PFRH - IV BIMESTRE - 1ro de Secundaria USO DEL TIEMPO LIBRE 1. Tiempo Libre y ocio El tiempo libre es el periodo en el que las personas no tienen obligaciones ni deberes previstos o rutinarios, por lo cual pueden decidir libremente a qué dedicarse. El ocio se refiere a todas las actividades no impuestas que se realizan durante este tiempo. Un gran error es confundir ocio con ociosidad. El ocio es descanso activo, un tiempo en el que las personas se ocupan en actividades creadoras. El tiempo libre puede cumplir tres funciones importantes: - Descanso, ya que elimina la fatiga y compensa el desgaste producido por el trabajo o el estudio. - Diversión, pues contribuye a romper la monotonía de las ocupaciones cotidianas y permite dedicarse a actividades recreativas. - Cultura, porque permite a las personas participar en actividades creativas de aprendizaje voluntario. También favorece la integración con grupos de todo tipo, lo cual estimula el desarrollo del espíritu crítico. Las personas que hacen un buen uso de su tiempo libre tienen muchas oportunidades para acrecentar su desarrollo personal, mantienen una buena salud, mejoran su autoestima, elevan su estado de ánimo y cultivan su creatividad.
El ocio a través de la historia. A lo largo de la historia, las sociedades han tenido distintas formas de entender y cultivar el tiempo dedicado al ocio. - En la antigua Grecia, el ocio era visto como algo positivo porque permitía que los hombres libres se dedicaran a las actividades del pensamiento. La mayoría de los grandes pensadores no hubieran podido concebir sus ideas sin el ocio. - Durante la Edad Media, el tiempo de ocio se dedicó principalmente a desarrollar la vida contemplativa dirigida a la búsqueda de Dios. Los monjes y monjas dedicaban su tiempo a las prácticas espirituales y al estudio. Los nobles, por su parte, tenían mucho tiempo para las diversiones y actividades como la caza y la guerra. Los campesinos y artesanos, en cambio, tenían que trabajar para sustentar el ocio de monjes y nobles. - Con la llegada del capitalismo en el siglo XVIII, apareció el llamado tiempo productivo. Como ricos y pobres se dedicaban a trabajar sin cesar, el concepto de ocio se volvió sinónimo de ociosidad o pereza. Esto causó estragos en la calidad de vida de las personas. Recién en el siglo XX, con el reconocimiento de los derechos laborales, la gente volvió a apreciar el tema destiempo dedicado al descanso y las diversiones.
2. Los beneficios del tiempo libre Algunos adolescentes utilizan su tiempo libre para hacer tareas y seguir estudiando, mientras que otros lo usan para divertirse. ¿Cuál de esas opciones es mejor? Aunque el estudio no es
algo negativo, hacerlo compulsivamente, sin darse tiempo para la recreación, puede ser perjudicial para el rendimiento intelectual debido a que genera fatiga mental. Por ello disponer de tiempo libre es una necesidad vital para las personas porque les permite refrescar su mente y recobrar energías. En sus actividades de ocio, las personas deben descansar, recrearse de alguna forma o participar en actividades que les permitan alcanzar una mejor calidad de vida.
La diversión: una necesidad humana Durante la niñez, el juego es una actividad esencial. Mediante el juego, los niños desarrollan sus habilidades, aprenden a conocer el mundo y se sienten felices. Además, jugar les permite relacionarse con otros niños y desarrollar hábitos positivos como el respeto a las reglas, la cooperación, la colaboración, etc. En la adolescencia, las diversiones se diversifican. Los adolescentes se dedican a actividades más complejas y placenteras. A través de sus pasatiempos favoritos, desarrollan su imaginación, su creatividad y su capacidad de disfrute. La vida adulta significa un cambio drástico en el uso del tiempo. Los estudios universitarios y, posteriormente, la vida laboral, ocupan la mayor parte del tiempo de las personas y les dejan muy poco espacio para los pasatiempos. Por eso, los adultos se sienten, frecuentemente, agobiados y cansados de las responsabilidades laborales, económicas y familiares. Las actividades recreativas permiten olvidarse de ello, recobrar energías y trabajar con mejor actitud.
