensión. Al ser ganados para Cristo, los jóvenes pueden y deben ser usados para alcanzar a otros de su edad. Estos jóvenes están sujetos a influencias por todos lados, muchas de ellas negativas. La oportunidad de ganarlos para Cristo es temporaria. La iglesia no puede estar limitada por la tradición y la falta de visión en el cumplimiento de su responsabilidad para alcanzar a los jóvenes para Cristo. Adultos. Todos los adultos que no han experimentado el nuevo nacimiento son posibilidades para evangelizarlos. Casi todas las iglesias necesitan brindar más clases para adultos y matricular a más ínconversos en la escuela dominical. Esto sólo puede hacerse cuando los miembros adultos de la congregación también se involucran en el estudio de la Biblia por medio de la iglesia. Los adultos responderán a iglesias capacitadas y bien preparadas. Dado que la mayoría de las sociedades consideran ahora como adultos a las personas de más de dieciocho años, éstas representan el número mayor de posibilidades para evangelizar. Su influencia en la comunidad y en el hogar es de tremendo valor. Al ganar a un adulto se establece un área de influencia que contacta a muchas otras personas.
Liderazgo y alistamientof94 El factor clave para guiar a la escuela dominical a ser usada en la evangelización es la cooperación entre el pastor y el director de la misma. Ellos deben estar unidos en un solo propósito. El pastor debe trabajar para dotar al director de la escuela dominical con la actitud y el espíritu de un ganador de almas. Juntos se propondrán ganar a niños, jóvenes y adultos para Cristo por medio de la escuela dominical. Cuando estas personas comienzan a orar activamente y juntas por la salvación de los perdidos por medio de la escuela dominical, comenzarán a ocurrir milagros de salvación. El pastor y el director necesitarán cooperar en el planeamiento de un programa efectivo para ganar almas. Tal planeamiento incluye un trabajo inteligente y concienzudo, sin dejar nada al azar. Incluye brindar a cada maestro una lista correcta de nombres de alumnos incrédulos, programar reuniones periódicas de planeamiento para todos los oficiales y maestros, orar en las mismas por los
que están perdidos y presentar informes sobre los esfuerzos realizados para ganar a los incrédulos. Los obreros de la escuela dominical cooperarán con este esfuerzo, mientras el pastor y el director se ponen bajo liderazgo del Espíritu Santo. El mismo Espíritu Santo estará obrando en los corazones de las personas inconversas. Los dirigentes de los departamentos y los maestros estarán involucrados en el uso de los materiales del currículo para la presentación de las demandas del evangelio. También para animar a los creyentes de las clases a testificar en el nombre de Cristo. Ellos están involucrados en hacer uso pleno del compañerismo íntimo de la clase y de grupos departamentales dentro de la escuela con fines evangelizadores. Todo el liderazgo de la escuela dominical cooperará en la asistencia a los cultos de predicación de la iglesia y en animar a estar presentes a los miembros inconversos de las clases. Habiéndose testificado previamente a estos incrédulos en el hogar y en la clase, los otros líderes y maestros pueden ir a los cultos de adoración orando para que el Espíritu Santo lleve este trabajo a sus frutos. El fruto será una respuesta positiva de parte de los individuos interesados cuando el pastor hace una invitación evangelizadora como parte de su sermón. El contacto constante entre el pastor y los maestros en relación con el progreso hacia una decisión de parte de las personas inconversas en forma individual, hará que el pastor esté alerta a las posibilidades de respuesta en cada culto.
El programa dominicalf95 En forma creciente las iglesias descubren que el programa de enseñanza bíblica por medio de la escuela dominical se lleva a cabo en forma más efectiva cuando está relacionado con uno de los cultos dominicales, normalmente el de la mañana. Con certeza esto es realidad con relación al uso de la escuela dominical en la evangelización. Esta puede ser la oportunidad evangelizadora cumbre de la iglesia. Los maestros deben ser animados a aprovechar plenamente el tiempo libre previo a las clases, la reunión de apertura, el tiempo de la lección, los pocos minutos después de la lección, el mismo tiempo del culto de adoración y aun el tiempo de compañerismo en el exterior del edificio después del culto. Todas estas son oportunidades para sembrar y cosechar a personas para Cristo. El programa del domingo por la mañana debe ser enfocado hacia la evangelización en la escuela dominical y en el culto de adoración. Debe darse énfasis a la evangelización en el sermón. La invitación debe convertirse en una parte normal del sermón relacionado con cada culto de adoración. Debe planearse la música con los inconversos en mente. Esta relación directa entre la escuela dominical y el culto de adoración es lógica y provechosa porque la
escuela dominical tiene entre sus miembros a aquellos que necesitan estar en el culto de adoración. El propósito de la escuela dominical es llevar a los incrédulos a estar bajo la influencia de la enseñanza y la predicación del evangelio. Los métodos de la escuela dominical dirigen a los alumnos a la plena participación en el culto de adoración. La escuela dominical puede y debe preparar a todos para ir al culto de adoración a fin de tomar allí las decisiones que deben.
Uso de la escuela dominical en las campanas evangelizadoraf96 La escuela dominical debe tener un papel activo en cada campaña evangelizadora planeada por la iglesia. Antes de la campaña, la escuela dominical debe tomar un nuevo censo interno y de la comunidad o actualizar los ya realizados, a fin de tener una lista adecuada de los miembros en perspectiva. Durante la semana previa a la campaña la escuela dominical debe estar participando en un programa intensivo de visitación de inconversos a fin de que estén presentes físicamente en las actividades dominicales en las cuales pueda testificárseles, en forma activa, en los contactos personales entre el maestro y los alumnos. Deben intensificarse también los momentos de oración en las reuniones de maestros y oficiales y reuniones de oración planeadas especialmente. Deben tenerse entrevistas con los padres de los niños y niñas que aún no han tomado una decisión. Una gran proporción del éxito de una campaña evangelizadora está en la preparación, y mucho de esta preparación depende de la escuela dominical. Durante la campaña evangelizadora, la escuela dominical estará colaborando para asegurar la mayor asistencia posible. Los domingos de la campaña deben ser días de mayor asistencia en la escuela dominical. Las asistencias máximas se promocionarán por medio de las clases. Se continuará con entrevistas personales con las personas nuevas, colaborando con el pastor y el evangelista visitante. En este aspecto es muy importante que participen todos los obreros y miembros de la escuela dominical. Se debe reconocer el hecho de que los frutos de todos estos esfuerzos dependen del Espíritu Santo. Los días y semanas que siguen a una serie evangelizadora comúnmente son épocas en que los obreros de la escuela dominical descansan después de los días vigorosos de actividad. Es un tiempo en el cual es muy importante una rigurosa conservación para asegurar los frutos del esfuerzo realizado. Los obreros continuarán trabajando con aquellos que asistieron pero que no fueron ganados durante la campaña evangelizadora, y buscarán matricular a otros que no fueron alcanzados ni siquiera para asistir. Es sumamente importante un compañerismo inmediato y cercano con todas las personas que hicieron decisión por Cristo. Inmediatamente deben ser matriculados en una clase de la
escuela dominical y deben darse los pasos para que ellos tengan un apoyo íntimo y personal de parte de los miembros de la iglesia. Estos nuevos creyentes deben ser incluidos inmediatamente en la vida integral de la iglesia, y la escuela dominical es un buen lugar para comenzar. Deben hacerse esfuerzos por medio de la escuela dominical para que estos nuevos creyentes asistan a las clases de preparación para nuevos miembros.
