La psic psicot oter erap apia ia jung jungui uian ana a como como desp despli lieg egue ue de la actitud simbólica y la imaginación. Uno no alcanza la iluminación fantaseando sobre la luz sino haciendo consciente la oscuridad Carl Jung
Lo inconsciente: deseos reprimidos y patrones colectivos .
Al interior de las diferentes escuelas psicoanalíticas psicoanalíticas y psicoterapéuticas psicoterapéuticas que surg surgie ierron a part partir ir de los los plan plante team amie ient ntos os de Sigm Sigmun und d Freud, eud, y que que en ocasiones se engloban bajo el término de psicología profunda (Psicoanálisis, (Psicoanálisis, Psicología indiidual de Adler y Psicología Analítica junguiana! se comparte la premisa de la e"istencia de un sustrato psíquico contenedor de factores inconscientes que condicionan y determinan las formas de pensar, sentir y actuar de los indiiduos. Para ara el psicoa psicoanál nálisi isis s freu freudia diano no lo incons inconscie ciente nte es un conglo conglome mera rado do de fantasías y deseos que #an #an sido reprimidos reprimidos por el indiiduo en su proceso proceso de adaptaci$n al ámbito social. Por lo tanto #ace referencia a contenidos relatios relatios a la #istoria personal del indiiduo, indiiduo, otorgando otorgando especial especial releancia releancia a la memoria incular con las %guras parentales. &l psiqu psiquia iatr tra a sui'o sui'o arl arl )ung, )ung, crea creado dorr de la psico psicolo logía gía ana analít lític ica, a, se encuen encuentra tra en parte parte conform conforme e con este presup presupues uesto to pero plantea plantea que ademá además s de los contenid contenidos os biográ% biográ%cos cos,, en lo incon inconsci scient ente e tambi también én es posible identi%car elementos que #acen parte de la #istoria #istoria %logenética de la #umanidad. Propone Propone entonces que además del inconsciente personal, e"iste un inconsciente colectio colectio compuesto compuesto por prototipos prototipos de iencias y comportamientos compartidos por todos los seres #umanos como especie. Los arquetipos de lo inconsciente colectivo &stos &stos patr patrone ones s de condu conducta cta a los que que )ung )ung denom denomino ino arq arquet uetipo ipos, s, se encuentra encuentran n muy relacio relacionado nados s con los instintos instintos,, en la medida que operan operan como estímulos que nos nos compelen a reali'ar reali'ar ciertos comportamientos comportamientos y nos promueen reacciones típicas ante diersas circunstancias de nuestra ida (emanc (emancipa iparn rnos os de los padr padres, formar formar una famil familia, ia, tener tener descen descenden dencia cia,, buscarse el sustento, sustento, apropiarse apropiarse de un territorio, territorio, participar en en el colectio, transformar el orden social, la muerte!. A diferencia de los instintos que son pulsiones con un circuito relatiamente relatiamente cerrado y concreto concreto de reali'aci$n, reali'aci$n, los arquetipos arquetipos se comportan de manera manera abierta y simb$lica* sin embargo su no reali'aci$n también es fuente de malestar y frustraci$n. )ung plantea que es posible inferir a la e"istencia e"istencia de los arquetipos a partir de sus manifestaciones, manifestaciones, una de las cuales son las imágenes imágenes y estructuras estructuras dramát dramática icas s típica típicas s que es es posible posible enco encontr ntrar ar,, con dife difere rente ntes s ropaj ropajes es culturales, en las narraciones narraciones mitol$gicas mitol$gicas y fantásticas de distintos distintos lugares lugares y épocas. +os +os mitos mitos nos nos muest muestra ras s a como como la #um #uman anid idad ad se #a #a enfr enfren enta tado do a diferentes diferentes situaciones críticas, y aunque algunos de ellos tienen miles de
aos, contin-an resonando y teniendo impacto en nuestro psiquismo ya que los desafíos a los que aluden nos siguen acompaando. )ung resalta que no es posible en muc#as ocasiones aducir al contacto directo o indirecto entre pueblos para e"plicar las similitudes estructurales de los mitos. &s releante además que estos dramas y personajes típicos surgen también de manera espontánea en los delirios y alucinaciones psic$ticas, así como en estados alterados de conciencia como efecto de prácticas meditatias o por la ingesti$n de sustancias psicodélicas. Algunos sueos cuyos contenidos no es posible relacionar con aspectos biográ%cos, pueden ser también una e"presi$n de imágenes arquetípicas. El arquetipo del héroe solar Freud y )ung no solo se distanciaron por sus concepciones diferentes con respecto a lo inconsciente, sino también por sus planteamientos acerca de la naturale'a de la energía fundamental que muee a los seres #umanos la libido. omo es bien conocido la libido para Freud es de carácter se"ual, mientras que para )ung, lo se"ual es solo una de las manifestaciones de una energía ital muc#o más amplia y abarcadora. )ung describe la libido entonces como una energía creatia, que es origen y motor del unierso. /ic#a energía se mani%esta en los seres #umanos