LA SANTIDAD INTERNA Y EXTERNA
SANTIFICACION:
Ahora como Cristianos somos adoptados como hijos de Dios y llamados a vivir en santidad (Efesios 1:4-5). (1 Pedro 1:14-16): 14como hijos obedientes, no os conforméis a los deseos que antes teníais estando en vuestra ignorancia; 15sino, como aquel que os llamo es santo, sed también vosotros santos en toda vuestra manera de vivir; 16porque escrito escrit o esta: Sed santos, porque yo soy santo. Es un deber con nuestro Nuevo Padre permanecer santos y esto se logra andando en santa y piadosa manera de vivir (2 Pedro 3:11); no conforme a los deseos de la carne (Gálatas 5:19-23); Tal vez para el mundo, la Santidad del creyente no existe, para casi todo aquel que no es convertido a Jesucristo, ser santo es una idea casi remota, imposible, ridícula, fanática y se relaciona con una vida aburrida. Cuando éramos religiosos relacionábamos la santidad tal vez con una imagen, una persona con traje religioso, un hombre retirado en una montaña o en algún monasterio, una vestidura u objeto venerable, una sustancia bendita, un lugar, donde habita la divinidad, capilla, mezquita o incluso un cementerio. Pero las sagradas escrituras nos dicen que Dios habita en las alturas (cielo) (c ielo) y la santidad (también se refiere a su pueblo). Isaías 57:15:
15Porque así dijo el Alto y Sublime, el que habita la eternidad, y cuyo nombre es el Santo: Yo habito en la altura y la santidad, y con el quebrantado y humilde de espíritu, para hacer vivir el espíritu de los humildes, y para vivificar el corazón de los quebrantados. Es decir que hoy Dios y la santidad no habita en templos hechos por manos humanas, ni en objetos, sino en el cuerpo, el alma y el espíritu de los verdaderos Cristianos hijos de Dios, ellos son su templo; luego es una mentira decir que Dios es y está en todos, en una piedra, una vela, un crucifijo y hasta en una alcantarilla. La Biblia dice en el libro de los hechos 17:24,25: 24El Dios que hizo el mundo y todas las cosas que en él hay, siendo Señor del cielo y de la tierra, no habita en templos hechos por manos humanas, 25ni es honrado por manos de hombres, como si necesitase de algo; pues él es quien da a todos vida y aliento y todas las cosas. Y en verdad el único Santo de los Santos es Dios, pero la santidad es un camino de superación perfecta para la mente el alma y el cuerpo (1 Tesalonicenses 5:23), que comienza solo cuando aceptamos a Jesucristo en nuestro corazón como único señor y suficiente salvador y nos apartamos del pecado; parece una tarea difícil pero el prometió ayudarnos. En este proceso de perfeccionamiento que comienza con el temor de Dios, Es el Espíritu Santo el que nos va a guiar, a dar toda la ayuda y la fortaleza para vencer. Hay que orar y leer la palabra, ser sensible a la voz de Dios para conocer que es o no pecado, para distinguir entre lo inmundo y lo limpio entre lo santo y lo profano (Ezequiel 44:23). La santificación requiere de andar en continua obediencia y aplicando la palabra de Dios en mi vida; si me tropiezo me levanto y sigo caminado (Romanos 8:1). Debemos confiar en la obra de Cristo en la cruz y reconocer la imposibilidad de agradar a Dios en la carne.
No podemos jugar con las cosas de nuestro Dios Santo. La falta de santidad abre la puerta de nuestro ser a influencias malignas que nos dejaran marcados, y el pago que recibimos por el pecado es la muerte (Romanos 6:23). La Santidad entonces se verifica en dos grandes pasos:
La santidad inmediata se recibe, al aceptar a Jesucristo en nuestro corazón como Señor y Salvador por la fe, y ser perdonados nuestros pecados. Como la carne y el espíritu se pueden contaminar debemos perfeccionarnos en la santidad (2 Corintios 7:1).