Otras oportunidades evangelizadoras en el programa de enseñanza bíblica Además de la escuela dominical, la iglesia deberá usar otras fases de su programa de enseñanza bíblica para evangelización. Hay enormes posibilidades evangelizadoras en la Escuela Bíblica de Vacaciones. En esta escuela se tienen hasta diez días consecutivos en los cuales se les presentan y explican a los niños las demandas de Cristo y de su amor. Por medio de la misma el pastor tiene una oportunidad maravillosa para estar con los niños personalmente día por día. Habrá muchos niños que asistirán a la Escuela Bíblica de Vacaciones que no podrían ser alcanzados por la escuela dominical. Las escuelas dominicales en obras misioneras y los programas de enseñanza bíblica en áreas suburbanas ofrecen también oportunidades para alcanzar a muchas personas que no son contactadas por el programa de enseñanza bíblica principal de la iglesia. Hay muchas comunidades sin testimonio cristiano, y la mayoría de los que habitan en las mismas no serán alcanzados por medio de la escuela dominical, que puede estar lejos geográfica y socialmente. La gente no irá muy lejos para asistir a la escuela dominical a menos que esté muy interesada. No se moverán fácilmente de su propia estructura social para hacerlo.f97
4. Conclusión Los esfuerzos y resultados que se presentaron aquí no vienen por sí mismos. No serán los resultados automáticos de tener más clases y más maestros. Sin embargo, Dios puede y quiere bendecir ricamente a la iglesia que hace un esfuerzo real para hacer participar a su pueblo, por medio del programa de educación cristiana, en la función de proclamación de la iglesia.
Preguntas para el Repaso Después de leer el texto, responda a las siguientes preguntas: 1. ¿Qué es lo que inevitablemente le sucede a una iglesia que no testifica? 2. Mencione cinco conceptos inadecuados de evangelización.
3. Señale cuatro características de un programa efectivo de evangelización. 4. Mencione ocho actividades de una iglesia evangelizadora. 5. Indique cuatro razones por las cuales la escuela dominical es una agencia efectiva para la evangelización. 6. ¿Cómo vitaliza la evangelización el trabajo de la escuela dominical? 7. ¿Cómo puede implementar la evangelización el director de la escuela dominical? 8. ¿A qué edad es seguro trabajar con los escolares en un esfuerzo para buscar una decisión personal? 9. ¿En qué actividades deben ocuparse el pastor y el director de la escuela dominical para una evangelización efectiva? 10. ¿Cómo se relaciona la escuela dominical con el culto de adoración del domingo en relación con la evangelización? 11. ¿Cómo puede ayudar la escuela dominical en la preparación de campañas evangelizadoras? 12. Además de la escuela dominical, ¿cuáles son las otras dos oportunidades evangelizadoras en el programa de enseñanza bíblica?
Temas de Discusión 1. ¿Cuál es un programa de evangelización adecuado para una iglesia? 2. ¿Cómo debe relacionarse el programa de enseñanza bíblica con la evangelización? 3. ¿Cuáles son las características de una agencia efectiva de evangelización? 4. ¿Cómo puede ser la escuela dominical una agencia efectiva de evangelización? 5. ¿Qué deben hacer el pastor y el director para que la escuela dominical sea una agencia evangelizadora? 6. ¿De qué manera los programas de enseñanza bíblica pueden fortalecer el culto de adoración de los domingos por la mañana? 7. ¿Cuáles son los programas básicos de la iglesia que se requieren para llevar a cabo la Gran Comisión?
11. — El Planeamientode Los Edificios Y Equipos De La Iglesia Rara La Educación Cristiana Jesús no mandó construir casas para las iglesias ni dejó sugerencias para los edificios de las mismas. El dejó muchas cosas para que se resolvieran por el sentido común de sus seguidores. El no brindó un programa ni órdenes detalladas para llevar a cabo sus planes. En lugar de eso, Jesús dio un programa inclusivo y comprensivo y dejó muchos detalles a la discreción de sus discípulos. A medida que se comenzaron a fundar iglesias y éstas crecieron, surgió la demanda de edificios. Los creyentes se unieron y comenzaron a decir: “Edifiquemos.” f98
1. La Importancia de un Edificio en la Educación Cristiana Entre los diversos factores que determinan la calidad y los resultados de la educación cristiana, es importante el edificio de la iglesia. Aunque debe tener el segundo puesto detrás del factor humano, su importancia no puede ser minimizada.
Importancia del edificio en el crecimiento Es posible que una iglesia llene su edificio hasta la capacidad normal y aún que exceda esta capacidad. Sin embargo, la iglesia no puede esperar mantener una asistencia dentro de estos límites en su edificio. La asistencia disminuirá. La casa puede llenarse de nuevo, pero nuevamente la asistencia disminuirá. Esto puede suceder repetidas veces; pero si la iglesia no provee espacio adicional en su edificio, las ocasiones en las cuales éste está lleno hasta exceder su capacidad serán menos frecuentes y más difíciles de alcanzar. f99 Las personas sencillamente resisten estar apiñadas en un espacio inadecuado semana tras semana. Esto es cierto con respecto a una clase de la escuela dominical. También es verdadero con el grupo en la hora de adoración en el templo. De modo que si una iglesia espera crecer en el número de personas que ha de alcanzar, debe considerar la provisión de más espacio. Esto ya fue señalado con el capítulo nueve al considerar los principios de crecimiento y expansión.
Importancia del edificio para la enseñanza y el desarrollo cristiano W. A. Harrell, quien trabajó por muchos años ayudando a los bautistas a planear mejores edificios para las iglesias, señaló que el ministerio de una iglesia puede sobrepasar su edificio. Dice. sin embargo, que si la iglesia no considera el edificio en sus ministerios, el programa total inevitablemente tomará la forma del edificio. La comparación que usa es la de verter agua en un recipiente. El agua asume la forma del recipiente, convirtiéndose en redonda o cuadrada de acuerdo con el mismo. El programa total de una iglesia bautista y de las personas que la componen no se adapta tan rápidamente a la forma del edificio, pero es influido inevitablemente por el edificio que ocupa para la educación cristiana.f100 Las aulas de clase adecuadas y bien planeadas son un factor importante en el logro de una enseñanza bíblica efectiva. Un buen maestro puede hacer un gran trabajo sin un aula adecuada y sin los equipos de enseñanza necesarios. El mismo maestro hará un trabajo mucho mejor en una buena aula y con los materiales didácticos suficientes.
2. Pasos para Planear una Construcción El asunto de la provisión de espacio para el crecimiento debe ser preocupación de todos los miembros de la iglesia. El tema surgirá inevitablemente si la iglesia se ocupa en un programa de alcanzar a personas nuevas. A medida que la congregación considera el tema de espacio adicional, surgirán muchas preguntas como: sí edificar más espacio educacional o un nuevo templo, sí buscar una nueva ubicación o edificar en la misma propiedad, y cuánto edificar. Estas preguntas no pueden ser respondidas satisfactoriamente sin una consideración adecuada, cuidadosa y en oración. Sí los miembros creen realmente que es necesario más espacio, la congregación debe votar su disposición a considerar un programa de expansión. Probablemente el primer paso en este programa debe ser el nombramiento de una comisión de planificación.
