1.1 ANEMIA La anemia es una enfermedad que se caracteriza por la presencia de un número insuficiente de eritrocitos (glóbulos rojos), por una insuficiencia en la cantidad de hemoglobina o del hematocrito en sangre o por una concentración inferior de lo normal en todos ellos.
La
definición que proporciona la Organización Mundial de la Salud (OMS) de esta enfermedad se corresponde con un nivel de hemoglobina menor de 13.0 g/dL en varones, y menor de 12.0 g/dL en mujeres. Los glóbulos rojos desempeñan la función de transportar el oxígeno (O2) desde los pulmones hasta las diferentes partes del organismo, es por ello por lo que los trastornos de estos componentes en la sangre, impiden transportar una adecuada cantidad de oxígeno, pudiendo ocasionar de este modo hipoxia, que es la responsable de muchos de los signos y síntomas de esta enfermedad. Por lo general, cuando en el laboratorio hallamos una concentración de hemoglobina o el hematocrito por debajo del valor esperado, se diagnostica anemia en el paciente. La probabilidad y gravedad de la anemia se define según la desviación que presenta la hemoglobina/hematocrito del paciente respecto a los valores esperados en las personas normales con edad y sexo similares. El valor del hematocrito medio en el varón adulto es de 47%, y en la mujer adulta de 42%.
En ancianos, es importante tener en cuenta que este trastorno hematológico se puede presentar con bastante frecuencia. 1.1.1 Etiología La anemia no se trata de una enfermedad en sí, sino de la manifestación de un proceso patológico. Esta enfermedad puede ser secundaria a enfermedades hematológicas primarias o pueden aparecer como consecuencia de anomalías en otros sistemas orgánicos. Entre las principales causas que provocan esta enfermedad se encuentran: Pérdida excesiva de sangre o hemorragia. Producción insuficiente de eritrocitos. Destrucción excesiva de eritrocitos (hemólisis). 1.1.2 Manifestaciones Clínicas Son consecuencia de la respuesta del organismo a la hipoxia tisular y varían en función de la intensidad de la anemia, ésta está determinada por la cantidad de hemoglobina y la presencia de enfermedades. De este modo la anemia se clasifica en tres grados de intensidad:
Anemia Leve (Hb 10-14 g/dl [100-140 g/l]): suele ser asintomática, aunque puede aparecer disnea de esfuerzo o palpitaciones.
Anemia Moderada (Hb 6-10 g/dl [60-100 g/l]): existe un aumento en la intensidad de los síntomas cardiorrespiratorios, los cuales se van a presentar tanto en reposo como al llevar a cabo una actividad. Las manifestaciones clínicas son la disnea, fatiga y un considerable aumento de las palpitaciones.
Anemia Grave (Hb <6 g/dl [ < 60 g/l]): los síntomas que se observan en este tipo de anemia se denominan síndrome anémico (que incluye un sinfín de manifestaciones clínicas: palidez, ictericia y prurito debido a la hemólisis); ictericia conjuntival y esclerótica, vista borrosa; glositis; taquicardia,
aumento
de
la
tensión
diferencial,
soplos
sistólicos,
claudicación intermitente, angina; taquipnea, ortopnea, disnea de reposo;
cefalea, vértigo, irritabilidad, depresión, deterioro de los procesos del pensamiento; anorexia, hepatomegalia, esplenomegalia, dificultad para la deglución, glositis; dolor óseo; sensibilidad al frío, letargo.
1.1.3 Tratamiento: terapia transfusional La transfusión de sangre es uno de los posibles tratamientos para los síntomas de la anemia. El hemoderivado que se transfunde a los pacientes con anemia son hematíes concentrados, pues ayuda a mantener la hemoglobina dentro de un nivel adecuado para paliar los síntomas o reducir riesgos en el ámbito quirúrgico
Concentrado de hematíes. El volumen aproximado que se transfunde es de 250 ml. Se consigue aumentar la cantidad de hematíes y, por lo tanto, la capacidad de transportar oxígeno de la sangre. Una unidad de hematíes debe aumentar la hemoglobina de un paciente adulto que no pierde sangre en 10g/L y el hematocrito en tres puntos. A la hora de transfundir, debemos tener una serie de precauciones como la compatibilidad AB0 y Rh y administrarlo entre 1,5 y 2 horas.