como un an#elo de trascendencia, de reali'aci$n, de ampliaci$n de la conciencia. )ung encontr$ que este proceso de manifestaci$n y despliegue de la energía ital se mani%esta míticamente a traés del arquetipo del #éroe solar. &ste arquetipo que es el prototipo de muc#as #istorias antiguas y contemporáneas en el que se narra la trasformaci$n del #éroe (+a odisea, Star 0ars, &l seor de los Anillos! A traés de una serie de traesías y aenturas (emprender un iaje, luc#ar con el drag$n, descenso a los in%ernos, muerte, renacimiento!, y el encuentro y confrontaci$n con otros arquetipos (sombra, animus1 anima, iejo sabio, la gran madre! el #éroe entra en relaci$n con la fuer'as del inframundo (lo inconsciente,!, encuentra el tesoro buscado y regresa a su lugar de origen para compartir la 2lu'3, la sabiduría, con su pueblo. )ung propone entender esta estructura mítica, como una proyecci$n de un proceso psíquico de trasformaci$n y eoluci$n al que estamos llamados todos los seres #umanos. ada alma #umana se e abocada a confrontarse con una serie de circunstancias que la conducen a manifestar su ocaci$n, su particular llamado, su singular aporte a lo colectio, al mundo. Se mani%esta como un an#elo de conocimiento, de superaci$n, de totalidad. &ste camino eolutio lo denomino proceso de indiiduaci$n y es también considerado como un símbolo de la paulatina transformaci$n del ego en su confrontaci$n y adaptaci$n a las fuer'as de lo inconsciente y del mundo e"terno. Los complejos afectivos +os arquetipos se #umani'an en los indiiduos a partir de lo que )ung denomino los complejos afectios personales. +os complejos además de estar imbuidos por los arquetipos, se nutren de nuestras iencias
personales. Se pueden considerar como un conjunto de imágenes y representaciones, cargadas afectiamente, en torno a una temática com-n (relaci$n con el padre o madre, el poder, el erotismo etc.! /iferentes circunstancias de nuestra ida constelan, es decir, #acen que determinado complejo cobre mayor releancia. 4n complejo constelado altera nuestra percepci$n y oluntad conscientes, tiéndola con los tra'os de los arquetipos correspondientes sumados a las e"periencias preias con respecto a la misma temática. +as antiguas posesiones demoniacas y los trastornos de m-ltiple personalidad son e"presiones de complejos altamente constelados. &n estos casos se comportan como inasiones masias de lo inconsciente que oprimen y anulan las funciones del ego y de la conciencia. +os complejos se e"presan en nuestro psiquismo como apremios, necesidades, puntos de ista, reacciones emocionales, sentimientos de admiraci$n o desprecio desproporcionados, ideas obsesias. 5ienen la facultad de personi%carse en nuestros sueos, y de generar eentos y circunstancias en el mundo físico con signi%cados análogos (somati'aciones, accidentes, encuentros con personas, repetici$n de terminado tipo de relaci$n!. +a capacidad de e"teriori'aci$n de los arquetipos y los complejos es la base del fen$meno descrito por )ung como sincronicidad. +os complejos afectios se consideran las partículas constitutias de la psique inconsciente por lo tanto no solo #acen parte del ámbito de la psicopatología. Funcionan como si en nuestra casa #abitaran animales de compaía, que si los ignoramos o desatendemos, más temprano que tarde terminaran por irse en contra de nosotros causándonos m-ltiples estragos. +a alternatia es entrar en contacto con ellos, prestarle atenci$n a sus necesidades, para con el tiempo y esfuer'o, lleguemos de alguna manera a domesticarlos, pudiendo incluso #acer uso de sus recursos potenciales. +o inconsciente querámoslo o no a a actuar en nosotros así que lo más apropiado es adentrarnos en sus misterios &ste dialogo con nuestros complejos, con nuestros personajes interiores, que como imos son la e"presi$n del drama #acia la reali'aci$n de nuestro ser más profundo, requiere del despliegue de una actitud simb$lica a traés de la imaginaci$n y la creatiidad. La imaginación y la creatividad como dialogo con lo inconsciente +a imaginaci$n #a sido denostada por el pensamiento racionalista y materialista desde la ilustraci$n, considerándola con nulo alor para obtener conocimientos álidos y productios. )ung, sin embargo, se une a la corriente #ermética y fenomenol$gica que reconoce el ámbito de lo imaginario, en el que se incluyen los mitos, los sueos y las fantasías como elementos que permiten el acceso a la complejidad parad$jica de la psique, a las #onduras de naturale'a #umana y sobre todo a esa otra sublime realidad que nos #abita y condiciona. Se le reconoce a la imaginaci$n la propiedad simb$lica de unir y reconciliar polaridades* de e"presar, sugerir y eocar lo inaprensible* de apro"imarse comprensiamente a los fen$menos inclasi%cables a traés del concepto