Comisión de planificación La comisión de planificación que nombra la congregación, puede ser el concilio o comisión coordinadora de la iglesia. Si otra comisión parece mejor, debe haber varios miembros del concilio de la iglesia en la comisión. El pastor y otros líderes del programa total de la iglesia deberán formar parte de la misma. La comisión estará encargada de hacer recomendaciones generales a la iglesia en cuanto al curso que puede ser seguido. Sus hallazgos pueden incluir
informes en cuanto a las necesidades del nuevo edificio y de más propiedades. Puede sugerir equipos y muebles para el espacio adicional a ser provisto. f101 En una iglesia grande esta comisión quizá necesitará ser suficientemente amplia como para dividirse en subcomisiones. Sea que se divida o trabaje unida, la comisión debe considerar las cuestiones de crecimiento futuro de la iglesia, ubicación y propiedad, programa educativo, programa musical, biblioteca, ayudas didácticas, compañerismo y recreación, y las finanzas para alcanzar algunas de las mejoras, modificaciones o nuevas construcciones que se necesitan. Durante el resto de este capítulo se considerarán algunos de estos asuntos. Luego de reunir la información, la comisión de planificación informará a la iglesia. Su informe puede sugerir solamente un mejor uso del equipo de que se dispone. Sin embargo, si la comisión de planificación recomendara, y la iglesia aceptara, que se construya espacio adicional, la congregación probablemente nombraría en este punto una comisión de edificación.
Comisión de edificación f102 La comisión de edificación debe ser nombrada en forma muy cuidadosa. Lo común es que sea grande, dependiendo del tamaño de la congregación. La comisión debe ser representativa, incluyendo a miembros de todas las organizaciones del programa que han de utilizar espacio en el nuevo edificio. Debe incluir tanto mujeres como hombres, jóvenes como adultos. Debe organizarse para los diferentes aspectos de su trabajo. Algunos de ellos son la preparación de los planos, financiamiento, aspectos legales, publicidad, construcción, compras, equipamiento y terrenos. En todas las etapas de su trabajo y en relación con las decisiones de envergadura, la comisión debe mantener un contacto estrecho con la congregación. La iglesia debe hacer todas las decisiones de envergadura, establecer todas las pautas, aprobar todos los planes y ser informada debidamente.
3. Estudio del Espacio Disponible En la mayoría de los casos, una iglesia puede hacer un uso más efectivo del espacio que el que está haciendo. Aun cuando la iglesia sienta que debe proveerse espacio adicional o aun un nuevo edificio, el crecimiento durante el intervalo de la construcción dependerá del uso máximo del espacio actual.
Uso múltiple del espacio El punto de presión con relación al espacio disponible para educación cristiana y cultos de adoración ocurre comúnmente en los domingos. Muchas iglesias
que no pueden construir espacio adicional en el momento han resuelto programar más de un culto de adoración el domingo a la mañana o a la noche. Algunas han provisto más de una escuela bíblica para alcanzar a todas las personas en el lugar que se dispone. Estas no son soluciones ideales, pero pueden ser usadas efectivamente con un máximo de cooperación y buena voluntad.
Uso de divisores La posibilidad de dividir un espacio grande en varías secciones puede lograrse por medio de puertas corredizas, cortinas o mamparas. Usando estos recursos, es posible subdividir para clases o grupos pequeños los lugares de reunión, salones de actos o el mismo templo. También aquí es necesario un alto grado de cooperación y buena voluntad. Pocos sugerirían que esta manera de subdividir el espacio es ideal, pero muchas iglesias lo usan para muy buenos propósitos.
f103
Uso de espacio auxiliar Los lugares para clases adicionales que deben ser iniciadas, pueden encontrarse con imaginación e iniciativa. Hay clases que pueden reunirse en la cocina, en el bautisterio, bajo la sombra de los árboles en el patio, o en lugares provisionales en las inmediaciones del edificio de la iglesia.
Se puede conseguir para la expansión otras propiedades adyacentes al edificio de la iglesia y que sean propiedad de miembros de la iglesia o simpatizantes. Podrían ser casas privadas, estacionamientos de vehículos, edificios escolares y bodegas o depósitos. Algunas iglesias han utilizado autobuses y automóviles como lugares de clases. Estos arreglos deben ser temporarios; no pueden servir por un período de tiempo muy extenso. Pero pueden ser usados para el crecimiento mientras se preparan facilidades permanentes.
4. Planeamiento para Edificación y Equipo En esta parte del capítulo el material está presentado y organizado asumiendo que la iglesia, a recomendación de su comisión de planificación, ha decidido proveer espacio adicional en su edificio actual o construir un nuevo edificio.
Planeamiento para terrenos adicionalesf104 Si la iglesia está ampliando su edificación actual, puede necesitar terrenos adicionales. Si se ha de construir un nuevo edificio en otra ubicación, tiene que conseguirse la propiedad. Estos lotes de terrenos deben estar ubicados donde está la gente, pues deben ser accesibles a la mayor cantidad de personas a las cuales se ha de servir. Idealmente, debe estar donde ha de pasar la mayoría de la gente. Aunque hay que tener en cuenta las limitaciones económicas de la congregación, debe hacerse el mayor esfuerzo para comprar lotes amplios para el desarrollo futuro de la iglesia. Si es posible evitarlo, ninguna iglesia debe emprender la construcción de un nuevo edificio en un lote pequeño. El edificio no debe cubrir todo el lote. Cada vez más las iglesias deben considerar la provisión de estacionamiento para vehículos. Además, es deseable que la iglesia tenga lugar para actividades recreativas y de compañerismo al aire libre. Todo esto requiere un espacio muy amplio. Al comprar la propiedad, debe tenerse cuidado en asegurarse que la misma esté libre de ocupantes. Hay muchas iglesias que lamentablemente tienen propiedades compradas para edificación que no pueden ser usadas porque están ocupadas por inquilinos que no pueden ser desalojados. Igualmente, debe tenerse cuidado en asegurarse que la iglesia tenga un título limpio de la propiedad y que las leyes zonales permitirán la construcción de un edificio para la iglesia en este lugar. Las expensas adicionales que haya que gastar para hacerlo así será dinero bien gastado.
Estudio de los aspectos legales de la edificación La oportunidad de la compra de una propiedad es un buen tiempo para que la congregación repase su propia situación legal con relación a su capacidad de
posesión. En algunas áreas, la propiedad de las iglesias bautistas es a través de una entidad legal de la denominación. Aunque esto es inevitable en algunas circunstancias, no es la situación más deseable para una iglesia bautista. Lo normal es que la congregación tenga un control absoluto sobre su propiedad tan pronto como ha pagado la misma. El arquitecto y el constructor deben ser buenas fuentes de información en relación con los códigos y las leyes municipales. La comisión de edificación deberá tener sumo cuidado para evitar recomendar cualquier plan de construcción que viole las disposiciones locales.