Transfusión De Concentrados Plaquetarios: Corregir o prevenir la hemorragia asociado a alteraciones cuantitativas o funcionales de las plaquetas. Un concentrado plaquetario contiene todas las plaquetas de una unidad de sangre en 50 cc de volumen. Un concentrado plaquetario de separador celular se obtiene de un solo dador y es equivalente a 6 a 8 concentrado de plaquetas individuales, en 200 a 300 cc de plasma. Esta indicado para transfusiones terapéuticas que se indican tras la presentación de la hemorragia y transfusiones profilácticas que se indican en función del recuento de plaquetas y, por lo general durante los tratamientos aplasiantes.
Sin embargo, la terapia transfusional no es un proceso inocuo para el paciente y puede
tener
serias
complicaciones,
por
lo
que
se
tiene
que
valorar
cuidadosamente este tratamiento.
1.3 ANEMIA HEMOLÍTICA Es un nivel anormalmente bajo de glóbulos rojos .La anemia hemolítica es el nombre general que se le da a cualquier tipo de anemia por que los glóbulos rojos se destruyen muy rápidamente. Los glóbulos rojos son las células con la forma de un disco que contienen hemoglobina y transportan oxígeno en la sangre. En circunstancias normales, los glóbulos rojos se forman en la medula ósea y se liberan en el torrente sanguíneo, donde circulan durante 110 a 120 días. Una vez finalizado este periodo, los glóbulos rojos normalmente desaparecen de la sangre en el bazo y el hígado. En las personas con anemia hemolítica, los glóbulos rojos tienen un periodo de vida corto. Hay dos causas principales de esta disminución en el periodo de vida, algún problema con los glóbulos rojos son normales pero un proceso anormal los destruye antes de tiempo. La médula ósea es incapaz de producir glóbulos rojos nuevos con la suficiente velocidad para reemplazar los que murieron. La anemia hemolítica puede ser un problema de corta o larga duración. 1.3.1 Etiología La anemia hemolítica se presenta cuando la médula ósea es incapaz de reponer los glóbulos rojos que se están destruyendo. -Hereditarias: hemoglobinopatías, deficiencia enzimáticas, alteraciones membrana eritrocito. -Adquirida: Inmune autoinmune, aloinmune, drogas, neoplasias Microangiopatica, infecciosa – tóxicos, hiperesplenismo
1.3.2 Existen dos tipos de anemia hemolítica:
Intrínseca - la destrucción de los glóbulos rojos se debe a un defecto en los mismos glóbulos rojos. Las anemias hemolíticas intrínsecas son a menudo hereditarias, como la anemia drepanocítica y la talasemia. Estos trastornos producen glóbulos rojos que no viven tanto como los normales.
Extrínseca - los glóbulos rojos se producen sanos pero más tarde son destruidos al quedar atrapados en el bazo o al ser destruidos por una infección o por fármacos que pueden afectar a los glóbulos rojos. A continuación se enumeran algunas de las causas de la anemia hemolítica extrínseca, también llamada anemia hemolítica autoinmune: o Las infecciones: la hepatitis, el citomegalovirus (CMV), el virus Epstein-Barr (su sigla en inglés es EBV), la fiebre tifoidea, la E. coli o los estreptococos o medicamentos, como la penicilina, los medicamentos antimalaria, las sulfamidas o el acetaminofén o La leucemia o el linfoma o Los trastornos autoinmunes, como el lupus sistémico eritematoso (lupus, o SLE en inglés), la artritis reumatoidea, el síndrome de Wiskott-Aldrich o la colitis ulcerosa
o Diversos tumores Las anemias hemolíticas comparten las características siguientes: Acortamiento de la vida de los hematíes (normal = 120 días), Es decir, destrucción prematura de los eritrocitos. Concentraciones elevadas de eritropoyetina y eritropoyesis aumentada en la medula ósea para compensar las pérdidas de los hematíes 1.3.3. Síntomas
Palidez anormal o pérdida de color en la piel
Ictericia o color amarillento de la piel y los ojos
Orina de color oscuro
Fiebre
Debilidad
Mareos
Confusión
Intolerancia a la actividad física
Hepatomegalia y esplenomegalia
Aceleración de la frecuencia cardíaca (taquicardia)
1.3.4 Pruebas diagnosticas Se puede sospechar que padece anemia a partir de los datos generales obtenidos de los antecedentes médicos y el examen físico completos, y de signos como cansancio injustificado, palidez en la piel o los labios o latidos cardíacos acelerados (taquicardia). Además del examen físico y los antecedentes médicos completos, los procedimientos para diagnosticar la anemia pueden incluir:
Análisis de sangre (para medir la cifra de hemoglobina y reticulocitos; es un examen que indica la cantidad de glóbulos rojos nuevos que se producen)
La médula ósea eritropoyetina, en un intento de mantener la producción de eritrocitos prematuramente destruidos, presenta una considerable hiperplasia. En el frotis sanguíneo, se observan policromasia (variación de color de los glóbulos rojos) por aumento del número de reticulocitos
Análisis de sangre adicionales (para verificar el funcionamiento del hígado así como la presencia de ciertos anticuerpos)
Análisis de orina
Biopsia por aspiración y por punción de la médula ósea - un procedimiento que comprende la extracción de una pequeña cantidad de líquido de la médula ósea (aspiración) y, o de tejido sólido de la médula ósea (biopsia core o por punción), generalmente de los huesos de la cadera, para estudiar la cantidad, tamaño y madurez de los glóbulos y, o de las células anormales.