La santidad progresiva es la obra permanente que a lo largo de nuestra vida, hace el Espíritu Santo de transformación y renovación de nuestro cuerpo, alma y espíritu. (1 Tesalonicenses 5:23). 23Y el mismo Dios de paz os santifique por completo; y todo vuestro ser, espíritu, alma y cuerpo, sea guardado irreprensible para la venida de nuestro Señor Jesucristo. 24Fiel es el que os llama, el cual también lo hará Estamos viviendo en la generación de los últimos días y solo hay dos clases de personas los dispuestos a seguir en plena obediencia a Dios y los que quieren vivir conforme a su voluntad, solo los primeros se irán en el rapto de la iglesia. Este es el tiempo para buscar la mayor santificación posible, (Apocalipsis 22:11). Muchos cristianos han recibido dones de parte de Dios, son usados por él, y podrían aun ser más usados, pero se han reservado alguna área de su vida que no le han entregado completamente al Señor, y tienen la tendencia a ser aceptados más por el mundo que por Dios. Puede ser algo dentro de su corazón que hace que se complazcan viviendo más para agradar su propia carne, atendiendo aun a ciertas vanidades ilusorias de la vida y a los deseos de los ojos.
Hay creyentes que no dan un completo testimonio y para muchos es difícil distinguirlos de un hombre o una mujer santos, apartados del mundo y consagrados para Dios. El trato que dé a los demás, las emociones que todavía manifiestan, orgullo, indiferencia a la santidad, arrogancia, ira, falta de fe y en su testimonio espiritual y su apariencia física se parecen a los no creyentes en el evangelio. Por eso La santidad se manifiesta de dos maneras: La santidad interna y la externa
LA
SANTIDAD INTERNA
A nivel del espíritu y del alma, como Jesús dijo es la limpieza de lo de adentro del vaso. El primer cambio se da a nivel interno, el corazón es transformado por la presencia de Cristo en nuestra vida, allí comienza el Espíritu Santo a renovar nuestra manera de pensar, de sentir y de actuar. Antes de conocer al Señor éramos autosuficientes, soberbios, impulsivos pero ahora nuestro espíritu santificado nos permite tener comunión con Dios, se deja guiar por el Espíritu santo, le gusta buscar las cosas de Dios y da frutos para él. El Espíritu Santo va colocando cada día mayor carga por purificarnos y apartarnos de las cosas del mundo que pueden contaminarnos. En nuestra alma las emociones son controladas y siempre tienden a lo espiritual por eso nos quebrantan los testimonios del poder de Dios, las necesidades de los demás y amamos salvar las almas perdidas. Así la persona renacida no se deja dominar por sus antiguos pensamientos o por sus sentidos.
LA
SANTIDAD EXTERNA
El señor Jesucristo nos ensena en el nuevo testamento que no solo hay que limpiar lo de afuera del vaso, sino primero lo de adentro; esto quiere decir que tampoco se debe dejar olvidado lo de afuera, hay quienes dicen Dios no ve lo de afuera pero este versículo de Mateo 23:26 y otros mas no dicen eso. La santidad debe ser completa para que podamos estar en el centro de la voluntad del Señor. El hombre y la mujer de Dios desean agradarle también externamente a su Senor y su apariencia personal es pulcra, limpia, ordenada, recatada y sin ostentaciones, sin ser desaliñado ni mojigato o anticuado. No usa modas que inciten el deseo de las demás personas hacia las partes íntimas o pudorosas de sus cuerpos, tampoco estimula el erotismo, ni provoca la voluptuosidad, ya que no buscamos como cristianos despertar instintos en los demás, ni la exaltación o la gloria propia, sino que en todo lo que hacemos, lo que nos colocamos o como nos movemos, nuestra