Planeamiento de las finanzas de la construcción Los planes para recaudar fondos para la compra de lotes de terreno y la construcción probablemente comenzarán mucho antes de nombrarse la comisión de edificación, y se necesitará continuar durante todo el período de construcción. Aun antes de la determinación de la cantidad exacta que se va a necesitar, la iglesia debe lanzar planes para comenzar a recaudar fondos. Las iglesias utilizan varias maneras para conseguir fondos para edificación. Algunas buscarán hacerlo por medio del presupuesto normal de la iglesia. Otras crearán fondos especiales. Si se han de recibir promesas, sería conveniente hacerlas efectivas por un período breve de tiempo, probablemente no más de seis meses, en lugar de un período largo. A medida que se acerca el tiempo de compra de la propiedad y mientras se completan los planes para un edificio, se hace más definida la cantidad exacta de dinero que se ha de necesitar. En ese momento será necesario que la iglesia determine la manera en que ha de emprender la financiación de toda su obligación. Al planificar la financiación de sus edificios, la iglesia deberá considerar el costo actual de la propiedad y el edificio (incluyendo los aranceles de arquitectura, estudios, seguros y trámites legales), el costo del fínanciamiento y del amoblamiento, y un fondo de reserva para gastos inesperados. La experiencia de muchas iglesias indicaría que este fondo de reserva no debe ser inferior al diez por ciento de la cantidad total de fondos que se necesitan, mejor sería un quince por ciento. Algunas iglesias prefieren reunir todo el dinero antes de comenzar. Otras irán juntando el dinero a medida que avanza la construcción. Algunas iglesias preferirán un programa financiero a largo plazo, pagando parte en efectivo y conseguir préstamos a fin de completar el programa de edificación de una sola vez. En este caso, es sabio tener por lo menos un tercio de la cantidad total a mano al comenzar la construcción. Debe hacerse todo el esfuerzo que sea posible para recaudar otro tercio mientras dura el proceso de edificación y se
ocupa el edificio. De ese modo, la iglesia solamente tendrá una deuda de un tercio de la cantidad total involucrada en la construcción. La congregación normalmente no tendrá dificultad en lograr un préstamo por esa cantidad.f105 Las fuentes para los créditos incluirán a los bancos, entidades financieras, préstamos en la misma iglesia, o préstamos denominacionales, que normalmente son más económicos. La iglesia haría bien en limitar la cantidad total de fondos tomados en préstamo a una suma de pago mensual que no exceda las ofrendas totales de la iglesia en una semana promedio.f106
Búsqueda de consejo Hay pocas iglesias y pocos arquitectos que están capacitados en el arte de diseñar el edificio de una iglesia bautista con sus necesidades particulares en cuanto a trabajo y adoración. Sería importante aconsejar a la iglesia que busque ayuda experimentada en los organismos denominacionales competentes. Algunas convenciones han desarrollado planes para diferentes tamaños de iglesias, y brindan también consejo individual a las iglesias locales. Los materiales provistos por las fuentes indicadas pueden proporcionar sugestiones útiles a los arquitectos que no tengan experiencia en relación con la construcción de aulas, bautisterios, palcos y plataformas de los templos. El tiempo que se use con el arquitecto en aclarar estos detalles será bien invertido.
Planificación del edificio Los valores que deben buscarse al planificar el edificio de una iglesia bautista son funcionales, culturales y espirituales. Los valores funcionales de un edificio son de gran importancia. El edificio debe proveer para las necesidades de todo el programa de la iglesia. Si no lo hace es un fracaso, no importa lo bien diseñado que esté, lo mucho que haya costado y lo hermoso que sea. Debe servir para la adoración, la predicación y para el programa educativo. Nunca debe ser necesario adaptar la escuela dominical o el programa de capacitación al edificio, sino que el edificio debe ser diseñado para estas actividades. f107 Por esta razón, debe darse consideración primordial al aspecto funcional del edificio. La comisión nunca debe aceptar ningún diseño exterior atractivo o una perspectiva agradable y luego buscar adaptar los planos que se adecuen al diseño exterior. Los planos deben hacerse primero.f108 En tanto como sea posible, la comisión de edificación y el arquitecto deben proyectar planos para una organización ideal. Deben planear también para el crecimiento futuro. Muchas iglesias han tenido la experiencia desilusionaste de descubrir que, con el entusiasmo de construir y pensar en cuanto al futuro, la organización actual creció hasta el punto de que el nuevo edificio era
demasiado pequeño cuando se finalizó y se comenzó a usar. Por supuesto, no sería sabio construir para cantidades que llevaría años alcanzarlas. Por otro lado, el nuevo edificio debe brindar oportunidades para el crecimiento. Deben considerarse las necesidades de cada grupo y de cada actividad. Los planes particulares para grupos y actividades específicas deben ser determinados por anticipado y planeados con tiempo. La experiencia de otras iglesias en la denominación, modificada por las expectativas de avance, harán posible que los que planifican determinen la proporción de espacio que será asignada a cada nivel de edad. Por ejemplo, si la iglesia está alcanzando a todas las personas miembros y sus niños, ellos quizá puedan pensar en la siguiente división del espacio educativo: Cuna y Preescolares (desde el nacimiento hasta los 6 años) Escolares (7 a 11 años) Jóvenes (12 a 26 años) Adultos (27 en adelante)
20% 25% 25% 30%
Por supuesto, estas cifras serán modificadas por el hecho de que muchas iglesias usarán espacio en el templo para algunas clases de adultos y jóvenes. Debe darse una consideración cuidadosa a detalles tales como el bautisterio, los pasillos, los baños, la biblioteca y las oficinas de la iglesia.
Planeamientos por unidades Muchas iglesias pequeñas tienen un gran crecimiento potencial. No pueden edificar de una vez para este potencial. Sin embargo, dada una visión adecuada, estas iglesias pueden ser capaces de planear para su crecimiento futuro en un período de muchos años y comenzar a edificar de acuerdo con este plan por unidades. Debe tenerse sumo cuidado en asegurarse de que cada sector de construcción planeada es una parte contribuyente del proyecto total. En un proyecto así nunca será necesario desmantelar alguna parte de la primera unidad de construcción para continuar con el próximo paso del proyecto total. Si la planificación está bien hecha, la iglesia joven debe ser capaz de adoptar un plan y no cambiarlo. Los planes formulados con rapidez y mal digeridos son la causa de dificultades y desilusiones sin fin. Esto es cierto, sea que la iglesia esté emprendiendo la construcción de la planta global o por etapas. Los cambios que se realizan, después que se han firmado los contratos, abren el camino para costos adicionales y para varias complicaciones y mal entendidos, los cuales llevan a malestares y frecuentes desastres. f109
Planeamiento del equipo Los que planean el edificio deben tener en cuenta, en el plan total, el equipamiento del edificio. Esto no sólo incluye los bancos o asientos, el mobiliario del púlpito y los instrumentos musicales para el auditorio, sino también sillas, mesas, pizarrones, gabinetes (preferentemente empotrados) y otros equipos para el programa de educación cristiana. Todo este equipo debe ser elegido y ubicado teniendo en mente las necesidades particulares de cada nivel de edad (por ejemplo: los pizarrones para los niños deben estar ubicados más bajos que para los adultos; las sillas deben ser diseñadas para el nivel de edad involucrado). Esta planificación cuidadosa de las necesidades de equipamiento es importante, sea que se trate de tener solamente el salón de la capilla o que sea una gran construcción con aulas separadas para cada nivel de edad. Por supuesto, siempre que sea posible, aun el edificio pequeño de una iglesia debe brindar lugar separado para las clases de preescolares y de escolares. Las clases de jóvenes y de adultos pueden reunirse en la capilla, usando cortinas divisorias y mamparas. Sin embargo, si hay sólo un lugar, debe dedicarse un rincón para los preescolares. Los preescolares que caminan deben tener un espacio limpio en el piso con libros, muñecas, bloques y otros materiales para la enseñanza bíblica y el desarrollo cristiano. Los preescolares mayores deben tener taburetes pequeños. Algunas iglesias usan la parte de los asientos de los bancos como mesas de trabajo, y los preescolares mayores se sientan en los taburetes para usar los bancos en esta manera. Sus necesidades podrían solucionarse mejor con una mesa pequeña, quizá una mesa plegable, a ser usada en un pasillo o rincón durante el programa de enseñanza bíblica. Teniendo una cuidadosa cooperación, aun es posible usar un grabador con los preescolares. Los escolares mayores hacen buen uso de tableros portátiles para el trabajo escrito en el programa de enseñanza. Cuando es posible en una iglesia con un solo salón, los jóvenes y los adultos pueden sentarse en un círculo o semicírculo. Es deseable que aun en una iglesia con un solo salón haya pizarrones y mapas. La planificación del presupuesto para un edificio debe incluir fondos para el equipamiento. De otro modo, es probable que la iglesia se vea forzada a proveer el equipo inadecuadamente y a último momento, lo cual dañará seriamente la utilidad del nuevo edificio.
