Resumen Capítulo 32. Las Externalidades Externalidades
Decimos que hay una externalidad en el consumo si a un consumidor le afecta directamente la producción o el consumo de otros. Es decir que existe una externalidad negativa cuando el efecto que se provoca afecta por ejemplo si un individuo fuma y el humo del cigarro afecta a los demás, o existen externalidades positivas si la acción beneficia a terceros, por ejemplo que el aroma del jardín de una persona beneficie a todos sus vecinos. A su su vez, una externalidad en la producción se define como la situación en la que las decisiones de una empresa o de un consumidor influye en las posibilidades de producción de otra empresa. El caso que se presente como ejemplo podría ser, un apicultor y un campo que siembra y recolecta flores, los dos se benefician pues las abejas producen más miel y las flores se reproducen de mejor forma. El problema que existe con las externalidades es que los bienes que dan origen a aquellas interesan a los individuos, pero no se comercializan en mercados organizados. Es esta ausencia de mercados de externalidades la que plantea problemas. Hasta ahora se ha supuesto que cada agente económico puede elegir su consumo o su producción sin preocuparse de lo que hacían los demás. Los consumidores y los productores se relacionaban a través del mercado, por lo que lo único que necesitaban conocer los agentes económicos eran los precios de mercado y sus propias posibilidades de consumo o de producción. Por lo que a partir de este momento se abandona este supuesto para darle entrada y estudiar los efectos que tienen las actividades empresariales sobre los demás e incluso sobre su propia competencia.
Es conveniente analizar las externalidades por un ejemplo para ilustrar algunos de los rasgos más sobresalientes. Imaginemos que dos compañeros de habitación, A y B, tienen preferencias en cuanto al “dinero” y al “humo”. Supongamos que a los dos les gusta el dinero, pero que a A le gusta fumar y a B le gusta respirar aire puro. Se pueden representar las posibilidades de consumo de los dos individuos en una caja de Edgeworth. La base de la caja representa la cantidad total de dinero que tienen los dos agentes y la altura la cantidad de humo que puede generarse. Las preferencias de A son crecientes tanto con respecto al dinero como con respecto al humo, mientras que las de B son crecientes tanto con respecto al dinero como con respec to al aire puro (la ausencia de humo).
El humo es un bien para la persona A, pero un mal para la B. El equilibrio en el que termine depende de la dotación de la que se parta. La cantidad de humo es un bien para A y un mal para B, por lo que B se desplaza a una posición mejor para él conforme A consume menos humo. Una asignación eficiente en el sentido de Pareto es aquella en la que no es posible mejorar el bienestar de ninguno de los consumidores sin empeorar el del otro. Como muestra la figura, ese tipo de asignación se caracteriza por la condición habitual de tangencia según la cual las relaciones marginales de sustitución de los dos agentes entre el humo y el dinero seben ser iguales. Podríamos imaginar un sistema jurídico en el que A tuviera derecho a fumar todo lo que quisiera y B tuviera que sobornarlo para que fumara menos. Este caso correspondería a la dotación E’. Al igual que antes, esta no sería eficiente en el sentido de Pareto, por lo que cabría imaginar que los agentes realizaran un intercambio hasta alcanzar un punto que prefieran ambos, como el X’. Tanto X como X’ son asignaciones eficientes en el sentido de Pareto pero proceden de diferentes dotaciones iniciales. No existe razón alguna para limitarnos a analizar estos dos puntos eficientes. Como siempre, habrá toda una curva de contrato de las asignaciones eficientes en el sentido de Pareto de humo y dinero. Si los agentes pueden intercambiar libremente estos dos bienes, sabemos que terminaran en algún punto de esta curva de contrato.
Existe un caso especial en el que el resultado de la externalidad es independiente de quien tenga los derechos de propiedad. Si las preferencias de los agentes son cuasi lineales, todas las soluciones eficientes deben generar la misma cantidad de la externalidad.