1.3.5 Duración
La duración de la anemia hemolítica depende de su causa.
En general, cuando la anemia hemolítica está causada por una medicación o infección, es un problema temporal que desaparece cuando se discontinua la medicación o se trata la infección.
Cuando la anemia hemolítica está causada por una enfermedad hereditaria, se convierte en una condición de por vida.
Sin embargo, el impacto de esta condición en la calidad de vida de la persona y el periodo de vida puede varíen en gran medida, según el tipo específico de trastorno hereditario y su gravedad.
1.3.6 Tratamiento de la anemia hemolítica:
El tratamiento específico de la anemia hemolítica será determinado por su médico basándose en lo siguiente:
Su edad, su estado general de salud y su historia médica.
Qué tan avanzada está la enfermedad.
La causa de la enfermedad.
Su tolerancia a determinados medicamentos, procedimientos o terapias.
Sus expectativas para la trayectoria de la enfermedad.
Su opinión o preferencia.
El tratamiento de la anemia hemolítica variará según la causa de la enfermedad. Puede incluir lo siguiente:
transfusiones de sangre
medicamentos con corticosteroides
tratamiento con inmunoglobulina intravenosa (para reforzar el sistema inmunológico)
Medicamentos: o
Estimulantes para la médula ósea: Estos medicamentos también se conocen como medicamentos de factor de crecimiento. Estos provocan que su médula ósea empiece a hacer GRs, glóbulos blancos (GBs) y plaquetas nuevas.
Neupogen: se utiliza para estimular la producción de granulocitos (un tipo de glóbulos blancos) en pacientes que reciben terapias que causan un descenso en los recuentos de glóbulos blancos. Neupogen se usa para evitar infecciones y fiebres neutropénicas (niveles bajos de glóbulos blancos) provocadas por la quimioterapia.
Cuidados de enfermería:
Observar si tiene fiebre de 38 ºC o más, o escalofríos (posibles signos de infección).
Vigilar si hay dificultad para respirar (disnea)
Controlar el ritmo cardíaco
Observar si una hemorragia no se detiene después de unos minutos.
Si le aparecen nuevos sarpullidos en la piel.
Dolor en los huesos que no desaparece con el analgésico recomendado. o
Inmunosupresores: están indicados en pacientes receptores de órganos trasplantados para evitar el rechazo . Estos medicamentos ayudan a impedir que el cuerpo sea atacado por su propia médula ósea. Esto puede ayudar a que la médula ósea haga más células sanguíneas
Cuidados de enfermería:
Controlar la presión arterial del paciente
Vigilar si hay fiebres, náusea, vómito, diarrea, hinchazón,
Controlar la frecuencia cardiaca
Verificar si el paciente tiene coágulos de sangre que pueden ocurrir en cualquier parte del cuerpo Instruir al paciente que tome el medicamento a las horas indicadas Transfusión de sangre: Puede que usted necesite una o más transfusiones de sangre para reemplazar sangre que usted haya perdido. Cirugía: Su bazo puede engrandecer al funcionar con más esfuerzo para eliminar los GRs que se han desintegrados. Según el bazo va engrandeciendo, aún más GRs son desintegrados. Cuando esto sucede, puede que usted necesite cirugía para extirpar su bazo.