5. Planeamiento para el Uso del Edificio y del Equipo La finalización y ocupación del nuevo edificio de la iglesia o la expansión del edificio que se tiene es normalmente una ocasión feliz para la iglesia. Dios,
habiendo ayudado a la iglesia a llegar a este punto, se agrada cuando las actividades relacionadas con la ocupación inicial del edificio son designadas para producir crecimiento numérico y espiritual.
Recordar el propósito de la nueva construcción Los dirigentes responsables de la dedicación y uso inicial del nuevo edificio de la iglesia harán bien en tener en mente su propósito. Por lo general, este propósito es alcanzar más personas para el estudio bíblico y la capacitación, experimentar mayores resultados evangelizadores, mejorar la calidad de la adoración y el servicio, e incrementar el potencial para las ofrendas y educación misioneras de la iglesia. Los dirigentes y la misma congregación deben recordarse continuamente que un nuevo edificio, por sí mismo, no alcanzará a más personas. El edificio de la iglesia es una herramienta a ser utilizada para cumplir los fines para los cuales existe la misma. El edificio ayuda y sin él la iglesia estaría seriamente limitada. Pero el edificio en sí no es suficiente. Los esfuerzos individuales y colectivos de los miembros de la iglesia, bendecidos por el Espíritu Santo, producirán estos resultados a medida que la congregación haga un buen uso de su edificio.
Planeamiento para su dedicación Debe aprovecharse plenamente el interés y la curiosidad acerca del nuevo edificio en la comunidad. Deben hacerse los mayores esfuerzos para invitar a incrédulos y a creyentes que no pertenecen a otra iglesia dentro de la comunidad para los cultos de dedicación, y procurar matricularlos en el estudio bíblico, a fin de que ellos puedan dedicar sus vidas por completo a Cristo. Debe planearse el culto de dedicación. Esta ocasión presenta una oportunidad espléndida para vencer los prejuicios en el barrio y para establecer una atmósfera amigable hacia la iglesia. La publicidad adecuada, el planeamiento cuidadoso y un espíritu real de apertura y genuina hospitalidad demostrarán el amor cristiano a la comunidad.
Aprovechamiento del nuevo edificio para la educación cristiana Cuando está bien avanzada la edificación, debe ampliarse la organización del programa de educación cristiana, para aprovechar plenamente el espacio adicional que se provee. Deben ponerse al día las listas de miembros en perspectiva. Deben buscarse y prepararse nuevos obreros. Para el tiempo de dedicación del nuevo edificio, ya debe estar funcionando la ampliación de la organización.
El mejoramiento en la calidad del espacio que se hace disponible, para el programa de educación cristiana de la iglesia, debe estar acompañado por esfuerzos definidos para mejorar la calidad de la enseñanza y el desarrollo cristiano que se provee. La expectativa es que la mejoría en la calidad producirá el tipo de crecimiento que hará que en un tiempo breve sean necesarios nuevos edificios.
Planeamiento para el pago del préstamo Mientras está todavía alto el entusiasmo relacionado con la dedicación y el uso de la nueva propiedad, debe hacerse el mayor esfuerzo posible para adelantar la liquidación de las obligaciones financieras que resultan de la construcción. La congregación debe recordar que las personas nuevas que están siendo alcanzadas, debido al nuevo edificio, tienen una parte normal y natural en el pago del mismo. Durante la construcción y los meses y años siguientes, la iglesia debe recordar que su responsabilidad en cuanto a la denominación y a las misiones mundiales no disminuirá cuando la iglesia está involucrada en un programa de construcción. Por el contrario, la congregación experimentará un impacto negativo si la iglesia da un paso atrás en sus compromisos misioneros a fin de proveer para sus necesidades de edificación. Esta experiencia integral puede requerir un nuevo nivel de dádiva sacrificante que será una gran bendición para todos los interesados.
Preguntas para el Repaso Después de leer el texto, responda a las siguientes preguntas: 1. ¿Cuál es la importancia de la construcción en el crecimiento? 2. ¿Cómo afecta el edificio a los programas de enseñanza y desarrollo cristiano? 3. ¿Cuáles son las funciones de la comisión de planificación? 4. ¿Cuál es el trabajo de la comisión de edificaciones? 5. ¿Cuáles son tres sugestiones para el logro de un uso más efectivo del espacio o de conseguir espacio adicional sin construir otros edificios? 6. ¿Qué factores hay que considerar para comprar lotes de terrenos? 7. ¿Quién debe tener el título de propiedad de una iglesia? 8. Mencione tres enfoques que las iglesias usan para recaudar fondos.
9. ¿Cuáles son los costos involucrados en la construcción de un edificio que deben ser incluidos en la planificación de las finanzas? 10. Si una iglesia consigue un préstamo, ¿qué parte del costo del edificio debe tenerse en efectivo y qué parte puede ser financiada? 11. ¿Qué limitaciones enfrenta el arquitecto común en la planificación del edificio de una iglesia? 12. ¿Qué es lo que se quiere decir por valores funcionales, culturales y espirituales en un plano para una iglesia? 13. En forma aproximada, ¿qué división de espacio debe hacerse para cada nivel de edad? 14. Si los fondos son limitados, ¿cómo puede proceder una iglesia para responder a sus necesidades de edificación? 15. ¿Qué debe ser recordado al seleccionar el equipo y el amoblamiento? 16. ¿Qué necesita recordar la congregación a medida que se construyen los nuevos edificios? 17. ¿De qué forma puede contribuir la dedicación de un edificio a la extensión evangelizadora? 18. ¿Es aconsejable que una iglesia disminuya su participación misionera mientras está en un programa de construcción? Explique.
Temas de Discusión 1. ¿De qué manera afecta el edificio al desarrollo del crecimiento de una iglesia? 2. ¿Cuáles son los pasos en la preparación de un edificio? 3. ¿Cuáles son los otros programas de la iglesia que necesitan ser mejorados durante un programa de edificación? 4. ¿Cuáles son las maneras posibles de financiar un programa de edificación? 5. ¿Qué cualidades debe buscar una iglesia en su arquitecto? 6. ¿Qué información necesita tener a mano una iglesia antes de adoptar un plan de construcción?
12. — Los Organismos Denominacionales Y El Programa De Educación Cristiana De La Iglesia En este capítulo final de este libro sobre educación cristiana, consideraremos la manera en que las iglesias bautistas se relacionan las unas con las otras en cuanto a la educación cristiana en la iglesia local. Las condiciones en la gran comunidad de iglesias bautistas son favorables para un trabajo efectivo en la educación cristiana. Las iglesias bautistas son numerosas y continúan creciendo. La vida de los bautistas impulsa a tener miembros educados en el conocimiento básico requerido para una vida cristiana efectiva. Las iglesias bautistas, como grupo, tienden a promover un ministerio capacitado. La estructura de la denominación bautista generalmente está diseñada para brindar los medios por los cuales las iglesias puedan ayudarse mutuamente en la provisión de una mejor educación cristiana.f110 Hay muy pocas iglesias bautistas que existen en una situación de aislamiento. Tienden a expandirse en la formación de otras iglesias que se relacionan las unas con las otras en compañerismo y trabajo. La naturaleza de esta relación es importante, en cuanto tiene un impacto sobre la educación cristiana.