motivación principal es darle la gloria a Dios. El verdadero seguidor de Jesús no atiende a lo que el mundo le dice en cuanto a su manera de vestirse, ya que sin ser una imposición de su iglesia el atender lo que dice la biblia, para así honrar en todo el nombre de su Senor. La persona recién convertida en la congregación, no debe ser vituperada, criticada, señalada, u observada como si fuera el peor de los pecadores, por su manera de vestirse, por su pelo corto, por usar pantalón, usar aretes collares o maquillarse y en el caso de los varones por llevar su pelo largo, ropas algo sugestivas o modas extrañas, porque esto no le agrada al Senor; pues el acepta al pecador que viene a él, como está
Pero un verdadero hermano que quiere estar en la voluntad del senor empezara a atender cuanto antes, y en cuanto sus posibilidades económicas se lo vayan permitiendo a lo que dice la escritura respecto del correcto modo de presentarse como cristiano, ya que según nos dice el Senor, que todos los convertidos a Cristo somos sacerdotes de Dios (Apocalipsis 1:6 ; 5:10 y 1a. Pedro 2.9). Una cosa es el legalismo (estar viviendo bajo la ley), y otra es buscar al máximo la santificación y la obediencia aunque estemos viviendo bajo la gracia, y eso no es que busquemos ganar la salvación por obras. Esta parte del estudio de la santidad externa no corresponde de ninguna manera a normas humanas o preceptos de alguna denominación, como decía el apóstol pablo en colosenses 2:20-22: si habéis muerto con Cristo en cuanto a los rudimentos del mundo, .por que como si vivieseis en el mundo, os sometéis a preceptos 21 tales como: No manejes, ni gustes, ni aun toques 22(en conformidad a mandamientos y doctrinas de hombres), cosas que todas se destruyen con el uso? vemos que no se trata de esto, sino de algo maravilloso que dice la escritura, que el Espíritu Santo vive dentro de todo creyente, su cuerpo humano por lo tanto pasa a ser templo del Espíritu de Dios. 1 corintios 6:19-20: O ignoráis que vuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo, el cual está en vosotros, el cual tenéis de Dios, y que no sois vuestros? 20Porque habéis sido comprados por precio; glorificad, pues, a Dios en vuestro cuerpo y en vuestro espíritu, los cuales son de Dios. Esto me dice que yo no puedo hacer con este cuerpo o vestir este templo como a mí me plazca sino como conviene al templo de Dios. Lo que vamos a exponer tiene respaldo tanto en el nuevo como en el antiguo testamento. LOS HOMBRES
CRISTIANOS
El hombre de Dios que quiere ser más usado por Dios y ser un miembro de testimonio externo tanto como interno, atenderá a la palabra en lo siguiente:
EL CABELLO Y LA CABEZA
Ezequiel 44:20 20No se raparan la cabeza ni se dejaran crecer el cabello; solamente lo recortaran. I corintios 11:14: 14La naturaleza misma no os ensena que al varón le es deshonroso dejarse crecer el cabello? Levíticos 19:27 No se debe hacer tonsura (peladura en forma de coronilla) en la cabeza I corintios 11:4: 4Todo varón que ora o profetiza con la cabeza cubierta, deshonra su cabeza. (Cristo). Aclarando que es conveniente no tener nada sobre la cabeza cuando se ora o profetiza. TINTURAS:
Aunque en la época de Jesús ya tenían la posibilidad de pintarse el cabello, el mismo Senor dijo lo siguiente: Mateo 5:36: Ni por tu cabeza juraras, porque no puedes hacer blanco o negro un solo cabello. Esto además de la enseñanza sobre el juramento y que un hombre no puede hacer que le salga pelo negro o blanco por su propia voluntad, indica que a él no le gusta que se cambien el color del cabello que el mismo les creo. LOS TATUAJES :