El tiempo libre es un espacio de aprendizaje Las actividades que se desarrollan en el tiempo libre cumplen un rol educativo, en especial durante la adolescencia. Por lo general, los adolescentes, ávidos de nuevas experiencias, se quejan del aburrimiento en sus ratos libres. Esa falta de alternativas puede llevarlos a actuar de manera agresiva o a probar sustancias nocivas para su organismo. Se debe tener en cuenta, entonces, que la planificación del tiempo libre es tan importante como la planificación para el estudio. En la actualidad, uno de los problemas más comunes en el uso del tiempo libre es que una gran parte de él s dedica a actividades “no pensantes”, como ver televisión o cine comercial, usar Internet, etc. es necesario que los adolescentes adopten una actitud crítica, hábitos activos y mucha creatividad par que se involucren en actividades que contribuyan a su desarrollo como personas.
¿De qué forma podemos usar el tiempo libre? No todos usamos nuestro tiempo libre de la misma manera. Las formas de diversión dependen de los gustos, intereses e influencia cultural de cada persona. En nuestra sociedad existe una gran variedad de diversiones, que pueden clasificarse en cuatro grupos principales: - Los espectáculos. Son eventos creados o ejecutados por algunas personas para que las demás, como espectadores, puedan disfrutarlos. Por ejemplo: los partidos de fútbol, el circo, las carreras de caballos, los conciertos, el teatro, el cine, etc. - Las aficiones individuales. Están ideadas para satisfacer el gusto personal de una persona, aunque la afición puede ser compartida con otras que tienen el mismo interés. Por ejemplo: leer un libro, escribir poemas, coleccionar estampillas, etc. - Las diversiones grupales. Son aquellas en las que se socializa con otras personas. Pueden ser actividades eventuales, como ir a bailar a una discoteca o participar de una reunión familiar;
o permanentes, como participar en las actividades de un club deportivo, involucrarse en una agrupación juvenil, etc. - Actividades de relajación y estimulación. Son aquellas que permiten huir de la rutina y estimulan la mente y el cuerpo. Por ejemplo: los viajes, un retiro espiritual, asistir a un gimnasio, aprender a tocar guitarra, visitar un museo, etc.
3. Los adolescentes y su tiempo libre En la adolescencia, el tiempo libre adquiere una especial importancia porque en esta etapa se define el desarrollo de la personalidad. Aunque los adolescentes se ocupan principalmente en el estudio, disfrutan de tiempo libre para emplearlo en muchas actividades. Existen muchas opciones que pueden satisfacer sus intereses personales: - Deportes: fútbol, vóley, básquet, atletismo, natación, etc. - Actividades culturales: visitas a museos, conciertos, exposiciones, cine, teatro, festivales, etc. - Acciones en favor de la comunidad: voluntariado, servicio social, etc. - Agrupaciones juveniles: grupos parroquiales, asociaciones vecinales, clubes, etc. - Aficiones: música, teatro, lectura, literatura, danza, etc. - Actividades de esparcimiento: viajes, excursiones, fiestas, etc.
Peligros del uso irresponsable del ocio Debido a que el ocio es un tiempo en el que los adolescentes, por lo general, no están con sus padres o tutores, no existen límites definidos para ellos. Por eso, algunos adolescentes incursionada en el consumo de drogas, el alcoholismo, las adicciones a los videojuegos, el pandillaje o la delincuencia, actividades perjudiciales que no contribuyen con su desarrollo personal, social, ni intelectual. Por el contrario, lo dificultan y lo retardan. El consumo de drogas, por ejemplo, tiene efectos dañinos en el funcionamiento del cerebro y otros órganos; además, crea dependencia. Asimismo, el tabaco daña los pulmones y el alcohol afecta el hígado.
4. Las diversiones en el siglo XX La forma en que las personas se divierten ha cambiado mucho a lo largo de la historia. Los pasatiempos no son iguales, a pesar de que algunos deportes y juegos muy antiguos se practican hasta ahora. El tiempo destinado al descanso y a las diversiones tampoco fue siempre igual. Hace unos cien años, la idea de tener un tiempo para uno mismo, para los amigos o para entretenerse, era algo a lo que sólo las personas con mucho dinero podían aspirar.