1. Ventajas para la Educación Cristiana Cuando las Iglesias Bautistas Se Relacionan Unas con Otras Es obvio que las iglesias hermanas son capaces de lograr algunas cosas cuando trabajan juntas que son difíciles cuando trabajan en forma aislada. La ventaja que viene más rápidamente a la mente es la cooperación en esfuerzos de capacitación. Un grupo más grande hace posible una preparación mejor para necesidades específicas. Del mismo modo, los individuos con habilidades en áreas particulares de capacitación pueden ser compartidos de una iglesia a otra. Otra ventaja es la comunión fraternal entre aquellos que participan en diferentes aspectos de la educación misionera. Esta comunión fraternal se convierte en una experiencia rica y de gran valor cuando diferentes iglesias desarrollan contactos entre ellas. En estos contactos hay un compartir normal y natural que es altamente beneficioso. La visión misionera, el resultado de un conocimiento más claro de las necesidades locales específicas para extensión y capacitación misionera, es un producto de la asociación de las iglesias. Esta asociación ayuda a vencer el sentido de aislamiento que puede surgir en la congregación local. Tiende a volver los ojos de los miembros hacia afuera, a sus iglesias hermanas, y más allá de ellas, al mundo perdido.
El contacto permanente con miembros de las otras iglesias tiende a ampliar la visión también para el trabajo local de la iglesia bautista. La familiaridad con las nuevas aventuras y éxitos de las iglesias hermanas extiende la visión de la congregación. Las iglesias más grandes y desarrolladas reciben el beneficio de compartir sus conocimientos y habilidades avanzadas con las congregaciones hermanas más jóvenes y pequeñas. Por otro lado, las iglesias menos desarrolladas se benefician directamente al ver el programa y el plan de trabajo de las iglesias más grandes.
2. Función de Organismos Denominacíonales para Reforzar la Educación Cristiana En forma inevitable, los grupos de iglesias bautistas tienden a relacionarse los unos con los otros por medio de alguna clase de asociación, unión o convención. Este cuerpo bautista en funcionamiento tiene el potencial de ser una gran agencia misionera. En este capítulo nos referiremos al mismo como una asociación. En cuerpos bautistas más desarrollados, las congregaciones individuales se relacionarán probablemente con una asociación local y también con una unión o convención que abarque a todas las iglesias bautistas en un país. La asociación tiene como propósito expresar las esperanzas y llevar a cabo los deseos de las iglesias. La asociación vive y funciona cerca de la vida de las iglesias. Cualquier convención o unión que es demasiado grande para poder hacerlo así debería estar subdividida geográficamente en asociaciones. Una asociación debe ser suficientemente pequeña como para permitir la representación de las iglesias más distantes para compañerismo y trabajo. En la asociación que funciona, las iglesias se ayudan mutuamente a desarrollar el trabajo en cada iglesia, proveyendo los medios para compartir con las demás lo mejor que una iglesia tiene.f111 La organización interna de la asociación variará de acuerdo con las necesidades y los deseos de las iglesias. Normalmente, le será asignada a esta organización, por un lado, llevar a cabo los deseos combinados de las iglesias. Funcionará también como el canal por medio del cual las iglesias ayudarán a solucionar las necesidades de los demás. Los individuos dentro de las iglesias servirán como personal de promoción para llevar a cabo estas tareas.
Compartir información La información adecuada en cuanto a la educación cristiana llevada a cabo por el grupo de iglesias brinda la base para decisiones sanas, al hacer los planes a nivel local y en la formación de programas de trabajo recomendados para cada
iglesia en particular. Un informe anual de la iglesia a la asociación es el mejor medio para conseguir tal información. Algunos de los datos acerca de la educación cristiana que serían de valor son: Cantidad de escuelas dominicales Matrícula de la escuela dominical al final del período Asistencia promedio de la escuela dominical Cantidad de maestros y oficiales que trabajan en la escuela dominical Matrícula y asistencia de la Escuela Bíblica de Vacaciones Extensión y naturaleza del desarrollo cristiano ofrecido por la iglesia durante el año Cantidad de personas matriculadas y que completaron esa capacitación Número de organizaciones misioneras Matrícula de esas organizaciones
La renuencia de parte de los dirigentes locales para brindar esta clase de estadísticas puede ser vencida por una persuasión amable y persistente, y por la discusión de los factores involucrados. Las iglesias individuales y los grupos de iglesias pueden hacer planes más efectivos para mejoras y extensión sobre la base de un conocimiento definido de la situación actual. Frecuentemente, la recolección de la información por medio de la asociación tiende a animar a las iglesias locales que, de otra manera, pueden ser lentas en tomar este paso. Frecuentemente, la asociación local puede ayudar a las iglesias brindando la información, en cuanto a población y otras estadísticas en relación con la zona, que son útiles para las iglesias al proyectar su trabajo.
Planear en conjunto Dado que algunas actividades en varias partes de la vida de educación cristiana de la iglesia se hacen mejor en conjunto con otras iglesias, la asociación tiene una función útil al capacitar a las congregaciones para hacer juntas los planes. Estos planes toman comúnmente la forma de un calendario completo de actividades. El planeamiento en conjunto a nivel asociacional brinda una ayuda real a la iglesia local al hacer sus planes individuales; de este modo, los planes tienden a proyectarse por lo menos con un año de anticipación, para coordinar mejor y poder incluirlo en la publicación de un calendario de actividades. Muchas iglesias todavía no han llegado a tener un programa semanal bien
planeado. A pesar de que la completa uniformidad entre las iglesias sobre cosas tales como un programa semanal o anual no es necesariamente deseable, una guía cuidadosa y práctica reforzaría el programa global de la iglesia local. Los planes que se desarrollen en esta manera necesitarán respetar el derecho de la iglesia a proyectar su propio modelo de vida de la misma. Sin embargo, los planes forjados en conjunto en la asociación brindan la oportunidad de muchas actividades en las cuales las iglesias participan juntas, a la vez que sugerirán actividades individuales a las congregaciones locales.
Provisión de capacitación La participación de la asociación en la provisión de oportunidades de desarrollo cristiano dentro de la iglesia no exime a la congregación local de su responsabilidad en este aspecto. En lugar de ello, el esfuerzo de la asociación suplementa lo realizado en la iglesia local. Los medios por los cuales la asociación puede ayudar en el desarrollo cristiano son: 1. Conferencias planeadas por la asociación para el desarrollo cristiano de miembros individuales y líderes de las iglesias 2. La disponibilidad para la iglesia local de personal preparado para el desarrollo cristiano o la capacitación dentro del programa de la iglesia local 3. Impulso de la asociación a la iglesia local en la capacitación de su liderazgo de educación cristiana 4. Pautas para el establecimiento de la organización para el desarrollo cristiano dentro de la iglesia local 5. Disponibilidad de programas e información de parte de la asociación, convención o unión 6. Énfasis constante sobre mayordomía en todas las iglesias de la asociación e impulso a las iglesias para enseñar mayordomía bíblica y conducir a los miembros a crecer en ella 7. Los campamentos y retiros proporcionan resultados excelentes de comunión fraternal y desarrollo cristiano 8. Énfasis sobre la mejoría en el desarrollo cristiano para la enseñanza en la iglesia local
Esta lista es evidencia del gran potencial que tiene la asociación para ayudar a las iglesias locales en el desarrollo cristiano.
Materiales curriculares Hay muy pocas iglesias que pueden tener el talento disponible, el conocimiento técnico y los recursos financieros que son necesarios para proveer sus propios materiales curriculares. A menos que la asociación, unión o convención sea suficientemente fuerte, probablemente faltarán estos elementos; sin embargo, la asociación o cuerpo nacional es más capaz que la iglesia local para buscar materiales adecuados o para colaborar con otras entidades bautistas similares a fin de producirlos. La producción o provisión y la tarea de hacerlos disponibles a las iglesias locales es uno de los servicios espléndidos que puede realizar la asociación. En relación con la provisión de materiales curriculares, está la tarea de brindar acceso a otros materiales que ayudarán al crecimiento cristiano. Frecuentemente, es muy difícil que las iglesias provean para sí mismas libros, revistas, materiales audiovisuales, y de este modo trabajan sin ellos. Una de las funciones claras que puede realizar la asociación, unión o convención es la provisión de una librería cristiana accesible a las iglesias.