Levíticos 19:28: No haréis incisiones en vuestro cuerpo por un muerto, ni imprimiréis en vosotros señal alguna. Yo, Jehová
Lo único que él quiere que llevemos como una marca en nuestro brazo es su amor es decir con mucha fuerza (cantares 8:6). El diablo está acostumbrando a la gente de los últimos días a que se tatúen y reciban marcas, preparándolos así para que reciban la marca del anticristo (Apocalipsis 13:16). Fíjate que la mayoría de los tatuajes se relacionan con el ocultismo. ARETES (ZARCILLOS):
Jueces 9:24,25: 24Y les dijo Gedeón: Quiero haceros una petición; que cada uno me de los zarcillos de su botín (pues traían zarcillos de oro, porque eran ismaelitas). 25Ellos respondieron: De buena gana te los daremos. Aquí vemos como los enemigos de Dios usaban aretes y el pueblo de Israel los entrega con gusto de su botín. LAS MUJERES CRISTIANAS
De igual manera las hermanas que quieren ser de mayor testimonio y más bendecidas por el señor atenderán a la palabra con fidelidad, haciéndolo todo no por obligación sino de corazón. Yo era un poco incrédulo en esta área, ya que pertenecí durante trece años a una comunidad cristiana muy liberal, por haber realizado estudios universitarios, haberme movido en el mundo de los negocios y la cultura- la sociedad- juzgaba todo esto como fanatismo y legalismo, pero Dios me hablo más de tres veces que esto era importante hacerlo. Pero hoy en día se mueve más que nunca antes, el espíritu de Jezabel; Que incita a las mujeres a ataviarse como lo hacía la Jezabel pagana y mundana del antiguo testamento para atraer al pecado a otros. 2 Reyes 9:30: 30Vino después Jehu a Jezreel; y cuando Jezabel lo oyó, se pintó los ojos con antimonio, y atavió su cabeza, y se asomó a una ventana. Vemos que ella murió después al ser arrojada desde la ventana y luego los
perros devoraron su cara ataviada y las manos que uso para el pecado, tal como Dios lo había profetizado a través de Elías. El señor me hablo un día en el templo, acerca de este espíritu que hace que sus hijos se aparten sutilmente de la santidad, debido a la influencia de la vanidad y la identificación de muchos cristianos con las costumbres, adornos y modas mundanas. El señor nos habló también de muchas hermanas tibias que aunque se vestían como a él le agradaba, en su interior anhelaban estar como las mujeres del mundo. Tal vez alguien diga, yo conozco una hermanita muy ungida, habla en lenguas, es predicadora, se pinta, se corta el cabello como un hombre, usa pantalón y Dios la usa...
Si ella quisiera ser ujier en mi congregación yo le diría: -hermana usted no está obedeciendo todo lo que la palabra ensena respecto de su presentación personalElla es responsable de obedecer o no; el pecado de la desobediencia en un creyente se compara con el pecado de la idolatría. Solo los que están en obediencia y en una permanente santificación del alma, espíritu y cuerpo se irán en el arrebatamiento de la iglesia. Toda mujer creyente que se guarde plenamente, debe vestir honestamente y sin adornos ostentosos: 1 Pedro 3:3: 3Vuestro atavió no sea el externo de peinados ostentosos, de adornos de oro o de vestidos lujosos, 1 Timoteo 2:9: 9 Asimismo que las mujeres se atavíen de ropa decorosa, con pudor y modestia; no con peinado ostentoso, ni oro, ni perlas, ni vestidos costosos, La mujer en la perfecta voluntad de Dios en su vestir diario se abstendrá de vestidos escotados, sin mangas, con aberturas pronunciadas, minifaldas, ropa
apretada a su cuerpo o notoriamente sensual, modas estrafalarias, pantalones , shorts, aretes, pulseras, brazaletes, collares, cabello corto, tinturados, maquillajes y esmaltes.