Dado que las curvas de indiferencia son todas ellas traslaciones horizontales unas de otras, el lugar geométrico de las tangencias mutuas- el conjunto de asignaciones eficientes en el sentido de Pareto; sólo la cantidad de pesetas que tienen los agentes será diferente en cada asignación eficiente. Se le llama Teorema de Coase cuando en determinadas circunstancias la cantidad eficiente del bien que implica la externalidad es independiente de la distribución de los derechos de propiedad. Sin embargo debe subrayarse que estas circunstancias son muy especiales. El supuesto implica que las demandas del bien que genera la externalidad son independientes de la distribución de la renta. Por lo tanto una reasignación de las dotaciones no afecta a la cantidad eficiente de externalidades, lo que se expresa a veces diciendo que el teorema de Coase es válido si no hay “efectos-renta” Si dos empresas (que entre sí generan externalidades) tienen incentivos para fusionarse si las acciones de una de ellas afectan a la otra, pueden obtener mayores beneficios coordinando su conducta que actuando por separado. El objetivo de la maximización del beneficio debe fomentar por sí solo la internalización de las externalidades de la producción. En otras palabras, si los beneficios conjuntos que obtienen las empresas cuando se coordinan son superiores a la suma de los beneficios que obtienen cuando actúan por separado, las empresas podrían ser compradas a sus propietarios actuales por una cantidad igual al valor
actual de la corriente de beneficios de las empresas, coordinarse, y el comprador, que puede ser cualquiera de ellas o alguna otra, puede apropiarse el aumento de beneficios. El propio mercado transmite una señal para internalizar las externalidades de la producción, e ésa es una de las razones por la que raras veces se observa este tipo de externalidad. La mayoría de las empresas ya ha internalizado las externalidades que se imponen las distintas unidades en la producción. Habría una externalidad si ninguna de las dos empresas tuviera en cuenta su influencia mutua. Es más probable que una de ellas o ambas se dieran cuenta de que podrían obtener más beneficios coordinando sus actividades, bien mediante un acuerdo mutuo, bien mediante la venta de una de ellas a la otra.
Puntos importantes: 1.
El primer teorema de la economía del bienestar muestra que un mercado libre y competitivo da lugar a un resultado eficiente si no hay externalidades.
2.
Pero si hay externalidades, es improbable que el resultado del mercado competitivo sea eficiente en el sentido de Pareto.
3.
Sin embargo, en este caso, el Estado puede “reproducir” a veces el papel del mercado utilizando los precios para transmitir las señales apropiadas sobre el coste social de los actos de los individuos.
4.
Más importante es el hecho de que el sistema jurídico puede garantizar que los derechos de propiedad estén bien definidos, para que puedan realizarse intercambios que mejoren la eficiencia.
5.
Si las preferencias son cuasi lineales, la cantidad eficiente de una externalidad en el consumo es independiente de quién tenga los derechos de propiedad.
6.
Las externalidades de la producción pueden resolverse, por ejemplo, estableciendo unos impuestos pigouvianos, creando un mercado para la externalidad, permitiendo simplemente que las empresas se fusionen o transfiriendo los derechos de propiedad de otras formas.
7.
La tragedia de los bienes comunales se refiere a la tendencia a usar en exceso las propiedades comunales. Se trata de un tipo especialmente frecuente de externalidad.
Ensayo Tema: Externalidades
Existe una externalidad cuando los actos o las decisiones de una persona o un grupo imponen algún costo o brindan un beneficio a segundas o terceras personas. A veces las externalidades reciben el nombre de efectos de filtración, o bien efectos de proximidad. Cuando las personas que están a cargo de las decisiones no toman en cuenta los costos o beneficios sociales, tales decisiones son ineficientes. Algunos ejemplos: * La contaminación del aire * El agua * La tierra * El paisaje * El ruido * Los congestionamientos de tráfico * Los accidentes automovilísticos * Las viviendas abandonadas * Las catástrofes naturales * El humo de cigarro * Etc. Podemos resumir que entonces una externalidad es costo o beneficio resultante de alguna actividad o transacción que se impone o se hace recaer sobre terceras partes, ajenas a dicha actividad o transacción. A veces se le conoce como efecto de filtración o de proximidad. La lógica de la economía planificada se basa parcialmente en el hecho de que cuando las decisiones económicas se toman en el nivel social (es decir, por el gobierno que actúa supuestamente en nombre del pueblo) y no en el sector privado, los planificadores pueden tomar en cuenta todos los costos, tanto privados como sociales.