Menos trabajo y más descanso A inicios del siglo XX, Europa y Norteamérica vivían un periodo de rápido crecimiento económico que generó una sensación de bienestar. París se convirtió en la capital europea más refinada y en un punto de referencia para las otras grandes ciudades del mundo, que querían contar con centros de diversión, espacios para actividades culturales, parques y alamedas para que las personas pudieran distraerse. Sin embargo, la mayoría de los habitantes europeos no podían acceder a esas comodidades o beneficios porque las jornadas de trabajo eran muy largas. Los obreros trabajaban 12 ó 14
horas diarias, lo que les impedía disponer de tiempo libre. Por eso, se organizaron y empezaron a luchar para obtener una jornada laboral de ocho horas diarias, lo cual se logró en las primeras décadas del siglo XX. De esa manera, millones de obreros empezaron a disfrutar de un tiempo libre para el descanso. A estos cambios se sumaron los progresos de la medicina y la higiene, que mejoraron la calidad de vida de las personas y permitieron que tuvieran más posibilidades de divertirse y de aprovechar el descanso.
¿Y qué pasaba en el Perú? En el Perú, especialmente en Lima, también se hicieron comunes los hábitos de las ciudades europeas. Los grupos más adinerados pudieron copiar exactamente los tipos de diversión e incluso el tipo de lugares que había en Europa. Es así como aparecieron confiterías, cafés, salas de cine, teatros, salones de té, etc. un caso muy conocido fue el del Palais Concert, un local en el jirón de la Unión cuya orquesta de damas vienesas tocaba todas las tardes. Por su parte, los sectores más populares dedicaban su tiempo libre en diversiones menos costosas. Las jaranas criollas eran muy comunes en los callejones de Lima, mientras que en los alrededores de la ciudad había espectáculos como las peleas de gallos. En esos primeros años del siglo también llegaron los primeros deportes de masas. El fútbol llegó con los inmigrantes ingleses y se convirtió en un juego muy popular que convocaba a gente de todos los sectores sociales. Durante las festividades, como los carnavales, por ejemplo, los limeños daban rienda suelta a su alegría y convertían a la ciudad en una gran fiesta. En los pueblos del interior, la gente celebraba sus fiestas patronales con actividades en las que abundaban la comida y la bebida, costumbre que se siguen practicando hasta hoy.
Juegos y juguetes de nuestros abuelos Además de las diversiones y pasatiempos masivos, los niños y adolescentes de antes tenían juegos y juguetes con los que se divertían con sus amigos. Como en esos años no existía Internet y la televisión recién empezaba a difundirse, la mayoría de los muchachos practicaban juegos grupales, por lo general, al aire libre. Algunos de los juegos de antaño eran el trompo, el yo-yo, las canicas, las muñecas de trapo, el hula-hula, los aviones de papel, las cometas de papel, los carritos de madera, la rayuela o mundo, las escondidas, saltar la soga, la pega, el yax, etc.
RH - III BIMESTRE - 1ro de Secundaria CAMBIOS EN MI CUERPO Y EN MI PERSONA 1. Cambios en la sexualidad durante la pubertad Cambios físicos y fisiológicos en varones y mujeres La pubertad es la etapa en la que se inicia la maduración sexual. Esta se origina a partir de la producción de las hormonas sexuales que segrega la glándula hipófisis o pituitaria. Esta glándula se encuentra en nuestro cerebro y produce la gonadotropina, sustancia que -alrededor de los 9 años en las mujeres y los 10 años en los varones- estimula el desarrollo de los ovarios y de los testículos. En las mujeres, las hormonas sexuales que se producen en mayor cantidad son el estrógeno y la progesterona, mientras que en los varones es la testosterona.
Funciones de las hormonas
En las mujeres: - El estrógeno: Estimula la maduración de los órganos reproductores femeninos (vagina, útero, y trompas de Falopio). Ayuda al cierre de las epífisis de los huesos largos (la mujer alcanza la mayor talla). Interviene en la distribución de la grasa corporal que da forma a las curvaturas del cuerpo femenino. Estimula la pigmentación de la piel en los pezones y genitales. - La progesterona: Se encarga de la preparación del útero para el embarazo, haciendo que sus paredes internas se engrosen. Además, prepara a las mamas para la producción de leche. En los varones: - La testosterona: Se encarga de regular el crecimiento y la maduración de los testículos y el saco escrotal. Además, estimula el desarrollo de los caracteres sexuales (vello púbico, cambio de voz, crecimiento corporal, etc.).