Expansión misionera La asociación llega a las iglesias individuales como sierva y una fuente de información misionera, promoviendo el trabajo de educación misionera en las iglesias y sirviendo como una agencia que combine estas actividades. Estas funciones asociacionales ayudan a las organizaciones dentro de la iglesia que están participando en la educación misionera. La asociación asume un papel específico en la expansión misionera al seleccionar los lugares para el establecimiento de nuevas obras misioneras y al coordinar las actividades de las iglesias, cuando ellas están mirando más allá de los límites geográficos de la asociación.
Planificación Muchas iglesias, especialmente nuevas y pequeñas, tienen que depender de la denominación para ayuda en la planificación. La asociación puede brindar pautas para la iglesia joven en la planificación de su trabajo de educación cristiana. Se puede hacer disponible la información y dirección para la planificación de edificios. Puede brindar su ayuda valiosa en la iglesia para planear su presupuesto. Tal ayuda no sólo servirá para planear el presupuesto de las necesidades locales, sino que también ayudará a que la congregación se dé cuenta de su responsabilidad en apoyar el programa total de las iglesias en la zona en los esfuerzos financieros cooperativos que siguen dichas iglesias.
Promoción Las metas, programa y plan de trabajo de la asociación están determinados por las mismas iglesias y deben surgir de sus necesidades e intereses. También, el cuerpo denominacíonal asume correctamente alguna responsabilidad en impulsar a las iglesias individuales en el establecimiento de metas dignas y en el mantenimiento del trabajo que logrará estas metas. La asociación cumple con esta última función por medio de: 1. Visitas de parte de sus líderes a las iglesias 2. La publicación de boletines y calendarios de actividades 3. Reuniones zonales para impulsar programas y para capacitación 4. Proyectos pilotos que demostrarán la probabilidad de programas ventajosos de trabajo 5. Publicidad de logros destacados de parte de iglesias dentro de la asociación y aquellas en las asociaciones vecinas
Esta función de promoción demuestra que el cuerpo denominacional no es sólo el conjunto de iglesias locales, sino que asume también una identidad propia y una responsabilidad hacia cada una de las iglesias que la componen.
3. Fuentes de Ayuda Locales y Mundiales para la Educación Cristiana La mayoría de las iglesias bautistas tienen, además de su propia afiliación denominacional, una relación secundaria con alguna clase de agrupación de iglesias por zona, para el beneficio mutuo de todos los interesados. A pesar de que esta organización zonal tiene menos contacto con la iglesia individual, es una fuente de ayuda, información y beneficio para todo el programa de las iglesias individuales en el área.
Alianza Mundial Bautista Aunque muy remota en cuanto a la iglesia bautista local, pero un factor positivo como fuente mundial de ayuda, está la Alianza Mundial Bautista. Esta Alianza es un compañerismo fraternal que se compone de todas las organizaciones nacionales o regionales de bautistas que desean cooperar con la misma. Está establecida para diseminar información, brindar la base para una comunión mundial y funcionar, cuando es necesario, como un medio para la expresión de una opinión concertada.
En realidad, la Alianza es una organización muy limitada. Puede ser llamada Compañerismo Mundial Bautista. Sus reuniones, desde su formación en 1905, han sido llamadas congresos. El interés generado en la Alianza Mundial Bautista en cuanto a la educación cristiana culminó en la gran asistencia a las conferencias sobre enseñanza bíblica y trabajo de la escuela dominical en el Congreso de 1965. Como resultado, el Comité Ejecutivo de la Alianza formó la Comisión sobre Estudio Bíblico y Capacitación. Desde su formación, esta Comisión ha tenido varias reuniones. Se han llevado a cabo investigaciones sobre educación cristiana y actividades promocionales en los grupos bautistas de todo el mundo. A pesar de que esta comisión tiene un potencial real para ayudar en áreas necesitadas, su impacto no ha sido sentido en forma particular hasta ahora.
Preguntas para el Repaso Después de leer el texto, responda a las siguientes preguntas: 1. Mencione cuatro ventajas de la cooperación entre las iglesias bautistas en la educación cristiana. 2. ¿Cuál es el propósito de una asociación?, ¿de la unión o convención? 3. ¿Por qué las iglesias reunidas en asociaciones necesitan información acerca de las demás? 4. Mencione cinco oportunidades de desarrollo cristiano o capacitación que pueden ser ofrecidas por una asociación. 5. ¿Cómo puede ayudar la asociación con los materiales del currículo? 6. ¿Cómo ayuda la asociación en cuanto a las misiones? 7. ¿Qué áreas de la planificación pueden hacerse disponibles por medio de las asociaciones a las iglesias jóvenes? 8. ¿Cuál es el propósito de la Alianza Mundial Bautista?
Temas de Discusión 1. Si las iglesias bautistas son autónomas, ¿por qué buscan relación en asociaciones, convenciones o uniones? 2. ¿Cuál es la autoridad de los oficiales de la asociación o de la unión sobre las iglesias individuales que la componen? 3. ¿Cuáles son los programas de la iglesia que normalmente requieren la cooperación de las iglesias?
4. ¿Cuál es el propósito de las iglesias al compartir con la asociación la información acerca de sus programas? 5. ¿Cuáles son los beneficios de una asociación o compañerismo regional y de la Alianza Mundial Bautista para las iglesias individuales que la componen?