y la racionalidad. &l analista )ames 6illman propone a la imaginaci$n como el lenguaje del alma. +o imaginario se mani%esta espontáneamente en los sueos y es por eso que su interpretaci$n #ace parte fundamental en la psicoterapia junguiana. 5ambién es posible inducir arti%cialmente lo imaginario en el espacio terapéutico a traés de la técnica de la imaginaci$n actia. &sta consiste en dar la oportunidad de e"presarse a los contenidos de lo inconsciente, #aciendo uso de su capacidad para la personi%caci$n. Se propone entonces entrar en contacto con nuestro personajes interiores, escuc#arlos con atenci$n y rigurosidad, interactuando y conersando con ellos como si fueran entidades reales. 7uestros personajes interiores pueden ser eocados a traés de la imagen de un sueo, una emoci$n intensa, un síntoma. ada uno de nosotros posee una modalidad que facilita dic#a comunicaci$n. 6ay personas que pueden escuc#ar oces, o percibir imágenes interiores, algunos se e"presan mediante moimientos corporales en una especie de dan'a. Para otros el contacto con lo inconsciente es posible a partir de la escritura automática, técnica de la que #icieron uso los surrealistas. )ung diferencia el fantaseo ocioso con la imaginaci$n actia, destacando que en esta -ltima, el ego asume una actitud actia, es decir no acata de manera pasia y sumisa las oces e imágenes del inconsciente, sino que las interpela. +a actitud actia, implica soportar y mantener la tensi$n con lo inconsciente, permitiendo que emerja lo que denomina la funci$n trascendente, es decir, un nueo nacimiento, el surgimiento de una nuea actitud, producto de dic#a confrontaci$n. +a funci$n trascendente de la psique es la que posibilita la conciliaci$n de opuestos aparentemente irreconciliables. &s el surgimiento de un tercer elemento o perspectia, que incluye e integra los elementos que #an estado en disputa. &s un proceso de con8icto, negociaci$n y acuerdos transitorios. +a técnica de la imaginaci$n actia suele utili'arse en etapas aan'adas del análisis, ya que requiere un ego estructurado que soporte la tensi$n de los opuestos y no sucumba a una disociaci$n o a una identi%caci$n con algunos de los contenidos de lo inconsciente. )ung resalta que tomar en serio lo inconsciente no signi%ca tomarlo literalmente, sino otorgarle crédito, brindándole la oportunidad de cooperar con la conciencia, en lugar de disturbarla de manera automática. &sta cooperaci$n de lo inconsciente se encuentra relacionada con el principio autorregulador de la psique, concepto fundamental en la perspectia junguiana. La imaginación como facilitador del mecanismo autorregulador de la psique +a psique se plantea como un sistema dinámico de fuer'as contrapuestas (consciente 1inconsciente, progresi$n1progresi$n de la libido, materia1logos!, con una tendencia intrínseca a mantener un equilibrio. &ste mecanismo
autorregulador implica un permanente interjuego de compensaci$n y complementariedad entre los componentes psíquicos. &l estado de equilibro psíquico se e alterado de manera regular por estímulos proenientes de la labilidad del mundo interno y e"terno. &sta alteraci$n e"ige modi%caciones tendientes a adaptarse a los nueos requerimientos, promoiendo en la psique una transformaci$n a estadios de cada e' mayor complejidad e integralidad. +os síntomas neur$ticos (obsesiones, depresi$n, ansiedad, accidentes, somati'aciones, repetici$n de patrones de relaci$n, auto sabotajes! son e"presi$n de un intento de la psique inconsciente en la b-squeda de este estado equilibrio superior. 4na tentatia de crear conciencia a partir de los tropie'os. &l dialogo con la psique inconsciente a traés de la imaginaci$n permite que el mecanismo autorregulador de la psique actué sin necesidad de acudir a los fen$menos sintomáticos. &s de alguna manera anticiparse a los acontecimientos y eludir aquella sentencia junguiana por la cual, 2todo aquello que no se #ace consiente se iirá en el e"terior a manera de destino3. &l mecanismo autoregulaci$n de la psique, es denominado por el analista )ames 6illman, como nuestro daimon interior. on este concepto #elénico pretende aludir a aquella fuer'a que nos conduce por las buenas y malas a e"presar nuestra ocaci$n, nuestro particular llamado. +a imaginaci$n y la creatiidad son un medio entonces para interpretar lo guios del destino, las seas de nuestro daimon. &l desarrollo de la actitud simb$lica que se pretende fomentar en la psicoterapia junguiana a traés de la imaginaci$n, nos permite #uir de la estrec#a literalidad de los #ec#os. 7os brinda acceso a parad$jicas l$gicas subalternas. 7os incula con la profunda polisemia de los acontecimientos a traés símbolos, analogías y correspondencias. +a actitud simb$lica igualmente nos amplía la sensibilidad y la disposici$n para responder de manera constructia a todo aquello que la diersidad de ida nos conoca y a integrar y coniir con nuestros aspectos sombríos. &l dialogo con lo inconsciente nos permite llegar ser cocreadores de nuestra realidad y no simples esclaos o íctimas de las circunstancias.
9eferencias bibliográ%cas 6:++;A7, ). (<==>!. El código del alma. ?arcelona, ;artíne' 9oca. )47@, . @. (<=>
Estructura
y
dinámica
de
la psique.
&ditorial
)47@, . @. (BCC>!. Los complejos y el inconsciente. ;adrid, Alian'a.
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