Dos procesos claves Los dos procesos fundamentales que marcan el inicio de la capacidad reproductiva son: La menstruación es un ciclo natural que se presenta cada 28 días, aproximadamente. Durante la menstruación, la mujer pierde una pequeña cantidad de sangre por la vagina, en un periodo que dura de tres a siete días. El primer día del sangrado se marca como el inicio del ciclo menstrual. Alrededor del día 14, a la mitad del ciclo, se produce la ovulación, es decir, un óvulo sale del ovario y transita por las trompas de Falopio hasta colocarse en el útero. Si el óvulo no es fecundado, 14 días después se presenta la menstruación. La eyaculación ocurre cuando el varón tiene una erección y el pene aumenta de tamaño, se endurece y expulsa el semen y los espermatozoides. En cada eyaculación se expulsan entre 200 y 600 millones de espermatozoides. El “estirón”
Se denomina así al incremento acentuado en la estatura y el peso del adolescente. En las mujeres se inicia entre los 9 y los 14 años, y en los varones, entre los 11 y 16 años. Suele durar entre un año y medio y dos años, este incremento se nota tanto en la estructura ósea como muscular, y en los cambios en el resto del cuerpo. Por ejemplo, los ojos crecen con mayor rapidez, y el maxilar superior y la nariz se proyectan más. Sin embargo, los cambies físicos no se dan todos al mismo tiempo. Por ello, algunas partes del cuerpo pueden salirse de proporción en este periodo, lo que origina la característica “presencia desgarbada” del adolescente.
2. VARONES Y MUJERES CRECIENDO JUNTOS Un asunto de especial importancia en la adolescencia es la forma de relacionarse con los demás, especialmente con el sexo opuesto. Para entender mejor estas relaciones revisaremos lo que ocurre antes de la adolescencia:
Las relaciones en la niñez Los niños y niñas basan su interrelación en los juegos y se distinguen dos etapas: 1.
Entre los 0 y 5 años:
- El juego es igual para ambos sexos - Los lazos de amistad están fundados por el mejor entendimiento en el juego.
1.
Entre los 6 y 8 años:
- Aparecen actividades de juego diferenciadas para varones y mujeres auque se pueden unir para jugar juntos cuando lo creen necesario. - Las relaciones de amistad son similares entre varones y mujeres, pues comparten los mismos intereses. Incluso cuando pelean no hay diferenciaciones. - La separación de varones y mujeres obedece más a factores culturales y sociales que psicológicos. 1.
Desde los 8 años hasta la pubertad:
- Se observa una clara diferenciación entre los grupos de varones y mujeres. Cada grupo tiene sus propios intereses. - Las niñas suelen tener una mejor amiga con la que hablan mucho y comparten secretos y también juegan. - Los niños tienen su grupo de amigos (rara vez tienen un mejor amigo). La actividad que los une es el juego. - Difícilmente aceptan trabajar o realizar actividades juntos, pero cuando lo hacen, buscan competir.
Las relaciones en la pubertad Las amistades en la infancia suelen basarse en actividades compartidas como el juego. En la pubertad, en cambio, cobra importancia el compartir, conversar o desarrollar actividades en común. Los púberes amplían sus relaciones y eligen a sus amigos en función de la similitud de actitudes o valores; buscan establecer una mayor intimidad. En esta etapa, las relaciones sociales se caracterizan por lo siguiente: - La formación de grupo compuestos por “sólo varones” y “solo mujeres”. - Las relaciones dentro de cada grupo son bastante diferenciadas. Las chicas buscan lazos emocionales y personales profundos y comparten sus problemas e intereses con su mejor amiga. Los chicos conversan dentro del grupo, pero a manera de broma sobre sus intereses y su propio desarrollo y rara vez comparten sus problemas.
Las relaciones en la adolescencia En la adolescencia, las interrelaciones se basan en el interés de compartir actividades, manteniendo y consolidado los grupos según el género. Se caracteriza por: - Las chicas siguen teniendo a su mejor amiga, a pesar de pertenecer a un grupo sólido. - Se buscan relaciones sociales con personas de otro género para consolidar grupos mixtos sobre la base de intereses afines. La conformación de estos grupos mixtos favorece lo siguiente: 1. Permite al varón adolescente tener su mejor amiga con la que puede conversar sobre aspectos que no tocaría con un amigo varón. 2. Promueve el conocimiento y la comprensión entre personas de distintos sexos.
3. Ayuda a la formación de la identidad, el carácter y la personalidad de cada miembro del grupo gracias al contraste de personalidades. 4. Proporciona a los adolescentes experiencia e información para entablar posteriores relaciones con personas fuera del grupo y para la experiencia del enamoramiento.