Notas ft1
J. Clyde Turner, La Doctrina neotestamentaria de la Iglesia (El Paso: Casa Bautista de Publicaciones, 1953), pág, 17. ft2 J. M.. Pendleton, Church Manual Designed for the Use of Baptist Churches (Philadelphia: American Baptist Publication Society, 1867), págs. 7, 8. ft3
H. H. Hobbs, Fe y Mensaje Bautistas (El Paso: Casa Bautista de Publicaciones, 1975), págs. 13-15. ft4 W. L. Howse y W. O. Thomason, A Dynamic Church: Spirit and Structure for the Seventies (Nashville: Convention Press, 1969), pág. 22. ft5 Ibid., págs. 7-10. ft6 James D. Smart, The Rebirth of Ministriy (Philadelphia: The Westminster Press, 1960). págs. 13, 14. ft7 Ibid., págs. 14, 15. ft8 Ibid., págs. 17, 18; Viola D. Campbell, El Ministerio Educativo de la Iglesia (Manuscrito no publicado, usado para la instrucción en el Seminario Teológico Bautista Mexicano, Torreón, México, 1961), págs. 2-4. ft9 Smart, The Rebirth of the Ministry, págs. 17, 18. ft10 Ibid., págs. 46-52. ft11 Ibid., págs. 19-23 ft12 Howard P. Colson y Raymond M. Rigdon, Understanding Your Church's Curriculum (Nashville: Broadman Press, 1969), págs. 11-18; Campbell, op. cit., págs. 6-9. ft13 A. V. Washburn y Melva Cook, Administering the Bible Teaching Program: Sunday School Work (Nashville: Convention Press, 1969), pág. 14. ft14 Ibid., págs. 15-21. ft15 Howse y Thomason, A Dynamic Church, págs. 64, 65. ft16 Colson y Rigdon, Understanding Your Church Curriculum, pág. 38. ft17 Howse y Thomason, A Dynamic Church, págs. 49-51. ft18 “Program and Organization for Churches of 100 Members or Less” manuscrito preparado pero no publicado por la Education División, Baptist Sunday School Board, Nashville, 1971), pags. B. 2, 3. ft19 Ibid. ft20 Ibid., págs. 10, 11
ft21
Howse y Thomason, A Dynamic Church, pág. 105. Philip B. Harris y personal del Departamento del Programa de Preparación, Baptist Sunday School Board, Administering Church Training (Nashville: Convention Press, 1969), pág. 4. ft23 Ibid., págs. 4, 5; Howse y Thomason, A Dynamic Church, págs. 100, 101. ft24 McDonough, A Church on Mission, págs. 106-111. ft25 Harris y otros, Administering Church Training, pág. 6. ft26 Ibid., págs. 6-9. ft27 Howse y Thomason, A Dynamic Church, págs. 104, 105. ft28 Harris y otros, Administering Church Training, pág. 91. ft29 Howse y Thomason, A Dynamic Church, págs. 107-109. ft30 Ibid., págs. 108, 109 ft31 Howse y Thomason, A Dynamic Church, pág. 112. ft32 Ibid. ft33 Ibid. ft34 Ibid., págs. 117, 118. ft35 Harris y otros, Administering Church Training, págs. 12, 13. ft36 Howse y Thomason, A Dynamic Church, pág. 115. ft37 Colson y Rigdon, Understanding Your Church Curriculum, págs. 129, 130. ft37 Ibid., págs. 130-138. ft38 Howse y Thomason, A Dynamic Church, pág. 135; Harris y otros, Administering Church Training, pág. 114; Washbum y Cook. Administering the Bible Teaching Program, págs. 68, 69. ft39 Washbum y Cook, Administering the Bible Teaching Program, págs. 72, 73. ft40 Howse y Thomason, A Dyncnnic Church, pág. 69. ft41 Robert Hall Glover, El Progreso de las Misiones Cristianas (El Paso: Casa Bautista] de Publicaciones, 1969), págs. 131, 132. ft42 Ibid., págs. 132, 133. 139. ft22
ft43
Edward R. Dayton, ed. Mission Handbook: North American Protestant Ministries Overseas (10a. edición, Monrovia, California: Missions Advanced Research and Communication Center, 1973), pág. 80. ft44 Albert McClellan, The Mission Task of a Church (Nashville: Convention Press, 1969), págs. 13, 14. ft45 Ibid., págs. 14, 15.
ft46
Ibid., pág. 15. Ibid., págs. 17. ft48 Howse y Thomason, A Dynamic Church, págs. 76, 77. ft49 Ibid., pág. 73; McCIellan, The Mission Tasks of a Church, págs. 18, 19. ft50 Ibid., págs. 16, 17; Howse y Thomason, A Dynamic Church, págs. 72, 73. ft51 Colson y Rigdon, Understanding Your Church Curriculum, pág. 38. ft52 Ibid., pág. 50. ft53 Ibid., pág. 37. ft54 Howse y Thomason, A Dynamic Church, pág. 22. ft55 Colson y Rigdon, Understanding Your Church Curriculum, págs. 45, 46. ft56 Ibid., pág. 47. ft57 Ibid., págs. 61, 62 ft58 Ibid., págs. 62-68. ft59 Ibid., págs. 112-125; Howard P. Colson, Preparing to Teach the Bible (Nashvílle: Convention Press, 1970), págs. 29-43, 65-79. ft60 Harris y otros, Administering Church Training, pág. 7. ft61 Ibid., págs. 8, 9; Howse y Thomason, A Dynamic Church, págs. 105, 106. ft62 Colson y Rigdon, Understanding Your Church Curriculum, págs. 77-82. ft63 Ibid., pág. 51. ft64 Howse y Thomason, A Dynamic Church, pág. 25. 81 ft65 Washburn y Cook, Administering the Bible Teaching Program, págs. 65, 66. ft66 Charles A. Tidwell, Working Together Through the Church Council (Nashvílle: Convention Press, 1968), págs. 8, 9. ft67 Ibid., págs. 10, 14. ft68 Ibid., págs. 41-47 ft69 Ibid., págs. 7, 8. ft70 Ibid., pág. 55. ft71 Harris y otros, Administering Church Training, pág. 77; Tidwell, Working Together Through the Church Council, págs. 64-73. ft72 “Program and Organization for Churches of 100 Members or Less” (Folleto inédito, Nashville: Education Division, Baptist Sunday School Board, 1971), págs. 5-7. ft73 Ibid, págs. 8-10. ft74 Campbell, El Ministerio Educativo de la Iglesia, págs. 23, 24. ft47
ft75
Smart, The Rebirth of the Ministry, págs. 94-98. Campbell, El Ministerio Educativo de la Iglesia, págs. 26-30. ft77 Harris y otros, Administering Church Training, págs. 28-32 ft78 Jasper N. Barnette, The Place of the Sunday School in Evangelism (Nashville: Convention Press, 1945), págs. 49-64. ft79 Frank M. McKibben, Improving Religious Education Through Supervisión (Nashville: Abingdon-Cokesbury Press, 1931), págs. 15-54. ft80 George W. Stuart, A Guide to Sunday School Enlargement (Nashville: Convention Press, 1968), págs. 16-18. ft81 Howse y Thomason, A Dynamic Church, págs. 53-56. ft82 Stuart, A Guide to Sunday School Enlargement, págs. 28-39; Washburn y Cook, Administering the Bible Teaching Program, págs. 35, 36 ft83 Stuart, A Guide to Sunday School Enlargement, págs. 61-65. ft84 Leonard Sanderson, Using the Sunday School in Evangelism (Nashville: Convention Press, 1958). págs. 119-123. ft85 Washbum y Cook, Administering the Bible Teaching Program, págs. 9, 10. ft86 Arthur Flake, Las Verdaderas Funciones de la Escuela Dominical (El Paso: Casa Bautista de Publicaciones, 1956), pág. 120 ft87 Barnette, The Place of the Sunday School in Evangelism, pág. 1. ft88 Ibid., pág. 6. ft89 Ibid., pags. 10-19 ft90 Flake; Las Verdaderas Funciones de la Escuela Dominical pág. 119. ft91 Barnette, The Place of Sunday School in Evangelism, págs. 27-33. ft92 Ibid., págs. 38-41. ft93 Flake, Las Verdaderas Funciones de la Escuela Dominical, págs. 123-128. ft94 Barnette, The Place of the Sunday School in Evangelism, págs. 111-123. ft95 Ibid., págs. 125-134; Sanderson. Using the Sunday School in Evangelism, págs. 8-88. ft96 Barnettc, The Place of the Sunday School in Evangelism, págs. 139-143. ft97 P. K. Burroughs, Let Us Build (Nashville: Broadman Press, 1938), pág. 13. ft98 William A. Harrell, Planning Better Church Buildings (Nashville: Broadman Press. 1947). págs. 1, 2. ft99 Ibid. ft100 Ibid., págs. 10, 11. ft76
ft101
Ibid., pág. 14. Frank W. Patterson, (El Paso: Casa Bautista de Publicaciones 1962), p. 19. ft103 Harrell, Planning Better Church Buildings. Pags 3, 4. ft104 Ibid., págs. 26,27. ft105 Stuart, A Guide to Sunday School Enlargement, págs. 85, 86. ft106 Harrell, Planning Better Church Buildings, págs. 7, 8. ft107 Ibid. pág. 17. ft108 Ibid. ft109 Jasper N. Barnette. Associational Sunday School Work (Nashville: Sunday School Board, 1952). pags. 5. 6. ft110 Barnette, Associational Sunday School Work, págs. 15-20. ft102