EL DEPILADO DE LAS CEJAS
Mira qué curioso, dicen los científicos que el pelo de las cejas protege los ojos de los rayos solares que deteriorarían la visión si no estuvieran ahí, pero al quitarlos permanentemente el cuerpo tratara de defenderse haciendo abultar y crecer entonces de manera anormal la zona de las cejas. Por eso toda mujer que se rasura las cejas totalmente se le ve un bulto crecido en esta parte en lugar de los pelos de las cejas. Por vanidad le hacemos daño a nuestro cuerpo y ofendemos a Dios pues todo lo que él hizo es perfecto y sabe por qué ha puesto cada cosa en su lugar. El pantalón fue una moda que escandalizo a la sociedad americana tan solo hace cuarenta años y la minifalda apareció como parte de la liberación sexual de los años 60 e inventada por una inglesa. En otras palabras son los últimos estragos causados por esta última generación decadente influida grande y sutilmente por Satanás, antes del regreso de nuestro Señor Jesucristo. Deuteronomio 22:5: No vestirá la mujer traje de hombre, ni el hombre vestirá ropa de mujer; porque abominación es a Jehová tu Dios cualquiera que esto hace. -podrá una hermana con pantalón ajustado a sus formas decir que cuando se arrodilla en un grupo de oración donde detrás de ella quedan hermanos varones tiernos en el evangelio, decir que lo hace para la gloria y honra de Dios y no creer que por ella satanás va a atacar a los más débiles? Sin ir con ánimo inquisitorio a medir el largo del cabello o la ropa, el tipo de joya, adorno, etc. Que un cristiano porte, se trata de un asunto donde el Espíritu Santo nos redarguye de vanidad y falta de pudor. Hablando de Israel en el sentido espiritual como una mujer, Dios mismo la engalana, pero el mismo dice el efecto negativo que esto tuvo en un pueblo que
no es verdaderamente santo, ni obediente, por eso dice que esto ya no debe ser más. Ezequiel 16:12,13: 12Puse joyas en tu nariz, zarcillos en tus orejas y una hermosa corona en tu cabeza. 13Asi fuiste adornada de oro y de plata, y tu vestido bordado era de lino fino y seda. Comiste flor de harina de trigo, miel y aceite. Fuiste embellecida en extremo y prosperaste hasta llegar a reinar. Ezequiel 16:15,16: 15 Pero confiaste en tu belleza, te prostituiste a causa de tu fama y derramaste tu lujuria sobre cuantos pasaban. -Suya fuiste- 16Tomaste de tus vestidos, te hiciste diversos lugares altos y fornicaste sobre ellos. -Cosa semejante nunca había sucedido ni volverá suceder! El porqué de esto lo vemos claro en Éxodo 32:2-4, Satanás inspiro a Aarón a pedirle los aretes a todo el pueblo para fabricar el becerro de oro. Todos estos adornos fueron y han sido puertas para la idolatría. Dios les concedió todas esas joyas para que tuvieran con que ofrendar, para construir el tabernáculo y para la obra de Dios, Éxodo 35:21,22. Incluso mucho antes de la ley cuando Jacob va a ofrecer culto a Dios en Bet- el, hace que todos se purifiquen y ordena quitar todos los aretes de sus orejas. Génesis 35:4: 4Ellos entregaron a Jacob todos los dioses ajenos que tenían en su poder y los zarcillos que llevaban en sus orejas, y Jacob los escondía debajo de una encina que había junto a Siquem. Para que vamos a insistir en usar algo que el señor mismo quitara cuando el venga, porque no está en su voluntad. Isaías 3:18-23: -18Aquel día quitara el Señor el adorno del calzado, las redecillas, las lunetas, 19los collares, los pendientes y los brazaletes, 20los turbantes, los adornos de las piernas, los partidores del pelo, los pomitos de olor y los zarcillos, 21los
anillos y los joyeles de las narices, 22las ropas de gala, los mantoncillos, los velos, las bolsas, 23los espejos, el lino fino, los turbantes y los tocados. El cabello de una mujer se diferencia claramente en la biblia del cabello del varón. Apocalipsis 9:8: 8 Tenían cabello como cabello de mujer y sus dientes eran como de leones; El cabello largo en la mujer sobre su cabeza y hombros es señal de sometimiento a la autoridad del varón y a la autoridad de Cristo. 1 corintios 11:10: 10Por lo cual la mujer debe tener señal de autoridad sobre su cabeza, por causa de los Ángeles. Atendamos a la palabra del Senor, andemos en su perfecta voluntad, y no en vanidades que para nada aprovechan.