-EsplenectomíaEs un procedimiento quirúrgico que elimina parcial o totalmente
el bazo dañado o enfermo. Este procedimiento es realizado porque el cuerpo está destruyendo glóbulos rojos a gran velocidad, tal vez tenga que someterse a una cirugía para que le extirpen el bazo. El bazo es un órgano que retira los glóbulos rojos de la sangre y los destruye. Si el bazo está enfermo o más grande de lo normal, retira más glóbulos rojos y causa anemia
CUANDO SE PRODUCE UNA ESPLECNETOMIA Cuando se hace muy grande que se torna destructiva para las plaquetas y células rojas. Trastornos de la sangre, como púrpura trombocitopénica idiopática, esferocitosis hereditaria, eliptocitosis y talasemia. Para el diagnóstico de ciertos linfomas. Se realiza en caso de coágulos de sangre (trombosis) en los vasos sanguíneos del bazo. A raíz de la ruptura espontánea. Enfermedad hepática, específicamente cirrosis. 1.3.7 Plan de atención de enfermería para anemia Diagnósticos:
Alteración de la perfusión tisular periférica y cardiopulmonar relacionada con la interrupción del flujo sanguíneo secundario al proceso inflamatorio y
a la oclusión de los vasos sanguíneos por hematíes Dolor relacionado con la hemólisis en las articulaciones secundario a la
crisis hemolítica. Déficit de conocimiento (prevención de las crisis) relacionado con la
interpretación errónea de la enfermedad. Alteración de la perfusión tisular renal relacionada con la interrupción del flujo sanguíneo secundario a la destrucción de los glóbulos rojos y su depósito en los túbulos renales
Intervenciones:
Valore la TA a intervalos frecuentes y comunique caídas significativas (superiores a 10mmHg por debajo del registro de la sistólica basal). Permanezca alerta a los signos de depresión cardíaca, TA, aumento de la FC, disminución de la amplitud del pulso, disnea y disminución de la diuresis.
Controle la presencia de dolor. Diseñe una escala de medición del dolor; con el paciente, valórelo desde O (ausencia de dolor) a 10 (dolor intenso). Administre las medicaciones prescritas para el dolor y documente su eficacia con la escala de medición del dolor. Instruya al paciente para que pida los analgésicos antes de que el dolor sea demasiado intenso Detecte y notifique los signos de insuficiencia renal, como son equilibrio de líquidos positivo, formación de edemas, aumento de peso, diuresis < 30 ml/hi presencia de una ingestión de líquidos adecuada. Mantenga una hidratación adecuada de al menos 2-3 I/día (si no está contraindicado) para estimular el flujo urinario.
Educación al paciente:
Información sobre los indicadores de crisis hemolítica, como ictericia, disnea, ahogo, dolor abdominal o articular, disminución de la TA y aumento de la FC; y sobre los factores que pueden desencadenar una crisis hemolítica, como estrés emocional, estrés físico, infección, traumatismo, productos químicos y reacciones tóxicas a fármacos (p. ej., a penicilina,
metildopa, sulfamidas, quinina). Importancia de mantener al paciente en un entorno tranquilo. Instrucciones para que el paciente aprenda las técnicas de reducción del estrés, como la
meditación y los ejercicios de relajación. Importancia de evitar procesos infecciosos, como los de las vías respiratorias y de conseguir ayuda médica inmediata si se produce una
infección. Medicaciones, como el nombre del fármaco, los objetivos, la programación horaria, las dosis, las precauciones, las interacciones con los alimentos y con otros fármacos, y los efectos colaterales potenciales.
Precauciones con los fármacos que se expenden sin receta,
no tomarlos sin consultar antes con el médico
MODELO
PSICODINÁMICO
DE
PEPLAU
(por
Hildegar
Peplau)El
modelo
psicodinámico de Peplau, propone ideas más precisas acerca de lapráctica
profesional de la enfermera, destacándose un dinamismo entre laenfermeras y el paciente, las cuales se hallan conjuntas dentro de la ¨Teoría delas relaciones interpersonales¨, la cual postula que los cuidados no solo están ensaber lo que padece el paciente, sino también en comprender, ayudar e identificarsus necesidades
psicológicas.
En
otras
palabras,
la
enfermera
ocupa
un
rolterapéutico en cuanto al apoyo psicológico que le brinda al paciente. Dentro deesta
teoría
se
describen
cuatro
fases
importantes:
Orientación:La
enfermera ayuda a que el paciente reconozca y entiendasu enfermedad. Identificación:
La
enfermera
ayuda
a
que
el
paciente
identifique
sussentimientos para sobrellevarlos. Explotación:El paciente aprovecha los servicios que le brinda laenfermera. Resolución:El paciente ya no depende de la enfermera, la enfermera selimita solo a brindarle apoyo. Peplau se refiere a la relación paciente-enfermero/a, al paciente y su conciencia de los sentimientos, y al enfermero/a y su conciencia de los sentimientos. Presenta la enfermería como una fuerza educativa de maduración que emplea el método de aprendizaje basado en la experiencia, tanto para el paciente como para el enfermero/a.