3. YO VARON, YO MUJER La formación de la identidad personal La identidad personal es una concepción que implica ser conscientes de que tenemos características propias y que somos personas únicas en el mundo. Esta idea, que se va desarrollando desde la infancia, se convierte en un tema fundamental durante la adolescencia. Uno de los aspectos centrales par ale locro de una identidad personal positiva y diferenciada, es el desarrollo satisfactorio de una identidad sexual. La identidad sexual
Es uno de los componentes más importantes de la identidad de la persona. Viene a ser la expresión final de la sexualidad de la persona como varón o como mujer, tanto en relación con los estereotipos culturales que influyen en el comportamiento de cada uno de los sexos como con la conducta sexual en sí misma.
La formación de la identidad sexual Durante la infancia, la información que reciben los niños depende de quienes los rodean (sus padres o cuidadores) y de su influencia cultural, que va desde la forma en que los visten (azul para niños, rosado para niñas), los objetos que les dan para manipular (carritos para niños, muñecas para niñas) y las consignas que les van indicando cómo comportarse (“ella es mujercita, no le debes pegar; es más débil que tú”). Durante estos primeros años de la vida, los niños reconocen e identifican su propio cuerpo diferenciado (pene en los niños, vagina en las niñas), y se les inculca que realicen actividades diferenciadas de acuerdo con su sexo. Sin embargo, aún no son plenamente conscientes de lo que significa ser “varón” o ser “mujer”. La idea de saberse varón o mujer va apareciendo recién en la pubertad y tiene como base la identidad sexual (soy varón /soy mujer porque…). En esta etapa, el grupo de amigos, la familia y los adultos más cercanos y referenciales (docentes, familiares como abuelos, tíos, entre otros) pasan a ser modelos que los púberes empiezan a seguir de acuerdo con su sexo.
Los roles de género Los roles de género son conductas específicas que la sociedad ha designado tanto para el varón como para la mujer. Para que estos roles se activen, confluyen factores como las características personales, las ideas del grupo social, las pautas de educación, entre otros. Estos factores influyen par que los niños y niñas no sólo aprendan definiciones culturales de masculinidad o feminidad, sino que las asocien con el sexo al que pertenecen. Por ejemplo: LOS VARONES
LAS MUJERES
- Realizan trabajos que requieren gran esfuerzo físico.
- Se dedican a
actividades “más delicadas”.
- Tienen pasatiempos suaves y más pasivos. - Gustan de deportes bruscos. - No muestran sus emociones
- Expresan sus emociones con más facilidad.
- Protegen a las mujeres
- Deben ser sumisas.
Los padres son los primeros instructores de los roles de género. Dentro del hogar, los hijos e hijas se dan cuenta de las actividades que desempeñan por separado su padre y su madre, y los convierten en modelos. Por otro lado, los padres también se convierten en juzgadores de las actividades que sus hijos e hijas realizan, porque refuerzan o sancionan una actitud que consideran no “propia de su género”.
PFRH – II BIMESTRE – 1ro Secundaria
LAS DIMENSIONES DE LA PERSONA HUMANA Una de las principales características que nos diferencian de los demás seres vivos es que somos seres complejos: poseemos una dimensión biológica, una dimensión psicológica, una dimensión social y una dimensión ético- trascendental. Estas dimensiones no se encuentran separadas, sino que forman una unidad, de tal manera que una influye inevitablemente en otra. 1.
La dimensión biológica
Esta dimensión la tienen todos los seres vivos, es decir, tanto los animales como las plantas. Los seres humanos experimentamos distintos procesos: 1.
Nuestro cuerpo cambia
A medida que crecemos, aumentamos en talla y peso. Esto indica que se van desarrollando nuestras estructuras ósea, muscular y nerviosa. Lo mismo ocurre con nuestros órganos internos, que van creciendo y realizando funciones específicas. 1.
Nuestra sexualidad se va desarrollando
Desde pequeños, los varones y las mujeres nos diferenciamos. Al crecer, estas diferencias se hacen más clareas por el desarrollo de los órganos sexuales y por el interés de relacionarnos con el sexo opuesto. 1.
La dimensión psicológica
Esta dimensión es propia de los seres humanos. Se inicia desde el momento de la concepción, ya que desde el vientre de nuestras madres vamos aprendiendo y expresando emociones. En esta dimensión podemos distinguir dos aspectos: 1. El aspecto intelectual, que implica el desarrollo de las capacidades cognitivas: inteligencia, atención, percepción, memoria y razonamiento.