A medida que las sociedades se urbanizan más y más, las externalidades adquieren una importancia cada día mayor. La razón es clara: cuando vivimos muy cerca unos de otros, es más probable que nuestros actos afecten a otras personas. Cuando una empresa pondera el precio y el costo marginal, y no existen externalidades, lo que pondera en realidad es el total de beneficios que obtendrá la sociedad con la producción adicional, comparándolos con todos los costos que esa producción le impondrá a la sociedad. Los que se benefician con la elaboración de un producto son las personas o familias que pueden consumirlo. CMS: costo marginal social es la suma de los costos marginales de la elaboración del bien, más los costos de los daños ocasionados durante el proceso de producción. CMP costo marginal privado monto que paga un consumidor para consumir una unidad adicional de un bien determinado. CDM: costo del daño marginal perjuicio adicional ocasionado cuando se incrementa en una unidad el nivel de una actividad productora de externalidades. Ejemplo: si la elaboración del producto X contamina el aguan de un rio, el CDM es el costo adicional a causa de la mayor contaminación que resulta al incrementar la producción en una unidad X por cada periodo. Siempre que al tomar decisiones económicas se pasan por alto los costos externos, ya sea que estos recaigan sobre una persona o sobre toda la sociedad, es muy probable que dichas decisiones sean ineficientes. Se han empleado cinco aproximaciones básicas para resolver el problema de las externalidades: 1. Impuestos y subsidios aplicados por el gobierno 2. Regateo y negociación privada 3. Reglas y procedimientos jurídicos 4. Venta o subasta de derechos para producir externalidades 5. Regulación gubernamental directa Impuestos y subsidios. Se ha recomendado el uso de subsidios e impuestos marginales como una forma directa de obligar a las empresas a tomar en cuenta los costos o beneficios externos. Según este razonamiento cuando una empresa impone un costo social externo, se le debe aplicar un impuesto por unidad, igual a los daños ocasionados
por cada unidad sucesiva de producción de dicha empresa. En otras palabras el impuesto debe de ser exactamente igual a los costos del daño marginal. Regateo y Negociación. Según Coase, las negociaciones y regateos de carácter privado pueden conducir a una solución eficiente en muchos casos de daños sociales, sin que el gobierno intervenga en absoluto este argumento se conoce como el teorema de Coase (el cual dice que cuando se presentan externalidades en ciertas condiciones, las partes pueden encontrar la solución eficiente en privado, sin intervención del gobierno. Reglas y Procedimientos jurídicos. Para que las negociaciones produzcan un resultado eficiente, la asignación inicial de derechos debe resultar clara para ambas partes. Cuando la ley establece los derechos, lo más frecuente es que incluya también un mecanismo para proteger esos derechos. Venta o subasta de derechos para contaminar. No es conveniente prohibir todas las actividades generadoras de externalidades. Un ejemplo es el automóvil ya que cuando conducimos se producen muchas externalidades. Regulación directa de externalidades. Los impuestos, los subsidios, los dictámenes judiciales y la subasta pública son métodos de regulación indirecta, concebidos para inducir a las empresas y las familias a ponderar los costos y beneficios sociales de sus propios actos. La presencia de externalidades, tanto costos como beneficios, es otra causa de imperfección del mercado. Existen dos tipos de acciones posibles que pueden realizar los gobiernos para alcanzar una asignación más eficiente de recursos ante la presencia de externalidades: * Establecer y hacer cumplir los derechos de propiedad privada * Gravar las actividades que producen costos externos y subsidiar las que acarrean beneficios externos Se puede definir una externalidad como la situación en la cual los costos o beneficios de producción y/o consumo de algún bien o servicio no son reflejados en el precio de mercado de los mismos. En otras palabras, son externalidades aquellas "Actividades que afectan a otros para mejor o para peor, sin que éstos paguen por ellas o sean compensados. Existen externalidades cuando los costos o los beneficios privados no son iguales a los costos o los beneficios sociales. Los dos tipos más importantes son las economías externas o las des economías externas.".