El aspecto emocional, que consiste en la capacidad de percibir, sentir y 1. expresar adecuadamente afectos y emociones (alegría, tristeza, temor, cólera, etc.). La dimensión psicológica hace que las personas se tracen metas, planifiquen su vida y busquen directa o indirectamente trascender hacia el futuro, ya sea por su capacidad intelectual (por ejemplo, creando algo) o por su capacidad emocional (uniéndose a otra persona). 1.
La dimensión social
La dimensión social también se inicia en el vientre materno, con las primeras interacciones del feto con la madre. Empieza a hacerse más evidente desde el momento en que nacemos y vamos interactuando con otras personas y grupos. Existen dos aspectos que aprendemos y desarrollamos en esta dimensión:
a. El proceso de socialización, que incluye la adquisición del lenguaje, el desarrollo del pensamiento, la interiorización de las creencias y el aprendizaje de los hábitos y las normas de una sociedad.
b. Las habilidades sociales, que son las capacidades que vamos adquiriendo para relacionarnos adecuadamente con otras personas. 1.
La dimensión ético – trascendental
Esta dimensión es exclusiva de los seres humanos y no se desarrolla por igual en todas las personas. Se caracteriza por ser mucho más interna que las anteriores, pues implica la reflexión sobre el sentido de la existencia. Esta dimensión tiene que ver con aspectos como los siguientes: 1. 2.
Preguntarnos el para qué y el porqué existimos. Procurar obtener respuestas sobre esas preguntas. Tener una escala de valores que esté interiorizada en nuestra mente,
3. de manera que sea guía en nuestra vida. 4.
Llegar a desarrollar una convivencia positiva con los demás.
LA COMUNICACIÓN EN LA FAMILIA LA COMUNICACIÓN La comunicación es un proceso de interacción mediante el cual nosotros compartimos sentimientos, pensamientos, ideas, afectos, etc. con otras personas. La familia es un espacio donde estamos obligados a desarrollar una buena comunicación con nuestros padres y con los demás miembros de la familia.
CARACTERISTICAS DE LA COMUNICACIÓN Para mejorar la comunicación familiar, debemos partir de dos aspectos fundamentales: primero, tener bien presente que todas las personas tenemos el mismo valor; y el segundo, debemos partir del hecho que es posible aprender de todos. Sólo así podemos potenciar el diálogo, que es el medio por excelencia para desarrollar la comunicación familiar Tener una buena comunicación en familia es beneficioso para todos. Se comparten los valores de respeto mutuo y la unión lo que permitirá construir un ambiente de armonía y afecto en la casa. En cambio, cuando no hay una correcta comunicación, el dialogo se frustra, se originan los malos entendidos, se forman perjuicios, surgen problemas; todo ello nos creará sentimientos de enojo tristeza, depresión, llanto, etc..
ORIGEN DE LOS MALOS ENTENDIDOS
Muchos de los malos entendidos que se originan en casa, se deben básicamente a lo siguiente: tus padres pueden confundir tu necesidad de autonomía e independencia con falta de respeto; o, tú puedes confundir el interés y el apoyo de tus padres con exceso de protección o que no confían en ti. Los importante es reconocer que todo ello se puede superar mediante el dialogo.
ESTILOS DECOMUNICACION Es importante que conozcas los estilos de comunicación que existen para que aprendas a valorar al estilo asertivo como aquel que te puede ayudar a solucionar las dificultades o problemas de comunicación familiar que tengas. A. ESTILO AGRESIVO
Los que tiene este estilo de comunicación, ante los problemas y dificultades siempre reaccionan de manera agresiva, gritando o amenazando. Siempre intentan imponer sus puntos de vistas sin importarles para nada lo que sienten, piensan u opinan los demás. Piensan que ser dominante o autoritario es la única manera para ganarse el respecto de los demás. B. ESTILO PASIVO
Son los que no se atreven a decir nada ni se expresan directamente cuando reciben algún tipo de agresión o abuso. Siempre reaccionan de manera pasiva, por inseguridad, miedo o vergüenza. Siempre se guardan sus sentimientos, opiniones, ideas. C. ESTILO ASERTIVO
Los que tienen el estilo asertivo dicen lo que piensa y lo sienten de manera adecuada, con serenidad, sin atacar ni agredir a los otros. Este estilo de comunicación siempre favorece la comprensión y el respeto a los demás. Este es el estilo de comunicación que favorece a al dialogo en nuestra familia.